Pa mino Varad

_ ABOGADO
Reg.C.A.A. N* 341

llevando un bulto en la tolva en cuyo ínterin habría sido sustraído la compresora

del
Centro de Salud de Tambo.

SEGUNDO.- Por la oscuridad de la noche (O madrugada, no se ha logrado

identificar a la persona que transita por dichas inmediaciones, tampoco se puede
verificar el número de placa del vehículo que circula; por lo que la denuncia que
se
está entablando es contra las personas que resulten responsable por el delito
denunciado. Además se debe hacer atingencia, que la citada compresora es una
herramienta de trabajo que se utiliza a la par con el equipo odontológico de dicho
Centro de Salud y que mucha falta hace para las atenciones de salud bucal y
actividades conexas del servicio de odontología.

TERCERO.- Mayores detalles sobre las condiciones del equipo sustraído puede
brindar los servidores del Centro de Salud e Tambo, como son la que venía
desempeñando como Jefa del Establecimiento, doña Hilda Dina Mendoza Gómez
y el encargado de Recursos Humanos Adolfo Quispe Gálvez, quienes deberán ser
notificados por intermedio de la Plicia Nacional de Tambo.

I11.- FUNDAMENTACIÓN JURÍDICA:

La materialización de este delito se objetiviza, con el apoderamiento por parte del

agente de un bien mueble total o parcialmente ajeno, sustrayéndola del lugar donde
se encuentra. El delito de Hurto se consuma cuando el agente, luego de haber
sustraído el bien mueble, de la esfera de custodia ajena, lo introduce en su propia
esfera de disposición, apoderándose de él aunque sea por breve tiempo y aunque
no tenga la intención de conservarla (no es requisito típico la presencia del
animus
rem simi habendi). El factor tiempo no es relevante desde la perspectiva típica,
resulta suficiente que el sujeto activo asuma de hecho y sin que nadie lo perturbe,
las facultades de una real posibilidad de disposición (posibilidad potencial sin
necesidad que sea necesario que se actualice tal disposición) con respecto al bien
sustraído (caso en el cual, se habrá llegado al estado de apoderamiento.

En los delitos patrimoniales como el hurto, robo, estafa, etc., el bien

jurídico tutelado de manera general es el patrimonio, entendiéndose que está
constituido por la suma de valores económicos puesto a disposición de una persona,

bajo la protección del ordenamiento jurídico.