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LA CELESTINA

3.1. Ediciones
La Celestina se publicó en 1499, anónima, con el título de Comedia de Calisto y
Melibea  y con solo 16 actos o capítulos. Al año siguiente se publica una nueva edición
con el nombre de su autor, Fernando de Rojas, y en 1502 apareció nuevamente con
algunas modificaciones: se le añadieron cinco actos más y un prólogo, el texto sufrió
algunos cambios y adoptó un nuevo título (Tragicomedia de Calisto y Melibea). Pero
la fuerza de Celestina como personaje central de la obra, hizo que las siguientes
ediciones cambiaran el título inicial por el de La Celestina.

3.2. Autor: Fernando de Rojas


Según nos dice él mismo (Fernando de Rojas) en el prólogo de la obra, nació La
Puebla de Montalbán (Toledo), hacia 1475. Estudió leyes en Salamanca y fue alcalde
de Talavera de la Reina (Toledo). Procedía de una familia de judíos conversos, lo cual
podría explicar la visión desengañada de la vida que nos revela en su obra. Al parecer,
murió en Talavera de la Reina, en 1541.

3.3. Género literario


Existen muchas teorías entorno al género de La Celestina:

1) En primer lugar, tenemos a los que opinan que se trata de una obra
de teatro debido a que es dialogada.

2) En segundo lugar, tenemos a aquellos que opinan que se trata de


una novela debido a que es difícil su representación debido a su larga extensión y la
variedad de los lugares en los que sucede la acción.
3) En tercer lugar, están los que opinan que se encuentra a medio camino entre una
obra de teatro y una novela. La consideran una novela dialogada.
4) En cuarto lugar, hay estudiosos que la incluyen entre la comedia
humanística (subgénero teatral procedente de Italia y destinado exclusivamente a la
lectura; a una lectura dramatizada por parte de personas cultas.
 

3.4. Argumento
Calisto, un muchacho de noble familia, entra accidentalmente en una huerta
persiguiendo a un halcón y allí ve a Melibea, una joven de la que queda
inmediatamente enamorado sin que ella le corresponda. Calisto vuelve a su casa y le
cuenta a su criado Sempronio lo que le ha pasado. El criado le propone acudir a la
vieja Celestina para que actúe como intermediaria con Melibea. Pármeno, criado fiel
de Calisto, trata de ver a su amo cómo es realmente Celestina, pero al verse
despreciado, se une a Sempronio y a la vieja alcahueta. Los criados de Calisto,
Sempronio y Pármeno, se ponen de acuerdo con Celestina para repartirse el oro que
Calisto dará a Celestina para conseguirle el amor de Melibea.

La astuta Celestina va a casa de Melibea, fingiendo que es una vendedora


ambulante,y, mediante su capacidad de persuasión (hablándole de Calisto) y un
conjuro, consigue una cita entre los dos.

En premio a su labor, Calisto le regala una cadena de oro que ella se niega a
compartir con Pármeno y Sempronio; estos la matan y después son ajusticiados. Elicia
y Areúsa (prostitutas y parejas de Pármeno y Sempronio) desean vengarse de Calisto
y buscan a Centurio para que lleve a cabo esa venganza.

En el primer encuentro entre Calisto y Melibea, los criados de este, Tristán y Sosia,
espantan a los enviados de Centurio. Calisto, preocupado por los ruidos, acude ver
qué sucede, tropieza y muere al caer desde lo más alto de la tapia del jardín de
Melibea. Melibea se lamenta por la breve duración de su amor y se suicida tirándose
desde lo alto de la torre de su casa. La obra termina con el planto de su padre,
Pleberio, quien expresa su dolor por todo lo ocurrido.

3.5. Personajes
En esta obra, Rojas consigue dar vida a cada uno de sus personajes. Los personajes
de la Celestina pertenecen a dos mundos distintos (clases altas y bajas) que se
relacionan entre sí (relaciones sociales: criados-señores; relaciones individuales;
relaciones amorosas; relaciones económicas) y presentan numerosas situaciones
paralelas: el mundo de los señores y el mundo de los criados.

Plasma a los personajes de las clases altas


(Calisto, Melibea, los padres de Melibea..), de las clases bajas (las prostitutas Elicia y
Areúsa, el rufián Centurio…) y a la intermediaria entre ambos mundos (Celestina).
La figura central de la obra, Celestina, es el nexo de unión entre ambos mundos. Su
importancia es tal que con el tiempo dará título a la obra. Físicamente es barbuda,
arrugada, con un rasguño en la cara en el que algunos reconocen la marca del diablo.
Es el arquetipo de alcahueta (cuyo antecedente literario es la vieja Trotacoventos del
Libro de Buen Amor), aunque ha desempeñado variados oficios: puta vieja, hechicera,
componedora de virgos, lavandera, perfumera…En ella destaca su vitalidad, su
capacidad de persuasión que la lleva a conseguir lo que desea de los demás, y su
codicia, que le causará la muerte.

 
En el mundo de los señores se sitúan los dos amantes, Calisto y Melibea, así como
los padres de esta, Alisa y Pleberio.

Calisto se caracteriza por su egoísmo, es un ser al que solo mueven sus


deseos .Calisto representa el amor cortés parodiado, que transgrede las normas de
este código al buscar una intermediaria y no ser discreto sobre su relación; es una
figura antiheroica y por ello no puede tener muerte heroica.

Melibea. El personaje de la joven Melibea sufre un cambio . Profundamente humana,


al principio rechaza con violencia las insinuaciones del joven galán; luego duda, vacila
y, finalmente, se entrega a él sin reparos. El rechazo de Calisto en la primera escena
se circunscribe en las coordenadas de lo prescrito por el amor cortés. Su entrega
posterior es debido a que la joven es víctima del conjuro de Celestina, con lo que
cristianamente quedaría libre de culpa. Para otros, la alcahueta hace que descubra su
amor por Calisto solo con la palabra. Cuando el objeto de su amor muere Melibea se
suicida. En Melibea no se advierte arrepentimiento, ni siquiera tiene conciencia de
pecado al suicidarse, sólo lamenta no haber disfrutado más de ese amor y lamenta el
dolor que causará a sus padres.
 
Los padres de Melibea: Alisa es una gran señora orgullosa y altiva, pero
insensata. Pleberio no representa los rasgos habituales de la figura paternal en la
literatura española, no es autoritario (es solícito, tierno y cariñoso con su hija) ni se
lamenta por el honor perdido. Por el contrario, en un extenso monólogo al final de la
obra, acusa al amor de ser el culpable de todo.

En el mundo de los criados encontramos tres parejas: los criados de Calisto


(Pármeno, Sempronio y, tras su muerte, Tristán y Sosia) y las prostitutas Arúsa y
Elicia. Sempronio pone en contacto a Calisto y a Celestina, y desde el principio, busca
su propio beneficio. Pármeno es el criado fiel que irá cambiando de actitud para unirse
a Sempronio. Areúsa y Elicia se caracterizan por su relación con Celestina. Mucho
más independiente en el caso de la segunda. Ambas odian a Melibea y buscan
vengarse de Calisto. Otros personajes secundarios, además de los mencionados
Tristán y Sosia, son Lucrecia, la criada de Melibea, y Centurio, el cobarde soldado
contratado por las prostitutas para llevar a cabo su venganza. Se trata de un personaje
tomado de “miles gloriosus” de la comedia clásica.

 
 
3.6. Estilo

Los dos mundos representados, la clase alta y la clase baja, están retratados al
mínimo detalle.Reflejandos niveles estilísticos: el nivel o registro culto y el nivel
popular, respectivamente. Sin embargo, el acierto de la obra también reside en
que Celestina, por ejemplo, astuta y sabia, es capaz de cambiar de registro si
la situación lo requiere
 El registro culto está representado por los siguientes personajes:
Calisto y Melibea y por los padres de esta. El registro popular está
representado por Celestina, los criados, las prostitutas.
 El registro culto presenta las siguientes características
lingüísticas: cultismos, alusiones mitológicas, sintasis latina,
sentencias de personajes ilustres (poeta Petrarca...), arcaísmos
(palabras o expresiones que hoy están en desuso).El registro popular
presenta las siguientes características lingüísticas: intervenciones
breves y rápidas propias de la conversación entre personajes de igual
condición social, con frases de tono apelativo y expresivo, a veces
suspendidas y cortadas, con refranes, frases hechas, lenguaje de
germanía, localismos y dialectalismos.
 El registro culto emplea recursos estilísticos o figuras
literarias como:antítesis propias de la antonimia amorosa, extensas
enumeraciones, interrogaciones retóricas,hipérbaton (alteración en el
orden de las palabras). El registro popular emplea figuras literarias
como: exclamaciones, repeticiones, anáforas….La abundancia de
refranes contribuye a la comicidad de la obra a la vez que es útil para
establecer un vínculo emocional con el público por el reconocimiento
de la sabiduría que contienen.

3.7. Temas
En La Celestina aparecen varios temas de fondo.En primer lugar, tenemos el tema del
amor, tratado como una pasión incontenible con un fuerte componente de deseo
sexual, que hace que los protagonistas  se olviden de la moral y que acaba
destruyéndolos como una especie de castigo divino.

En segundo lugar, se encuentra el tema de la codicia. Se trata de otra pasión que


arrebata a algunos personajes. Todos los que no pertenecen a la clase social alta
actúan por motivaciones de tipo económico, es decir, por conseguir dinero y riqueza.

En tercer lugar, también aparece el tema de la muerte, presentada no como el paso


necesario para alcanzar la vida eterna (como en la literatura medieval), sino como el
final absurdo de la existencia, al que lleva el desorden moral.

3.8. Sentido
Fernando de Rojas parodió con esta obra la ideología del amor cortés, y así Calisto es
una parodia del vasallo enamorado. Un caballero, según la ideología del amor cortés
no puede decir el nombre de su amada, no puede clamar en voz alta quién es el objeto
de su amor (Calisto se lo cuenta a Pármeno, Sempronio, la astuta Celestina...), no
puede buscar intermediaria, no puede fijar un encuentro amoroso, etc. Por lo tanto, al
transgredirse las normas o convenciones del amor cortés, Fernando de Rojas tuvo que
buscar un castigo para los personajes. Los personajes mueren por sus actos.
El autor también avisa del peligro de las alcahuetas y falsos criados.Por otra
parte, La Celestina refleja muy bien el espíritu de su época , poniendo al
descubierto los valores del capitalismo burgués que se abría paso: individualismo,
aprecio del dinero, actitud materialista, mentalidad práctica, enfrentamiento de clases
sociales…

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