Monologo de Manuel

¡Ay! mi Carmen. ¿Por qué me has abandonado? ¿Por qué hoy?

Este día siempre era muy feliz a tu lado, tú y tu pan de muerto me llenaban de alegría al regresar
del trabajo con mi voz afónica, no sé qué haré cuando esta noche regrese a casa con mi voz
destrozada y un nudo en la garganta al no verte esperándome en tu sillita que tanto te gustaba.

Hace muchos años te conocí en este mismo día, te veías hermosa a lo lejos con tu carita pintada
de calavera y tus ojos totalmente negros. Me armé de valor para hablarte y después de un rato
platicando me dijiste que me veía como un catrín por estar muy delgado.

Luego de esa ocasión hubieron más días de muertos contigo a mi lado. Hoy ya no estás aquí y no
puedo pensar en qué pasará cuando la frialdad de noviembre me despierte y no te sienta a mi
lado.

A pesar de tantos entierros viendo a gente irse a la tumba en nunca me dolió tanto como cuando
ví a tu cajón cubriéndose con tierra. Perdí la cuenta de las veces en las que apoyaba a la familia
con mi voz y la tocada, pero ahora sólo estábamos tú y yo, sin nadie que me alegrara, solo mi
guitarra y (cantante de la canción) con las letras que tanto te gustaban

Te fuiste en nuestro día favorito para ir a la otra vida y poder estar acompañada de tu amada
huesuda, pero te olvidaste de mí. Se te olvidó decirme que te ibas y tampoco me dijiste cuando
nos volveríamos a encontrar. Me quedé completamente solo y triste a la espera de que llegue mi
hora.

Calaverita, perdóname por no poder estar más tiempo contigo, sabes que hoy es un día muy
agobiado en el panteón y yo tengo que ganarme la vida de una u otra forma o al menos ganaré
dinero porque sin ti ya no tengo vida.