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Cómo hacer un cable de red y

que diferencias hay entre cables


directos y cruzados
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Cuando compramos un router o cualquier dispositivo de red o nuestro operador nos da

un router, generalmente suelen venir con, al menos, un cable de red con los que poder

conectarnos a él. En muchas ocasiones, estos cables suelen funcionar sin problemas

ya que suelen ser de categoría 5e, sin embargo, es posible que algunos usuarios

necesiten un cable más largo del proporcionado por el dispositivo o que simplemente

quieran cambiar el cable por defecto por otro de mayor calidad.


En este artículo os vamos a explicar cómo hacer correctamente un cable de red para

llevar Internet a cualquier parte de nuestra casa o, simplemente, para conectarnos con

uno de mejor calidad para mejorar nuestra red local.

Por qué puedes necesitar fabricar tu propio


cable de red
Pueden ser muchas las razones por las que tengas que fabricar tu propio cable de

red. Puede que quieras un cable más largo que el que te proporciona el router para

llegar a tu televisor de forma más cómoda, que se haya roto el que tienes actualmente y

quieras reponerlo, o incluso que sea muy antiguo y prefieras un modelo nuevo para

disfrutar de una mejor velocidad de conexión.

Hay muchos motivos por los que puedas necesitar hacerte un cable de red casero, por

lo que veamos todos los pasos q2ue hay que seguir para ello.

Cómo hacer un cable de red


La satisfacción de fabricar tu propio cable de red evitando tener que comprar uno es un
valor a tener en cuenta. Y viendo que el proceso es sumamente sencillo, te invitamos a

hacerlo siguiendo este completo tutorial que hemos preparado para ti.

Materiales necesarios
Lo primero que necesitamos son las partes que forman el cable, es decir, el

propio cable de red y los conectores RJ-45. A la hora de comprar esto debemos

asegurarnos de que sean de buena calidad, por ejemplo, un cable grueso (y

posiblemente apantallado para reducir interferencias externas, sobre todo en largas


distancias) y unos conectores de calidad que no se rompan al ponerlos o quitarlos del

router y, a la vez, nos ofrezcan la menor pérdida posible.

Una vez tenemos los materiales también vamos a necesitar una serie de herramientas

para hacer nuestro cable. Estas herramientas son:

 Comprobador de cables, para comprobar que funciona correctamente.

 Cortadora / Crimpadora, para poner los conectores a los dos extremos

 Tijeras de electricista, para cortar y pelar el cable (en el caso de que la


crimpadora no lo tenga).
Pasos a seguir
Lo primero que haremos será cortar el cable a la distancia que necesitemos de manera

que podamos trabajar lo más cómodamente con él. Una vez tengamos a mano los dos

extremos cortados del cable, lo prepararemos para los conectores.

Un cable de red está formado por las siguientes partes:

 Vaina > Apantallado > Hilos trenzados a pares

Lo primero que haremos será utilizar las tijeras para cortar la vaina, pero con cuidado

de no dañar el apantallado (si nuestro cable tiene de eso) ni los hilos de dentro. Algunos

cables buenos tienen por dentro un hilo de nailon, e incluso una guía de plástico.

Debemos cortarlo también a la misma altura de la vaina ya que esto no se utiliza en el

conector.
Debemos pelar en torno a unos 3cm (o algo más) de manera que podamos trabajar

cómodamente con los hilos. Si nuestro cable tiene apantallado podemos doblar este

hacia atrás o cortarlo directamente.


A continuación, destrenzamos todos los hilos y los estiramos de manera que cada uno

vaya de forma independiente.


Una vez con los hilos a mano, los ordenamos según el código de colores que vayamos

a utilizar.

Código de colores para los cables de red


A la hora de colocar los cables, debemos prestar atención en los colores de los hilos ya

que, por norma, deben respetar un orden. Suponiendo que nuestro cable va a ser

utilizado para conectar un equipo (PC, consola, TV, etc) directamente al router, el cable

que haremos será directo, donde cada pin del conector de un extremo llega

directamente al mismo pin del conector del extremo opuesto.

El patrón, de izquierda a derecha, que debe llevar el cable en ambos extremos será: b

 Blanco-naranja, Naranja, Blanco-verde, Azul, Blanco-


Azul, Verde, Blanco-marrón, Marrón.

*Existe otra norma, la T568A, que cambia los pares naranja y verde, pero la más

utilizada es la vista anteriormente, la llamada norma T568B.


Con los cables ordenados, vamos a cortar los extremos de manera que todos ellos

queden a la misma distancia y no unos más largos que otros. Los cables entrarán en el
conector aproximadamente 1.5cm, por lo que debemos recortarlos hasta que queden

más o menos a esa distancia.

Con 1.5cm de cables pelados y, de nuevo, ordenados en el código de colores

correspondiente, los estiramos lo máximo posible de cara a prepararlos para

introducirlos ya en el conector RJ-45.

Una vez colocados los cables, introducimos el conector con cuidado de que no se

mueva ni cruce ninguno de manera que los extremos de cada hilo lleguen hasta la parte

delantera del conector.


Comprobaciones finales
Antes de crimpar el cable, revisamos una vez más que el código de colores es el

correcto y que todos los hilos del extremo están correctos. De ser así, introducimos el

cable en el hueco RJ-45 de la crimpadora y presionamos fuerte para que los pines del

conector tacen los hilos del cable y pueda así hacer contacto correctamente.
Listo. El primer extremo del cable está hecho, ahora lo único que nos queda por hacer

es repetir todo el proceso para el segundo extremo.

Una vez finalizada la fabricación del cable, lo único que nos queda por hacer es

introducirlo al comprobador de cables para comprobar que todo funciona

correctamente, que todos los hilos tienen conectividad y en ambos extremos es el

mismo hilo el asociado al mismo pin.

Diferencias entre un cable directo y uno cruzado


Según la finalidad que vayamos a dar al cable, este será directo o cruzado. Los cables

más habituales son los cables directos, ya que son los que se utilizan para conectar

ordenadores, consolas o cualquier otro dispositivo a un switch o un router.

En el caso anterior hemos visto paso a paso cómo crear un cable de red directo para

utilizarlo en dichas situaciones.

Sin embargo, también existe otro tipo de cable, denominado como cruzado, que es el

que se utiliza para conectar dos dispositivos iguales (por ejemplo, dos ordenadores)
para el intercambio de información entre ellos.

La fabricación de un cable cruzado es igual que la de uno directo, con la diferencia de

que en uno de los extremos se deben de cambiar el orden de los pares de manera que

queden de la siguiente manera:

Extremo 1:
 Blanco-naranja, Naranja, Blanco-verde, Azul, Blanco-Azul, Verde, Blanco-
marrón, Marrón.

Extremo 2:

 Blanco-verde, Verde, Blanco-naranja, Azul, Blanco-azul, Naranja, Blanco-


marrón, Marrón.

El estándar 1000Base-T tiene una regla denominada como «Auto-MDIX» que permite

adaptar automáticamente a nivel lógico los cables como sea necesario. De esta

manera ya no necesitamos crear cables diferentes, sino que serán los propios equipos

quienes detectarán si estamos utilizando un cable directo o cruzado y lo adaptarán

según las necesidades.

Tipos de cables de red


Hay que tener en cuenta que no todos los cables de red son iguales. Existen diferencias

importantes en cuanto a calidad y la velocidad que pueden ofrecernos. También, en

función de la distancia a la que queramos llevar ese cable, debemos observar muy bien

el tipo. Es posible que si queremos llevar la conexión a la otra punta de la vivienda no

nos baste con un cable cualquiera, ya que de lo contrario podríamos tener una pérdida

de calidad y velocidad importante.

Categoría 5, en desuso
En la actualidad la mayoría de conexiones domésticas son por fibra óptica. Esto

significa que debemos utilizar cables que soporten Gigabit Ethernet para lograr

velocidades superiores a los 100 Mbps. Si hacemos uso de cables de categoría 5

estaríamos limitados a esos 100 Mbps, por lo que si tuviéramos contratados 300 Mbps,

por ejemplo, no podríamos lograr esa velocidad.

Categoría 5E, el más recomendable


Por tanto nuestro consejo a la hora de crear un cable de red para llevar la conexión de

una punta a otra de nuestro hogar, es utilizar al menos un cable de categoría 5E, que es

la versión mínima para lograr la compatibilidad con Gigabit Ethernet. Así podremos

conectarnos a más de esos 100 Mbps que marca el Fast Internet como tope.

Categoría 6,7,8, perfecto si necesitas un cable muy largo


No obstante, como posiblemente vayamos a llevar el cable muy lejos del router, sería

interesante tener en cuenta otras versiones superiores. Tenemos la opción de categoría

6, 7 y 8. Cada versión ofrece una velocidad máxima y por tanto una mayor velocidad de

descarga, así como funcionar a una frecuencia mayor. Esto es muy importante no solo

por el hecho de poder navegar más rápido, sino también para evitar problemas de

calidad de la conexión cuando nos conectamos más lejos del router.

En definitiva, es interesante que elijamos correctamente el tipo de cable. Es básico para

lograr una buena velocidad de Internet y mantener siempre la calidad de las

conexiones.

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