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PUBLICADO: 17 DE JULIO DE 2017 | TOMO: 2 |NÚMERO DE ARTÍCULO: 17117
Mejores indicadores energéticos
para el desarrollo sostenible
Peter G. Taylor, Kathleen Abdalla, Roberta Quadrelli e Ivan Vera
El Objetivo de Desarrollo Sostenible 7 de la ONU tiene como objetivo ofrecer energía asequible, confiable, sostenible y
moderna para todos. El seguimiento del progreso hacia los objetivos de este objetivo puede impulsar mejores estadísticas de
energía y capacidad de recopilación de datos, y requerirá nuevos indicadores que también consideren la interacción con otros objetivos.
Los indicadores pueden tener un papel importante en
yo
la comunicación de cuestiones energéticas relacionadas
con el desarrollo sostenible a los formuladores de políticas.
y el público Los indicadores energéticos no son meros
datos. Más bien, suelen combinar estadísticas energéticas
detalladas con otra información (como una medida de la
actividad en un sector, por ejemplo, el producto interior
bruto de la economía, la superficie construida de los
hogares o las toneladas de acero
producido por la industria) para proporcionar una
comprensión más profunda de los desafíos sociales,
ambientales y económicos que plantea el suministro y el uso
de la energía y para resaltar relaciones importantes que de
otro modo no serían evidentes.
Los indicadores pueden ayudar a
mejorar la comprensión de un problema, aumentar
su visibilidad y promover acciones adicionales para
abordar un problema pero, como ocurre con muchas
herramientas, también pueden ser mal utilizados, en
particular porque a menudo están necesariamente integrados
en los procesos políticos. En consecuencia, la política puede
ser clave para la forma en que los formuladores de políticas
interpretan y utilizan los indicadores, y los indicadores
inapropiados o faltantes pueden, deliberadamente o no,
llevar a que se tergiversen o se ignoren cuestiones
políticamente desfavorables. Por lo tanto, si bien este
comentario se centra en los aspectos técnicos del desarrollo
de indicadores energéticos para hacer un seguimiento del
desarrollo sostenible, también reconocemos que es importante
tener un amplio escrutinio de los procesos mediante los cuales
se eligen los indicadores, la forma en que se construyen, cómo
se utilizados y quién decide estos asuntos.
Los indicadores y estadísticas para medir las
tendencias en el desarrollo sostenible tienen una larga
historia de uso por parte de las Naciones Unidas (ONU),
que se remonta al Informe Brundtland de 19871 . Más
recientemente, se utilizaron indicadores para hacer un
seguimiento del progreso con respecto a los Objetivos de
Desarrollo del Milenio (ODM) adoptados en 2000, aunque la
energía no se incluyó como un objetivo específico. En
ENERGÍA DE LA NATURALEZA 2, 17117 (2017) | DOI: 10.1038/nenergy.2017.117 | www.nature.com/natureenergy
© 2 0 1 7 M ac mill an P u bl ishers Li mit ed, parte de S p ri nger N atur e. Reservados todos los derechos.
En 2015, la Asamblea General de las Naciones Unidas
adoptó una Agenda 2030 integral para el Desarrollo Sostenible
con 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), incluido uno
sobre energía limpia y asequible para todos (ODS 7), y acordó
desarrollar indicadores para medir el progreso con respecto a
ellos. El ODS 7 comprende cinco metas: garantizar el acceso
universal a los servicios energéticos; aumentar la cuota de
energías renovables; duplicar la tasa mundial de mejora de la
eficiencia energética; cooperar internacionalmente en
investigación y desarrollo; y ampliar la infraestructura y mejorar
las tecnologías.
Si bien algunas de estas metas son claramente
relevantes como objetivos globales, las decisiones
políticas a nivel nacional serán cruciales para alcanzar muchas
de ellas. Por lo tanto, los indicadores apropiados a nivel
nacional son clave para comprender las complejidades
involucradas y para medir el progreso.
La inclusión de la energía como ODS puede actuar
como catalizador para que los países y las organizaciones
internacionales redoblen sus esfuerzos para recopilar
estadísticas y desarrollar indicadores para seguir el progreso
hacia el logro de una energía limpia y asequible para todos.
Los desafíos clave incluyen una mayor creación de capacidad
para incorporar los indicadores básicos del ODS 7 y la
recopilación de datos subyacente en las estadísticas nacionales.
programas, mejoras a las metodologías de indicadores
actuales, la adopción por parte de los países de un
conjunto más amplio de indicadores para reflejar mejor las
complejidades de los contextos energéticos nacionales, y
el desarrollo de nuevos indicadores para rastrear el nexo
entre el ODS 7 y los otros ODS.
Mejorar la disponibilidad de estadísticas
La construcción de indicadores energéticos
confiables para monitorear el progreso del
desarrollo sostenible solo es posible si las estadísticas
apropiadas están disponibles a nivel nacional. Por el
momento, el panorama es bastante mixto. Números crecientes
de
comentario
países están reconociendo la importancia de una sólida
base de evidencia estadística para
ayudar a informar la formulación de políticas energéticas.
Muchos han logrado un progreso considerable en los últimos
años al mejorar tanto la calidad como la amplitud de los
datos recopilados, a menudo con la ayuda de esfuerzos
regionales y globales (Cuadro 1).
Sin embargo, también es cierto que muchas oficinas
nacionales de estadística (o instituciones equivalentes) están
sobrecargadas, a menudo hay una falta de coordinación entre
los diferentes ministerios que tienen datos relevantes, y los
recursos para la recopilación de energía y estadísticas
relacionadas tienen que competir con otros igualmente.
importantes necesidades de recopilación de datos. Como
resultado, muchos países solo tienen los datos para construir
un balance energético relativamente agregado, a menudo sin
detalles sectoriales del lado de la demanda. Otros datos
necesarios para construir indicadores energéticos, tales como
medidas de actividad, también pueden no estar fácilmente
disponibles, particularmente para indicadores sectoriales más
detallados.
Al reconocer esta necesidad, el ODS 17 trata
sobre el monitoreo y la rendición de cuentas e incluye dos
objetivos: mejorar el desarrollo de capacidades para
aumentar la disponibilidad de datos confiables, oportunos
y de alta calidad, y apoyar el desarrollo de capacidades
estadísticas en los países en desarrollo. Hay una serie de
iniciativas internacionales involucradas en dicho trabajo,
incluida la Asociación en estadísticas para el desarrollo en
el siglo XXI y la Asociación global sobre datos de desarrollo
sostenible. Específicamente sobre energía, el Grupo de
Trabajo Intersecretarial sobre Estadísticas Energéticas reúne
a más de 20 organizaciones internacionales para trabajar en
mejorar la disponibilidad y calidad de las estadísticas
energéticas internacionales, incluso para su uso en
indicadores. El G20 también lanzó recientemente una iniciativa
sobre eficiencia energética que identifica los datos de uso
final de energía y las métricas de eficiencia energética como
un área clave para la colaboración2 .
1
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Caja 1 | Uso de indicadores energéticos para el seguimiento del desarrollo sostenible.
La ONU ha reconocido durante mucho tiempo la
necesidad de mejores indicadores para rastrear la sostenibilidad
desarrollo. En 1995 inició el proceso de desarrollo
de Indicadores de Desarrollo Sostenible, con aportes
de una amplia gama de gobiernos, organizaciones
y expertos18. Si bien se incluyó la energía, su
complejidad e importancia para lograr el desarrollo
sostenible requerían mayor elaboración. Por lo
tanto, un grupo de organizaciones internacionales,
encabezado por la Agencia Internacional de Energía
Atómica, desarrolló un conjunto de Indicadores
Energéticos para el Desarrollo Sostenible (EISD)12
que posteriormente fueron probados a nivel nacional
por varios países19.
Varias otras organizaciones
internacionales y sus países miembros
tienen programas para producir lineamientos
metodológicos y construir indicadores energéticos
detallados de varios tipos. Entre los ejemplos
notables se incluyen los de la Agencia Internacional
de Energía (AIE)20
y la Comisión Europea (a través de Eurostat21, el
Centro Común de Investigación22
y el proyecto ODYSSEE-MURE). Aunque pocos de
estos programas tienen un objetivo específico
Se puede hacer más. Con base en los ODM,
un informe reciente destacó una serie de
lecciones aprendidas y desafíos clave
pendientes, incluida una mejor alineación del
monitoreo internacional con los datos nacionales,
el manejo de fuentes de datos y estadísticas en
conflicto, y un mayor cierre de la brecha entre las
necesidades y el suministro de datos3 . Algunos han
argumentado que los conjuntos de datos oficiales
nunca entregarán todas las estadísticas necesarias
para rastrear la sostenibilidad debido a la falta de
recursos y motivaciones políticas. Más bien, abogan
por una participación mucho mayor de científicos
ciudadanos, organismos de control independientes,
empresas del sector privado y organizaciones de
terceros4 . Si bien dichas fuentes de datos bien pueden
desempeñar un papel cada vez mayor en un futuro de
"datos inteligentes", nuestra opinión es que, por
razones de cobertura, comparabilidad y legitimidad5 ,
esto deberá hacerse en asociación con los proveedores
de estadísticas oficiales que tendrán un papel crucial
de coordinación. si estas fuentes no van a agravar lo
que la OCDE describe como “la cacofonía de las
discrepancias de datos”3 .
Claramente, la creación de capacidad
estadística oficial requerirá recursos adicionales,
pero la experiencia también muestra que hay una
serie de cosas que los países pueden hacer, con el
apoyo de la comunidad internacional, que tienen un
costo relativamente bajo. Estos incluyen: identificar
estrategias para elevar el perfil de las estadísticas y
obtener apoyo en el
2 ENERGÍA DE LA NATURALEZA 2, 17117 (2017) | DOI: 10.1038/nenergy.2017.117 | www.nature.com/natureenergy
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enfoque de desarrollo sostenible, muchos de los
indicadores que han desarrollado, como los que
rastrean la eficiencia energética, la penetración de
las energías renovables y los impactos ambientales
del uso de la energía, son claramente relevantes.
También existen varias iniciativas a nivel de país,
incluso en Canadá, el Reino Unido y los Estados
Unidos.
Más recientemente, se han iniciado
algunos programas regionales que
involucran a países en desarrollo, incluso en
América Latina23 y África24,25, mientras que
también están comenzando a surgir iniciativas nacionales26–29
Estos generalmente se enfocan en
desarrollar indicadores que intentan reflejar los
encontrados para la AIE y los países de la UE,
dentro de las limitaciones de disponibilidad de
datos. Hay menos esfuerzos que se adaptan
específicamente a las necesidades de los países
en desarrollo más pobres, por ejemplo, en las
metas del ODS 7 para el acceso a la energía y
cuestiones de financiación. Las excepciones
incluyen el trabajo dirigido por la AIE y el Banco
Mundial bajo la iniciativa Energía Sostenible para
Todos (SE4All) de la ONU, que ha desarrollado
un Marco de Seguimiento Global, y la Perspectiva
Energética de los Pobres de Acción Práctica.
nivel político; compartir conocimientos sobre buenas
prácticas en la recopilación de datos y arreglos
institucionales; incorporar preguntas relacionadas con
la energía (por ejemplo, sobre el acceso a la energía)
en las encuestas de hogares existentes; y mejorar la
capacidad de los países para comunicar y compartir
datos entre instituciones públicas (reuniendo tanto a
los proveedores de datos como a los usuarios de
datos). Además, la comunidad internacional puede
ayudar a reducir la carga de los países evitando
múltiples solicitudes de datos y armonizando
definiciones y metodologías. La evidencia de los ODM
muestra que, con suficiente voluntad política, los
países pueden enfrentar el desafío de los datos: la
disponibilidad de datos para la mayoría de los
indicadores de los ODM mejoró en 174 países en
desarrollo, con una cantidad de países con datos de
tendencia para entre 16 y 22 indicadores. serie que
aumenta del 2% en 2003 al 83% en 2012 (ref. 6).
Mejorar la precisión de los indicadores
Incluso cuando se dispone de las estadísticas
necesarias, se deben tomar decisiones importantes
sobre qué tipo de indicadores de energía son los
más apropiados para medir el progreso en relación
con los objetivos de desarrollo sostenible.
Se han desarrollado muchos criterios
diferentes para ayudar con esta selección y las
inevitables compensaciones que están involucradas.
(como precisión científica versus facilidad de
implementación)7–9. Por ejemplo, la División de
Estadística de las Naciones Unidas (UNSD, por sus
siglas en inglés) recomienda que los indicadores
sean relevantes, metodológicamente sólidos, medibles,
fáciles de comunicar y acceder, limitados en número y
centrados en resultados10.
Una discusión sobre si los indicadores
propuestos del ODS 7 cumplen con estos requisitos,
o cómo fueron acordados, está más allá del alcance
de este Comentario. Más bien, creemos que la
inclusión de un objetivo energético dentro de los
ODS es un gran paso adelante en el reconocimiento
del importante papel que juega la energía en el
desarrollo sostenible.
En consecuencia,
. la prioridad a corto plazo
debe ser asegurar que los países tengan
métricas robustas y confiables para monitorear el
progreso hacia los cinco objetivos bajo SDG7. El
trabajo sobre esto está siendo coordinado por el
Grupo Interinstitucional de Expertos en Indicadores
de los ODS y se ha propuesto un conjunto inicial de
indicadores (Tabla 1). El progreso hacia algunos de
estos objetivos, como la proporción de energías
renovables, requiere indicadores relativamente simples
y se puede construir utilizando datos que se encuentran
en un balance energético nacional estándar (aunque
aún es posible mejorar). Sin embargo, otras metas,
como las del acceso a la energía, idealmente utilizarían
indicadores más complejos y detallados. La formulación
actual del indicador de acceso a la energía es binaria:
un hogar tiene o no tiene acceso a la electricidad.
Sin embargo, en muchas partes del mundo, tener
una conexión eléctrica (ya sea a la red nacional, a
una mini-red local o a una fuente de energía
independiente, como un sistema solar fotovoltaico)
no garantiza que el suministro de electricidad sea el
adecuado. de calidad y confiabilidad adecuadas, o
es asequible. El Banco Mundial está trabajando en
un enfoque de varios niveles para categorizar el
acceso a la energía, que pretende capturar estos
aspectos de confiabilidad y asequibilidad11 y que la
ONU anticipa que permitirá una medida más refinada
del progreso hacia el objetivo de acceso a la energía.
Las mejoras a los otros indicadores de los ODS
de energía también deben considerarse a lo largo de
tiempo, siendo los más urgentes aquellos para
medir el progreso en la eficiencia energética (ver
Tabla 1).
Las metas propuestas en el ODS 7
abordan claramente algunos de los aspectos
clave de la energía que son relevantes para el
desarrollo sostenible y, por lo tanto, deberían ser el
foco de indicadores comparables a nivel mundial. Sin
embargo, otros temas pueden ser igualmente
importantes en algunos países, pero no en otros. Por
ejemplo, reducir la contaminación del aire por la
generación de electricidad o por cocinar puede ser
un objetivo clave de desarrollo sostenible para un país
en particular, mientras que en otro puede ser reducir
la dependencia de las importaciones de energía.
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Tabla 1 | Indicadores actuales y mejorados para el seguimiento del Objetivo de Desarrollo Sostenible 7.

Meta ODS7 (para 2030) Indicadores actuales (iniciales) para realizar un Ejemplos de indicadores potenciales Áreas para seguir mejorando
seguimiento de los objetivos más detallados

7.1 Garantizar el acceso universal a
servicios energéticos asequibles, fiables y
modernos
7.1.1 Proporción de la población con acceso a
la electricidad
7.1.2 Proporción de la población que depende
principalmente de combustibles y tecnología
limpios
Desagregación del acceso a la electricidad por El Banco Mundial está trabajando en un marco de múltiples
población rural y urbana niveles para medir el acceso a la energía para mejorar la
naturaleza binaria del indicador actual.

7.2 Aumentar sustancialmente la participación de
las energías renovables en la combinación
energética mundial
7.2.1 Participación de las energías renovables en
el consumo total de energía
Desglose de la participación de las
energías renovables en la producción de
electricidad, la calefacción y los combustibles
para el transporte
El indicador actual no distingue si la energía renovable se
produce de forma sostenible. Los datos sobre biomasa
sólida son muy inciertos en muchos países y la información
sobre energías renovables fuera de la red es limitada en
muchos balances energéticos oficiales.

7.3 Duplicar la tasa mundial de mejora
de la eficiencia energética
7.3.1 Intensidad energética medida en términos
de energía primaria y producto interior bruto (PIB)
Desglose de la intensidad energética por sector
principal (hogares, industria, comercio y servicios,
transporte)
La intensidad energética es un indicador imperfecto
de la eficiencia energética y puede verse afectada por
una serie de factores (como el clima, la estructura de la
economía, la naturaleza de las actividades económicas,
etc.) que no están necesariamente vinculados a la

eficiencia pura.
El trabajo de varias organizaciones ha sugerido métricas
mejoradas, incluido el uso de indicadores físicos para
algunos sectores (por ejemplo, uso de energía por
tonelada de producción)

Las columnas 1 y 2 se basan en definiciones desarrolladas por las Naciones Unidas (consulte 'Objetivos e indicadores' en http://go.nature.com/2syCnUJ). El trabajo sobre los indicadores para los objetivos 7a (mejorar la cooperación internacional
en energía limpia) y 7b (expandir la infraestructura y mejorar la tecnología), que no se muestran en esta tabla, está en curso, y actualmente el Grupo Interinstitucional y de Expertos está discutiendo una serie de mejoras. Grupo sobre Indicadores
de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Por lo tanto, se necesitarán indicadores energéticos
adicionales específicos de cada país para hacer un seguimiento
temas que son prioridades nacionales. Los países deben ser
alentados y apoyados en la interpretación del objetivo de
energía limpia y asequible dentro de su contexto nacional y
Sin embargo, muchas de estas técnicas, aunque prometedoras
a largo plazo, son relativamente complejas y requieren
importantes datos, por lo que no son necesariamente la mejor
opción a corto plazo para controlar los problemas. Como punto
de partida, se puede obtener información significativa sobre
reconocimiento de que la energía es fundamental para casi
todos los grandes desafíos que enfrentan los países hoy
en día. El seguimiento del progreso con respecto a las
metas del ODS 7 requerirá estadísticas e indicadores de
energía confiables que sean relevantes a nivel nacional y

luego deben seleccionar los indicadores apropiados (por
ejemplo, según lo identificado por los Indicadores de Energía
de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sostenible; EISD)12
que se actualizan periódicamente. , relevante para las
prioridades nacionales y utilizado para informar el proceso de
formulación de políticas.
Desarrollo de indicadores de nexo
Dada la naturaleza compleja y multifacética del
algunos de los vínculos clave entre los problemas del desarrollo
sostenible mediante el uso de enfoques relativamente simples,
como el desglose de los indicadores de energía en categorías
particulares (por ejemplo, el seguimiento del acceso a la
energía por parte de escuelas, hospitales, etc.). ), calculando
las tasas de acceso a la energía por género del cabeza de
familia y combinando conjuntos de datos existentes para crear
nuevos indicadores, como el uso de agua por kWh de
electricidad generada por diferentes tipos de centrales
eléctricas. Es posible que algunos de estos indicadores deban
comparables entre países. Si bien los desafíos de datos
que plantea la construcción de estos indicadores son
sustanciales, la experiencia de los ODM es alentadora.
El enfoque político proporcionado por SDG7 puede ofrecer
un catalizador similar para la acción en materia de energía.
De hecho, hay ejemplos en los que esto ya está
sucediendo, incluido el trabajo del G20 y la iniciativa SE4ALL.
Si bien no existe una solución única que conduzca a mejores

desarrollo sostenible, también es importante que los
formuladores de políticas y otros tomadores de decisiones
sobre energía no ignoren el potencial de sinergias y conflictos
entre el ODS7 y los otros ODS13.
Actualmente hay mucha investigación sobre la relación
entre la energía y temas como los alimentos y el agua.
Sin embargo, los vínculos de la energía se extienden
mucho más allá, incluidos los ODS sobre salud, educación,
género, crecimiento económico, industria, ciudades y clima.
Es vital que los países traten de comprender estas
interdependencias. Existen modelos informáticos que pueden
cuantificar muchas de estas interrelaciones y se ha sugerido
una amplia variedad de indicadores compuestos para combinar
diferentes objetivos de desarrollo sostenible14–16 .
elaborarse a nivel subnacional para resaltar las variaciones
dentro de un país, como las diferencias que a menudo existen
entre las zonas urbanas y rurales.
El informe de seguimiento de Energía Sostenible
para Todos (SE4ALL) de 2015 analiza la necesidad de
indicadores de nexo17, pero está claro que se necesita
pensar mucho más sobre qué tipo de indicadores son
deseables desde una perspectiva política y qué es posible
actualmente, dada la disponibilidad de datos. .
El camino a seguir
La inclusión del ODS7 dentro del 2030
Agenda para el Desarrollo Sostenible es
estadísticas de energía, al combinar fuentes de datos
tradicionales y nuevas y aprovechar las mejores prácticas, los
países, con el apoyo de la comunidad internacional, pueden
enfrentar el desafío de proporcionar datos confiables, oportunos
y comparables. .
Aunque las prioridades a corto plazo
debe estar en desarrollar indicadores apropiados
para rastrear el progreso en relación con las metas
del ODS 7 y desarrollar la capacidad estadística
necesaria para recopilar datos; dichos indicadores
deben ser solo un punto de partida.
Actualizar y expandir el trabajo de EISD, al mismo tiempo
que se basa en la experiencia de otras iniciativas de
indicadores, podría resolver el dilema de desarrollar
indicadores que sean metodológicamente sólidos,
medibles y

ENERGÍA DE LA NATURALEZA 2, 17117 (2017) | DOI: 10.1038/nenergy.2017.117 | www.nature.com/natureenergy 3

© 2 0 1 7 M ac mill an P u bl ishers Li mit ed, parte de S p ri nger N atur e. Reservados todos los derechos.
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relevante a nivel global y útil para los tomadores de
decisiones a nivel nacional.
Sin embargo, existe el peligro de que tener
múltiples objetivos e indicadores pueda alentar un
enfoque fragmentario del desarrollo sostenible, en
lugar de una perspectiva más holística. Por lo tanto,
es vital que las comunidades de políticas, estadísticas
e investigación trabajen juntas para ir más allá de
los indicadores energéticos actuales y desarrollar
una jerarquía de indicadores de próxima generación
para ayudar a comprender el nexo entre la energía
y los otros ODS.
Finalmente, reconocemos que, si bien las
metas y los indicadores pueden ser
herramientas muy útiles para respaldar la
formulación de políticas gubernamentales y ayudar
al público a hacer que esos gobiernos rindan
cuentas, son solo eso, herramientas, y su búsqueda
ciega no debe convertirse en un fin en sí mismo. ÿ
Peter G. Taylor 1,2,3*, Kathleen Abdalla4 , 586 (2003).
1 Africana de Energía, 2015).
Roberta Quadrelli 5 e Ivan Vera4 están en Integrated Centro
Energy Research, Universidad de Leeds, Leeds LS2 9JT,
Reino Unido. 2 Instituto de Investigación de
Sostenibilidad, Escuela de la Tierra y el Medio Ambiente, Universidad
3 12. Indicadores energéticos para el desarrollo sostenible: directrices y metodologías
de Leeds, Leeds LS2 9JT, Reino Unido. Bajo
Grupo de Investigación de Energía de Carbono, Escuela de Ingeniería
Química y de Procesos, Universidad de Leeds,
4 ENERGÍA DE LA NATURALEZA 2, 17117 (2017) | DOI: 10.1038/nenergy.2017.117 | www.nature.com/natureenergy
© 2 0 1 7 M ac mill an P u bl ishers Li mi ted, parte de S p ri nger N atur e. Reservados todos los derechos.
4
Leeds LS2 9JT, Reino Unido. División para el Desarrollo
Sostenible, Departamento de Asuntos Económicos y Sociales,
Edificio de la Secretaría de las Naciones Unidas, 405 East 42nd
Street, Nueva York NY 10017, EE. UU.
5 Agencia Internacional de la Energía, 31–35 Rue de la
Fédération, 75739 Paris Cedex 15, Francia. *correo
electrónico: pgtaylor@leeds.ac.uk
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