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Elegí investigación documental de tipo B (ESTUDIO DE MEDICIÓN DE VARIABLES

INDEPENDIENTES A PARTIR DE DATOS SECUNDARIOS) y C (CORRELACIONAL A PARTIR DE


DATOS SECUNDARIOS), y un estudio correlativo, exploratorio y explicativo. Ya que requiere
que se relacionen dos o más temas, ya que ese es el punto de mi hipótesis. También es un
tema del que se tienen vagos conocimientos entonces el estudio ampliaría el conocimiento
sobre el tema.

La medicina y biología funcionan desde un eje integrador donde tanto los sentidos cognitivos y
afectivos se interrelacionan con los funcionamientos somáticos del cuerpo.

¿Hay alguna relación entre los estados emocionales y problemas de salud física y
enfermedades?

Quizá parezca absurdo pero ha sido demostrado que ciertos estados emocionales negativos,
como por la ira, depresión, angustia y estrés son altamente perjudiciales para nuestra salud
más allá de la salud mental. Depende de nuestra salud por defecto, ya que hay más
probabilidades de que le afecte más notoriamente a alguien con alguna enfermedad coronaria
que a alguien sano. Sin embargo, estados emocionales negativos mantenidos durante largos
periodos de tiempo, como meses o incluso años, pueden alterar nuestro sistema inmunológico
causando un efecto en cadena con los otros sistemas.

También hay que tener en cuenta que existe la llamada “conducta de enfermedad”. Esta es
la conducta que una persona se espera tener durante determinada enfermedad. Por ejemplo,
en una gripe, el malestar genera un estado de ánimo decaído y en casos agresivo o evasivo.
Este es causado por diversas anomalías biológicas del sistema inmunológico, pero una vez
superada la gripe se espera que este estado de ánimo se vaya y se vuelva a la normalidad. En
caso que este perdure, es claramente a causa de un fallo biológico ya que si no hay una CAUSA
que te deprima por ejemplo, no tienes motivo para estar de esa forma. Por ende es a causa de
que los inmunoreceptores continúan actuando como si estuvieses enfermo, cuando no lo
estas. Este es un caso en el que la biología afecta a la mente. Sin embargo, están aquellos que
ocurren a la inversa. El enojo, ira y conducta agresiva se ha demostrado que aumenta la
presión arterial, y esta es constante va a generar una alteración en nuestro sistema.
Sumándole que si ya cuentas con problemas previos como presión alto, este estado de ánimo
de manera regular puede ser altamente peligroso para tu salud.

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