PRÓCERES DE LA INDEPENDENCIA

Han pasado 199 años que la señora María Dolores Bedoya, diera el primer grito de independencia,
luego de que se firmara la declaración aquel 15 de septiembre de 1821. Hoy, inicia la cuenta
regresiva para que Guatemala recuerde el bicentenario de aquella gesta; es importante fijar en
nuestras mentes los motivos que fueron la génesis para buscar nuestra independencia patria, que
invoque la unidad nacional orienta hacia objetivos comunes de desarrollo social y de región.
La historia, que sirve para conocer el pasado, entender el presente y que nos orienta hacia el futuro,
en ese sentido, es importante hacer énfasis de aquel 14 de septiembre de 1821, cuando el
subinspector de Tropas, Don Gabino Gainza, convocó a la llamada Sesión Histórica, que se llevaría
a cabo en el Palacio Nacional de Guatemala a las 8 de la mañana del día siguiente. El Palacio
Nacional estaba ubicado donde hoy conocemos como el Parque Centenario.
Guatemala inicia su camino como un país libre, soberano e independencia esa mañana del 15 de
septiembre de 1821, en una reunión en la Ciudad de Guatemala con los representantes de las
provincias centroamericanas, en la cual se declara su independencia de España y conforman una
junta Gubernativa provisional, firmándose el acta de soberanía.
En esa época, Centroamérica era un solo bloque: Nicaragua, Costa Rica, El Salvador, Honduras
eran provincias del Reino de Guatemala, formado por las provincias Ciudad Real de Chiapas,
Guatemala, San Salvador, Comayagua (de Honduras) y la provincia de Nicaragua-Costa Rica.
Inquebrantable 15 de septiembre de 1821, fecha en la cual Guatemala junto a El Salvador,
Honduras, Nicaragua y Costa Rica logra la emancipación de España, por lo cual Centroamérica
debería ser una sola patria, o al menos deberían vivir en unidad.
Quienes firmaron el Acta de Independencia de Guatemala son llamados Próceres de la
Independencia. Ellos fueron: Mario de Beltranena, Mario Calderón, José Marías Delgado, Manuel
Antonio de Malina, Mariano de Larrave, Antonio de Rivera, J. Antonio Larrave, Isidro del Valle y
Castriciones, Mariano de Aycinena, Pedro de Arroyave, Lorenzo de Romaña, Domingo Diéguez,
José Cecilia del Valle, Pedro Malina y Brigadier Gabino Gainza.
Nos encaminamos al momento histórico de conmemorar el Bicentenario de la Independencia de
Guatemala, se trata entonces de enaltecer al conjunto de protagonistas sociales, gestores del
movimiento independentista, de efectuar una relectura de la historia que nos recuerde, la manera
cómo Guatemala se transformó a raíz de su declaración de independencia.

CONMEMORACIÓN DE LOS 200 AÑOS

El próximo año, el 2021 es declarar el año del Bicentenario de la Independencia de Guatemala y por
lo que fue planteada la iniciativas de ley, 5509, que crea una comisión nacional que organice
jornadas cívicas motivando la participación ciudadana para fortalecer el nacionalismo y lograr que
las futuras generaciones conozcan la historia de nuestra emancipación política.
Esta iniciativa fue presentada en la legislatura anterior por la actual diputada Lucrecia Carola
Samayoa Reyes, del bloque Unidad Nacional de la Esperanza (UNE) y actualmente presidente de la
Comisión de Juventud
“Este año es oportuno darle seguimiento y por eso estamos en la formulación de una nueva
propuesta, para luego presentarlo”, explicó con relación a la iniciativa 5509.
La nueva iniciativa buscará declarar de interés público para fomentar la participación ciudadana a
través del inicio de una jornada cívica, que estará integrada por un programa de actividades
participativas e incluyentes fortaleciendo la memoria histórica a través de actividades que rescaten y
exalten el pasado heroico que nos define como Nación.
De aprobarse dicha propuesta de Ley se creará la Comisión Nacional para Conmemorar el
Bicentenario de la Independencia de Guatemala, instancia encargada de definir las actividades a
desarrollar, cuyo propósito será enaltecer al conjunto de protagonistas sociales gestores del
movimiento independentista y efectuar una relectura de la historia que nos recuerde la manera cómo
Guatemala se transformó a raíz de su declaración de independencia.
La Comisión se encargará de hacer una convocatoria abierta a las instituciones, autoridades,
organizaciones empresariales y de la sociedad civil para elaborar un programa de conmemoración
de la independencia de Guatemala, sobre la base de que el país experimenta una etapa de
conmemoración que invita a analizar, reinterpretar y recorrer la historia de la época independiente
como un proceso político y social que pueden contribuir a renovar la imaginación del pasado y del
futuro del país.

INTEGRAR COMISIÓN
La propuesta manifiesta que la Comisión será presidida por el Presidente de la República, los
Ministros de Educación y Cultura y Deportes, así como representantes del Congreso de la
República, Presidente de la Asociación Nacional de Municipalidades (ANAM), Consejo Superior
Universitario de la Universidad de San Carlos de Guatemala, Director de la Escuela de Historia de
la Universidad de San Carlos, Archivo General de Centro América, Museos de Historia, un
representante de las comunidades indígenas, xincas y/o garífunas, un representante de la sociedad
civil y uno del sector empresarial.

ATRIBUCIONES
Entre las atribuciones de la Comisión destacan coordinar con las entidades públicas, en lo referente
a la enunciación, organización y ejecución de los planes, programas y proyectos relativos a la
celebración del Bicentenario. Establecer los lineamientos para la coordinación y planeación integral
de las actividades con observancia en los antecedentes históricos, sociales y jurídicos, y coordinar
que las actividades propuestas por cada sector, con la finalidad de que cumplan con los criterios
para ser considerados como conmemorativos del Bicentenario.
Así mismo, pretende fortalecer las actividades interinstitucionales que desarrollen planes,
programas y proyectos, establecer los mecanismos que faciliten la participación social para el
desarrollo de las actividades Integrando los Comités Técnicos necesarios para su adecuado
funcionamiento, redactar un reglamento a  un plazo de treinta días siguiente a la fecha de su
integración y aprobar los programas anuales.