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UNIVERSIDAD NACIONAL DE PIURA

Facultad de Ciencias Sociales y Educación


Escuela Profesional de Lengua y Literatura

COMENTARIO

EL LIBRO DE JOB

Alumna:
López Chumacero, María Elida

Curso:
Literatura Universal

Docente:
Venegas Jara, David Adolfo

Ciclo:
V- 2022

Piura, Perú
COMENTARIO DEL LIBRO DE JOB

El libro de Job es excepcional, porque nos muestra que un buen hombre llamado Job
que teme mucho a Dios está sufriendo sin razón. Este hombre es muy cuidadoso y
generoso con lo que tiene, con lo que hace por sus parientes y fieles creyentes en él.
Siempre trataba de no cometer errores, ya que sabe que el castigo de Dios es grande.

Por otro lado, el autor de cuyo libro es anónimo, pero dejo una gran creación y
enseñanza sobre Job un fiel creyente Dios, que vivió en la tierra de Uz; un lugar ubicado
cerca del desierto, al este del rio Jordán. Probablemente fue en el tiempo de los
patriarcados.

Es impredecible mencionar que, cada idea del libro nos hace cuestiones sobre la fe que
tenemos en Dios, y si ¿Creemos que Dios es la fuente de todo lo bueno?, y ¿Qué pasaría
si desaparece todo lo que tenemos?, ¿Acaso pensaríamos que es un castigo de Dios?,
¿Dejaríamos nuestra fe a un lado?, entre otras cuestiones. Estas mismas ideas o
similares se le presentaron en su momento de sufrimiento a Job, pero también son muy
concurrentes en todos los aspectos de nuestras vidas.

El protagonista del libro de Job en un inicio lleva una vida muy acomodada, pero luego
experimenta una calamidad casi inimaginable, incluida la pérdida de su forma de vida y
su riqueza. A lo largo de la historia podemos encontrar que sus creencias se ponen a
prueba a medida que experimenta un éxito convincente y un fracaso aplastante en su
trabajo y en su vida, es decir la situación cómoda cambio de un momento a otro.

Job es un hombre campesino y ganadero que tiene una gran riqueza, la cual se puede
medir por los miles de cabezas de ganado, gran cantidad de campos agrícolas,
numerosos sirvientes quienes se encargan de realizar los trabajos, pero su hogar también
está compuesto por una numerosa familia.

Job considera su éxito y riqueza son el resultado de la bendición de Dios. Se nos dice
que Dios ha “bendecido el trabajo de sus manos y sus posesiones han aumentado en la
tierra. Él se preocupa por que sus hijos puedan estar ofendiendo a Dios
inadvertidamente. Aunque Job es cuidadoso de permanecer “intachable y recto, le
preocupa la posibilidad de que sus hijos no sean igual de meticulosos. Es por ello, que
después de cada fiesta y para contrarrestar cualquier ofensa a Dios, “Job enviaba a
buscarlos y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos conforme al
número de todos ellos.

Por su parte, Dios reconoce la fidelidad de Job y le dice a Satanás, ¿Te has fijado en mi
siervo Job? Porque no hay ninguno como él sobre la tierra, hombre intachable y recto,
temeroso de Dios y apartado del mal. El satanás o acusador, le responde, ¿acaso Job te
ama solo porque lo ha bendecido tan abundantemente? Pues esta pregunta está muy
relaciona a nosotros, en cuanto a la fe que tenemos o solo es por lo que Dios nos ha
dado. Si es así, es momento de cambiar esa idea y debemos agradecer a Dios en los
buenos y malos momentos.

Ante esta cuestión, Dios otorga el poder al acusador para que acabe con la prosperidad
de Job. En adelante se sabría si Job abandonaría sus hábitos rectos al suponer
incorrectamente que son ofensivos para Dios, dicho en otras palabras, amargura contra
Dios.

En un muy trágico todo lo que valora es robado, las personas que ama son asesinados o
mueren por grandes tormentas. No obstante, Job no supone que Dios lo está castigando
ni se llena de amargura por el trato de Dios. En el momento más difícil, Job bendice la
autoridad de Dios sobre todas las circunstancias de la vida, buenas y malas. “El Señor
dio y el Señor quitó; bendito sea el nombre del Señor”. Job mantiene una buena actitud
y entiende que la prosperidad que tenía era una bendición de Dios. Sabemos muy bien
que Dios nos permite gozar de lo que tenemos en su momento, pero también sufrir en la
adversidad y eso una prueba para saber cuánto confiamos él.

Satanás no contento lo acusa de servir a Dios solo porque conserva su salud. Así que
Dios permite que el acusador aflija a Job con llagas malignas “desde la planta del pie
hasta la coronilla. Esta situación realmente mortifica a la esposa de Job, quien le dice,
“¿Aún conservas tu integridad? Maldice a Dios y muérete”, pero Job le responde con
uno de los versículos clásicos de la Escritura, “¿Aceptaremos el bien de Dios y no
aceptaremos el mal?”, es decir, sigue atribuyéndole a Dios todas las circunstancias que
está viviendo, ya que él no conoce quién está detrás de todo eso.

Job tuvo grandes pérdidas como, la de sus hijos, trabajo, ingresos y luego enfrentó una
situación difícil con su enfermedad. Esto suele pasar a menudo en nuestras vidas, pero
al vivir tales situaciones nos damos por vencidos, sentimos que es un castigo de Dios,
que no nos quiere como sus hijos y que todos los fracasos se deben a él. Pero hay que
tomarlo por el lado positivo y aceptar que se puede tratar de una prueba de Dios y que
puede significar un nuevo cambio en cada uno de nosotros.

Ante la situación difícil de Job estuvieron presentes sus amigos, pero como no eran
suficientemente sabios no podían decir nada y Job se rehusaba a culpar a Dios. Sin
embargo, se lamentaba expresando su angustia con los términos más fuertes. “Perezca el
día en que yo nací, y la noche que dijo: ¨Un varón ha sido concebido¨ “¿Por qué no morí
yo al nacer, o expiré al salir del vientre?” “O como aborto desechado, yo no existiría,
como los niños que nunca vieron la luz” “¿Por qué dar luz al hombre cuyo camino está
escondido, y a quien Dios ha cercado? Como desconocía cuál era el motivo de su
sufrimiento, se hacía cuestiones como las ya mencionadas, pero sin encontrar respuesta,
por lo que decimos que es el misterio más grande de fe. Mientas que los amigos se
limitan a culpar Job, señalando que era una persona mala, por Dios le envió
calamidades, en realidad estaban totalmente equivocados, porque Dios manda
calamidades a las personas malas que no hacen el bien.

Se deduce que el mencionado Libro de Job exige que comparemos nuestra percepción
con la de los amigos de Job. Lo más probable es que sabemos qué es correcto e
incorrecto y tenemos cierta conciencia de las enseñanzas de Dios. Sin embargo, no
conocemos todos los caminos de Dios, ya que aplican en toda época y lugar.

También, los amigos de Job tratan de proteger a Dios, pero no logran entender que Job
no está culpando a Dios, al contrario, intenta aprender de Dios, a pesar de todo lo difícil
que enfrentaba pensaba que aquella experiencia sería usada para moldear su alma para
bien, “Cuando me haya probado, saldré como el oro”, dice Job. “Porque Él hace lo que
está determinado para mí, y muchos decretos como éstos hay con Él”.

Job decide permanecer fiel a Dios. Él sabe que la sabiduría de Dios va más allá de su
entendimiento. Entonces, usa la minería como una analogía de la búsqueda de la
sabiduría. Revela que la sabiduría “ni se halla en la tierra de los vivientes”, sino en la
mente de Dios. “Dios entiende el camino de ella, y conoce su lugar”. Debemos a
prender de Job y permanecer siempre fieles a Dios, sin importar cuántos problemas
tengamos que enfrentar, ya que Dios tiene el poder que protegernos y ayudarnos a salir
de ellos con mucha más inteligencia, aprendizaje y sobre todo preparación de alma, del
corazón.
Job continuaba con los lamentos como, la nostalgia y autojustificación por todo lo que
había tenido cuando Dios estuvo presente con él, pero nunca trato de culparlo. Llegó el
momento de estar cara a cara con Dios. Empezó a preguntarle ¿Dónde estabas tú cuando
Yo echaba los cimientos de la tierra?, ¿Quién puso su piedra angular cuando cantaban
juntas las estrellas del alba, y todos los hijos de Dios gritaban de gozo?, “¿Quién ha
puesto sabiduría en lo más íntimo del ser, o ha dado a la mente inteligencia? Esto nos
quiere decir que, la sabiduría que Dios pone en nuestro interior hace posible que
anhelemos una respuesta al misterio del sufrimiento. Aun así, nuestra sabiduría viene
solamente de Dios, por eso no podemos superar a Dios con nuestra propia sabiduría.

Job comprende mucho mejor lo que Dios le quiere decir, la prueba a la que lo ha
sometido. Por otra parte, la adversidad de Job le ha permitido apreciar más la bondad de
Dios. “Yo sé que Tú puedes hacer todas las cosas, y que ningún propósito Tuyo puede
ser estorbado”. Parece que la relación de Job con Dios se ha vuelto más profunda y
como resultado de esto, él se ha vuelto más sabio. Job reconoce más que nunca que su
prosperidad anterior no era gracias a su propia fuerza y su poder. La diferencia es solo
una cuestión de medida. ¿Valió la pena la pérdida indecible con tal de tener esa mejora
gradual? No hay respuesta para esa pregunta de parte de Job ni de Dios.

Por último, El libro contiene una gran cantidad de aprendizajes y reflexiones las cuales
están compuestas por diferentes géneros literarios como, la narrativa, poesía, visiones,
diálogo, entre otros, que se entrelazan para formar una obra de arte literaria.

Con respecto a la fe de Job, concluyo que es impresionante un hombre sumergido ante


la sabiduría de Dios. A la vez, es una muestra de nuestra esperanza suprema y consuelo,
pero a nosotros nos falta fidelidad y confianza en Dios. Esto es lo que debemos cambiar,
ya que él cumple sus promesas en los nuevos cielos y en la tierra, por lo que resultaría
insensato juzgar a otros o incluso a nosotros mismos basados en la evidencia incompleta
que tenemos, la sabiduría escasa que somos capaces de alcanzar y las perspectivas
minúsculas que tenemos.

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