Está en la página 1de 1

Potencias aliadas

Estados Unidos, Gran Bretaña, China y la Unión Soviética formaban los Aliados, el grupo
que luchaba contra el Eje. Entre 1939 y 1944, al menos 50 naciones acabarían uniéndose a
la alianza. Trece naciones más se unirían en 1945, entre ellas: Australia, Bélgica, Brasil, la
Mancomunidad Británica de Naciones, Canadá, India, Nueva Zelanda, Sudáfrica,
Checoslovaquia, Dinamarca, Francia, Grecia, Países Bajos, Noruega, Polonia, Filipinas y
Yugoslavia.

Los Aliados fueron el conjunto de países opuestos política y militarmente a las potencias


del Eje durante la Segunda Guerra Mundial. Más concretamente se suele referir con este
término a la coalición militar liderada a partir de 1941 por Estados Unidos, el Reino
Unido y la Unión Soviética (en cierto modo también por China en el teatro asiático-
pacífico, llegando a denominar los cuatro con el término de Cuatro Policías) contra las
fuerzas armadas de la Alemania nazi, el Japón imperial y la Italia fascista (hasta su
derogación en 1943). Históricamente se suele incluir entre los aliados principales también
a Francia por su significado geopolítico y participación en la partición de Alemania después
de la guerra. En el sentido posbélico, se suele referir con los términos «potencias aliadas»
u «ocupación aliada» a estos cuatro Estados occidentales.
Al comenzar la guerra, el 1 de septiembre de 1939, la coalición enfrentada a Alemania
consistía en la República Francesa, Polonia y el Reino Unido, al cual se unieron poco
después algunos dominios del Imperio británico y el resto del Imperio
(Canadá, Australia, Nueva Zelanda, el Dominio de Terranova y la Unión Sudafricana), el Raj
británico y el Reino de Nepal. En 1940, se unieron la Francia
Libre, Dinamarca, Noruega, Bélgica, Luxemburgo, los Países Bajos, el Reino de Grecia y
el Reino de Yugoslavia. En junio de 1941, la llamada Operación Barbarroja propició que
la URSS se uniera a los Aliados. Estados Unidos, que ya había apoyado a los aliados en los
primeros años de la guerra, se unió activamente en diciembre de 1941, tras el ataque
japonés a Pearl Harbor, que además propició la incorporación de otros países, incluidos
algunos del continente americano como México. En el frente asiático, la República de
China ya se encontraba en plena guerra sino-japonesa, la cual se convertiría en el frente
asiático de la guerra mundial

También podría gustarte