“La religión es parte del sistema del mundo, donde el hombre está haciendo un
esfuerzo para alcanzar la bendición de Dios; mientras que en el reino, es el esfuerzo
divino para hacer al hombre parte de su naturaleza”
La salvación que por gracia hemos recibido no es el fin sino más bien el medio para
poder ser parte del reino de Dios y poder cumplir el propósito eterno.
Romanos 8:30 “Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que
llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también
glorificó”.
Romanos 5:1: Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por
medio de nuestro Señor Jesucristo
1corintios 6:1: Y esto erais algunos; mas ya habéis sido lavados, ya habéis
sido santificados, ya habéis sido justificados en el nombre del Señor Jesús, y
por el Espíritu de nuestro Dios.
Es decir, Jesucristo dándonos lo que no merecíamos y no podíamos alcanzar
nos ha elevado al nivel de sí mismo, pues es quien nos ha justificado.
Poder:
Para que pueda verse el efecto del dunamis debe existir un energen. La
asignación está ligada al propósito eterno.
Las imposibilidades no son cosas malas sino más bien estas nos hacen
dependientes de Dios, somos poderosos pero imposibles. Nuestra
construcción de esta generación no se basa en lo que pienso si no en lo que
el establece.