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EN- NOMB·RE DEL -PA·D.RE · .

(Cuento)
,. ·. En un ·leja.no pueblo, vivían Samuel y su hijo Lencho. El te­
rreno era tan pantanoso, que las casas las construían en alto,.
sobre grandes estacas. Tenían por costumbre construir una casa
sobre la otra, .si un hijo se rcasabc;i . : · .
Al cabo de un tiempo, Lencho �e ·casó y construyó su cas�
sobre la de su padre. Samuel, Cl:Jando vio la casa de su hijo y lo
linda que la esposa la tenía, quiso pasarse él arriba y darle a
Lencho la casa vieja. Lencho no estuvo de acuerdo. Discutiero'n
un buen rato y decidieron ir donde un juez.
El juez los oyó a los dos. Cada uno explicó a s'u manera lo
que� había pasado. El juez vio que era un gran problema.· Si le
daba la casa nueva al hijo, el viejo no lo iba a dejar vivir tran�
quilo. Y si le daba la casa vieja -al hijo,_ éste· no- iba a quedar
· contento, porque él _mismo había hecho la casa a su gusto. En-
. tonces se le ocurrió una idea:
-Persígnate - le dijo ·a Lencho.
-En el nombre del Padre, del Hijo ...
-Esp�ra, espera un momento, vuelve a persignarte - le
dijo el juez.
Volvió Lencho a decir:· -En e_l nombre del Padre, del Hijo...
-A ver, -dijo el juez-· ¿dónde-está el padre?
-Aquí -· dijo Lencho tocándose la frente.
-¿Y el hijo? - volvió a pregunta'r el juez.
· -Aquí - dijo Lencho llevándose las manos d1 pecho.
-Ves -dijo el juez- la religión lo dice: el podre arriba
y _el hijo abajo.
Así resolvió el caso el astuto juez y dejó convencidos a
los dos.

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