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La escritura es inspirada y útil

“Toda la escritura es inspirada por Dios y útil” – 2 Timoteo 3:15-17

Introducción
Si deseamos hablar con Dios, ¿Qué tenemos que hacer? Orar.

Y, ¿Si deseamos que Dios nos hable? Escudriñamos las Escrituras, porque en ellas tenemos la vida
eterna y ellas dan testimonio de mí, Juan 5:39.

En el tiempo de la iglesia primitiva, pocos años después de Cristo, la iglesia sufría persecuciones,
encarcelamiento y hasta muerte por profesar que se era cristiano, eran tiempos difíciles para los
cristianos de ese tiempo. Aun así, la iglesia era firme en la fe, no dejaban de hablar de Cristo y
mucho menos de leer las escrituras.

En nuestros tiempos, todavía vemos algo similar en la vida de los cristianos. Tener una biblia es
motivo de asesinato en algunos países. Miles de cristianos son violentados y asesinados por
aceptar que creen en Jesucristo o que leen la biblia. Los 5 primeros países con cristianos
perseguidos por dar testimonio de la fe son:

Corea del Norte


Irak
Eritrea
Afganistán
Siria

A Dios gracias que en nuestro país no sufrimos este tipo de tratos por parte del gobierno, tenemos
libertar de cultos, podemos profesar públicamente nuestra fe sin ser violentados y leer nuestra
biblia sin problemas. Aun así, tenemos que reconocer que hemos descuidado esta ultima parte,
estamos cayendo en un analfabetismo bíblico.

Tenemos que volver a nuestras raíces, centralizar el estudio de la biblia no solo en nuestra
congregación si no también en nuestras casas (devocional, altar familiar).

+ estudio bíblico – liturgias y otros programas.

En el tema de esta noche, hablaremos sobre la inspiración de la Escritura. La palabra “inspirada”


es la traducción de una palabra griega, que literalmente quiere decir “exhalada por Dios o soplada
por Dios”, es decir, ¡Cada palabra de las Escrituras viene de la boca de Dios!

Desarrollo
A continuación, analizaremos lo que el apóstol Pablo le dijo a Timoteo sobre la importancia de las
escrituras en su vida y en la iglesia. 2 Timoteo 3:15-17
1. Pablo reconoce que el carácter afable de Timoteo, así como su espíritu de servicio
se debe a que desde la niñez conoce las escrituras. 2 Timoteo 3:15
“Desde tu niñez conoces las Sagradas Escrituras, que pueden darte la sabiduría necesaria para la
salvación mediante la fe en Cristo Jesús.”

Tal parece que, los tiempos difíciles nos empujan a buscar de Dios. No debería ser así, la búsqueda
de Dios debe ser en todo tiempo, pero mayormente así sucede.

Como dice un canto “Dios permite las tormentas siempre para bendecir”, y Dios
siempre está esperando que en medio de la tormenta nos humillemos ante él.

El pueblo de Israel vivía de continuo en la idolatría y el pecado. Dios los castigaba, ellos se
arrepentían y pedían perdón, Dios los perdonaba y restauraba su condición de ruina. Era una
constante en la historia judía.

Específicamente, en el tiempo del exilio babilónico (a.c.), los judíos fueron conquistados por los
babilonios; perdieron su tierra, el templo que había construido salomón, así como la muerte de
muchos judíos. En medio de la cautividad y la esclavitud, recordaron la importancia de las
escrituras y de volverse a Dios. Fue allí que volvieron a las escrituras en los hogares, aparecieron
las primeras sinagogas (Edificio destinado al culto del judaísmo y lugar de estudio e interpretación
de la Escritura) y así evitaron perder su identidad como pueblo de Dios.

Aunque estaban en tierra extranjera, ellos hicieron de esa tierra extraña un


lugar para identificarse como pueblo de Dios.

Timoteo es fruto de esa herencia educativa de las escrituras en tierra extraña. A través de su
abuela Loida y de su madre Eunice, él fue enseñado con las escrituras no solo para ser practicante
de los rituales judíos sino también para ser salvo mediante la fe en Cristo Jesús.

Hoy en día, nosotros vivimos en un tiempo parecido al del exilio del pueblo judío, el mundo actual
es nuestra babilonia que nos rodea y nos quiere esclavizar en el pecado y alejarnos de los buenos
valores y principios bíblicos. En nuestra babilonia podemos aferrarnos a las escrituras, no perder
nuestra identidad como cristianos. “Ellos no son del mundo, como tampoco lo soy yo.” Juan 17:16

Es importante dedicar nuestro esfuerzo para que nuestras generaciones no pierdan su identidad
como cristianos, y solo a través de la enseñanza de las escrituras podemos lograrlo. Prov. 22:6

¡Que honor será ver a nuestros hijos como verdaderos cristianos en un mundo
lleno de maldad, porque desde niños serán instruidos con las Escrituras y
alcanzarán la salvación!
2. Toda la escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para
corregir y para instruir en justicia. 2 Timoteo 3:16
Como ya mencionamos, La palabra “inspirada” es la traducción de una palabra griega, que
literalmente quiere decir “exhalada por Dios o soplada por Dios”.

Teólogos hablan de la inspiración como el proceso misterioso por el cual Dios obró en los
escritores de la biblia, para escribir con autoridad y sin error. La inspiración es un misterio porque
La Escritura no explica específicamente como ocurrió. La única referencia que tenemos es en 2
Pedro: “Entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación
privada, porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de
Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo” (1:20-21).

Grandes hombres de Dios hablaron siendo inspirados por Dios:

Moisés: “Tu obligación es decir todo lo que yo te ordene que digas…” Éxodo 7:2
David: “El Espíritu del SEÑOR habló por medio de mí; puso sus palabras en mi lengua.” 2
Samuel 23:2
Todos los profetas. Jonás: “Anda, ve a la gran ciudad de Nínive y proclámale el mensaje
que te voy a dar”. Jonás 3:2

A parte de inspirada, la escritura ha demostrado a lo largo de la historia ser útil para el cuerpo de
Cristo, para su edificación. Así lo declara Hechos 20:32 “Y ahora, hermanos, os encomiendo a Dios,
y a la palabra de su gracia, que tiene poder para edificarlos y daros herencia con todos los
santificados.”

La Escritura es inspirada porque ha demostrado ser útil para el cuerpo de Cristo

La utilidad de las Escrituras se base en los siguientes aspectos:

Para enseñar: ¿Enseñar qué? Enseñar doctrina. Todo lo que enseñamos acerca de Dios
debe estar basado en las Escrituras y no de ideologías humanas. El propósito principal de
Dios en darnos las Escrituras es para que enseñemos a otros (esa es su utilidad).
¿De qué nos serviría mucho conocimiento de las Escrituras si no enseñamos a otros? De
nada. Jesús mismo, antes de ascender a los cielos, nos dio la encomienda en la gran
comisión de enseñar a otros; “enseñándoles todas las cosas que yo os he mandado…” Mateo
28:20.
Para redargüir: Esta palabra traducida es del griego “élegchos” que significa convencer. Así
como el Espíritu de Dios, que una de sus obras es convencer al mundo de pecado (“Y
cuando Él venga, convencerá al mundo de pecado, de justicia y de juicio; juan 16:8” ), asi mismo,
también una de las utilidades de las Escrituras es convencer al hombre de su pecado. Y si
usamos las escrituras para dicho propósito, seguramente traeremos al pecador a los pies
de Cristo. Convencer es hacerle ver el pecado/error a la persona. A nadie nos gusta que
nos hagan ver nuestros errores, porque nos sentimos avergonzados/apenados.
Este es el poder de las Escrituras (“Porque la palabra de Dios es viva y eficaz, y más
cortante que cualquier espada de dos filos; penetra hasta la división del alma y del
espíritu, de las coyunturas y los tuétanos, y es poderosa para discernir[a] los pensamientos
y las intenciones del corazón.” Hebreos 4:12).
Para corregir: Si redargüir / convencer deja ver el lado malo de las personas, la corrección
muestra el lado positivo del pecado; ya que las Escrituras no solo condena el pecado, sino
que muestra al pecador el camino hacia el perdón, del camino estrecho, hacia la
restauración.
Hebreos 12:5-7 nos dice: “5 y han olvidado ya lo que Dios les aconseja como a hijos suyos. Dice en la
Escritura: «No desprecies, hijo mío, la corrección del Señor, ni te desanimes cuando te reprenda. 6
porque el Señor corrige a quien él ama, y castiga a aquel a quien recibe como hijo.» 7 Ustedes están
sufriendo para su corrección: Dios los trata como a hijos. ¿Acaso hay algún hijo a quien su padre no
corrija?”

3. A fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda
buena obra. 2 Timoteo 3:17
El propósito de las Escrituras en nuestras vidas no es para presumir que sabemos de biblia o para
avergonzar a otros, sino para ponerla en práctica. Santiago 1:22 nos dice “No se contenten solo con
escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica.”

Si no ponemos en práctica las Escrituras, estamos cayendo en pecado. Santiago


4:17 “Así que comete pecado todo el que sabe hacer el bien y no lo hace.”

El apóstol Pablo señala en este versículo 17 que la finalidad de las escrituras es que el siervo de
Dios esté capacitado para toda buena obra. Y, ¿Qué entendemos por buenas obras?

Buenas obras son todas aquellas buenas acciones, todo lo que hacemos por nuestro prójimo. Si
cumplimos con el mandamiento de Dios de amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos,
podremos hacerle buenas obras.

Ejemplo de buenas obras: La parábola del buen samaritano. Lucas 10:25-37

La verdadera utilidad de las escrituras es para compartirla con otros, para llevarla a la práctica con
nuestro prójimo (buenas obras); convierte a una persona en un siervo de Dios que está
enteramente capacitado para toda buena obra.

Conclusión
Debemos escudriñar y atesorar las Escrituras en nuestros corazones, porque ellas nos harán útiles
en las manos de Dios. Por lo tanto:
Cuidémonos de no ser parte del analfabetismo bíblico en nuestra iglesia. Estudiemos la biblia.
Las escrituras es nuestra fuente de identidad cristiana en un mundo que atenta contra nuestros
valores y principios bíblicos.
Es más provechoso iniciar la formación en las Escrituras desde la niñez “para que cuando sea viejo
nunca se aparte de ellas. Prov. 22:6”.
Las escrituras son útiles porque son inspiradas. Son útiles para enseñar, convencer y corregir.
“Léela y serás sabio, practícala y serás santo, créela y serás salvo tu y toda tu casa”.

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