7 Individuo y sociedad

Presentación de la unidad Trabajo científico

En el contexto del preadolescente que va definiendo su personali-
dad en relación estrecha, y dependiente, con su familia, su grupo
de amigos, su pandilla de clase, etc., se abre una primera reflexión
moral sobre la responsabilidad individual de sus actos y los límites
que no se deben sobrepasar en nuestra relación de pertenencia
al grupo.
La presente unidad gira principalmente en torno a una idea cen-
tral: la amistad bien entendida es un valor fundamental de nuestra
vida, en la que se conjugan nuestras aspiraciones individuales y re-
laciones sociales.
Los temas que se comentan están orientados a que eso se consiga
de manera armoniosa y tratan de que el alumno o alumna la com-
prenda y, en la medida de lo posible, la haga suya.
Fomento de la lectura
Las llamadas Ciencias Sociales son más recientes que la Física o las
Matemáticas, pero su relevancia actual es grande. Se puede
proponer al alumnado que averigüe algo acerca de su origen y los
métodos que emplean. En particular, puede ser relevante que
conozcan la figura de Augusto Comte y qué es la Sociología.
Por otra parte, en clase podemos trabajar con algún análisis esta-
dístico y comentar con el alumnado hasta qué punto creen ellos y
ellas que estos análisis son aplicables a los individuos, y si conside-
ran que tienen alguna utilidad de tipo predictivo. Por ejemplo: la
media de edad de matrimonio y el número medio de hijos que
ha correspondido en cada época, ¿se corresponde con los datos
de nuestros padres y abuelos? ¿Cuántos hermanos tenían ellos?
¿Cuántos tienen ahora nuestros alumnos y alumnas? ¿Qué edad
consideran que es adecuada para casarse? ¿Creen que es muy
arriesgado salirse de la media de cada época?

La unidad comienza con un texto de la novela Rebeldes (de la que

se rodó también película) en el que el protagonista, huérfano y
criado en un ambiente violento de pandillas, expone los proble-
mas de la relación con sus hermanos.
Se puede invitar a los alumnos y alumnas a que lean todo el libro,
ya que su contenido es bastante asequible, o a que vean la pelí-
cula, dirigida en 1983 por Francis Ford Coppola y basada en el
mencionado libro.
Anticipación de tareas
Para iniciar la unidad y debatir con el alumnado, podemos pregun-
tarnos: ¿la sociedad nos da libertad o nos la quita? ¿Por qué?
También se puede recurrir, por ejemplo, a la proyección de una
película como El libro de la selva. Si lo decidimos así, nos asegura-
remos de disponer, además de la película, de los medios técnicos
necesarios y comprobar con antelación su correcto funcionamiento.

Esquema de la unidad

Individuo y sociedad

Los individuos La sociedad

Nos diferenciamos: por rasgos Nos agrupamos en La socialización

que nos convierten en individuos
autónomos Comunidades: por afinidad Mediante ella

El individuo: se adapta a la sociedad

Vivimos en sociedad Sociedad: mediante relaciones
racionales La sociedad: moldea al individuo
Como animales: para conservar
la especie
Tiene riesgos
Como personas: para progresar
moralmente El individualismo

El gregarismo

Los evitamos

Con personalidad

Con amistades adecuadas

72
 7
Individuo
y sociedad
Seres individuales y sociales
Aunque cada uno de nosotros somos seres in-
dividuales, formamos una especie biológica y
vivimos en sociedades con una cultura y unos
comportamientos morales.
Comunidades y sociedades son formas com-
plementarias de la sociabilidad humana. Aun-
que no se excluyen, en las primeras predomi-
nan los vínculos afectivos; las segundas son
más impersonales y racionales.
La socialización es un influjo recíproco entre
el individuo y la sociedad, por el que el prime-
ro interioriza las pautas de comportamiento
social y trata de adaptarse a ellas.
En el proceso de socialización hay algunos
riesgos: el individualismo del que solo actúa
por propio interés y el gregarismo, que es la
pérdida de la personalidad individual en el
grupo anulando nuestra capacidad de decidir.
La amistad implica un equilibrio ideal entre el
individuo y los otros. Constituye un valor esen-
cial de la vida humana. La verdadera amistad
consiste en compartir, no en ser cómplice.
En esta unidad vas a estudiar
1 El carácter social de los individuos humanos.
2 El proceso de socialización por el que pasamos a
formar parte de una comunidad y de una sociedad.
3 Algunos riesgos de la socialización.
4 La amistad como modelo de relación humana.
80
Al iniciar la unidad
En la presente unidad, uno de los enfoques que más pueden interesar
a los alumnos y alumnas de ESO es la consideración del papel que tienen
los amigos y amigas en la adolescencia. Ese es el motivo por el que se ha
escogido como lectura introductoria un texto sobre amistades peligrosas
entre jóvenes.
La adolescencia es una época muy difícil de la vida de los jóvenes, no ca-
be duda, pues en ella surgen los primeros desacuerdos con los padres
y adquieren mucha importancia las relaciones en el grupo de iguales.
Las opiniones de sus amigos y amigas, por tanto, adquieren una gran im-
portancia en esta etapa y constituyen, por ello, uno de los factores primor-
diales en el proceso de socialización a esta edad.
Los adolescentes están sometidos a una gran tensión entre el desarrollo
embrionario de su personalidad y su inclusión en los diferentes grupos
sociales, con lo que esta implica de aceptación de normas de comporta-
miento.
No obstante, puede aprovecharse la ocasión para preguntarles cómo
se sienten en esta nueva etapa de su vida, qué inquietudes tienen, qué
temores perduran en ellos, o qué opinan del modo en el que habitual-
mente tenemos que ir adaptándonos a los cambios sociales que necesa-
riamente nos toca vivir.
Cuestiones para la detección de ideas previas
Puede empezarse por plantear a los alumnos y alumnas cuestiones como
las siguientes:
• ¿creen que la sociedad está influyendo en ellos y ellas?
• ¿cómo piensan que les afecta?
• ¿les parece que serían más felices si pudieran vivir solos y solas?
• ¿cómo valoran diferentes factores socializadores en sus vidas como sus
padres, hermanos, abuelos, amigos, profesores, los medios de comuni-
cación, etc.?
Reflexionamos
Tenemos que seguir unidos
Ninguno de los dos nos habíamos dado cuenta de cómo le estaba
sentando a Soda oírnos pelear. Me sentía enfermo y frío de vergüen-
za. Lo que dijo era verdad. Darry y yo jugábamos a tirar de la cuerda
con él, sin pensar nunca en el daño que eso le hacía. […]
—Lo que quiero decir es que no puedo tomar partido. Sería mucho
más sencillo si pudiera, pero es que veo los dos puntos de vista. Darry
grita demasiado y lo intenta todo con demasiado ahínco y se lo toma
todo demasiado en serio, y Ponyboy, tú no piensas las cosas, no te
das cuenta de todo lo que Darry ha dejado nada más que para darte
la oportunidad que él perdió. Podría haberte dejado en cualquier or-
felinato y haberse abierto camino en la universidad. Ponyboy, te estoy
diciendo la verdad tal cual es. Yo dejé el instituto porque no sirvo. En
serio que lo intenté, pero ya viste mis notas. Mira, yo soy feliz traba-
jando en una gasolinera con coches. Tú nunca serías feliz haciendo
algo parecido. Y Darry, tú tendrías que intentar comprenderle más y
dejar de fastidiarle con cada error que comete. Él siente las cosas de
distinta manera que tú —nos echó a los dos una mirada suplicante—.
Bastante difícil es tener que oíros, pero cuando además me forzáis a
tomar partido… —le asomaron lágrimas en los ojos—. Somos todo lo
que nos queda. Tenemos que ser capaces de seguir unidos, pase lo
que pase. Si no nos tenemos unos a otros, no tenemos nada. Si no
tienes nada, acabas como Dallas… y no quiero decir muerto. Quiero
decir como era antes. Y eso es peor que estar muerto. Por favor —se
secó los ojos con el brazo— no peleéis más.
De repente me di cuenta de que Darry solo tenía veinte años, de que
no era tan viejo como para no sentir el miedo o el dolor, o el estar
perdido, igual que todos nosotros. Vi que había esperado que Darry
lo entendiera todo sin intentar siquiera entenderle yo por mi parte. Y
él había abandonado un montón de cosas por mí y por Soda.
Susan E. Hinton, Rebeldes, Salvat, Alfaguara. (Adaptación).
Dialogamos
1 ¿De qué tipo de comunidad crees que se habla en este texto y por
qué características la identificas?
2 Debatid en clase sobre las bandas de adolescentes: ¿por qué se
forman? ¿Qué se busca en ellas? ¿Son beneficiosas o perjudiciales?
81
Trabajo con el texto
La lectura del texto puede hacerse encargando a algunos alumnos y alum-
nas que la realicen en voz alta, o bien cada cual en voz baja.
La reflexión fundamental puede girar en torno a si alguna vez se han visto
en una situación parecida, y si tienen dificultades para hacerse com-
prender y que les comprendan los demás. O bien, se les puede preguntar
acerca de cómo consiguen ponerse en el lugar de otras personas (o cómo
lo intentan) y cómo suelen argumentar para explicar sus decisiones.
Podemos aprovechar también para realizar algún comentario acerca del
libro del que ha sido extraído este texto: se trata de la historia de tres huér-
fanos que se defienden mutuamente y se integran en bandas callejeras.
También puede plantearse el contraste con lo que sucede en El libro de la
selva, de Rudyard Kipling (del que también se rodaron películas, como
la de dibujos animados producida por Walt Disney). En esta obra, el prota-
gonista es un hombre que, privado de la compañía de otros, entabla re-
laciones sociales con otros animales: de tipo familiar, con los lobos; de
amistad, con un oso y una pantera; y de rivalidad, con un tigre.
Soluciones de las actividades
1 El alumnado tiene que diferenciar entre lo que en Sociología se deno-
mina una asociación en comunidad o en sociedad. En el caso de la
lectura propuesta, se trata de una comunidad familiar, aunque deses-
tructurada y de hermanos huérfanos, en la que se da un conocimiento y
una comunicación directa entre sus miembros, proximidad en el trato
y cercanía entre ellos. Y, a pesar de las constantes disputas entre los her-
manos, se defienden y cuidan unos a otros frente a peligros externos.
2 La segunda cuestión se formula para que los alumnos y alumnas puedan
detectar características parecidas en las relaciones de las pandas o
bandas que ellos conocen. Lo que en principio es bueno y ayuda a los
adolescentes a darles seguridad e introducirlos en ámbitos más am-
plios que la familia, puede convertirse en perjudicial si se afirman en la
agresividad y la violencia con bandas rivales.
73
 1
Somos individuos
1.1 Definición de individuo
La palabra «individuo» proviene del latín individuum, y se dice de
aquello que si lo dividimos deja de ser lo que es. Es, por tanto, algo
indivisible. Tampoco se multiplica para dar lugar a otros individuos
idénticos.
En un sentido muy general, todas las cosas que ves y que tocas son
individuales. Los pupitres de clase son iguales de forma, de color,
de peso, etc., sin embargo, siguen siendo cosas individuales, aunque
solo sea porque se han hecho con una cantidad distinta de materia-
les (madera, plásticos y metales). Sin embargo, el color, el peso o la
altura no son individuos, porque son idénticos, aunque podamos en-
contrarlos en muchos seres diferentes.
1.2 Los seres humanos como individuos
Desde el punto de vista biológico, un individuo es un miembro par-
ticular y diferenciado de una especie. Esto parece más fácil de admitir
si hablamos de los seres humanos: cada uno de tus amigos y amigas,
de tus compañeros y compañeras, de tus familiares y de tus conoci-
dos son individuos.
Aunque todos estamos compuestos de células, de moléculas y de
órganos semejantes, ninguno de nosotros es idéntico a ningún com-
pañero o compañera de clase, ni de nuestra ciudad, ni del mundo.
82
Sugerencias
Cada alumno o alumna de esta edad comienza a experimentarse como
individuo, como persona diferenciada de los demás que le rodean.
Pueden hacerse diversas referencias a las cualidades personales, así como
a los límites de cada uno, para perfilar esa idea de individuo.
Al mismo tiempo, es importante hacer comprender a los alumnos y alum-
nas que cada uno, con sus cualidades y sus limitaciones, tiene abierto ante
sí un mundo de posibilidades de desarrollo personal por el hecho de vivir
en sociedad.
Desde esta perspectiva, la sociedad humana nos aproxima a otras formas
de agrupación, como las que favorecen la subsistencia animal (los reba-
ños, las manadas...) y, al mismo tiempo, nos diferencia de ellas porque el
fin de la sociedad es el progreso moral del hombre.
Soluciones de las actividades
1 Respuesta abierta. Rasgos físicos individuales, rasgos de carácter,
formas de comportamiento. Se puede también hacer referencia a los
gustos o aficiones, a las costumbres o tics de cada uno.
2 El alumno o alumna tiene que diferenciar lo de «ser un número», una
mera diferencia cuantitativa, de orden o lugar en el espacio, y la indivi-
dualidad propia de la persona, que es cualitativa: cada individuo es un
mundo. Normalmente la expresión se utiliza para aclarar que nos preo-
cupamos por las personas y sus sentimientos.
3 El alumno o alumna puede recurrir a sus conocimientos de Ciencias
Naturales para responder a esta pregunta, o a los documentales sobre
comportamiento animal que conozca (la ley del más fuerte físicamente,
la agrupación para la supervivencia, el aprendizaje por imitación, etc.),
mientras que en la sociedad humana nos damos leyes, para vivir digna-
mente, y nos guiamos por la inteligencia o la razón. Sobre estas bases,
los alumnos y alumnas pueden aportar datos más concretos: por ejem-
plo, los animales no usan palabras como nosotros, no hacen casas se-
gún el clima, etc.
74
UNIDAD 7
En el lenguaje corriente, usamos la expresión «ese individuo» cuando
desconocemos el nombre y los apellidos de una persona, que son
algo que puede identificarnos de manera casi exclusiva, como el DNI.
La policía piensa en esa perfecta individualidad cuando toma las hue-
llas digitales a alguien para descubrir y reconocer al autor de un deli-
to o cuando nos lee el iris de los ojos para identificarnos, ya que esos
datos son exclusivos de cada uno. No puede haber confusión, puesto
que cada individuo tiene unas huellas digitales y un iris distintos. Ni
siquiera son iguales en los hermanos gemelos.
1.3 Vivimos en sociedad
Pero los individuos, ya sean vegetales, animales o humanos, pertene-
cen a una especie determinada. Esto significa que tienen en común
características que los diferencian de las demás especies. Por eso se
pueden relacionar, e incluso reproducir, entre ellos. Esas relaciones
son el fundamento de la unión entre los individuos para formar los
distintos tipos de agrupamientos o sociedades.
Aunque todos somos individuos diferentes,
Como estudiamos en la primera unidad, en los seres humanos esas ca- los seres humanos vivimos en sociedad y
nos organizamos de acuerdo con unos crite-
racterísticas comunes no solo son biológicas (genéticas y fisiológicas),
rios y unas normas morales.
sino que también son de «otro tipo»: están relacionadas con la conduc-
ta inteligente, que en el ser humano se observa en el uso del lenguaje y
en que organiza su vida con normas que él mismo se impone.
Las sociedades humanas son diferentes a los agrupamientos de otros
En tanto que individuos, todos los seres son animales, como los rebaños, las manadas o las colmenas. Estos se for-
diferentes unos de otros, aunque estén he-
chos de la misma materia. man para proteger de las amenazas a los individuos que prolongarán
la vida de la especie: defendiéndose de los depredadores, procurán-
dose alimento, etc.
Aunque la sociedad humana también cuenta entre sus fines la con-
servación de la especie, lo que la diferencia de las demás es que
permite el progreso moral de los individuos, su realización como
personas. Una muestra de ello es que, incluso en las formas más pri-
mitivas de la sociedad humana, parece que se cuidaba a los ancia-
nos y a los enfermos, a pesar de haber perdido su función biológica
o reproductiva.
La sociedad humana no solo es una realidad biológica sino también,
y con más motivo, una realidad que se rige por criterios y leyes mo-
rales.
Comprende, piensa, investiga…
1 Haz una lista con los rasgos individuales, sean físicos o modos de
ser y de comportarse, que distinguen a personas que conozcas.
2 Explica qué entiendes cuando un profesor o profesora dice en
clase: «Para mí los alumnos no son meros números». ¿Tiene
que ver esto con lo que has leído sobre los individuos?
3   Cita al menos tres características en las que se diferen-
cian un hormiguero o un rebaño de ovejas de una sociedad
humana.
83
Actividades de refuerzo
Lee individualmente y después comenta en grupo el siguiente texto.
Después, explica las distinciones entre: gregario y social; voz y palabra;
dolor y placer; y justo e injusto.
«La razón por la cual el hombre es, más que la abeja o cualquier ani-
mal gregario, un animal social es evidente: la naturaleza, como sole-
mos decir, no hace nada en vano y el hombre es el único animal que
tiene palabra. La voz es signo del dolor y del placer, y por eso la tie-
nen también los demás animales, pues su naturaleza llega hasta
tener sensación del dolor y de placer e indicarse estas sensaciones
unos a otros. En cambio, la palabra existe para manifestar lo conve-
niente y lo dañoso, lo justo y lo injusto. Y esto es exclusivo del hom-
bre frente a los demás animales: poseer, él solo, el sentido del bien
y del mal, de lo justo y de lo injusto, y las demás apreciaciones.
La comunidad de estas cosas es lo que constituye la casa familiar y la
ciudad».
Aristóteles, Política, I, 2
Actividades de ampliación
En algunas obras de ficción se representan modelos sociales en los que se
pierde la individualidad de los sujetos. Un ejemplo de ello pueden ser los
clones de alguna de las películas de la saga La guerra de las galaxias.
En capítulos de la serie de dibujos animados, precisamente esto se plan-
tea como un dilema moral para los sujetos afectados. ¿Creen los alumnos
y alumnas que sería bueno que en una sociedad pudieran clonar a un solo
ser humano y que el resto fueran idénticos a él o ella? Que el alumnado
argumente y debata sobre ello.
Aprendizaje cooperativo
Elaborad un cuadro con la descripción del comportamiento gregario de
varios animales, señalando coincidencias y divergencias.
 2
La sociedad
2.1 Comunidad y sociedad
Las formas que tiene el ser humano de unirse y de relacionarse con
otros semejantes son muy variadas. Algunas son muy cercanas a los
individuos, ya que nos unimos con los otros por lazos afectivos, for-
mando «comunidades». El ejemplo más claro es la familia. En ella
recibimos los primeros cuidados, la protección y el cariño que nos
permitirán desarrollarnos para ser adultos. Y sentimos que formamos
parte de ella. Lo mismo sucede con nuestra pandilla o grupo de ami-
gos y amigas.
Otras relaciones son más impersonales o racionales, motivadas por
intereses comunes: nos unimos con gente que ni siquiera conocemos
y formamos una «sociedad». Vivimos en un país con unas leyes que
determinan nuestra vida individual y sobre las que seguramente no
se nos ha consultado.
Comunidades y sociedades no se excluyen mutuamente, porque am-
bas son formas de la natural sociabilidad humana.
Habitualmente, los seres humanos aprendemos las habilidades más
duraderas y básicas de la vida social (como el lenguaje, las normas
sociales, las costumbres y lo que está bien o mal) en la comunidad
familiar y en nuestro entorno más cercano. A medida que vamos cre-
ciendo y desarrollando nuestra propia personalidad, hacemos una re-
visión de lo aprendido en la comunidad, conservando unas cosas y
rechazando otras.
Entonces, salimos de ese entorno más reducido y accedemos a un
contexto social más amplio, como puede ser la ciudad. En las gran-
des ciudades, el individuo lleva una vida más independiente, por ser
anónima y porque en ella no se siente controlado, pero también más
solitaria.
2.2 La socialización
Has comenzado un nuevo curso y una etapa diferente: la Educación
Secundaria. Seguro que tienes profesores y profesoras diferentes y,
probablemente, compañeros y compañeras distintos. Los horarios,
las normas del centro y la organización también varían con respecto
al curso pasado. Casi todo es nuevo para ti en este año.
Primero tienes que aceptar los cambios: conocer a los nuevos com-
pañeros y profesores, las reglas del centro, modificar tus horarios de
comida, de descanso, de trabajo, etc. Y te tienes que adaptar. Estás
dando un paso en tu socialización.
La socialización es un influjo recíproco entre el individuo y la socie-
dad, un proceso cuyo resultado, desde el punto de vista del individuo,
consiste en interiorizar las pautas comunes de comportamiento y tra-
tar de adaptarse a ellas.
Realmente, la vida de los seres humanos suele ser un constante pro-
ceso de socialización. Comienza con la infancia y ni siquiera termina
con la vejez.
84
Sugerencias
Este epígrafe aproxima al alumnado a la realidad social en la que vive y se
desenvuelve, aportándole unos conceptos básicos que se desarrollarán
posteriormente con el tratamiento de experiencias más cercanas. Es con-
veniente insistir en que ser sociales no es algo estático, que se nos da de
una sola vez, sino que consiste en vivir un proceso de socialización cons-
tante, lo que implica la necesidad de mantener una postura flexible y,
al mismo tiempo, mantenernos firmes en lo que consideramos verdadera-
mente importante.
Soluciones de las actividades
1 En esta pregunta se trata de que el alumno o alumna reconozca las
características comunitarias de la familia (cercanía, conocerse, quererse,
protegerse, colaborar, etc.) y las distinga de las de una sociedad como
puede ser el país, en el que rigen las relaciones racionales, legales
y anónimas.
Es conveniente reconocer que, respecto a la familia, hay una gran
variedad de situaciones, y habrá que matizar el término «cercanía» con
otras características negativas que también puede presentar esa
«cercanía» entre los miembros de la familia.
2 Respuesta abierta. Para ayudar al alumnado, podemos hacer una refe-
rencia a la «vida en el pueblo» o la «vida en familia» y la vida en la ciu-
dad o independizada de la familia. En todo caso, hay que insistir en la
ambivalencia del anonimato de la gran ciudad: por una parte, nos pue-
de permitir reconsiderar los valores que hemos recibido en familia, o en
un ámbito más restringido, para elegir personalmente; y, por otra parte,
puede también aislarnos y avocarnos a elecciones perjudiciales para
huir de la soledad.
3 La socialización es un proceso de influjo recíproco entre el individuo y la
sociedad, cuya finalidad es que el individuo se amolde al comporta-
miento organizado característico de su sociedad, para que pueda desa-
rrollar sus capacidades en la misma y darle estabilidad.
UNIDAD 7
Los emigrantes que viven en una cultura diferente, el empresario de
éxito que se arruina o el trabajador que pasa de una ocupación a otra,
todos tienen que volver, como tú, a socializarse.
A través de la socialización, la cultura, los conocimientos y las técni-
cas se van transmitiendo de una generación a otra. Los individuos de-
sarrollan sus capacidades y las habilidades necesarias para participar
en la vida comunitaria, y se amoldan a las formas de comportamiento
organizado características de su sociedad.
Si ese proceso fracasa, los individuos quedan marginados. Y si el fra-
caso es global, entonces las sociedades enteras decaen.
La socialización del individuo se suele dividir en tres etapas:
1) Socialización primaria: tiene lugar durante la infancia en la familia.
2) Socialización secundaria: se produce durante la adolescencia y pri-
mera juventud, en el grupo de amistades, en el centro escolar, etc.
La socialización secundaria tiene lugar du-
3) Socialización terciaria: sucede en la edad adulta y en ella se puede rante la adolescencia, en las relaciones con
revisar todo el proceso realizado hasta entonces. el grupo de amigos y en el centro escolar.
Una de las comunidades en las que se orga-
nizan los individuos humanos es la familia, en
la que reciben los cuidados, la protección y
el cariño necesarios para llegar a ser adultos.
Comprende, piensa, investiga…
1 ¿Qué diferencias y qué semejanzas encuentras 3 Explica qué es la socialización y señala cuál es
entre una comunidad como tu familia y una so- su importancia.
ciedad como tu país?
4  Dibuja en tu cuaderno una tabla con tres
2   Evaluar. En las grandes ciudades, los in- filas y tres columnas: en la primera columna ano-
dividuos pueden tener una vida totalmente anó- ta los nombres de las etapas de socialización; en
nima. ¿Qué aspectos beneficiosos y qué aspec- la segunda, indica cuándo tiene lugar cada una
tos perjudiciales aprecias en esta situación? y, en la tercera, anota sus características.
85
4
Etapas de
Edad Características
socialización
Socialización Primera Primeras habilidades sociales:
primaria infancia hablar, andar, comer, distinguir el
bien y el mal, etc.
Socialización 6-11 años En la escuela (o en el inicio de una
secundaria y en adelante nueva actividad o profesión):
habilidades propias como respetar
la organización, la autoridad, etc.
Socialización Edad adulta Resocialización de conductas
terciaria asociales
Actividades de ampliación
Las sociedades humanas han cambiado a lo largo de la historia y, con
ellas, también el papel de los jóvenes. Vamos a analizar en el siguiente
texto cómo ha influido la sociedad en la vida de los jóvenes.
«La primera ley restringiendo el trabajo infantil se aprobó en Gran
Bretaña en 1833: prohibía el empleo de niños menores de nueve años
y limitaba el trabajo de quienes tenían entre 9 y 13 años a nueve horas
por día, seis días por semana. [...] En España, sin embargo, hasta 1900
no se aprobó una ley que prohibía el trabajo de niños menores de
10 años y que limitaba la jornada de trabajo a seis horas en la industria
y ocho en el comercio para aquellos entre 10 y 14 años; y, en Italia,
en 1902 se promulgó una ley que establecía la edad para entrar a tra-
bajar en los 12 años, frente a los nueve anteriores, con una jornada de
11 horas diarias».
Sandra Souto Kustrín, Juventud, teoría e historia: la formación
de un sujeto social y de un objeto de análisis.
En la Red
Investiga sobre el premio Nobel de Literatura William Golding y su novela
más conocida: El señor de las moscas. Por ej. en: http://goo.gl/a8P1gH.
75
 3
Algunos riesgos de la socialización
La socialización sitúa a un individuo en un grupo, lo que unas veces
genera que haya intereses comunes, y otras, enfrentados. Esto supo-
ne conflictos y, en algunos casos, riesgos de provocar posturas perju-
diciales, como son el individualismo y el gregarismo.
3.1 Individualismo
Alguna vez has podido oír un comentario similar a los siguientes so-
bre un deportista de un equipo: «Es muy habilidoso, pero está en el
banquillo por ser tan individualista» o, simplemente, «Es un jugador
muy individualista».
Cuando hablamos así, por lo general, nos referimos al individualismo
en un sentido moral. Se trata de una crítica que hacemos a quien ac-
túa sin tener en cuenta los intereses y las opiniones de los demás, ni
las normas que regulan sus relaciones de grupo.
El individualista solo se relaciona para obtener provecho propio: úni-
camente colabora con los demás si le conviene y, cuando lo hace,
trata de imponer su opinión a todos los componentes del grupo. Las
relaciones que no contribuyan a ese fin le dejan indiferente. Los otros
son solo un medio o un recurso para beneficiarse. Piensa únicamente
en sí mismo y se comporta de forma egoísta.
Normalmente, las personas individualistas tienen una visión distorsio-
nada de la realidad, pues se creen superiores a los demás y piensan
que no los necesitan.
86
Sugerencias
Proponemos hablar de ciertos riesgos extremos que se dan en el proceso
de socialización en la edad en que se encuentra la mayoría del alumnado.
Simplificando lo esencial, podemos diferenciar los alumnos y alumnas que
no se adaptan a su entorno, sobre todo escolar y de amistades, y los
que se mimetizan con aquel. La casuística aquí es muy variada y el profe-
sor o profesora puede concretar dichos riesgos en el proceso de diálogo
abierto sobre este tema.
Soluciones de las actividades
1 Respuesta abierta. El alumnado tiene que saber relacionar la metáfora
de actitud colaborativa del trabajo en equipo con la inconveniencia del
individualismo en la sociedad. Por otra parte, resulta un rasgo de madu-
rez valorar la colaboración, de manera que no es raro que los niños y
niñas suelan preferir jugar con quien lo hace mejor individualmente, por
su preferencia por la victoria inmediata.
Interesa que el alumnado reflexione sobre el hecho de que la influencia
social en algunos casos se hace más evidente que en otros: se suelen
seleccionar determinadas asignaturas en el sistema educativo, se tele-
visan más cierto tipo de programas que otros... pero también hay otro
tipo de inculturación, como la que promueve determinadas actitudes,
incluso ante el valor de la vida humana. Piénsese en lo que sucede con
los niños y niñas que viven en países en guerra.
Naturalmente, entre los valores que aporta una cultura, está el modo
que se considera adecuado de aprovechar la libertad o respetar a los
demás. En cuanto a la contribución de cada ciudadano a la sociedad,
basta con considerar que sin ciudadanos no existiría sociedad.
2 El individualismo es uno de los riesgos de la socialización mal llevada
a cabo. En este punto, puede resultar pertinente observar cómo quien
cae en ese tipo de conductas encuentra un rechazo social, que en esta
actividad se presenta simplemente como críticas: el maleducado y el
desobediente tienen dificultades para encajar con el resto.
76
UNIDAD 7
3.2 Gregarismo
En el extremo opuesto se encuentra el gregarismo. En los rebaños y
manadas de animales (por ejemplo de leones, lobos o ciervos) hay
una jerarquía basada en la fuerza y en la vitalidad. El león más po-
deroso se impone a los otros y se hace con el control sobre toda la
manada, se convierte en el macho dominante y el resto le obedece
incondicionalmente, hasta que sus fuerzas comienzan a decaer y es
expulsado por otro macho más fuerte y vigoroso.
Este tipo de comportamiento, que es mucho más acusado entre al-
gunos insectos y peces, se denomina gregarismo. En él, la individua-
lidad de cada uno queda suprimida.
A veces también se dan manifestaciones de una conducta similar en
grandes grupos humanos, como ocurrió en Alemania bajo el poder
de Hitler o en la actual Corea del Norte. En otras ocasiones, pode-
mos verlo en colectivos más pequeños: como cuando en un grupo de
amigos o de compañeros hay uno que impone siempre su voluntad,
que dice lo que se hace y lo que no, que siempre se sale con la suya
y al que todos siguen u obedecen sin rechistar. En este caso, también
estamos hablando de un comportamiento gregario. Muchos animales, como los leones, manifies-
tan un comportamiento gregario, de total
El gregarismo anula la libertad moral del individuo, que se siente in- sometimiento al líder de la manada.
capaz de decir «no», de negarse a seguir una orden que va contra su
conciencia moral, contra sus normas de comportamiento o, sencilla-
Las personas demasiado individualistas solo mente, contra su parecer.
tienen en cuenta sus propios intereses, se
creen superiores a los demás y piensan que El gregarismo es dañino, sobre todo, cuando el líder nos propone ha-
no los necesitan. cer algo que no está bien, algo inmoral, como acosar a un compañero,
incumplir nuestros deberes o consumir sustancias nocivas para nues-
tra salud. Esto ocurre, frecuentemente, bajo la amenaza de acusarnos
de cobardes, de débiles o de expulsarnos del grupo.
Pero incluso cuando no nos proponen nada malo, el gregarismo
es peligroso, porque anula la capacidad de decidir por nuestra
cuenta, de discutir aquello con lo que no estamos de acuerdo y de
rechazarlo.
Comprende, piensa, investiga…
1   Justificar. Si fueras entrenador o entrenadora de un
equipo, ¿alinearías a un jugador que sabes que es bueno pero
muy individualista? Explica tu respuesta.
2 Calificar. Teniendo en cuenta lo que has estudiado en
esta unidad, ¿cómo calificarías la conducta de una persona
maleducada o de un adolescente desobediente?
3 Si es en la familia donde aprendemos a comportarnos siguien-
do unas normas, ¿por qué hay hermanos que tienen un com-
portamiento tan distinto unos de otros?
4  Busca información y describe el comportamiento gre-
gario de alguna especie animal que viva en grupo.
87
Todas aquellas personas que manifiestan valores como la tolerancia y el
respeto sirven aquí de ejemplo. Puede ser una buena ocasión para
insistir en la importancia de la escucha activa y la asertividad.
3 Hay que tener en cuenta que nuestra conducta no depende solo de un
factor de socialización, por muy importante que este sea. En primer
lugar, como individuos distintos que somos, cada cual tiene sus rasgos
genéticos y son diferentes de unos hermanos a otros. Y, además, existen
otros aspectos que nos van influyendo y afectando de manera diferente,
ya sea por experiencias vitales y del entorno, como por la interacción
con otras personas.
4 Hay diferentes tipos de insecto que suelen utilizarse como ejemplos de
conductas gregarias. En particular, las abejas o las hormigas tienen dife-
renciaciones morfológicas y de tareas muy marcadas. No obstante, pue-
de indicarse a los alumnos y alumnas que se repartan la investigación,
buscando información acerca del comportamiento de varios animales
diferentes para ponerla en común. Un buen ejemplo pueden ser los leo-
nes. Cabe incluso recurrir a la película El rey león o a Hormiga Z para
tratar este tema.
Actividades de refuerzo
1 Investigad qué es la «readaptación social», sus fines, a quién se dirige,
en qué centros se aplica y qué resultados produce.
2 ¿Crees que puede haber otros medios para conseguir la «readaptación
social» de los individuos? ¿Cuáles serían? Explica tus respuestas.
Actividades de ampliación
Buscaremos información sobre el individualismo político (liberalismo
clásico) y el individualismo económico (el «homo oeconomicus» del que
habla la Economía Política clásica). En todo caso, y dado el alumnado al
que nos dirigimos, se trata solo de comentar nociones introductorias
acerca de estos temas que les hagan ver el alcance que tienen. Por
ejemplo en: http://goo.gl/j6c7az.
 4
Tus amigos y tú
4.1 Tu personalidad
¿Cuál es, entonces, el comportamiento más acertado frente al indivi-
dualismo y al gregarismo?
En las cuestiones morales, aquellas que afectan a la orientación de
nuestra vida, las soluciones las tiene que buscar cada uno atendiendo
a su situación personal, pero, como veremos más adelante, la ética
proporciona unas pautas generales que nos sirven de guía para en-
contrar nuestro propio camino.
Nuestra naturaleza humana nos ha hecho individuos, pero individuos
sociales. Por tanto, estamos abiertos a otros, unidos y relacionados
con nuestros semejantes por lazos biológicos, afectivos y culturales o
por intereses económicos y políticos.
En cuanto sociales, somos elementos de un conjunto, pero en cuanto
individuos tenemos vida propia, somos independientes y autónomos
con respecto a ese todo.
El individualismo descrito anteriormente es perjudicial, pero existen
otras posibilidades: no se puede llamar individualista a alguien sim-
plemente porque no actúa como lo hace la gran mayoría.
Piensa, por ejemplo, en la persona que denuncia una injusticia cuando
los demás no se atreven y se callan, asumiendo el riesgo de perder la
estima de los otros; o en quien se levanta de su asiento en el autobús
o en el metro para dejar el sitio a un anciano o a una mujer embaraza-
da, mientras los demás fingen no darse cuenta; o en el que no sigue la
moda en su manera de vestir porque tiene sus propios gustos.
A esas formas de actuar nadie las calificaría como individualistas,
aunque las realice un individuo solo. Son expresiones de lo que po-
dríamos llamar «seguir nuestra conciencia individual», esa conciencia
que se basa en un profundo sentimiento de la dignidad personal, la
independencia de criterio y la propia responsabilidad.
Cuando los individuos actúan de ese modo, decimos que tienen per-
sonalidad. No tratan de imponer o dominar, ni tampoco de enfrentar-
se al grupo o a la sociedad buscando su propio beneficio en forma
de prestigio personal, de fama o por simple exhibicionismo, sino que,
sin ni siquiera proponérselo, al seguir a su conciencia, hacen mejores
a su grupo y a su sociedad.
Frecuentemente, colaboramos con la sociedad, asumiendo sus nor-
mas y generando un beneficio mutuo. Por ejemplo, trabajamos a
cambio de un salario, producimos bienes que favorecen al colectivo
y, al mismo tiempo, conseguimos un sueldo.
Pero a veces la relación es más conflictiva, lo que no siempre quiere
decir que actuemos mal: cuando exigimos nuestros derechos tam-
bién interactuamos con la sociedad, de una manera menos agrada-
ble, pero igualmente positiva.
Una personalidad firme y correcta nos ayuda a saber cuándo debe-
mos colaborar y cuándo hemos de negarnos.
88
Sugerencias
Ahora trasladaremos las ideas expuestas anteriormente a la realidad
concreta de los alumnos y alumnas. Por un lado, se insiste en la necesi-
dad de formarse un criterio propio e independiente respecto a la realidad
que nos rodea y, por otro, en valorar la importancia en la vida de una ver-
dadera amistad. En definitiva, actuar con personalidad es la base para
entender la amistad, una relación con los demás basada en la franqueza,
la verdad y el estímulo para mejorar.
Soluciones de las actividades
1 Un ejemplo muy común en estas edades, es el del joven que no bebe
alcohol o no fuma pese a la insistencia de sus amigos y amigas en senti-
do contrario. Cualquier otro ejemplo análogo sirve para comprender
que se trata de una conducta que se lleva a cabo cuando alguien no se
deja llevar por la opinión de los demás, aunque sea mayoritaria, si esa
opinión le lleva a realizar acciones contrarias a su criterio o interés.
2 Respuesta abierta. El trasfondo que se pretende comentar es que entre
amigos también rige el criterio moral de no hacer a los demás lo que no
quieres que te hagan a ti. La actividad tiene dos partes: en primer lugar
se trata de escribir los valores que les parezcan más destacados en la
relación de amistad: confianza, apoyo, cariño, lealtad, simpatía, inteli-
gencia, serenidad... y en segundo lugar, se trata de que los ordenen.
3 La relación entre los dos ladrones es de complicidad, pero no de amis-
tad. La amistad nos lleva a hacernos mejores personas. Las relaciones
amistosas tienen un criterio moral, necesario en toda verdadera amistad.
Actividades de refuerzo
1 ¿Qué diferencia encuentras entre «ser una personalidad» y «tener per-
sonalidad»?
2 Investiga en Internet sobre ejemplos de grandes amistades que se han
dado en la historia de la Humanidad.
Cada individuo humano, aunque viva en so-
ciedad y acepte sus normas, tiene su propia
personalidad, unas características específi-
cas que lo distinguen de los otros.
Comenta el siguiente poema. Explica con qué versos estás de acuerdo
y cuáles crees menos relevantes. A partir de ello, escribe qué es lo que
más valoras en una persona para una relación de amistad.
UNIDAD 7
4.2 La amistad
La amistad es el tipo de relación personal más positiva que podemos
establecer entre los individuos, y constituye un valor esencial en la
vida humana. Aristóteles, en Ética a Nicómaco, decía:
«Sin amigos nadie querría vivir, aun cuando poseyera todos los
demás bienes; hasta los ricos y los que tienen cargos y poder
parecen tener necesidad sobre todo de amigos; porque ¿de qué
sirve esa clase de prosperidad si se le priva de la facultad de
hacer bien, que se ejerce preferentemente y del modo más lau-
dable respecto de los amigos?».
Las amistades surgen frecuentemente a partir de relaciones por inte-
rés, por utilidad o por gusto. Pero lo que suele entenderse por amis-
tad consiste en que las personas encuentren auténtica satisfacción en
buscar recíproca y desinteresadamente el bien del amigo. Esta amis-
tad suele ser más duradera que la que se establece por otros motivos.
En la amistad no hay gregarismo, no se pierde la independencia in-
dividual, se tiene autonomía para decir al amigo lo que creemos que
La amistad consiste en la relación en la que
está mal o lo que es mejor. La verdadera amistad es compartir, no ser se busca recíproca y desinteresadamente el
cómplice. bien del amigo o la amiga.
Comprende, piensa, investiga…
1 Pon ejemplos de acciones que indiquen que el 3 Señala qué le faltaría a la siguiente relación para
individuo que las realiza tiene personalidad. ser una verdadera amistad:
2   Calificar. ¿Cómo quieres que se porten Imagina el caso de dos ladrones que roban jun-
contigo tus amigos y tus amigas? Califica de uno tos. Se entienden y confían el uno en el otro. Pero
a diez los comportamientos o las actitudes que uno de ellos, cuando es detenido por la policía,
has señalado según la importancia que les des. delata al otro y le culpa de planear los atracos.
89
Actividades de ampliación
Creo en ti amigo:
Si tu sonrisa es como un rayo de luz
que alegra mi existencia.
Creo en ti amigo:
Si tus ojos brillan de alegría al encontrarnos.
Creo en ti amigo:
Si compartes mis lágrimas y
sabes llorar con los que lloran.
Creo en ti amigo:
Si tu mano está abierta para dar y
tu voluntad es generosa para ayudar.
Creo en ti amigo:
Si tus palabras son sinceras y
expresan lo que siente tu corazón.
Creo en ti amigo:
Si sabes comprender bondadosamente mis debilidades y
me defiendes cuando me calumnian.
Creo en ti amigo:
Si tienes valor para corregirme amablemente.
Creo en ti amigo:
Si sabes orar por mí,
y brindarme buen ejemplo.
Creo en ti amigo:
Si tu amistad me lleva a amar más a Dios
y a tratar mejor a los demás.
Creo en ti amigo:
Si no te avergüenzas de ser mi amigo
en las horas tristes y amargas.
Anónimo.
77
 Taller de valores UNIDAD 10
7

Las Juventudes Los valores en la historia

Aplica tus competencias
Las sociedades humanas son muy diversas, incluso
las que aparentemente son semejantes. Las nor-
mas, las costumbres, las formas de relacionarse…
son distintas.
Los individuos que viven en ellas se adaptan a esas
peculiaridades a medida que crecen y asimilan di-
chos valores en el proceso de socialización.
Los peligros del
Hitlerianas
La reeducación del pueblo alemán en la ideología
nazi tenía que empezar por la juventud. Con este
objetivo se crearon las Juventudes Hitlerianas.
En esta organización se fomentaba el ejercicio fí-
sico, la vida al aire libre, el compañerismo y se pro-
porcionaba una formación militar básica a todos
los jóvenes alemanes.
Pero sobre todo su objetivo era el adoctrinamien-
to de la juventud en las ideas y los valores nacio-
nalsocialistas.
La resocialización forzosa
Mustafá Kemal Atatürk es considerado por muchos el fundador de la
Turquía moderna. Fue nombrado presidente del país en 1923 y a partir
de esa fecha comenzó una serie de reformas que perduran hasta hoy.
En primer lugar, abolió el Califato y convirtió a Turquía en una repúbli-
ca laica. Además, impulsó otras transformaciones que obligaron a la
población a cambiar sus costumbres: derogó la ley islámica, impuso la
vestimenta y el calendario occidentales, sustituyó el alfabeto árabe por
el latino, concedió el voto a las mujeres, instituyó el domingo como el
día de descanso, prohibió la poligamia, cerró las escuelas religiosas…

comportamiento gregario Durante la guerra, fueron militarizados y enviados

al frente, y probaron su fidelidad al Führer hasta la emprender
aprender
Con el ascenso al poder del régimen nazi en Alema- batalla final en Berlín.
nia en el año 1933, la presión sobre los ciudadanos
se volvió asfixiante para tratar de imponer un con-
trol absoluto sobre todos los aspectos de su vida.
Protegemos la diversidad
Se abolieron los partidos políticos, que fueron sus-
lingüística LENGUAS EN PELIGRO
tituidos por un partido único, el NSDAP, el partido Visitad la página web que la Unesco dedica
nazi, y se organizaron grandes actos de propagan- a las «Lenguas en peligro» e informaos sobre El «Atlas Unesco de las lenguas
del mundo en peligro» pre-
da para atraer a todos los alemanes a su filas. el estado de la diversidad lingüística mundial. tende sensibilizar del problema
de las lenguas en peligro de
desaparición y de la necesidad
Todas las instituciones fueron ocupadas por miem- Para debatir en clase, os proponemos dos te- de salvaguardar la diversi-
dad lingüística del mundo.
bros afines al partido y las principales empresas es- mas de interés:
taban al servicio de las necesidades del régimen. 1 Considerad si es importante conservar la TRANSMISIÓN
NIVEL DE
INTERGENERACIONAL
Para forzar a los pocos disidentes que quedaban, la diversidad lingüística. VITALIDAD
DE LA LENGUA
policía política, las SS y la Gestapo, reprimían cual- 2 ¿Qué significa para los hablantes sociali-
quier tipo de opinión contraria al nazismo. Todas las generaciones hablan la
zarse en una lengua en vez de en otra? A salvo. lengua y su transmisión de una
generación a otra es continua.

Nos informamos La mayoría de los niños hablan la

1 ¿Has oído hablar alguna vez de Leni Riefenstahl?
¿Cuál fue su profesión? ¿Qué tuvo que ver con el
régimen nazi?
2 Los nazis organizaron los Juegos Olímpicos de
Berlín en el año 1936. Infórmate de por qué cons-
tituyeron un gran triunfo propagandístico para
Hitler.
Interpreta una imagen
3 En 1934 y 1938 se celebraron en Nüremberg los
más importantes congresos del Partido Nacional
Socialista Alemán de los Trabajadores (NSDAP),
el partido nazi. Se organizaban grandes con-
centraciones y movimientos de masas con fines
propagandísticos. ¿Qué sensación te transmite la
imagen de uno de estos actos?
lengua, pero su uso puede estar
Vulnerable.
restringido a determinados ámbi-
tos (el hogar familiar, por ejemplo).
Los niños ya no la aprenden en sus
En peligro.
familias como lengua materna.
Solo los abuelos y las personas de
las generaciones anteriores hablan
Opina críticamente Seriamente
en peligro.
la lengua. Los miembros de la
generación parental, si bien pue-
4 Explicar. Los alemanes, en mayor o me- den comprenderla, no la hablan
nor medida, colaboraron con el régimen nazi o, entre sí, ni tampoco con sus hijos.
al menos, cerraron los ojos ante sus atrocidades. Los únicos hablantes son los
¿A qué crees que se debió este comportamiento? abuelos y las personas de las
En situación
generaciones anteriores, pero
crítica.
5 Juzgar. Los campos de concentración se solo usan la lengua parcialmen-
utilizaron inicialmente para enviar a todos los di- te y con escasa frecuencia.
sidentes que se atrevían a oponerse al nacional- Extinta. No quedan hablantes.
socialismo. ¿Por qué crees que se los perseguía?
¿Cuál era el objetivo final de las autoridades?

90 91

Aplica tus competencias Aprender a emprender

Nos informamos
1 Entre los encargos que recibió la directora de cine alemana Leni
Riefenstahl estaban los documentales dirigidos a ensalzar las habili-
dades físicas que el nazismo asociaba a la raza aria. Los alumnos y alum-
nas deberán buscar más información al respecto.
El idioma es un patrimonio cultural fundamental de un pueblo, dado que
refleja, en buena medida, su manera de comprender el mundo y qué co-
sas le importan. Es evidente que las palabras de las que se dispone suelen
tener que ver con actividades relevantes para cada cual: así, las culturas
agrícolas designan plantas y utensilios agrarios con mucha mayor preci-
sión que las culturas urbanizadas e industriales.

2 Los Juegos Olímpicos de Berlín constituyeron la gran apuesta de Hitler
para intentar demostrar al mundo que Alemania se había recupera-
do de la derrota de la Primera Guerra Mundial y que, tanto desde el
punto de vista de la organización colectiva como desde el de la capaci-
dad individual demostrada por sus atletas, volvía a situarse en la van-
guardia mundial.
Interpreta una imagen
3 Las imágenes que nos llegan suelen mostrar el gregarismo propio de
sociedades en las que el individuo queda anulado y debe someterse al
colectivo. Se aprecia claramente por la uniformidad, no solo en el as-
pecto (corte de pelo y/o atuendo), sino también en las posturas. La sen-
sación que transmite es de una clara falta de libertad.
Opina críticamente
4 La responsabilidad del pueblo alemán no fue idéntica entre todos
sus miembros. Algunos colaboraron activamente, otros procuraron
mantenerse al margen y también hubo quien se resistió. No obstante, el
régimen no reparó en medios para conseguir sus fines, de manera que
cualquier intento de oposición constituía un grave riesgo.
5 Evidentemente, los campos de concentración anulaban cualquier intento
opositor, pero no solamente por la reclusión de quienes eran encerra-
dos en ellos, sino principalmente por el gran temor que provocaban en
los demás.
Lo cierto es que la pervivencia y la salud de una lengua depende de bas-
tantes factores. Uno de los que más contribuye a ello es la escritura. Hay
lenguas relevantes, incluso desde el punto de vista del número de hablan-
tes que, sin embargo, difícilmente perdurarán por esta razón.
Podemos proponer algunos casos que los alumnos y alumnas pueden
considerar porque les resultarán más conocidos:
• La importancia del español debido a Hispanoamérica.
• La recuperación del gallego, el euskera y el catalán a partir de la transi-
ción democrática y las transferencias educativas.
• Las dificultades de idiomas sin tradición escrita para perdurar, como es
el caló.
• Los problemas de colonización que puede suponer el predominio del
inglés.
• El valor del trabajo de conservación del español que realizaron las
comunidades sefarditas.
Aparte de esto, también puede extenderse la valoración a lo que repre-
senta la historia de la literatura de un idioma. Esto nos servirá para debatir
con el alumnado qué obras son especialmente importantes y si deben ser
conocidas por un pueblo o no. A partir de ahí, cabría preguntar cuál es la
edad a la que deben comenzar a leerse y cómo, qué ventajas y qué incon-
venientes tienen las lecturas obligatorias, si debe preferirse que se esco-
jan en función del nivel lector del alumnado o conviene programarlas de
manera que tengan que esforzarse, aún a riesgo de que el esfuerzo eche a
algunos para atrás...

78
Anotaciones

79