TIPOS DE BIENESTAR

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 BIENESTAR
FÍSICO 02
El primer tipo de bienestar que abordaremos, es el bienestar físico, como definición
tenemos que; se da cuando la persona siente que ninguno de sus órganos o
funciones están menoscabados; el cuerpo funciona eficientemente y hay una
capacidad física apropiada para responder ante diversos desafíos de la actividad
vital de cada uno.

Históricamente, se ha prestado atención al bienestar físico a partir de los años 50,

desde el ámbito de la salud pública, cuando las enfermedades crónicas empiezan a
constituirse como un gran problema de índole sanitario. A partir de los años 80
aumenta la preocupación por los estilos de vida, los hábitos saludables y la salud en
general. Pero es a partir del 1948, cuando la Organización mundial de la salud (OMS),
cambia del todo el paradigma al definir la salud como un estado completo de
bienestar físico, mental y social y no la simple ausencia de la enfermedad. A partir de
esta conceptualización, las sociedades inician su interés en el bienestar físico, no sólo
como una forma de atención a la enfermedad, sino como el método más eficiente
de prevención de la misma y la generación de mayores índices de calidad de vida,
longevidad y bienestar.

Dentro del aspecto físico es posible identificar tres acciones muy importantes para
garantizar el bienestar, a saber;

Actividad
física

Descanso
Alimentación
reparador
Saludable
El desarrollo de actividades diarias que den respuesta a estas tres acciones, aportan
al mantenimiento del bienestar físico de las personas, no obstante, así como se
cuenta con hábitos saludables, también es importante identificar aquellos hábitos
que resultan dañinos o nocivos para el cuerpo y que por tal motivo se deben evitar,
tales como el consumo de alcohol, el tabaquismo o consumo de sustancias
psicoactivas, el sedentarismo, el alto consumo de azúcares o grasas saturadas, entre
otras.

Se han realizado amplios y

significativos estudios sobre la
relación entre los hábitos de vida y
las enfermedades, evidenciando la
importancia del cuidado del
cuerpo y la promoción de la salud
para prevenir enfermedades físicas
y mentales.

Finalmente, resulta muy importante

indicar la estrecha relación que
tiene la salud mental con el
bienestar físico, ya que la práctica
de una actividad física regular,
moderada, bien planificada y
adaptada a las necesidades de
cada individuo, ayuda a mejorar
tanto la salud física como
psicológica, incrementando así la
calidad de vida. La práctica de
ejercicio regular, contribuye a
instaurar estilos de vida saludables y
a reducir o eliminar factores de
riesgo asociados al sedentarismo.

BIBLIOGRAFÍA
Iturriaga Madariaga Gorka, (2016) Actividad física saludable, bienestar psicológico y situación
actual, Universidad del País Vasco, recuperado de
https://www.euskadi.eus/contenidos/informacion/kirol_eskola_prestakuntza_jard/eu_def/adju
ntos/Charla%20beneficios%20psicol%C3%B3gicos.pdf