1.

Patrones que influyen en las decisiones de compra:

 Cultura musulmana, judíos y árabes.

La cultura musulmana está muy vinculada con la religión, y esto influye en los aspectos
de compras. Los consumidores musulmanes tienen ciertas características en cuanto a
sus preferencias. Mientras más fuerte sea la presencia de la religión en los productos,
mayor será su interés por el consumidor; además, más microsegmentos aparecerán a
causa de la diversidad religiosa. Como ejemplo de los productos, tenemos los vestidos
cubiertos que adoptan las mujeres.
Los judíos y árabes tienen algunas costumbres similares, por ejemplo, existen
alimentos prohibidos como la carne de cerdo y también los derivados de la sangre. Por
ello, las compañías y sus estrategias de marketing deben tener mucho cuidado con lo
que ofrecen en las campañas publicitarias. Deben abstenerse de la carne de cerdo,
embutidos y otros derivados muy estrictamente.
Para las empresas que se dedican a comercializar en los sectores árabes, es muy
importante que sus productos sean de calidad y que capturen la atención del
consumidor. Se debe potenciar la presencia en el internet, una página web y redes
sociales atractivas, incluir los idiomas inglés y español además del árabe, crear
materiales corporativos bilingües de calidad y cuidar el diseño e imagen, así como el
empaque del producto. Todos estos aspectos influyen en la decisión de compra en
este mercado tan amplio y competitivo.

2. Comportamiento del consumidor respecto a los hábitos de consumo:

 El mercado musulmán, judío y árabe, está bien marcado por la interculturalidad, lo que
hace que las estrategias de marketing sean variantes. Es por ello que para las
empresas es muy importante estudiar la perspectiva del consumidor. Por ejemplo, los
islámicos presentan un patrón de consumo según las prescripciones de sus leyes según
el Corán, abriéndose así un nuevo mercado de consumidores, y permite segmentar el
mercado en busca de nuevas oportunidades para el marketing. Es por ello que el
marketing y las culturas y subculturas en estas regiones van de la mano. Todo se
enfoca en la fe, comida, finanzas y moda. Estos productos o servicios deben ser de
primera calidad, y deben incorporar en su elaboración mensajes de fe, valores,
fomentar el medio ambiente, justicia social y optar por el consumo de alimentación
saludable. Para este tipo de consumidor es muy importante conocer la procedencia de
los productos y cómo han sido elaborados, así como estar al tanto de las
características e ingredientes que han sido utilizados. Las carnes de pollo, pavos y
gallinas son aceptadas, también las bebidas no alcohólicas que no tengan ningún
componente animal, los productos lácteos que determinen su procedencia. La
certificación y garantía del producto es muy importante, así como su elaboración,
limpieza y desinfección de las instalaciones donde se almacenan.