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oe cua Kiera DE IFICACION Prof. EUCLIDES GUZMAN ~~ ENSENA A CONSTRUIR ||. VIVIENDAS Y EDIFICIOS —.1_ A NIVEL ARTESANAL Be ae DE Nai Nae OTST CHIL ESTE CURSO es el resultado de una larga ex- periencia en la ensefianza técnica de adultos, tanto en la sala de clases como en la faena misma. Talvez convenga mencionar que el autor reorganiz6 y condujo en su juventud, durante mas de diez aios —antes de la docencia universitaria— la Escuela ‘Nocturna para Obreros de la Construccién (ENOC), que mantenia entonces y vuelve a hacer funcionar ahora el Centro de Estudiantes de la Facultad de Ar- quitectura y Urbanismo, de la Universidad de Chile. Al encuentro diario de esa época entre estudian- tes de arquitectura y obreros de la construccién— donde, dicho sea de paso, ambos grupos resultan igualmente favorecidos—, sigue en aos posterio- res un constante intercambio de experiencias con artesanos especializados, en las faenas mismas, que dejan siempre un saldo de particular interés Es asi como las lecciones que siguen, preparadas especialmente pensando en las personas que traba Jan 0 desean trabajar en la construccién de edificios, recogen este variado ejercicio y tratan por sobre to do de ser claras, faciles de comprender, ¢ ir avanzan do paso a paso por las diversas facetas del proceso constructivo. EL CURSO se inicia con un capitulo dedicado a dar nociones basicas sobre las estructuras resistentes de los edificios en general. Luego se ve en detalle 1a construccién de una vivienda de made- +a, luego una de albafileria (de ladrillos, de piedra, de bloques de cemento) y una de adobes. La forma de comenzar el curso representa una innovacién. Lo frecuente es que se empiece de in mediato a describir los trabajos de una faena, en el mismo orden en que se realizan, como excavaciones, cimientos, etc. Es probable que muchos lectores lo Prefieran también asi, por una natural impaciencia por saber pronto cémo se ejecutan las diversas 1a- bores. Pero ese orden no es bueno, porque antes de explicar un punto determinado del proceso cons- tructivo, es indispensable tener una idea clara del conjunto que conforma una casa o un edificio. Me- Jor que eso, comenzar por conocer el esqueleto que sostiene en pie esa construccién, cémo son sus partes, cémo resisten las cargas que deben sostener, como trabaja una viga, un arco, un tijeral. Con esta prepa- racidn previa, que abarcan las primeras 70 paginas, se comprenden mucho mejor y mas cabalmente las lecciones que siguen, a la vez que se puede avanzar ha tratado de todas maneras de de estas materias, con numero 805 ejemplos practicos, de utilidad inmediata. LO DESCRITO forma la primera parte o el Primer Tomo del curso que, como se ve, da una vision general basica de los problemas de edifica cidn. ‘A partir del Segundo Tomo se comienza lo que podria Mamarse construccién general de cualquier tipo de edificios. Se estudia en primer lugar una instalacién de faenas y luego, los diversos tipos de cimientos, etc., hasta completar 1a etapa que se co: noce como obra gruesa de un edificio. Por iiltimo, el Tercer Tomo se dedica a trabajos menores 0 terminaciones. Se completa el curso con Ja revision de un modelo de especificaciones técni- cas de una obra, que es una buena aplicacién y orde namiento de los conocimientos adquiridos. Un buen complemento de estas lecciones es el Manual para Jefes de Obra, que se publica en la cu- bierta posterior de los fasciculos (el curso se edité en esta forma parcializada), que conforma un libro de consulta muy itil, en formato mas reducido. VALE la pena decir algo mas sobre la clari- dad y sencillez con que se ha tratado en todo momento de preparar este curso. Debemos conte- sar que tuvimos cierta reticencia al iniciarlo, debido ‘ala poca seriedad que suele aquejar a este tipo de pu- blicaciones. No pocas veces nos hemos preguntado en efecto por qué los textos de divulgacién técnica son tan def cientes. AI hojearlos dan a menudo una buena impresion.. Ilustraciones atractivas invitan a leer. Pero pronto constatamos que no siempre el texto escrito corres ponde a los dibujos y verificamos algo todavia mas sorprendente: No son claros, no son faciles de com- prender. Es asi como, ademas de echarse de menos tun cierto orden sistemético y algo de buen sentido pedagdgico, se tropieza a menudo con la peor barrera para extender el conocimiento: precisamente la fal- ta de claridad y de sencillez. {Por qué ocurre este extraiio fenémeno? Algunos casos pueden deberse a simples improvisaciones, sin mayor seriedad. O a falta de rigor critico para seleccionar en el desmesurado caudal de informa cidn técnica, Pero nos interesan mas los otros casos. {Por qué resultan dificiles de comprender libros ‘que parecen preparados con indudable interés? ‘Al examinar con cuidado algunos textos en que se constata esta ocurrencia, hemos creido hallar una respuesta. En ellos se ha tomado una parte de una explicacion ténica, redactada en su origen para otro nivel de conocimientos, dirigida a personas que poseen una determinada preparacion previa en esa materia, y se ha trasladado esa parte simplemente este otro texto, que desde luego precisa de un len- ‘auaje diferente. Si se considera que esa explicacién técnica, que fen un comienzo respondié sin duda a un raciocinio riguroso, ha sufrido ya muchos transvases y podas, de un escrito a otro, tenemos que a la postre va que- CURSO DE EDIFICACION dando reducida a un remedo irreconocible, 0 a un par de t6picos 0 lugares comunes sin mucho sentido. Es que el conocimiento no se simplifica parciali zandolo, recortando algunas partes y armando con ellas explicaciones mas reducidas. El resultado viene a parecerse al recado de un mensajero, repetido en un idioma para él descono cido. Se diria, en resumen, que todo el asunto se debe a la falta de una adecuada traslacion desde un len guaje de un nivel determinado, hacia otro lenguaje comprensible para una persona que desea comen. zar a familiarizarse con estas materias. Resulta facil decirlo asi, pero eso aparentemen: te tan simple, requiere de un largo proceso. No bas ta asimilar paso a paso el conocimiento necesario, ino que es preciso haberlo macerado a través de aiios, enriquecido con minimas pero numerosas adiciones, hasta llegar a hacerlo nuestro. Sélo cuando se entiende algo bien, es posible expresarlo con claridad y sencillez ABREVIATURAS cap. Capitulo 1 litro . véase cem —_ cemento pag pagina 7 véase Vocabulario cm ——_centimetro parr parrafo em? centimetro cuadrado ton tonelada cm? centimetro cibico voc * vocabulario herr herramientas . grado Los pitrrafos se citan indican: kilégramo por centime: grado tro cuadrado % por cient m metro , pie mm milimetro ” pulgada SS grado Celcius 0 centi- do el Capitulo y el mimero (ejem- plo: parr. I. 23). Cuando se indi- ca sélo el niimero, es porque son del_mismo capitulo en que apa- rece lacita. 0 INDICE CORRELATIVO Capitulo 1 NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS fcc cee iSptha score naa Limes seep aeeewae eee ‘Laconia O Lene Ctahee Dasnmiews D.tipmie Eanes cute Tato domes, Baxi | Om ease deermacin Tesora dee erhomyes eniat Srnera met isin tinge dering the nae i eenaeae Bastin de vatojde ena | osm eaneces Fe eos - unpbloma sobre reste de murs Aine curator emee Trantormemes tp ingle Cee ee taae crete eon BD potion evar anal heaters Dive nen dora Var cts dese in cate Un pont clgame Forman que ayn reo Latovtay Inca (Coase asap Cte mayor er 1 ‘Dos formas parecidas Oven tee eres via armas Forman qese use wna carta : Nuevos recursos estructurales Estructuras estercométricas Estructuras laminares Membranas Tipos principales de estructuras El arco y la boveda Lamadera y el acero EL hormigén armado Capitulo tt LA VIVIENDA DE MADERA a quincha —Viviendas de troncos 6 0 0 20 2 2B 2% » 32 M 35 38 40 41 41 2 2 4“ 45 46 4 48 0 31 32 33 3 56 36 50 37 9 39 6 3 oa 6 6s 6s 65 oa or 9 10 1 Puede consultarse al final de este Tomo, on Ia agi 226, un completo INDICE AL FABETICO, con cerea de 100) referencias las diversas materias. (Casa de entramado ‘Cuailes son las viviendas de madera EI material: La madera Maderas para estructuras Coigiie: roble; tines: ulmo; pino araucaria: ‘pio insigne DDimensiones en que seofrecen estas maderas Precio relativo de venta Preparacién dela madera | Madera labrada Madera aserrada o escuadrada Madera acepillada Madera elaborada 5. Madera tratada Partes de un madero [Nombres de piezas de madera Dimensiones de las maderas La madera y la humedad Resistencia de las maderas Deformaciones dela madera Defectos de 1a madera ientos de la vivienda de madera Cimientos corridos “Radier” o plataforma general Zanja Moldaje y hormigén ‘Anclajes para tabiques Vivienda sobre poyos aislados Entremados verticales Panes de un tabique Propiedades de un tabique Los pies derechos 0 montantes Posicion de las riostras 0 diagonales Uniones en el tabique tradicional Unién pie derecho -solera Unidn pie derecho - carrera Unién soleras y pie derecho esquinero Unién carreras y pie derecho esquinero Union diagonal -solera ‘Union diagonal - pie derecho CCruce diagonal - pie derecho Unidn dintel - pie derecho Dintel armado Proceso constructive Varias casas iguales Enlaces metilicos (Otros tipos de unin ‘Tabiques con relleno de adobes ‘Tabique con relleno de adobillos ‘Caras formadas por lstones y barro ‘Tabiques con rllenos moldeados Relleno de tierra apisonada Relleno de hormigén pobre Inconveniencia del relleno de ladrillos “Tabiques con reves 102 103 Jos 104 105 106 106 CURSO DE EDIFIC Revestimientos de madera Tablas tingladas Otros entablados Rellenos sislantes Entramados horizontales Distancias y escuadrias Endurmientados Ventanillas de ventilacion Envigados de piso Cadenetas Ensordinado Escotillas para escaleras Envigado de cielo Estrueturas de dos pisos ‘Tabique armado Sistema americano o “Balloon Frame” Sistema tablon y vga Enmaderacion de techumbre Pendienteo cimica Estructura dela techumbre Separacin y dimensiones de los maderos Cumbrera ‘Costaneras Correas Tomapuntas Techumbre a cuatro aguas Limas texas Techumbre con lima hoya Techo con buhardilla ‘Sistemas indusrilizados Panels prefabricados Procedimiento de fabricaciin CClavado automitico (Otras formas atuales dela madera Capitulo 1 LA VIVIENDA DE ALBANILERIA Albadileria de tadrilo Sistemas anterioes al hormigon armado Influencia del hormign armado { Tipos de albafilrias 1. Albailria simple 2. Albaiileria armada 3. Albafileriarelorzada I material: Ladsilo de arcilacocida Lado hecho a mano Coceién Ladrillos hechos a maquina Fabricacion mecanizada Resistencia de ls ladrillos de aril Recepeion en obra CCimienos de a vivienda de albaileria ‘Trazado nel terreno Excavaciones CCimientos de hormiga Preparacién a pala del hormigin Lenado de las zanjas ‘Armadura de ls pilares, Sobrecimiento Niveles Vaciado del hormigén Los muros de ladsillos Aparejo Medias de os ladrilos Muros resistentes divsorios El tendely el descantillon Ei monero y la mezcla 107 107 133 133 134 1B7 37 138 138 13 138 ~ Be Bo Bo 140 M40 — vai 43 146 146 Mar 150 Ist re 1s 133 153 1s iss 136, 137 160 Grado de humedad de los Iadrillos Ejecucion del muro Vanos de las puertas Miras Formacion de as hiladas Junta verticales 0 llagas Endientado anos de ventanas y entrevanos Andamios y caballetes Vertcalidad de jambas y esquinas Panderetas de ladrillo Altura de dinteles El paso de a humedad en las albaiilerias ‘Otras fuentes de humedad Refuerzos de hormiga armado Pilares Cadenas jecuciin de os plares y cadenas Moldajes ‘Amarras de alambre Moldaje dela cadena Armaduras de acero Hormigonado Curado (tro tipo de refuerzos Envigados de madera Enmaderacion de techumbre Tijerales de tablas clavadas Distancia y arviostramiento entre tjerales Aaclajes Clos de las habitaciones Albafileria de bloques de cemento EI material: Bloque hueco de cemento Ejecucion de los muros Cadena Refuerzos metilicos Aloafileria de piedra I material: La piedra ‘Tipos de albaileria de piedra 1. Mamposteria 2 Silleria Ejecuciin del muro de piedra Arcos de piedra Revestimientos de piedra Bjecucion Emboquillado o rejuntado Capitulo 1V LA VIVIENDA DE ADOBE El material: adobe Confeccién de los adobes Propiedades principales ‘Cimientos de la casa de adobes ‘Tamaio y disposicién de los muros Ejecucion de los muros Refuerzos esquineros Tacos de madera en los vanos Dinteles Solera superior Tabiques divisorios Techumbre de la vivienda de adobe “Terminacién interior de los muros de adobes Regulacion del {rio y del calor en las casas antiguas Viviendas rurales Reparaciones de sobrecimientos La tiera apisonada El tapial El suelo cemento CURSO ELEMENTAL DE EDIFICACION << Prof. EUCLIDES GUZMAN TOMO PRIMERO FACULTAD DE ARQUITECTURA Y URBANISMO UNIVERSIDAD DE CHILE Publicacion de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo dela UNIVERSIDAD DE CHILE © Eueclides Guzman Alvarez Inscripcién Ne 49.670, de 1979. Impreso en EDITORIAL UNIVERSITARIA, 1980. Impreso en Chile/Printed in Chile El autor es Master of Architecture de la Universidad de Pensylvania. Durante casi 12 afios (1954-6: dirigid la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Chile. Fue Director-fundador de la Escucla de A quitectura de Valparaiso, de 1a misma universidad, que condujo durante nueve afos (1957-65). Organiz y dirige, durante mas de cuatro afios (1965-69), la sede Talca de la Universidad de Chile. Cuando estudi: ba arquitectura, en su calidad de Presidente del Centro de Estudiantes, reotganiza (1938) y dirige por mé de diez aos la Escuela Nocturna para Obreros de la Construccién (ENOC), que habia funcionado ante en diversos periodos. Ya en esa fecha se preparan algunos cursos escritos, que sirven como textos de estt dio, hasta llegar al curso actual, que resume las experiencias anteriores. antecedentes © Este curso es el resultado de una latga experiencia en la enseftanza técnica de adultos, tanto fen la sala de clases como en la faena misma. Talver convenga mencionar que el autor teorganizé y condujo en su juventud, durante més de diez aos —antes de la docencia ‘universitaria— la “Escuela Nocturna para Obreros de la Consteuccién"” (ENOC), que mantenia tentonces y vuelve a hacer funcionat ahora el Centro de Estudiantes de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, de la Universidad de Chile ‘AL encuentro diario de esa Epoca entre estudiantes de arquitectura y obreros de lx construccidn —donde, dicho sea de paso, ambos geupos resultan igualmente favorecidos—, sigue fen afios posteriores un constante intercambio de experiencias con artesanos especializados, ‘en las faenas mismas, que dejan siempre un saldo de particular interés. Es asi como las lecciones que siguen, preparadas especialmente pensando en las personas ‘que trabajan o desean trabajar en la construccign de edificios,recogen este variadd ejerccio y tratan por sobre todo de ser clatas, faciles de comprender, e ir avanzando paso a paso por las diversas facetas del proceso consteuctivo. partes del curso © Como se aprecia en el Plan del Curso —que aparece al lado inquierdo de esta hoja— comenzara con una parte (PRIMER TOMO) que podria llamarse bisica. Ademis de incluir en clla nociones generales de las estructuras resistences de los edificios, se veri en detalle la conserucciéa de uaa vivienda de madera, luego una de albasileria y después una de adobes Esta manera de comenzat el curso eepresenta una innovacién. Lo frecuente es que se empiece de inmediato a describie los trabajos de una faena, en el mismo orden en que se realizan, como ‘excavaciones, cimientos, etc. Es probable que muchos lectores lo prefieran también asi, por una natural impaciencia por saber pronto cémo se.cjecutan las diversas labores. Pero ese orden no es bueno, porque antes de explicar un punto determinado del proceso constructivo, indispensable tener una idea clara del conjunto que conforma una casa 0 un edificio. Mejor que ‘es0, comenzat por conocer el esqueleto que sostiene en pie esa construcciéa, cémo son sus partes, ‘como resisten las cargas que deben sostener, cémo trabaja una viga, un arco, un tijeral. Con ex preparacidn previa, que abatcard los tres primeros fasciculos, se comprenderin mucho mejor y mas ‘cabalmente las lecciones que siguen, 2 la ver que se puede avanzar con mas rapider. Se ha tratado de todas maneras de aliviat la explicacién de estas materias, con numerosos ejemplos pricticos, de utilidad inmediaca En el fasciculo 4 se enteari'de leno a conocer los detalles de la vivienda de madera, para contiauat con las otras ya mencionadas. ‘A partic del SEGUNDO TOMO se comienza lo que podria Ilamarse construcciOn general de cualquier tipo de edificios. Se estudia en primer lugar una instalaci6n de faenas y lego, los diversos tipos de cimientos, etc., hasta completat la etapa que se conoce como vbra gruess de wn edificio Por iltimo, ei TERCER TOMO se dedica a tcabajos menores o fermineciones. Se completa el ‘curso con la revisién de un modelo de especificaciones téenices de una obra, que es una buen aplicacién y ordenamiento de los conocimientos adquitidos. (© Mencia aparte merece el MANUAL PARA JEFES DE OBRA, que se publica en Ia cubierta posterior de cada fasciculo, y que conformara un utlisimo libro de consulta, en formato mas reducido. Contendré un cesumen de las informaciones mas importantes que debe tener siempre a mano el encargado de una faena ‘Asimismo, en el interiot de la primera cubierta (donde aparece ahora el Plan del Curso) se comenzara a publicat a partir del préximo ndmero, un repaso de conocimientos bisicos de ‘Aritmética, con esolucién de problemas aplicados a la edificaciéa. Mis adelante, se revisarin imaterias de Geometria necesatias para tcatatciertas figuras en el teeno, en trabajos de carpinceria, cn el cilculo de superficies de techumbres, etc. Por dltimo, se dari un resumen de los aspectos mis iiles de la Interpretacion de Planos, con proyecciones, escalas, etc. “Todas las lecciones avanzarin asi gradualmente, apoyadas por los repasos de materia afines mencionadas y por medio de vocabularos técnicos, que se intercalan a lo largo de las paginas del control de aprendizaje ‘@ Impéngase en la pensiltima pagina de este atimero, de la posibilidad de estudiar este curso en su casa_y obtener al final un certificado otorgado por la Facultad de Arquitectura y Urbanismo, de esta Universidad. © Un aspecto muy particular, pero de importancia para los lectores, es el precio de estos fas ciculos. El no puede comparatse con el precio de oteas publicaciones parecidas, que nos llegan del exterior, puesto que ellas cesponden a tiradas inmensamente mayores que el de un curso como Este. Es sabido que el costo de impresién cambia de manera decisiva con la cantidad de ejemplares ‘que se preparan. Publicaciones de tiradas moderadas es frecuente se financien con avisos. En el presente caso —que responde a una labor de extensin de un organismo universtario— el precio de cada fasciculo es estrictamente el de costo, mis los gastos de dist © No queremos terminar estas observacidnes sin agregar algo mas sobre la claridad y senciller con que hemos tratado de preparar este curso, Debemos confesar que tuvimos cierts teticencia al iniciatlo, debido a la poca seriedad que suele aquejar a este tipo de publicaciones. 'No pocas veces nos hemos preguntado en efecto pot qué los textos de divulgacién técnica son tan deficientes. ‘Al hojeatlos dan a menudo una buena impresiGn. Uustraciones atractivas invitan a leer. Pero pronto constatamos que no siempre el texto corresponde a los dibujos y vetificamos age todavia ‘mas sorprendente: No son claros, no son ficiles de comprender. Es asi como, ademas de echarse de ‘menos un cierto orden sistematico y algo de buen sentido pedagégico, se topieza a menudo con la peor batrera para extender el conocimiento: precisamente la falta de claridad y de senciller {Por qué ocurte este extrafio fendmeno? Algunos casos pueden deberse a simples improvisaciones, sin mayor seriedad. O a falta de rigor critico para seleccionar en el desmesurado. ‘caudal de informacién técnica. Pero nos inceresan mas los otros casos. Por qué resultan difkciles de ‘comprender libros que parecen preparados con indudable interés? ‘Al examinar con cuidado algunos textos en que se constara esta ocurrencia, hemos creido hallar una respuesta. En ellos se ha tomado uaa parte de uaa explicacion técnica, recaciada en su origen para otto nivel de conocimientos, dirigida 2 personas que poscen una determinada preparatiéa previa en esa materia, y se ha trasladado esa parte simplemente a este otro texto, que desde luego precisa de un lenguaje difereare ‘Si se considers que esa explicaci6n técnica, que en un comienzo respondié sin duda 2 un raciocinio riguroso, ha sufrido ya muchos transvases y podas, de un escrito s otro, tenemos {que a la postte va quedando reducida 2 wa remedo irreconocible, 0 a un par de t6picos o lugares communes sin mucho sentido, 'Es que el conocimiento no se simplifica patcialixindolo, recortando algunas partes y armando con ellas explicaciones mis reducidas. El resultado viene 4 patecerse al recado de un mensajero, repetido en un idioma para él desconocido. ‘Se diria, en resumen, que todo el asunto se debe 2 Ia falta de una adecuads translaciéa desde in lenguaje técnico de vn nivel determinado, hacia otto lenguaje comprensible para una persona {que desea comenzar a familiacizarse con estas materias. Resulta facil decitlo asi, pero exo aparentemente tan simple, requiere de un largo proceso. No basta asimilar paso a paso el conocimiento necesario, sino que es preciso haberlo macerado a través de afos, énriquecide con minimas pero numerosas adiciones, hasta llegar a hacerlo auestro, Sélo ‘cuando se entiende algo bien, ex posible expresatlo con claridad y senciller. Capitulo | NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS iQUE ES UNA ESTRUCTURA RESISTENTE? 1. Todos los objetos 0 cosas fabricados por el hombre —ya se trate de una silla, de una estatua o de una casa— deben tener una armazén esqueleto, que sea capaz al menos de sostener su propio peso y de mantener su forma. Si miramos a nuestro alrededor pode mos observar que todos los seres vivos. tanto animales como vegetales, poseen una estructura que les sostiene en pie. En los animales, ella esta claramente di. ferenciada y constituye una armazon de material mas resistente —los huesos. que llamamos esqueleto (Figura 1.A). En este caso es particularmente comple ja y perfecta, porque ademas de sostener el peso del cuerpo, tiene que permitir el movimiento de cada una de sus partes. lo que logra con formas muy apropiadas y con la maxima economia de material. La mayoria de las veces el esqueleto va en el interior del cuerpo, pero no faltan casos en que se ubica en el exterior, adquiriendo la forma de caparazones duras. como en la tortuga, en crustaceos como los can- grejos 0 nuestra conocida y en muchos insectos. 2. Los Arboles y plantas poseen asi mismo una estruetura, constituida por su parte lefiosa o dura, también muy bien dispuesta para resistir su peso, de acuer do a las condiciones del medio. ambiente en que se desarrollan (Figura 1.B). Por ejemplo, un arbol que es azotado por el viento de manera constante, inclina su tronco. y adquiere éste ‘una ‘seecion®’ ovalada en vez de circular, para resistirlo mejor. Por otra parte, una planta acua tica, que tiene una estructura apropiada FIGURA 1. Los seres vivos tienen una estructura resistente, con formas muy apropiadas y con una maxima economia de material. En los animales ella esta constituida por el esqueleto (letra A), y en los arboles, por su parte lefiosa o dura (letra B). — 10 FIGURA 2. Todos los objetos 0 cosas fabricados por el hombre también deben tener una estructura que los sostenga en pie. A veces puede verse ella con mucha claridad, como en esta torre metalica, la escalera de ay lassilla de la figura. para sostener su forma sumergida en agua, no es a veces capaz de mantenerla si la sacamos de este elemento. Para sub- sistir fuera del agua tendria, entre otros cambios, que modificar su estructura, haciéndola mas resistente que antes. 3. Observemos ahora lo que _ suele ocurrir con la estructura de una casa, que es el tema que nos interesara de pre- ferencia en este curso. Si un carpintero se aboca a la tarea de construir una jaula para conejos, por ejemplo, comienza por armar un esque leto de madera, uniendo piezas vertica- les*' a otras horizontales*', con algunos refuerzos inclinados, que aseguren cierta firmeza al conjunto (Figura 3.A). Es decir, comienza por construir una estruc- tura. Luego pensara en el piso de la jaula; en cerrar sus costados laterales, algunos con tablas, que reparen el viento, y otros con re ja; pensara en la cubierta superior, en una puerta, etc. (Figura 3.B). construye un estante para libros, también comenzara sin duda por una armazén*! que asegure su estabilidad. 4. Lo curioso es que este mismo car pintero, enfrentado al problema de construir su propia vivienda, olvida a menudo estos elementales y sanos prin cipios, olvida de comenzar a preocuparse de su estructura, y utiliza en cambio el Cap. I. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS sistema de apilar un material sobre otro, usando el mismo _procedimiento que emplea el nifio para armar construc ciones con trocitos de madera (Figura 4), No. siempre se procede asi por econo mia, sino mas bien por una pérdida de escala®', es decir, por una cierta dili cultad para concebir la casa como un todo, imaginarla de la misma manera que la jaula para conejos, solo que de un tamafio mayor. 5. EI defecto. principal de la cons truccién que arma el nifio, superponiendo un trozo de madera sobre otro, desde el punto de vista técnico, es que solo consi dera lo que lamamos esfuerzos vertica FIGURA 3. Cuando un carpintero enfrenta la tarea de construir una jaula para conejos, co mienza por armar un esqueleto resistente con listones de madera (letra A). Después agrega el piso, las paredes —con tablas 0 con mallas de alambre—. el techo, etc. (B). Sin embargo. al construir su propia vivienda, olvida a veces estos anos principios. n FIGURA 4. “Construccion™ nifio. colocando un trozo de madera sobre otro. sin tener en cuenta la idea de estructura. Cualquier movimiento de la base que la sustenta, la hara caer con toda facilidad. armada por un les. originados por el peso propio de cada trozo de madera empleado. En electo, cada cuerpo solido que él usa, es atraido hacia el suelo por la fuerza de gravedad de la Tierra, en una magnitud: representada en cada caso por lo que lamamos su peso. Todas estas fuerzas, partiendo del centro de gravedad* de cada cuerpo, siguen la direccién vertical, © sea, la del hilo a plomo, y mientras puedan transmitirse 0 trasladarse hasta el suelo, pasando verticalmente de un cuerpo al otro que esta debajo, hasta llegar al terre- no, no aparece problema alguno, y el coh- junto puede mantenerse en pie. Pero existen en la practica otros esfuerzos, aparte de los verticales, que pueden tener una direccién cualquiera horizontal o inclinada— como los originados por ciertas formas _cons- tructivas o también por el viento, que en algunas zonas geograficas es par. ticularmente temible, o por los movi mientos sismicos, tan frecuentes en nuestro pais. 6. Se pueden ilustrar estos otros es- fuerzos, si suponemos la “construccién” n de la Figura 4 armada sobre una mesa y luego damos a la mesa un movimiento os cilatorio en cualquiera direccion. Casi de inmediato se producira su derrumbe. Debe preocuparnos el hecho de que muchas construcciones_modestas. con cebidas asi, no podrian resistir el mas pequefio esfuerzo de este tipo. Cuando estan construidas con materiales pesados, como adobes*’, ladrillos*’, tejas*’ —lo que por suerte no es lo frecuente— consti- tuyen a veces verdaderas trampas que en ¥OCABU Figuran en estos vocabularios aquellas palabras téenicas que, por alguna razin, aparecen en el texto de este curso antes de que su significado haya sido explicado. Ocu Fre que al exponer algunas materias gene rales —particularmente las del comienzo y en especial, cuando se dan ejemplos prac ticos, es inevitable el empleo de términos técnicos o de nombres de partes de una construccién que no se han visto ain y que seran estudiados en detalle mas ade- lante. Para obtener una mejor compren sién de las lecciones, sin complicar mas su exposicion, se ha recurrido a este sistema, que consiste en adelantar el significado de algunas palabras, presentadas en gu: pos numerados a lo largo de las paginas, 2 medida que ellas van apareciendo. Cada vez que se utiliza en el texto una palabra nueva que esta definida en algun grupo de este vocabulario, se sefiala con tun asterisco (*) seguido de un nimero pe. quefio, que corresponde al niimero del ‘grupo donde ella aparece. También se han incluido palabras téc nicas de otras especialidades, que suelen utilizarse en edificacion. A medida que se avance en las materias del curso, debera ir sin duda disminuyendo 1a necesidad de adelantar estas explicaciones auxiliares. HORIZONTAL. Se dice de la linea 0 del plano que tiene la misma direccion de la superficie de las aguas tranqui las. VERTICAL. Linea 0 plano que tiene la direccién del hilo a plomo. CURSO DE EDIFICACION cualquier momento podrian caer sobre sus moradores. Si ello no ocurre con mas fre cuencia, se debe a que las variadas partes que constituyen una casa, aparte de su es tructura, quedan en alguna manera traba das unas con otras, y aunque nadie lo haya previsto asi, sirven en cierto modo como amarras entre ellas. 7. Podemos ya responder la pre gunta inicial. Se lama estructura re- sistente, o simplemente estructura, de LARIO 1 OBLICUO. Linea 0 plano inclinados, 0 cen direccion diferente a lay anteriores, SECCION 0 CORTE. Figura plana que resulta. al cortar un cuerpo, para co. nocer mejor su forma, Se llama SEC CION LONGITUDINAL, cuando el corte se realiza a lo largo del cuerpo, y SECCION TRANSVERSAL, cuando se efectia a trave's de él (véase Figura 8). ARMAZON. Conjunto de maderos o pie zas metilicas unidas convenientemente para algin fin, como una techum bre, una estructura determinada, un esqueleto —resistente. También se dice ARMADURA, aunque esta ultima palabra se emplea mas para designar el conjunto de barras de acero del hormigén armado, ESCALA. Relacion entre el tamaio de las partes de un edificio y el tama fio con que se representan en los técnicos. Por ejemplo, escala 1:10 significa que una distancia cual- quiera de! dibujo corresponde a una dis- tancia 100 veces mayor en el terreno. Cap 1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS FIGURA 5. Estructura de madera de una casa. Puede apreciarse un conjunto de elementos verti- ales, horizontales € inclinados, dispuestos y unidos de manera de dar solidez a la obra. Sus detalles constructivos seran estudiados luego, en el. capitulo siguiente de este curso, dedicado a viviendas de madera, una casa, de una torre o de una silla, al conjunto de elementos resistentes. uni dos entre si y dispuestos de manera orde nada. que aseguren su estabilidad (Fi guras 2 y 5). Se habla también de su esqueleto resistente, usando también la misma palabra que, como vimos, denomi na a la estructura resistente de los animales. 8. En algunos edificios 1a estructura esta mucho mis claramente visible que en* otros, porque esta constituida por una armaz6n*! 0 conjunto muy dife renciado de pilares*”, vigas*, losas*’, ya sea de hormigén armado*’, de acero © de madera: pero no siempre es nece sario que sea asi. En otros casos, los propios muros y los techos pueden estar dispuestos como elementos estructura les suficientes. A medida que vayamos adquiriendo en este curso conocimien- tos téenicos, nos sera mas facil damos cuenta si son adecuadas 0 no determinadas soluciones constructivas. Por aho.a, basta que no perdamos de vist: sa 0: -esidad general de que lo que vayarus a construir posea un conjunto » armaz6n resistente que lo sostenga, con c.crta seguridad. LAS PARTES DE UN EDIFICIO TRABAJAN 9. Los muros*”, los pilares, las vigas de um editicio, se dice que trabajan, como las personas. Y también como las per sonas, pueden desempeiiar diferentes clases de trabajo: Algunos elementos constructives son capaces de soportar grandes pesos sin sufrir daiio alguno, otros pueden ser usados como tirantes’ © elementos de gmarra, otros resisten bien para cubrir grandes luces 0 espa- 4 a ey : cios, como los tijerales*” 0 las losas de hormigon armado. 10. Cuando un elemento construc tivo de determinado material esta rea lizando alguna de estas formas de tra bajo, cada una de sus moléculas 0 peque jiisimas partes de que esta compuesto. sufre los efectos de ese trabajo y el ele mento (pilar, viga, tirante) se deforma Rara vez estas deformaciones se notan a simple vista y s6lo pueden ser medidas por instrumentos especiales. Cuando resultan visibles, como en el caso de una viga de madera que se curva hacia abajo, es porque el espesor de la viga es insuficiente o ha recibido cargas** superiores a las que es capaz de so portar, IL. Tedricamente, todas las partes de un edificio que estan soportando algun esfuerzo, por pequefio que sea, sufren al guna deformacion. Ella, como es légico, aumenta a medida que aumenta la carga o el esfuerzo que actéa, no debiéndose sobre pasar ciertos limites, que se establecen para cada caso. LIMITES DE SEGURIDAD. 12, Hay una pregunta que toda per sona que habita un edificio tiene derecho a formular: ;Qué seguridad hay de que esta losa de hormigon armado que tengo sobre mi cabeza no se rompa y caiga sobre mi? {Qué precauciones han tomado los técnicos para que ello no ocurra? Se puede responder a esta pregunta con claridad. Tomemos un caso mas simple, como es el de un tablén de andamio, sobre el cual trabajan obreros, a veces a gran altura. Por lo general se usa un tablon de alamo, de 5 cm, de espesor por 25 cm, de ancho y 3,20 m.de largo, que se apoya en tavesaiios a 3,00 m de distancia, aproximadamente. CURSO DE EDIFICACION XS FIGURA 6. Tablon de andamio, apoyado en sus extremos, que recibe el peso de una persona y de un saco de cemento. Si cargamos este tablon con 75 kilo: gramos en el centro, por ejemplo, lo que corresponde al peso aproximado de .una persona, los resiste _ perfecta mente. Agreguemos un saco de cemen to. de 42.5 kil6gramos, y también resiste bien (Figura 6). ;Sera suficiente ‘una prueba como ésta? Desde luego que no. Po- dria ocurrir que estuviésemos muy cerca de su ruptura y con una pequefia carga mas © con un movimiento oscilatorio de arriba a abajo, el tablon podria romperse seria con 13. Al efectuar estas pruebas, perfectamente posible — observar atencion lo que ocurre al tablon. En un laboratorio de ensaye* de mate riales, con instrumentos muy sensibles, podrian conocerse sus _ delormaciones y podrian formularse conclusiones. por comparacion con ensayes anteriores, Pero es posible que esta explicacin no satisfaga al obrero que ha de expo- ner su vida en un andamio. 14. El procedimiento que ¢s mucho mas directo y seguro. Hay un limite muy real, que no elegi mos nosotros, sino que es privativo de cada material, y es el momento en que el tablon se rompe. Procedemos pues a cargar lentamente el tablon, hasta rom- perlo, y anotamos la carga que necesi- tamos para ello. Es lo que lamamos se prefiere Cap. | NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS carga de ruptura y a la resistencia que opuso el tablén hasta ese momento. Fe- sistencia de ruptura, o simplemente resistencia. Después veremos que hay una resistencia de ruptura para cada tipo de trabajo, o de esfuerzo a que so metemos a un elemento constructivo. VOCABU FUERZA. Accion y causa capaz de poner un cuerpo en movimiento o de modifi- car el desplazamiento de uno que ya esta en movimiento. También se Hla. ma ESFUERZO, como por ejemplo, el esfuerzo de compresiin, de traccién, atc, que se explican a partir del parra- fo 21. En los dibujos se representa cada fuerza por una flecha. CARGA. Peso que soporta una estruc- ura, o una parte de un edificio, como ‘muro, pilar, viga, etc. CENTRO DE GRAVEDAD. Punto Je aplicacién del peso de un cuerpo. Si pudiésemos suspender el cuerpo desde este punto, quedaria en equilibrio en cualquiera posicion que le dejemos. Se llama GRAVEDAD @ la fuerza que atrae a los cuerpos hacia la tierra y {que se expresa por su peso. PILAR. Elemento vertical y aislado que sirve de soporte a un techo o a un piso superior de un edificio: puede ser de madera, de acero 0 de hormigon ar mado. Nosotros llamamos pilar al refuerzo vertical de hormigén armado que se coloca en las esquinas o cruces de los muros de _ladrillos, _formando parte de ellos. VIGA. Elemento estructural largo, colo- cado libremente entre dos apoyos, en direccién horizontal 0 un poco incli- nada, capaz de soportar cargas. También se da este nombre a un ma- dero largo y grueso o a un elemento de acero. con perfil doble T 0 similar, apropiados para constituir una viga. DINTEL. Parte superior de un hueco o vano de puerta 0 ventana, que se apoya en los costados del vano (jambas) y sostiene el muro que va encima. Por lo comin es recto. y horizontal. Cuando es curvo, se llama ARCO. 5 15. Hay variadas formas en que puede resistir un material, fuera de las cargas 0 esfuerzos que estamos considerando. Pue- de interesarnos, como hemos visto, el peso que es capaz de resistir un tablon o la carga que puede soportar un pilar o una viga; pero puede interesarnos también la dureza LARIO 2 LOSA. Placa plana de hormigén armado, de poco espesor, por lo general en po- Sicién horizontal, que se apoya en los muros y sirve de separacion entre dos pisos de un edificio, o de cu bierta o techumbre. También se llama asi a una piedra grande, plana y de poco espesor, que sirve para pavimentar suelos. Ts RS CADENA. Nosotros llamamos de esta manera ala amarra horizontal y continua de hormigén armado, que corre por sobre los muros de ladrillos 0 bloques de cemento. Se diferencia de una VIGA del mismo material, en que la cadena descansa sobre el muro en toda su longitud, porque no esta prevista para recibir cargas, como la viga, sino s6lo como elemento de amarra En otros paises de le llama CARRERA, que es una denomins mas apro- piada, puesto que asi se llamaba antes al elemento de madera que corria so- bre los muros, para recibir el envigado o la techumbre. MURO. Pared de ladrillos, piedra, bloques de cemento, hormigén, especialmente la que recibe o es capaz de recibir cargas. TABIQUE. Pared delgada que no soporta cargas y sirve para separar o dividir los recintos de un edificio. 6 de un pavimento*’, su resistencia al des- gaste, que es algo bastante diferente; puede interesarnos que un muro no deje pasar la humedad al interior de una vi vienda; la duracion de una pintura; la adherencia de un ladrillo al mortero*’, etc. Los laboratoriés de ensaye de ma- teriales estan dia a dia sometiendo a las pruebas mas diversas a todo tipo de materiales que se san en la edifica- cién. Y casi siempre’ sus ensayos llegan al limite final, hasta que el material se rompe, 0 se desgasta, o es atravesado por la humedad, o la pintura se descolora © desprende, etc. Esto como una manera de obtener para cada caso un punto se guro de referencia. 16. Sigamos todavia con el ejemplo de! tablén. Obtenida la carga de ruptura, que es el limite del que necesitamos guardar una debida distancia, establecemos una especie de margen de precaucién, que lla- mamos coeficiente de seguridad. Se esta- blece un coeficiente diferente para cada material y para cada tipo de trabajo, que se expresa en cada caso con una cifra o con un nimero. {De qué depende que este coeficiente de seguridad sea mas grande 0 mas pe- queiio? Depende de la mayor o menor uniformidad con que el material acos tumbra a responder o comportarse fren. te a cada tipo de esfuerzo. Lo que se sabe 0 se estudia con los miles y miles de ensayos que se han realizado y se conti niian realizando en los laboratorios. Por ejemplo, si se trata de barras de acero redondo para hormig6n armado, y se observa que las miles de veces que se someten a determinados —ensayos, siempre el resultado es parecido, hay el derecho de suponer que este material, cuya fabricacion es muy controlada, ha de continuar comportandose de una manera semejante. Luego el coeficiente de seguridad puede ser pequetio. (CURSO DE EDIFICACION 17. Pero si se trata, por el contrario, de un material como la madera, tal que en nuestro ejemplo del tablon, los resul- tados de los ensayos suelen arrojar valores muy diferentes. Su resistencia, aun tratandose de una misma especie de madera, como el alamo, depende de la conformacién del arbol, de la parte del tronco desde donde proviene el ta- blon, de su grado de humedad, de si tiene nudos 0 no, y de otros defectos po: sibles. Es necesario por lo tanto, adop- tar un coeficiente de seguridad bastante grande. Por lo general se toma en el alamo un coeficiente 6, que equivale a hacer trabajar normalmente al tablon con una carga igual a la sexta parte de aquella que provoca su ruptura. En el caso del acero, mencionado recién, este coeficiente de seguridad es igual a 2,5 y aveces a3. 18. Dividiendo, pues, la carga de rup- tura por el coeficiente de seguridad. obtenemos lo que se llama carga admi- sible o tension de trabajo, que es el limite de carga, como lo indica clara- mente el primer nombre, que admite el material, sin ofrecer peligro alguno. O sea, si el tablén se rompe con 630 kilos (resistencia de ruptura), dividimos esa cantidad por 6 (coeficiente de seguridad) y nos resultan 105 kilos (carga admisi- ble). Esta es la carga con que se hace trabajar el tablén, sin peligro para quie- nes lo utilicen. Se desprende de lo que s© ha explicado, que lor coticien tes de sepuridad de los divers materiles son fjados. en cada caso, por lor ortanismos téenicos oficiales, segun Se persge una mayor 0. menor sepuridad para las cont truccione, Como al mismo tiempo se busca para lls 4 veces con mayor intensidad— su economia, su bajo Sito, que ¢s un f2ct0r por Io. general opuesto a la mayor sequridad, no. siempre facil haar los valores mas Apropiados. Con razon 36 ha Hegado & devi que los coe ficients de seguridad que estableces lot relamentos de una nacion, reprevntan el valor que se signa en elt 4 la vida humana, puesto que de ellos dependen en gran Cap. | NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS medida Ia seguridad de quienes ocupan los diversos edit 0s que a diario se construyen. Suelen sulrir asi no pocas fluctuaciones. entre la necesidad de ofrecer una adecuads seguridad —aumentada a veces cuando se esta cetea de una catastzole sismica— y el 90 menos impor tante factor del costo razon able de las consirucciones. 19.Si a primera vista pudiesen_pa- recer altos los coeficientes de seguridad que se indicaron para el alamo y el acero, en el parrafo 17 de este capitulo, que les hace trabajar a un sexto y a menos de un tercio de su resistencia, _respectiva- mente, ello no es asi, si se tiene en cuenta que las cargas y esfuerzos normales que soporta una estructura, pueden a veces aumentar considerablemente. Aparte del incremento que experimentan sus elemen- tos cuando ella esta sometida a movimien- tos oscilatorios, como los causados por los temblores, por ejemplo, deben consi- derarse hechos accidentales, de ocurren- cia muy eventual, como la acumulacion de gente en un techo o en lugares aun menos previsibles para ello, como una marquesi- nat’ o alero™’, etc. FORMAS DE TRABAJO DE LOS MATERIALES 20. Hemos visto que cada edificio debe tener una estructura, una armazén © esqueleto resistente, que haga posible su. permanencia segura en pie. Para comprender bien como ello se logra, como actuan sus diversas partes resis- tentes, es indispensable comenzar por estudiar —aunque sea en forma some- ra— las distintas formas de trabajo de los materiales. Estas formas de tra bajo —las principales— se _conocen con los nombres de compresion, traccién, flexion, pandeo, cizalle, y las veremos separadamente. Su conocimiento previo nos facilitara enormemente el estudio y la compren sin de los capitulos siguientes, en que se explicara en detalle el proceso constructivo de una vivienda a base de madera, luego de otra a base de alba ” c FIGURA 7. Trabajo de compresiéa. En A se representa a ura piedra que recibe un peso encima; en B, se ve una pieza de madera sometida @ compresin entre ambos extremos, y en C, un trozo de goma recibiendo un peso similar a A. jiileria de ladrillos, de bloques de ce- mento, de adobe, etc. Es posible que esta parte del curso sea un poco arida; pero es necesario considerar que en los capitulos que. si- guen no solo entraremos de Ileno a explicar los procedimientos — construc- tivos mismos, sino que —debido a estos conocimientos que ahora veremos— seran comprendidos en mejor forma. A. LA COMPRESION 21. Si cargamos un trozo de_piedra con un peso grande, representado por la flecha de la Figura 7.A, la piedra es capaz, sin duda, de resistir la carga sin que se note en ella alteracién alguna. Decimos que esta siendo comprimida. © que esta trabajando a la compresién. La piedra esta siendo presionada en- tre dos fuerzas que actiian en sentido contrario, y que tratan de achatarla. La segunda fuerza, que no aparece re presentada en la figura, esta consti tuida por el apoyo en que ella descansa, en forma de reaccion hacia arriba. Se ven mas claramente estas dos fuerzas en sentido contrario, en la letra B de la misma figura, en que se trata de una pieza de madera, comprimida lon gitudinalmente (en. el sentido de su largo). Estas fuerzas tratan de acor tar el madero. 22. La pequeiisima deformacién que debe experimentar el cuerpo que esta sien- do comprimido, seria posible observarla a simple vista, si en vez de piedra o madera, hiciésemos la misma experiencia con un trozo de goma, por ejemplo, que es lo que se ilustra en el caso C de la figura. Al mismo tiempo que se acorta. el trozo de goma se en sancha hacia los lados. 23. La capacidad de resistencia de un elemento constructivo esta _relacio nada con su tamafo, especialmente con la superficie de la cara que recibe HORMIGON. Mezcla de arena, ripio y un agiomerante (que puede ser cemento, al, yeso, etc), amasada con agua, y que tiene la propiedad de fraguar o endurecer. Vulgarmente se le llama ‘CONCRETO. HORMIGON ARMADO. Se llama al que contiene armadura en su interior, for ‘madas por barras de acero redondo. MORTERO. Mezcla de arena con un aglo merante (cemento, cal, eso), sada con agua, que se utiliza para pegar ladrillos, baldosas, para’ es. tucar ~muros, etc. Se le conoce tam bien con los nombres de ARGAMASA y MEZCLA ama ALBARILERIA. Arte de construir obras de ladrillos, piedra o bloques diver sos, unidos 0 revocados con mortero. Se Mama igualmente asi a la obra resul tante. LADRILLO. Elemento de forma geome trica regular, que se fabrica de arcilla cocida. Sus variedades y dimensio- nes se veran en el capitulo Vivienda de albaiiileria. ADOBE. Ladrillo tosco y de mayor tam; fio, que se fabrica de tierra. arcillosa amasada con paja y secado al sol. VOCABULARIO 3 CURSO DE EDIFICACION el esfuerzo, 0 mas exactamente, con la seecién*’ del elemento comprimido. (Llamamos seccién 0 corte de un cuerpo, a la superficie que resulta si le cortamos transversal 0 —_longitudinal- mente —a través o a lo largo de él—. En este caso interesa la seccidn transversal, que es la que se ilustra en la Figura 8). Es asi como un pilar cuya seccién mide 20x20 cm resiste cuatro veces mas a la compresion que uno que tiene una seccién de 10x10 cm (ya que la superficie de la primera seccion es de BLOQUE. Ladrillo de mayor tamaio o elemento de formas geométricas, de diversos materiales. Los bloques de cemento, por ejemplo, son por lo ge- neral huecos TEJA. Cada una de las piezas de arcilla cocida 0 de mortero de cemento, que se san para cubrir los techos de los edi ficios TRABAJO. Accion de soportar 0 ejercer esfuerzos mecanicos, como el de un pilar, una viga, etc, que se expli- can a partir del parrafo 20. En fisica se llama ‘trabajo al producto de una fuerza por el camino recorrido por su punto de aplicacién ALERO. Parte de la techumbre que so- bresale de la pared exterior de un edi* ficio MARQUESINA. Cubierta hormigén armado 0 de materiales transparentes, que proteje de la llu- via una acera o la puerta de entrada de un edificio, PAVIMENTO. Revestimiento que __se coloca a un suelo, para hacerlo sélido, parejo, de aspecto agradable y limpio. ENSAYE. Prueba a que se someten los materiales en laboratorios especiales, para comprobar sus cualidades. APOYO. Parte en que descdnsa el extre- mo de una viga o de un tijeral**. Pun- tal que sostiene algo. voladiza de Cap. | NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS A FIGURA 8. Secciones traneversales de dos cuerpos comprimidos, uno en posicion vertica y otro en posicién horizontal. 400 cm*, cuatro veces segunda, de 100 cm’). mayor que la 24. En general, las cargas*’ que reci- be un elemento constructivo se miden en kilogramos o kilos (kg), y la resistencia de un material a la compresién se mide segin los kilos que es capaz de resistir por cada centimetro cuadrado de su seccién. Se ha bla, por ejemplo, de una madera determi nada que resiste 450 kilos por centimetro cuadrado (se escribe esto asi: 450 kg/cm’). Si cada cm? resiste a la ruptura 450 kg, un pilar que tenga 100 cm’ de seccién resistira, también a la ruptura, 450 x 100 = 45.000 kg. 25. En un edificio, casi todos los mu- ros. los cimientos, los pavimentos, es- tan trabajando a la compresién. Cada ladrillo de un muro trabaja a la com- presién. Los ladrillos de las _hiladas inferiores trabajan mas que los de las hiladas —superiores, porque —_reciben mayor carga. Cuando este trabajo llega © esta proximo a sobrepasar la carga admisible del ladrillo, podemos proce der a aumentar el espesor de! muro. 26. Como este tipo de trabajo es uno de los mas elementales, la mayoria de los materiales lo resiste bien, aun- que naturalmente unos resisten mas que otros, con grandes diferencias. Pen- semos en el adobe, el ladrillo, la piedra, las maderas, el hormigén, el _acero. Todos ellos son capaces de resistir una determinada carga. que varia con la calidad del material, dentro de los limi tes que establecen los laboratorios ofi ciales. La resistencia a la compresion expe rimenta cierta’ pequefiavariacién si cambia también a altura del trozo que estamos cargando. Por esta razon las mediciones de los laboratorios se ha- cen con muestras de forma cubica, es decir. que tienen su alto igual a cada uno de sus lados. Cuando se ensayan ladrillos, es necesario preparar un cubo 0 un cuerpo similar, pegando con mortero dos trozos de ladrillos (Fi- gura 9). En el caso de materiales como la madera, la compresién es diferente si la cargamos en la direccién de la fibra o en direccién contraria a ella. He agui la carga admisible a la compresion de_ algunos materiales, que damos a manera de ejemplo: Piedras (segin su composicxin) 302.60 ke/em! Hormigon (segin su dosiicacion) 10.2 70 kglem? “Muros de larillo (segun calidad) 4a 12 kgiem’ Roble (en el sentido de las fibras) 80 kgiem* Alamo (en el sentido de las fibeas) 42 kglem* Los tertenos © suelos sobre los cuales edificamos, a bajan tambien a la compresin, puesto que soportan et ‘peso del edifcio. Su carga admisible se mide, como siem pre, en kg/em’, y fluctua entre 0.25 a 6 kglem! co segin la "za del suelo, legando ‘on casos muy especiales a 20 0 25 kglem’. Se veran mis detalles sobre la resistencia de los terrenos em el capitulo dedicado alas fundaciones. psy FIGURA 9. Muestras para efectuar prucbas a la compresion de hormigén, de mortero o mez cla, y de ladrillos. En el tercer caso es necesario preparar de antemano un cubo, como el que se ve en la figura, pegando con mortero dos trozs de ladrillo. 20 FIGURA 10. Trabajo de traceiéa. Se ilustran en la figura una pieza de madera y una barra de hierro © acero, sometidas a esfuerzos de traccion. B. LA TRACCION 27. Se llama asi a una forma diferente de trabajo de los materiales, opuesta a la anterior, y en que actuan fuerzas en direcciones contrarias, que tienden ahora a producir su alargamiento, como se ilustra en la Figura 10. En el lenguaje corriente, se usa esta palabra para indicar el acto de tirar de algo para moverlo, especialmente arras. trar carruajes sobre el suelo. Se habla asi de traccién animal, traccién a vapor, trac- cién eléctrica, de un automévil con traccién en las cuatro ruedas, etc. 28. En la Figura 11 se muestran cua tro casos comunes de traccién: A. El cable de una grua que levanta un cuerpo pesado. B. La cuerda con que un hom bre tira su carruaje. C. El refuerzo de un carro. plano de ferrocarril. D. Ti rante de un tijeral o elemento de te chumbre. CURSO DE EDIFICACION En un edificio trabajan a la traccion algunas barras de los tijerales, como acabamos de ver, las eadenas™ de hor migon armado y otras amarras que ponemos en lo alto de los muros. Inter- viene este esfuerzq en muchas solucio- nes de vigas compuestas, en torres metalicas y techumbres, y en otros re fuerzos 0 amarras que veremos mas adelante. 29.Se mide la traccién en la misma forma que la compresion, 0 sea, en kg/ cm’. En los laboratorios se preparan muestras de cada material y se les aplican fuerzas en direcciones opuestas, hasta que el material se corta, Se establece asi su resistencia a la ruptura por trac cién. Tal como ya vimos, se divide este valor por el coeficiente de seguridad, para obtener la carga admisible a la traccién. 30. Al contrario de lo que vimos con respecto a la compresion, son muy pocos los materiales que resisten bien la traccion, siendo los principales el acero y la madera. También resiste bien la traccién el hormig6n armado (no el hormigon solo), _ precisamente porque tiene armadura de acero en su interior El resto de ladrillos, las los ce- los materiales, como piedras, bloques de FIGURA 11. Ejemplos de trabajo a la traeeioa: A. El cable de una griia, que levanta un cuerpo pe sado. B. La cuerda con que un hombre tira de un carruaje. C. La barra de acero que sirve de refuerzo en un carro plano de ferrocarril. D. Barra llamada tirsmte en un sistema de techumbre. Cap. 1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS 2 mento, hormigon solo, resisten muy poco a la traccion y, por lo general, se evita que trabajen a este esfuerzo. Si se prensa que et acero y ef hormigin armado son mate rlales relativamente recientes (su uso generalizado no se remonta a mas de 100 afos) y la madera tiene una du ‘acion limitada, se comprenden las dificutades de otras epocas para erigir grandes edificios, sin ningun material apropiado para resistir este esfuerzo. Es interesante jconsiderar a este respecto los problemas que debieron vencer y el ingenio que tuvieron que desplegar los cons tructores de tiempos pasados. al utilizar solo. materiales aptos para resistir Ia compresiin, Pudieron 0 obs lante levantar enormes y hermosas _construcciones. trltando de evitar cuidadosamente en ellas la aparicion de esta forma de trabajo. la traceién, como algo comple tamente Tendremos oportunidad de verlo mas adelante C. LA FLEXION 31. Llamamos_viga** a un elemento largo de madera, acero u hormigon armado, que se coloca en posicion ho rizontal en los edificios, apoyado en sus extremos, y es capaz de recibir car gas (Figura 12). No siempre las vigas estan en posicion estrictamente _ hori zontal, pudiendo a veces tener un apoyo un poco mas alto que el otro. La distancia entre los apoyos se llama luz, y la pequefia cantidad que baja en el centro por efecto de la carga, reci be el nombre de flecha. 32. Una viga que recibe cargas, se dice que trabaja a la flexion, Con este esfuerzo trata de curvarse hacia abajo. lo que también se llama flexionarse. FIGURA 12. Dos vigas, una de madera y la otra de acero, trabajando a la flexiéa. Estan apoyadas en sus extremos y reciben una-carga en el centro. Arriba se ve una viga sin recibir Peso encima. Abajo se ha dibujado la misma viga con una carga en el centro y muy deformada, Para que se vean su zona inferior traccionada y la superior comprimida. En efecto, es evidente que el borde inferior de la viga aparece mas largo que su borde superior. La flexion es una forma de trabajo en que intervienen los, dos tipos de tra bajo recién estudiados, la compresion y la traccion. En efecto, si observa mos la viga muy deformada por una carga de la Figura 13.B, (se ha exagerado la deformacion para apreciar mejor el fenémeno), podemos notar que hay una zona superior en que la viga tiende @ acortarse y una zona inferior en que, al revés de la anterior, tiende a alargarse. La de arriba trabaja a la compresién y la de abajo, a la traccion La flexion es, pues, un compuesto 0 combinado, de y compresion esfuerzo. traccion 33. Si observamos una seccién o cor te a través de la viga, como se ve en la Figura 14, podemos notar que el esfuerzo de compresion, que es maximo en su cara superior, va decreciendo hacia abajo, hasta llegar a cero en-el plano cen. tral (horizontal) de la viga. Alli co. mienza a parecer la traccion, que aumenta hacia abajo, hasta ser maxima en la cara inferior de la viga Esto se ha tratado de expresar en forma grafica en la figura, en cuya sec cin —aumentada de tamaiio al lado izquierdo del mismo dibujo— — puede observarse cémo la compresion decrece de arriba hacia abajo, hasta desapare cer en la zona neutra, para transformar- a _ FIGURA 14, Se destaca aqui un corte 0 seccién a través de una viga —dibujado mas grande a la izquierda— para ver la magnitud y ubicacion del trabajo a la compresidn, arriba, y el de la zona traccionada, abajo. se en el esfuerzo contrario, que aumenta luego hacia abajo, hasta ser maximo en el extremo inferior. El plano cen tral. por ser una zona en que no se efec ta trabajo alguno, se llama eje neutro. 34. Como se ve, el trabajo a la flexion obliga a que una parte de la viga trabaje de una manera completamente distinta y opuesta a la otra, de modo que solo es posible usar un material que resista bien los dos tipos de esfuerzo, el de traccion y el de compresion. La madera y el acero cumplen esta condicion y ambos arrojan valores de resistencia 4 la compresion sensiblemente semejan tes a los de la traccién, aunque entre ambos materiales las cifras sean bastante disimi les. El hormigon armado se adapta aun mejor a estas exigencias, puesto que en él pueden ubicarse las armaduras de acero de preferencia en las zonas traccionadas, dejando al hormigén solo la principal res- ponsabilidad de las zonas comprimidas Por estas solo es posible utilizar en los edificios vigas de madera. de acero y de hormigén armado. razones, 35.La forma de la via. especial mente en su seccion, tiene bastante importancia, por lo que se vid recién en CURSO DE EDIFICACION el parraio 33. si queremos aprovechar bien los materiales. Por ejemplo, en una viga de madera de seccion rectan gular, como la que aparece en la Figu ra 1S.A. tiene madera sobrante en su zona central, donde los estuerzos son pequefios. Podria disminuirse esa parte de su seccién, como se indica en la letra B de la misma figura, sin que la viga sufra disminucion en su resistencia. Esto explica. también que el _ perfil de una viga de acero, donde el material debe ser usado con mayor economia, adopte la forma que aparece en la letra C, que se llama viga ~ 36. Hagamos otra observacion frente a este mismo fendmeno. Si tomamos una seccion cualquiera de la viga, como la seccién marcada con las letras AB. de la Figura 16 (ampliada abajo), vemos que actian en ella dos fuerzas en sentido con- trario —compresién arriba y traccién abajo— que tratan de hacer girar esa sec- cion en tomo a su eje central. Cada fuerza forma en torno al punto O lo que se llama un “momento estatico”. Aun- que no hayamos estudiado una materia como ésta, sera facil darse cuenta que cualquiera de esas fuerzas es mas efec- tiva si aumentamos Ia distancia al punto O. © eje neutro, aunque la fuerza perma- nezca igual. Como se trata de evitar que FIGURA 15. La forma de una viga es impor tante, especialmente en su seccion. La letra A muestra una viga comin de madera. Ella podria tener la forma indicada en B, sin disminuir su capacidad resistente. En C se ve una viga de acero, de perfil llamado doble T, en que se economiza todavia mas material. Cap. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS la seccion AB de la viga gire en tomo al punto O, para que ella se deforme to menos posible, se ve con claridad que mientras mayor sea la distancia entre los puntos A y B, tanto mejor resistira la viga los esfuerzos de flexién, aun- que la cantidad de material sea la mis: ma Todo esto quiere decir que es muy im- portante la altura de una viga, en relacién con su espesor. Tanto es asi que con la misma cantidad de madera, por ejemplo, podemos obtener una viga que resista va rias veces mas. Veamos esto en cifras: Si la viga de madera marcada con la letra A de la Figura 17 admite en su punto medio una carga de 80 kg, la viga de la letra B admite el doble, 0 sea, 160 kg. y la de la letra C, cuatro veces esa carga, o sea, 380 kg. Teniendo las tres, como se ve, el mismo volumen o cantidad de madera. 37. Con los conocimientos adquiridos hasta este momento, podemos resolver un pequefio problema: supongamos que se debe pasar una cajieria de agua de 2 pul- gadas de diametro a través de un enviga- do*! de madera. Es frecuente que los maestros fontaneros (o “gasfiters”), des- conociendo el verdadero dafio que ocasio- nan a una viga de madera, hagan una enta- Madura*’ 0 rebaje en su borde inferior o superior, como en los casos B y C de la FIGURA 16. Fuerzas que actiian en una seccién de una viga. La seccidn 0 corte marcado con las letras AB, aparece aumentada abajo, para ver dos fuerzas en sentido contrario, que tratan de hacer girar la seccién en torno al punto O. 2B FIGURA 17. Ejemplo de tres vigas con igual vo lumen de madera, pero de distinta forma o posi cion de su seccion. Mientras la primera es capaz de soportar un peso de —supongamos— 80 kg, la segunda soporta 160 kg.y la tercera, 320 kg. Figura 18, cortando de esta manera aquellas partes de la viga que resisten un mayor esfuerzo. Demas esta decir que con este corte se disminuye la sec cion itil de la viga a la parte restante, disminuyendo su resistencia propor cionalmente. Si en cambio, hacemos un agujero en ella, del mismo tamajio, en su zona central o neutra, como se ve en la letra A, de la figura, no le oca- sionamos dafio alguno. 38. DESLIZAMIENTO. Hagamos la siguiente experiencia con una viga de madera. Dividamos. su volumen o su cuerpo en una cantidad de tablas colo cadas de plano una sobre otra, como se indica en la Figura 19.A. (En la letra B se muestra la viga entera) Desde luego, si aplicamos una carga en el centro de este conjunto de tablas, comprobamos que resiste menos que una viga entera o maciza de igual volumen, 0 lo que es lo mismo, el con- junto se flexiona con mayor facilidad. Esto. es bastante l6gico, porque al curvar 0 flexionar una viga maciza, obligamos a alargarse a su zona inferior y a acortarse a su zona superior, lo que no es facil que ocurra, puesto que hay oposicién del cuerpo de la viga a tomar esa deformacién. Pero si noso- tros separamos las distintas zonas. les damos facilidades para que puedan des 4 FIGURA 18. ;Dénde se puede abrir un agujero a una viga de madera, sin disminuir su resistencia? En la zona del eje neutro, como en A, no se ocasiona daiio alguno a la viga. No asi abajo 0 arriba de ella, como en B y C, en que se corta la parte mas itil de su seccion. lizarse unas sobre otras, sin dificultad, pudiendo tomar el conjunto la forma curva con un esfuerzo mucho menor. Puede comprobarse lo dicho, si antes de cargar este conjunto de tablas, le hacemos unas rayas verticales a los costados, como se ve en la Figura 20.A Después de curvado el conjunto por efecto de la carga, observamos que en el centro (marca 1 de la Fig. 20.B) no se ha producido deslizamiento; ha ocurrido uno muy pequefio en la marca 2, mayor en la marca 3 y mayor aun en el extremo de la viga. 39. Podemos aprovechar el _conoci miento de este fendmeno, para el caso de FIGURA 19. Para comprobar el fendmeno del deslizamiento, dividimos una viga de madera en un conjunto de tablas colocadas de plano una sobre otra, como se ve en A. En la letra B se mues. tra la viga entera. CURSO DE EDIFICACION necesitar una viga de madera compuesta de dos piezas, si su tamafio no hace posi- ble usar una sola. En este caso es necesario unir las dos piezas de madera, precisa- mente para evitar el deslizamiento (Fi- gura 21.A). Lo que se consigue colocando tacos de madera entre ellas, evitando su separacién por medio de abrazaderas me- talicas. Notese que estos dispositivos se colocan mas préximos hacia ambos extre- mos, donde es mayor la posibilidad de des lizamiento. FIGURA 20. Dibujamos en los costados varias rayitas verticales como en la letra A, que sefiala mos con los numeros 1, 2, 3. Después de curvado el conjunto por efecto de una carga \B). compro: bamos que en la marca I no se ha producido desli zamiento, este es pequeio en 2, mayor en 3 y maximo hacia el extremo de la viga. Un efecto contrario al descrito. se persigue en lo que llamamos ~paquete de resortes” de un vehiculo —su nombre correcto es muelle de bales ta— (Figura 21.B). caso en que se desea que el conjunto posea la mayor flexibilidad posible. Para’ ello se divide justamente el volumen del pa quete en una serie de laminas que pueden deslizarse unas sobre otras. Obsérvese que las hojas del resorte estan unidas en el centro por un perno —donde no hay deslizamiento— y en los extremos por abrazaderas, que dejan libre su_ posi bilidad de movimiento longitudinal. Si en vez de estas abrazaderas, atravesara mos las hojas en su extremos con sendos pernos, de inmediato dariamos figidez* al conjunto. Cap. 1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS 40. Con lo que hemos aprendido hasta este momento, podemos entender en ge- neral el funcionamiento de diversos tipos de vigas, como las que se ilustran en la Figu ra 22. Ya explicamos en el parrafo 36 de este capitulo la importancia de la altura de una viga, y de distanciar al maximun las dos zonas, la comprimida y la trac cionada, de su eje neutro. Puede con cebirse pues el perfil de una viga, con un nucleo capaz de trabajar a la com presién arriba, con otro niicleo apto para resistir la traccién abajo, y con un simple elemento de separacién en tre ambos, que se llama alma. Este elemento de separacion puede ser mucho mas delgado y es frecuente que vaya perforado (Figura 22.A) 0 esté for: mado por barras. como en el caso B de la_ misma figura. Este ultimo tipo de viga, muy usado en la actualidad, se conoce como viga de celosia, y esta formada por barras de hierro redondo unidas por soldadura eléctrica. Se estu- diar mas en detalle en el capitulo destinado @ construcciones metalicas. La viga de acero que vimos en la Figura 15.C, se lla- ma de “alma llena”, para diferenciarla de la que estamos considerando. Se muestra también en la letra C de la Figura 22 una viga triangulada de 23 FIGURA 21. A. Viga de madera compuesta de dos piezas. Para evitar el deslizamiento se unen las dos piezas por medio de abrazaderas de hierro, colocando pequeitos tacos de madera entre ellas. B. El efecto contrario al descrito se Persigue en un “paquete de resortes” —o ‘muelle de ballesta— de un vehiculo. madera, en que se producen las mismas zonas de trabajo que hemos descrito. En los casos sefialados con las letras By C de esta figura, las barras oblicuas trabajan comprimidas y traccionadas, alternadamente. 41. En el caso de vigas de hormigon armado, la traccion esta soportada por el acero de su armadura y la compre sién, particularmente por el hormigon. FIGURA 22. Tres tipos diferentes de ‘A. Viga metalica con alma perforada. B. Viga de celosia, formada pur barras de acero redondo, soldadas eléctricamente, de uso muy frecuente en la actuali, dad. C. Viga triangulada de madera. 26 Es decir, las barras de acero que colo. camos en su interior, permiten a esta piedra artificial que es el hormigon, trabajar a la traccién y, por lo tanto, @ la flexion. (Recordemos que las pie dras naturaies sold resisten bien la compresion). Un caso interesante, para ver mejor los fenémenos que estamos _conside rando, lo constituye una viga de hormi gén armado sobre varios apoyos. que recibe el nombre de “viga continua”, por estar constituida por un solo ele mento, que no se corta en los apoyos. como las vigas de madera (Figura 23.A). Si cargamos esta viga a lo largo de toda su longitud, va a tender a deformarse como se indica en la letra B, es decir, curvandose hacia abajo en las partes libres y hacia arriba frente a cada apo yo. Es evidente que la parte traccio nada, la parte que trata de alargarse, © sea, la parte convexa o saliente de su curvatura, cambia en cada tramo de abajo hacia arriba 0 viceversa. Se muestra en la letra C como, por esta razon, las principales barras de acero de la viga siguen el mismo camino de la zona traccionada CURSO DE EDIFICACION En la figura, el extremo derecho de la viga aparece saliente mas alla del tltimo apoyo, lo que se conoce con el nombre de consola o voladizo, pudien do decirse “viga en consola” o “viga en voladizo”. Notese como en este caso la zona traccionada permanece en la parte alta y la armadura de acero ocupa logica mente ese lugar. D. EL PANDEO 42. Si aumentamos el trabajo a la compresion de un pilar muy alto y delgado, 0 una barra que sea esbelta (de poca seccion en relacién a su lon gitud), aparece el peligro de pandeo. Se llama asi a una brusca curvatura hacia un lado que sufre el pilar o la barra, y que generalmente termina en su ruptura (Figura 24). Al curvarse esta barra o pilar, su parte convexa (saliente) se alarga_y. tracciona y su parte cOncava (entrante) se acorta o comprime, en forma muy semejante a lo que ocurre en la flexion, por lo que este fendmeno se conoce tam bién con el nombre de “flexion lateral” au Ue Py by POT phd fbb a U FIGURA 23. Ejemplo de viga continua de hormigén armado, con varios apoyos. En la letra B se muestra su manera de deformarse por efecto de las cargas que soporta, notandose que las zonas trac cionadas estan abajo en los tramos libres (entre los apoyos), y arriba, frente a cada apoyo. En C Vemos cémo las armaduras de acero principales siguen la trayectoria de la zona traccionada . aparece una parte en voladizo 0 consola (sin apoyo), con su parte trac extremo a la derecha de la vi cionada arriba. En el Cap. 1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS 43. Si bien es cierto. que el pandeo, una vez producido, se asemeja a la fle- xion, difiere mucho la forma de produ cirlo, Notese, por ejemplo, que en una viga, la flexion es ocasionada_ por una fuerza o carga perpendicular” a lla, mientras que en el pandeo hemos apli- cado cargas en el sentido de su eje mayor (Figura 25). Otra diferencia muy importante desde el punto de vista constructivo, es que en el caso de la viga. sabemos de antemano en qué sentido se ha de flexionar, y por lo tanto, podemos prever esta deformacion. sin desperdi ciar material. En cambio el pandeo que en realidad es un accidente— puede producirse en diversas _direc- ciones, y debemos preverlas todas. FIGURA 24. Ejemplo de pandeo. En la figura aparece un pilar delgado que, al recibir una car ga, se pandea. También se ve una barra delgada sometida a compresién, que sufre el mismo fend meno. “44. ;Por qué se produce el pandeo? Al comprimir un elemento muy esbelto. por medio de dos fuerzas opuestas. aplicadas en su eje (linea central) lon gitudinal, dichas fuerzas deben trasla darse en linea recta a lo largo de ese eje, hasta -anularse o contrarrestarse una frente a la otra. En teoria, si el elemento comprimido es _ perfectamente recto, no deberia producirse pandeo. 7 FIGURA 25. Diferenciay entre la flexion y el pandeo. En el primer caso la ilexian es ocasionada por una carga perpendicular a la viga, mientras, que en el segundo caso, se ha sometido una barra dos fuer cas en el sentido de su largo. No obstante, en pilares 0 barras muy argos, es posible que las fuerzas se aparten levemente de su eje. En ese mismo instante aparece un momento de fuerzas, como se ilustré en la Figura 16, que antes de disminuir, origina un es- fuerzo perpendicular al elemento com- primido, que aumenta a su vez el momento Por eso deciamos que una vez producido el pandeo, generalmente termina con la ruptura de la pieza afectada, salvo que desaparezca o disminuya antes la carga. 45. El pandeo se produce en la di- reccion en que la seccién del elemento comprimido es mas pequefia. Por ejemplo, si un pilar tiene seccion rectan- sgular (Figura 26.A), tiene mucha faci- lidad para pandearse, pero solo en dos direcciones; si su seccién es cuadrada (letra B de la figura), la posibilidad de pandeo es menor, pero posible en cuatro direcciones; y si es circular (letra C), puede pandearse en cualquiera direc cién, sin predominio de ninguna. Esta ltima es la forma mas economica para prevenir esta deformacion. 46.La manera corriente de evitar el pandeo es aumentando la seccién del ele- mento comprimido. Sin embargo, la parte realmente util de la seccién que aumenta- mos. es aquella cercana a los bordes 0 ca- ras de la pieza. 28 A B Cc FIGURA 26. Direcciones en que puede produ cirse el pandeo. A. En un pilar de seccién rectan gular. B. En un pilar de seccion cuadrada. C. En un pilar de seccién circular. Expliquemos por qué, Dijimos ya que al producirse el pan- deo se forman en la pieza dos zonas opues tas, una comprimida y otra traccionada, igual a la que vimos en una viga. Tal como en la viga, es importante separar estas zonas, para aumentar el momento entre las fuerzas opuestas. Por eso. se aumenta la seccion de la pieza. Pero también a semejanza de lo que ocurre en una viga, entre estas fuerzas se pro duce una zona neutra, donde el trabajo es minimo o nulo. Esta razon explica que los pilares metalicos, por ejemplo, que estan constituidos por un material caro, sean huecos. 47. Analicemos un caso. determinado. Una losa de hormigén armado, que sirve de techo de un pasillo cubierto, descansa sobre pilares metalicos (Figura 27). Es tos pilares trabajan a la compresion. Si calculamos la seccion necesaria para resis tir este esfuerzo, de acuerdo a los kilogra mos por cm’ que es capaz de resistir el acero, nos resultaran barras redondas de unos 20 mm.de diametro**. Facil es com- prender que pilares de esta seccion, aunque ‘CURSO DE EDIFICACION sean capaces de resistir la compresion. su friran un pandeo inmediato. Hagamos notar sin embargo que si esta losa de hor- migon armado estuviese muy cerca del suelo y estos pilares fuesen de no mas de unos 15 centimetros de largo, resistirian \perfectamente su peso, sin pandearse. FIGURA 27. Paso cubierto formado por una losa de hormigon armado, que descansa sobre pilares metalicos. Si se considerara solo la carga que gra vita sobre los pilares, ellos tendrian un diametro muy pequefio, que los expondria al peligro de pandeo. Cualquiera. persona adulta sabe, aun que no conozca la causa exacta de los fend menos que estamos considerando, que este caso se resuelve colocando tubos huecos de acero, en vez de las barras redon- das macizas, de muy pequefio diametro, que nos dio el calculo de la compresion. Lo importante es que nosotros compren- damos, con los conocimientos adquiridos hasta aqui, el por qué de esta realidad. Lo légico sera usar tubos que tengan semejante cantidad de acero que las barras redondas de 20 milimetros de diametro, puesto que la compresién sigue siendo la misma (Figura 28). FIGURA 28. Seccion de pilar macizo y hueco, con la misma cantidad de material. Para sostener la losa de la figura anterior, se usa el pilar hueco, para que no haya peligro de pandeo. Cap.1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS barras rectas de sus por pie- Ahora bien, las lados podemos reemplazarlas zas de una forma especial (letra D), sin que la estructura basica del trian gulo y sus propiedades desaparezcan. Unicamente que al tener ahora la barra una forma ligeramente doblada o curva- da, tenemos que aumentar su grosor en la parte media, porque alli trabaja mas que cuando era recta, para evitar su deforma- cién Una pieza con una forma iregular como ta puede chimnerse en la actualidad con el sistema llamado. ma tere laminnds, que comsste en peuar tablas,trslapadas unas con otras, con la curvatura y forma final deseada Tambien puede lograrse con barras o laminas de acero soldados, Incluso, en casos especiales, con una varian {fe del hormigon armado, llamado hormigia precompri ido. 90. ;Qué ventajas se obtienen de una forma como ésta? Desde luego, se logra un recinto con un espacio util mas amplio y regular y también mas agradable (letra B de la fi- gura), cuyas proporciones entre el ancho y el alto pueden desde luego variarse a voluntad. Cada elemento o unidad, como el de la letra E de la figura, esta articulado en tres puntos, en la misma forma que el triangulo primitivo y, tal como él, es indeformable OTRAS FORMAS DE RESOLVER LOS ESFUERZOS HORIZONTALES 91. Deciamos que un simple poste puede estar expuesto a esfuerzos ho- rizontales, que traten de derribarlo, aunque esté empotrado* o introducido en el terreno. Si la fuerza acta en una direccién determinada, el poste puede reforzarse de dos maneras: en el caso B de la Figura 55 se ha puesto un puntal que forma un triangulo con el terreno y que trabaja a la compresion. En el caso C, en vez de un puntal se ha puesto un tirante, que trabaja a la traccion Logicamente son diferentes los apoyos en el te reno de ambos refueraos. En el primer caso, el puntal empuja hacia Ia estaca; que debe evitar su desizamiento 0 FIGURA 54. Se repite aqui en A el recinto que vimos en la figura anterior (marcado con una D). Estos triangulos indeformables pueden ser reem- plazados por una forma especial, como se ve en B. O sea a cada barra recta de sus lados (C) se le da la forma especial que se repite en D, sin que se modifique basicamente el triangulo indeformable, que puede estar articulado en sus tres esquinas. Se obtiene asi un recinto con mayor espacio itil a base de un elemento estructural (E) que trabaja de manera semejante al triangulo primitivo. En el segundo ejemplo, el tirante trata de extraer Ia estaca y debe estar unido a ella. En vez de estaca, actia mejor un dado 0 tro20 de hormigén enterrado en el suelo 92. Si en vez de un poste, se trata de un muro que pudiera volcarse, como se ilustra en la figura 46.C, el caso tiene cierta semejanza. Tomemos la parte central del recinto de forma alargada que estudiamos en la Figura 52, que como se recordara, era la parte que no resistia bien los esfuerzos laterales. 0 muestra de esa zona En la Figura 50.A_ se nuevo —separada del resto del recinto, que se reduce a dos trozos de muro con una losa sobre ellos. Sa: bemos ya que si aplicamos una fuerza en el sentido de la flecha, por pequeiia que sea, se produce su caida. {Cémo podriamos dar resistencia ante los esfuerzos horizontales a una forma constructiva como ésta Comencemos por simplificarla, para facilitar el problema, a dos piezas ver ticales, con una tercera apoyada sobre ellas, como se ve en la letra B.1. Podemos comenzar por elegir entre diversas maneras de afirmar los elemen tos verticales desde su base, tratando tam bién de empotrarlos al terreno. En la le- tra B.2 se ven los pilares prolongados hacia abajo y unidos a la tierra por un cimiento 0 por un relleno de hormigon, tal como afirmariamos un poste de cemento de alumbrado. En B.3 se ha reforzado el mismo sistema, con sendos machones que aumentan la rigidez del empotramiento Por iiltimo, en B.4 se han unido los pilares en el nivel del terreno por un elemento horizontal, conformando con ellos una especie de letra U, que puede lograrse en hormigén armado. (Solucién te6 rica que rara vez se emplea, porque no es econémica) En los cuatro casos la viga superior est simplemente apoyada en los pilares. 93. En los ejemplos de la letra C se invierte el sistema, buscando la rigidez en los angulos superiores, en vez de los angulos que forman los pilares con el terreno. Esta es la forma que vimos en el parrafo 77 y que correspondia a la estructura de una mesa. Este mueble, en efecto, resiste bien los esfuerzos horizontales y sus patas (que corres- ponden a los pilares) no estan empotra das en el suelo. En este grupo de casos se busca la unin rigida de los pilares con la viga (CURSO DE EDIFICACION AB. Cc. FIGURA $5. A. Poste empotrado en el suelo, ca paz de resistir pequefios esfuerzos horizontales. Cuando soporta una fuerza, en una direccién de terminada, puede reforzarse de dos maneras: B. Con un puntal trabajando a la compresion. C. Con un tirante traccionado. superior, de manera que las tres piezas actuan como una sola, con la forma de una U invertida. Las soluciones C.1 y C.2 se_prestan para estructuras de madera. La pri- mera se usa, por ejemplo, en la enma- deracién de un parrén, en que los pila res suelen estar simplemente apoyados en una base de piedra o de hormigén. (No es facil empotrar en el suelo un pilar de madera, como se vera mis ade- lante). La segunda solucién se presta para recintos de cierto tamafio, como .el de una sala de clases, o algo similar. La forma C.3 es apropiada para es- queletos metalicos. Por ultimo, la solucién C4 es la que mas se emplea y corresponde al hormigén armado. En este material, en el que desaparece el problema de las uniones, pueden construirse los _ tres elementos como si fuera uno solo, con el espesor aumentado y la armadura de acero concentrada donde los esfuer zos son mayores. Comparada esta forma con la que vimos en B.4, que es casi la misma invertida, resulta mas econémica y mas logica, puesto que el elemento horizontal, que en aquélla sélo servia para reforzar el angulo de los pilares con el terreno, aqui sirve también como viga que completa el recinto, 0 recibe cargas de otro piso superior. Cap.1. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS A. oF y > } >i] [ OTTO TOT ETTORE: FIGURA $6.A. La zona central de wi aislada, puede volcarse con facilidad. ccinto de forma alargada (Figur: Diversas maneras de dar resistencia lateral a dos elemen considerada de manera tos verticales, que sostienen a un tercero horizontal (explicadas en el parr. 92), tratando de reforzar su union con el terreno. C. Soluciones al mismo problema buscando —por el contrario— la rigidez en: los angulos o esquinas superiores (parr. 93). Es interesante comparar estas ultimas soluciones con la estructura de una mesa, que vimos en el parr. 77. 94. Este ultimo sistema estructural, for- mado por dos pilares intimamente unidos a una viga, es lo que se conoce con el nom- bre de pértico. Este que acabamos de ver es un portico con dos articulaciones, Puesto que los pilares no necesitan estar empotrados en el suelo, tal como vimos que ocurre con las patas de una mesa. Se utiliza mucho, como se dijo, en es- tructuras de hormigén armado y de acero. El elemento estructural que vimos an- tes en la Figura 54.E, se conoce también como portico de tres articulaciones. EL PROBLEMA DE SALVAR UNA LUZ 95.Se dice salvar una luz por resol- ver o cubrir una distancia entre dos apoyos. Este es un asunto de particular im- portancia en edificacin, puesto que siempre que abrimos un vano en un muro © deseamos dar forma a un recin- to 0 a un espacio determinado, tenemos que cubrirlo. Lo que implica que una parte de la estructura, de material pesado, tiene que ser capaz de soste- nerse en el aire, apoyada solo en sus extremos © en su contorno. Por eso —por ser importante y por adoptar muy variadas soluciones— lo veremos con mayor detalle. En la figura 57 se ilustran los si guientes ejemplos: A. Tablones de andamio apoyados en sus extremos; B. Una viga de madera que descansa en dos pilares: C. Un dintel que cierra por arriba el vano de una ven- tana; D. Una losa de hormigon armado que separa un piso de otro en un edificio; E. La enmaderacién de techumbre de un galpon. FIGURA 57. Ejemplos de clementos rectos capa ces de salvar una luz: A. Tablones de andamio B. Viga de madera entre dos apoyos. C. Un dintel sobre un vano. D. Losa de hormigén armado. E. Enmaderacién de techumbre de un gal pon. Pueden distinguirse elementos de . poco espesor lateral, en que predomina su lon- gitud, como los casos B y C de la figura, y otros que sirven para cubrir una super- ficie horizontal, como el caso A y, todavia mejor, los casos D y, E. 96. Cuando moderada, basta con utilizar una la distancia a salvar es viga CURSO DE EDIFICACION para los casos lineales y una losa si se trata de cubrir una superficie. No obstante, cuando las distancias entre los apoyos 0 las cargas que recibe son mayores, el problema se toma algo mas complejo y es necesario recurrir a varios elementos, 0 a barras 0 piezas combinadas. Veamos las manera ordenada. formas principales, de 97. Una viga reforzada. En la letra A de la Figura 58 tenemos una viga de mucha longitud, en relacién con su seccién, en peligro de flexionarse. La manera mas sencilla de resolver el problema es colocar un pilar inter medio, como se ilustra en la letra B de la figura, que reduce de inmediato a la mitad la luz primitiva. Si no deseamos 0 no podemos recu- rrir a este nuevo apoyo, tenemos que buscar por otro camino. Desde los apoyos de la viga podria mos colgar un cable capaz de resistir un peso semejante a la carga que ella recibe (letra C). Se ha colocado en cada apoyo una polea o roldana, donde el cable puede deslizarse y sostener sendos pesos que equilibran la carga central. (Notese que las pesas de los apoyos son iguales a la mitad de la carga central). En efecto, sosteniendo un tirante** desde cada apoyo de la viga (letra D) podemos reemplazar al pilar central que vimos en B. En este caso el elemen- to corto central y vertical (1-2) que se interpone entre los tirantes y la viga, trabaja ala compresién. Su funcion consiste en producir una separacion entre la zona traccionada inferior y la zona comprimida superior de este con- junto, tal como antes habiamos visto que ocurre en cualquiera viga simple. (Parrafos 31a 41). Cap.1,NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS 98. El mismo recurso podemos apli- carlo a un nivel mas alto (letra E), le- vantando cada apoyo por medio de un pilar. Para que estos pilares sean ca- paces de resistir las cargas iaterales, te- nemos que sostenerlos por medio de ti- rantes desde el suelo (como vimos antes en el parrafo 91 y en la Figura 35.C). En esta solucién, los pilares traba- jan a la compresién y todos los elemen- tos que hemos dibujado con una sola linea, trabajan a la traccién. En principio, los casos D y E son muy similares, pues to que no hemos hecho otra cosa que trasladar los tirantes lun poco mas arriba, manteniendo su misma direccion y Jos esfuerzos que soportan. Con este traslado, ha desa pparecido el elemento distanciador central y han apare ido los dos pilares de los apoyos, desempefando pare ‘ida funcion 99. También podriamos tomar el trian- gulo de la letra D y darlo vuelta hacia arri- ba, como se ve en la letra F. Al proceder asi —como ocurrira en otros casos similares— se invierten los esfuerzos: las barras incli- nadas trabajan ahora a la compresion (en vez de traccion) y el elemento vertical central esta traccionado (en vez de com- primido). En la solucion ilustrada en la letra D el punto 1 se apoya en el punto 2, mientras que en la solucion de la letra F, el punto | esta eolgado desde el pun- to 2. 100. La misma serie de _soluciones puede emplearse en una viga larga, que dividimos en tres tramos, en vez de dos, como se aprecia en la Figura $9. Vea, paso a paso, como trabajan las diversas partes de estas soluciones, com- parandolas con las de la Figura 58. 101. Diferente inclinacién de las fuer- zas. ;Qué ocurre si cambiamos el angulo de las barras inclinadas de estas solucio- nes, como las de las Figuras 58.D y 58.F? FIGURA 58. A. Viga de poca seccién que amenaza flexionarse. B. La solucién mas directa podria ser un apoyo central. En vez de este apoyo, podria tratarse de originar una fuerza hacia arriba equi valente, representada por el peso que cuelga de un cable (letra C), idea que se aprovecha en’ la solucién con tirantes de igual inclinacién, ilustrada en la ietra D. El elemento vertical 1-2 trabaja a la_compresion. Si trasladamos esta. misma solu- cidn un poco mas arriba (letra E) desaparece el elemento central y aparecen dos pilares compri- midos, que es necesario sostener con tirantes laterales hacia el terreno, como se vio antes en la Figura 55.C. Por iltimo, en la letra F se invierte todo el sistema, de manera que ios esfuerzos prin cipales resultan también opuestos: comparando asi la solucién de la letra D con la de la letra F, se observa que los elementos inclinados "traeciona dos estin ahora comprimidos y la barra central 1-2 comprimida esta ahora traceionada. (Las \iezas traccionadas se han dibujado con una sola linea) 20 sea, qué diferencias podrian apreciarse entre los dos sistemas que hemos dibujado de nuevo, con diversas inclinaciones, en la . Figura 60? FIGURA 59. La misma serie de soluciones de la fi gura anterior, dividida ahora en tres tramos. Los sistemas mas usados son los de las letras D y F, en que los esfuerzos de las barras correspondientes aparecen también invertidos. Vale la pena que nos detengamos un poco a considerar estas variaciones. Para ello, vamos a llevar a cabo un pequefio experimento. Colgaremos otra vez un cable desde dos apoyos, co mo hicimos en 58.C, pero ahora lo, ha remos de manera que las dos poleas puedan desplazarse horizontalmente con facilidad, como 10 hace un pequefio carro sobre un riel (representado en la letra A de la Figura 61). Por lo tanto, los apoyos o puntos des de donde antes colgaban las _poleas, que eran fijas, ahora pueden moverse sobre un riel horizontal. CURSO DE EDIFICACION Observemos las _ilustraciones_ marca das con las letras B, C y D de esta Figura ol. Se han dado diversas inclinaciones a los cables que sostienen el peso central. Lo que desde luego puede conseguirse solo mientras mantengamos fijas_ las poleas de los apoyos. Qué ocurre si las dejamos en li bertad de deslizarse sobre el riel? En los tres casos, las poleas de los apoyos tratan de correrse hacia el cen- tro del tramo. Las poleas del ejemplo B trataran de desplazarse con una fuerza relativamente pequefia; las del ejemplo C. con una fuerza igual al peso de cada pesa lateral, y la del ejemplo D, con una fuerza mucho mayor. Estas fuerzas horizontales pueden me- dirse por medio de otras poleas adiciona- les, que permitan colgar pesas, como se ve en la letra E de la misma figura. 102. Lo que acabamos de comprobar nos indica que en las soluciones que vi- mos en la Figura 58.D y en la Figura 59.D se originan fuerzas que tratan de aproxi- mar a ambos apoyos del sistema, que pro- duce una compresion en la barra horizon- tal que los une. FIGURA 60. Diferente inclinacién de las fuerzas © de las barras de los sistemas vistos en la Figura 58, letra Dy F. NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS Cap.t FIGURA 61. Diversas experiencias con pesos sostenidos por un cable entre dos poleas. En este caso los apoyos estan constituides por poleas que pueden moverse a lo largo de un riel horizontal (letra A). En los tres primeros casos (letras B, C y D) se comparan distintas inclinaciones del cable, que originan esfuerzos cada vez mayores de los apoyos, tratando de aproximarse entre si. Tales es fuerzos pueden medirse con una polea y peso adicional, que se ilustra en E. En las figuras restantes (Ie tras F, G y H) se muestran ejemplos de cables que soportan varias cargas, cuyos apoyos también tratain de aproximarse. De mayor importancia es lo que ocurre en las soluciones de la Figura 58.F y 59.F, Recordemos que en elas —por lo que vimos en el parrafo 99— todos los esfuerzos resultan invertidos. Es asi como en este caso las barras in- clinadas tratan de separar los apoyos, lo que ocurre con mayor intensidad mientras estén mas tendidas o su_incli- nacion sea menor. Estos esfuerzos dis minuyen cuando el conjunto tiene mayor altura 0 cuando las barras estan mas inclinadas. El valor intermedio se pro duce cuando ellas estan a 45°. La barra horizontal que une los apo- yos impide que estos se separen, si: guiendo los esfuerzos descritos. Para ello soporta un trabajo de traccién. Por ejemplo, en la Figura 60, los ma yores esfuerzos horizontales se produ cen en los ejemplos de la letra A (en el de la izquierda, por aproximar los apo- yos, en el de la derecha, por separarlos). En los ejemplos de la letra C. los esfuer zos son menores, e iguales al peso que recibe cada apoyo. En los de la letra B, son de valor intermedio. 103. Varias cargas desde un cable. En la Figura 61 se incluyen otros ejemplos de cables que soportan varias cargas (le- tras F, G y H). En ellos se producen tam- bign esfuerzos que tratan de aproximar fos apoyos, y que aumentan cuando el ca- ble esta mas tenso, o lo que es lo mismo, con menor curvatura. En los casos en que se voloca una serie de pesos iguales, 4 distancias también iguales, como en las letras Gy H, el cable forma una curva que recibe el nombre de eavenaria Eg B. FIGURA 62. Cable que sostiene varios pesos iguales (letra A), que corresponde a la estructura de un puente colgante (letra B). Los dos pilares del puente trabajan a la compresion. Los grandes esfuerzos laterales que produce el cable princi pal, se contrarrestan con tirantes anclados en el suelo. En este caso, las distancias entre las cuerdas que tostienen los pesos no son iguales. En cambio, cuando los pesos se tbican de tal manera que la distancia entre las cuerdas ver ticales sea la misma, la curva que se forma es una parsbola. ‘Ambas curvas geométrcas son muy parceidas, 104. Un puente colgante. Una aplica- cién muy conocida de esta forma de salvar una luz, como en la letra H de esta figura, ia constituye un puente colgante, del tipo ilustrado en la Figura 62.B. Los dos pilares del puente trabajan a la compresién. Para sostener los enormes esfuerzos laterales del cable principal, deben unirse sus extremos, con tirantes hacia el suelo, como ya hemos visto mas de una vez (Figuras 55.C; 58.E; 59.E). 105. Forma en que trabaja un arco.\ Si de nuevo damos vuelta 1a figura que forman estos cables que sostienen varios pesos, como ya hicimos antes (en los pa rrafos 99 y 102), sabemos que los es fuerzos resultan invertidos. Es asi como el arco ilustrado en la Fi gura 63.B trabaja Gnicamente a la com presion (al revés del cable de la letra A de la misma figura) y produce esfuerzos hacia los lados que tratan de separar los apoyos (a la inversa también de lo que ocurre en A). CURSO DE EDIFICACION Cada pieza de un arco o dovela es com- primida por las dos piezas vecinas actiia entre ellas como una cua. Los esfuerzos laterales que tratan de separar sus apoyos son menores en un arco alto, como el de la letra C de la figura y muy grandes en un arco bajo, como el de {a letra D. 106. La forma del arco proporciona la unica posibilidad de salvar una luz con materiales que s6lo trabajan a la com- presion, 0 dicho de otra manera, es la for- ma capaz de cubrir un espacio, sin que aparezca el esfuerzo de traccién, 0 el de flexion. Recuérdese que hasta hace poco, se disponia Unicamente de materiales capa ces de trabajar sdlo a la compresion con excepcion de la madera— como los ladrillos, las piedras, los _marmoles, ete. Por eso gran cantidad de edificios de la antigiiedad resolvieron de esta manera el problema de salvar una luz. A qué precio nos libra este recurso Qué con del arco, del esfuerzo de traccién? desventaja representa, comparado una viga recta que trabaja a la flexion? El arco da origen en sus apoyos a es. fuegzos horizontales o inclinados, que siempre ocasionan problemas en una es- tructura. En cambio la viga se apoya en sus extremos de manera simple, sélo con su propio peso y el de las cargas que so porta. Ellas son transmitidas al suelo | por los pilares 0 los muros, en direccién vertical Los esfuer2os inclinados de los arcos deben ser re sueltos cada vez. Pueden ser contrarrestados © equi dos por otf0$ arcos, por muros © por machones © cont fuerte, dando lugar a una variedad de soluciones, que seria interesante deseribir, plicarian imiilmente estas lecciones. Los edficios de piedra de otras épocas, como las gran des catedrales gotieas, de estructuras muy esbeltas y complejas, estabay resueltor con elementos superpues tos trabajando sélo a la compresion y representan un ver: dadero alarde de ingenio y equilibrio.(Véase Figura 76) pero que alargarian y com 107. La béveda y la capula. E] mismo principio dei arco se aplica a una bé- veda, que es un elemento estructural Cap.1, NOCIONES SOBRE ESTRUCTURAS FIGURA 63. Forma en que trabaja un arco. En A se ve un cable con varios pesos que corresponden a las dovelas y a las cargas del arco de la letra los del arco —al revés ‘Asi como los apoyos det cable tratan de aproximarse, tratan de separarse. En un arco alto (como en C) los estuerzos laterales son relativamente pequefios; en cambio, en uno bajo (como en D) ellos se toman muy grandes. En la letra E se ve un arco que sirve de apoyo a un puente. Los elementos verticales —al contrario de los de! puente colgante de la Figura 62.B— trabajan comprimidos. curvo en que predomina la superficie, por lo que sirve para cubrir o techar un es pacio (Figura 04.A). Se da el nombre de capula a una boveda con forma de media naranja o que tiene una base circular (le tra B de la figura) Ambas soluciones, con multiples va: riantes se aplicaron mucho en edificios de piedra y ladrillo —antes de la existencia del hormigon armado— por requerir, como se ha dicho, slo el trabajo de com presion de sus materiales. 108. Un simple horno de campo para cocer el pan es un buen ejemplo, en me- nor escala, de esta iiltima solucién cons tructiva (letra C) (Los principales provedimientos de arcos y bovedas se veran mas adelante) ecucion de COMO FUNCIONA UN TIJERAL 109. Para resolver una techumbre de madera o acero, se necesitan elementos triangulares planos, capaces de “salvar la luz” entre los apoyos laterales (Fi- a gura 65). Llamamos tijeral*' a cada uno de estos elementos transversales, cuyos de- talles constructivos se explicaran en un capitulo posterior. Por el momento, interesa_com- prender como funcionan sus _ partes, frente al problema general de salvar una luz, que venimos analizando. nos Consideremos quefio, de poca luz y grande. primero un tijeral_pe- luego, uno mas 110. Ya habiamos conocido en la Fi gura 58.F un conjunto de barras igual al que aparece de nuevo en la Figura 66, letra D. Pero vamos a llegar ahora a com- prender su funcionamiento — siguiendo otro camino, ilustrado en esta misma Fi- gura 66. Si colocamos sobre los muros de los costados de un recinto, dos maderos for mando las pendientes del techo, como se ve en la letra A de esta figura, ocurriria que ellos, al recibir el pesc de la cubierta, originarian esfuerzos laterales, que tra- tarian de separar los apoyos 0 de volcar los muros (letra B).

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