Nodo I Saussure
“No hay nada más idóneo que la lengua para hacer comprender la naturaleza del
problema semiológico”
F. De Saussure, Curso de lingüística general.
Lengua-habla
Significante-significado
Arbitrario (inmotivado)-racional (motivado)
Sintagma-Paradigma
Sincronía-Diacronía
2
Estas antinomias van siempre unidas y combinadas, ellas permiten concebir los
fenómenos lingüísticos desde una perspectiva dinámica y relacional, y le otorgan,
además, “unidad evolutiva” a la organización y funcionamiento de las lenguas.
La Semiología es una ciencia que estudie la vida de los signos en el seno de la vida
social. (del griego sēmeîon 'signo'). Ella nos enseñará en qué consisten los signos y
cuáles son las leyes que los gobiernan. La lingüística no es más que una parte de esta
ciencia general. Las leyes que la semiología descubra serán aplicables a la lingüística, y
así es como la lingüística se encontrará ligada a un dominio bien definido en el conjunto
de los hechos humanos.
El estudio del lenguaje comporta, pues, dos partes: la una, esencial, tiene por objeto la
lengua, que es social en su esencia e independiente del individuo; este estudio es
únicamente psíquico; la otra, secundaria, tiene por objeto la parte individual del
lenguaje, es decir, el habla, incluida la fonación, y es psicofísica. Sin duda, ambos
objetos están estrechamente ligados y se suponen recíprocamente: la lengua es necesaria
para que el habla sea inteligible y produzca todos sus efectos; pero el habla es necesaria
para que la lengua se establezca. Históricamente, el hecho de habla precede siempre.
¿Cómo se le ocurriría a nadie asociar una idea con una imagen verbal, si no se empezara
por sorprender tal asociación en un acto de habla? Por otra parte, oyendo a los otros es
como cada uno aprende su lengua materna, que no llega a depositarse en nuestro
cerebro más que al cabo de innumerables experiencias. Por último, el habla es la que
hace evolucionar a la lengua: las impresiones recibidas oyendo a los demás son las que
modifican nuestros hábitos lingüísticos. Hay, pues, interdependencia de lengua y habla:
Aquella es a la vez el instrumento y el producto de ésta. Pero eso no les impide ser dos
cosas absolutamente distintas.
La lengua existe en la colectividad en la forma de una suma de acuñaciones depositadas
en cada cerebro, más o menos como un diccionario cuyos ejemplares, idénticos, fueran
repartidos entre los individuos. Es, pues, algo que está en cada uno de ellos, aunque
común a todos y situado fuera de la voluntad de los depositarios. (la lengua es la
estructura, el mecanismo, los códigos referenciales que usan los individuos para hablar,
sin los cuales no sería posible el habla)
El habla es la suma de todo lo que las gentes dicen, y comprende: a) combinaciones
individuales, dependientes de la voluntad de los hablantes; b) actos de fonación
3
Tal es la primera bifurcación con que topamos en cuanto se intenta hacer la teoría del
lenguaje. Hay que elegir entre dos caminos que es imposible tomar a la vez; tienen que
ser recorridos por separado. Se puede en rigor conservar el nombre de lingüística para
cada una de estas dos disciplinas y hablar de una lingüística del habla; pero con cuidado
de no confundirla con la lingüística propiamente dicha, ésa cuyo objeto único es la
lengua. Nosotros vamos a dedicarnos únicamente a esta última.
La constatación de esta arbitrariedad del signo le permite a Saussure afirmar que “la
lengua no puede ser más que un sistema de valores puros, donde cada signo toma
consistencia por su relación de oposición a otro. El valor es un “sistema de
equivalencias entre cosas de ordenes diferentes” (ej maR – maL – esta diferenciación
establecida arbitrariamente es la que sustenta los valores lingüísticos dentro del sistema
general de la lengua.
Sobre los VALORES y su constitución (dos factores que permiten la existencia del
valor)
- Siempre están constituidos por una cosa desemejante susceptible de ser
cambiada por otra cuyo valor está por determinar.
- Por cosas similares que se pueden comparar con aquella cuyo valor está en
cuestión
Ej: una palabra puede ser cambiada por alguna cosa desemejante: una idea; además,
puede ser comparada con algo de igual naturaleza: otra palabra.
Así el sistema lingüístico tiene una naturaleza relacional (dialéctica) porque el lenguaje
es una mezcla y tensión de elementos arbitrarios y racionales.
REFERENTE:
En semiótica, el referente es uno de los tres componentes del signo que consiste en el
objeto real al que alude el signo. En el caso del signo mesa, por ejemplo, es el objeto
real aludido por el significante y el significado restantes que componen el signo.
(PIERCE)
Tiempo antes Saussure dirá que hay signos que carecen de referente o que señalarlo
resultaría muy problemático. El signo saussureano es diádico.
-¿Qué son las relaciones sintagmáticas y las paradigmáticas para Saussure? -¿Que
son y para qué sirven los estudios diacrónicos y los sincrónicos?
Otra de las distinciones conceptuales que introduce Saussure tiene que ver con el
estudio diacrónico y sincrónico de la lengua.
El análisis diacrónico (a lo largo del tiempo, como un sistema en el cual se hallan los
esquemas estructurados, formales y teóricos y estables que dicha lengua fue
asumiendo a lo largo del tiempo) describe la evolución histórica de un idioma a lo
largo del tiempo, mientras que el estudio sincrónico (concreción temporal, como
hecho social dinámico en el que los sujetos hablantes son los protagonistas) se
detiene a analizar el estadio particular de ese idioma en un determinado período.
El carácter histórico y social de la lengua, su inmutabilidad y su mutabilidad se
comprenden mejor desde el punto de vista de la ley de la sincronía y la diacronía
El valor de los signos debe ser considerado en función del tiempo, es decir, deben
apreciarse simultáneamente su organización y uso en el sistema actual (lo que
constituyen los hablantes en un momento dado) y también la evolución de su estructura
a lo largo de los años y de las épocas históricas. (Ejes simultaneidad y sucesión)
“es sincrónico todo lo que se refiere al aspecto estático de nuestra ciencia, y diacrónico
todo lo que tiene que ver con las evoluciones. Asimismo sincronía y diacronía
designaran respectivamente un estado de lengua y una fase de evolución”
(Ajedrez: la sincronía corresponde a la disposición de las piezas en una determinada
partida, mientras que la diacronía es la teoría del juego que da unidad a las unidades
sincrónicas)