ESTUDIANTE: IVONNE DAYAN BELTRAN SALAZAR

CODIGO: 1032412153
FACULTAD: ING INDUSTRIAL SEMILLERO ESPECIAL
UNIVERSIDAD: UNIVERSITARIA DE COLOMBIA

PROBLEMÁTICA DE LOS VENDEDORES AMBULANTES EN TRASMILENIO DE

BOGOTA

ARTICULO 1
La informalidad en Bogotá
Dimensión (en Bogotá)

Según estimaciones realizadas por el IPES (Ilustración 6. Cantidad de vendedores informales en

los centros de las ciudades principales de Colombia (Tomado del eltiempo.com) se evidencia que
Bogotá es la ciudad con mayor cantidad de vendedores informales en su centro y, según censos
de la misma entidad se estima que en la ciudad de Bogotá hay 49.198 vendedores informales
(Elespectador.com, 2016) donde la mayoría están ubicados en la localidad de Santa Fe
(Ilustración 1y 2). ´

Por otro lado, según el DANE, el empleo informal tiende a crecer para la ciudad de Bogotá; en la
gran encuesta de hogares realizada por la entidad antes mencionada se buscó cuantificar la
cantidad de personas empleadas informalmente por empresas de hasta 5 trabajadores, a
continuación, se muestra el número de ocupados para la serie bimensual entre los años 2007 y
2013, Además, según el DANE, la proporción de ocupados formales e informales para el año
2013 es la que se muestra a continuación; sin embargo, se espera que el porcentaje de
informalidad sea menor para el año actual si se examina la tendencia de ambos tipos de
ocupación de forma lineal, aun así, no se hará ninguna proyección para este indicador.

Así como lo expresa en su trabajo de investigación ´Daniel Francisco Villarraga, estudiante de la

universidad de los Andes’, realizo una encuesta basada en ¿ha comprado algún producto a
vendedores informales antes de ingresar al sistema Transmilenio y cerca a la estación a la
que ingreso? En donde pudo observar que cerca del 52% dijo que, si lo hacía, por otro lado,
hablando de las personas que salen del sistema hacia sus destinos y un 54% lo hace cuando sale
de este y un 51% han comprado a los vendedores informales dentro del sistema, en estas
encuestas también se logró identificar que lo que más compran los usuarios del Transmilenio a
los vendedores informales son alimentos empacados y de segundo lugar los cigarrillos.
Tomado de trabajo investigativo (´Daniel Francisco Villarraga, estudiante de la universidad de
los Andes’, 2013)

ARTICULO 2
https://observatorio.dadep.gov.co/noticias/concentracion-de-ventas-informales-junto-estaciones-
de-transmilenio
Concentración de ventas informales junto a estaciones de Transmilenio
En Bogotá hay 20.373 informales censados, según Ipes la calle 127 y Toberín son algunos de los
puntos más críticos en Bogotá debdo a las ventas informales.
De 24 estaciones que recorrió el TIEMPO ZONA en troncal caracaras y autopista Norte desde la
calle 13 entre carreras 27 y 29 hasta la calle 174, los puntos más críticos por ventas ambulantes
son las estaciones Ricarte, Avenida Jiménez, Calle 100, Calle 127, Toberín, Calle 72 y Portal
Norte.
La situación mas critica se presenta junto al Portal Norte por un lado esta el numero de ventas en
las plataformas y en los túneles de la estación (unos 23 puestos), y, por otro lado, la invasión del
espacio publico a las afueras del portal, con unos 100 vendedores. Otros de los sitios críticos en
la estación Ricaurte donde se ubican más de 30 vendedores.

ARTICULO 3

https://www.eltiempo.com/bogota/lucha-contra-ventas-en-tm-se-perdio-y-los-usuarios-no-ayudan-
316598

El transporte publico como lugar para que los vendedores informales laboren se volvió
común.

¨Señores lamento la interrupción. Los saludo soy David. Vengo con mi esposa, y aunque no
estoy acostumbrado a trabajar así, no tengo más opción porque tengo una hija y debo responder
por ella¨, Comienza la retahíla del vendedor de turno.
Algunos pasajeros le han devuelto el saludo, otros miran hacia la ventana, otros más continúan
sumergidos en sus audífonos.
¨Al que me pueda ayudar comprándome un caramelo, se lo agradezco. No tiene un costo
especifico, si no lo que usted me quiera dar¨. Advierte, antes de iniciar su desfile a través del bus
articulado de Trasmilenio.
Con una mano sostiene una cajita cargada de dulces y con la otra se agarra del tubo, o la extiende
para recibir las monedas que van arrojando una tras otra en su mano. No importa que le pasillo se
encuentre muy lleno el serpentea entre la gente hasta cubrir todo el espacio.
La escena ocurre en la troncal de suba mientras el bus avanza a la estación puentelargo a la de
Rionegro. Cada tanto aparece un nuevo ofertante de golosinas y demás productos al
menudeo. Pero minutos después, cuando la ruta llega a la troncal caraca, el ingreso de la gente,
en su mayoría hombres que se ganan la vida con las ventas ambulantes, se convierte en
inundación.
Algunos relatan tragedias, otros posan de cómicos otros solo ofrecen lo que venden. Cada cual,
en su propio estilo, participa en una suerte carrera de relevos, vagón a vagón, bus a bus, parada
tras parada, interminable para quien los ve y los oye, la banda sonora es redundante en frases
y palabras como ¨camelo¨, ¨galletas¨, ¨Venezuela¨, ¨falta de oportunidades¨, ¨no tengo
empleo¨, ¨profesional son trabajo¨, ¨necesidad¨, ¨alternativa¨, ¨hijos¨, ¨mi niña¨, ¨mi esposa¨,
etc… y muchas otras frases más comunes en ellos.

Según el Instituto para la Economía Social (Ipes), en 86 jornadas de caracterización realizadas

entre el 2017 y el 2018, se identificaron a 2.669 vendedores informales en trasmilenio (TM). Al
abordarlos, 1.591 estaban dentro de las estaciones y portales, y 1078, en los alrededores del
sistema: puentes peatonales y entradas, estos datos no incluyen a los migrantes venezolanos,
preciso la entidad, quienes han encontrado en esta actividad una forma de subsistencia.
Lo anterior revela una significativa porción de quienes vienen de sur a norte vendiendo, de
oriente a occidente y viceversa. Aún no ha sido caracterizada. Kilometro a kilómetro, el
inconfundible acento de los migrantes del país vecino llega a los oídos de quienes viajan en
el sistema masivo.
Aunque el manual de convivencia de TM, lo mismo que el código de policía, prohíben y
sancionan la venta y consumo de mercancías dentro de esta infraestructura, es evidente que miles
se pasan la ley por la faja, como apunta el refrán. En hora y media que duro el recorrido para
observar la situación (troncales, calle 26 suba y caracas) quedo claro que casi siempre quien
ofrece algún producto o reclama caridad se lleva al menos una moneda o vende algo.
En Transmilenio tampoco hay autorización para comer. Pero esto le importa poco, o nada, parte
de los usuarios.

ARTICULO 4

https://www.youtube.com/watch?v=BV6eTYPcrWY&t=621s

¿Vendedores de Transmilenio por un día cuánto ganan?

en la capital como ya es bien sabido tenemos variedad de personas que se suben al sistema de
transporte masivo vendiendo variedades de productos ya sea utilizando su capacidad de orador o
generando lastima entre los usuarios. El despertar lastima entre los usuarios de Transmilenio es
su mejor arma ya que con niños es mucho más fácil manipular los sentimientos de algunos de los
usuarios.
no solo se suben a vender adultos si no niños enviados por sus padres, a lo que aquí encontramos
un delito abuso de menores pues bien en Colombia es un delito poner a trabajar a un menos de
edad y a los padres de estos menores parece no impórtales