en ceapar Por MARCIAL CORDOVEZ AGUIRRE, EL CIELO EN LA TIERRA IGN el momento de leerse el epigrafe de es te articulo, se hard esta pregunta: A qué cielo se alude aqui? No a otro, por cierto, sino al que Dios formar allé en el SE xtremo Sur de nuestro Territorio, Ese ticlo To constituye una Naturaleza salvaje excepcio- nalmente bell El vate mAs insigne y soflador tiene en el Sur de nuestro pais Ia mejor fuente de inspiracion para arranear de las cuerdas de oro de su lira sublimes armonias. No hay duda, jaquelio para poesias en metro heroico! aquello para Un poema en estrofas divinas, ;Somos el pais de la poesia, pero jqué poesia! Aqui detisron nacer los bardos mas insignes y los pintores mas eximios, Aqui ellos se habrian echo Soblemente eélebres. Dios nos hizo el mayor de los bienes. Quiso atra nos a El, y nos dié aqui abajo un Edén, clertamente. Muy grande, muy hermoso es todo, pero nada me: jor que el Lago cristalino en que se mira uno de ihuestros ‘voleanes, Este lago es el Lianquihue. Es, fa su vista, cuando mas se habla de tener nosotros aqui un Paraiso. Junto con observarse, extasiado, la'inmensa fuente azul, adviertese 1a extraordinaria, Delleza de los alrededores. Esta todo cubierto de una LAGO LLANQUIHUE De esto tan grande en nuestra patria hemos que- rido escribir hoy algunas lineas, ; Atrevimiento! ¥ todavia jen prosa!, Cuando el verso mismo no pue- de dectr'sino cosas ast ‘Conocemos el Sur. Niatn entre nosotros mismos tenemos una idea cabal de lo que es nuestra region lacustre. ;Increl- let ;¥ alld, desde el principio del mundo, ‘con su deslumbrante hermosura, los. lagos de esmeralda y fe zafiro, los bosques maravillosos, los volcanes ne- vados, los rios eristalinos y el mar azul! Si"en lejanias paradisiicas, bellezas inimagina- bes! ;Nada igual Como eso para ia delectacion del sspiritu! ;Luego, al momento de verlo, hay que pre- Fintarse: {No estaria aqul, en realidad, el Paral- Lamar Esmeralda a uno de nuestros lagos, por color de In pledra preciosa de su nombre, es muy Poco. Hay que buscar otra cosa que diga mas, que Aga todo lo que es 1; pero no se encontrard, nada. vegetacion Iujuriosa. Es el jardin natural que cir- cunda al Lago, Preséntale éi, como un homenaje a tuna diosa, las mas hermosas flores sllvestres; el mismo rendimiento que, por su parte, le tributan, ‘con su dulce cantar, y en coro, los pajarillos de los osques vecinos, El piloto — nuestro ruisefior — no esta alli en et concierto; est alegrando donde la Naturaleza le fijo que estuviera: en las playas del mar y en los campos inmediatos. EI Lago do eristal es un espejo en dias de calma. Con viento fuerte se agitan mucho sus aguas. En- tonces otro panorama, otro paisaje, otra belleza. A orillas del Llanguihue se ha tocado mucha mdsica Y¥ declamddose mucha poesia. Hay una verdadera lo- Sura por ver el Lago encantador. Hemos visto co- rer hacia él y volverse triste por tener que alejarse de sus orillas, ¥ no se diga que los chilenos somos malos. De lo més hermoso que hay en la tierra he- mos hecho duefa casi exclusiva ‘a vin" colonia ex.10 tranjera. Allt estuvo feliz ella desde un principio y continfan estandolo hoy fos que de ella vinieron, ‘Sien Europa hay un Vesublo y un Etna. y ¢l Asia un Fusiyama y un Krakatoa, en Chile nomos un Osorno, un Villarriea, un Caibueo, un LAGO LLANQUIHUE nador, Aqui estén también esos gigantes, con sus crateres ¥ masas enormes, invitando a verlos a to- as las gentes: alas de Chile y a las del mundo En general, nuestros volcanes za orografiea, que otra cosa mas tipos de bel rho entran en act- on ug vidad sino muy rara vez. Los del Sur det pais, cuan- do tal ocurre, no causan el menor dano. Habtia que creer que se ies ordené tener mucho cuidado.. Ha Gebido ser asi porque no podia haber horrores don de hay tantos encantos: En todo tiempo Chile es hermoso. Desde luego, nues- tro clima no puede ser mejor. Pero hay mas: tenemos todos "los ellmas, més todos ellos forman como “uno s6lo:, no se hacen sentir marcedas ‘iferencias en cle tas latitudes, ;Cl- ma magnifico tam- ign! {Fellces os que somos de Chi Iey. vivimos en Chile: La Region Occ dental Sur ea a fnismo ‘muy bella Por ia nieve alle énelerta época ase mméjase aa Sue- Gla 0 la Nonuegs. Los rusos dirian a ie'Rusia Los que van al Sur = dedican mas & comer buen pescado ybuen Prarisco, que a ver Sus hermosras, hos’ hacen, mal hablando todo agquello, Tan ben nos to’ hacen Jos. que’ dicen que aqui hay muchos terremotos. a Chile’ no tlembla con gran ‘fuera desde S64. En las provinelas mas Australes, esto donde ests. 1o’me- Sor, io mas’ indo, ito’ uembla, {Pot Certo! ;Tenia ‘que fer aat{ EL lugar elas. maravilas fa Peria det Sur, hermoso Jardin’ de alla, tenia. que eS tar bre de tem- lores 'y_terremo- toa Sin ta Huvia, Sur no seria mi hho seria, la. terra de la poesia ¥ de ios ensuctios.” Por die pronto, no exise tirfan fos bosques, nl los tagos; fos riow ni Ins le- ves, y atin, tal vez, las tlsmas nubes,.. Tampoco se vérian ios arcos iris hasta en nimero de. tres El Sur es un encanto s6lo por el agua del cielo. ‘Tenemos en Chile muy lindos Ventisqueros, tém- panos y llelos multicolores en las altas eumbres. La6n ugar iu luz juega en ellas y hace aparecer @ la nieve con tintes que no tiene. Juega, también, en los abismos de las ‘montafias, dindoles una mayor perspectiva yuna’ mayor beileza. Todo esto en la Patagonia, Abunda en la region petrolifera y aurifera el cis- ne de cuello negro, llenando los lagos y 10s rios. Llenan también las pampas y las selvai los aves: truces, los clervos, los z0rros azules, los guanacos y los pumas. El céndor, dueio y sefior de las cumbres andi- nag, y-simbolo herdidico en nuestro escudo de ar a, se ve mucho en Ia zona de que estamos ha- dlando. Otro péjaro de gran tamafio y gran hermo- ura disputa alld el predominio del mar Pacifico ¥ del Atlintico: el niveo albatrés. Vuela en ellos én resaltante contraste con el verde o el azul del océano. Vuelan, asimismo, muchas gaviotas cerca de las costas. Completan ellas, en el extremo Sur, fel cuadro magnifico que ofrece la Naturalesa en las fojanas tierras de mi patria, cerca del Polo. siderales un bien muy grande para el hombre, Desde luego, por lo que respecta a nosotros, el grupo de estrellas en forma de cruz, nos ha favorecido mu- cho siempre. Es la mejor ‘gula para nuestros ma- inos, en algunos grados de latitud y longitud, en el Norte y Sur del Litoral. Cremos que esto otro es, asimismo, una gracia mas a esta tierra bendita ¥ de. promision, El Supremo Hacedor nos tuvo muy en su pensa- miento, al crear el mundo. ;Fuimos tan favoreci- dos! Ahi estd, entre tantos, uno de sus mas gran- des dones: la Region de los Lagos, y, destacandose hermosisimo en ‘ella, EI Lianquihue, 'Conociendo a Gste, preferentemente se habrian apresurado a can- tarlo Horacio, Virgilio, Ossidn. jOh! {qué poesias tan subgetivas habrian’sido las suyas! Pero siempre no habrian expresado elias todo 10 que dice al alma la contemplacion de esa belleza. El riel une desde hace afios ya la parte meridional de Chile con el Norte. Un magnifico servicio de tre- RIO PETROHUE, Para el naturalista 0 cualquier hombre de ciencia, hay un vasto campo de estudio en la Patagonia, La flora y la fauna alld son muy interesantes, y Jo fué mucho mAs desde el dia en que se encontra- on restos el Mylod6n 0 Megatherium... y del Ca- allo Lanar. 'En los bosques o selvas de no muy al Sur, embal- saman la atmésfera las mis hermosas florea sil tres; hace lo mismo el arrayan, el laurel y el cane- Jo, Reina en esos bosques 0 en esas selvas el co- pihue rojo y el blanco, flores que, junto con nues: tro cielo, sirvieron para la bandera que tanto ama- Emociona, impone, hace pensar y enmudecer el profundo ‘slienclo de’ In Naturaleza, alld donde los fagos lucen su color de esmeralda, de zafiro y de plata, Ese silencio existe y es'continuo para” que, como en un templo, lo guarde también, reverente, el hombre, alli donde esta Dios. Por poco que se es: eriba sobre la ‘zona austral del pais, no se puede Gejar de decir algo de la Estrella Polar y de la Cruz ddel Sur, Con fundada razin se vé en estos mundos nes tiene agu{ el turista para ir donde quiera, Nues- tros Ferrocarriles, al decir de los extranjeros, son ‘unos de los mejores del mundo. Hay también vapores para todos los puertos, islas, estuarios y canales, y Rospedaje confortable donde’ se vaya. Ahora, en ' el Indo lugar Hamado Pucén, existe un hotel de primer ‘orden, que costo millones de pesos. En él pueden es- tar muy bien principes y aun reyes... Se puede ir también en automévil hasta Puerto Montt y de agul-a otros puntos, pero es més cémo- do el viaje en aeroplano, cosa que se haré igualmen- te, dentro de poco hasta el mismo Magallanes. ‘A las Provincias Australes, cada vez més ilenas de turistas, se debe ir haciéndose cualquier sacrifi- lo, Ninguna persona culta y de sentimiento, ningu- a que ame la naturaleza, puede dejar de ver lo {que es ella en nuestro pais. Lo hemos dicho y lo re~ petimos: ea lo mis admirable y grandioso que cabe [haginar. Por ello y por todo lo demas — que es mucho — es que creemos que el Sur de Chile es el Cielo en Ia Tierra... INCOGNITO.