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Habla Matallana: “Que el pueblo decida’ Guillermo Segovia Mora José Joaquin Matallana fue un militar de ex- tensa y controvertida trayectoria. A los 16 afios ingreso a la Escuela Militar y progresivamente as- cendié importantes escalones en la jerarquia cas- ‘trense, entre ellos Comandante de la Policia Mi tar y del Batallén Colombia, con el que cumplié fa “Operacion Marquetalia"’ contra los grupos de autodefensa de las nacientes FARC. Fue director de la Defensa Civil, de la Escuela Militar de Cade- tes; Inspector General del Ejército, Jefe del Das, de la Aeronautica Civil y del Estado Mayor Con- junto de las Fuerzas Armadas. Gran parte de su adiestramiento, como el de la mayoria de los militares latinoamericanos, lo reci- bio en la Escuela de las Américas (Panama) y los Colegios de Comando y Estado mayor de los Esta- dos Unidos e Interamericano de Defensa en Washington. Fue miembro de laJunta Interameri- cana de Defensa, No obstante, afirma que “ha si- do mucho el dafio que ha hecho a Latinoamérica la Doctrina de la Seguridad Nacional y la mentalidad ‘macarthista impuesta a los militares del continen- y advierte que esa posicién“no es de ahora, ues en el gobierno de Alfonso Lépez previno ai Presidente “del peligro que significaba para el pais, jocrética diferia de las dictadu- ras militares y civiles mayoritarias en ese momen- to, que sus militares participaran en eventos como las Conferencias de Comandantes, sin que el go- ierno supiera qué iban a hacer alld, ni qué se de- finfa en elas”. En el mejor momento de su carrera, bajo la influencia del “Clan Varén” conformado por el Ministro de Defensa Abraham Varén, el General Camacho Leyva y otros militares cue 7 tonces por actos de corrupcién, el presidente Lé- Pez Io alej6 del mando de tropas, designéndolo director del Departamento Administrative de Se- guridad -D.A.S.., desde donde adelanté una firme batalla contra la penetracién del Instituto Lin- Gistico de Verano y agentes norteamericanos de lucha antidrogas, a pesar de lo cual Lopez prorro- 96 el acuerdo con Ia entidad extranjera y permi- ti6 el ingreso indiscriminado de sabuesos gringos. fiempo después fue removido a la Aerondu- il, donde tuvo que enfrentarse a adminis- trar una profunda crisis. En 1978 le correspon- dia acceder al Comando del Ejército, pero fue nombrado Jefe del Estado Mayor Conjunto, sin mayor decisién en asuntos practicos. El 10. de Diciembre de ese afio, dado el represamiento de ascensos por la irregular permanencia de Va- ron Valencia en el ministerio, Lopez le pidid la Tenuncia y ante su negativa, lo llamé a calificar servicios. Su hoja de vida exhibe una honestidad y pul- critud reconocida por sus adversarios y puesta a uemseire anise rie essciTo uAMIsETa CONVOCATORIA ‘A PLEBISCITO sien 4 Puepisciro na ruenserra purmserte rue NaS oLtsteRW aLaseNs enasian, prueba al denunciar la corrupcién por lo alto y la participacion de militares en el narcotréfico, ‘undo estuvo 2 cargo del DAS. Otra faceta que nadie desconoce es su trayectoria, para unos re- Presiva, para otros -para éI- leal a la defensa de la Constitucion y las instituciones y fiel a los designios del poder civil. embargo, el general Matallana_valora, sin disimular su orgullo, una comunicacién que recibié en 1972 del Estado Mayor de las FARC, en respuesta a una suya dirigida a los colonos de El Pato, en donde esa organizacién se mostraba iélogo y en la que “hacfan pre- jen era cierto que yo era el militar "3 mas duramente los ha- bia combatido en varias regiones del pais, reco- nocian que siempre lo habia hecho en forma lim- En Jos afios siguientes, su experiencia y re- flexién lo Mevaron a promover la necesidad de la Paz en foros y diversas actividades. .Su vision de la situacion del pais y lo que a su manera de ver cons- Hoy Colombia ee ‘Affo VII, No, 43, Bogots, Abril-Mayo de 1986 Licencia de Mingobierno 002346 de 1984 “Tarife Postal Reducida No. 310 “COLOMBIA HGY intorma’” una publicacién bimestral del CENTRO DE PROMOCION ECUMENICA Y SOCIAL CEPECS Personer a Juridica No. 4602 de 1979 Apartado Aéreo No. 19362, Bogoté 1, Colombia DIRECTORA Irma Garcia Heredia CONSEJO EDITORIAL Guillermo Segovia Mora, Alvaro Alvarez, Irma Garcia, Martha Lucia Alvarado. COORDINATION DE REDACCION Guillermo Segovie Mora EDICION William Barbosa titufan las medidas més importantes hacia un pro- ceso de pacifieacién, quedaron esbozados en el bro “‘La Alternativa de 1982 : guerra o paz” que a manera de recomendacién dirigié al presidente Be- tancur. Ante la encrucijada de las pasadas elecciones, junto a intelectuales y dirigentes politicos como Alvaro Uribe Rueda, Jorge Child, Carlos Villalba Bustillo, Ramiro de la Espriella, se abstuvo de par- ticipar y lanzé una “Convocatoria a Plebiscito” en la que se plantea, ante la corrupcion y la falta de voluntad politica de los partidos, el Congreso y el gobierno, que debe ser el pueblo ol que decida qué cambios requiere el pais para superar la actual que podria desembocar en una guerra civil catastrOfica o en una dictadura derechista. EI Plebiscito, la paz, el poder militar y civil, los partidos, la situacién social, fueron algunos de los aspectos abordados en esta entrevista exclusi- va coneedida por el General (r) J osé Joaquin Ma- tallana a COLOMBIA HOY Informa. : COLOMBIA HOY : éCémo ve la situacién politica actual? r General (r) JOSE JOAQUIN MATALLANA: Quie- nes lanzamos el Ilamamiento del 14 de Febrero consideramos que el pafs estd claramente abocado a nuestra manera de ver, a tres alternativas: 1. Que prosiga Ia lucha armada, cada vez en ma- yor escala, sin que nosotros apreciemos que esa lucha va a conquistar el poder. Esté muy lejos de at. Que como reaccién a esta violencia, elementos: inspirados por ideas autoritarias y de un régi men fuerte y represivo, logren la manera de que el pals Ilegue a un gobierno dictatorial de extrema derecha con el cual obviamente no es- tamos de acuerdo como demécratas. ‘Que todo colombiano encuentre la manera de hhacerse escuchar y de manifestar claramente cuales son los cambios que el pafs necesita pi fa que no caiga en ninguna de las dos alterna vas mencionadas sino que se haga una rees- tructuracién de las normas constitucionales que deben orientar la vida nacional y de esta ‘manera se evite que se haga por la fuerza. La propuesta parte de otra base muy clara y es ‘que en Ia actual situacion politica del pais, los con- gresistas que son los llamados a hacer los cambios de fondo de la Constitucién y las leyes, no lo van ‘a hacer, ya esté demostrado que no lo hacen. De- be ser el pueblo entonces, quien busque la manera de hacerse sentir; por eso insistimos en que la Gni- a salida pacifica que le queda a Colombia es que el pueblo diga cudles son las. reformas de fondo, ‘que exige que se hagan a la Constitucién para que de esta manera se corten los motivos y las causas de la rebelién y Ia lucha armada. PLEBISCITO PARA EL CAMBIO Qué reformas plantean ustedes deben conside- rarse en el Plebiscito? Lo primero, obviamente, es con: mente las formas de pronunciamiento popular que deben estar siempre abiertas al pueblo como cons- tituyente primario, o sea, el Plebiscito; el referen- do; a revocatoria del mandato al elegido que no ‘cumple con sus deberes y la inciativa popular en las reformas constitucionales legales. Segundo, una reforma muy de fondo del Con- ‘greso, para dejar una sola Camara politica, con una base de poblacién mucho més alta para reducir su nimero. También proponemos que se discuta an- tes de llegar al texto final del Plebiscito la pro- puesta de crear una cdmara de tipo institucional re- presentativa de las organizaciones de cardcter na- ional, de manera que de cada actividad importan- te, que se lleva a cabo on el pats, que ya esté es- tructurada, bien organizada, tenga derecho a llevar un auténtico vocero que esté allf para presentar las iniciativas que tocan con su sector y también para tener cierto poder de observacién sobre las inicia- tivas-que surjan de los demés segtores. De manera que un proyecto de ley que reciba la aprobacion de los demés, debe ser una ley de muy buena cali- dad y muy sentida en la opinién piblica porque cada uno representa una actividad y si los demas se ponen de acuerdo es porque es buena, naturalmen- te sujeta al paso a la otra Cémara, esta es una idea ara discutir. Se contempla también la posibilidad de imponer el voto obligatorio porque ese seria el golpe de gracia que se le daria al clientelismo y al caciquismo, ya que teniendo que ir el ciudadano a votar en alguna forma en cada eleccién, él no po- drfa tener el electorado cautivo como Io tiene hoy en dia, no seria para llevar al ciudadano por la fuerza 2 votar sino que el no votar tiene sus con- secuencias apenas légi¢as en el terreno de los de: rechos civiles, por ejemplo, no puede ser funciona- rio del Estado, porque mal puede ser nombrado a cumplir una funcién publica un individuo que cuando tiene la posibilidad de votar como quiere que se organice y se oriente el Estado, no lo hace. Y de algunos efectos civiles, como sucede en Ve- nezuela, donde el que no vota pierde unos dere- hos hasta la préxima eleccién. En otros puntos se contempla que el Presiden- te de Ia Repablica y el Designado vayan en una misma papeleta para que el pueblo sepa quién va a reemplazar al presidente y su eleccién no sea moti- vo de maniobras como las que se llevan a cabo ac- tualmente para la eleccién de designado. También se contemplan cuéles deben ser los funcionarios que el pueblo quiere que sean de eleccién directa: ahi proponemos que el Procurador General de la Nacién y los procuradores regionales, el Contralor y los contralores regionales sean de eleccién popu: lar para evitar ese espectéculo tan doloroso que he- mos visto en afios pasados, en que el Contralor Ge- eral de la Repdblica se vuelve el més alto emplea- dor del pais y juega con esos empleos. Consideramos importante que el perfodo pre: sidencial se amplie, que no haya reelecci6n presi dencial en ningiin caso, y en el caso de los parla- mentarios, que no haya une reeleccién inmediata, @s0 es muy importante, contemplamos también que se estipule la segunda vuelta en la eleccién pre- sidencial para que no se sigan presentando gobier- nos de las minorfas, porque hemos visto cémo en los dltimos perfodos de gobierno, el ciudadano que lleva Ia representacién del pueblo colombiano, es- casamente es elegido por el 30 por ciento de los ciudadanos que se acercaron a las urnas. Contra e- so estén las dos medidas de fondo: el voto obliga torio y la obligacién de la segunda vuelta, porque 50 ya exige que quien gane a eleccién tenga mas de la mitad de los sufragios depositados en las ur- nas. ZLa propuesta del Plebiscito implica también algunas reformas de cardcter econdmico-social? En el pais existen una serie de desigualdades, una pobreza absoluta en un porcentaje muy eleva do, una mala distribucién del ingreso, y una serie de fallas especialmente en el terreno politico y so- cial. Debo aclarar que cuando se tuvieron las dis- cusiones en el Didlogo Nacional, y cuando empe- zaron las tareas para un proceso de paz, se dej6 claramente establecido que los grupos en rebeldia y los grupes alzados en armas exig/an ante todo los cambios en el campo politico, casi més que en el campo social y en el econdmico que también son urgentes y apremiantes. Pero el énfasis siem- pre ha estado en que primero que todo se ambien los aspectos politicos que entrafian un alejamiento del sentido democratico. Son esenciales las refor- ‘mas para que se subsanen una serie de situaciones a- berrantes, dolorosas, deprimentes, como las que vernos todos 10s dias por las calles de nuestras ciu- dades grandes y pequefias, de una mendicidad im- presionante, la exhibicién de todas las lacras huma- nas en las calles implorando la caridad piblica, los parapléjicos, los locos, los que no tienen donde dormir, las mujeres que se ofrecen en la calle, los gamines, y todo ese ejército desprotegido porque el Estado no ha sido capaz de montar una adecua- da asistencia social como tampoco ha sido capaz de establecer al menos una racién de subsistencia 2 quienes puedan comprobar que no tienen ningu- na fuente pera sobrevivir y que no les queda otro camino que la caridad publica, y si ésta no los atiende, delinquir para poder vivir. Creo que un Estado de un pais como Colombia, tiene la obliga- cién, por lo menos, de garantizarle a los que abso- lutamente no tienen ni con qué comer ni en donde dormir, esos dos recursos fundamentales. En el campo de la Reforma Agraria, nosotros tomamos como ejemplo el proyecto de reforma a- probada en el Didlogo Nacional que fue la Gnica comisién que terminé con un trabajo elaborado, y que por lo menos, si no es una nueva ley agraria re- volucionaria, si es un cambio de fondo a lo que en. este momento ha impedido que se umpla la ley de Reforma Agraria, en aquellos aspectos positivos que tiene para mejorar la situacién, no solo de te- nencia de tierra, sino de las facilidades que el cam- pesino necesita para producir. En el campo de la Reforma Urbana, se con- templa una medida efectiva del Estado para que a- quellos compatriotas que demuestren al Estado ca- recer por completo de donde vivir, tengan una ma- nera de asegurar esa vivienda por arriendo sin que los cdnones de arrendamiento sobrepasen determi- nados porcentajes para que entonces, si el duefio tiene derecho a més de lo que el arrendatario paga, sea el Estado el que asuma esa responsabilidad co- ‘mo un subsidio al pobre que no puede pagar o que El General (r) José Josquin ‘Matallana reunido con el Esta- do Mayor de las FARC en La Uribe. 10 COLOMBIA HOY Informa, Aflo VI no debe pagar més de determinado porcentaje, que nosotros hemos pensedo, alrededor del 25 de sus ingresos. En cuanto al aspecto social, sobre todo de la asistencia social del Estado, como decia antes, se contempla que él establezca una facién de subsis- tencia y una disponibilidad de techo para quie- nes carezcan de él. En el campo de la enorme des- Proporcién que existe en los ingresos por trabajo, donde vernos que mucha gente gana mucho menos del salario minimo en muchas partes del pats, y otros personajes estén devengando sueldos y pres- taciones mensuales que sobrepasan 150 veces el sa- lario minimo legal; que exista también un tope de esa enorme diferencia y que, por ejemplo, nadie gane menos del salario minimo pero tampoco 20 veces ese salario. Y si por alguna circunstancia al gun colombiano llega a ser remunerado en més de esa cantidad, eso entre en un sistema impositivo tan severo que sea progresivo el impuesto pero con una destinaci6n especifica: la asistencia social del Estado que permita erradicar esas lacras sociales a las que me he referido. Lo mismo que aunque la persona no dependa de un sueldo, de una remuneracién por su trabajo, pero percibe unas ganancias por su actividad eco- némica, también aquella ganancia mensual que so: brepase al equivalente de 20 salarios minimos del que esté empleado, también tenga un sistema im- Positivo especial con esa destinacién espectfica. 2Cudles serfan los mecanismos de convocato- ria de ese Plebiscito? Consideramos que hay dos formas de hacer ese Plebiscito, que es la ley del pueblo: que él de- signe una Asamblea Nacional Constituyente que redacte los cambios de fondo a la Constitucion Na- ional o que directamente, como significa la pala- bra plebiscito, se escriban unas normas y se presen- ten para que él las vote. Solamente se vota con el sf, en el caso de que el ciudadano esté integramen- te de acuerdo con le propuesta, como se hizo en el caso del plebiscito de 1957; la vota negativo © no la vota, cuando no esté de acuerdo totalmen- te con ese contenido. Estamos trabajando ya en ‘cuéles son los cambios de fondo que a nuestro jui- cio deben considerarse. ‘QUE EL PUEBLO SEPA QUIENES SE OPONEN A LA PAZ Qué modificaciones proponen ustedes al im- perio del Estado de Sitio? El planteamiento de fondo es que hay tres ar- ticulos de la Constitucién de gran urgencia de mo- dificar: el 120, que consagré este gobierno del Frente Nacional; el inciso que le colgaron contra el pueblo que hablé de 16 afios y van 29, de go- bierno compartido de los dos partidos tradiciona- les; el 121, que reglamenta el Estado de Sitio y que ha dado pie para que los gobiernos abusen de él, en la forma en que lo han hecho para hacer una situaci6n. absolutamente indetinida. Es tal vez el nico pats del mundo donde el Estado de Sitio se aplica por afios y por decenios sin que nadie pro- teste, porque es la negacién de la democracia y eso no es lo que contemplé hace 100 afios Nufez ni los demas patricios que nos dieron la Constitucién de que nos ufanamos tener, para que el pais viviera en un Estado de Sitio, sino para que las autorida- des ejercieran cada una sus funciones dentro del marco que la Constitucién le fija. El cambio de fondo que sugerimos es que el Articulo 121 tiene que ser modificado para que el Estado de Sitio solo se aplique en todo el territorio nacional, por un corto perfodo que nunca deberd ser superior a 90 dias y que si hay ciertos sectores del pals que estén sufriendo una gravisima emergencia por el desorden o por un desastre natural de mucha mag nitud, entonces exista una nueva situacién juridica que se llame por ejemplo “Estado de Emergencia”. Existe una coincidencia entre la propuesta de la Coordinadora Nacional Guerrillera de la convo- catoria a una Asamblea Popular para adoptar lat reformas que el pais requiere, con la propuesta de Esa inquietud de que el pais regrese al consti- tuyente primario no es nueva. Al comenzar el ac- tual gobierno se hicieron los primeros planteamien- ‘tos por parte de la guerrilla, por ejemplo, de la je- fatura de las FARC, al respecto. En los Acuerdos de la Uribe se ha insistido en que es necesario que el pueblo sea escuchado y que se manifieste direc- tamente sobre los cambios de fondo al sistema po- Iitico administrativo que nos rige, y lo mismo han venido diciendo otros grupos armados que estén ahora por fuera de los Acuerdos de Paz. En el Did: logo Nacional ese fue el punto central y en el pro- grama politico de la Unién Patriética, uno de los Puntos fundamentales es también que se haga el llamamiento al pueblo a un plebiscito. Por el lado de las fuerzas que se encuentran en rebeldi{a contra el sistema politico, hay préctica- mente un consenso con muchas otras fuerzas que ‘sin estar en una actitud subversiva, estamos Ile- gando a la conclusion ineludible y muy clara de que se necesita que el pueblo se pronuncie porque. ya esté ampliamente comprobado que los politicos que estén en el Congreso no van a hacer los cam- bios que el pais exige urgentemente. {Ustedes qué preven respecto a la posicion de las personas y sectores que estan ahora detentando el poder frente a este propuesta? Es muy probable que obstaculicen la realizacién de ese Plebiscito. Nosotros partimos de la base de que hay una gran resistencia de los estamentos politicos y eco- némicos para que esto no se haga, pero, silo pen- samos desde el punto de vista juridico, quienes van. a iniciar la critica de la realizacién de un plebiscito, © de la designacion de una Asamblea Nacional Constituyente, no tendran autaridad moral ni poli- tica para hacerlo, porque ellos, justamente los mi mos personajes, por ejemplo los doctores Lleras y Lopez, los expresidentes de la Republica. etc., también tomaron parte en un ilamamiento a ple. biscito al pueblo colombiano en momentos en que la Constitucién tampoco lo permitia, como pas6 en 1957. Negarle al pueblo su participacién direc- ta en los asuntos del Estadio, cuando en el Plebisci to del 57 estos politicos que atin hoy en dia domi nan el panorama nacional, le hicieron votar que en el futuro solamente el Congreso podria hacer cam: bios a la Constitucién, cosa que es antidemocrati ca y sequramente unos buenos juristas podrian de- mandarla ante la Corte Suprema de Justicia, me atrevo a pensar que con éxito porque una norma, que diga que el pueblo no debe pronunciarse sobre los asuntos que le atafien ¢ él que es quien organi- za al Estado, el que le da permiso de que lo admi- nistre y lo comande, creo que eso va abiertamen- te contra un criterio democratico auténtico, De manera que aquella norma es antidemocratica, como seria inaceptable que un articulo de la proxi: ma reforma constitucional !os que la hagan dijeran que a partir de la fecha la Constitucidn no volvera a ser modificada. Si ellos insisten en no dejarlos hacer, lo. impor- tante es que el pueblo tome atenta nota de quienes son los que se oponen a esa salida pacifica y demo- cratica para que si por desgracia viene alguna de las salidas de las que hablébamos (que no queremos, porque somos realmente demécratas), pues que haya una responsabilidad muy clara de quiénes fueron los que forzaron al pais a esa salida que Dios quiera que no llegue. LAS ELECCIONES SON UN ESPECTACULO ABERRANTE Es aberrante y doloroso para un pais que se precia de democrético, ese espectdculo que acaba de repetirse en las elecciones de cuerpos colegia dos. Es la negacién de la auténtica democracia en donde lo que imperé fue el dinero que manipulan los caciques politicos, no solo el que sacan det pre- supuesto nacional en la forma de auxilios parla- mentarios, sino otros de origen oscuro, y de todas maneras, ¢l tréfico del, voto en forma vergonzosa. éCudles considera son las causas del abstencio- nismo? Creo honestamente que la gente no se acerca a votar porque esté decepcionada, porque cree que siempre son los mismos, que cada vez apuntalan mis sus posiciones en los puestos de ta administra: cién publica, en los organismos que tienen la facut: tad de votar las leyes, ordenanzas y acuerdos para adjudicar recursos a determinados trabajos, todos os que hacen los grandes acuerdos, personalmente (© por medio de sus familiares y socios como es es- pecialmente evidente en los ambientes departa mentales y regionales, donde el cacique domina en todos los aspectos y es quien impone la voluntad ‘@ todos los funcionarios de la administracién pa- blica. Es verdad, que la mayor parte de la absten- cidn seexplica por la decepcion. Basta escuchar las encuestas dirigidas a qué van a hacer los que pertenecian a un importante movimiento politico como era el Nuevo Liberalismo, todos dicen que retirado su candidato no vale la pena seguir vo- tando porque era tal vez el Gnico que presentaba Una perspectiva de renovacién de esas costumbres que estén hundiendo a la democracia colombia- na. &€6mo ve a los partidos tradicionales? Estos partidos nuestros ya no se diferencian’ en absolute en nada, son lo mismo, llevan 29 a fios distrutando del poder, al 50%, con exclusion de los que no piensan como ellos y no se matricu: lan en el clientelismo de ellos. Han consagrado una paridad para que todos los cargos de responsa- bilidad e inclusive el sagrado ejercicio de la justi- cia, solamente puede caer en manos de ellos, por- que fuera de ellos no hay otro colombiano que tenga el derecho de ser un juez de la Republica. Esa paridad que han consagrado no solamente en Ja rama ejecutiva, sino en la rama judicial es un a- tentado contra la auténtica democracia, con un solo partido, y como decfamos al lanzar el mani- fiesto del 14 de febrero, son peor que el Partido Revolucionario Institucional -P.R.I. de México. Con frecuencia se escuchan criticas al sistema poll tico de ese pafs, porque es una dictadura que lle- va yo no sé cuantos affos. Pero el P.R.I. tiene una ventaja sobre el Frente Nacional, de Colombia, porque el verdadero partido de los liberales y con: servadores sigue llaméndose el Frente Nacional. La diferencia es que el P.R.I. se renueva totalmen: te cada seis afios, hace su gobierno y se va;_y vie- nen otros y lo renuevan. Nosotros no nos hemos renovado en 29 afios, las mismas caras, pero como van envejeciendo, vienen los hijos y los nietos con- tinuando la misma situacion. {Qué opinién le merece el retiro de la candi- datura del doctor Luis Carlos Galén? Yo lamento la decisién del doctor Gala y jus- tamente hace unas semanas cuando el doctor Ga- lin se reunié con sus parlamentarios para hacer tuna evaluacion de lo sucedido, me permit/ dirigirle tuna carta en que con mucha franqueza critieaba esa decision, porque dejé a sus sequidores en una situacién de desconcierto, porque abandoné una bandera que era la Unica que podia convocar a la opinién publica sana para luchar contra estos vi clos electorales y porque estoy seguro de que a pe- sar de la diferencia grande de quarismos electorales con el oficialismo y el conservatismo, hubiera pro- seguido la lucha contra esos vicios, que fueron jus- ‘tamente los que los aplastaron, habria encontrado el apoyo de otras fuerzas politicas sin descartar a la Union Patridtica, el Anapismo y tantas mas en el gran margen de la opinién que no se manifesto en las elecciones, 0 sea, casi el 50%de los ciudadanos hébiles para votar y que siguen siendo el gran inte- rrogante y también la gran fuerza decisive para cualquier campafia politica en el futuro. LA RESPONSABILIDAD ES DE LOS CIVILES General, ud. coincide con el anatisis de que hay en Colombia un estado de democracia restrin- ja y un exagerado poder militar en la conduc- cién del orden piblico? ida fundamental- mente por las cosas que hemos venido comentando hhasta el momento. O sea, las prebendas que a es paldas del pueblo los politicos le colgaron a la Constitucién en beneficio de ellos. En cuanto a papel militar, pues sf, el gobierno civil ha venido soltandole al establecimiento militar una cantidad de misiones y responsabilidades muy grandes, pero 41 es el primer responsable, como también lo es la Corte Suprema de Justicia, porque la entidad que deberfa dar ejemplo en Colombia de defens: Constitucion, que para eso existe, durante todos estos afios desde el siglo pasado, ha venido toleran- do que la-justicia militar se aplique a los civiles, siendo que el texto constitucional es absolutamen- te claro cuando dice: “ de los delitos cometidos por los militares en servicio activo y en relacién con el mismo delito, conocerén las cortes marciales © tribunales militares, con arreglo al Cédigo de Jus- ticia Penal Militar” . Cémo es posible —con todo el respeto que se merecen los magistrados vivos y los muertos— que hayan tolerado que el gobierno le asigne a la justicia militar una tarea, entre otras cosas ingrata, que no permite la Constituciénl! Sin ‘embargo, todos los sefiores que han pasado por ese alt(simo organismo de nuestra justicia lo han tole- rado inexplicablemente, porque équé pueden con- testar ante un texto tan claro de la Constitucién? De manera que el estamento militar ha sido lleva- do a participar en todo eso por ese desorden y por esta cantidad de trabas que se le han incrustado a la Constitucién y que son las que ocasionan la re- beldfa. £Cémo aprecia las persistentes denuncias de que hay una préctica institucionalizada del Ejérci- to en la violacién de los Derechos Humanos? No, yo culpo de ello al gobierno. Porque él es quien deja o no que el estamento militar haga ‘0 no determinadas cuestiones. Tenemos un ejecu- tivo, un legislativo, un poder judicial. Como ya di- je, gran culpa la tiene Ia Corte Suprema de Justicia, gran culpa la tiene el Ejecutivo que le da todas esas, misiones a las Fuerzas Militares, que mezclan to: ddas esas funciones y no hay un Congreso que fisca- lice por qué se mete la institucion militar en deter- minadas coasas mds alld de lo que debiera hat Pero ellas no son auténomas, ellas cumplen res, cumplen érdenes, y si el Presidente, el Consejo de Ministros les permiten y les ordenan, ellas no tienen otra solucién sino hacerlo. De resto, seria desconocer Ia autoridad civil y serfa un golpe de Estado. General, el Ejecutivo es muy débil, o el Ejér- cito es muy fuerte? No, la fortaleza que al estamento militar se le deje tomar en une situacién determinada, es res- ponsabilidad del ejecutivo. COLOMBIA HOY Informa, Afc VI!,No 43, Bogots, 1986 13 ee LAS INCONGRUENCIAS DEL PROCESO DE PAZ Respecto al proceso de paz, dcudles ree fueron las causas que llevaron a que al menos dos de las fuerzas que pactaron los acuerdos hayan vuelto a las armas? Primero, pienso que siendo honestos, el espi- ritu guerrerista que anima a algunas guerrillas, no se puede negar. Un espiritu pendenciero que in- clusive antiguos miembros de la misma guerrilla pero mas intetigentes y con una mentalidad serena han escrito claramente sobre este fenémeno gue- srerista; una actitud falta de madurez, una actitud arrogante, individuos que porque les ha ido bien por pura suerte en una serie de operaciones milita~ res estUpidas, se sienten crecidos y estén Ilevando a la muerte facilmente a todos los individuos, es- pecialmente menores de edad que llevan al comba- te sin estar preparados ni estar maduros psicolégi- camente, utilizando toda clase de engafios. Por o- tro lado, hay algunos grupos que en realidad se sin- tieron hostigados muy seriamente en determinados momentos en que tal vez una actitud un poco més prudente de la autoridad hubiera podido evitar que se lanzaran a la violencia. Me acuerdo cuando los elementos del M-19 estaban en Corinto, hubo es- Oscar William Calvo, vocero del EPI indrés Almarales, dirigente del M-19 y el presiden- ‘te Belisario Betancur reunidos en el Palacio de Narifio. céndalo, por el despliegue de inmedurez que tuvie- ron en el pueblo durante una semana. Eso dié ar- gumentos para que los enemigos del proceso de baz enrrostraran al gobierno que habia dejado esta- blecer una republica independiente y todo lo que se estuvo diciendo en ese tiempo y atacando al go- bierno por eso. Pero, tengo, algunos documentos y testimonios, que confirma que en esos dias el M-19 estaba en un acercamiento hacia el gobierno y hacia la fuerza pablica, que habia llevado a cabo algunos contactos con los militares de la regidn, habian intormado cuéntos efectivos y cuantas ar mas tenian alli, habia manifestado publicamente, frente 2 las afirmaciones de que alli tenia a.un se- fior Dominguez secuestrado, que podian ir a bus- carlo a ver si eso era cierto; que de all habian sali- do unos asaltos a unos ingenios del Valle del Cau- ca, eso tampoco era cierto. Ellos pedian que se les Permitiera estar alli y sin embargo, més tarde hubo nos operativos militares y luego vino la actitud del gobierno que a escasas 48 horas de comenzar el Congreso de los Robles, ya précticamente con los invitados llegando a la zona, de un momento a o- tro el sefior Ministro de Gobierno notificé que el congreso estaba prohibido, Todo eso contribuyé... Pero. yo le achaco més la responsabilidad a la ma- nera como algunos medios de informacion maneja- ‘on las noticias referentes al M-19. Con este grupo la ruptura se did cuando alguien de mala fe hizo decir a algunos medios de comunicacién como el periédico El Tiempo y al dia siguiente El Especta- dor, que el M-19 habia torturado salvajemente 2 los sobrevivientes de un helicoptero militar derri- bado en mayo de 1984, ZQuién incumpli6? No es fécil decir quién, Hay una serie de fac- tores como los que he mencionado. Hay incumpli- miento de parte y parte, lo grave de todo es que en ningiin momento se dijo por parte de la Comision de Paz y Verificacién, quién era quien incumplia y hemos pasado a.una nueva etapa del proceso de paz y a pesar de las aclaraciones muy oportunas y de mucho fondo que se firmaron con las FARC, se siguen presentando incidentes y la nueva Comisién de Paz tampoco le da a conocer al pais, claramen- te, quién es responsable de esos incidentes. Creo que mientras siga ese misterio, mientras no se sepa quignes son los responsables de os incumplimien- tos, el proceso de paz seguiré mal. Aunque hay que abonar que como fruto hasta este momento del proceso de paz, el lanzamiento de la Unién P: tridtica, sus resultados electorales y el hecho de que tengamos un candidato presidencial de esa or- ganizaciOn, es indudable un éxito del proceso de paz. Léstima que lo mismo no se hubiera podido 14 COLOMBIA HOY Informa, Afio VII, No. 43, Bogoté, 1986 hacer con los otros grupos, pero no pierdo la espe- Fanza que se logre algo mas. éinfluy6 en que el proceso de paz no sea del todo exitoso el que Betancur no asumiera directa- ‘mente su conduccién? Indudablemente. Estoy de acuerdo en que al sefior presidente de la Republica con tods la bue- na voluntad que ha tenido con el proceso de paz, le falté desde un principio asumir directamente la conduccién del proceso y haber exigido que todos los miembros de su gobierno, civiles y militares, demostraran claramente el maximo de su capaci. dad y de su dinamismo en promover todas sus ideas hacia abajo para motivar 2 los estamentos que por una u otra razén podian inicialmente no ser muy receptivos hacia el proceso de paz. Por e- iemplo, para el estamento militar que viene de un enfrentamiento largo, cruel, con la guerrilla, que sufre todos los dias sus emboscadas, sus asaltos, Muchas veces cobardes por la desproporcién con, la que se ataca un pequefio puesto de Policfa, por fa cobardia de la emboscada, etc., no es facil que de la noche a la mafiana por el hecho de que el Je- COLOMBIA HOY Informa, Affo VII, No. 43, Bogoté, 1986 15, cai alll a. 3 fe de Estado digs que hay que hacer la paz, inme- diatamente se vuelva amigo de quienes hasta el dia anterior le han estado matando a sus subalternos, Compafieros y superiores, hay que entender eso. Se requerla una preparacién, una explicacion de la tuacién del pais, de lo que se buscaba con este Proceso, se requeria motivar adecuada ¢ inteligen- temente 2 todos los cuadros de mando tanto en el estamento civil como en el estamento militar, so- bre todo, para que se tuviera un periodo de espera, de expectativa, de prudencia en las acciones. Pero desde un principio el pais vié cémo las conversa- ciones de paz se hacian de una manera més 0 Menos clandestina, una cladestinidad en un go- bierno que acaba de establecerse, teniendo como bandera la de la paz y el didlogo. Hubo une incongruencia, lo digo con todo res- Peto, pero es la realidad, en la actitud presiden- ial, porque si el presidente de la Repiblica tiene temores de llevar a cabo cualquier accién personal en busca de la paz, entonces no esté pisando terre- no firme y él ha debido definir ante todos sus mi nistros y ante todos sus subalternos, cudl era su ob- ietivo y cémo iba a proceder para ver quién no es- taba de acuerdo con é! y tomar las medidas que fueran necesarias. Pero parece que eso no suce- did. . Como vincular a las organizaciones guerrille- fas que se retiraron del proceso de paz? Ustedes al estudiar los planteamientos que iban a hacer, ¢pen- saron en eso? Pues sobre eso no hemos esbozado nada en el primer documento de trabajo; yo creo que una ta- rea de la Comision de Paz en explorar esa serie de responsabilidades no es tardia y seria conveniente para que llegado un nuevo gobierno, por lo menos tuna buena parte de los grupos que todavia estén haciendo violencia, se acerquen a un dilogo y a unos compromisos, siguiendo el ejemplo de las FARC. Para terminar, General, a partir de la propues- ta que ustedes han lanzado hace unos dfas, algunos sectores de opinién han interpretado la posibilidad de que sean los primeros pasos hacia la conform: cién de un partido politico de tipo suprapartidista, independiente de los partidos tradicionales. Comparte usted esa opinion? Personalmente, yo no he tenido en mi mente ese objetivo, me sentirfa muy honrado y satisfecho con que esta propuesta tomara fuerza e importan- tes sectores de la opinién nos acompafiaran, espe cialmente a partir de la fecha en que hagamos la Presentaci6n del texto del proyecto de Plebiscito, que es nuestro deseo hacerlo en una fecha signifi- cativa en el presente affo.e

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