Relación entre pensamiento e inteligencia, cuadrantes de Herman desarrollando

habilidades mentales
 Introducción

La relación existente entre la inteligencia, el pensamiento y los cuadrantes de Herman se

puede considerar una relación estratégica en la medida de que la herramienta de

investigación ideada por Herman permite que las diferentes inteligencias puedan

desarrollarse de acuerdo a las necesidades y personalidad de cada individuo.

Por ende, el progreso de las habilidades mentales es posible gracias a las investigaciones

otorgadas por Herman, de donde se destaca que el cerebro cuenta con dos hemisferios

dividido en cuatro cuadrantes, cada uno de ellos cuenta con una inteligencia específica,

de tal manera dentro del ensayo se podrá asimilar una inteligencia lógica, secuencial,

emocional y abstracta, cada una de estas inteligencias se asocian con habilidades y

destrezas de carácter físico, matemático, administrativo, artístico, social y demás

capacidades que pueden y han sido perfiladas gracias a los cuadrantes.

Dentro del trabajo también se destaca la relación que llega a tener el pensamiento con la

inteligencia, con lo cual se comprende que si bien los dos esenciales para la

comprensión y transformación de la realidad, es la inteligencia la que define y le da

posibilidad de existencia al conocimiento, por tanto, los cuadrantes trabajan en la

identificación de la inteligencia, pero junto con ello también generan un aporte en los

conocimientos, mismos que son alimentados de acuerdo a cada rama cognoscitiva. E ahí

la importancia de la relación entre los tres elementos.

Desarrollo
La relación que puede desarrollarse entre el pensamiento, la inteligencia y el uso de los

cuadrantes de Herman como método de análisis para el desarrollo de las habilidades

mentales es una relación estratégica, este tipo de integralidades ya se las ha llevado a

cabo en investigaciones con el fin de poder definir un estilo de aprendizaje.

Los cuadrantes de Herman cumplen la función de otorgar un modelo teórico sobre el

que se fundamenta el pensamiento y la inteligencia. Dentro de los cuadrantes de

Herman se pueden encontrar cuatro tipos de inteligencias, como tal se puede hablar de

una inteligencia lógica, secuencial, abstracta y emocional, para poder tener una mejor

comprensión de los cuadrantes se cita a Aregón y Jiménez (2009):

Herman describe las preferencias del pensamiento asociándolas en algún

cuadrante del cerebro lo que permite conocer más sobre las maneras de pensar de

los alumnos, esto ayudando a tener buenos resultados, en cuanto a la estimulación

de aspectos de las funciones psicológicas superiores, por parte de la

neuropsicología incluye las funciones de atención, lenguaje, lectura y escritura,

praxis, gnosis, memoria, pensamiento, funciones ejecutivas y el estado de vigilia

(p.9).

Entre otras consideraciones Velázques, Remolina y Calle (2007) manifiestan que los

cuadrantes son estartégicos en la medida de que permiten identificar las distintas formas

que tiene un ser humano al momento de actuar, operar, aprender , pensar y convivir

dentro de la sociedad y de una cultura (p.550-51). A partir de esta idea se puede

enunciar que los cuadrantes trabajan sobre la inteligencia y el pensamiento de los seres

humanos. ¿Pero que es la inteligencia y el pensamiento? Carmen Molero (1998)

argumenta que la inteligencia es: “el principal determinante de la conducta humana es

un proceso mental unitario llamado inteligencia... que es innata...” (p.33).

Desde la idea de Molero se puede argumentar que la inteligencia es un aspecto con el

que ya nace el ser humano, es una capacidad que le permite comprender y receptar toda

la información que se encuentra en la realidad, mientras tanto la RAE describe a la

inteligencia como la: “Capacidad de entender o comprender aspectos con la finalidad de

resolver problemas” (Real Academia de la Lengua, 2016). Cabe mencionar que el

concepto de inteligencia pñuede ser aplicada a diversas capacidades cognoscitivas, tales

como el arte, la música, las matemáticas, el control emocional, la percepción, intuición,

y demás tipos de inteligencia que ya se encuentran en el adn del ser humano.

Los cuadrantes de Herman tienen la función de analizar cómo se lleva a cabo el proceso

de comprensión y entendimiento, determinando que existen cuatro tipos de inteligencia

los cuadrantes logran resolver la actuación de una personalidad en específico. Dentro de

los elementos inteligencia y cuadrantes de Herman el pensamiento vendría siendo un

resultado de la inteligencia, en el caso del RAE se identifica al pensamiento como:

“aquello que se trae a la realidad por medio de la actividad intelectual” (2016). De tal

manera, el pensamiento es algo que nace de acuerdo a motivaciones halladas en el

medio, en ese aspecto es la inteligencia, la que le permite al ser humano poder encontrar

por medio del pensamiento y la experticia adquirida a través de los años una posible

solución a un determinado problema.

En la cita se argumenta que el pensamiento nace de la actividad intelectual, por ende la

inteligencia es anterior al pensamiento, estos dos aspectos llegan a desarrollarse a través

de propuestas analísticas, tales como los cuadrantes de Herman, es en este punto donde

se puede hablar de una relación integral de los tres elementos, en donde cada uno tiene

su razón de ser, es importante mencionar que si bien el pensamiento y la inteligencia

han existido independientemente de los cuadrantes, estos no pueden separarse, y en la

actualidad esa misma condición podría establecérsele a los cuadrantes, ello debido a que
son estos los que permiten el desarrollo de las diferentes disciplinas intelectuales,

artísticas y cognoscitivas.

Dentro de los beneficios que permite el uso de los cuadrantes de Herman se puede

mencionar el desarrollo de las distintas capacidades, como tal, los cuadrantes permiten

la identificación de una inteligencia, a raíz de ello el pensamiento evoluciona hacia

nuevas consideraciones intelectuales, en donde la inteligencia se vuelve profunda y más

destacable en la resolución de conflictos, mismos que son resueltos a través del

pensamiento, el cual permite tomar decisiones en la realidad.

A pesar de que se puede hablar de una estrecha relación entre los tres elementos cabe

destacar que históricamente la necesidad de poder definir y entender a la inteligencia

humana ha pasado por algunos debates sustanciales:

La polémica acerca de qué es la inteligencia, cómo puede concebirse y en

consecuencia medirse y trabajarse ha girado en torno a cuáles son los componentes

fundamentales de la inteligencia y qué factores pueden explicar las diferencias

individuales en el rendimiento (Molero, 1998).

En base a la polémica enunciada en la cita se generan investigaciones científicas, en

donde el estudio del cerebro ha constituido una labor fundamental en la comprensión de

la inteligencia, es por ello que en la actualidad los cuadrantes siguen empleándoselos

con la finalidad de poder conocer acerca de la personalidad de los seres humanos, de tal

manera, unos tendrán más desarrollada su zona lógica, otros su parte abstracta,

secuencial o emocional.

Como tal se considera que la inteligencia, así como el pensamiento son elementos que

yacen en el cerebro y que pueden ser mejorados a partir de diferentes ejercicios, todos

destinados al desarrollo de un cuadrante en específico.

En el caso del cuadrante cortical se establece una inteligencia lógica, esta puede ser

mejorada gracias a la propuesta de Herman, lo cual repercutiría en un mejor nivel

analítico. A su vez, el segundo cuadrante posee una inteligencia secuencial, esta

repercute en un mejor nivel organizacional. El desarrollo del tercer cuadrante permite

una emoción más interpersonal y equilibrada. Finalmente en el cuarto y último

cuadrante la propuesta de Herman permite que se desarrolle el aspecto intuitivo. Cabe

mencionar que para que se puedan desarrollar los tipos de inteligencia encontrados

dentro de cada uno de los cuadrantes es necesario entender el tipo de inteligencia y

pensamiento con el cual el ser humano se destaca, esto le permitirá desarrollar su

habilidad mental.
Conclusiones

 La relación que guarda la inteligencia y el pensamiento es una relación

simbiótica, dentro de esta articulación se pueden encontrar capacidades y

habilidades de carácter mental que pueden gracias al empleo de estrategias como

los cuadrantes de Herman incrementar su nivel de recepción y comprensión.

 Los cuadrantes de Herman son un modelo de análisis, que permite interpretar e

identificar los diferentes tipos de inteligencia del ser humano, esto da cabida a la

comprensión de las distintas personalidades sociales.

 Bibliografía

Aregón, & Jiménez. (2009). Diagnóstico de los estilos de aprendizaje en los

estudiantes: Estrategia docente para elevar la calidad educativa.

Molero, C. (1998). Revisión histórica del concepto de inteligencia: una aproximación a

la inteligencia emocional. Colombia .

Real Academia de la Lengua. (2016). Inteligencia. España.