Explora Libros electrónicos
Categorías
Explora Audiolibros
Categorías
Explora Revistas
Categorías
Explora Documentos
Categorías
I. INTRODUCCIÓN
La malnutrición es una condición o estado patológico que se presenta ya sea por la deficiencia,
por el exceso o por la mala asimilación de los alimentos entre los que por deficiencia y/o mala
asimilación de nutrientes se hallan las patologías de desnutrición aguda crónica y global, mientras
que por el exceso están la obesidad y el sobrepeso.
Esta alternante existencia de talla baja y obesidad se denomina también como la doble carga de
la malnutrición infantil y es observada con mayor frecuencia en países de bajos y medios ingresos
económicos como es Bolivia.
Existe una relación estrecha entre pobreza, inseguridad alimentaria y hambre que puede verse
reflejada en un estado de malnutrición. La ausencia de una dieta diversa, puede traer como
consecuencia el consumo de alimentos ricos en energía, pero con limitaciones considerables en
los aportes de vitaminas y minerales, lo que conlleva a presentar sobrepeso y obesidad con
deficiencia de micronutrientes, incluso en la misma persona.
Esta situación se da, entre otras razones, porque usualmente, los alimentos densamente
energéticos son menos costosos que aquellos con mayor densidad nutricional como los alimentos
de origen animal (leche, carnes), las frutas y los vegetales. Ante problemas de acceso económico,
los hogares intentan adquirir alimentos que de cierta formara satisfagan sus necesidades
alimentarias, considerando aspectos fisiológicos como la sensación de saciedad, que sin duda la
ofrecen los alimentos energéticamente densos y que usualmente también son aquellos de menor
valor. (Boletín Aproximación a los determinantes de la doble carga nutricional en Colombia, 2014)
En Bolivia, el principal problema era la desnutrición en todas sus formas, donde la más recurrente
solía ser la desnutrición crónica. Aunque actualmente éstas han disminuido significativamente por
esfuerzos del país en la reducción de la pobreza y la desnutrición, la tendencia al sobrepeso y
obesidad se ha incrementado fuertemente, resultando en una convivencia de los dos problemas,
o dicho de otra manera, como país ahora padecemos la doble carga de la malnutrición.
En el estudio del 2018 denominado El sobrepeso y la obesidad ¿reflejo sólo del exceso de comida
o de un sistema agroalimentario en crisis? del autor J. Prudencio Böhrt, podemos observar los
siguientes datos extraídos a su vez de las Encuestas Nacionales de Salud realizadas el 2008 y el
2016:
Cuadro No. 1 Clasificación de la población nacional según el IMC (2008‐2016)
Fuente: J. Prudencio Böhrt, El sobrepeso y la obesidad ¿reflejo sólo del exceso de comida o de
un sistema agroalimentario en crisis?, 2018.
UNIVERSIDAD CATÓLICA BOLIVIANA
UNIDAD DE POST GRADO – LA PAZ
De la tabla, el autor confiere que las personas con sobrepeso y obesidad han aumentado, en el
lapso de años expuesto, de un 49.7 % a un 57.7%1 por lo que señala que “entre el 2008 y el 2016,
la población clasificada en el rango de delgada ha disminuido (0.2%) al igual que las personas con
peso normal en casi un 8%, habiendo aumentado en el mismo porcentaje, las personas con
obesidad, y manteniéndose en el mismo nivel, las personas con sobrepeso.”
También afirma que los porcentajes evidencian la mencionada tendencia en el país, al incremento
de la obesidad, complementando con datos del Ministerio de Salud (Unidad de Epidemiología.
Ministerio de Salud y Deportes) que señalan que cada año se reportan más de 65.000 casos de
obesidad y sobrepeso. En el año 2014 se reportaron 60.658; en el 2015 se reportaron 71.541 y en
el 2016, 75.290 casos, la mayoría de ellos ubicados en la ciudad de Santa Cruz, y después en
Cochabamba y La Paz.
Por lo tanto la doble carga de la malnutrición en el país al ser un hecho que va en aumento debe
ser atendido efectivamente pues las consecuencias negativas de la malnutrición sobre la
morbilidad y la mortalidad afectan de gran manera a los índices nacionales en el ámbito de
desarrollo de capacidades, en los resultados educativos; en la inclusión social y laboral, en el
medioambiente y la productividad principalmente, los cuales se reflejan en consecuencias
económicas, según indica la Síntesis del estudio El costo de la doble carga de malnutrición:
impacto social y económico, elaborado por el CEPAL.
Diagrama 1. Efectos de la malnutrición
Fuente: Síntesis del estudio El costo de la doble carga de malnutrición: impacto social y económico,
Andrés Fernández et al. - CEPAL
UNIVERSIDAD CATÓLICA BOLIVIANA
UNIDAD DE POST GRADO – LA PAZ
II. DESARROLLO
Con el fin de reducir los niveles de malnutrición, es necesario avanzar en el diseño e
implementación de políticas integrales y multisectoriales. Las experiencias más exitosas incluyen
el desarrollo de trabajo conjunto entre distintos actores, considerando un enfoque mucho más allá
de la perspectiva de la salud, por ejemplo, considerar todas las dimensiones del problema
nutricional: económico, político, productivo, cultural y educativo.
En una mayoría, los programas de salud pública orientados a la desnutrición tuvieron un impacto
en la reducción de su prevalencia, de la misma manera, y considerando que el problema nutricional
es multicausal, abordar la prevalencia de malnutrición requiere de la articulación de diversos
actores en cada país.
Entre las estrategias de abordaje podemos mencionar que para el caso de la desnutrición hay
consenso en que el control del niño o niña debe ser desde su concepción hasta los 24 meses de
edad, etapa clave para su desarrollo óptimo y reconocida internacionalmente como “la ventana de
los 1000 días”, siendo que es el período transcurrido desde el embarazo (270 días promedio) hasta
los 2 años de vida del niño (730 días). La Ventana de los mil días es un paquete de atención en
salud y nutrición, que busca garantizar a las madres y sus hijos, cuidados prenatales, una atención
calificada del parto, buenas prácticas alimentarias incluyendo la lactancia materna, una
alimentación adecuada a los menores, la suplementación con vitaminas y minerales; y el
tratamiento de la desnutrición aguda, entre otras. Representantes de OPS/OMS manifestaron su
apoyo a la Ventana de los mil días en diferentes países, ya que la desnutrición asociada a
enfermedades como neumonías, diarreas y malaria, es la principal causa de muerte en niños
menores de cinco años, alrededor del mundo.
La estrategia de la Ventana de los mil días, incluye acciones como la promoción de prácticas
adecuadas para la nutrición, dotación de vitaminas y minerales para niños y madres, educación
para el consumo de alimentos fortificados y prevención y orientación sobre el tratamiento de la
desnutrición:
- Las intervenciones de la ventana de los mil días empiezan con los cuidados de la mujer
embarazada. Existen incentivos para que la mujer en estado de gestación asista
mensualmente al servicio de salud para evaluarse y saber si su bebé tiene un crecimiento
adecuado y la evaluación de posibles complicaciones, asimismo se inicia el esquema de la
vacuna antitetánica y la suplementación de micronutrientes como hierro y ácido fólico (pre y
post concepción) y consumir sal yodada y fluorada para la reducción del riesgo de abortos.
- Todas las mujeres deben recibir educación y orientación sobre una nutrición adecuada,
antes de la concepción y durante la gestación, para garantizar una buena salud; estas
intervenciones, tienen un impacto en la salud de la madre y el feto y determina el estado
nutricional del niño después de nacido.
- Al nacer, se recomienda la lactancia materna exclusiva, es decir, dar únicamente leche
materna durante los primeros seis meses de vida. La leche materna es un alimento único e
irremplazable, ya que aporta todos los nutrientes que aseguran el adecuado crecimiento y
desarrollo, prevendrá infecciones y estrecharán la relación del binomio madre-hijo.
- A partir de los 6 meses, se inicia con la alimentación complementaria. se debe iniciar con
alimentos saludables. Se recomienda que el consumo de estos alimentos sea paulatino, para
identificar intolerancia. En este mismo período se inicia también con la ingesta de
micronutrientes: hierro y vitamina A.
UNIVERSIDAD CATÓLICA BOLIVIANA
UNIDAD DE POST GRADO – LA PAZ
AUTORES
1 Cordero Apaza David Juvenal
2 Isidro Averanga Maria Renee
3 Quezada Lambertín María Fernanda
4 Terán Muñoz Lizet