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“Natividad de M a r í a ”
*CANTO DE ADORACIÓN
(Carmen)
Lectura Bíblica: Hermanos Escuchemos lo que hoy quiere decirnos Jesús en su palabra,
de su llegada al mundo por amor a la humanidad.
Cristo vino al mundo de la siguiente manera: estando María, su madre, desposada con
José, y antes de que vivieran juntos ……
*CANTO
(Yuyi)
La Virgen María fue la Madre de Jesús y, con este hecho, se cumplieron las Escrituras y
todo lo dicho por los profetas. Dios escogió a esta mujer para ser la Madre de su Hijo. Con
ella se aproximó la hora de la salvación. La vida de la Virgen María nos enseña a alabar a Dios por las
gracias que le otorgó y por las bendiciones que por Ella derramó sobre el mundo. En esta Hora
de Adoración, encomendemos todas nuestras necesidades a Ella. Pidamos que nos ayude
a estar siempre cerca de su Hijo Jesús.
*CANTO
PRECES (Carmen)
T.
Contempla, Señor, a la Madre de tu Hijo y escúchanos.
Para que, como hijos de la Iglesia, nos entreguemos con fe, generosidad y celo a la obra de la
evangelización, en especial para con los más pobres y necesitados. Oremos:
T.
Contempla, Señor, a la Madre de tu Hijo y escúchanos.
Para que sepamos hacerte conocer, admirar y amar a Ti, María, la primera creyente,
discípula y testigo de Cristo y la primera evangelizadora, Madre del Señor y madre
nuestra. Oremos:
T.
Contempla, Señor, a la Madre de tu Hijo y escúchanos.
Para que las almas de nuestros fieles difuntos que nos han precedido con el signo de la fe, reciban de
Dios la salvación y la plenitud de vida en el cielo. Oremos:
T.
Contempla, Señor, a la Madre de tu Hijo y escúchanos.
*¡Oh primer creyente, primera en darle adoración,
Y llegado el tiempo, primera en exponerlo en hora santa
Aquella noche en que Jesús nació!.*
Oración Final: (opcional)
Amadísimo Jesús, al despedirte de María, dolorosa como ninguna Madre, desde ese
instante… Mira en Ella, a tantas madres, a tantas esposas, a tantas almas que lloran
hoy, ante el Sagrario, la ausencia de seres muy queridos que tienen alejados del
hogar o de tus templos a un hermano, al esposo, o a algún hijo… alejados, del
sagrario de tu Corazón, que es la resurrección de los caídos… ¡ Oh, dulce Jesús,
recuerda las congojas de María, al despedirte Tú de ella, el Jueves Santo…, no
olvides el último abrazo de tu Madre, y el encargo que te hizo de velar, con especial
ternura, en la Eucaristía sacrosanta, por las madres que sufren… y por todos los
ausentes del hogar!…
Nos amaste con exceso”, con delirio infinito: deliciosamente enloquecido, por tu
propia caridad, te hiciste Pan…, te hiciste Eucaristía, e inerme, indefenso,
aniquilado, te entregaste en la Hostia, hasta la consumación de las edades… “Te
venció el amor, Jesús. ¡Viva tu Corazón Sacramentado!” (Todos en voz
alta, digamos): ¡Viva tu Corazón Sacramentado!
*CANTO FINAL.