III.

EL SEDERO HACIA EL AVIAVMIENTO ES EL CAMINO DE LA HUMILDAD

(2 Cron. 1:14)

A. La vida de Jesucristo provee el mejor ejemplo de lo que significa

humildad (Mt. 11:29; 1co. 4:21; Fil. 2 :11).
B. Jesús predicó y enseñó sobre la necesidad de ser humilde (Mt. 23:12;
Mr. 9:35; Lc. 14:11; 18:14).
C. La humildad está íntimamente ligada a la mansedumbre (Mt. 5:5).
1. Mansos: no significa debilidad, sino fortaleza sujeta a control; la
palabra lleva la idea de humildad y autodisciplina.
2. Es decir, los de corazón humilde, son los que se postran delante
de Dios y se someten a Él.
3. Encuentran en el su refugio y consagran a El todo su ser.
4. Los mansos y no los agresivos, finalmente heredaran la tierra.

IV. LOS HUMILDES NO SE PREOCUPAN POR SU PRESTIGIO PERSONAL.

(Mt.18: 4; 23: 12; rm.12: 16; i Cor. 11: 7).

A. La palabra “tapienco” = literalmente significa < < rebajar >>.

B. Describe a una persona que esta desprovista de toda arrogancia de
auto exaltación; alguien que somete su voluntad a la voluntad de
Dios.
C. No altivos—Lit., [“Pensad lo mismo … no penséis altaneramente”.
Trad.] No alentéis propósitos y deseos ambiciosos. Como tal
sentimiento nace de la separación egoísta de nuestros propios
intereses y motivos de los de nuestros hermanos, así es bastante
incompatible con el espíritu recomendado en la frase anterior.
D. Mas acomodándoos a los humildes—“condescendiendo,” o (como
otros vierten las palabras) “inclinándoos a las cosas humildes.” (Rom.
12: 16).

COMENTO ALGO MAS: Pablo creía que las buenas relaciones con
otras personas, especialmente con las que habían herrado
espiritualmente dependía de que hubiera mansedumbre o humildad (I
Cor. 4: 21; Gal. 6:1; 2 Tim. 2: 25).

Conclusión: tanto en el AT. Como en el NT. Afirma que Dios exaltara a los
humildes y humillara a los orgullosos.
La humildad, más bien que expresada en un vocablo técnico, es presentada
en la Biblia en una serie de actitudes que tienen como denominador común
el sentimiento de la propia pequeñez, de la propia indignidad moral y de la
dependencia de Dios en todo.