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siendo luz y dar ejemplo de rectitud.
Octubre 2020
Jeremías 40 - 52 10
Un devocional para la formación y meditación espiritual

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El entendido en la palabra hallará el bien;
el que confía en Jehová es bienaventurado.
(Proverbios 16:20)

Octubre 2020

5 Poesía para meditar


6 Calendario
7 Cómo hacer TcD es Vida Viva
8 La bendición de caminar con Jesús
El sueño de Jesús: las misiones mundiales
12 La Palabra de mi vida (10)
Investigar y escudriñar diligentemente
15 Pioneros de la misión
Mi amigo, mi compañero
18 Buscando respuestas
¿Por qué necesitamos la medicina, si Dios es nuestro sanador?
20 Introducción Bíblica
Jeremías (5)
26 Devocional diario
Jeremías (5)
150 Estudios bíblicos semanales
160 Testimonio
El devocional y el compañerismo

TcD es Vida Viva ® (ISSN 2150-5888)


Es una publicación mensual de The Hall of Tyrannus Mission dba Duranno
International Ministry © Derechos reservados, 2014
Texto bíblico: Reina-Valera 95 ® © Sociedades Bíblicas Unidas,1995.
Texto bíblico: Dios habla hoy ®, Tercera edición
© Sociedades Bíblicas Unidas, 1966, 1970, 1979, 1983, 1996.
Usados con permiso. www.labibliaweb.com

Prohibida su reproducci ó n total o parcial sin autorizaci ó n expresa


de Duranno Latino. contacto@durannolatino.org
Instagram @durannolatino
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Prohibida su reproducción por cualquier medio escrito,
electrónico o de amplia difusión.
NUESTRA VISIÓN
Ser un canal para que los cristianos alrededor del mundo desarrollen hábi-
tos que los ayuden a alcanzar la madurez espiritual. Es nuestra meta pro-
porcionarles a los creyentes una herramienta práctica que los anime en su
meditación diaria, llevándolos a la reflexión, la vida de oración y a lograr
una relación de intimidad con Dios y la Palabra.

¿QUÉ SIGNIFICA TcD es Vida Viva?


Significa un tiempo especial, un encuentro personal diario con Dios, don-
de uno establece un lugar y un tiempo silencioso en el día para escuchar Su
voz a través de Su Palabra, que meditándola y aplicándola a su vida produ-
cirá cambio y madurez.

¿POR QUÉ HACER TcD es Vida Viva?


Mucha gente, que hace TcD es Vida Viva, comparte con nosotros acerca
del crecimiento espiritual obtenido al conectarse con el Señor diariamente.
Nos reportan que tan sólo tomando unos minutos diarios centrados com-
pletamente en Dios, es suficiente para ser llenos de paz, gozo y paciencia.
Cuando usted desea conocer a alguien, es necesario que invierta tiempo en
saber más de esa persona. Lo mismo sucede con el Señor, si usted desea te-
ner intimidad con Dios, debe invertir tiempo con Él. El TcD es Vida Vi-
va es una herramienta ideal, práctica y metódica, que lo ayudará a tener ese
tiempo de intimidad.

¿POR QUÉ TcD es Vida Viva?


Aun cuando usted puede meditar a su modo, con su Biblia, TcD es Vida Vi-
va es una herramienta que lo ayuda a tener constancia, explorando sistemá-
ticamente toda la Biblia. El TcD es Vida Viva en forma continua y perseve-
rante lo ayudará a tener disciplina, logrando establecer el hábito de conec-
tarse con Dios diariamente. Un equipo de escritores excepcionales a nivel
internacional se esfuerza en hacer el contenido y llevar la Palabra de Dios a
cada creyente alrededor del mundo. Esperamos que usted disfrute y se ma-
raville de su TcD es Vida Viva, y pueda compartirlo con otros. Oramos pa-
ra que su vida cambie cada día. También deseamos que TcD es Vida Viva le
sirva de refugio, lo anime, desafíe e inspire en su diario caminar con Dios.

4
Poesía para meditar

Esperaré en Tu bondad

“Enséñame, Jehová, tu camino


y guíame por senda de rectitud
a causa de mis enemigos.

No me entregues a la voluntad de mis enemigos,


porque se han levantado contra mí testigos falsos
y los que respiran crueldad.

Hubiera yo desmayado,
si no creyera que he de ver la bondad de Jehová
en la tierra de los vivientes.

¡Espera en Jehová!
¡Esfuérzate y aliéntese tu corazón!
¡Sí, espera en Jehová!”.

Salmos 27:11-14 RVR95

5
10
09 11 Calendario
1 2 3 4 5 1 2 3 4 5 6 7 Octubre 2020

6 7 8 9 10 11 12 8 9 10 11 12 13 14

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DOM LUN MAR MIÉ JUE VIE SÁB

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11 12 13 14 15 16 17

18 19 20 21 22 23 24

25 26 27 28 29 30 31

Notas:

6
Cómo hacer TcD es Vida Viva

Plan de Lectura Bíblica Resumen


Anual M’Cheyne El resumen, del pasaje bíblico de cada día, nos ayuda a compren-
der en un vistazo todo el contenido.

Meditación
Son meditaciones bíblicas y espirituales para
ayudar al lector. Cada meditación ofrece ‘Pre-
guntas para meditar’ y ‘Preguntas de aplica-
ción’, las cuales nos ayudan al meditar en el
pasaje bíblico, para poderlo aplicar de manera
práctica.

Sábado - Aprendizaje de TcD


El último sábado de cada mes, en vez de
‘Ensayos para meditar’, presentamos ejemplos
de aplicación, con la meditación de ese día.
Los que tienen su TcD por primera vez, pueden
aprender, de manera práctica, con el proceso Domingo- Compartir el TcD en familia
de ‘meditación, aplicación, oración’ ya Para los domingos, hemos creado ‘Compartir el
preparado. TcD en familia’ para que todos los miembros de
la familia puedan compartir unidos e interceder
unos por otros. Puede usar ‘Compartir el TcD
en familia’ en su tiempo de culto o altar familiar.

01 02 03 04

Alabanza y oración Leer Meditar Escribir


Busque la presencia Escuche la voz de Dios Converse con el Escriba todo lo que
de Dios con Alabanza por medio de la lectura Señor a través de la el Señor le muestre
y Oración - Marcos del pasaje - Salmos meditación - Josué 1: 8; y enseñe durante
1:35; Lucas 5:16 46:10; Juan 10:3-5 Salmos 1:2 su meditación -
Apocalipsis 1:19
05 06 07

Aplicar Interceder Compartir


Obedezca la voz del Señor por Interceda en oración, por Salga y comparta con otros lo
medio de la aplicación - Salmos usted, por su iglesia y su país que Dios le habló -
119:33-34; Santiago 1:22 - Mateo 6:6 Hechos 20:35

7
La bendición de caminar con Jesús
del pastor Ha Yong-jo

10
El sueño de Jesús:
las misiones mundiales

“Por tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el


nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo; enseñándoles que guarden
todas las cosas que os he mandado…” (Mt. 28:19-20).

8
“ (…) todo aquel que invoque el nombre del Señor, será salvo”
(Ro. 10:13). ¡Qué asombrosa verdad! Todo aquel que crea que
Jesús es el Señor, será salvo; la salvación es sin acepción de per-
sonas, sea judío o gentil de origen. Entonces, ¿por qué hay tantas
personas que no tienen la salvación y andan errantes? Porque los
que ya tienen la salvación, no predican el evangelio. ¿Cómo oirán
el evangelio, si no hay quien les predique? ¿Quién podrá creer,
si no han oído la verdad? ¿Cómo podrán clamar el nombre del
Señor, si no creen?
La salvación no es algo que se alcanza encerrándose en una mon-
taña para pulir la moral de uno. Por el contrario, comienza cuan-
do alguien predica la Palabra de Dios. Al oír la Palabra de la boca
de otros, nace fe en nosotros. Y si tenemos fe, clamamos y bus-
camos a Jesús. Por tanto, el deber más importante de la iglesia es
enviar a los que predican el evangelio y apoyarles. En otras pala-
bras, hacer obra misionera; que una iglesia engendre otras iglesias,
así como la iglesia de Jerusalén dio a luz a la iglesia de Antioquía
(Hch. 11:19-26). Una iglesia con vida da a luz a iglesias hijas.
Los verbos de la Gran Comisión
¿Qué dijo Jesús a Sus discípulos, después de vencer la potestad
de la muerte y antes de Su ascensión? “Por tanto, id y haced dis-
cípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Pa-
dre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándoles que guarden
todas las cosas que os he mandado” (Mt. 28:19-20). Esta es la vi-
sión y la Gran Comisión de Jesús. Pero nos llama la atención los
verbos; la visión no son sustantivos, sino verbos. Si tenemos gra-
bados estos verbos en nuestro corazón, es porque hemos recibi-
do una visión misionera.
La humanidad padece de amnesia, porque se ha olvidado de
Dios. ¿Saben para qué estamos los cristianos en este mundo? Pa-
ra anunciar a Jesucristo, el único camino al Padre , y para anun-
ciar la buena noticia de que todo aquel que clame el nombre de
Jesucristo, el Hijo de Dios, y crea en él, será salvo. “Y en ningún
otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo, da-
do a los hombres, en que podamos ser salvos” (Hch. 4:12).
Solemos considerar solo lo visible y externo para juzgar las
obras. Pero las apariencias engañan; no siempre una iglesia gran-
de hace cosas grandes. El tamaño de la iglesia no es relevante, ni
el número de miembros de la congregación, ni la capacidad para
influir al mundo entero. Es el evangelio de Cristo que llevamos
dentro lo que logra cosas grandes. El cristianismo siempre ha

9
sid­o como levadura, porque un poco de él puede cambiar nues-
tro entorno. La obra misionera no es con palabras; el mismo Se-
ñor es quien tiene que obrar. El Señor hace milagros por medio
de personas que comparten lo que han oído del evangelio. El Se-
ñor transforma el mundo, por medio de nuestra fe y obediencia.
Tiempo de la siega en las naciones
¿No sienten palpitar su corazón, al ver brillar las estrellas del cie-
lo o alcanzar la cima de una montaña? El pulso es una evidencia
de que estamos vivos, y así es la fe en Jesús. Cuando pensamos en
el Señor, sentimos que nuestro corazón se acelera. Cuando con-
sideramos la gloria, el sueño y la voluntad del Señor, vemos en
una visión llegar a muchas personas. Debemos ver el mundo con
los ojos y el corazón del Señor.
El Señor tiene un sueño: salvar a todas las naciones y pueblos.
Y para esto, nos ha llamado a ser ‘luz de las naciones’ (Is. 49:6),
para cumplir con Su plan por medio de nosotros. Hace ya 130
años que llegaron los primeros misioneros a Corea. No vinieron
porque tuvieran familiares que salvar, ni ganancias que obtener;
simplemente vinieron a predicar el evangelio. De hecho, muchos
misioneros fueron sepultados en Corea, y así se constituyeron en
la luz de las naciones, porque abrazaron la visión del Señor en sus
corazones. Ellos no son los únicos que recibieron ese llamado;
recordemos que todos los creyentes fuimos escogidos para cum-
plir con esa gran comisión. Aquí, no hay excepción.
Predicar el evangelio no es siempre agradable, ya que seguir un
sueño trae aflicción. Nadie alcanza su gran sueño llevando una
vida cómoda; el que tiene el sueño de Jesús, tendrá que pagar el
precio: deberá negarse a sí mismo, cargar con la cruz y seguir al
Señor. En este caminar, podremos perder la salud o la aproba-
ción del mundo, pero no podemos olvidar que Jesús murió en la
cruz por nosotros, para darnos salvación y vida eterna. Sin nues-
tro sacrificio y consagración, no podremos ser canales de la gra-
cia de Dios.
La Biblia dice que los que sembraron con lágrimas, con rego-
cijo segarán (Sal. 126:5). Los sabios conocen el tiempo preciso
para segar la mies que está madura; de lo contrario, pueden per-
der toda la cosecha. Jesús dijo que este es el tiempo de la siega.
El Señor nos invita a ir con Él al mundo a anunciar el evangelio
del reino de Dios. ¿No desean tomar Su mano para alcanzar las
almas que están listas para ser cosechadas?

10
¿Por qué tenemos que ir al mundo y predicar el evangelio?
Porque no hay otro nombre que el nombre de
Jesucristo, para alcanzar salvación.

Escrito por Yongjo Ha - Fotografía: equipo de Duranno, shutterstock


Pastor Yongjo Ha, fundador de la Iglesia de Onnuri, la editorial Duranno
y CGNTV. Fue un hombre de visión, un apóstol lleno de amor que dio su
vida por el evangelio. Fue el autor de unos sesenta libros, entre ellos, Los
devocionales traen felicidad y Soñando con la iglesia de los Hechos.

11
La Palabra de mi vida (10)
1 Pedro 1:10-11

Investigar
escudriñar y
diligentemente

Kim Nam-gook / Pastor principal de la iglesia El Señor es mi fortaleza


y autor de José, al que enviaron primero, entre otros.

12
N ací en una familia budista y fui por primera vez a una
iglesia cuando estaba en tercer año de la secundaria. Dos
años más tarde, acepté y confesé a Jesús como mi Señor, sin
imaginar que sería llamado a ser pastor. Lo único que quería
era vivir el resto de mi vida como un fiel que no traiciona al
Señor, hasta que recibí el llamado de Dios, cuando estaba a
punto de cumplir 30 años. A pesar de que para el mundo no
tenía lo que se necesitaba, ingresé al Seminario Teológico por
la gracia milagrosa de Dios e inicié mi camino ministerial.

Dudar acerca del llamado pastoral


A partir de ese momento, empezaron mis dudas. ¿Qué es
un pastor?, ¿cómo debe vivir un pastor?, ¿por qué me llamó
Dios para que sea un pastor? Todas las preguntas eran igual
de importantes, pero no tenía ni tiempo de pensar, debido a
lo ocupado que estaba con el ministerio. Planté una iglesia
y me encargué de predicar durante los cultos de adoración.
Sin embargo, cuanto más atareado estaba por el ministerio,
más dudas tenía, y no podía hallar las respuestas. En medio
de eso y después de muchos años de no haber regresado, vi-
sité el Seminario Teológico Hapdong donde estudié, para ver
a mi profesor.
Mientras esperaba en el vestíbulo, noté los numerosos vo-
lantes sobre los retiros espirituales de verano y me puse a
mirarlos sin pensar, hasta que me pregunté: ‘¿Cómo puede
ser que no haya un campamento que solo enseñe la Biblia,
cuando hay cientos de eventos variados? ¿Acaso no sería una
bendición inmensa que los jóvenes de ahora tuviesen la opor-
tunidad de estudiar a profundidad la Palabra, así como lo ha-
cíamos en mi época?’. Aquella noche regresé pensando en
esto y, cuando meditaba en las Escrituras, me encontré con el
versículo que transformaría por completo mi actitud hacia la
vida y la perspectiva que tengo sobre la Biblia: “Los profetas
que profetizaron de la gracia destinada a vosotros inquirie-
ron y diligentemente indagaron acerca de esta salvación, es-
cudriñando qué persona y qué tiempo indicaba el Espíritu de
Cristo que estaba en ellos, el cual anunciaba de antemano los
sufrimientos de Cristo y las glorias que vendrían tras ellos”
(1 Pedro 1:10-11). Entonces pensé: ‘¡Conque así fue! ¡Hasta
los profetas que recibían la revelación de Dios inquirían, in-
dagaban y escudriñaban diligentemente la Palabra que Dios
les había dado!’. Este pasaje cambió radicalmente el sentido

13
La Palabra de mi vida (10)
1 Pedro 1:10-11

de mi ministeri­o y la manera en que veía la vida del pastor.


Por más que el mundo cambie, el fin último del pastor es es-
tudiar y analizar con esmero la Palabra de Dios, porque es el
encargado de hacerlo. Por ende, si este no observa la Biblia,
es un claro abandono de su responsabilidad. Hoy en día, mu-
chos pastores han sido señalados por engañar a los fieles, en
lugar de cumplir con la misión que Dios les entregó. Por en-
de, si no queremos ser como ellos, debemos predicar la Pa-
labra, luego de estudiarla a profundidad, y vivir de acuerdo
con Sus enseñanzas.
Por esta razón, me dediqué a escudriñar diligentemente la
Palabra y me esforcé por vivir según lo que aprendía, estu-
diándola y meditando en ella. Sobre todo, centré mi ministerio
en instruir a otros en la Palabra de Dios, para lo que realiza-
mos “Campamentos bíblicos” todas las vacaciones de vera-
no e invierno, donde solo enseñamos la Biblia a los jóvenes.
Ya llevamos más de diez años organizándolo sin falta y llevo
15 años predicando todos los jueves en el culto de adoración
de Markers. Algunos pastores más jóvenes me dicen: “Estoy
frustrado, porque por más que lea la Biblia no puedo predi-
car bien”. Sin embargo, esto es posible. Y para ser buenos
predicadores se necesita el don que da Dios, pero estudiar y
meditar la Biblia no se trata de hacerlo bien o mal. Este es un
deber y un llamado. Por lo tanto, lo más importante es vivir
ante la Palabra, escudriñándola diligentemente.

La gloria de vivir ante la Palabra


Esto no aplica solo para pastores. Herman Bavinck, un teó-
logo de tercera generación sostuvo: “El pensamiento de to-
do cristiano debe depender de la revelación”. O sea que los
cristianos debemos pensar y vivir acorde a la Biblia. A pesar
de que vivimos en una época que venera la opinión huma-
na, nosotros debemos seguir la soberanía de Dios. Para esto
debemos tener bien en claro Su estándar, que es la Biblia. Y
cuando finalmente todos los fieles amen, estudien y vivan si-
guiendo la Palabra de Dios como su guía, el mundo y la igle-
sia conocerán la increíble obra de Dios. Por eso, hoy también
oro para que llegue ese día y me esfuerzo por vivir ante Dios
investigando diligentemente las Escrituras.

14
Pioneros de la misión

Mi amigo,
mi compañero
Chang Woong-soo - Misionero enviado por la Iglesia Presbiteriana de Jeonbuk del Este

C uando todavía llevaba poco de haber llegado a Guatemala y no conocía


la cultura local ni comprendía a la gente, vino un grupo misionero para
una misión de corto plazo. Para cumplir lo que teníamos planeado para todos
los ministerios, como el del campamento bíblico para niños, el de medicina
oriental y el de estética, necesitábamos de mucha ayuda por parte de los luga-
reños. También tuvimos que pedir prestada una tienda de la alcaldía, porque
nuestro templo era muy pequeño. La mañana del servicio fui bien temprano a
la iglesia y me encontré con que Jerónimo, mi compañero guatemalteco, no
había llegado. Lo que me obligó a esperar, ya que él sabía bien cómo instalar
la tienda. Sin embargo, me enfurecí al pensar que yo le había insistido en que
llegara temprano. Y el hecho de que no contestara el celular, me enojó mucho
más. Mientras luchaba con la carpa, vi que se acercaba a lo lejos. A pesar de
que llegó mucho más tarde que lo acordado, me saludó sonriendo, como si
nada hubiera pasado. Si bien el resto del equipo lo recibió feliz, yo estaba fu-
rioso por dentro. Así que forcé una sonrisa para saludarlo y terminamos de
colocar la tienda juntos.
Luego de unos instantes, cuando estábamos ocupados y necesitábamos gen-
te, Jerónimo volvió a desaparecer. Regresó más tarde, explicando felizmente
que había ido a comer a la casa de su hermana que vive cerca, porque no ha-
bía podid­o desayunar. Me molestó tanto su actitud, que comencé a gritarle sin
15
Pioneros de la misión
darm­e cuenta. A pesar de que él no entendía coreano, sentí que la furia que
veía en mi rostro lo intimidó un poco. Jerónimo esperó a que me calmara. En-
tonces, tomó una Biblia y me mostró un versículo: “Estad siempre gozosos”
(1 Tesalonicenses 5:16). Y me dijo: “Deseo que sea un misionero que nunca
pierde la sonrisa”. Me llené de vergüenza. Dios me mostró claramente mi ver-
gonzoso obrar como misionero y como cristiano, haciendo que me arrepintiera.
Tras aquel episodio, Jerónimo y yo nos fortalecimos aún más como compa-
ñeros y se volvió indispensable en numerosas obras, como en la organización
de pastores en cada región, en fundar escuelas bíblicas en cada iglesia, entre
otras. Hoy en día, sigo descubriendo las maravillosas obras que Dios realiza
por medio de este valioso compañero, quien nunca me ha dejado solo. ¡Alelu-
ya! Compraré una sandía para Jerónimo.

México
Belice

Guatemala
Honduras

Nicaragua
Ciudad de El Salvador
Guatemala
Mar Caribe

Costa Rica

Información sobre el PAÍS

G uatemala limita al norte con México; al sur se encuentra entre El Salva-


dor y Honduras. Con una población de 17 millones de habitantes, es
el país más poblado de América Central. Debido a que allí se formó la civi-
lización maya, se pueden encontrar artefactos antiguos que datan del año
6.500 a. C. Si bien fue conquistada por España en el siglo XVI y pasó más
de 300 años bajo su control, se independizó en 1821. Más tarde, en el si-
glo XX, atravesaron el terrible “genocidio guatemalteco”, en el que 200.000
ciudadanos que se resistieron al gobierno militar fueron asesinados salva-
jemente. Actualmente, el estándar de vida es extremadamente pobre, debi-
do a que la mayoría de sus habitantes, que son descendientes mayas, son
pequeños agricultores.

16
Información para ORAR

E n este país, donde más del 10 % de los habitantes son analfabetos, el 50 %


de la población es católica y tienden a adorar a María como un ídolo. A
pesar de que estadísticamente el 25 % es protestante, la fe se ha desvirtua-
do al mezclarse con la religión aborigen, pues la tradición maya aún persis-
te fuertemente en los guatemaltecos. Adicionalmente, la mayoría de los pas-
tores no han recibido educación formal en el seminario. América Central y
del Sur tienen un alto porcentaje de protestantes, pero cada vez se agravan
más los persistentes problemas sociales como la corrupción. Oremos para
que la iglesia de Guatemala, donde existe una gran brecha entre ricos y po-
bres, crezca sana y sea la luz y la sal de este mundo, y sea utilizada como
una valiosa herramienta para evangelizar América Latina.

Temas de oración del misionero


CHANG WOONG-SOO

1 2
Para que se predique Para que los más
el evangelio a pobres, cuya
todas las almas de supervivencia se ve
Guatemala, llevando amenazada en estos
la salvación y el momentos por el
arrepentimiento a COVID-19, reciban la
todos aquellos que ayuda necesaria.
creen que los ídolos
y las religiones
aborígenes lo son

4
todo.

3
Para que pueda ser
un misionero que
Para que podamos
predica el evangelio
establecer la
con la Palabra de
dirección, el objetivo y
Dios y en oración,
los planes específicos
siempre despierto con
del ministerio de la
la llenura del Espíritu
misión correctamente
Santo.
en el Espíritu Santo.

17
¿ ?
Buscando respuestas (10)

Por qué necesitamos


la medicina, si Dios
es nuestro sanador
Sang-hee Lee, pastor de la Iglesia Hosanna, doctor en Antiguo
Testamento de la Universidad Princeton

“ Sol, detente en Gabaón (…)” ( Jos.


10:12) fue la oración de Josué; y
ciertamente el sol se detuvo. La Biblia
Dios nos ha dado la ciencia y
también la medicina

señala que “no hubo día como aquel, Se trata de un testimonio algo cómico,
ni antes ni después de él, habiendo sencillo, pero nos ayuda a entender
atendido Jehová a la voz de un hom- la relación existente entre la religión
bre (…)” ( Jos. 10:14). Un pastor ami- y la ciencia. La religión no excluye a
go se sintió muy confundido por este la ciencia; ni la fe, al raciocinio, y vi-
pasaje siendo joven. Él también tuvo ceversa. Tanto la razón como la cien-
el deseo de orar y de pedirle a Dios cia nos han sido dadas por Dios; y
que detuviera el sol, pero, como el Él muchas veces las utiliza para hacer
versículo dice que ‘no hubo día como Su obra. Por ejemplo, según una car-
aquel’, creía que Dios no iba a respon- ta que escribió un médico a principios
der a su clamor. Desanimado, oró de 1990, en los años sesenta, un be-
toda la noche; y en la madrugada, oyó bé que pesara menos de 2 kg era con-
una dulce y apacible voz que le dijo: siderado prematuro. Por esta razón,
“hijo, ¿el sol gira alrededor de la tie- creían que todo recién nacido que pe-
rra, o la tierra gira alrededor del sara menos que eso no se podía salvar
sol?”. Entonces, mi amigo entendió ni con la medicina, lo que ocasionó
que lo que se detuvo quizás no fue el que muchos padres los arrojaban a la
sol, sino la tierra. Entendió todo esto basura envolviéndolos en pañuelos.
como una enseñanza de parte de Sin embargo, el médico argumenta en
Dios, para que le agradezcamos por su artículo que con más de un kilogra-
el conocimiento que nos da la ciencia. mo de peso sí es posible salvar a un
Desde aquel día, se esfuerza mucho bebé, porque la ciencia debe ir de la
en la oración, pero también en estu- mano con el respeto por la vida. ¿Có-
diar las ciencias de este mundo. mo habrán cambiado hoy en día las
cosas? Recuerdo que una hermana de
la iglesia tuvo a su hijo prematuro, pe-
sando apenas 530 gramos. Pero, gra-
cias a los avances tecnológico­s en la

18
medicina y a la oración de los herma- tienen un ataúd con cruces grabadas.
nos, el niño creció saludable y hoy tie- El ataúd simboliza a la iglesia. Así cri-
ne siete años. Hace unos meses atrás, tica Brueghel el pesimismo de la igle-
otra hermana tuvo un hijo prematuro sia frente a la ciencia.
que pesó 430 gramos. Una vez más, Hoy en día, la iglesia del año 2020
con el apoyo de la medicina y la ora- ha respetado a la ciencia en lo refe-
ción de los creyentes, está creciendo rente al coronavirus; esperamos que
con salud. De esta manera, la medi- la ciencia, que sigue avanzando a pa-
cina se ha constituido en una herra- sos gigantescos, continúe respetando
mienta del milagro divino. la fe con humildad.
Respeto mutuo entre Medicina para los
la ciencia y la fe que amamos
El mundo actual está sufriendo co- Recientemente, he visto partir al reino
mo nunca por el COVID-19, lo que de los cielos a muchos seres queridos:
ha obligado a muchas iglesias a hacer a mi padre, mi suegra, mi hermana
uso de la tecnología, en lugar de te- mayor —a quien he cuidado toda mi
ner cultos presenciales. Pero la igle- vida por su discapacidad—, y a un
sia no siempre ha respondido de esta profesor que me demostró un amor
manera. incondicional cuando estuve estu-
En el libro Los hermanos Karamazov diando lejos de casa. Y cada vez que
de Dostoievski, el respetado director pienso en el carácter fuerte y tempe-
del monasterio muere y, en contraste a ramental de mi padre, y su difícil vejez
las expectativas, su cadáver hedía a tal por los quebrantamientos de salud;
punto que muchos creyentes quedan cada vez que paso por la casa de mi
confundidos. En la época en que fue suegra y recuerdo que me pedía que
publicada la obra (1880), la iglesia no la llamara por teléfono más seguido,
aceptaba la ciencia como hoy en día. porque se sentía sola; cada vez que me
Y si retrocedemos más en el tiempo, acuerdo de la sonrisa de mi hermana,
la relación era mucho más conflictiva. que vivió toda su vida con una joroba
El triunfo de la Muerte (1562) de Pieter como de un camello; o cada vez que
Brueghel trata sobre la gran tribula- traigo a mi memoria le vejez solitaria
ción, en la cual algunos, en su deses- de mi profesor, pienso que Dios per-
peración ante la certeza de un destino mite el envejecimiento y la enferme-
inequívoco, la muerte, avanzan como dad en el hombre, para brindarnos la
legiones de esqueletos hacia un gigan- oportunidad de amar al prójimo. La
tesco ataúd. Este lugar que los lleva a medicina es una herramienta de amor
su fin, tiene una puerta hacia el cielo que Dios ha puesto en nuestras ma-
con forma de una cruz. A ambos la- nos. El dolor es consecuencia de la
dos de la puerta, los esqueletos sos- falta de amor, no de la medicina.

19
Introducción bíblica

Jeremías (5) (cap. 40-52)


Dios no desecha a Su pueblo
Jeremías proclama la palabra de Dios poniendo en riesgo su vida; pero ni el
rey ni el pueblo de Judá inclinan su oído para escucharlo. Dios tomará a las
naciones gentiles como Su instrumento para castigar a Su pueblo. Después
de juzgar a las naciones que se han enaltecido y han ejercido violencia, hará
que Israel vuelva de su cautiverio. Dios es salvador; Él es misericordioso,
perdona a Su pueblo escogido y lo restaura.

Antes de la La aflicción de Jeremías (34:1-45:5): a diferencia de los


caída de falsos profetas que dicen lo que a la gente le agrada oír, el
Jerusalén mensajero de Dios que anuncia fielmente Su Palabra es mu-
(1:1-45:5) chas veces perseguido.
Liberación de Jeremías (40:1-16): a Jeremías lo dejan libre
camino a Babilonia y acude a Gedalías, quien fue nombra-
do gobernador de Judá por el rey de los caldeos. Los solda-
dos y el pueblo de Judá que quedaron dispersos se reúnen
en Mizpa. Gedalías les exhorta a establecerse en la tierra de
Judá y servir a Babilonia.
La muerte de Gedalías (41:1-18): I smael y algunos prín-
cipes del rey matan a Gedalías y a sus soldados, y además le
quitan la vida a setenta hombres que se dirigen al Templo.
Johanán y los jefes militares liberan al pueblo de la mano
de Ismael. Por temor a Babilonia, se dirigen hacia Egipto y
se quedan cerca de Belén.
La oración de Jeremías (42:1-22): Johanán, los oficiales
y el pueblo piden a Jeremías que ore a Dios, y declaran es-
tar dispuestos a obedecer Su palabra. Al cabo de diez días,
reciben respuesta de Dios, quien les dice que no deben ir
a Egipto, sino permanecer en Judá. No deben temer, por
cuanto Dios los rescatará de la mano del rey de Babilonia.
El profeta les advierte que morirán a espada, de hambre y
de pestilencia, si desobedecen y se van a Egipto.
Los que confían en Egipto (43:1-13): h ay quienes oran,
sin renunciar su propia opinión, y cuando la respuesta de
Dios no coincide con sus expectativas, desobedecen. Joha-
nán y todos los varones soberbios desacatan las instruccio-
nes de Dios y acusan a Jeremías de mentiroso. Al final, se
llevan al remanente de Judá, a Jeremías y a Baruc a Tafnes,
20
Egipto. Allí, el profeta anuncia que Dios juzgará a Egipto
por medio de Nabucodonosor, el rey de Babilonia, y que
pondrá fuego en los lugares altos.
Los idólatras (44:1-19): D  ios ha mandado constantemen-
te profetas al pueblo de Judá, advirtiéndoles de su idolatría;
mas ellos no quisieron oír. Por tanto, Dios los juzgará y su
tierra quedará asolada. Habiendo visto todo el mal que ca-
yó sobre Jerusalén, no temen a Dios, sirven a dioses ajenos,
desobedecen a la Palabra y toman el camino de su propia
perdición. Ellos consideran que Egipto es una tierra segura
y próspera. Pero Dios traerá mal sobre Su pueblo, por diri-
girse a esa nación en desobediencia. Sin embargo, ellos es-
tán convencidos de que han gozado de prosperidad gracias
a los ídolos; y aseguran que si tienen necesidades es porque
han dejado de servir a los dioses.
Señal del juicio (44:20-30): Jeremías anuncia la Palabra
de Dios al pueblo de Judá en Egipto. Por haber ido tras los
ídolos en lugar de buscar a Dios, todos perecerán, excep-
to unos pocos que volverán a su tierra escapando del mal.
Como señal de esto, Dios entregará a Hofra, el faraón de
Egipto, en las manos del rey de Babilonia.
La salvación de Baruc (45:1-5): Baruc es el escriba que re-
gistra las palabras que Dios profetiza a través de Jeremías.
Baruc se lamenta con dolor a falta de paz; pero Él promete
guardar y velar por su vida en el día del juicio sobre la tierra.

Después de la Juicio sobre las naciones gentiles (46:1-51:64): Dios uti-


caída de lizará a los pueblos gentiles para corregir el pecado de Su
Jerusalén pueblo escogido. Después, reprenderá a las naciones gen-
(46:1-52:34) tiles que se enaltecerán en su corazón tratando con violen-
cia al pueblo de Dios. Toda nación que se haya levantado
en contra de Israel perecerá.
Juicio contra Egipto (46:1-28): e n el cuarto año de Joa-
cim, rey de Judá, Jeremías anuncia el juicio de Dios contra
Egipto. Aunque el faraón Necao mató al rey Josías, quien
lideró la reforma religiosa (2 R. 23:24-30), él será derrotado
por Nabucodonosor en Carquemis. Dios entregará al ejérci-
to egipcio en las manos de sus enemigos, por jactarse de su
poder y fuerza, para que sean avergonzados y derrotados. La
tierra de Egipto será asolada, y sus moradores serán lleva-
dos cautivos. Dios utilizará a Babilonia como Su instrumen-
to, para juzgar a Egipto, sus ídolos y todos los que confían
21
Introducción bíblica
en esta nación. Pero después, Egipto será restaurado, y Su
pueblo Israel volverá de su cautividad. Dios castiga el pe-
cado de Su pueblo escogido; pero no los destruye del todo.
Juicio contra Filistea (47:1-7): Filistea es una nación con-
formada por cinco ciudades Estado: Ecrón, Asdod, Asca-
lón, Gaza y Gat. Es una nación cruel y violenta, que afligió
a Israel por largo tiempo. Este pasaje es la palabra de Dios a
Jeremías sobre Filistea, antes de que el rey de Egipto atacase
a Gat: se levantará Babilonia del norte, para atacar y hollar
a Filistea. Así los juzgará Dios por sus pecados.
Juicio contra Moab (48:1-47): p  or su soberbia, Moab se-
rá juzgada para su confusión y vergüenza. No se alabará ya
más Moab; se oirá el clamor de sus pequeños. Ni los bienes,
ni los tesoros, ni su ídolo Quemos podrán socorrerle, aun-
que haya depositado en ellos su confianza. Si bien ha gozado
de riquezas y de paz por largos días, para su trágico fin será
juzgada por el Rey, cuyo nombre es ‘Jehová de los ejércitos’.
C on facilidad caemos en la soberbia cuando gozamos de
paz y prosperidad, porque confiamos en nuestras fuerzas.
Cuando Moab veía la aflicción de Israel, se burlaba de él,
con soberbia en su corazón. Dios castigará su jactancia; se-
rán motivo de burla, cuando sean quebrantados como va-
sijas, por haber sacrificado a ídolos en lugares altos. No
obstante, hay esperanza para Moab, porque, en los postre-
ros tiempos, Dios le concederá Su gracia restauradora.
Juicio contra Amón (49:1-6): siendo descendientes de Lot,
los amonitas tienen parentesco con los israelitas. Sin embar-
go, Amón no ha sido benevolente con Israel. Dios juzgará
a este pueblo por haber desposeído a Gad para establecer-
se en sus ciudades, y devolverá esas tierras a Israel. Amón
será asolado por haberse enaltecido, por confiar en los ído-
los y en las riquezas; y será llevado cautivo a otras naciones.
No obstante, Dios los hará retornar a su tierra.
Juicio contra Edom (49:7-22): E  dom se había establecido
en una ciudad difícil de ser conquistada por sus característi-
cas geográficas (Abd. 1:3). A esto, se sumaron la sabiduría
de Temán y la habilidad comercial de Dedán, para enaltecer-
se aún más en su corazón. Descendientes de Esaú, hermano
mayor de Jacob, aborrecieron a Israel y se gozaron de ver
la destrucción de sus hermanos. Por eso, Jeremías profeti-
za palabra de juicio divino contra Edom. Aquello en lo que

22
Edom ha puesto su confianza, será destruido; todo aquel
que pase por su territorio se asombrará y conocerá a Dios.
Juicio contra Damasco (49:23-27): D  amasco, ciudad ca-
pital de Siria, es una hermosa ciudad, es como un oasis en
medio del desierto. Dicha nación pacífica, que ha vivido
confiadamente, será destruida completamente. Después de
haber disfrutado de gozo y paz, será destruida para temblor
y angustia; así serán juzgados por su violencia (Am. 1:3-5).
Juicio contra Cedar y Hazor (49:28-33): C edar y Hazor
son tribus árabes que se habían establecido en el desierto
de Arabia, al este de Israel. Vivían en el desierto y se con-
fiaban de sus muchos ganados, en lugar de confiar en Dios.
Dios utilizará a Nabucodonosor, rey de Babilonia, para juz-
garlos. Sus bienes serán saqueados y su pueblo dispersado;
serán azotados con toda clase de calamidades.
Juicio contra Elam (49:34-39): u bicado al oriente del río
Tigris, Elam es un pueblo hábil para atacar con arco y fle-
chas. Pero Dios quebrantará aquello en lo que Elam ha
puesto su confianza; y dispersará a este pueblo entre las na-
ciones. Pero acontecerá, en los últimos días, que hará vol-
ver a los cautivos de Elam.
Juicio contra Babilonia (50:1-51:64): Jeremías anuncia jui-
cio sobre Babilonia, después de ser utilizada para castigar
al pueblo de Dios.

Juicio a las naciones


Jeremías Las naciones Isaías Otros pasajes
46:2-26 Egipto 19:1-25 Ez. 29:1-32:32

· Asiria 14:25 ·

47:1-7 Filistea 14:28-32 Ez. 25:15-17

48:1-47 Moab 15:1-16:14; 25:10-12 Ez. 25:8-11

49:1-6 Amón · Ez. 25:1-7

49:7-22 Edom · Ez. 25:12-14; 35:1-15; Abd. 1:1-14

49:23-27 Siria (Damasco) 17:1-14 Am. 1:3-5

· Etiopía 18:1-7 Ez. 30:4-5, 9

· Duma 21:11-12 ·

49:28-33 Cedar y Hazor (Arabia) 21:13-17 ·

49:34-39 Elam 22:6 Ez. 32:24-25

· Tiro y Sidón 23:1-18 Ez. 26:1-28:24

50:1-51:58 Babilonia 13:1-14:23; 21:1-10 ·

23
Introducción bíblica
La desolación de Babilonia (50:1-51:58): la destrucción
de Babilonia será anunciada en las naciones, y sus ídolos se-
rán destruidos. Una nación del norte subirá contra ella, la
cual pondrá su tierra en asolamiento. Su nombre es Persia.
La caída de Babilonia tiene relación con la restauración de
Israel, después del cautiverio. Habiendo establecido pacto
perpetuo con Su pueblo, Dios lo hará retornar a Israel, su
tierra. Ellos buscarán a Dios nuevamente, lo adorarán y se
unirán a Él con pacto eterno (50:4-5). Serán saciados por
el perfecto perdón y la sublime gracia de Dios (50:19-20).
A pesar de ser un simple martillo en las manos del Sobera-
no y Juez, Babilonia se enalteció de corazón y se sentó en el
lugar del Juez. Destruyó el Templo de Dios y se llevó cau-
tivo al pueblo escogido para devorarlo con crueldad. Dios
tomará venganza por sus acciones; le dará su pago, levan-
tando una nación más poderosa para destruirla, pues se jac-
tó de su fuerza destructora (50:21-42).
B abilonia embriagó a toda la tierra con el vino de la ira de
Dios; pero los caldeos también se encuentran bajo la sobe-
ranía y la autoridad de Dios. Ni su poderoso ejército podrá
salvarle de Su juicio; perderá todas sus riquezas. En el día
de la venganza de Dios, Israel será rescatado de Babilonia.
El Soberano y Formador de todo lo creado con sabiduría e
inteligencia será la porción (heredad) de Israel; y ellos se-
rán el pueblo adquirido por Dios (51:1-19). El Señor oye el
clamor de Su pueblo que gime de dolor y se vengará de sus
enemigos. Quebrantará a los ídolos de Babilonia; destrui-
rá las ciudades inconquistables; Babilonia será avergonzada
por sus ruinas; las naciones estarán confundidas (51:35-58).
El libro de profecías de Jeremías (51:59-64): J eremías
cumple el ministerio de Dios hasta el fin. Escribe las pro-
fecías de Dios sobre el juicio contra Babilonia y luego man-
da a Seraías, quien es llevado cautivo a Babilonia junto al
rey Sedequías, a leerlo y después echarlo en medio del río
Éufrates. Así como el libro atado a una piedra se hundirá
en el agua, igualmente caerá Babilonia por el mal que Dios
traerá sobre ella.
Conclusión (52:1-34): e l rey y el pueblo de Judá son juz-
gados por su desobediencia a Dios. Pero, después del cas-
tigo, serán restaurados.
El fin del rey Sedequías (52:1-11): d espués de gobernar
sobre Judá once años, el rey Sedequías traiciona al rey de
24
Babilonia, pese a las profecías de Jeremías. Al final, Jeru-
salén cae en manos del ejército de Nabucodonosor (rey de
Babilonia), y Sedequías es capturado y llevado cautivo a Ba-
bilonia. Después de ver a sus hijos y a los príncipes ser de-
gollados, le sacan los ojos.
El Templo es hollado (52:12-30): e l Templo de Dios y el
palacio son consumidos por fuego, conforme a la adverten-
cia del profeta. El ejército de Babilonia saquea los utensilios
del Templo y se lleva cautivo al pueblo de Judá. En total,
son cuatro mil seiscientas personas que son transportadas
a Babilonia en tres ocasiones.
El rey Joaquín es liberado (52:31-34): e n el año prime-
ro del reinado de Evil-merodac (rey de Babilonia), Joaquín
(rey de Judá) es liberado de la cárcel y tratado con bene-
volencia. Así muestra Dios que no se ha apagado la luz de
esperanza para la casa de David, pues es señal de la futura
restauración de Israel.

Mar Damasco Siria


Mediterráneo
Amón
a
ste

Judá Moab
Fili

Edom

Naciones mencionadas en
Jeremías, capítulos 46 al 51

Carquemis
Asiria
Media

oT

igr

Mar Mediterráneo is
ufr
ate

(Israel, el reino del norte)


s

Jerusalén
Judá Babilonia
Elam

Egipto Mar Rojo

25
JUE

01 Ministerio antes
que el bienestar
Jeremías 40:1-6

La Biblia en un año: 1 Palabrade Jehová que vino a Jeremías, después


1 R. 3/ Ef. 1/ Ez. 34/ Sal. 83-84
que Nabuzaradán, capitán de la guardia, lo envió
desde Ramá, cuando lo encontró atado con ca-
denas entre todos los cautivos de Jerusalén y de
Judá que iban deportados a Babilonia. 
1  El Señor se dirigió a Jeremías, después que
Nebuzaradán, comandante de la guardia, dejó libre a
Jeremías en Ramá. Nebuzaradán lo había encontrado
preso y encadenado entre la gente de Jerusalén y de
Judá que era llevada al destierro a Babilonia.

2 Tomó, pues, el capitán de la guardia a Jeremías


y le dijo: «Jehová, tu Dios, anunció este mal con-
tra este lugar; 
2 El comandante de la guardia llevó aparte a Jeremías, y
le dijo: «El Señor tu Dios amenazó con enviar esta des-
gracia a esta tierra, 

3  y
lo ha traído y hecho Jehová según lo había
dicho, porque pecasteis contra Jehová y no escu-
chasteis su voz. Por eso os ha venido esto. 
3 y ahora ha cumplido su amenaza. Esto les ha pasa-
do a ustedes porque pecaron contra el Señor y no lo
obedecieron. 
26
Jeremías 40:1-6

Nabuzaradán, capitán de la guardia, lleva a los cautivos de Judá a Babilonia, entre


ellos también está Jeremías. El capitán reconoce que la palabra que Dios habló a
través de Jeremías se cumplió, porque Judá pecó contra Dios, y le dice al profeta
que puede vivir donde quiera, incluso en Babilonia. El profeta vuelve a Gedalías,
quien fue nombrado rey de Judá por Babilonia, para habitar en medio del pueblo.

4 Y ahora, he aquí que en este día yo te he libra-


do de las cadenas que tenías en tus manos. Si te
parece bien venir conmigo a Babilonia, ven, y yo
velaré por ti; pero si no te parece bien venir con-
migo a Babilonia, puedes quedarte. Mira, toda la
tierra está delante de ti: ve a donde mejor y más
cómodo te parezca ir. 
4 Mira, ahora mismo te quito las cadenas con que estás
atado. Si quieres venir conmigo a Babilonia, ven; yo te
cuidaré. Pero si no quieres venir, quédate. Tienes todo
el país a tu disposición: ve a donde mejor te parezca. 

5  Si
prefieres quedarte, vuélvete a Gedalías hi-
jo de Ahicam hijo de Safán, a quien el rey de
Babilonia ha puesto sobre todas las ciudades de
Judá, y vive con él en medio del pueblo. O ve a
donde te parezca más cómodo ir.» Le dio el ca-
pitán de la guardia provisiones y un presente, y
lo despidió. 
5  Si prefieres regresar, vuélvete a Guedalías, hijo de
Ahicam y nieto de Safán, a quien el rey de Babilonia ha
nombrado gobernador de las ciudades de Judá, y vive
con él y con tu pueblo. Ve a donde te parezca mejor.»
Luego el comandante dio a Jeremías un regalo y provi-
siones, y lo despidió. 

6  Se fue entonces Jeremías a Gedalías hijo de


Ahicam, a Mizpa, y habitó con él en medio del
pueblo que había quedado en la tierra.
6 Jeremías se fue con Guedalías a Mispá, y vivió con él
y con la gente que había quedado en el país.

27
Ayuda a su meditación

La confesión de Nabuzaradán (40:1-3)


La Palabra de Dios ciertamente se cumple a lo largo de la historia. Nabucodo-
nosor, rey de Babilonia, envía a Nabuzaradán, capitán de la guardia, a conquistar
Jerusalén. Después de cumplir con éxito su misión, este se lleva a los judíos
encadenados a Babilonia. Si bien el rey de Babilonia había ordenado que no le
hicieran daño a Jeremías, sino que lo trataran con benevolencia (39:11-14), los
soldados no lo reconocieron y lo capturaron junto a los otros cautivos. Recién
en Ramá, a unos ocho kilómetros de Jerusalén, Nabuzaradán lo identifica y lo
suelta. Aunque el capitán era de origen gentil, reconoce que Judá fue juzgada
por Dios debido a su desobediencia. La obra de Dios es confirmada por los
gentiles también. Un juicio justo da a conocer la soberanía de Dios sobre las
naciones.
¿Cuál fue la causa de la destrucción de Judá, reconocida incluso por Nabuza-
radán, capitán de la guardia de Babilonia? ¿Cuál es la gran obra de Dios, que
aun los incrédulos reconocen?

Jeremías permanece en Judá (40:4-6)


El obrero de Dios conoce cuál es su llamado y da lo mejor de sí para cumplirlo.
Nabuzaradán le ofrece tres opciones a Jeremías: primero, ir con él a Babilonia
y contar con su protección. Segundo, acudir a Gedalías, hijo de Ahicam, al cual
el rey de Babilonia había puesto sobre todas las ciudades de Judá; allí recibiría
cierta protección y podría anunciar la Palabra de Dios al pueblo remanente. Y
tercero, Jeremías podía ir a cualquier otro lugar que desease. El profeta decide ir
Mizpa, en donde se encuentra Gedalías y parte de los sobrevivientes del pueblo
de Judá, para seguir cumpliendo con el llamado de anunciar la Palabra de Dios.
¡Qué hermoso es anteponer el llamado de Dios, antes que buscar el beneficio
personal o la comodidad!
¿Por qué Jeremías escoge ir a donde se encuentra Gedalías? Entre el bienestar
personal y el ministerio, ¿qué escogería yo?

Señor, deseo permanecer en Tu Palabra en todo momento y reflejar Tu


voluntad en todas mis decisiones. Ayúdame a cumplir con Tu llamado,
Una Carta sin hacer caso a mis emociones, satisfacción o comodidad. Extiende Tu
a Dios mano, Dios, y guía mi andar en todo momento, especialmente, cuando
me encuentre con personas o en situaciones diferentes a las que estoy
acostumbrado.
28
Ensayo para meditar Jeremías 40:1-6

Interpretar la vida
con la Biblia

E
l término GIGO en informática es una sigla en inglés que
significa “Garbage In, Garbage Out” (Entra basura, sale basura).
Esto significa que, sin importar qué tan nuevo sea el ordena-
dor, si ingresamos información incorrecta, obtendremos resultados
incorrectos. Cuando escuchamos las noticias, y el sin fin de inter-
pretaciones sociales, culturales y políticas de los sucesos, podemos
llegar a sentir que todo aquello que consideramos importante es
inestable, que se derrumbará en cualquier instante. Esto ocurre
cuando olvidamos cuán grande es Dios y nos enfocamos en la di-
mensión de los problemas.
No obstante, la corrupción moral y cultural que nos rodea no
ha tomado por sorpresa a Dios, ni es una realidad que se encuen-
tre más allá de Su poder redentor. En ocasiones, soy yo quien no
comprende el plan de Dios o a quien no le agradan Sus tiempos,
pero, si miro atrás, Él siempre ha estado en lo correcto. Por eso, in-
tento grabar en mi cabeza Sus promesas y recordar lo que sé sobre
Su personalidad como la base de mi confianza, esforzándome por
no predecir el futuro ni interpretar el presente basándome en los
juicios humanos que lo excluyen a Él, pues, de lo contrario, solo
obtengo resoluciones necias.
Debemos observar la vida a través de la Biblia y las promesas
de Dios. Asimismo, debemos continuar silenciando los ruidos que
encienden el temor y desgastan la esperanza, ya que la manera en
que interpretamos las circunstancias es lo que puede definir posi-
tivamente nuestras vidas y no las situaciones per se. Esta es la regla
GIGO y de la fe.

Vivir como cristiano en Babilonia, Larry Osborne


Aplicación Personal

29
VIE

02 Un líder con
discernimiento
Jeremías 40:7-16

La Biblia en un año: 7  Los jefes del ejército que estaban por el cam-
1 R.4-5/ Ef. 2/ Ez. 35/ Sal. 85
po junto con sus hombres, cuando oyeron que
el rey de Babilonia había puesto a Gedalías hijo
de Ahicam para gobernar la tierra, y que le ha-
bía encomendado los hombres, las mujeres y los
niños, y los pobres de la tierra que no fueron de-
portados a Babilonia, 

8  se presentaron a Gedalías, en Mizpa. Eran:


Ismael hijo de Netanías, Johanán y Jonatán hi-
jos de Carea, Seraías hijo de Tanhumet, los hijos
de Efai, el netofatita, y Jezanías, hijo de un maa-
cateo; todos ellos junto con sus hombres.

9  Y Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán les


juró a ellos y a sus hombres, diciendo: «No ten-
gáis temor de servir a los caldeos. Habitad en la
tierra, servid al rey de Babilonia y os irá bien. 

10  Y he aquí que yo habito en Mizpa, para tra-


tar con los caldeos que vendrán a nosotros. Pero
vosotros tomad el vino, los frutos del verano y
el aceite, ponedlos en vuestros almacenes y que-
daos en vuestras ciudades que habéis tomado.»

11  Asimismo todos los judíos que estaban en


Moab, entre los hijos de Amón, en Edom, y los
que estaban en todas las tierras, cuando oyeron
decir que el rey de Babilonia había dejado a al-
gunos en Judá y que había puesto sobre ellos a
Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán, 
30
Jeremías 40:7-16

Cuando el pueblo de Judá que se había dispersado por la tierra oye


que Gedalías ha sido nombrado gobernador de Judá, se reúne en
Mizpa. Johanán le revela a Gedalías que el rey de Amón ha envia-
do a Ismael para matarle, y pide su autorización para anticiparse
y asesinarlo antes, con el fin de evitar que el pueblo de Judá se
vuelva a dispersar. Sin embargo, Gedalías no cree en sus palabras.

12 todos estos judíos regresaron entonces de to-


dos los lugares adonde habían sido echados, y
vinieron a tierra de Judá, junto a Gedalías, en
Mizpa. Y recogieron vino y abundantes frutos.

13  Johanán hijo de Carea y todos los capitanes


de la gente de guerra que estaban en el campo
vinieron a Gedalías, en Mizpa, 

14  y le dijeron: «¿No sabes que Baalis, rey de


los hijos de Amón, ha enviado a Ismael hijo de
Netanías para matarte?» Pero Gedalías hijo de
Ahicam no los creyó. 

15  Entonces Johanán hijo de Carea habló a


Gedalías en secreto, en Mizpa, diciendo: «Yo iré
ahora y mataré a Ismael hijo de Netanías, y na-
die lo sabrá. ¿Por qué te ha de matar, de modo
que todos los judíos que se te han reunido se dis-
persen y perezca el resto de Judá?» 

16 Pero Gedalías hijo de Ahicam dijo a Johanán


hijo de Carea: «No hagas eso, porque es falso lo * Por falta de espacio se ha omitido
que dices de Ismael.» la versión “Dios Habla Hoy”

31
Ayuda a su meditación

El liderazgo de Gedalías (40:7-12)


El líder que discierne la voluntad de Dios, en medio de la crisis nacional, trae
esperanza. Gedalías fue nombrado por el rey de Babilonia como gobernador de
Judá. El padre de Gedalías era Ahicam, el mismo que ayudó a Jeremías cuando
estaba en aprietos (26:24). Al oír sobre el nuevo líder, el pueblo de Judá y la tro-
pa que se había dispersado después de ser derrotada vuelven a Mizpa. Gedalías
implementa una política a favor de Babilonia, porque cree que cargar con ese
yugo es la voluntad de Dios. A pesar de enfrentar una realidad desalentadora,
trata de animar a los que han retornado a Judá, ayudándoles a instalarse nue-
vamente. También manda a guardar alimentos para tiempos posteriores. Un
líder con esperanza y una dirección correcta, promete un futuro mejor a su
comunidad.
¿Cuál fue la política que implementó Gedalías, el gobernador de Judá, con los
que habían retornado a Mizpa? ¿Cómo es el líder que necesitamos en estos
tiempos?

Conspiración contra Gedalías (40:13-16)


Cuanto más grande sea la crisis, mayor discernimiento debe tener el líder. Baalis,
rey de Amón, siente hostilidad contra Babilonia y conspira contra Gedalías y
sus hombres, probablemente para reinar sobre Judá. Para llevar a cabo su plan
de matar al nuevo líder, utiliza a Ismael, quien pertenece al linaje real de Judá y
previamente le había buscado para obtener refugio. Advertido de este complot,
Johanán se propone matar a Ismael en secreto; pero Gedalías, descartando toda
posibilidad, no da su autorización. Sin embargo, el complot resulta ser cierto y
Gedalías es asesinado. Cuanto más grande sea la aflicción que afrontamos, más
debemos confiar en Dios y no en nosotros mismos. La comunidad puede cre-
cer, solo cuando su líder discierne quiénes son los que se oponen a la voluntad
de Dios.
¿Por qué Gedalías descarta el consejo de Johanán? ¿Cómo podemos adquirir
discernimiento para entender qué es verdad y qué es mentira?

Amado Dios, ¡cuán importante es conocer Tu perfecta voluntad para


Una Carta
conmigo! En obediencia a Tu Palabra, aceptaré al prójimo tal como es;
a Dios procuraré tener discernimiento de las cosas; trataré de no perder la
esperanza ni cerrar mis oídos a las necesidades del prójimo. Guarda
mi comunidad de las potestades del mal.
32
Ensayo para meditar Jeremías 40:7-16

Cuidar de la
intención original

L
a vida del creyente no debe perder nunca el equilibrio. Estar
firme significa conservar la intención original, sin importar
las circunstancias. Así como uno se propone a trabajar con
esmero cuando consigue un empleo nuevo, debe dar lo mejor de
sí mismo y de manera constante en el ministerio, la vida de fe y
el discipulado, pues son tareas que nos han sido asignadas para el
resto de nuestras vidas. Muchos líderes son humildes al principio,
pero cambian en cuanto ganan un poco de influencia, porque creen
que la autoridad es el fin último y la única expresión del poder. Sin
embargo, el dinero también es poder. Por eso, la gente cambia en
cuanto logra un mayor estatus socioeconómico y tambalea en sus
principios. No es importante cómo comencemos nuestra vida, sino
cómo la finalicemos. Un avión no solo debe despegar con éxito,
sino que también se espera que vuele y aterrice correctamente, ya
que de nada sirve que despegue bien, si se estrella en la mitad del
camino.
Lo que nos hace vacilar en la fe no es un factor exógeno, sino el
pecado que hay en nuestro interior. El pecado nos desvía, nos hace
tropezar e ignorar el camino de la bendición de Dios. Y esta es la
razón por la que debemos leer la Palabra que nos permite saber en
dónde nos encontramos, hacia dónde nos dirigimos y nos permite
verificar si es el camino correcto. La Palabra de Dios nos hace dis-
cernir el camino correcto del incorrecto. Es el discernimiento por
medio de la Palabra el que nos lleva hacia una vida de sabiduría y
nos forma como líderes sabios.

Valiente, Lee Kyu-hyun

Aplicación Personal

33
SÁB

03 Por envidia y
por ambición
Jeremías 41:1-18

La Biblia en un año: 1  Aconteció en el mes séptimo que Ismael hijo


1 R. 6/ Ef. 3/ Ez. 36/ Sal. 86
de Netanías hijo de Elisama, de la descendencia
real, junto con algunos oficiales del rey y diez
hombres, vino a Gedalías hijo de Ahicam, en
Mizpa. Y juntos comieron pan en Mizpa. 
2 De pronto se levantó Ismael hijo de Netanías, y
los diez hombres que con él estaban, e hirieron a
espada a Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán,
matando así a aquel a quien el rey de Babilonia
había puesto para gobernar la tierra. 
3  Asimismo mató Ismael a todos los judíos que
estaban con Gedalías en Mizpa, y a los soldados
caldeos que allí estaban.
4 Sucedió además, al día siguiente de haber ma-
tado a Gedalías, cuando aún nadie lo sabía, 
5  que llegaron unos hombres de Siquem, de
Silo y de Samaria. Eran ochenta hombres, con
la barba rapada, las ropas rasgadas y llenos de
rasguños, que en sus manos traían ofrendas e in-
cienso para llevar a la casa de Jehová. 
6  De Mizpa les salió al encuentro, llorando,
Ismael hijo de Netanías. Y aconteció que cuan-
do los encontró, les dijo: «¡Venid a presentaros
a Gedalías hijo de Ahicam!» 
7 Cuando ya habían entrado en la ciudad, Ismael
hijo de Netanías, junto con sus hombres, los de-
gollaron y los arrojaron a una cisterna. 
8 Pero entre aquellos había diez hombres que di-
jeron a Ismael: «No nos mates, porque tenemos
en el campo reservas de trigo, cebada, aceite y
miel.» Y no los mató como había hecho con sus
hermanos.
9  La cisterna a la que Ismael arrojó los cuer-
pos de todos los hombres que mató a causa de
Gedalías, era la misma que había hecho el rey
Asa a causa de Baasa, rey de Israel. Ismael hijo
de Netanías la llenó de muertos. 
10  Después Ismael llevó cautivo a todo el resto
del pueblo que estaba en Mizpa, a las hijas del rey
34
Jeremías 41:1-18

Ismael y algunos hombres llegan a Mizpa, y matan a Gedalías


con decenas de hombres que se dirigen a adorar a Dios; además,
llevan cautivo al pueblo y se dirigen a Amón. Sin embargo, Joha-
nán los alcanza, así que Ismael huye a Amón. Entonces, Johanán
se propone ir a Egipto con el pueblo. Todos estos sienten gran
temor por cuanto Ismael mató a Gedalías.

y a todo el pueblo que había quedado en Mizpa,


el cual había encargado Nabuzaradán, capitán de
la guardia, a Gedalías hijo de Ahicam. Los llevó,
pues, cautivos Ismael hijo de Netanías y se fue
para pasarse a los hijos de Amón.
11 Johanán hijo de Carea y todos los capitanes
de la gente de guerra que estaban con él oye-
ron todo el mal que había hecho Ismael hijo de
Netanías. 
12 Entonces tomaron a todos los hombres y fue-
ron a pelear contra Ismael hijo de Netanías, a
quien hallaron junto al gran estanque que es-
tá en Gabaón. 
13 Y sucedió que cuando todo el pueblo que es-
taba con Ismael vio a Johanán hijo de Carea, y
a todos los capitanes de la gente de guerra que
estaban con él, se alegraron. 
14 Y todo el pueblo que Ismael había traído cau-
tivo de Mizpa se volvió y fue con Johanán hijo
de Carea. 
15  Pero Ismael hijo de Netanías y otros ocho
hombres escaparon delante de Johanán y se fue-
ron con los hijos de Amón. 
16  Entonces Johanán hijo de Carea, junto con
todos los capitanes de la gente de guerra que
con él estaban, tomaron a todo el resto del pue-
blo, el cual habían recobrado de Ismael hijo de
Netanías, que se lo había llevado de Mizpa des-
pués de matar a Gedalías hijo de Ahicam. Eran
hombres de guerra, mujeres, niños y eunucos,
que Johanán había traído de Gabaón. 
17  Fueron y habitaron en Gerut-quimam, que
está cerca de Belén, con el fin de continuar su
camino hasta entrar en Egipto, 
18 a causa de los caldeos. Ellos temían a los cal-
deos porque Ismael hijo de Netanías había dado
muerte a Gedalías hijo de Ahicam, a quien el
rey de Babilonia había puesto para gobernar la * Por falta de espacio se ha omitido
tierra. la versión “Dios Habla Hoy”

35
Ayuda a su meditación

La muerte de Gedalías (41:1-10)


La ambición en el líder provoca crisis en una comunidad. Perteneciente al linaje
real, Ismael fue persuadido por el rey de Amón para matar a Gedalías, a quien
el rey de Babilonia había puesto para gobernar Judá. En medio de una comida,
le quita la vida de Gedalías y lo mantiene en secreto. También sale al encuentro
de ochenta hombres piadosos que se dirigen al Templo y los degüella; solo se
salvan diez, a cambio de un soborno. Ismael es un líder impío que solo busca
aumentar poder y riquezas para sí. Se propone llevar a Amón a las hijas del rey
y al pueblo. La ambición de un hombre causó gran crisis en todo Judá, el cual
estaba dispuesto a dar un nuevo inicio. La ambición teñida de envidia y codicia
es una piedra de tropiezo para el reino de Dios.
¿Por qué Ismael comete la maldad de matar a Gedalías? ¿Cómo pueden influir
sobre mi comunidad mi codicia y envidia?

El plan fallido de Ismael (41:11-18)


El plan de los impíos no permanece en el tiempo. La maldad que Ismael come-
tió en secreto es revelada a Johanán y a los príncipes del ejército. Tomando a
sus hombres, van tras Ismael y lo hallan junto al estanque en Gabaón, a unos 5
kilómetros al sur de Mizpa. El pueblo que Ismael llevaba cautivo en dirección
a Amón es rescatado y todo su plan fracasa. La injusticia puede parecer eterna,
pero no lo es. Si bien Johanán fue un instrumento que Dios utilizó para derribar
a los impíos, por su incredulidad termina refugiándose en Egipto. Como Dios
ya le había hecho una advertencia al respecto por medio de Jeremías y Gedalías,
Él no estuvo con ellos en Egipto. Cuando más inseguros nos sentimos, necesi-
tamos discernir aún mejor la voluntad del Todopoderoso.
¿Por qué Johanán fue a Egipto junto al pueblo de Judá? ¿Con qué parámetros
debo tomar decisiones, en un momento de crisis y de dificultad?

Señor Jesús, no permitas que baje la guardia y dame discernimiento


Una Carta
para conocer las maquinaciones del maligno que atentan contra la co-
a Dios munidad por medio de la codicia y la vana ambición. Dame valor para
renunciar a los métodos de este mundo en los momentos de crisis y
temerte solo a Ti, Dios. El justo por su fe vivirá.
36
Ensayo para meditar Jeremías 41:1-18

Un veneno llamado envidia

E
n la Antigua Grecia, un atleta corrió con todo su ser, pero
terminó en segundo lugar. De regreso en su casa, lo único que
escuchaba era el nombre del ganador. De hecho, erigieron una
estatua de bronce del campeón en pleno centro de la ciudad, la cual
le recordaba todos los días que era un perdedor. Poco a poco la en-
vidia pasó a dominar su alma, así que empezó a usar las noches para
tallar la base de la escultura con el fin de debilitarla y hacerla caer.
Pero, uno de esos días, cuando estaba en medio de la ejecución de
su plan, la figura le cayó encima y lo mató instantáneamente.
Es una historia trágica en la que el subcampeón termina perdien-
do la vida aplastado por el peso de la estatua de aquel a quien envi-
diaba. Sin embargo, la verdad es que él no falleció en el momento
del accidente, sino que fue perdiendo la vida lentamente por el ve-
neno fatal de la envidia. Este sentimiento es el que aparece cuando
alguien posee algo que nosotros no tenemos, impidiéndonos reco-
nocer el valor del individuo. Y, si continuamos aferrándonos a ese
sentir, nuestros huesos empiezan a corroerse, nuestra propia vida
se destruye y, al final, le hacemos daño también a la comunidad a
la que pertenecemos. La envidia puede ser un acto malvado que
se opone a la voluntad y la visión de Dios. ¿Su vida se encuentra
devastada actualmente a causa de la envidia y los celos? Entonces,
empiece por darle gracias a Dios porque está vivo y dedique tiempo
para adorarlo, en lugar de desperdiciar el regalo de la vida compa-
rándose con los demás.

Casi vivo a mi manera, Nam Woo-taek

Aplicación Personal

37
DOM

04 Misericordia en
la obediencia
Jeremías 42:1-12

La Biblia en un año: 1  Vinieron todos los capitanes de la gente de


1 R. 7/ Ef. 4/ Ez. 37/ Sal. 87-88
guerra, junto con Johanán hijo de Carea, Jezanías
hijo de Osaías y todo el pueblo, desde el menor
hasta el mayor,
1   Todos los jefes militares, incluyendo a Johanán, hijo
de Caréah, y a Azarías, hijo de Hosaías, y toda la gente,
chicos y grandes, se acercaron 
2  y dijeron al profeta Jeremías: —Acepta ahora
nuestra súplica delante de ti y ruega por noso-
tros a Jehová, tu Dios, por todo este resto (pues
de muchos que éramos hemos quedado unos po-
cos, como ya ves por tus propios ojos), 
2  al profeta Jeremías y le dijeron: —Vamos a pedirte
una cosa; no nos la niegues: Ruega al Señor tu Dios
por nosotros, los pocos que quedamos. Antes éramos
muchos, pero ahora quedamos sólo unos pocos, como
puedes ver. 
3 para que Jehová, tu Dios, nos indique el camino
por donde debemos ir y lo que debemos hacer.
3 Ruega al Señor tu Dios que nos enseñe el camino que
debemos seguir y lo que debemos hacer.
4 El profeta Jeremías les dijo: —Os he oído. Y he
aquí que voy a rogar a Jehová, vuestro Dios, como
habéis dicho, y todo lo que Jehová os responda,
os lo haré saber. No os ocultaré palabra alguna.
4  Jeremías les respondió: —Está bien. Voy a rogar al
Señor su Dios por ustedes, como me lo han pedido, y
les daré a conocer todo lo que él me responda, sin ocul-
tarles nada.
5 Ellos dijeron a Jeremías: —Jehová sea entre no-
sotros testigo de la verdad y de la lealtad, si no
hacemos conforme a todo aquello para lo cual
Jehová, tu Dios, te envíe a nosotros. 
5 Entonces ellos dijeron a Jeremías: —Que el Señor tu
Dios sea testigo fiel y verdadero en contra nuestra, si no
hacemos lo que él te encargue decirnos. 
6 Sea bueno, sea malo, a la voz de Jehová, nuestro
Dios, al cual te enviamos, obedeceremos, para
que, obedeciendo a la voz de Jehová, nuestro
Dios, nos vaya bien.
38
Jeremías 42:1-12

Todo el pueblo pide a Jeremías que ore y les enseñe el camino


que deben seguir. A los diez días, viene Palabra de Dios a Je-
remías: si el pueblo permanece en Judá, Dios se arrepentirá
del mal que les ha hecho; el rey de Babilonia tendrá de ellos
misericordia y les hará regresar a su tierra natal.

6 Nos guste o nos disguste su respuesta, obedeceremos


al Señor nuestro Dios, a quien te hemos pedido que re-
curras, para que así nos vaya bien.

7  Aconteció que al cabo de diez días vino pala-


bra de Jehová a Jeremías. 
7 Diez días más tarde, el Señor le habló a Jeremías, 

8 Y llamó a Johanán hijo de Carea y a todos los ca-


pitanes de la gente de guerra que con él estaban, y
a todo el pueblo, desde el menor hasta el mayor, 
8 y éste llamó a Johanán, hijo de Caréah, y a los jefes
militares que lo acompañaban, y a toda la gente, desde
el más chico hasta el más grande, 

9 yles dijo: «Así ha dicho Jehová, Dios de Israel,


ante quien me enviasteis para presentar vuestros
ruegos en su presencia: 
9 y les dijo: «El Señor, el Dios de Israel, a quien ustedes
me encargaron que fuera a presentar su petición, dice: 

10  Si permanecéis quietos en esta tierra, os edi-


ficaré y no os destruiré; os plantaré y no os
arrancaré, porque estoy arrepentido del mal que
os he hecho. 
10 “Si ustedes están dispuestos a quedarse en esta tie-
rra, yo los haré prosperar; no los destruiré, sino que los
plantaré y no los arrancaré, pues me pesa haberles en-
viado esa calamidad. 

11 No temáis de la presencia del rey de Babilonia,


al cual tenéis miedo; no temáis de su presencia,
ha dicho Jehová, porque con vosotros estoy yo
para salvaros y libraros de su mano. 
11 No tengan miedo del rey de Babilonia, al que tanto
temen. No le tengan miedo, porque yo estoy con uste-
des para salvarlos y librarlos de su poder. Yo, el Señor,
lo afirmo. 

12  Tendrécompasión de vosotros, y él se com-


padecerá de vosotros y os hará regresar a vuestra
tierra. 
12 Tendré compasión de ustedes, y haré que también él
les tenga compasión y los deje volver a su tierra.”

39
Ayuda a su meditación

La oración del pueblo y la respuesta de Dios (42:1-12)


Si inquirimos la voluntad de Dios, ciertamente Él nos responderá, aunque no
siempre nos diga lo que deseamos. Johanán y los capitanes del ejército se dirigen
hacia Egipto y le preguntan a Jeremías la voluntad de Dios. Ellos prometen una
y otra vez que obedecerán cualquiera sea Su voluntad, por cuanto no saben el
camino o la acción que deben tomar. A los diez días, vine la palabra de Dios a
Jeremías diciendo que no deben ir a Egipto, sino quedarse y vivir en Judá. Dios
les concederá misericordia mediante el rey de Babilonia; además, estará con
ellos, si sirven a los caldeos y, a Su tiempo, los rescatará. Nada es más impor-
tante que la presencia de Dios. Solo cuando obedecemos a la Palabra, incluso
en contra de nuestra voluntad y expectativas, recibimos la misericordia de Dios.
¿Qué pidieron Johanán y el pueblo a Jeremías? ¿Qué necesito hacer, para
tomar decisiones correctas en medio de la crisis?

Altar Comencemos con alabanza y oración. Compartamos acerca de nuestra semana,


familiar inclusive el agradecimiento por las cosas que Dios ha hecho.

1 Observación
¿Con qué disposición recibirían la palabra que Dios
les dio a Johanán y al pueblo a través de Jeremías?
(42:5-6)

Aplicación y ¿Por qué debo obedecer a Dios en todo momento,


diálogo
aunque no coincida con mi opinión?

2 Observación
¿Cuál fue la voluntad de Dios anunciada por Jere-
mías? ¿Qué decisión debieron haber tomado ellos,
en obediencia a Dios? (42:9-12)

Aplicación y ¿Qué decisión tomo cuando la voluntad de Dios di-


diálogo
fiere de mi parecer? Compartamos cómo podemos
someter nuestra imperfecta voluntad a la buena vo-
luntad de Dios.

Compartamos las peticiones de oración individuales y seleccionemos los temas para orar
como familia durante toda la semana. Terminemos el devocional con la oración final.

40
Prédica del domingo

Título:

Pasaje:

Notas:

Intercesión por las naciones

Según Global Times de China, los bebés están en venta por internet a un
valor que oscila entre miles y decenas de miles de dólares, con el fin de
adoptarlos de manera ilegal. Se cree que el complejo y largo proceso de
adopción ha hecho proliferar este tipo de irregularidad. Oremos a Dios, para
que Él detenga todo acto comercial de vidas humanas y el gobierno chino
pueda ofrecer una posible solución radical a este problema.

41
LUN

05 Obstinación y
desobediencia
Jeremías 42:13-22

La Biblia en un año: 13 Perosi decís: “No habitaremos en esta tierra”,


1 R. 8/ Ef. 5/ Ez. 38/ Sal. 89
desobedeciendo así la voz de Jehová, vuestro
Dios, 
13 »Pero si ustedes no quieren quedarse en este país,
sino que desobedecen al Señor su Dios 

14 y afirmando: “No, sino que entraremos en la


tierra de Egipto, en la cual no veremos guerra,
ni oiremos sonido de trompeta, ni padeceremos
hambre, y allá habitaremos”, 
14 y dicen: “Preferimos ir a vivir a Egipto, donde no vere-
mos guerra, ni oiremos el sonido de la trompeta, ni nos
moriremos de hambre”, 

15  pues, por eso, oíd la palabra de Jehová, resto


de Judá, porque así ha dicho Jehová de los ejér-
citos, Dios de Israel: Si vosotros volvéis vuestros
rostros para entrar en Egipto, y entráis para ha-
bitar allá, 
15 entonces escuchen ustedes, los que quedan de Judá,
lo que les dice el Señor todopoderoso, el Dios de Israel:
“Si ustedes se empeñan en ir a vivir a Egipto, 

16  sucederá que la espada que teméis os alcan-


zará allí, en la tierra de Egipto, y el hambre que
os asusta os perseguirá allá en Egipto, y allí
moriréis.
16 la guerra y el hambre que ustedes tanto temen los
alcanzará allí mismo, y allí morirán. 

17 Todos los hombres que vuelvan su rostro para


entrar en Egipto y habitar allí, morirán a espada,
de hambre y de peste; no habrá de ellos quien
quede vivo ni quien escape del mal que yo trae-
ré sobre ellos.
17 Todos los que están empeñados en irse a vivir a
Egipto, morirán allá por la guerra, el hambre o la peste.
Nadie quedará con vida; nadie escapará a la calamidad
que les voy a enviar.”
42
Jeremías 42:13-22

El profeta le dice al pueblo que, si insisten en ir a Egipto, morirán


a espada, de hambre y de pestilencia; serán objeto de execra-
ción y de espanto, de maldición y de afrenta, y no verán más la
tierra de Judá. El pueblo le pidió a Jeremías que orara a Dios y
les revelara lo que debían hacer, cuando realmente no estaban
dispuestos a obedecer.

18 »Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de


Israel: Como se derramó mi enojo y mi ira so-
bre los habitantes de Jerusalén, así se derramará
mi ira sobre vosotros cuando entréis en Egipto;
y seréis objeto de aversión, de espanto, de mal-
dición y de afrenta; y no veréis más este lugar. 
18 »El Señor todopoderoso, el Dios de Israel, dice: “Así
como mi ira y mi furor se encendieron contra los habi-
tantes de Jerusalén, así se encenderán también contra
ustedes, si se van a Egipto. Se convertirán en ejemplo
de maldición, en algo que causará terror, y no volverán
a ver este lugar.” 

19  Jehová os dijo a vosotros, resto de Judá: No


vayáis a Egipto. Sabed ciertamente que os lo ad-
vierto hoy. 
19 A ustedes, los que aún quedan de Judá, el Señor les
ordena que no vayan a Egipto. Sépanlo bien, yo se lo
advierto ahora. 

20  ¿Por qué hicisteis errar vuestras almas? Pues


vosotros me enviasteis ante Jehová, vuestro
Dios, diciendo: “Ruega por nosotros a Jehová,
nuestro Dios, y haznos saber todas las cosas que
diga Jehová, nuestro Dios, y lo haremos.” 
20 Ustedes cometen un error fatal, pues ustedes mismos
me encargaron que acudiera al Señor su Dios, y me dije-
ron: “Ruega al Señor nuestro Dios por nosotros, y haznos
saber todo lo que él ordene, para que lo hagamos.”

21  Estoos lo he declarado hoy, pero no habéis


obedecido a la voz de Jehová, vuestro Dios, ni
a ninguna de las cosas por las cuales me envió
a vosotros. 
21 Yo les he dado a conocer hoy lo que el Señor su Dios
me encargó decirles, pero ustedes no quieren obedecer.

22  Ahora, pues, sabed de cierto que moriréis a


espada, de hambre y de peste en el lugar donde
deseasteis entrar para habitar allí.»
22 Por lo tanto, sepan bien que por causa de la guerra,
el hambre y la peste, ustedes morirán en el país a donde
quieren ir a vivir.»

43
Ayuda a su meditación

Una mala decisión (42:13-17)


El atajo para la perdición es persistir por un camino que nos aparta cada vez
más de la voluntad de Dios. Desde la óptica del pueblo de Judá, Egipto estaba
libre de guerras y tenía mucho alimento. De hecho, esta nación, que se jactaba
de los beneficios que le ofrecía el río Nilo, siempre fue una tentación para el
pueblo de Dios. Pero Jeremías advierte con insistencia que, si se van a Egipto
y desobedecen a Dios, ciertamente morirán, pues allá encontrarán hambre y
pestilencia. El bienestar y la paz no dependen del entorno, sino solo de la pre-
sencia de Dios. No hay lugar más seguro para el pueblo de Dios que estar con
Su Creador, porque en Su presencia hay gracia y misericordia. Decidamos, pues,
permanecer con Dios y obedecer a Su Palabra.
¿Qué cosas sucederán cuando el pueblo de Judá llegue a Egipto? ¿Qué ocurre
cuando no cedemos a nuestro parecer, para obedecer a la voluntad soberana
de Dios?

Hicisteis errar vuestras almas (42:18-22)


Solo cuando renunciamos a nuestras opiniones y planes, podemos obedecer de
corazón a la Palabra de Dios. El anhelo de Johanán y del pueblo es descender
a Egipto. Aunque Dios les promete protección, si se someten al yugo del rey
de Babilonia, ellos consideran más seguro acudir al rey egipcio. Las adverten-
cias de Dios por medio de Jeremías son claras y definitivas; pero ellos no oyen
con su corazón. De hecho, la obediencia que juraron es a medias, porque solo
están dispuestos a acatar aquello que coincida con su opinión. La obstinación
y la hipocresía nos impiden obedecer enteramente a Dios. Si dejamos de seguir
a Dios para ir tras nuestras concupiscencias, seremos reos de juicio divino. La
desobediencia conduce hacia la muerte.
¿Por qué Johanán y el pueblo no obedecen a Dios, incluso después de haber
consultado Su voluntad? ¿Cuál es la voluntad de Dios que debo obedecer,
renunciando a mis planes y a mi parecer?

Señor, perdona mi necedad, porque solo buscaba Tu aprobación ha-


Una Carta
biendo ya elaborado mis planes. Corrígeme, Padre, con Tu Palabra;
a Dios permíteme andar en obediencia a Tu voluntad. En donde mora Tu gracia
estaré seguro. No inclinaré mi corazón a las cosas visibles y temporales
de este mundo.
44
Ensayo para meditar Jeremías 42:13-22

Lo que significa creer

E
n ocasiones nos oponemos a la presencia de Dios, porque sen-
timos que, si Él aparece, debemos poner fin a nuestros planes
y deseos. Y también pensamos que Él propiciará imprevistos
que alterarán la agenda que hemos preparado minuciosamente para
nuestras vidas. Aunque nadie espera al subirse a un barco tener que
usar el chaleco salvavidas que se encuentran a bordo, muchos fieles
tratan a Dios como tal, aunque Él sea el barco en sí mismo. Aun-
que estamos a bordo y somos Su tripulación, nos olvidamos de ese
hecho. Creemos equivocadamente que podemos seleccionar solo
lo que nos interesa y lo confundimos por alguien que simplemente
abrirá las puertas del cielo, si oramos y clamamos por nuestras peti-
ciones. Cuando un creyente se comporta de esta manera, es porque
no ha comprendido correctamente el significado de la fe.
La fe es cuando la Palabra de Dios entra en nuestros corazones
y nos sana. Es cuando nuestra oración busca coincidir con Su vo-
luntad. Por eso, aunque Él tenga la solución a nuestras inquietudes,
no podremos conocerla, si nos oponemos e insistimos en abrazar
nuestros limitados razonamientos. Por lo tanto, debemos recordar
que creer en Jesús y aceptarlo como Señor implica reconocer que
Dios es el que está en el trono, no nosotros. Dicho en otras pala-
bras, la fe es creer completamente en Dios.

El mecánico de la vida, Lee Dong-wook

Aplicación Personal

45
MAR

06 Juicio de ira por la


desobediencia
Jeremías 43:1-13

La Biblia en un año: 1  Aconteció que cuando Jeremías acabó de


1 R. 9/ Ef. 6/ Ez. 39/ Sal. 90
hablar a todo el pueblo todas las palabras de
Jehová, su Dios, todas estas palabras que Jehová,
su Dios, le había enviado a decirles, 

2 Azarías hijo de Osaías, Johanán hijo de Carea y


todos los hombres soberbios dijeron a Jeremías:
«¡Mentira dices! No te ha enviado Jehová, nues-
tro Dios, para decirnos: “No vayáis a Egipto
para habitar allí”, 

3  sinoque Baruc hijo de Nerías te incita con-


tra nosotros, para entregarnos en manos de los
caldeos, para matarnos y hacernos deportar a
Babilonia.» 

4  No obedecieron, pues, ni Johanán hijo de


Carea ni los capitanes de la gente de guerra ni
todo el pueblo, a la voz de Jehová para que se
quedaran en tierra de Judá, 

5 sino que Johanán hijo de Carea, con todos los


capitanes de la gente de guerra, tomaron al resto
de Judá, que había regresado de todas las nacio-
nes adonde había sido echado, para habitar en
tierra de Judá. 

6  Eran los hombres, mujeres y niños, las hijas


del rey y todas las demás personas que junto con
Gedalías hijo de Ahicam hijo de Safán, y con el
profeta Jeremías y Baruc hijo de Nerías, había
dejado Nabuzaradán, capitán de la guardia. 
46
Jeremías 43:1-13

El pueblo acusa a Jeremías de decir mentira. Johanán, los ofi-


ciales de guerra y el pueblo llegan a Egipto, junto a Jeremías y
Baruc. El profeta cubre de barro unas piedras grandes y las deja
a la puerta del palacio del faraón. Luego, profetiza que el rey de
Babilonia pondrá su trono sobre esas piedras y su tienda real.

7 Entraron, pues, en tierra de Egipto, sin obede-


cer a la voz de Jehová, y llegaron hasta Tafnes.

8  Vinopalabra de Jehová a Jeremías en Tafnes,


diciendo: 

9  «Toma en tus manos unas piedras grandes y


cúbrelas de barro en el enladrillado que está a la
puerta de la casa del faraón en Tafnes, a la vista
de los hombres de Judá, 

10  y diles: “Así ha dicho Jehová de los ejérci-


tos, Dios de Israel: Yo enviaré y tomaré a
Nabucodonosor, rey de Babilonia, mi siervo, y
pondré su trono sobre estas piedras que he es-
condido, y él extenderá su pabellón sobre ellas. 

11 Vendrá y asolará la tierra de Egipto: los que


a muerte, a muerte; los que a cautiverio, a cauti-
verio, y los que a espada, a espada.

12  Incendiará los templos de los dioses de


Egipto; los quemará, y a ellos los llevará cauti-
vos. Limpiará la tierra de Egipto, como el pastor
limpia su capa, y saldrá de allá en paz. 

13 Destruirá, además, las estatuas de Bet-semes,


que está en tierra de Egipto, y entregará al fuego * Por falta de espacio se ha omitido
los templos de los dioses de Egipto.”» la versión “Dios Habla Hoy”

47
Ayuda a su meditación

Rechazan la voluntad de Dios (43:1-7)


Los soberbios son egoístas para pensar e interpretar las cosas. Jeremías anuncia
la voluntad de Dios, sin quitar ni añadir nada. Pero Asarías, Johanán y ‘todos
los varones soberbios’ (v. 2) acusan al profeta de ser mentiroso, afirmando que
quiere entregarlos a Babilonia por incitación de Baruc. En verdad, ellos ya ha-
bían tomado la decisión de ir a Egipto y solo estaban consultando con Dios,
porque estaban esperando Su aprobación. Por esto, aunque Dios les dice que
no y les advierte que allá les espera la muerte, deciden no aceptar Sus palabras
con obstinación. Los humildes de corazón obedecen la Palabra de Dios; pero
los soberbios obedecen solo cuando están de acuerdo. Si seguimos en nuestra
obstinación, después de haber sido advertidos por Dios, no seremos muy dife-
rentes a los incrédulos.
¿Cómo reaccionan Johanán y los varones soberbios a la voluntad de Dios?
¿Qué pasa si buscamos la aprobación de Dios, después de haber tomado
nuestras propias decisiones?

Profecías sobre Egipto (43:8-13)


No hay lugar en este mundo que no esté bajo el dominio de Dios. Johanán y los
oficiales del ejército toman a Jeremías, a Baruc y al remanente de Judá y se van a
Tafnes, el extremo norte de Egipto. Dios le manda a Jeremías que coloque unas
piedras grandes y las cubra de barro en la puerta del palacio del faraón. Con
este acto, profetiza que Dios hará que Nabucodonosor, rey de Babilonia, ponga
su trono sobre esas piedras y extienda su tienda grande y lujosa sobre ellas. El
pueblo de Judá fue a Egipto por temor a los babilonios, pero Dios convocará al
rey de Babilonia para destruir a Egipto. El hombre solo puede ver el presente,
pero Dios conoce el futuro. El lugar más seguro es permanecer en donde nos
manda el Señor.
¿Qué significa que el rey de Babilonia pondrá su trono y extenderá su pabellón
en Tafnes? ¿En dónde debo permanecer, en obediencia a la Palabra de Dios?

Jesús, me pregunto si las oraciones que he levantado hasta hoy en


día han sido genuinas, buscando conocer Tu voluntad. Renuncio a mis
Una Carta
a Dios
planes, a mi voluntad; deseo conocer Tu corazón. Tú eres el Soberano;
en Tu mano encomiendo mi vida. Ayúdame, en cada momento, espe-
cialmente en la dificultad.
48
Ensayo para meditar Jeremías 43:1-13

La prueba del amor

L
a vida es impredecible. A veces, todo va bien hasta que un
error lo destruye todo o quedamos devastados por haberle
restado importancia a un problema en nuestro carácter, pen-
sando ‘esto no es nada’ o ‘no me afectará tanto’. Seguramente, si
vemos que un hijo nuestro está minimizando un asunto importante,
intentaremos convencerlo, regañarle o hacer lo que sea necesario,
antes de que salga lastimado. Sin embargo, si alguien a quien ama-
mos no nos escucha, a veces lo correcto es hacer que recupere la
razón, aunque sea a la fuerza. En ocasiones, Dios hace lo mismo
con nosotros y debemos aceptar Su disciplina como una prueba de
Su amor y no de otra cosa. No cabe duda de que el amor es la raíz
de todo lo que Él hace.
A veces obedecemos a medias, porque mezclamos lo bueno y lo
malo, y dejamos que la verdad se confunda con la mentira. El pro-
blema es que, al final, las decisiones que tomemos lejos de la volun-
tad de Dios terminarán convirtiéndose en el peor acto de rebeldía.
Si lo que busca es su propia destrucción y muerte, entonces opón-
gase y desobedezca a Dios. Pero, si esto no es lo que desea, ríndase
y póstrese ante Él. Debemos volvernos a Dios, incluso cuando Él
nos instruye, nos disciplina y nos convence de pecado. Si el Señor
decide reprendernos en el nombre del amor, debemos someternos
con mansedumbre, confiando en que Él siempre busca lo mejor
para nosotros. Un padre que solamente se limita a observar a su
hijo avanzar por el sendero equivocado, no es un buen padre. Por
eso, debemos aceptar con agrado la disciplina amorosa del Padre.

La oración es el comienzo, Choi Young-sik

Aplicación Personal

49
MIÉ

07 Juicio por
la idolatría
Jeremías 44:1-10

La Biblia en un año: 1 Palabraque vino a Jeremías acerca de todos los


1 R. 10/ Flp. 1/ Ez. 40/ Sal. 91
judíos que habitaban en la tierra de Egipto, que
vivían en Migdol, en Tafnes, en Menfis y en tie-
rra de Patros, diciendo: 

2  «Así ha dicho Jehová de los ejércitos, Dios de


Israel: Vosotros habéis visto todo el mal que tra-
je sobre Jerusalén y sobre todas las ciudades de
Judá. Ahora están asoladas, y no hay quien ha-
bite en ellas 

3 acausa de la maldad que ellos cometieron para


enojarme, yendo a ofrecer incienso, honrando a
dioses extraños que ni ellos habían conocido, ni
vosotros ni vuestros padres. 

4 Envié a vosotros todos mis siervos los profetas,


desde el principio y sin cesar, para deciros: “¡No
hagáis esta cosa abominable que yo aborrezco!”

5  Perono oyeron ni inclinaron su oído para


convertirse de su maldad, para dejar de ofrecer
incienso a dioses extraños. 
50
Jeremías 44:1-10

El pueblo de Judá fue testigo de todo lo que sufrieron Jerusalén


y las ciudades de Judá, porque no les prestaron atención a los
profetas enviados por Dios ni quisieron convertirse de su maldad.
Aun así, no se arrepintieron ni tuvieron temor para cumplir la
Ley de Dios, sino que empezaron a ofrecer incienso a dioses
ajenos en Egipto.

6  Sederramó, por tanto, mi ira y mi furor, y se


encendió en las ciudades de Judá y en las calles
de Jerusalén. Y fueron puestas en ruina y deso-
lación, como lo están hoy. 

7 Ahora, pues, así ha dicho Jehová de los ejérci-


tos, Dios de Israel: ¿Por qué hacéis un mal tan
grande contra vosotros mismos, para que en me-
dio de Judá sean destruidos el hombre y la mujer,
el muchacho y el niño de pecho, sin que os que-
de resto alguno,

8  haciéndome enojar con las obras de vuestras


manos, ofreciendo incienso a dioses extraños en
la tierra de Egipto, adonde habéis entrado pa-
ra vivir, de suerte que os exterminéis y seáis por
maldición y por afrenta a todas las naciones de
la tierra? 

9  ¿Os habéis olvidado de las maldades de vues-


tros padres, de las maldades de los reyes de Judá,
de las maldades de sus mujeres, de vuestras mal-
dades y de las maldades de vuestras mujeres, que
hicisteis en la tierra de Judá y en las calles de
Jerusalén? 

10 No se han humillado hasta el día de hoy ni han


tenido temor; no han caminado en mi Ley ni en
mis estatutos, los cuales puse delante de voso- * Por falta de espacio se ha omitido
tros y delante de vuestros padres. la versión “Dios Habla Hoy”

51
Ayuda a su meditación

Causas de la caída de Judá (44:1-6)


La idolatría es sinónimo de rechazo y menosprecio al Soberano, al Dios crea-
dor. Él señala que la caída de Jerusalén y Judá se debió a la idolatría cometida
por ellos y sus padres, la cual provocó Su ira. Además, no oyeron las constantes
advertencias de Dios por medio de Sus profetas. Por haber despreciado la Pa-
labra de Dios y haberse inclinado a ídolos, las ciudades quedaron asoladas. La
idolatría es tan abominable para Dios, que los primeros dos de los Diez Man-
damientos nos advierten contra ese pecado. El pueblo remanente de Judá debió
entender lo terrible y lo destructiva que es la idolatría. Dios es un Dios celoso
(Éx. 34:14). La clave para mantenernos lejos de la idolatría es amar solo a Dios
con todo nuestro corazón, fuerzas y mente.
¿Por qué Dios habrá destruido las ciudades de Judá, incluyendo Jerusalén?
¿Cuál es la advertencia que he recibido con frecuencia de parte de Dios?

Idolatría en Egipto (44:7-10)


La idolatría cambia la esperanza en desesperación. Dios anuncia el futuro del
remanente pueblo de Judá, el cual decidió morar en Egipto, pese a Sus ad-
vertencias, desobedeciendo Su voluntad. Aunque las ciudades de Judá fueron
destruidas y asoladas, sus habitantes no renunciaron a la idolatría. Por eso, si
continúan confiando en los ídolos, incluso en Egipto, Dios destruirá también al
remanente, para burla y oprobio del mundo. La soberbia no nos permite renun-
ciar la idolatría, porque quita el temor a Dios en nuestros corazones y siembra
menosprecio al pacto con Él. La idolatría no solo nos lleva a inclinar nuestro
corazón a dioses ajenos, sino que también causa gran daño en nuestra familia y
comunidad hasta llevarlas a la destrucción.
¿Cuál es la advertencia de Dios contra el pueblo que comete idolatría en
Egipto? ¿Cuál es el pecado que sigo cometiendo, a pesar de haber sido ad-
vertido por Dios?

Padre, gracias por ser misericordioso, tardo para la ira y paciente para
Una Carta
esperar por mi arrepentimiento. ¡Cuán trágico es apartarse de Ti y de
a Dios Tu presencia! Quita todo de mí que no te agrade; purifícame de todos
mis pecados, porque deseo caminar contigo en humildad y disfrutar de
Tu presencia a diario.
52
Ensayo para meditar Jeremías 44:1-10

Eliminando la idolatría

N
o atravesamos aflicciones porque seamos débiles, sino por
adorar ídolos. Uno no es ignorado por no tener educación;
tampoco es pobre porque le haya tocado crecer en un hogar
de escasos recursos; ni vive mal por culpa de la pareja. El origen de
todas estas cosas es nuestra idolatría. Vivimos mal y nos va mal en
el trabajo, porque amamos y servimos a dioses extranjeros, en vez
de seguir a Dios. Cuando dioses como el placer, los hijos, la familia
y el dinero están sentados en el trono de nuestro corazón, es suma-
mente difícil derrocarlos y dejar de servirles. Sin embargo, nunca
podremos vivir bajo el gobierno de Dios, si no lo hacemos.
Confesar y llorar por nuestros pecados no es suficiente; para ser-
virle al Señor necesitamos eliminar los ídolos, a partir del instante
en que escuchamos la Palabra. Y ese es precisamente el propósito
del tiempo devocional: usar la Palabra para desterrar cada día al dios
que se entronó en nuestro corazón. Si examinamos nuestro interior
todos los días a la luz de la Biblia, podremos encontrar y destruir
los ídolos, y recibiremos Su redención sin falta. Es imposible recibir
la salvación, si no ponemos fin a la idolatría. De este modo, si nues-
tra pareja se ha convertido en un dios, inevitablemente seremos
dominados por ella. Lo mismo sucede con nuestros hijos y con el
dinero. Por ende, es sumamente necesario otorgarle la soberanía
exclusiva a Dios, para poder recibir la salvación y librarnos de todo
sufrimiento.

Aquella persona que escucha la Palabra, Kim Yang-jae

Aplicación Personal

53
JUE

08 Fuente de seguridad
y abundancia
Jeremías 44:11-19

La Biblia en un año: 11 »Por tanto, así ha dicho Jehová de los ejércitos,


1 R. 11/ Flp. 2/ Ez. 41/ Sal. 92-93
Dios de Israel: Yo vuelvo mi rostro contra voso-
tros para mal, para destruir a todo Judá. 
11 »”Por eso yo, el Señor todopoderoso, el Dios de
Israel, les digo: He decidido traer mal sobre ustedes y
destruir a todo Judá. 

12  Y tomaré al resto de Judá que se obstinó


en irse a la tierra de Egipto, para habitar allí, y
en tierra de Egipto serán todos exterminados.
Caerán a espada y serán exterminados por el
hambre: por la espada y el hambre morirán des-
de el menor hasta el mayor, y serán objeto de
aversión, de espanto, de maldición y de afrenta, 
12 Haré que los que quedaron de Judá y se empeñaron
en irse a vivir a Egipto, sean destruidos allá por completo.
Todos, desde el más chico hasta el más grande, morirán
por la guerra o el hambre, y se convertirán en ejemplo
de maldición y humillación, en algo que causará terror. 

13 pues castigaré a los que habitan en la tierra de


Egipto como castigué a Jerusalén, con espada,
con hambre y con peste. 
13 Castigaré a los que vivan en Egipto como castigué a
Jerusalén, con la guerra, el hambre y la peste. 

14  Y del resto de los de Judá que entraron en la


tierra de Egipto para habitar allí, no habrá quien
escape ni quien quede vivo para volver a la tie-
rra de Judá, a la cual ansían volver para habitar
allí; porque no volverán sino algunos fugitivos.»
14 Nadie de ese pequeño resto de Judá que se ha ido
a vivir a Egipto, podrá escapar o quedar con vida. Y
aunque quieran volver a Judá para establecerse allí, no
volverán, a no ser unos cuantos refugiados.”»

15  Entonces todos los que sabían que sus mu-


jeres habían ofrecido incienso a dioses ajenos,
y todas las mujeres que estaban presentes, una
gran concurrencia, y todo el pueblo que habita-
ba en tierra de Egipto, en Patros, respondieron
a Jeremías, diciendo: 
54
Jeremías 44:11-19

Jeremías profetiza que todos los que buscaron refugio en Egipto no


podrán volver a Judá, porque serán destruidos. El pueblo, por su
parte, está resuelto a no oír las palabras Dios y decide continuar ofre-
ciendo incienso a la Reina del cielo. Su razonamiento es este: cuando
ofrecían incienso a la diosa, había abundancia de alimentos; mas,
desde que dejaron de hacerlo, son consumidos a espada y hambre.

15 Entonces, aquellos que sabían que sus esposas


ofrecían incienso a otros dioses, y las mujeres que se
encontraban allí, todos los cuales formaban un grupo
numeroso, más los judíos que vivían en la región sur de
Egipto, respondieron a Jeremías:
16 «No escucharemos de ti la palabra que nos has
hablado en nombre de Jehová, 
16 —No haremos caso de ese mensaje que nos has traí-
do de parte del Señor. 
17 sino que ciertamente pondremos por obra to-
da palabra que ha salido de nuestra boca, para
ofrecer incienso a la reina del cielo y derramarle
libaciones, como hemos hecho nosotros y nues-
tros padres, nuestros reyes y nuestros jefes, en
las ciudades de Judá y en las plazas de Jerusalén.
Entonces tuvimos abundancia de pan, fuimos
felices y no vimos mal alguno. 
17 Al contrario, seguiremos haciendo lo que habíamos
decidido hacer. Seguiremos ofreciendo incienso y ofren-
das de vino a la diosa Reina del Cielo, como lo hemos
hecho hasta ahora y como antes lo hicieron nuestros
antepasados y nuestros reyes y jefes en las ciudades
de Judá y en las calles de Jerusalén. Pues antes tenía-
mos comida en abundancia, nos iba bien y no nos vino
ninguna desgracia; 
18 Pero desde que dejamos de ofrecer incienso a
la reina del cielo y de derramarle libaciones, nos
falta de todo, y por la espada y el hambre somos
exterminados.
18 pero desde que dejamos de ofrecer incienso y ofren-
das de vino a la Reina del Cielo, nos falta de todo, y
nuestra gente muere de hambre o en la guerra.
19  Y cuando nosotras ofrecimos incienso a la
reina del cielo y le derramamos libaciones, ¿aca-
so le hicimos tortas para tributarle culto, o le
derramamos libaciones sin consentimiento de
nuestros maridos?»
19 Las mujeres añadieron: —Nosotras hacíamos tortas
que representaban a la Reina del Cielo, y le ofrecíamos
incienso y ofrendas de vino, pero todo ello con el consen-
timiento de nuestros esposos. Y lo seguiremos haciendo.
55
Ayuda a su meditación

Juicio por la desobediencia (44:11-14)


Si menospreciamos las advertencias de Dios, estaremos cada vez más lejos de
Su protección y bendición. Dios proclama juicio contra Su pueblo, pues esco-
gieron ir a Egipto en busca de prosperidad y seguridad, en lugar de aceptar Su
voluntad. Dios volverá Su rostro contra ellos, los destruirá con tribulación. Su
rostro se vuelve en gracia hacia los que le obedecen, contrario a lo que sucede
con los que le desobedecen. Sin embargo, el pueblo decide continuar adorando
ídolos, conforme a las costumbres paganas, incluso desde Egipto. Como ya lo
hizo una vez en Jerusalén, el Señor anuncia que los reprenderá nuevamente con
espada, hambre y pestilencia. El lugar en donde moran los idólatras y los que
desobedecen las advertencias de Dios, se convertirá en desolación por el juicio
divino.
¿Cuál es la advertencia de Dios contra los que estaban decididos a vivir en
Egipto? ¿Con qué rostro me tratará Dios, si renuncio a mi obstinación?

Persistencia en la idolatría (44:15-19)


No servimos a las riquezas, sino a Dios, el verdadero dueño de todas las ri-
quezas. Sin embargo, cuando el pueblo llegó a Egipto, rechazó Su Palabra y
se olvidó de su identidad, buscando solo la prosperidad material. Creían que
Astarot, diosa de la fertilidad, era la que los bendecía; y que las calamidades eran
consecuencia de haber dejado de ofrecerle incienso. ¡Qué manera de justificar la
idolatría! Dios es el único que derrama bendición y corrige la maldad del hom-
bre; pero los necios e idólatras ignoran la soberanía de Dios. Los matrimonios
se unieron para adorar a la Reina del cielo, cuando debían haberse unido en fe
y en corazón para estar cimentados en la Palabra y estar sobreedificados. No
busquemos las riquezas de este mundo, sino la Palabra de Dios, anhelando la
gloria futura.
¿Por qué el pueblo de Judá adoraba a la Reina del cielo? ¿Quién me da segu-
ridad y abundancia, y cómo puedo disfrutar de Su gracia?

Padre, ¡qué terrible ver hasta dónde puede corromperse el hombre por
Una Carta no discernir Tu voluntad! Renuncio a toda forma de incredulidad en mí,
a Dios a la búsqueda de riquezas y al éxito del mundo. Me negaré a mí mismo
para tomar Tu cruz, Señor, y ser un creyente que agrada Tu corazón.
56
Ensayo para meditar Jeremías 44:11-19

Un solo Señor

A
lo largo de la historia bíblica se utiliza la palabra “Señor” en
dos ocasiones. Una, en el Antiguo Testamento, para referirse
a Jehová. Y la otra, en el siglo I, en pleno auge del Imperio
romano, para dirigirse al emperador. Por eso, en aquella época, los
cristianos le pedían a Dios: “¡No permitas que mi devoción por
Ti sea menor que la de los siervos del César!”. Así fue como la
gloria del evangelio resplandeció más fuerte que nunca, por me-
dio de fieles que se encontraban firmes en la fe por tener a Cristo
como su Señor, a pesar de la persecución. Entonces, los soldados
que torturaban a los cristianos comenzaron a dudar, y quienes se
preguntaban cómo era posible que pudieran cantar y alegrarse en
medio del sufrimiento, escucharon el evangelio y se convirtieron
en apasionados cristianos. Finalmente, los emperadores romanos,
que alardeaban de su ilimitado poder, fueron destruidos uno a uno,
hasta que el Imperio romano pasó a la historia. De esta forma, la fe
genuina que no sigue al mundo se difundió por todo el mundo con
la fuerza de la luz y la gloria.
Si tememos al Soberano y Creador del universo, le perdemos el
miedo a la gente, porque confiamos en que Él se hace cargo de
nuestras vidas. Dios es el único “Señor” que no es ni rey ni gober-
nante, ni un ídolo creado por el hombre.

Vencer así la aflicción, Lee Dong-won

Aplicación Personal

57
VIE

09 La oportunidad
es temporal
Jeremías 44:20-30

La Biblia en un año: 20  Habló Jeremías a todo el pueblo, a los hom-


1 R. 12/ Flp. 3/ Ez. 42/ Sal. 94
bres, a las mujeres y a todo el pueblo que le había
respondido esto, diciendo: 

21  «¿No se ha acordado Jehová, no ha venido


a su memoria el incienso que ofrecisteis en las
ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén, vo-
sotros y vuestros padres, vuestros reyes, vuestros
jefes y el pueblo de la tierra? 

22  Y no pudo sufrirlo más Jehová, a causa de la


maldad de vuestras obras, a causa de las abomi-
naciones que habíais hecho; por tanto, vuestra
tierra fue puesta en asolamiento, en espanto y
en maldición, hasta quedar sin habitante, como
lo está hoy.

23  Porcuanto ofrecisteis incienso y pecasteis


contra Jehová, y no obedecisteis a la voz de
Jehová ni anduvisteis en su Ley, en sus estatutos
y en sus testimonios, por eso ha venido sobre
vosotros este mal, como hasta hoy.»

24 Dijo además Jeremías a todo el pueblo y a to-


das las mujeres: «Oíd palabra de Jehová, todos
los de Judá que estáis en tierra de Egipto. 

25  Asíha hablado Jehová de los ejércitos, Dios


de Israel; ha dicho: “Vosotros y vuestras mu-
jeres hablasteis con vuestras propias bocas, y
con vuestras manos lo ejecutasteis, diciendo:
‘Cumpliremos efectivamente nuestros votos que
hicimos de ofrecer incienso a la reina del cie-
lo y derramarle libaciones.’ Y ahora confirmáis
vuestros votos y ponéis vuestros votos por obra. 
58
Jeremías 44:20-30

El pueblo de Judá hizo el voto de ofrecer incienso a la Reina del


cielo. Y, como están determinados a cumplir su promesa, Dios les
insta a que lo hagan, bajo la advertencia de que Su nombre no
volverá a ser invocado entre ellos, y que perecerán a espada y de
hambre. Así como Dios entregó a Sedequías (rey de Judá) a Babi-
lonia, también entregará a Hofra (faraón de Egipto) a sus enemigos.

26 Por tanto, oíd palabra de Jehová todos los de


Judá que habitáis en tierra de Egipto: Yo he ju-
rado por mi gran nombre, dice Jehová, que mi
nombre no será invocado más en toda la tierra
de Egipto por boca de ningún hombre de Judá,
diciendo: ‘¡Vive Jehová, el Señor!’, 

27 porque yo vigilo sobre ellos para mal y no pa-


ra bien. Todos los hombres de Judá que están en
la tierra de Egipto serán exterminados por la es-
pada y el hambre, hasta que no quede ninguno. 

28 Y los pocos que escapen de la espada volverán


de la tierra de Egipto a la tierra de Judá. Sabrá,
pues, todo el resto de Judá que ha entrado en
Egipto a vivir allí, cuál palabra se cumplirá: si la
mía o la suya. 

29 Y esto tendréis por señal, dice Jehová, de que


en este lugar os castigo, para que sepáis que de
cierto se cumplirán mis palabras para mal so-
bre vosotros, 

30 pues así ha dicho Jehová: Yo entrego al faraón


Hofra, rey de Egipto, en manos de sus enemigos,
y en manos de los que buscan su vida, así como
entregué a Sedequías, rey de Judá, en manos de
Nabucodonosor, rey de Babilonia, su enemigo * Por falta de espacio se ha omitido
que quería quitarle la vida.”» la versión “Dios Habla Hoy”

59
Ayuda a su meditación

Causas de la calamidad (44:20-23)


Las calamidades son un resultado directo de la maldad y la iniquidad del hom-
bre. Dios, en Su omnisciencia, conoce todos y cada uno de los pecados de Su
pueblo; un pueblo duro de cerviz, que anduvo por el camino pecaminoso de
sus padres con persistencia, rechazando constantemente la invitación de volver
al Padre. Dios, infinito en paciencia, postergó el juicio; pero no será por mucho,
si no dejan de adorar a dioses ajenos. Dios es amoroso y misericordioso, pero si
tiene que utilizar Su vara de amor para atraer nuevamente a Su pueblo idólatra y
detener así sus obras abominables y pecaminosas, lo hará. La voluntad del Dios
Padre es que Su pueblo vuelva a Él, aunque tenga que afligir a Su pueblo, para
oprobio del mundo.
¿Cuál es el fin de un pueblo que no deja de pecar? ¿A qué pecado no he re-
nunciado por mi egoísmo?

Velo para mal y no para bien (44:24-30)


Dios se muestra más fuerte y firme ante la idolatría persistente de Su pueblo,
el cual está determinado a ofrecer incienso y derramar libaciones a la Reina del
cielo desde Egipto. Quebrantaron con ligereza el pacto con Dios, para adorar
con pasión a la diosa, a cambio de su bendición y provisión (44:17-18). Dios
jura por Su grande nombre que velará sobre Judá para mal y no para bien; serán
consumidos a espada y morirán de hambre. Así como entregó al rey de Judá, Se-
dequías, a Babilonia, Dios entregará al rey de Egipto en manos de sus enemigos.
De esta manera sabrán que la Palabra de Dios es verdad y que permanece para
siempre. Vana es la idolatría y las creencias de este mundo. Solo con la obedien-
cia a la Palabra transformamos la calamidad en bendición.
¿Cuál será el fin de Hofra, rey de Egipto, en quien confiaba el pueblo de Judá?
¿A qué ídolo o creencia debo renunciar?

Padre, ten misericordia de mí, pues todavía tengo el hábito pecaminoso


Una Carta
de confiar más en los hombres y en las riquezas que en Ti. Tú eres fiel,
a Dios omnipresente y escudriñas las intenciones de nuestro corazón. Viviré
cada día obedeciendo a Tu voluntad, en agradecimiento a la infinita
gracia que me has concedido.
60
Ensayo para meditar Jeremías 44:20-30

Hay que abandonar


al mundo para vivir

E
s necedad buscar constantemente refugios en esta tierra. Aun-
que organicemos los contactos, ahorremos dinero y compre-
mos una póliza buscando paz y descanso, llegará el día en que
perderemos el poder, la salud, el honor, el dinero y los contactos.
¿Se imaginan la insufrible desesperación de perder aquello en lo que
pensamos que está la salvación? En realidad, esa cuerda de seguri-
dad no es lo suficientemente fuerte como para soportar el peso de
la vida, y es de esperarse que se reviente fácilmente.
Ni el más poderoso ni ninguna religión de este mundo puede ayu-
darnos. Hoy en día, la frustración, la condenación y la muerte están
arrasando con todos aquellos que no han resuelto el problema del
pecado. Por eso, es mejor que esos lazos de aparente seguridad se
corten rápidamente, para que podamos aferrarnos a la verdadera
soga de nuestra salvación. Y, cuando logremos zafarnos del mundo,
debemos alegrarnos y decir: ‘¡Qué bueno que me liberé!’, en vez de
lamentarnos y angustiarnos. Lo más importante, entonces, es rom-
per las ataduras con todo lo que nos mantiene alejados de nuestro
Creador, ya que la fe comienza por reconocer que ni los hijos ni el
marido, ni nadie puede reemplazar Su amor.
El camino para ser un verdadero cristiano es comprender la debi-
lidad de nuestras vidas y limitaciones, y encontrarnos con Jesús. La
fe genuina es la que se aferra a Dios constantemente, aquella que ni
el mundo ni Satanás pueden influenciar.

Creer en Jesús, Do Won-wook

Aplicación Personal

61
SÁB

10 La recompensa
del Señor
Jeremías 45:1-5

La Biblia en un año: 1  La palabra que habló el profeta Jeremías a


1 R. 13/ Flp 4/ Ez. 43/ Sal. 95-96
Baruc hijo de Nerías, cuando escribía en el li-
bro estas palabras dictadas por Jeremías, en el
año cuarto de Joacim hijo de Josías, rey de Judá,
diciendo: 
1 El año cuarto del gobierno de Joaquim, hijo de Josías,
rey de Judá, mientras Baruc, hijo de Nerías, escribía
lo que el profeta Jeremías le dictaba, dijo Jeremías a
Baruc: 

2  «Así te ha dicho Jehová, Dios de Israel, a ti,


Baruc: 
2-3 «Tú, Baruc, dices: “¡Ay de mí! ¡El Señor no me da
sino penas y dolores! Ya estoy cansado de llorar y no en-
cuentro ningún alivio.” Pues el Señor dice respecto de ti, 

3  “Tú dijiste: ‘¡Ay de mí ahora!, porque ha aña-


dido Jehová tristeza a mi dolor. Fatigado estoy
de gemir, y no he hallado descanso.’”
62
Jeremías 45:1-5

Baruc escribe las palabras que Dios anuncia a través de la boca de Je-
remías, en el año cuarto de Joacim, rey de Judá. Como el Señor sabe
que el escriba se lamenta con gran tristeza y dolor, le explica que Él
tiene autoridad para destruir a los que Él mismo edificó y arrancar a los
que plantó. Dios traerá mal sobre toda carne, pero le promete a Baruc
que le permitirá conservar su vida en todos los lugares adonde vaya.

4  Le dirás: “Así ha dicho Jehová: Yo destruyo a


los que edifiqué y arranco a los que planté, esto
es, a toda esta tierra, 
4 y me manda que te diga: “Yo destruyo lo que construí, y
arranco lo que planté. Y lo mismo haré con toda la tierra. 

5  ¿y tú buscas para ti grandezas? ¡No las bus-


ques!, porque he aquí que yo traigo mal sobre
todo ser viviente, ha dicho Jehová; pero a ti te
daré la vida por botín en cualquier lugar adon-
de vayas.”»
5 ¿Quieres pedir para ti algo extraordinario? Pues no lo
pidas, porque yo voy a enviar calamidades sobre toda la
humanidad. Pero al menos permitiré que conserves tu vi-
da por dondequiera que vayas. Yo, el Señor, lo afirmo.”»

63
Ayuda a su meditación

Lamentaciones de Baruc (45:1-3)


Hay veces en que los siervos de Dios se sienten desaminados por los malos
entendidos y la oposición que deben enfrentar. Baruc fue llamado por Dios
a servir como escriba, es decir, registrando en pergaminos las palabras de Je-
remías (36:4). Algunos de estos pergaminos fueron leídos por Joacim, rey de
Judá, quien luego los rasgó, los quemó y amenazó con quitarle la vida a Baruc
(36:23, 26). Esta situación le provocó una gran tristeza y aflicción, al punto que
se lamentó hasta las lágrimas, así como también le sucedió a Jeremías. Incluso,
perdió la paz y sintió un agotamiento físico extremo. El obrero de Dios se
sentió derribado, desesperado por la oposición y la persecución del mundo. No
temamos a la aflicción ni a las burlas; recordemos que nuestros padres de la fe
también padecieron por el evangelio.
Según el pasaje, ¿cómo se sentía Baruc, el consiervo de Jeremías? ¿Cómo
puedo superar la aflicción que siento al cumplir el ministerio de Dios?

La recompensa de Dios (45:4-5)


Dios oye el lamento de Sus siervos y se compadece de su dolor. Por eso, se
revela ante Baruc, quien no dejaba de gemir por no hallar descanso. Dios es so-
berano; Él destruye a los que edificó y arranca a los que plantó. De Él depende
la historia de la humanidad. No sabemos en qué consisten las grandezas que
Baruc buscaba, pero lo cierto es que Dios le manda a no buscarlas más, porque
ya fueron decretadas calamidades sobre toda la humanidad. Cuando él cumpla
fielmente a su llamado en el presente y deje de buscar las grandezas del futuro,
su vida estará resguardada por Dios en medio del mal. Dios no busca ministros
que hagan grandezas, sino siervos fieles a quienes recompensar y consolar con
galardones.
¿Cómo responde Dios al lamento de Baruc? ¿Cuál es el llamado que debo
cumplir en el presente, antes que sorprender al mundo con las grandezas en
el futuro?

Dios misericordioso, gracias porque me consuelas cada vez que me


Una Carta
siento desanimado y afligido por alguna dificultad. Si Tú estás conmigo,
a Dios podré superar cualquier adversidad. Saber que Tu reconocimiento es lo
único que importa, me ayudará a superar las críticas de otros. Te seguiré
con fidelidad porque Tú eres Soberano.
64
Ensayo para meditar Jeremías 45:1-5

Seguir la verdad
y no la razón

M
i sueño era servir a Dios siendo un político cristiano, pero
el Señor deseaba que fuera un siervo que predicara el evan-
gelio. Por eso, el proceso de negarme a mí mismo fue muy
doloroso, sin contar que también tenía muchos pensamientos ne-
gativos sobre los pastores. Incluso, llegué a preguntarle por qué me
había elegido a mí, si existían muchas personas mejor capacitadas
y que sí deseaban servirle de esa forma. “Yo te serviré de otra ma-
nera”, le decía. Estaba apenado y desanimado ante Su orden de
seguir otro camino, porque había logrado estudiar en EE. UU. para
ser un buen político. Y, como no podía comprender la voluntad del
Señor, estaba afligido y no sentía ni siquiera un poco de gratitud.
Finalmente, decidí inscribirme en el Seminario Teológico, aunque
lo hice sin alegría. Pero el Señor conocía que mi fe era imperfecta e
hizo que comprendiera Su voluntad a través de la Palabra y varios
acontecimientos.
“[...] Te puse nombre, mío eres tú” (Isaías 43:1). Al leer este ver-
sículo, me desmoroné conmovido ante la gracia de Aquel que dice
‘mío eres’ a alguien imperfecto como yo, y me eché a llorar. Aver-
gonzado por no ser un hombre de Dios, me propuse orar en ayunas
por 40 días, y decidí arrepentirme y seguir el camino de Su llamado
con gozo. Mucha gente elige la razón en vez de la verdad, y sigue
ese camino. No obstante, el deseo de Dios es que avancemos por el
camino de la verdad, es decir, el de la Palabra de Dios.

El que le agrada a Dios, Han Ki-hong

Aplicación Personal

65
DOM

11 Juez Justo y
Vengador
Jeremías 46:1-12

La Biblia en un año: 1 Palabra de Jehová que vino al profeta Jeremías,


1 R. 14/ Col. 1/ Ez. 44/ Sal. 97-98
contra las naciones.
1  El Señor habló al profeta Jeremías acerca de las
naciones. 
2  Acerca de Egipto: contra el ejército del fa-
raón Necao, rey de Egipto, que estaba cerca
del río Éufrates, en Carquemis, a quien destru-
yó Nabucodonosor, rey de Babilonia, en el año
cuarto de Joacim hijo de Josías, rey de Judá:
2 Éste fue su mensaje acerca de Egipto, y en particu-
lar acerca del ejército del faraón Necao, rey de Egipto,
que se hallaba en Carquemis, junto al río Éufrates, y a
quien el rey Nabucodonosor de Babilonia derrotó en el
año cuarto del gobierno de Joaquim, hijo de Josías, rey
de Judá:
3 «¡Preparad escudo y pavés, y venid a la guerra!
3 «¡Preparen los escudos! ¡Láncense al ataque!
4 ¡Uncid los caballos, y montadlos vosotros, jine-
tes! ¡Cubríos con los yelmos, limpiad las lanzas
y poneos las corazas!
4 ¡Ensillen los caballos! ¡Monten, jinetes! ¡Pónganse los
cascos y formen líneas! ¡Afilen las lanzas! ¡Pónganse
las corazas!
5 ¿Por qué los veo aterrados, retrocediendo? Sus
valientes fueron deshechos y huyeron sin volver
la vista atrás. ¡Hay miedo por todas partes!, di-
ce Jehová.
5 »Pero ¿qué es lo que veo? Retroceden llenos de terror.
Sus guerreros se dispersan derrotados; salen corrien-
do, sin mirar atrás. ¡Hay terror por todas partes! Yo, el
Señor, lo afirmo.

6  No huya el ligero ni escape el valiente; al nor-


te, junto a la ribera del Éufrates tropezaron y
cayeron.
6 ¡No pueden huir los más veloces, ni escapar los más
valientes! En el norte, junto al río Éufrates, tropiezan y
caen.

7  ¿Quiénes éste que sube como un río y cuyas


aguas se mueven como los ríos?
66
Jeremías 46:1-12

Profecías acerca de Egipto: aunque se vistan con corazas y


tomen las armas, tropiezarán y caerán a la ribera del Éufrates.
Como el río Nilo que cubre la tierra, así buscarán destruir a sus
enemigos; pero en aquel día, Dios se vengará de ellos. Efecti-
vamente, Egipto es derrotado por Babilonia en Carquemis, en el
año cuarto de Joacim, rey de Judá.

7 ¿Quién es ése que crece como el Nilo, como un río de


aguas violentas?
8  Es Egipto, que como un río se ensancha, cu-
yas aguas se mueven como los ríos y que dijo:
“Subiré, cubriré la tierra, destruiré la ciudad y a
los que en ella moran.”
8  Es Egipto, que crece como el Nilo, como un río de
aguas violentas. Egipto dice: “Voy a crecer y a inundar
la tierra, voy a destruir las ciudades y sus habitantes.”
9 ¡Subid, caballos! ¡Carros, corred enloquecidos!
¡Que salgan los valientes: los etíopes y los de Fut
que toman escudo, y los de Lud que toman y en-
tesan arco!
9 »¡Que avance la caballería! ¡Adelante los carros! ¡Que
se pongan en marcha los guerreros: los soldados de
Etiopía y de Libia, armados de escudos; los soldados
de Lidia, que manejan bien el arco!
10 Mas ese día será para Jehová, Dios de los ejér-
citos, día de retribución, para vengarse de sus
enemigos. La espada devorará, se saciará y se
embriagará con la sangre de ellos. Porque un sa-
crificio será para Jehová, Dios de los ejércitos, en
la tierra del norte, junto al río Éufrates.
10 Éste es el día del Señor todopoderoso, el día en que
va a vengarse de sus enemigos. La espada herirá hasta
saciarse, hasta emborracharse de sangre. Pues el Señor
todopoderoso hará una matanza en el país del norte,
junto al Éufrates.
11 ¡Sube a Galaad y toma bálsamo, virgen, hija
de Egipto! Por demás multiplicarás las medici-
nas, pues no hay curación para ti.
11 »¡Pueblo de Egipto, ve a Galaad en busca de medici-
nas! ¡Pero por más remedios que uses, de nada te van
a servir, pues no hay remedio para ti!
12  Las naciones conocieron tu afrenta y tu cla-
mor llenó la tierra, porque el valiente tropezó
contra el valientey ambos cayeron juntos.»
12 Las naciones ya saben que has sido humillado, y en
toda la tierra se te oye gritar; chocan los guerreros unos
contra otros, y juntos ruedan por el suelo.»
67
Ayuda a su meditación

La caída de Egipto (46:1-12)


Dios es soberano y en Sus manos está el destino de las naciones, su nacimiento,
progreso, decadencia y fin. Los capítulos 46 al 51 de Jeremías anuncian juicio
contra las naciones gentiles. Junto a los ejércitos de sus aliados (Etiopía, Put y
Lud), el gran y poderoso ejército de Egipto pretende cubrir la tierra, como si el
río Nilo estuviera desbordado. De hecho, Judá confía más en dicha nación que
en Dios, razón por la que no acatan Su instrucción de someterse al yugo de Ba-
bilonia. No obstante, tal como fue anunciado por Dios, Egipto es derrotado en
Carquemis por los caldeos (605 a. C.), junto al río Éufrates. Egipto pierde para
siempre su hegemonía, debido a su soberbia, idolatría y al daño que le causaron
al pueblo escogido. Por eso, el pasaje declara: “Mas ese día será para Jehová,
Dios de los ejércitos, día de retribución, para vengarse de sus enemigos”. Él es
el único Soberano y Juez justo sobre las naciones.
¿Por qué menciona Dios a Egipto en primer lugar, es decir, antes que al resto
de las naciones gentiles que serán juzgadas? ¿En qué o quién confío más que
en Dios?

Altar Comencemos con alabanza y oración. Compartamos acerca de nuestra semana,


familiar inclusive el agradecimiento por las cosas que Dios ha hecho.

1 Observación
¿Cuándo y en dónde se desató la guerra de Carque-
mis? ¿Cómo describe la Biblia la derrota del ejército
egipcio, supuestamente invencible? (46:2-6)

Aplicación y La historia no es producto de la casualidad, sino de


diálogo
la providencia y los planes de Dios. Entonces, ¿cuál
es la actitud que debemos adoptar ante la historia?

2 Observación
¿Cómo será llamado el día de la derrota del ejército
egipcio? ¿Qué significa que no habrá curación para
los egipcios? (46:10-11)

Aplicación y Dios es el juez que castiga el mal. ¿En qué debo


diálogo
dejar de participar o en qué debo intervenir, por
temor a Dios?

Compartamos las peticiones de oración individuales y seleccionemos los temas para orar
como familia durante toda la semana. Terminemos el devocional con la oración final.

68
Prédica del domingo

Título:

Pasaje:

Notas:

Intercesión por las naciones

Arabia Saudí publicó un decreto que pone fin a las ejecuciones de menores
de edad. La ejecución es el máximo castigo imputado a los homicidas,
ladrones, a los que cometen blasfemia o que participan en un acto
terrorista. Hubo varios casos en los que las víctimas fueron menores de
edad pertenecientes al chiismo que perdieron su vida por realizar alguna
actividad en contra del gobierno. Oremos al Señor para un mayor respeto a
los derechos humanos.

69
LUN

12 La gracia de la
restauración
Jeremías 46:13-28

La Biblia en un año: 13  Palabraque habló Jehová al profeta Jeremías


1 R 15/ Col. 2/ Ez. 45/ Sal. 99-101
acerca de la venida de Nabucodonosor, rey de
Babilonia, para asolar la tierra de Egipto:

14  «¡Anunciadlo en Egipto y hacedlo saber en


Migdol! ¡Hacedlo saber también en Menfis y en
Tafnes! Decid: “¡Ponte en pie y prepárate, por-
que la espada devorará tu comarca!”

15  ¿Por qué ha sido derribada tu fortaleza?


¡No pudo mantenerse firme, porque Jehová la
empujó!

16  Multiplicó los caídos, y cada uno cayó sobre


su compañero; y dijeron: “¡Levántate! ¡Volvamos
a nuestro pueblo, a la tierra de nuestro nacimien-
to! ¡Huyamos ante la espada vencedora!”

17 Allí
gritaron: “¡El faraón, rey de Egipto, no es
más que ruido; dejó pasar el tiempo señalado!”

18 Vivo yo, dice el Rey, cuyo nombre es Jehová de


los ejércitos, que como el Tabor entre los mon-
tes y como el Carmelo junto al mar, así vendrá
el enemigo.

19  Hazte equipaje de cautiverio, moradora hija


de Egipto, porque Menfis será un desierto, será
asolada hasta no quedar morador.

20  »Una becerra hermosa es Egipto, mas viene


destrucción: ¡Del norte viene!

21 Sus soldados mercenarios, también en medio


de ella son como becerros engordados; porque
también ellos se volvieron atrás, huyeron todos
sin detenerse, porque vino sobre ellos el día de
su quebrantamiento, el tiempo de su castigo.
70
Jeremías 46:13-28

Profecía acerca de la destrucción de Egipto por Babilonia. Su


fortaleza será derribada y no podrán mantenerse firmes. Todos
los que confían en dioses, como el faraón, Egipto y Amón, serán
entregados en las manos del rey de Babilonia. Pero Jacob, siervo
de Dios, no será destruido del todo en su cautiverio, aunque será
corregido con justicia.

22  »Su voz será como un silbido de serpiente,


porque vienen los enemigos: vienen a ella con
hachas, como leñadores.

23  Cortarán sus bosques, dice Jehová, aunque


sean impenetrables; porque son más numerosos
que langostas, ¡son innumerables!

24  Seavergonzará la hija de Egipto; entregada


será en manos del pueblo del norte.»

25  Jehová de los ejércitos, Dios de Israel, ha


dicho: «Yo castigo a Amón, dios de Tebas, al fa-
raón y a Egipto, a sus dioses y a sus reyes; tanto
al faraón como a los que en él confían. 

26  Los entregaré en manos de los que buscan


su vida, en manos de Nabucodonosor, rey de
Babilonia, y en manos de sus siervos; pero des-
pués será habitado como en los días pasados,
dice Jehová.

27 »Pero tú no temas, siervo mío Jacob, ni desma-


yes, Israel; porque he aquí yo te salvaré de lejos,
a ti y a tu descendencia, de la tierra de vuestra
cautividad. Volverá Jacob, descansará, será pros-
perado y no habrá quién lo atemorice.

28 Tú, Jacob, siervo mío, no temas, dice Jehová,


porque yo estoy contigo. Sí, destruiré a todas las
naciones entre las cuales te he dispersado. Sin
embargo, a ti no te destruiré del todo, aunque te
castigaré con justicia. ¡En manera alguna te de- * Por falta de espacio se ha omitido
jaré sin castigo!» la versión “Dios Habla Hoy”

71
Ayuda a su meditación

Ingreso de los caldeos a Egipto (46:13-26)


Dios es el Rey de reyes, Soberano sobre las naciones. El rey egipcio, que se jac-
taba de su poder militar, será derrotado por Nabucodonosor (rey de Babilonia),
un instrumento de Dios. Sus soldados valientes caerán a espada, derribados
por el mismo Dios (v. 15). El pueblo será llevado cautivo a Babilonia; y Egipto,
hermosa como una becerra, será destruida por las langostas (ejército de los cal-
deos) que vendrán del norte. Así quebrantará Dios a los dioses egipcios, juzgará
al faraón y a todos los idólatras. Sin embargo, Egipto será restaurado después
de cuarenta años (Ez. 29:13-16). Tanto el juicio sobre Egipto como su restaura-
ción dependen de Dios, el Rey de reyes. Es vanidad confiar en los reyes de este
mundo; Dios es el único digno de nuestra confianza.
¿Quién destruyó a Egipto, una de las máximas potencias de ese entonces?
¿Cómo difiere la vida de aquel que sirve a Dios como su Rey, de aquellos que
siguen a otros dioses?

La restauración de Israel (46:27-28)


Dios es amor; Él cuida a Su pueblo escogido hasta el fin. Aunque el juicio de
Dios sea sobre todas las naciones, el Señor salvará a Su pueblo, dejando un re-
manente vivo. Dios consuela a Israel en medio del juicio y le insta a no temer,
por cuanto el Salvador todopoderoso estará con ellos. Serán reprendidos por
Dios, pero en Su tiempo soberano serán rescatados de su cautividad para que
moren nuevamente en Israel y disfruten de la paz. Aunque las naciones entre las
cuales ha sido dispersada Israel serán destruidas, el pueblo escogido será tratado
con misericordia. Pero de ninguna manera será excluido del juicio por sus mu-
chas iniquidades; la disciplina amorosa santificará a Su pueblo.
¿Cuál es la promesa que Dios le da a Israel, mientras declara juicio contra
Egipto? ¿Cuál es la buena voluntad de Dios hacia mí, incluso cuando me cas-
tiga con justicia?

Padre celestial, Tú eres el dueño de mi vida; de Ti viene la bendición y


Una Carta el castigo. Tú eres Rey, y ciertamente salvas y restauras a Tu pueblo
a Dios escogido. Tu amor es grande, infinito y consuela mi corazón. Te serviré
solo a Ti, porque eres Jehová de los ejércitos, el Poderoso en batalla,
el Victorioso y Omnipotente.
72
Ensayo para meditar Jeremías 46:13-28

Providencia en medio
de la aflicción

E
n mayo de 1996, inesperadamente me rechazaron la visa de
Inglaterra. A pesar de que no tenía problemas con los papeles
que había presentado para extenderla, me dieron 28 días para
abandonar el país donde viví durante 11 años. No obstante, el abo-
gado nos informó que, si esto sucedía, pasaríamos a la lista negra
de inmigración y no podríamos ir a ningún otro país de Europa,
aunque no habíamos hecho nada malo. Entonces, iniciamos una
batalla legal que se extendió por cinco años, pero Dios nos permitió
conocer la providencia del Señor a lo largo del proceso.
Comencé a tener largos cultos matutinos desde que recibí la noti-
ficación. Cada culto era para descargar mi dolor ante el Señor y ro-
garle para que me guiara y me consolaba. En medio de todo aquello,
también plantamos la iglesia Eastbury con la idea de servir solo
un año, pero, ante la complicada situación, terminaron siendo seis
años y medio. También aprendí a perdonar, tras descubrir que al-
guien nos había denunciado ante la oficina de migraciones, lleno de
rencor por un malentendido. Esto nos generó una gran dificultad
y, si bien al principio me enfurecí, pude perdonar cuando Dios me
demostró Su compañía y nos ayudó a lo largo de la aflicción.
Así, corroboré la voluntad de Dios, luego de ministrar plantando
iglesias en Inglaterra, como líder del barco Doulos, y con la visión
de volver a evangelizar Inglaterra y Europa fundando escuelas para
plantar iglesias. Si bien Dios no decide todas las circunstancias, sí
posee voluntad sobre todas las circunstancias.

El latido de Dios para Europa, Choi Jong-sang

Aplicación Personal

73
MAR

13 Dios inicia
el juicio
Jeremías 47:1-7

La Biblia en un año: 1 Palabra de Jehová que vino al profeta Jeremías


1 R. 16/ Col. 3/ Ez. 46/ Sal. 102
acerca de los filisteos, antes que el faraón des-
truyera Gaza.
1   Éste es el mensaje que el Señor dirigió al profeta
Jeremías acerca de los filisteos, antes que el faraón
atacara Gaza:

2  Asíha dicho Jehová: «Suben aguas del norte


y se harán un torrente; inundarán la tierra y lo
que la llena, la ciudad y a los que moran en ella.
Los hombres clamarán, y lamentará todo mora-
dor de la tierra,
2  «Yo, el Señor, digo: Del norte llega una inundación,
como de un río desbordado; inunda el país y todo lo que
hay en él, las ciudades y los que en ellas viven. Todos los
habitantes del país gritan, la gente lanza ayes de dolor.

3  por el estrépito de los cascos de sus caballos,


por el retumbar de sus carros, por el estruendo
de sus ruedas. Los padres no cuidan de los hijos,
porque sus manos están sin fuerzas.
3  Al oír el galope de los caballos, el estruendo de los
carros y el ruido de las ruedas, les faltan fuerzas a los
padres y abandonan a sus hijos.
74
Jeremías 47:1-7

Profecía de Dios acerca de los filisteos, antes de que el faraón


destruyera a Gaza: suben aguas del norte, se harán torrente que
inundará las ciudades y sus moradores; se lamentará todo mo-
rador de la tierra. No contarán más con la ayuda de Tiro y Sidón;
los filisteos de la costa de Caftor también serán destruidos. La
espada de Dios no descansará.

4  Ha llegado el día de destruir a todos los filis-


teos, de destruir a todo aliado que todavía les
quede a Tiro y a Sidón. Porque Jehová destrui-
rá a los filisteos, al resto de la costa de Caftor.
4 Porque llegó el día de aniquilar a los filisteos, de qui-
tarles a Tiro y Sidón la ayuda que aún les queda.» Sí,
el Señor va a destruir a los filisteos, que emigraron de
la isla de Creta.

5 Gaza se rapó la cabeza, Ascalón ha perecido, y


el resto de su valle; ¿cuándo dejarás de sajarte?
5  La gente de Gaza se rapa la cabeza, la gente de
Ascalón se queda muda. Último resto de los antiguos
gigantes, ¿hasta cuándo te harás cortaduras en la carne
en señal de dolor?

6  Espada de Jehová, ¿cuándo vas a descansar?


¡Vuelve a tu vaina, reposa y sosiégate!
6  ¡Ay, espada del Señor! ¿Cuándo te vas a detener?
¡Vuelve a entrar en tu vaina, cálmate, quédate quieta!

7 Pero ¿cómo reposarás, si Jehová te ha enviado


contra Ascalón y contra la costa del mar? Allí te
ha destinado.»
7  ¿Pero cómo podría quedarse quieta si el Señor le
ha dado órdenes, si le ha dado el encargo de atacar a
Ascalón y toda la costa?

75
Ayuda a su meditación

Juicio contra Filistea (47:1-4)


La Palabra de Dios se cumple a lo largo de la historia. El pasaje bíblico no men-
ciona su motivo, pero Dios juzga a Filistea por sus pecados (Am. 1:6). Por ser
una nación violenta y cruel que afligió a Israel por mucho tiempo, Filistea será
destruida por un ejército que inundará la tierra como un torrente. Los países
aliados a ella también perecerán, como el ejército de Sidón y Tiro, además de los
filisteos ubicados en la costa de Caftor. El juicio contra Filistea fue declarado
antes de que Egipto destruyese a Gaza; por tanto, es probable que no pudieran
anticipar que la destrucción sería a manos de Babilonia. Filistea cae en manos de
Nabucodonosor, rey de Babilonia, en el año 604 a. C., conforme a la Palabra de
Dios. Sin duda, fueron juzgados por haber afligido al pueblo de Dios.
¿Cuándo fue anunciada la destrucción de Filistea por el profeta Jeremías? ¿En
qué debo renovar mi corazón y mis obras, sabiendo que Dios es un juez justo?

La espada de Jehová (47:5-7)


Nadie puede escapar de la poderosa espada de Dios. El juicio de Dios ya ha sido
proclamado; Filistea será destruida por completo, incluyendo Gaza y Ascalón,
dos de las cinco ciudades más importantes de dicha nación. Toda su nación será
rapada, porque será grande la desolación y la vergüenza que sufrirá. Los filisteos
serán azotados con gran tristeza y se sajarán sin clemencia pidiendo ayuda a sus
dioses muertos. La mutilación supersticiosa de sus propios cuerpos es ineficaz
ante la espada del juicio divino. Juicio ha sido decretado por Dios; Filistea, por
tanto, será derribada ‘a espada de Jehová’. Esta espada no se detendrá hasta que
se hayan cumplido todos y cada uno de Sus propósitos. El juicio comienza y se
cumple por mandato divino.
¿Cómo reaccionan los filisteos ante la aflicción y el temor? ¿Cuál es la aflicción
que debo reconocer que ha venido por mandato de Dios?

Señor, concédeme la gracia de postrarme ante Tu presencia antes de


Una Carta
que venga sobre mí Tu juicio temible. De Ti viene el socorro a mi vida.
a Dios Ablanda mi duro corazón; dame humildad y mansedumbre para arre-
pentirme con quebranto y de manera genuina, inmediatamente después
ser advertido por Tu Palabra.
76
Ensayo para meditar Jeremías 47:1-7

Dios se acerca

L
as clases, los libros y los blogs sobre cómo lidiar con la de-
cepción siempre son populares. La Biblia también está repleta
de estos versículos y debemos aceptarlos con sinceridad. Y,
así mismo, tiene respuestas para la lucha con la pregunta de por
qué la vida es tan insufrible para los que no creen en Él. A veces
me pregunto si Dios tendrá un libro en su mesita de noche que se
llame “La decepción del hombre”, ya que Su decepción está inclu-
so en cada renglón de la Biblia. Y, al pensar en eso, me entristece
pensar que tal vez puede tener un libro en Su biblioteca titulado
“La decepción de John Ortberg”. A decir la verdad, ¿cómo podría
no decepcionarse Dios cada vez que soy descortés con mis hijos y
demás pastores, cuando le miento a mi esposa y menosprecio a las
mujeres, o soy indiferente con los pobres e ignoro a todo aquel que
es distinto a mí? Pecar va más allá de defraudar a Dios. Es rechazar-
lo, es no dejar nuestro ser en Sus manos, es desterrarlo de nuestras
vidas y convertirnos en nuestros propios dueños.
Cuando la relación se desvirtúa, la manera de acercarnos es buscar
la reconciliación y la restauración, aunque las consecuencias que
nos esperen sean terribles. Dios se acercó primero a nosotros en el
jardín del Edén, llegó al mundo como un hombre en un pesebre y
murió en la cruz. Continuó con una tumba vacía y aún sigue escri-
biendo el resto de la historia. Dios siempre se ha acercado prime-
ro al ser humano. El problema somos nosotros. ¿Está dispuesto a
acercarse a Dios?

Me agradarías más, si te parecieras a mí, John Ortberg

Aplicación Personal

77
MIÉ

14 La comodidad y
los pecados
Jeremías 48:1-25

La Biblia en un año: 1  Acerca de Moab. Así ha dicho Jehová de los


1 R 17/ Col. 4/ Ez. 47/ Sal. 103
ejércitos, Dios de Israel: «¡Ay de Nebo, por-
que fue destruida! ¡Deshonrada y conquistada
fue Quiriataim; la ciudadela está deshonrada y
destruida!
2  ¡Nunca más se alabará Moab!En Hesbón ma-
quinaron mal contra ella, diciendo: “¡Venid y
borrémosla de entre las naciones!” También tú,
Madmena, serás cortada; la espada irá en pos de
ti.
3  »¡Gritos vienen de Horonaim, destrucción y
gran quebrantamiento!
4  ¡Moab fue quebrantada: hicieron que se oyera
el clamor de sus pequeños!,
5  pues por la cuesta de Luhit la gente sube llo-
rando, porque a la bajada de Horonaim los
enemigos oyen gritos de quebranto.
6  ¡Huid, salvad vuestra vida, sed como la reta-
ma en el desierto!
7 Por cuanto confiaste en tus bienes y en tus te-
soros, tú también serás conquistada. Quemos
será llevado en cautiverio, junto con sus sacer-
dotes y sus príncipes.
8  Vendrá el destructor a cada una de las ciuda-
des, y ninguna ciudad escapará. También el valle
será arruinado y arrasada la llanura, como ha di-
cho Jehová.
9  »¡Dadle alas a Moab, para que se vaya volan-
do!, pues quedarán desiertas sus ciudades hasta
no hallarse en ellas morador alguno.»
10  ¡Maldito el que haga con indolencia la obra
de Jehová! ¡Maldito el que retraiga de la sangre
su espada!
11 Tranquilo estuvo Moab desde su juventud; so-
bre sus sedimentos ha estado reposado; no fue
vaciado de vasija en vasija ni nunca estuvo en
cautiverio. Por eso conservó su propio sabor y
no ha perdido su aroma.
78
Jeremías 48:1-25

Profecía sobre Moab. Si bien siempre ha gozado de paz y nunca


ha sido prisionero de guerra, será juzgado por confiar en sus
bienes y en sus tesoros. Así como Israel se avergonzó de Bet-el,
en quien confiaba, Moab se avergonzará de Quemos, su dios.
Cercano está el quebrantamiento de Moab; sus ciudades serán
asoladas y sus jóvenes descenderán al degolladero.

12 «Pero vienen días, ha dicho Jehová, en que yo


le enviaré trasvasadores que lo trasvasarán, va-
ciarán sus vasijas y romperán sus odres. 
13  Y Moab se avergonzará de Quemos, co-
mo la casa de Israel se avergonzó de Bet-el, su
confianza.
14 »¿Cómo, pues, diréis: “Somos hombres valien-
tes y robustos para la guerra”?
15  ¡Destruido es Moab, asoladas sus ciudades y
llevados sus jóvenes al degolladero!, ha dicho
el Rey, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos.
16  Cercano está el quebrantamiento de Moab, a
punto de llegar; mucho se apresura su mal.
17  Compadeceos de él todos los que estáis a su
alrededor; y todos los que sabéis su nombre, de-
cid: “¡Cómo se quebró la vara fuerte, el bastón
hermoso!”
18 Desciende de la gloria, siéntate en tierra seca,
moradora hija de Dibón, porque el destructor
de Moab ha subido contra ti, ha destruido tus
fortalezas.
19  Párate en el camino y mira, moradora de
Aroer; pregunta a la que va huyendo, a la que
escapó. Dile: “¿Qué ha sucedido?”
20 Se avergonzó Moab, porque fue quebrantado.
¡Lamentaos a gritos! ¡Anunciad en el Arnón que
Moab ha sido destruido!»
21 Vino el juicio sobre la tierra de la llanura; so-
bre Holón, sobre Jahaza, sobre Mefaat, 
22 sobre Dibón, sobre Nebo, sobre Bet-diblataim, 
23  sobre Quiriataim, sobre Bet-gamul, sobre
Bet-meón, 
24  sobre Queriot, sobre Bosra y sobre todas las
ciudades de la tierra de Moab, las de lejos y las
de cerca. 
25 Jehová dice: «Cortado es el poder de Moab y * Por falta de espacio se ha omitido
quebrantado su brazo.» la versión “Dios Habla Hoy”

79
Ayuda a su meditación

Juicio contra Moab (48:1-10)


Es una necedad jactarse de los méritos propios, cuando en realidad vivimos
solo por la gracia de Dios. Moab era una tierra propicia para la agricultura y la
ganadería, gracias a los ríos y arrollos. Teniendo toda la abundancia económica,
Moab se volcó a adorar al dios Quemos, desconociendo que esto los conduciría
a su propia decadencia. La prueba de esto es que no repararon en ofrecer sa-
crificios humanos (2 R. 3:26-27). Cayeron en la soberbia de confiar más en sus
logros y riquezas antes que en Dios. El profeta Jeremías anuncia que el clamor
de los pequeños se oirá por la destrucción y la guerra que sufrirá Moab, pues
Dios tomó la determinación de juzgar a esta nación. El que ha sido elegido para
ser instrumento de justicia en las manos de Dios no puede jactarse de sí mismo.
La humildad trae gracia; pero la soberbia, juicio. Solo debemos gloriarnos de
Dios y de Su gracia.
¿Por qué será juzgado Moab por Dios? ¿Qué es lo que ha estado motivando
mi orgullo y cómo puedo cuidarme para no gloriarme, sino confiar en Dios?

La vergüenza de Moab (48:11-25)


Cuando gozamos de muchas comodidades es muy fácil caer en el letargo espi-
ritual y en la idolatría. Protegido por sus características geográficas y excelentes
relaciones diplomáticas, Moab se jactaba de la paz que gozaba, como vino que
no fue vaciado de vasija en vasija. Sin embargo, como permanecieron en sus
pecados, debido a la paz y la prosperidad, Dios anunció juicio contra Moab. Así
como Israel (el reino del norte) fue avergonzado por apartarse de Dios y poner
su confianza en el becerro de Bet-el, Moab se avergonzará de su dios Quemos.
Cercano está el quebrantamiento de Moab con todo su poderío y fuerza, como
la vara fuerte, el báculo hermoso. Más bienaventurado es el afligido que vela en
el espíritu, que el que anda confiado es sus riquezas, pues el segundo cae en la
adoración al materialismo y en la decadencia espiritual.
¿Cuál será el fin de Moab, entiendiendo que sus pecados estuvieron motivados
por la prosperidad y la paz aparente? ¿Qué ocurriría si tuviésemos solo paz y
no aflicción?

Dios mío, reconozco haber sido soberbio y haber creído que el éxito que
Una Carta
he alcanzado ha sido resultado de mis méritos. Me avergüenzo de ello y
a Dios me comprometo a no jactarme de mis obras, sino solo de Ti. Grabo Tu
Palabra en mi corazón, reconociendo que todo proviene de Ti. Aunque
logre adquirir ciertas riquezas, sin Ti serían solo temporales.
80
Ensayo para meditar Jeremías 48:1-25

El secreto de la humildad

S
i bien hoy podemos tener más de las cosas que siempre he-
mos deseado, me pregunto si realmente somos más felices
que en el pasado. Todos defienden sus derechos, pero nadie
está dispuesto a ceder. Solo buscamos acumular la mayor cantidad
de riqueza posible, seguir los valores del mundo, tener vidas prós-
peras e interesantes, y ser reconocidos como personas exitosas. No
obstante, Dios vino al mundo dejando todos Sus derechos de lado,
un hecho que nadie puede cuestionar. De eso se trata el verdadero
cristianismo, contrario a creer en Dios para sentirnos superiores a
otros o para sobrevivir en este mundo con Su poder. El segundo
caso es chamanismo.
Hace diez años, prediqué en un retiro espiritual al inicio del ciclo
lectivo en mi universidad, y terminé diciendo: “En la actualidad to-
dos quieren tener éxito en el ministerio. Todos quieren tener una
iglesia grande, ser un pastor famoso, escribir varios libros y ser al-
guien influyente. Pero ¿acaso existen estas cosas en el evangelio o
en la vida del Jesús que conocemos?”.
Fíjese hacia dónde se desvió el cristianismo. Nos estamos con-
virtiendo en una versión de iglesia extraña que está enfocada en
presionar al gobierno por nuestros intereses, en vez de demostrar
humildad. La vida de la iglesia de Cristo no se encuentra allí; el po-
der del evangelio está en la humildad y el servicio.

Amar en abundancia, Hwa Jong-bu

Aplicación Personal

81
JUE

15 Llanto de
amor
Jeremías 48:26-35

La Biblia en un año: 26  ¡Embriagadlo, porque contra Jehová se en-


1 R. 18/ 1 Ts. 1/Ez 48/ Sal. 104
grandeció! ¡Revuélquese Moab sobre su vómito
y sea, también él, motivo de escarnio!
26 Emborrachen a Moab, porque se rebeló contra el
Señor. Entonces Moab se revolcará en su vómito y to-
dos se burlarán de él.

27 ¿Acaso Israel no fue para ti un motivo de es-


carnio, como si lo hubieran sorprendido entre
ladrones? Porque tú, cuando de él hablabas, ha-
cías gestos de burla.
27 Moab, ¿no te burlabas tú de Israel y hablabas siempre
de él con desprecio, como si fuera un ladrón?

28  ¡Abandonad las ciudades y habitad entre


peñascos, moradores de Moab! ¡Sed como la pa-
loma que anida al borde del barranco!
28 Abandonen las ciudades, habitantes de Moab; váyan-
se a las peñas, a vivir como las palomas que anidan al
borde de los precipicios.

29  Hemos oído de la soberbia de Moab, que es


muy soberbio, arrogante, orgulloso, altivo y al-
tanero de corazón.
29 Conocemos el gran orgullo de Moab: su arrogancia,
su altivez y su soberbia.

30 Dice Jehová: «Yo conozco su cólera, pero no


tendrá efecto alguno. Sus jactancias de nada le
aprovecharán.»
30 También el Señor conoce su insolencia, su charlata-
nería y sus bravatas.
82
Jeremías 48:26-35

Por su soberbia, Moab terminó burlándose de Israel. Sin embar-


go, su cólera no tendrá efecto; sus jactancias no le aprovecharán.
Será cortada la alegría y el regocijo de los campos fértiles; en los
lagares faltará el vino; clamarán a falta de agua para beber. Así
serán eliminados de Moab todos los que hacen sacrificios sobre
los lugares altos y ofrecen incienso a sus dioses.

31 Por tanto, yo aullaré por Moab, por todo Moab


clamaré, y gemiré por la gente de Kir-hares.
31 Por eso lloraré y me lamentaré por todo el pueblo de
Moab y por los hombres de Quir-heres.

32  Con llanto por Jazer lloraré por ti, vid de


Sibma; tus sarmientos pasaron el mar, llegaron
hasta el mar de Jazer. Sobre tu cosecha y sobre
tu vendimia vino el destructor.
32 Lloraré por ti, viñedo de Sibmá, más de lo que se
lloró por Jazer. Tus ramas pasaban más allá del mar y
llegaban hasta Jazer. Pero ahora tu cosecha de uvas ha
quedado destruida.

33 La alegría y el regocijo se han acabado en los


campos fértiles de la tierra de Moab. De los la-
gares haré que falte el vino, y no habrá pisador
que cante. No habrá más cantos de júbilo.
33 Ya no se oyen gritos de contento en los jardines de
Moab. El vino se ha acabado en los depósitos. Ya no hay
quien pise las uvas, ya no hay más cantos de alegría.

34  El clamor de Hesbón llega hasta Eleale;


hasta Jahaza dieron su voz; desde Zoar hasta
Horonaim y Eglat-selesiyá, porque aun las aguas
de Nimrim serán arruinadas.
34 La gente de Hesbón grita de dolor, y sus gritos lle-
gan hasta Elalé y Jahas, y desde Sóar hasta Horonaim
y Eglat-selisiya, porque aun los manantiales de Nimrim
están secos.

35  DiceJehová: «Exterminaré de Moab a quien


sacrifique sobre los lugares altos y ofrezca in-
cienso a sus dioses.»
35 El Señor afirma: «Yo destruiré a la gente de Moab
que sube a las colinas, a los santuarios paganos, para
ofrecer sacrificios e incienso a sus dioses.»

83
Ayuda a su meditación

Contra Dios se engrandeció Moab (48:26-30)


La soberbia es una característica recurrente en los que no conocen a Dios.
Moab fue soberbio, arrogante, orgulloso, altivo y altanero de corazón por la
prosperidad que gozaba. Siendo descendientes de Lot, sobrino de Abraham, se
burlaron de Israel, incluso a pesar de su parentesco con él (Ez. 25:8). No solo
esto, sino que lo despreciaron con el corazón, sin causa aparente. Burlarse del
pueblo escogido es burlarse de Dios mismo. El pecado más abominable para
Dios es la soberbia; por tanto, Moab será juzgado por haberse enaltecido contra
el Creador. La jactancia del orgulloso no aprovecha en nada; su cólera no tiene
efecto. Ciertamente Dios quebrantará la soberbia del altivo, para humillarlo en
Su presencia.
¿Por qué Moab se habrá burlado y menospreciado a Israel? ¿Qué piensa Dios
de mí, cada vez que me ve tratar al prójimo con un corazón altivo y soberbio?

Moab, tierra de tristeza (48:31-35)


El juicio es un castigo de Dios, pero por amor. Aunque Moab merece ser des-
truido por sus pecados, Dios se lamenta con gran tristeza diciendo: “(…) yo
aullaré por Moab, por todo Moab clamaré (…)” (v. 31), mostrando que es un
Padre que castiga con tristeza a sus hijos. Kir-hares era una ciudad importante
de Moab, una fortaleza; su destrucción, simboliza la destrucción de todo el
reino moabita. La alegría y el regocijo de los campos fértiles se convertirán
en llanto; faltará el vino en los lagares. Sobre todo, los que se contaminaron
con el dios Quemos, ofreciendo incienso y sacrificios, serán exterminados. Los
soberbios y los idólatras ciertamente acarrean juicio de Dios. Pero el Señor se
lamentará con tristeza en el día del juicio, esperando con amor paternal que sus
hijos regresen al camino correcto.
¿Cómo se siente Dios al ver a Moab ser juzgado por sus pecados? ¿Cómo se
sentirá Dios al verme a mí, afligido y castigado por mis iniquidades?

Padre, Tu juicio contra Moab me enseña la tristeza y el dolor que sien-


tes hacia Tus hijos y Tu iglesia. Perdóname por haber sido inclemente
Una Carta
a Dios
e indiferente hacia el prójimo; ablanda mi duro corazón. Concédeme
Tu gracia restauradora que me renueva cada día. Gracias, Señor, por
revelar Tu corazón en mí.
84
Ensayo para meditar Jeremías 48:26-35

La raíz del mal

E
l agua que está fuera del barco no puede hundirlo. De hecho,
cuanta más agua haya afuera, más podrá flotar la nave. Sin
embargo, el agua que se filtra adentro del barco, sí lo puede
hundir. Cuanta más agua haya adentro, más rápido se hundirá. De la
misma manera, lo que destruye nuestras vidas no son las aflicciones
ni las dificultades externas, sino la soberbia que se ha filtrado en
nuestro interior.
La soberbia es cuando un ser que posee libertad se deja engañar y
se enfrenta a Dios. Es la raíz del mal. Aparte de Él, nadie puede ser
majestuoso ni sabio por sí mismo. Por eso, la raíz del mal es desear
glorificarnos y ser soberanos con el poder que Él nos ha dado.
Si bien Satanás suele atacar la debilidad del pecador, recordándole
la vida que llevába antes de ser hijo de Dios, su ataque mortal suce-
de cuando somos arrogantes. En mi caso y haciendo el ejercicio de
reflexionar sobre mi vida, detecté que el momento en el que más fui
soberbio fue en la época en la que me dediqué a leer la Palabra de
Dios. Mi mayor momento de arrogancia fue cuando leía la Biblia en
todo momento, cuando recibí Su gracia y conocí al Espíritu Santo.
Esto me permitió entender que Satanás puede hacernos caer en
el pecado utilizando nuestro corazón enaltecido por la llenura del
Espíritu. Por eso, debemos permanecer siempre despiertos y reves-
tirnos de la armadura de Dios.

Guerra espiritual, Lee Jae-hoon

Aplicación Personal

85
VIE

16 Quebrantado
como a vasija
Jeremías 48:36-47

La Biblia en un año: 36  Poreso resuena mi corazón como flautas


1 R. 19/ 1 Ts. 2/ Dn. 1/ Sal. 105
por causa de Moab, y asimismo resuena mi co-
razón a modo de flautas por los hombres de
Kir-hares, porque se perdieron las riquezas que
habían conseguido. 
36 Por eso mi corazón gime por Moab y por los hombres
de Quir-heres con sonido de flautas fúnebres, pues las
riquezas que juntó se han perdido.
37  Porque toda cabeza está rapada y toda barba
recortada; en toda mano hay cortaduras, y todos
llevan ropa áspera.
37 Toda cabeza está rapada y toda barba cortada; todos
se han hecho heridas en las manos y se han vestido con
ropas ásperas.

38  «Sobre todos los terrados de Moab, y en sus


calles, todo será llanto, porque yo quebranté a
Moab como a una vasija inútil», dice Jehová. 
38 «En todas las terrazas de Moab y en todas sus ca-
lles no se oye más que llanto, porque yo hice pedazos a
Moab como a una vasija inútil. Yo, el Señor, lo afirmo.»

39  ¡Lamentad! ¡Cómo ha sido quebrantado!


¡Cómo volvió la espalda Moab y fue avergon-
zado! Fue Moab objeto de escarnio y de horror
para todos los que están en sus alrededores.
39 ¡Hagan lamentación por Moab! ¡Qué lleno de terror
está! ¡Volvió la espalda de manera vergonzosa! Se con-
virtió en algo horrible y despreciable para todos sus
vecinos.

40 Porque así ha dicho Jehová: «Como un águila


volará, desplegará sus alas contra Moab.
40 El Señor dice: «El enemigo de Moab se lanza contra
él como un águila con las alas extendidas.

41  Tomadas serán las ciudades y conquistadas


las fortalezas. Aquel día, el corazón de los va-
lientes de Moab será como el corazón de mujer
en angustias,
41 Ciudades y fortalezas caerán en poder del enemigo.
En ese día los guerreros de Moab temblarán como mu-
jer de parto.
86
Jeremías 48:36-47

Jeremías profetiza que sobre todos los terrados de Moab habrá


llanto, porque Dios los quebrará como a vasija que no agrada.
Moab será objeto de escarnio y de espanto a todos los que están
en sus alrededores. Dicho reino será destruido hasta dejar de ser
pueblo, porque se engrandeció contra Dios; pero en lo postrero
de los tiempos, Él mismo hará volver a los cautivos de Moab.

42 y Moab será destruido hasta dejar de ser pue-


blo, porque se engrandeció contra Jehová.
42 Moab dejará de ser nación, porque se levantó contra
mí, contra el Señor.

43 Miedo, fosa y red contra ti, morador de Moab,


dice Jehová.
43 Por eso yo, el Señor, afirmo: Los habitantes de Moab
serán como animales perseguidos por los cazadores o
en peligro de caer en un hoyo o una trampa.

44  Elque huya del miedo caerá en la fosa, y el


que salga de la fosa quedará atrapado en la red.
Porque yo traeré sobre él, sobre Moab, el año de
su castigo, dice Jehová.
44 El que escape de los cazadores caerá en el hoyo,
y el que salga del hoyo caerá en la trampa, porque yo
traeré sobre Moab el tiempo de su castigo. Yo, el Señor,
lo afirmo.

45  »A la sombra de Hesbón se detuvieron


sin fuerzas los que huían; mas salió fuego de
Hesbón y una llama de en medio de Sehón, y
quemó el rincón de Moab y la coronilla de los
hijos revoltosos.
45 »Algunos huyen sin fuerzas a buscar refugio a la som-
bra de Hesbón; pero Hesbón, la ciudad del rey Sihón,
está en llamas, y el fuego se extiende y devora los mon-
tes de Moab, ese pueblo revoltoso.

46  ¡Ay de ti, Moab! ¡Pereció el pueblo de


Quemos!, porque tus hijos fueron apresados,
llevados en cautividad, y tus hijas fueron pues-
tas en cautiverio.
46 ¡Ay de ti, Moab! ¡Pueblo de Quemós, estás perdido!
¡A tus hijos y a tus hijas se los llevan al destierro!

47 Pero haré volver a los cautivos de Moab al fi-


nal de los tiempos, dice Jehová.» Hasta aquí es
el juicio de Moab.
47 Pero al final yo cambiaré la suerte de Moab; yo, el
Señor, lo afirmo.» Ésta es la sentencia del Señor con-
tra Moab.

87
Ayuda a su meditación

El día de castigo para Moab (48:36-44)


El reino que no es conforme al corazón de Dios no perdura. Jeremías profetiza
que serán perseguidos como animales por cazadores, así que tendrán miedo,
caerán en trampas y serán atados por lazos, pues fueron soberbios delante de
Dios. Sin embargo, el corazón del Señor resonará como flautas por causa de
Moab, con dolor y gemidos de tristeza. La cabeza rapada, la barba raída, los
rasguños en las manos y el cilicio sobre el lomo describen a los gentiles lloran-
do a los muertos (v. 37). El ejército de Babilonia vendrá como águila sitiando
las ciudades. Cuando estas sean tomadas, el corazón de los valientes moabitas
desfallecerá como una mujer angustiada a punto de dar a luz. El profeta anuncia
que Moab será quebrandado como vasija que no agrada, pues se engrandeció
contra Dios. Moab dejará de ser pueblo. La prosperidad o la decadencia de un
reino dependen solo de la soberanía de Dios; no existe reino que pueda perdu-
rar, habiéndose enaltecido en su corazón.
¿Por qué el corazón de Dios resonará a modo de flauta? ¿En qué debo obede-
cer con humildad para gozo de Dios?

Después del juicio, viene la restauración (48:45-47)


El hombre es totalmente insignificante ante el juicio del Dios, el Juez omnipo-
tente. Los moabitas huyen a Hesbón y Sehón, dos ciudades fortificadas, consi-
deradas como ciudades de refugio. Pero dice la Palabra de Dios que saldrá fuego
de ellas y serán consumidos. Dichos refugios serán insignificantes e incapaces
de brindar alguna protección al pueblo de Moab. Ni Quemos (el dios venerado
por los moabitas) podrá socorrerles. Las consecuencias de la idolatría son la
destrucción y el cautiverio. Pero Dios proclama la restauración de Moab en lo
postrero de los tiempos. Dios juzga a Moab por su soberbia e idolatría con el fin
de santificarlos y hacer de ellos un pueblo humilde, adorador. Aunque se trate
de una nación gentil, si se arrepienten, recibirán la gracia de la restauración. La
salvación de los pecadores depende solo de la misericordia de Dios.
¿Qué ocurrirá en lo postrero de los tiempos con Moab? ¿Qué he aprendido de
la disciplina de Dios?

Señor, no hay persona que pueda resistir a Tu juicio ni lugar que pueda
librarse de Tu reprensión. Incluso en medio de Tu ira, veremos Tu mi-
Una Carta
a Dios
sericordia a favor de Tu iglesia. Moldea mi vida y corazón; quebranta
mi vasija, para hacerla como a Ti te agrada. Confiaré solo en Ti y no
desmayaré, pese a las adversidades.
88
Ensayo para meditar Jeremías 48:36-47

La respuesta de
Jesús a la soberbia

E
n las publicaciones que compartimos en redes sociales todos
parecemos felices. Por eso, usamos varias estrategias para ver-
nos todavía más felices en las fotos que compartimos. Una
manera de lograr esto es utilizando los filtros de la aplicación, lo
que dificulta que veamos fotos ‘reales’. Esto llegó a un punto tal,
que subimos fotos con el hashtag “#sinfiltro”. No obstante, esta
etiqueta se convirtió también en fanfarronería para contener una
imagen feliz de nosotros mismos.
Es imposible ocultar la soberbia por más que lo intentemos, pero
Jesús presta atención a nuestro interior. Nuestro corazón solo pue-
de ser visto por Él, así que no podemos esconder nuestro ser ni
fingir nada. Dios no se alegra cuando ignoramos a los demás, consi-
derando al mundo un escenario para recibir los aplausos de la gente.
Por el contrario, desea que permanezcamos sentados en Su teatro y
miremos solo Su gloria, porque no existe nada más que la gloria de
Dios. Él se alegra de aquel que reconoce profundamente su pecado
y tiene un corazón humilde ante Su majestuosidad, buscando Su
misericordia y gracia.

El fin de mí mismo, Kyle Idleman

Aplicación Personal

89
SÁB

17 El materialismo,
una necedad
Jeremías 49:1-6

La Biblia en un año: 1  Acerca de los hijos de Amón. Así ha dicho


1 R. 20/ 1 Ts. 3/ Dn. 2/ Sal. 106
Jehová: «¿No tiene hijos Israel? ¿No tiene he-
redero? ¿Por qué Milcom ha hecho de Gad su
heredad, y su pueblo se ha establecido en sus
ciudades?
1   Mensaje del Señor acerca de Amón: «¿Dónde están
los hijos de Israel? ¿Dónde están sus herederos? ¿Por
qué el dios Milcom es ahora dueño de Gad? ¿Por qué
los amonitas habitan en sus ciudades?

2 Por tanto, vienen días, dice Jehová, en que ha-


ré oír el grito de guerra en Rabá de los hijos de
Amón. Será convertida en un montón de ruinas,
sus ciudades serán incendiadas e Israel tomará
por heredad a quienes los tomaron a ellos. Esto
dice Jehová.
2 »Pues bien, yo, el Señor, afirmo: Va a llegar el día en
que haré que la ciudad amonita de Rabá escuche el grito
de guerra; se convertirá en un montón de ruinas, y sus
poblaciones arderán en llamas. Entonces Israel recon-
quistará sus ciudades. Yo, el Señor, lo afirmo.

3 »¡Laméntate, Hesbón, porque Hai ha sido des-


truida! ¡Gritad, hijas de Rabá, vestíos de ropas
ásperas, haced lamentación y rodead los valla-
dos!, porque Milcom fue llevado en cautiverio
juntamente con sus sacerdotes y sus príncipes.
3  »¡Gime, Hesbón, pues Ai ha sido destruida! ¡Hagan
lamentación, mujeres de Rabá! ¡Vístanse de luto, gol-
péense el pecho! ¡Corran como locas, hiéranse el
cuerpo! Porque el dios Milcom va al destierro, con sus
sacerdotes y gente importante.
90
Jeremías 49:1-6

Profecía sobre los amonitas. Los amonitas han desposeído a


Gad y se han establecido en sus ciudades. Vienen días en que
Amón será derrotado; Israel tomará por heredad nuevamente
sus ciudades. Dios traerá sobre los amonitas espanto y los dis-
persará por las naciones. Pero, después de esto, hará volver a
los cautivos de los hijos de Amón.

4  ¿Por qué te glorías de los valles?, de tu fértil


valle, tú, hija rebelde, que confías en tus tesoros
y dices: “¿Quién vendrá contra mí?”
4 ¿Por qué te jactas de tu fuerza? Tu fuerza ya se aca-
ba, pueblo rebelde, que confías en las riquezas que has
juntado y dices: “¿Quién me va a atacar?”

5  He aquí yo traigo el miedo sobre ti, dice el


Señor, Jehová de los ejércitos, desde todos tus al-
rededores. Seréis lanzados cada uno de vosotros
hacia adelante, con violencia, y no habrá quien
acoja a los fugitivos.
5 Pues bien, de todas partes voy a enviar terror sobre
ti. Yo, el Señor todopoderoso, lo afirmo. Cada uno de
ustedes saldrá corriendo por su lado, y no habrá nadie
que los vuelva a reunir.

6 Después de esto, haré volver a los cautivos de


los hijos de Amón, dice Jehová.»
6 Pero después cambiaré la suerte de los amonitas. Yo,
el Señor, lo afirmo.»

91
Ayuda a su meditación

Juicio contra Amón (49:1-3)


Dios resiste a los que se aprovechan de las dificultades de otros para enrique-
cerse. Los amonitas son descendientes de Lot y tienen parentesco con Israel.
Ellos se establecieron en el lado oriental del Jordán, cerca de las tierras de Gad.
Sea por sus lazos consanguíneos o cercanía geográfica, debía estar en paz con
Israel, en lugar de atacar al pueblo de Dios constantemente. De hecho, Jefté
(uno de los jueces) y el rey Saúl tuvieron que defenderse de los ataques de los
amonitas (Jue. 10:6-9, 11:4-6; 1 S. 11:1-11). Después de que Tiglat-pileser III,
rey de Asiria, invadió Israel (el reino del norte), los amonitas se establecieron
en las tierras de Gad, gozando de gran prosperidad (v. 1). Por esto, tendrán que
rendir cuentas ante Dios y serán tomados como prisioneros de guerra. Aprove-
charnos de las dificultades de nuestros hermanos es provocar el enojo de Dios.
¿Por qué juzga Dios a Amón? ¿Qué puedo hacer por algún hermano en difi-
cultad?

La jactancia de Amón (49:4-6)


No podemos confiar en las riquezas y gloriarnos en ellas. Amón contaba con
un valle fértil apto para la agricultura y gozaba de gran abundancia económi-
ca. Rabá, su ciudad capital, era considerada como una ciudad inconquistable,
porque estaba ubicada a unos 850 metros de altura sobre el nivel del mar. Enal-
tecido por sus riquezas y su poder militar, el pueblo de Amón no medía sus
palabras. Por eso, el profeta anuncia que Dios traerá sobre ellos espanto de
todos sus alrededores y que serán arrancados de su lugar. Ni las riquezas ni un
gran ejército nos podrán garantizar la paz. Dios reprenderá a este pueblo altivo;
pero, después vendrá su restauración. Solo cuando nos arrepentimos de nuestra
soberbia y salimos del letargo espiritual para confiar solo en Dios, tendremos
paz y no temor.
¿En qué se gloriaba y confiaba Amón? ¿Cómo me esfuerzo para llenarme de
la Palabra de Dios y no terminar confiando en las riquezas y caer en el letargo
espiritual?

Dios mío, perdona la dureza de mi corazón, porque he tenido envidia


de mis consiervos en la fe y he tratado de aprovecharme de sus caídas
Una Carta para alcanzar éxito. Dejaré de ser egoísta, de buscar solo mi bienestar.
a Dios Honraré a Tus siervos, Padre, a todos aquellos a quienes Tú honras.
Ayúdame a no constituirme en Tu enemigo, menospreciando a Tus
siervos.
92
Ensayo para meditar Jeremías 49:1-6

La ropa del muerto


no tiene bolsillos

C
uando tienen el primer día de escuela, los escoceses tienen
la costumbre de escribir una nota y ponerla en el bolsillo del
uniforme de sus hijos, la cual dice : “Hijo, la ropa del muerto
no tiene ningún bolsillo. No olvides que el motivo principal por el
que uno es infeliz es por pasar más tiempo fabricando bolsillos para
guardar más de lo que tiene”.
Este mensaje de amor que los padres escriben es para evitar que
los niños crezcan como esclavos de la codicia. Ese es el “Proverbio
del bolsillo” que los niños crecen leyendo todos los días. Así, se
alejan de la tentación de la ambición y aprenden a agradecer lo que
Dios les dio.
Jesús señaló que las aves del cielo no recogen en graneros (Mateo
6:26). Aun así, todo el mundo continúa recogiendo, acumulando
y construyendo depósitos, porque no pueden confiar en Dios, o
sea, hogares para almacenar su desconfianza. ¿Está edificando un
granero más grande que su ser, impulsado por la falta de fe en Dios
y por la codicia?

A partir de ese día, Kim Keom-seop

Aplicación Personal

93
DOM

18 El Señor humilla
al altivo
Jeremías 49:7-22

La Biblia en un año: 7  Acerca de Edom. Así ha dicho Jehová de los


1 R. 21/ 1 Ts. 4/ Dn. 3/ Sal. 107
ejércitos: «¿No hay más sabiduría en Temán? ¿Se
agotó el consejo en los sabios? ¿Se corrompió
su sabiduría?

8 ¡Huid, volveos atrás, habitad en lugares profun-


dos, moradores de Dedán!, porque el quebranto
de Esaú traeré sobre él en el tiempo en que lo
castigue.

9  Si
vendimiadores hubieran venido contra ti,
¿no habrían dejado rebuscos? Si ladrones hu-
bieran venido de noche, ¿no habrían tomado lo
que les bastara?

10  Mas yo desnudaré a Esaú, pondré al descu-


bierto sus escondrijos y no podrá esconderse;
será destruida su descendencia, sus hermanos y
sus vecinos, y dejará de ser.

11 ¡Deja tus huérfanos, yo los criaré, y en mí con-


fiarán tus viudas!

12 »Así ha dicho Jehová: Los que no estaban con-


denados a beber la copa, la beberán ciertamente.
¿Y serás tú absuelto del todo? ¡No serás absuel-
to, sino que ciertamente la beberás! 

13 Porque por mí mismo he jurado, dice Jehová,


que espanto, afrenta, soledad y maldición será
Bosra, y todas sus ciudades serán ruinas para
siempre.»

14  He oído esta noticia: que de parte de Jehová


se había enviado un mensajero a decir a las na-
ciones: «¡Juntaos, venid contra ella, subid a la
batalla!»
94
Jeremías 49:7-22

Profecía sobre Edom. Dios quebrantará a Esaú; sus moradores


huirán por doquier. Su arrogancia y la soberbia de su corazón lo
engañó. Por eso, Dios los hará descender de la altura del monte.
Edom se convertirá en un desierto; todo aquel que pase por sus
tierras, se asombrará y se burlará de todas sus calamidades.

15  Te haré pequeño entre las naciones, menos-


preciado entre los hombres.

16  Te engañaron tu arrogancia y la soberbia de


tu corazón. Tú, que habitas en las hendiduras
de las peñas, que alcanzas las alturas del monte,
aunque eleves como el águila tu nido, de allí te
haré descender, dice Jehová.

17  «Edom se convertirá en espanto. Todo aquel


que pase por ella se asombrará, se burlará de to-
das sus calamidades. 

18  Como sucedió en la destrucción de Sodoma,


de Gomorra y de sus ciudades vecinas, dice
Jehová, tampoco allí habitará nadie, ningún ser
humano habitará en ella.

19 »Yo, como un león que sube de la espesura del


Jordán al verde prado, muy pronto los haré huir
de ella, y pondré en ella al que yo escoja, porque
¿quién es semejante a mí? ¿Quién me emplaza-
rá? ¿Quién será el pastor que pueda resistirme?

20 Por tanto, oíd el plan que Jehová ha acordado


acerca de Edom, y las decisiones que ha tomado
acerca de los moradores de Temán. Ciertamente,
arrastrarán a los más pequeños de su rebaño, y
los destruirán junto con sus pastizales.

21  Porel estruendo de la caída de ellos, la tie-


rra temblará, y el eco de su voz se oirá hasta en
el Mar Rojo.

22  Como un águila subirá y volará, y desplegará


sus alas contra Bosra. Aquel día el corazón de
los valientes de Edom será como el corazón de * Por falta de espacio se ha omitido
una mujer en angustias.» la versión “Dios Habla Hoy”

95
Ayuda a su meditación

Juicio contra Edom (49:7-22)


Vana es la sabiduría, si no hay temor de Dios. Por consejo de sabios, Edom sem-
braba en zonas montañosas de grandes alturas; pero no había quien temiera a
Dios. Los edomitas eran cercanos a los israelitas, por cuanto eran descendientes
de Esaú, hermano de Jacob. Sin embargo, afligieron y aborrecieron al pueblo
de Israel (Abd. 1:10-14); se creían indestructibles por sus ciudades fortificadas
en las alturas. Sin embargo, el profeta anuncia que Dios destruirá la sabiduría
y los consejos de Edom, y lo humillará por su soberbia. Enviará contra él a
Babilonia, ejército que luchará como león y juzgará como águila. No obstante,
los huérfanos y las viudas recibirán Su misericordia y confiarán en Dios. Dios
humilla al soberbio que se cree autosuficiente; pero ama y concede misericordia
a los humildes.
¿Cómo serán juzgados los edomitas por su soberbia y por confiar en su propia
sabiduría? ¿Qué ocurre cuando confiamos más en la sabiduría y las experien-
cias del mundo antes que en la Palabra de Dios?

Altar Comencemos con alabanza y oración. Compartamos acerca de nuestra semana,


familiar inclusive el agradecimiento por las cosas que Dios ha hecho.

1 Observación
¿Qué concepto tenían los edomitas de sí mismos,
por habitar en cavernas de peñas y en montes altos?
¿Qué hará Dios con ellos? (49:16-18)
Aplicación y Compartamos si alguna vez Dios me ha humillado
diálogo
por la soberbia de mi corazón. ¿Cuáles son los pasa-
jes bíblicos que me ayudan a no enaltecerme contra
Dios?

2 Observación
¿Qué simbolizan el león y el águila? ¿Cuáles son los
planes y propósitos de Dios para los habitantes de
Temán? (49:19-22)
Aplicación y ¿Por qué debemos ser más humildes, cuando ejer-
diálogo
cemos mayor influencia sobre otros? Compartamos
qué podemos hacer como familia con humildad, para
ser un canal de bendición para otros.

Compartamos las peticiones de oración individuales y seleccionemos los temas para orar
como familia durante toda la semana. Terminemos el devocional con la oración final.

96
Prédica del domingo

Título:

Pasaje:

Notas:

Intercesión por las naciones

Somalia se encuentra en un conflicto hace ya varias décadas, causado por


enfrentamientos tribales, por actos de matanza indiscriminada del grupo
terrorista Al-shabbaab y por anomalías meteorológicas. El gobierno no
ha podido ofrecer servicios públicos con eficiencia, ni presentar posibles
soluciones a las catástrofes naturales que han sufrido. Recientemente, se
han levantado jóvenes voluntarios que han logrado suplir la ausencia del
Estado. Oremos para que el gobierno de esta nación pueda mejorar su
servicio y mejore así la calidad de vida de los ciudadanos.

97
LUN

19 Juicio a las
naciones
Jeremías 49:23-39

La Biblia en un año: 23 Acerca de Damasco. «Hamat y Arfad se aver-


1 R. 22/ 1 Ts. 5/ Dn. 4/ Sal. 108-109
gonzaron porque oyeron malas noticias; se
derritieron en aguas de ansiedad, ¡no logran
sosegarse!

24  Damasco se desmayó, se dispuso a huir, le


tomó temblor y angustia, y se apoderaron de él
dolores como de una mujer que está de parto.

25  ¡Cómo abandonan la ciudad tan alabada, la


ciudad de mi gozo!

26  Por tanto, sus jóvenes caerán en las plazas, y


todos los hombres de guerra morirán en aquel
día, dice Jehová de los ejércitos.

27 En el muro de Damasco prenderé yo un fue-


go que consumirá las casas de Ben-adad.»

28 Acerca de Cedar y de los reinos de Hazor, aso-


lados por Nabucodonosor, rey de Babilonia. Así
ha dicho Jehová: «Levantaos, subid contra Cedar
y destruid a los hijos del oriente.

29 Sus tiendas y sus ganados tomarán. Sus corti-


nas, todos sus utensilios y sus camellos tomarán
para sí, y gritarán contra ellos: “¡Hay terror por
todas partes!”

30 ¡Huid, marchaos muy lejos, habitad en lugares


profundos, moradores de Hazor!, dice Jehová;
porque Nabucodonosor, rey de Babilonia, to-
mó consejo contra vosotros, y contra vosotros
ha preparado un plan.
98
Jeremías 49:23-39

El profeta Jeremías anuncia que el ejército de Damasco perecerá; sus


ciudades serán consumidas por fuego. Edar y Hazor serán asoladas y
saqueadas por Nabucodonosor (rey de Babilonia), y también sus tiendas,
sus ganados, sus cortinas y todos sus utensilios. Dios quebrará el arco
de Elam, y enviará en pos de ellos espada hasta acabar con ellos. Pero
acontecerá en los últimos días, que Él hará volver a los cautivos de Elam.

31  ¡Levantaos, subid contra una nación pacífica


que vive confiadamente, dice Jehová, que ni tie-
ne puertas ni cerrojos, que vive solitaria!

32 Sus camellos serán por botín y la multitud de


sus ganados por despojo. Los esparciré a todos
los vientos, dispersados hasta el último rincón;
de todos lados les traeré su ruina, dice Jehová.

33  Hazorserá guarida de chacales, quedará de-


solada para siempre. Nadie morará allí; ningún
ser humano habitará en ella».

34 Palabrade Jehová que vino al profeta Jeremías


acerca de Elam, al comienzo del reinado de
Sedequías, rey de Judá, diciendo: 

35  «Asíha dicho Jehová de los ejércitos: »Yo


quiebro el arco de Elam, parte principal de su
fortaleza.

36  Traeré sobre Elam los cuatro vientos desde


los cuatro puntos del cielo, y los aventaré a los
cuatro vientos. No habrá nación a donde no lle-
guen fugitivos de Elam.

37 Y haré que Elam se acobarde ante sus enemi-


gos y ante quienes buscan su vida. Traeré sobre
ellos mal y el ardor de mi ira, dice Jehová, y en-
viaré espada que los persiga hasta acabar con
ellos.

38 Yo pondré mi trono en Elam, y destruiré a su


rey y a sus príncipes, dice Jehová. 

39  Peroacontecerá en los últimos días, que yo * Por falta de espacio se ha omitido
haré volver a los cautivos de Elam, dice Jehová.» la versión “Dios Habla Hoy”

99
Ayuda a su meditación

El fin de Damasco (49:23-27)


Cuando se levante el fuego del juicio, este consumirá al instante toda jactancia y
gloria humana. Damasco, la ciudad capital de Siria, era el centro comercial y una
base militar de gran importancia. Hamat y Arfad eran también ciudades que re-
presentaban el imperio sirio. Siria amenazaba con crueldad no solo a Israel, sino
también a las naciones vecinas (Am. 1:3), además de pecar con su idolatría. El
nombre del rey sirio, Ben-adad, significa hijo del dios Hadad (tormenta). Aun-
que Dios mismo llama ‘ciudad alabada’ y ‘ciudad de mi gozo’ a Siria y Damasco,
declara juicio contra ellas, anticipando que serán reducidas a cenizas. Damasco
y el palacio de Ben-adad son destruidos por Babilonia, después de la caída de
Jerusalén en el año 581 a. C. Sean personas o naciones, si afligen a su prójimo,
serán reos de juicio divino.
¿Cuáles son las malas noticias que se oyen sobre Damasco, Hamat y Arfat?
¿Cuál es el secreto para seguir disfrutando de la gracia de Dios?

El fin de Cedar, Hazor, Elam (49:28-39)


Dios es soberano; Su poder no tiene fin. Tanto Cedar como Hazor eran nacio-
nes pequeñas. El pueblo de Cedar estaba conformado por los descendientes de
Ismael y se encontraba ubicado al nororiente de Israel. Ambas naciones eran
semi nómadas, buscaban el materialismo y adoraban ídolos. Vivían confiada-
mente en el desierto, sin puertas ni cerrojos. Pero Dios profetiza, a través de
Jeremías, que llamará a Babilonia para despojarlos de sus riquezas. En el caso de
Elam, se trata de un pueblo sin relación con Judá, ubicado en las zonas monta-
ñosas al oriente de Babilonia. Aunque se jacten de su poderío militar, serán des-
truidos por los caldeos. No obstante, en los últimos días (en el día del Mesías),
Elam será restaurado. Dios es juez y salvador; solo en Él debemos confiar hasta
la segunda venida de Cristo.
¿Qué fue anunciado sobre Elam en los últimos días? ¿Qué puedo hacer yo, por
la salvación de los pueblos no evangelizados?

Dios de los cielos, Tu Soberanía se extiende en todo el mundo; y me


Una Carta
cuidas a mí también con amor paternal. Tú eres el Rey, Dios soberano;
a Dios a Ti te doy toda mi alabanza, honra y gloria por los siglos de los siglos.
Andaré con temor, sabiendo que algún día, Tú me juzgarás por todas
mis palabras y obras.
100
Ensayo para meditar Jeremías 49:23-39

El único Soberano

U
na profesora que conozco pertenece a una familia de bien,
fue a una de las mejores universidades, se casó con un gran
hombre adinerado y vivió una vida envidiable. Nunca supo
lo que es la desesperación, ya que siempre era la mejor en todo y
conseguía lo que quería, y la vida de fe era un pasatiempo para ella.
Hasta que un día, su única hija contrajo una enfermedad descono-
cida y, a pesar de que habían probado de todo, seguía sin curarse.
Solo entonces aprendió que en la vida hay cosas que no salen como
uno desea. Y también entendió que ni el dinero, ni su doctorado,
ni su familia iban a poder salvar a su amada hija. En ese momento,
se postró y se arrepintió de la soberbia que le hacía creer que podía
vivir sin Dios.
En medio de la aflicción, una anciana fue a visitarla para orar por
ella. Aunque ella no tenía ningún don de sanidad y simplemente se
marchó luego de compartir el dolor de la niña y consolarla, la pe-
queña recuperó la vida después de su visita. A partir de entonces, la
profesora se transformó en una sierva del Señor que da testimonio
de Dios.
Obviamente, la inteligencia y el dinero son necesarios, pero Dios
es el único soberano de nuestras vidas. Por eso, es imposible alcan-
zar la vida, si no estamos en Cristo, donde corresponde. Aunque
tengamos otras cosas en abundancia, una vida nueva y la relación
con Dios comienzan únicamente en Jesús.

El coraje para andar por la oscuridad, Park Seong-keun

Aplicación Personal

101
MAR

20 Después
del juicio
Jeremías 50:1-10

La Biblia en un año: 1  Palabra que habló Jehová contra Babilonia,


2 R. 1/ 2 Ts. 1/ Dn.5/ Sal. 110-111
contra la tierra de los caldeos, por medio del
profeta Jeremías:
1 Mensaje acerca de Babilonia, país de los caldeos, que
el Señor comunicó por medio del profeta Jeremías:

2  «Anunciadlo en las naciones, hacedlo saber;


levantad también bandera, publicadlo y no lo en-
cubráis; decid: “¡Conquistada ha sido Babilonia!
¡Bel está avergonzado! ¡Merodac está deshe-
cho, destruidas sus esculturas, destrozados sus
ídolos!”
2 «Anuncien esto, denlo a conocer entre las naciones.
Levanten la señal de anuncio; no oculten nada. Digan:
“¡Babilonia fue tomada! ¡El dios Bel quedó en ridículo, el
dios Marduc está lleno de terror! ¡Sus ídolos, sus falsos
dioses, quedaron en ridículo y llenos de terror!”

3  ¡Porque ha subido contra ella una nación del


norte!, que hará de su tierra un objeto de espan-
to. No habrá hombre ni animal que en ella more;
todos han huido, se han marchado.
3 Porque del norte avanza contra ella una nación que
convertirá su país en un desierto. Nadie, ni hombres
ni animales, volverá a vivir allí, pues todos se irán
huyendo.»

4  »En aquellos días y en aquel tiempo, dice


Jehová, vendrán los hijos de Israel, ellos y los
hijos de Judá juntamente. Irán andando y lloran-
do, y buscarán a Jehová, su Dios.
4 El Señor dice: «En aquel tiempo, la gente de Israel y de
Judá vendrá llorando a buscarme a mí, el Señor su Dios.

5 Preguntarán por el camino de Sión, hacia don-


de volverán sus rostros, diciendo: “¡Venid y
unámonos a Jehová con un pacto eterno que ja-
más se eche en el olvido!”
5 Preguntarán por el camino de Sión, y hacia allá irán,
diciendo: “Vayamos al Señor, y unámonos con él en una
alianza eterna, que no se olvide nunca.”
102
Jeremías 50:1-10

Babilonia será destruida por una nación del norte. En aquel


tiempo, los hijos de Israel y de Judá acudirán nuevamente a
Dios con pacto eterno. Babilonia dice que no ha pecado, pues
fue culpa del pueblo de Dios el haberse apartado del Señor; pero
Dios se levantará y hará subir contra ellos grandes pueblos de
la tierra del norte y Caldea será su botín.

6  »Como ovejas perdidas era mi pueblo: sus


pastores las extraviaron, por los montes las des-
carriaron; anduvieron de monte en collado y se
olvidaron de sus rediles.
6 »Mi pueblo era como ovejas perdidas, mal guiadas por
sus pastores, que las dejaron perderse en los montes.
Iban de un monte al otro, y hasta olvidaron su corral.

7  Todos los hallaban, los devoraban; decían sus


enemigos: “No pecaremos, porque ellos pecaron
contra Jehová, morada de justicia, contra Jehová,
esperanza de sus padres.”
7  Sus enemigos, al encontrarlos, los devoraban y de-
cían: “No es culpa nuestra, porque ellos pecaron contra
el Señor, su pastizal seguro, la esperanza de sus
antepasados.”

8  »¡Huid de en medio de Babilonia, salid de la


tierra de los caldeos, sed como los machos ca-
bríos que van delante del rebaño!
8 »¡Huyan de Babilonia, del país de los caldeos! ¡Salgan
como guías al frente del rebaño!

9 Porque yo levanto y hago subir contra Babilonia


una reunión de grandes pueblos de la tierra del
norte; desde allí se prepararán contra ella, y será
conquistada. Sus flechas son como las de un va-
liente experto, que no volverá vacío.
9 Pues voy a hacer que un grupo de poderosos pueblos
del norte ataque al mismo tiempo a Babilonia. Se ali-
nearán y la conquistarán. Son guerreros expertos, que
disparan sus flechas sin fallar el tiro.

10 Y Caldea será para botín; todos los que la sa-


queen se saciarán, dice Jehová.
10 Saquearán a los caldeos; los saquearán hasta llenar-
se. Yo, el Señor, lo afirmo.

103
Ayuda a su meditación

Juntémonos a Jehová (50:1-5)


Dios utiliza el poder de este mundo para reprender a Su pueblo, pues quebran-
taron Su pacto y desobedecieron a Su Palabra. Dios utilizará la ambición y el
deseo de Babilonia de conquistar naciones, para juzgar a Judá por sus pecados.
Pero, cuando los caldeos se enaltezcan en su corazón como si fueran los jueces,
olvidando que no son más que una vara de castigo en la mano de Dios, enton-
ces Él levantará una nación del norte para herir a Babilonia. Conquistada será
su ciudad inconquistable; quebrados sus ídolos sin poder; serán avergonzados
por haber confiado en los dioses que no tienen poder para salvar. Con la caída
de Babilonia, Israel volverá a su tierra con lágrimas de gozo, para adorar solo
a Dios; y Dios establecerá pacto perpetuo con Su pueblo. No hay gozo más
grande que buscar y ser hallados por Dios.
¿Cómo se beneficiará Israel por la caída de Babilonia? ¿Qué deseará Dios de
mí, considerando mi relación con Él?

Ovejas perdidas y descarriadas (50:6-10)


Los líderes han sido llamados a guiar al pueblo por el camino correcto. En par-
te, fue por su responsabilidad que el pueblo de Dios fue llevado cautivo a las
naciones gentiles. Los pastores descuidaron su deber, haciendo errar al rebaño;
las ovejas se descarriaron del camino y, mientras andaban errantes, fueron cap-
turadas por las garras de animales salvajes. En lugar de acudir a Dios, su única
esperanza, el pueblo adoró a dioses en los montes y en los collados; por eso,
serán reprendidos y llevados cautivos a Babilonia. Pero Dios levantará a Per-
sia del Norte para destruir por completo a los caldeos; entonces, el pueblo de
Dios será libertado. Dios levanta y destruye naciones para cumplir Su perfecta
voluntad.
¿Por qué el pueblo de Dios es comparado con las ovejas perdidas y errantes?
¿Cómo puedo interceder para que los líderes de mi nación y comunidad sean
buenos pastores?

Dios mío, Tú eres mi buen y verdadero Pastor; y yo, una oveja des-
Una Carta
carriada. Gracias por hallarme y establecer conmigo un pacto eterno.
a Dios Cada vez que me sienta afligido por el pecado, recuérdame que el pacto
que has establecido conmigo es inquebrantable e incondicional. Me
levantaré del fracaso y del desánimo con fe, creyendo en Tus promesas.
104
Ensayo para meditar Jeremías 50:1-10

El nudo de la
aflicción y la vida

A
veces, Dios nos aflige para fortalecernos. Un buen boxea-
dor, por ejemplo, debe saber golpear y también saber recibir
golpes. Y, aunque en algún encuentro puede llegar a ganar
por knockout, lo más seguro es que no siempre sea así. Muchos han
ganado peleas, después de que reciben varios ataques seguidos del
oponente, porque logran soportar los golpes y esperar a que el rival
se canse, para luego derribarlo con un solo ataque. Por eso, para
ellos el entrenamiento para recibir golpes es tan importante como
el que hacen para darlos. O sea que, en cierto modo, el boxeo es
una competencia para ver quién tolera y resiste más. Y nosotros
también necesitamos fortalecer nuestra fe para soportar la aflicción.
Los largos y delgados bambúes no se caen, aunque sople un
viento fuerte, porque cada uno de los nudos que lo componen lo
sostienen firmemente. Para formar estos nudos, la caña de bambú
detiene su crecimiento por un tiempo, aunque esto implique que
su belleza se vea afectada, pues sabe que de lo contrario no podrá
resistirse al viento y superar el peligro que sobrevenga. Al igual que
estos, las aflicciones y los sufrimientos moldean nuestras vidas y
forman nudos que nos fortalecen. Los despidos, los divorcios, las
enfermedades, la pobreza, el dolor, el fracaso, etc., pueden lentifi-
car el proceso, pero cada nudo que se forma en esa etapa termina
haciéndonos más fuertes. Por lo tanto, cuando se enfrente a una
adversidad y esté acongojado, recuerde con confianza que Dios está
formando otro nudo en su vida que lo hará más firme.

Leer el desierto, Lee Jin-hee

Aplicación Personal

105
MIÉ

21 El perdón y
la gracia
Jeremías 50:11-20

La Biblia en un año: 11 »Cómo os alegrasteis, cómo os gozasteis des-


2 R. 2/ 2 Ts. 2/ Dn. 6/ Sal. 112-113
truyendo mi heredad, cómo os llenasteis cual
novilla sobre la hierba y relinchasteis cual los
caballos.
11 »Ustedes, caldeos, que saquearon mi pueblo, ¡alé-
grense y diviértanse! ¡Salten como una novilla en la
hierba! ¡Relinchen como caballos!

12 Vuestra madre se avergonzó mucho; confun-


dida quedó la que os dio a luz; será la última de
las naciones, convertida en desierto, sequedal y
páramo.
12 Pero su patria y su ciudad natal quedarán cubiertas
de vergüenza. Será la última de las naciones, un desier-
to seco y desolado.

13 Por la ira de Jehová no será habitada, sino que


será asolada por completo. Todo aquel que pase
por Babilonia se asombrará y se burlará de sus
calamidades.
13 Porque me enojaré y la dejaré sin habitantes, com-
pletamente convertida en un desierto. Todo el que pase
por allí quedará espantado al ver el castigo que recibió.

14  ¡Poneos en orden contra Babilonia, rodead-


la todos los que tensáis arco! ¡Tirad contra ella
y no escatiméis las flechas, porque pecó con-
tra Jehová!
14 »¡A sus puestos, arqueros, rodeen Babilonia!
¡Disparen contra ella todas sus flechas, porque pecó
contra mí, contra el Señor!

15  ¡Gritad contra ella, a su alrededor! ¡Se rin-


dió, han caído sus cimientos, derribados son sus
muros! ¡Ésta es la venganza de Jehová! ¡Tomad
venganza de ella; haced con ella como ella os
hizo!
15 ¡Lancen gritos de guerra por todos lados! ¡Babilonia
ya se rinde! ¡Cayeron las torres, se derrumbaron las mu-
rallas! ¡Ésta es mi venganza: vénguense de ella! ¡Hagan
con ella lo mismo que ella hizo!
106
Jeremías 50:11-20

Babilonia será la última de las naciones, pues será asolada y


avergonzada; Dios la juzgará por sus pecados. El rebaño desca-
rriado es Israel, el cual fue dispersado, devorado y deshuesado
primero por Asiria y luego por Babilonia, pero Dios permitirá que
Su pueblo regrese a su tierra. En aquel tiempo, Dios perdonará
su maldad y sus pecados.

16 Destruid en Babilonia al que siembra y al que


mete la hoz en el tiempo de la siega. Ante la
espada destructora, cada cual volverá el rostro
hacia su pueblo, cada cual huirá hacia su tierra.
16 No dejen en Babilonia a nadie que siembre o recoja
las cosechas. Al ver la guerra destructora, los extranjeros
volverán a su patria, cada cual huyendo hacia su tierra.

17  »Rebaño descarriado es Israel; leones lo dis-


persaron. »Primero lo devoró el rey de Asiria;
Nabucodonosor, rey de Babilonia lo deshuesó
después. 
17 »Israel es como una oveja perdida, perseguida por
leones. Primero se lo comió el rey de Asiria; después,
Nabucodonosor, rey de Babilonia, le royó los huesos.

18 Por tanto, así dice Jehová de los ejércitos, Dios


de Israel: Yo castigo al rey de Babilonia y a su
tierra, como castigué al rey de Asiria.
18 Por eso yo, el Señor todopoderoso, el Dios de Israel,
digo: Voy a castigar al rey de Babilonia y a su país, como
lo hice con el rey de Asiria. 

19  »Volveréa traer a Israel a su pastizal; pace-


rá en el Carmelo y en Basán, y en los montes de
Efraín y en Galaad se saciará su alma.
19 Haré que Israel vuelva a su tierra, y como una oveja
tendrá pastos abundantes en el Carmelo, en Basán, en
la región montañosa de Efraín y en Galaad. 

20  En aquellos días y en aquel tiempo, dice


Jehová, la maldad de Israel será buscada, y no
aparecerá; y los pecados de Judá, y no se halla-
rán; porque perdonaré a los que yo haya dejado.
20 Yo, el Señor, afirmo: En aquel tiempo, Israel y Judá
estarán libres de culpas y pecados, porque yo perdonaré
a los que deje con vida.

107
Ayuda a su meditación

Tomad venganza de Babilonia (50:11-16)


Somos la heredad de Dios, Su pueblo adquirido. Babilonia saqueó y llevó cau-
tivo al pueblo de Israel, pecando contra Jehová, dice en las Escrituras (v. 14).
De ninguna manera, pasará Dios por alto las iniquidades de los caldeos, así que
se vengará de ellos. Como mataron sin clemencia a pueblos de otras naciones,
ahora serán pisoteados cruelmente por los soldados persas; su tierra y sus ciu-
dades serán asoladas. Dios es justo; Él paga a cada uno conforme a Sus obras
(v. 15). Ciertamente no tardará Dios en castigar a las potestades que saquearon
y oprimieron a Su pueblo. Los enemigos del pueblo elegido son enemigos de
Dios; por tanto, encomendemos nuestra causa a Él y soportemos la aflicción
con paciencia.
¿Por qué Babilonia se ha hecho enemigo de Dios y recibirá su justa retribución?
¿Cómo influye en mi vida saber que he sido adquirido por Dios?

La restauración de Israel (50:17-20)


Dios puede revertir todas las situaciones, conforme a Su voluntad. Israel es
como un rebaño descarriado, dispersado por los leones. El primer león es el rey
asirio Sargón II; y el segundo, Nabucodonosor, el rey de Babilonia. Dios toma
al rey de Babilonia para castigar al rey de Asiria, quien con crueldad devoró a
Israel; pero luego levantará al rey de Persia para castigar al rey de Babilonia. Así
juzgará Dios a los enemigos de Israel; Su pueblo escogido volverá a su tierra,
y vivirá plenamente y en abundancia. Esta restauración se dará después de que
Dios los haya purificado de sus iniquidades. En el día de la restauración y de
salvación, experimentamos el perdón y la gracia perfecta de Dios. El propósito
del castigo de Dios es quitar los pecados en nosotros, para que alcancemos
perfección.
¿Por qué Dios restaurará a Israel en aquellos días? ¿Cuál es la esperanza que
me infunde ver la restauración de Israel?

Padre, confieso que Tu vara de corrección ha significado dolor en mi


Una Carta
vida, pero me ha ayudado a apartarme de mis pecados. Gracias, una
a Dios vez más, porque has cubierto todas mis iniquidades con la sangre pre-
ciosa de Jesucristo. Consagro mi vida como verdadero discípulo Tuyo,
recordando siempre Tu sublime gracia.
108
Ensayo para meditar Jeremías 50:11-20

El botón de “reinicio”
de mi vida

E
l arrepentimiento es una gran bendición que nos da Dios, a
través del cual nos acepta como Sus hijos, si abandonamos
nuestro vergonzoso antiguo ser y eliminamos el pecado, de-
jando de disciplinarnos por nuestra maldad. Sin embargo, nuestro
corazón corrupto siempre se niega a arrepentirse y nos hace pensar
cosas como: ‘¿No me volveré patético si me arrepiento?’, ‘no quiero
revelar la pobreza de mi ser’, etc. De hecho, cuando más educación
y bienes tenemos, es cuando se nos hace más difícil arrepentirnos.
No obstante, si nos presentamos ante la santidad de Dios, que-
damos reducidos a la verdad de nuestra naturaleza. Cuando nos
paramos delante del mundo eterno del Creador, solo somos seres
efímeros que desaparecen luego de unos instantes como la niebla.
Por lo tanto, no debemos fingir ante Dios y debemos dejar de opo-
nernos a Él por nuestro orgullo. Él envió a Su único Hijo al mun-
do, porque nos amó y dejó que muriera en la cruz. El Señor nos
dio la bendición de poder llamarlo “Abba Padre”, por eso, nuestra
respuesta debe ser entregarle toda nuestra fe, nuestra confianza y
nuestro amor.
Así como el ordenador tiene un botón de “reinicio” que apreta-
mos cuando sucede un error inesperado, Dios también nos dio uno
para nuestra vida, y debemos presionarlo cuando sintamos que la
vida fluye en el sentido equivocado. Este botón para reiniciar la vida
es mostrarle a Dios todo nuestro ser tal como es. Si lo hacemos, Él
nos renovará y nos guiará por un nuevo camino.

El amor siempre es correcto, Kim Ji-cheol

Aplicación Personal

109
JUE

22 El instrumento
del furor
Jeremías 50:21-32

La Biblia en un año: 21  »¡Sube contra la tierra de Merataim, contra


2 R. 3/ 2 Ts. 3/ Dn. 7/ Sal. 114-115
ella y contra los moradores de Pecod! ¡Destruye
y mata en pos de ellos, dice Jehová, y haz con-
forme a todo lo que yo te he mandado!»
21 »¡Ataquen la región de Merataim y a los habitan-
tes de Pecod! ¡Persíganlos, destrúyanlos por completo!
¡Cumplan mis órdenes en todo! Yo, el Señor, lo ordeno.»
22 ¡Estruendo de guerra se oye en la tierra, y de
gran quebrantamiento!
22 En el país se oye estruendo de batalla, de gran
destrucción.
23 ¡Cómo fue cortado y quebrado el martillo de
toda la tierra! ¡Cómo se convirtió Babilonia en
objeto de espanto entre las naciones!
23 ¡Babilonia, el martillo del mundo entero, ha quedado
roto, hecho pedazos! ¡Qué horror sienten las naciones
al ver lo que a Babilonia le ha pasado!

24  «Te puse lazos, y sin darte cuenta caíste en


ellos, Babilonia; fuiste hallada, y aun apresada,
porque provocaste a Jehová.»
24 Tú misma, Babilonia, te tendiste una trampa, y sin
darte cuenta caíste en ella. Quedaste presa, atrapada,
porque te opusiste al Señor.

25 Abrió Jehová su tesoro y sacó los instrumen-


tos de su furor; porque ésta es obra de Jehová,
Dios de los ejércitos, en la tierra de los caldeos.
25 El Señor abrió el depósito de sus armas y sacó las
armas de su ira, porque el Señor todopoderoso tiene
una tarea que llevar a cabo en la nación de los caldeos.

26 Venid contra ella desde el extremo de la tierra,


abrid sus almacenes, convertidla en un montón
de ruinas y destruidla. ¡Que no le quede nada!
26 ¡Atáquenla por todas partes! ¡Abran sus graneros!
¡Amontonen a la gente y destrúyanla! ¡Que no quede
nadie con vida!

27  Matad a todos sus novillos; que vayan al ma-


tadero. ¡Ay de ellos, pues ha venido su día, el
tiempo de su castigo!
110
Jeremías 50:21-32

Estruendo de guerra se oye en la tierra, de gran destrucción.


Jeremías profetiza que se oirán las voces de los que huirán de la
tierra de los caldeos para dar en Sion las nuevas de la retribución
de Dios. Contra Jehová se ensoberbeció Babilonia; así que Él
la reprenderá. En aquel día, sus jóvenes caerán en sus plazas y
todos sus hombres de guerra serán destruidos.

27 ¡Maten a todos sus soldados, envíenlos al matade-


ro! ¡Ay de ellos! ¡Les llegó su día, la hora de su castigo!

28 Se oye la voz de los que huyen y escapan de la


tierra de Babilonia, para dar en Sión las noticias
de la retribución de Jehová, nuestro Dios, de la
venganza de su Templo.
28 (Gente escapada de Babilonia llega a Sión contan-
do cómo el Señor nuestro Dios ha dado su merecido a
Babilonia por lo que ella hizo con el templo.)

29  «Juntad flecheros contra Babilonia, a todos


los que tensan arco; acampad alrededor de ella,
y que de ella no escape nadie. Pagadle según su
obra; conforme a todo lo que ella hizo, haced
con ella, porque contra Jehová se ensoberbeció,
contra el Santo de Israel.
29 «¡Llamen a todos los arqueros, para que ataquen a
Babilonia! ¡Acampen alrededor de la ciudad para que na-
die escape! ¡Páguenle como merece! ¡Hagan con ella lo
mismo que ella hizo! Porque ha sido insolente conmigo,
con el Señor, el Dios Santo de Israel.

30 Poreso, sus jóvenes caerán en sus plazas, y to-


dos sus hombres de guerra serán destruidos en
aquel día, dice Jehová.
30 Por eso sus jóvenes caerán muertos por las calles
y todos sus guerreros morirán en ese día. Yo, el Señor,
lo afirmo.»

31  »Nación soberbia, yo estoy contra ti, dice el


Señor, Jehová de los ejércitos; porque tu día ha
venido, el tiempo en que te castigaré.
31 El Señor todopoderoso dice: «Nación insolente,
yo estoy en contra tuya; ha llegado tu día, la hora de
castigarte.

32  La nación soberbia tropezará y caerá, y no


tendrá quien la levante. Prenderé fuego en sus
ciudades y quemaré todos sus alrededores.
32 Nación insolente, tropezarás y caerás, y nadie te le-
vantará. Prenderé fuego a todas tus ciudades, y ese
fuego destruirá todos tus contornos.»

111
Ayuda a su meditación

Dios contra Babilonia (50:21-28)


Incluso la nación más poderosa e influyente del mundo se encuentra bajo la
potestad y la autoridad del Soberano. Babilonia — la máxima potencia mundial
de ese entonces —, es como un martillo que será cortado y quebrado, después
de haber destruido a las naciones. Será castigado a su vez por los instrumentos
del furor de Dios, por provocar Su ira al afligir al pueblo escogido y por profa-
nar Su santo Templo adorando ídolos. No hay necedad mayor que confrontar
al Todopoderoso. Los caldeos que logren huir y escapar, darán testimonio de la
destrucción ocasionada por la venganza de Dios. No hay ningún pecado encu-
bierto que no salga a la luz delante de Dios (v. 24). Ningúna sentencia de Dios
es injusta.
¿Por qué sacará Dios de Su tesoro los instrumentos de Su furor? ¿Qué debo
recordar cuando vea la prosperidad de los impíos?

Dios resiste a los soberbios (50:29-32)


Un corazón enaltecido y que se sobreestima, recibe juicio divino. La soberbia
de Babilonia era tan notoria, que encontramos tres referencias sobre ella en
un pasaje bíblico de pocos versículos (vv. 29, 31-32). Dios levantará flecheros
por doquier, para atacar a Babilonia como nunca, por enorgullecerse a raíz de
su poder militar; esa soberbia no les permitió adorar al Rey de reyes, sino que
menospreciaron al único Dios vivo entre los dioses muertos. Todo aquel que se
cree poderoso y fuerte será derrotado y avergonzado por el Señor, la verdadera
Fuente de todo poder y autoridad. Dios resiste a los soberbios y da gracia a los
humildes (v. 31; 1 P. 5:5). Por tanto, humillémonos de corazón, para no caer en
la soberbia debido a nuestras riquezas, posición o entorno.
¿Cuál es la frase que se repite en cuanto a Babilonia? ¿Qué decisión debo
tomar para no caer en la soberbia?

Señor, reconozco que en lugar de confiar cada día más en Ti y gozar de


Una Carta
libertad, he caído en confusión y en adversidad debido a mi soberbia
a Dios y codicia. Nadie puede ocultarse de Tu Presencia. Deseo permanecer
bajo Tu gracia; quebranta mi ego y la soberbia de mi corazón con Tu
poder y misericordia.
112
Ensayo para meditar Jeremías 50:21-32

Transformar al mundo

U
na vez tuve una larga conversación con el dueño de una ho-
nesta empresa mediana, y me explicó que la mayor dificultad
que tuvo en sus inicios fue la lucha con las grandes empresas.
Por eso, estableció que al contratar pequeñas compañías les pagaría
a la semana en efectivo, para no perjudicarlos con un pagaré, y que
calcularía por precio unitario, para que estas pudieran obtener más
del 15 % de ganancias. Me aseguró que al cumplir con esta norma
como cristiano, sorprendentemente logró formar sólidas relaciones
sin ninguna disputa legal con sus subcontratistas.
En el mundo, quien tiene poder busca hacer uso de este sin com-
partirlo o servir a los demás. Un ejemplo de esto fue la crucifixión
de Jesús. En ese momento, utilizaron la autoridad para acallar Su
influencia, mientras que el Señor jamás usó Su poder y, por el con-
trario, los amó. Además, murió despojándose de todo, para hacer
la voluntad de Dios y por amor al hombre. Entonces, el mundo
comenzó a cambiar por aquellos que quedaron conmovidos por su
amor. O sea que lo que transforma al mundo no es el poder, sino el
amor. Esto quiere decir que la felicidad nos llega cuando abandona-
mos el poder, dejando que el amor de Jesús domine nuestras vidas.

El amor es lo más importante, Kim Byung-sam

Aplicación Personal

113
VIE

23 El plan perfecto
de salvación
Jeremías 50:33-46

La Biblia en un año: 33  »Así ha dicho Jehová de los ejércitos:


2 R. 4/ 1 Ti.1/ Dn. 8/ Sal. 116
Oprimidos fueron los hijos de Israel y los hijos
de Judá juntamente; todos los que los tomaron
cautivos los retuvieron y no los quisieron soltar.

34 El redentor de ellos es el Fuerte (Jehová de los


ejércitos es su nombre). De cierto defenderá la
causa de ellos, para hacer que repose la tierra y
que se turben los moradores de Babilonia.

35  »Espada contra los caldeos, dice Jehová, y


contra los moradores de Babilonia, contra sus
príncipes y contra sus sabios.

36  Espadacontra los adivinos, y se entonte-


cerán; espada contra sus valientes, y serán
quebrantados.

37 Espada contra sus caballos, contra sus carros


y contra todo el pueblo que está en medio de
ella, y serán como mujeres; espada contra sus
tesoros, y serán saqueados.

38  Sequedad sobre sus aguas, y se secarán; por-


que es tierra de ídolos, y se entontecen con sus
ídolos grotescos.

39  »Portanto, allí morarán fieras del desierto y


chacales; morarán también en ella polluelos de
avestruz; nunca más será poblada ni se habitará
por generaciones y generaciones.
114
Jeremías 50:33-46

Jehová de los ejércitos aboga por la causa de los hijos de Israel


y de Judá, quienes están oprimidos y cautivos. Dios enviará
espada y hambre contra los caldeos, de manera que nunca más
serán pobladas sus ciudades. Un pueblo del norte que maneja
arco y lanza atacará con crueldad a Babilonia; al grito de los
caldeos temblará la tierra.

40  Como en la destrucción que Dios hizo de


Sodoma y de Gomorra y de sus ciudades veci-
nas, dice Jehová, así nadie morará allí, ningún ser
humano habitará en ella.

41 »Viene un pueblo del norte, una gran nación,


y muchos reyes se levantarán de los extremos
de la tierra.

42  Arco y lanza manejarán; serán crueles y no


tendrán compasión. Su voz rugirá como el mar,
y montarán a caballo. ¡Se prepararán contra ti co-
mo hombres a la pelea, hija de Babilonia!

43 Oyó la noticia el rey de Babilonia y sus manos


se debilitaron; angustia lo tomó, dolor como el
de una mujer de parto.

44  »Ciertamente yo, como león que sube de la


espesura del Jordán al verde prado, muy pronto
los haré huir de ella, y pondré en ella al que yo
escoja, porque ¿quién es semejante a mí? ¿Quién
me emplazará? ¿Quién será el pastor que pue-
da resistirme?

45 Por tanto, oíd el plan que Jehová ha acordado


contra Babilonia, y las decisiones que ha toma-
do contra la tierra de los caldeos: Ciertamente,
arrastrarán a los más pequeños de su rebaño y
los destruirán junto con sus pastizales.

46 Algrito de la conquista de Babilonia la tierra * Por falta de espacio se ha omitido


tembló, y el clamor se oyó entre las naciones.» la versión “Dios Habla Hoy”

115
Ayuda a su meditación

Espada contra Babilonia (50:33-40)


Nadie es más fuerte que nuestro Dios, Jehová de los ejércitos, poderoso en ba-
talla, diestro en la guerra. Él mismo peleará por Su pueblo escogido; no habrá
paz para Sus adversarios. Jeremías anuncia que la espada de Dios caerá contra
los príncipes y todos los moradores de la sociedad; contra los caballos y sus
carros; y que los tesoros de Babilonia serán saqueados. Definitivamente será
terrible el juicio de Dios; habrá hambre en las ciudades; sus tierras quedarán sin
moradores, solo habrá fieras del desierto. Así serán juzgados con justicia, por
cuanto han tomado cautivo al pueblo santo de Dios y no los quisieron soltar
(v. 33). Nosotros somos el pueblo amado de Dios. Él ve nuestra aflicción, oye
nuestro clamor y es nuestro Salvador, quien nos rescata del sufrimiento (Éx.
3:7-8).
¿Por qué Dios lucha contra Babilonia? ¿En qué momentos concretamente siento
que Dios pelea por mí?

Oíd la determinación de Dios (50:41-46)


Dios es soberano sobre el destino de todos los hombres y las naciones; Él le-
vanta, prospera y destruye, conforme a Su voluntad. Dios levantará un pueblo
del norte, una nación grande, cuyos hombres manejarán arco y lanza y atacarán
a Babilonia para saquearla sin compasión. Cuando el rey de Babilonia oye la
noticia y la crueldad que se avecina, se angustia con dolor como una mujer en
trabajo parto. Así expulsará Dios a los moradores de Babilonia y pondrá en su
lugar a los que Él quiera. Juicio divino y sin misericordia se desatará, para poner
fin a la violencia de Babilonia. Los pensamientos de Dios son más grandes y
altos que los nuestros. Reconozcamos que los pensamientos de Dios siempre
son correctos y sometámonos a Su perfecta y santa voluntad.
¿Qué planes tiene Dios respecto a Babilonia? ¿Cómo cambiaría mi vida si
confiara más en Dios, cuyos pensamientos sobrepasan los míos?

Padre, Tú eres soberano. Aunque un ejército de enemigos acampe


contra mí, no temeré; por cuanto confío en Tu nombre por sobre todas
Una Carta
a Dios
las cosas. En Ti he hallado verdadera paz y gozo. Clamaré a Tu nombre,
Dios, que peleas por mí. Fortalece mi fe y mi vida, hasta que alcance
la victoria final.
116
Ensayo para meditar Jeremías 50:33-46

El Dios de lo inesperado

T
uvimos muchas dificultades a partir de la decisión de instalar
una fábrica para los desertores norcoreanos. Cuando presen-
tamos el plan de inaugurar una empresa que concediera prés-
tamos a la gente necesitada para que iniciaran su propio empren-
dimiento, todos dijeron que era una locura. Tanto los desertores,
que eran quienes recibirían el crédito, como los fieles de la iglesia
y el gobierno. Hasta se complicó la fábrica de cajas que habíamos
comenzado y tuvimos que superar miles de dificultades. Era tal la
adversidad a la que me enfrentaba, que quería huir. Pero, en el peor
momento, Dios me consoló a través de un pastor mentor que me
aseguró: “Si puedes planificarlo todo, no es un camino difícil. Con
lo mucho que estás sufriendo, debe ser entonces el llamado correc-
to, porque el camino de la vida es el angosto. Aunque creas que no
puedes hacerlo, debes hacerlo, así que confía en Dios y Él peleará
por ti”.
Entonces, saqué fuerzas como puede y continué un año más, y
los resultados fueron impresionantes. El gobierno y la sociedad lla-
maban a nuestro emprendimiento la “alternativa de esta era” y co-
menzaron a estudiar nuestro modelo, y luego de tres años recibimos
una mención del presidente. Aún recuerdo el miedo que me invadía
cada mañana en el culto matutino que teníamos junto a los miem-
bros de nuestro grupo, pero oraba y confiaba más todavía. Con
el tiempo nos convertimos en el ejército del Señor, pudimos ser
testigos de Su obra y Dios nos mostró una vez más la gracia de lo
inesperado, cuando todos se burlaban diciendo que fracasaríamos.

Un final inesperado, Kim Beom-seok

Aplicación Personal

117
SÁB

24 La venganza
del Señor
Jeremías 51:1-14

La Biblia en un año: 1 Así ha dicho Jehová: «Yo levanto un viento des-


2 R. 5/ 1 Ti.2/ Dn. 9/ Sal. 117-118
tructor contra Babilonia y contra sus moradores
que se levantan contra mí.

2  Enviaré a Babilonia aventadores que la avien-


ten, y vaciarán su tierra; porque se pondrán
contra ella de todas partes en el día del mal.

3 Ordenaré al flechero que tensa su arco y al que


se enorgullece de su coraza, que no perdonen
a sus jóvenes y que destruyan todo su ejército.

4  Caeránmuertos en la tierra de los caldeos y


alanceados en sus calles.

5  Porque Israel y Judá no han enviudado de su


Dios, Jehová de los ejércitos, aunque su tierra
fue llena de pecado contra el Santo de Israel.

6 »¡Huid de en medio de Babilonia! ¡Poneos a sal-


vo, para que no perezcáis a causa de su maldad!,
porque es el tiempo de la venganza de Jehová:
él va a darle su merecido.

7 Una copa de oro que embriagó a toda la tierra


fue Babilonia en la mano de Jehová. De su vino
bebieron los pueblos; se aturdieron las naciones.

8 ¡De repente cayó Babilonia y se hizo pedazos!


¡Gemid por ella! Tomad bálsamo para su dolor:
quizá sane.»
118
Jeremías 51:1-14

En el día de la venganza de Dios, Babilonia será destruida. El


pueblo de Dios tendrá que huir y volver a su tierra natal para no
perecer. Dios levantará a los reyes de Media para vengarse de
Su templo. Pronto, vendrán muchos hombres como langostas y
levantarán contra Babilonia gritería de victoria.

9  Curamos a Babilonia, pero no ha sanado.


¡Dejadla ya, y vayámonos cada uno a nuestra
tierra, porque ha llegado hasta el cielo su juicio
y se ha alzado hasta las nubes!

10  Jehová
sacó a luz nuestras justicias; venid y
contemos en Sión la obra de Jehová, nuestro
Dios.

11 ¡Limpiad las flechas! ¡Embrazad los escudos!


Jehová ha despertado el espíritu de los reyes de
Media, porque contra Babilonia es su pensa-
miento, para destruirla. Porque la venganza es
de Jehová, la venganza por su templo.

12  ¡Levantad bandera sobre los muros de


Babilonia, reforzad la guardia, poned centine-
las, preparad emboscadas!, porque Jehová planeó
y va a poner por obra lo que ha dicho contra los
moradores de Babilonia.

13  Tú, la que moras entre muchas aguas, rica


en tesoros: ha llegado tu fin, la medida de tu
codicia.

14  Jehováde los ejércitos juró por sí mismo,


diciendo: «Yo te llenaré de hombres como de
langostas, y levantarán contra ti gritería de
triunfo.»
119
Ayuda a su meditación

Juicio contra Babilonia (51:1-10)


Toda potestad y autoridad de este mundo es temporal; a su tiempo, llegará a su
fin. Después de haber alcanzado su apogeo, Babilonia será juzgada por Dios.
Aunque tuvo abundancia en todo, vaciarán su tierra como si la hubieran aven-
tado; todo su poderoso ejército será exterminado. Ni el bálsamo para el dolor
logrará restaurar y sanar su imperio. En el día de la venganza de Dios, el pueblo
que vuelva a su tierra natal se salvará; pero aquellos que permanecen en sus
casas, perecerán. En aquel día, Israel volverá a Sion a proclamar a las naciones
las grandezas de Dios. El Señor no descansará hasta salvar a Su pueblo y dará a
conocer Su justicia por medio del juicio contra las naciones.
¿Cuál era el plan de Dios hacia Israel y Judá, pese a su rebeldía y desobe-
diencia constantes? ¿Cómo puedo anunciar al mundo la gracia que Dios me
ha concedido?

Venganza del Templo de Dios (51:11-14)


Los hombres confían en las riquezas, pero ellas no traen salvación. Jeremías
profetiza que Dios utilizará a los reyes de Media para destruir a Babilonia (Dn.
5:30-31); así se vengará Dios de los caldeos por haber destruido Su santo Tem-
plo. La nación que llegó a reinar sobre el mundo entero, gracias a la ayuda de
Dios, estará rodeada de sus enemigos, los cuales lograrán destruirla. Ni los in-
vencibles muros de la ciudad, ni los muchos tesoros que ha acumulado ‘entre
muchas aguas’, la guardará en el día del juicio. Aunque el poder de las riquezas
prometa mucho, no sirve de nada ante el juicio del Todopoderoso. El que confía
en sus propias riquezas, perecerá; como los muchos tesoros no pudieron salvar
a Babilonia. Busquemos el reino de Dios y no los bienes materiales que pronto
perecen.
¿Por qué Dios dispuso la destrucción de Babilonia? ¿Cuál será el fin de los que
confían en las riquezas de este mundo?

Tú eres el Juez justo; no hay nación ni potestad que pueda huir de Tus
juicios. Tú eres el Todopoderoso y desde Tu trono gobiernas con sobe-
Una Carta
a Dios
ranía absoluta sobre todo lo creado. A Ti te adoraré siempre. Como hijo,
me comprometo a obedecer Tu eterna voluntad; dame valor y fuerza
para poder lograrlo, pese a mis debilidades.
120
Ensayo para meditar Jeremías 51:1-14

La verdadera riqueza

H
e conocido a miles de personas que piensan que el dinero es
la solución a todos los males del mundo y que sacrificarían
lo que fuera necesario por sus bienes, salvo sus propias vidas
de lujo. Algunos han perdido la salud y las relaciones significativas,
por perseguir dinero; otros, también han renunciado al amor por
Dios y sus seres amados, por el éxito o un simple bono. La psicó-
loga Madeline Levine estudió a los jóvenes de clase alta y afirma
lo siguiente en su libro El precio del privilegio: “El nuevo grupo en
riesgo son los adolescentes de familias adineradas con mayor nivel
educativo. A pesar de la ventaja económica y social que poseen, los
jóvenes de este grupo muestran más tendencia a sufrir depresión,
uso de sustancias, ansiedad, problemas físicos y niveles más eleva-
dos de infelicidad”.
¿Cómo es posible que la riqueza, considerada por muchos como
la respuesta a todos los problemas del mundo, sea justamente la raíz
del problema? El asunto es la actitud con la que tratamos al dinero.
Solo Jesús es la solución que debemos perseguir para alcanzar la
estabilidad y el reconocimiento, no la fortuna material; si se vacían
nuestras almas, se distorsiona también el concepto y la experiencia
sobre la riqueza. La única manera de llenar nuestro espíritu, que
fue creado a imagen y semejanza de Dios, es con Jesús. Por eso,
conoceremos el verdadero gozo, cuando nos llenemos de un tesoro
genuino llamado verdad, hermosura, bendición, amor y perdón de
Jesús. Solo así recibiremos Su personalidad amorosa, generosa y
dispuesta a sacrificarse.

Jesús por fuera de los límites, Scott Sauls

Aplicación Personal

121
DOM

25 El Señor es
nuestra porción
Jeremías 51:15-24

La Biblia en un año: 15 Él es el que hizo la tierra con su poder, el que


2 R. 6/ 1 Ti.3/ Dn. 10/ Sal. 119:1-24
afirmó el mundo con su sabiduría y extendió los
cielos con su inteligencia.
15 El Señor, con su poder, hizo la tierra; con su sabiduría
afirmó el mundo; con su inteligencia extendió el cielo.

16  A su voz se producen tumultos de aguas en


los cielos; él hace subir las nubes desde lo último
de la tierra. Él trae la lluvia con los relámpagos
y saca el viento de sus depósitos.
16 Con voz de trueno hace rugir el agua en el cielo, hace
subir las nubes desde el extremo de la tierra, hace brillar
los relámpagos en medio de la lluvia y saca el viento de
donde lo tiene guardado.

17  Todo hombre se ha vuelto necio, carece de


conocimiento. Y todo artífice se avergüenza de
su escultura, porque mentira es su ídolo, no tie-
ne espíritu.
17 Necio e ignorante es todo hombre. Los ídolos de-
fraudan al que los fabrica: son imágenes engañosas y
sin vida;

18  Vanidad son y obra digna de burla, que en el


tiempo del castigo perecerán.
18 son objetos sin valor, ridículos, que el Señor, en el
juicio, destruirá.

19  No es como ellos la porción de Jacob, por-


que él (Jehová de los ejércitos es su nombre) es
el formador de todo, e Israel es el cetro de su
herencia.
19 ¡Qué diferente es el Dios de Jacob, creador de todo
lo que existe! Él escogió a Israel como su propiedad. El
Señor todopoderoso: ése es su nombre.
122
Jeremías 51:15-24

Dios hizo la tierra con Su poder y sabiduría; pero el hombre se


ha envanecido, no tiene ciencia y venera sus esculturas para su
propia vergüenza. Vanidad son los dioses falsos. Pero Dios es la
porción de Jacob y el Señor de señores. Babilonia es el martillo
de Dios y ha destruido naciones, pero será quebrantada por todo
el mal que ha hecho en Sion.

20 «Martillo sois para mí, y armas de guerra: por


medio de ti quebrantaré naciones, y por medio
de ti destruiré reinos.
20 «¡Babilonia, tú eres mi mazo, mi arma de guerra!
Contigo destrozo naciones y destruyo reinos.

21 Por medio de ti quebrantaré caballos con sus


jinetes, y por medio de ti quebrantaré carros con
quienes los montan.
21 Contigo destrozo caballos y jinetes, carros y cocheros.

22 Asimismo por medio de ti quebrantaré a hom-


bres y a mujeres; por medio de ti quebrantaré a
viejos y a jóvenes; por medio de ti quebrantaré
a muchachos y a muchachas.
22 Contigo destrozo hombres y mujeres, ancianos y jó-
venes, muchachos y muchachas.

23 También por medio de ti quebrantaré a pasto-


res con sus rebaños; por medio de ti quebrantaré
a labradores con sus yuntas; y a jefes y a prínci-
pes quebrantaré por medio de ti.
23 Contigo destrozo pastores y rebaños, labradores y
bueyes, gobernadores y funcionarios.

24 »Yo pagaré a Babilonia y a todos los morado-


res de Caldea todo el mal que ellos hicieron en
Sión delante de vuestros ojos, dice Jehová.
24 »Pero ante los propios ojos de ustedes pagaré a
Babilonia y a todos los caldeos como merecen, por el
mal que hicieron a Sión. Yo, el Señor lo afirmo.

123
Ayuda a su meditación

Dios es la porción de Jacob (51:15-24)


La sabiduría y el poder de Dios son ilimitados. Los necios confían en ídolos de
oro y de plata, imágenes sin vida que no podrán salvarles en el día del juicio;
pero la porción de Israel es el Creador, poderoso y sabio. Babilonia ha sido
martillo en la mano de Dios, para quebrantar naciones y reinos; pero después
que haya acabado toda Su obra, tendrá que pagar el precio de su idolatría y de la
violencia contra Sion. Aunque Babilonia sea el conquistador, perecerá por ado-
rar ídolos; pero Israel alcanzará misericordia, pese a la multitud de sus pecados,
por haber tomado a Dios como su porción. Ningún ídolo sin vida del mundo
podrá guardarnos del mal; solo en Dios confiamos, porque Él es nuestra por-
ción eterna, el Creador y Soberano.
¿Cuál es la porción de Babilonia y la de Israel? ¿A qué ídolo debo renunciar
confesando que Dios es mi porción?

Altar Comencemos con alabanza y oración. Compartamos acerca de nuestra semana,


familiar inclusive el agradecimiento por las cosas que Dios ha hecho.

1 Observación
¿Cómo es Dios, la porción de Jacob? ¿En qué se
diferencia Dios de los ídolos venerados por los cal-
deos? (51:15-19)

Aplicación y ¿Tenemos como porción nuestra y eterna a Dios?


diálogo
Compartamos la esperanza que nos infunde saber
que somos pueblo adquirido por Dios.

2 Observación
¿Cómo utilizó Dios a Babilonia? (51:20-23) ¿Cómo
será juzgada Babilonia por la violencia contra Sion?
(51:24)

Aplicación y Dios juzga a los que han cometido maldad. ¿Cómo


diálogo
debemos andar delante de Dios, sabiendo que Él da
el pago justo por nuestras obras?

Compartamos las peticiones de oración individuales y seleccionemos los temas para orar
como familia durante toda la semana. Terminemos el devocional con la oración final.

124
Prédica del domingo

Título:

Pasaje:

Notas:

Intercesión por las naciones

Las organizaciones ambientales señalan que el síndrome respiratorio de


Oriente Medio (SROM), el síndrome respiratorio agudo grave (SARS), el
coronavirus (COVID-19) y otras enfermedades contagiosas de zoonosis
(que se transmiten entre animales y seres humanos) podrían ser producto
del cambio climático. Las probabilidades de contagio han aumentado por
la destrucción ambiental y la invasión humana a los hábitats animales.
Pidamos a Dios que nos dé sabiduría para preservar Su creación.

125
LUN

26 Dios promete
venganza
Jeremías 51:25-40

La Biblia en un año: 25  Ciertamente


yo, dice Jehová, estoy contra ti,
2 R. 7/ 1 Ti. 4/ Dn. 11/ Sal. 119:25-48
monte destructor que destruiste toda la tierra.
Extenderé mi mano contra ti, te haré rodar de las
peñas y te reduciré a un monte quemado.

26 Nadie tomará de ti piedra para esquina ni pie-


dra para cimiento, porque serás una desolación
eterna, ha dicho Jehová.

27  »¡Alzadbandera en la tierra, tocad trompeta


en las naciones! ¡Preparad pueblos contra ella,
juntad contra ella los reinos de Ararat, de Mini
y de Askenaz! ¡Nombrad contra ella un capitán,
haced subir caballos como langostas erizadas!

28  ¡Preparad contra ella naciones, los reyes de


Media, sus capitanes, todos sus príncipes y todo
territorio de su dominio!»

29 Tiembla la tierra y se aflige, porque son con-


firmados contra Babilonia los planes de Jehová
para convertir la tierra de Babilonia en un desier-
to donde no quede morador alguno.

30 Los valientes de Babilonia dejaron de pelear,


se encerraron en sus fortalezas; les faltaron las
fuerzas, se volvieron como mujeres; incendiadas
están sus casas, rotos sus cerrojos.

31  Correo se encuentra con correo, mensajero


se encuentra con mensajero para anunciar al rey
de Babilonia que su ciudad es tomada por to-
das partes.

32  Losvados fueron tomados, los baluartes in-


cendiados y se aterraron los hombres de guerra.
126
Jeremías 51:25-40

Dios ha determinado perpetuo asolamiento para Babilonia. Esta


nación será como una era cuando está de trillar; le vendrá el
tiempo de la siega y será tierra en que no morará nadie. Sion y
Jerusalén pedirán que la violencia y su sangre caiga sobre Ba-
bilonia. Dios juzgará su causa y hará su venganza.

33  Porque así ha dicho Jehová de los ejércitos,


Dios de Israel: «La hija de Babilonia es como una
era en tiempo de trilla; y de aquí a poco le llega-
rá el tiempo de la siega.»

34 «Me devoró, me desmenuzó Nabucodonosor,


rey de Babilonia. Me dejó como un vaso vacío;
me tragó como un dragón, llenó su vientre con
lo mejor de mí, y me expulsó.

35 ¡Caiga sobre Babilonia la violencia hecha con-


tra mí y contra mi carne!», dice la moradora de
Sión. «Y caiga mi sangre sobre los moradores de
Caldea», dice Jerusalén.

36  Por tanto, así ha dicho Jehová: «Yo juzgo tu


causa y llevaré a cabo tu venganza. Secaré su mar
y haré que sus fuentes queden secas.

37  Yserá Babilonia un montón de ruinas, gua-


rida de chacales, objeto de espanto y burla, sin
morador alguno.

38  Todos a una rugirán como leones; como ca-


chorros de leones gruñirán.

39 En medio de su calor les prepararé banquetes,


y haré que se embriaguen, para que se alegren y
duerman un sueño eterno del que no despier-
ten, dice Jehová.

40 Losharé traer como corderos al matadero, co- * Por falta de espacio se ha omitido
mo carneros y machos cabríos.» la versión “Dios Habla Hoy”

127
Ayuda a su meditación

Babilonia, monte destruidor (51:25-33)


La soberbia nos convierte en monte destruidor. Dios declara juicio contra Ba-
bilonia, porque se gloría de todas las áreas, como su economía, poder militar
y desarrollo cultural. Como un monte que rueda de las peñas y se reduce a un
monte quemado, así quedarán desoladas sus tierras cuando sean consumidas
por el fuego. Para esto, Dios levantará a las naciones vecinas, las cuales atacarán
como langostas destructivas. Los mensajeros llegarán al mismo tiempo para
anunciar al rey la caída de sus ciudades; los vados serán tomados y los baluartes,
quemados. Aunque se jactaba de ser la mejor civilización, la soberbia de Babilo-
nia la conducirá a su destrucción. No es la jactancia de este mundo lo que nos
sostiene, sino la justicia, la paz y el gozo del reino de Dios.
¿Cuál es el instrumento utilizado por Dios para juzgar a Babilonia por su so-
berbia? ¿Por qué caigo en la soberbia con facilidad, y cómo puedo evitarla?

El lamento de Sion (51:34-40)


Dios inclina Su oído al clamor de Su pueblo escogido. Nabucodonosor, el rey
de Babilonia, ha atacado a Jerusalén y se ha llevado cautivo a sus moradores
como un dragón que se traga a su presa. Los moradores de Sion piden vengan-
za a Dios por la violencia sufrida; Jerusalén clama pidiendo que la sangre que
ha visto derramarse de los judíos, ahora sea derramada en Babilonia. Y Dios,
después de oír el lamento de Israel, promete juzgar su causa y ejecutar su ven-
ganza. Babilonia se jacta de sus fuerzas como un cachorro de león; pero en el
día del juicio de Dios, será llevado como cordero al matadero, para espanto de
las naciones. En la aflicción debemos clamar más a Dios y esperar en Él con fe
y paciencia, porque ciertamente vengará nuestra causa con justicia.
¿Cómo responde Dios al clamor de Sion y de Jerusalén? ¿Cómo puedo vencer
la aflicción y la adversidad constante en mi vida?

Todopoderoso, ¡cuán hermosa y perfecta es Tu providencia! La violencia


Una Carta
del mal no durará para siempre; mas Tus juicios perdurarán. Haz de
a Dios mí una persona de fe, capaz de discernir los tiempos, sin desanimar
ni desmayar, sabiendo que Tú nos moldeas para perfeccionar nuestra
salvación y madurez espiritual.
128
Ensayo para meditar Jeremías 51:25-40

La bendición que recibí


al perderlo todo

C
uando estudiaba en la Universidad de Stanford, EE. UU.,
conocí un amigo que, tras finalizar su doctorado, inició un
emprendimiento de informática y ganó mucho dinero. En-
tonces, comenzó a ir cada vez más a Las Vegas a jugar, dejando el
negocio a cargo del vicedirector, y terminó convirtiéndose en un
ludópata. En un inicio, su esposa oraba pidiéndole a Dios que so-
lucionara la adicción de su esposo, hasta que un día le rogó: “Dios,
prefiero que pierda su empresa a que continúe viviendo así”. Si bien
quedó sorprendida por lo que había pedido, se dio cuenta de que
tal vez esa era la solución al problema, así que siguió orando por la
quiebra de la compañía de su marido. Luego de unos meses, la em-
presa perdió la licitación contra su competencia y tuvo que declarar
la quiebra en menos de un año.
Cuando se subió al avión para regresar a Corea, tras ordenar todo,
vio que el pasajero del lado estaba leyendo la Biblia, y se sintió
abrumado al recordar su infancia en la iglesia. Dios se había encon-
trado con él nuevamente en el avión y tuvo que encerrarse a llorar
en el baño. Luego de esta experiencia confesó: “Dios me bendijo
haciendo que quebrara mi empresa”. Esta vivencia lo hizo alejarse
del camino del pecado por completo, lo llevó a estudiar teología y
fue llamado a convertirse en misionero.

Responde, Choi Ha-jin

Aplicación Personal

129
MAR

27 Juicio contra
los impíos
Jeremías 51:41-53

La Biblia en un año: 41  ¡Cómo


fue apresada Babilonia! ¡Cómo fue
2 R. 8/ 1 Ti. 5/ Dn. 12/ Sal. 119:49-72
conquistada la que toda la tierra había alabado!
¡Cómo vino a ser Babilonia un objeto de espan-
to entre las naciones!

42 Subió el mar sobre Babilonia; por la multitud


de sus olas quedó cubierta.

43 Sus ciudades fueron asoladas; la tierra, un se-


quedal estéril, será tierra en la que nadie more
ni pase por ella ningún ser humano.

44 «Juzgaré a Bel en Babilonia y sacaré de su boca


lo que se ha tragado. Nunca más vendrán nacio-
nes a él, y el muro de Babilonia caerá.

45  ¡Salid de en medio de ella, pueblo mío, y sal-


vad vuestra vida del ardor de la ira de Jehová!

46  No desmaye vuestro corazón; no temáis a


causa del rumor que se oirá en el país. Un año
vendrá el rumor, y nuevo rumor después de otro
año. Habrá violencia en el país y contienda de un
tirano contra otro.

47 Por tanto, he aquí vienen días en que yo des-


truiré los ídolos de Babilonia. Toda su tierra será
avergonzada; todos sus muertos caerán en me-
dio de ella.
130
Jeremías 51:41-53

Aunque Babilonia sea apresada, el pueblo de Dios no debe des-


mayar, por cuanto el Todopoderoso destruirá los ídolos de los
caldeos. Los que escapen de la espada, no tendrán que dete-
nerse, sino huir de allí. Aunque Babilonia suba hasta el cielo y se
fortifique en las alturas, de Dios saldrán destruidores.

48  Los cielos y la tierra y todo lo que hay en


ellos cantarán de gozo contra Babilonia, por-
que del norte vendrán contra ella destructores,
dice Jehová.

49 Por los muertos de Israel caerá Babilonia, co-


mo por Babilonia cayeron los muertos de toda
la tierra.»

50  ¡Los
que escapasteis de la espada, id, no os
detengáis! ¡Acordaos de Jehová durante mucho
tiempo! ¡Y acordaos de Jerusalén!

51  «Estamos avergonzados, porque oímos la


afrenta; la confusión cubrió nuestros rostros,
porque vinieron extranjeros contra los santua-
rios de la casa de Jehová.»

52  Portanto, Jehová dice: «Vienen días en que


yo destruiré sus ídolos, y en toda su tierra gemi-
rán los heridos.

53 Aunque suba Babilonia hasta el cielo y se for-


tifique en las alturas, de mí vendrán contra ella * Por falta de espacio se ha omitido
destructores, dice Jehová.» la versión “Dios Habla Hoy”

131
Ayuda a su meditación

La idolatría de Babilonia (51:41-48)


El juicio de Dios está preparado para todos los ídolos e idólatras. Los ídolos de
Babilonia serán destruidos; su tierra será avergonzada. La que fue alabada por
toda la tierra, quedará asolada; Bel será juzgado y saqueado; el muro alto y fuerte
de Babilonia caerá. Perecerán por haber matado a muchos del pueblo de Judá.
En aquel día, el pueblo de Dios, cautivo en Babilonia, huirá del ardor de la ira
de Dios para salvar su vida, sin dejar que desmaye su corazón a causa del rumor
que oirá, rumor de guerra y de muerte. Aunque oigamos rumores de tribulación
y de guerra, no temamos ni desmayemos; el día de juicio de Dios es día de gozo
y de salvación para nosotros.
¿Por qué el día de la destrucción de Babilonia es día de gozo para el pueblo
de Dios? ¿Cuál es la Palabra de Dios que debo grabar en mi corazón para no
desmayar por los rumores del mundo?

Acordaos de Jehová (51:49-53)


Siempre debemos acordarnos de Dios, para no ser arrastrados por la maldad de
este mundo. Aunque Babilonia suba hasta el cielo y se fortifique en las alturas,
no podrá huir de su destrucción. Dios destruirá sus ídolos y quitará de Babi-
lonia la jactancia. Los que escaparon de la espada contra Babilonia no podrán
detenerse, pues huirán inmediatamente de allí. Jeremías profetiza que la ciudad
pecaminosa de los caldeos no es tierra que Dios haya escogido para Su pueblo.
Deben renunciar a todo lazo o apego que puedan sentir hacia ella, y acordarse
de Dios, para ir a Jerusalén, la ciudad que ha sido avergonzada. Aunque nuestra
iglesia esté herida y quebrantada, la amamos y la anhelamos en todo momento,
porque allí, donde rendimos culto a Dios y tenemos comunión con los santos,
hay verdadera esperanza.
¿Hacia dónde deben dirigirse los que han escapado de la destrucción de Babi-
lonia? ¿Cuál es el obstáculo que me impide acordarme de Dios y de la iglesia?

Dios de los cielos, deseo ser un adorador en espíritu y en verdad,


Una Carta
meditando siempre en Ti y en Tus caminos, especialmente en la adver-
a Dios sidad. Ayuda a las iglesias que se encuentran en dificultad y permite
que puedan ser partícipes de Tu obra restauradora. Deseo alcanzar la
estatura de fe de Cristo.
132
Ensayo para meditar Jeremías 51:41-53

El poder de vencer
el temor

R
ecuerdo que de pequeño todos los vecindarios tenían calles
aterradoras, al punto que parecía que en cualquier momento
saldría un fantasma, en cuanto oscureciera o estuviera solo,
para agarrarme de sorpresa por la espalda. Sin embargo, cuando
iba junto a mi padre, no sentía miedo. Aunque se tratara del mis-
mo callejón, no temía si estaba con mi papá e incluso lo transitaba
bromeando.
La manera de vencer al miedo y la inquietud no es transforman-
do las circunstancias, sino caminando con Dios, el Todopoderoso.
Debemos aferrarnos al verdadero pastor, a quien serviremos como
Señor de nuestra vida, en todo momento y no solo en las malas.
Aunque el ser humano parezca fuerte, no lo es. Incluso, puede que
solo finjamos serlo, cuando en realidad somos débiles.
Por lo tanto, es importante que nos ejercitemos en caminar junto
al Señor, preguntando: “¿Qué debo hacer, Señor?”, “Señor, soy yo.
Te necesito, dame fuerzas”. Si nos aferramos a Dios con fe, po-
dremos superar lo que sea. Así que dejemos de buscar ayuda ajena;
soltemos esa soga del mundo y tomémonos de la soga de la oración,
sin importar cuán extraño parezca. Aprendamos a aceptar que, si
las cosas no suceden como las pedimos, es porque se hizo según la
voluntad del Señor; y que, si alguien nos causa dolor, es parte de la
disciplina de Dios. Y, si notamos una transformación en aquel que
no podíamos entender, es porque estamos creciendo.

El lugar más humilde, Hong Min-ki

Aplicación Personal

133
MIÉ

28 Juicio del
verdadero Rey
Jeremías 51:54-64

La Biblia en un año: 54  ¡Óyese


el clamor de Babilonia y el gran que-
2 R. 9/ 1 Ti. 6/ Os. 1/ Sal. 119:73-96
brantamiento de la tierra de los caldeos!,
54 Desde Babilonia llegan gritos de dolor, desde el país
de los caldeos llega un gran ruido.

55 porque Jehová destruye a Babilonia y quita de


ella el gran bullicio. Braman sus olas, y como el
rugir de muchas aguas resuena la voz de ellos,
55 Es el Señor, que destruye a Babilonia y pone fin a
su bullicio. Los enemigos, como olas rugientes, caerán
sobre ella con gran estruendo.

56  pues viene el destructor contra ella, contra


Babilonia, y sus valientes serán apresados, y el
arco de ellos será quebrado. Porque Jehová, Dios
de retribuciones, da la justa paga.
56 Vinieron a destruir Babilonia; ya capturaron a sus
guerreros y les hicieron pedazos sus arcos. Porque el
Señor es un Dios que a cada cual le da lo que merece.

57  Yo embriagaré a sus príncipes y a sus sa-


bios, a sus jefes, a sus nobles y a sus guerreros.
Dormirán el sueño eterno y no despertarán, di-
ce el Rey, cuyo nombre es Jehová de los ejércitos.
57 El Rey, el Señor todopoderoso, afirma: «Emborracharé
a los jefes de Babilonia, a sus sabios y gobernadores,
y a sus funcionarios y soldados, y caerán en un sueño
eterno del que no despertarán.

58 Así dice Jehová de los ejércitos: «El muro an-


cho de Babilonia será derribado por completo y
sus altas puertas serán incendiadas. En vano tra-
bajaron los pueblos, y las naciones se cansaron
sólo para el fuego.»
58 Yo, el Señor todopoderoso, digo: Las anchas mura-
llas de Babilonia serán derribadas por completo, y sus
enormes puertas serán incendiadas. Inútilmente habrán
trabajado las naciones, pues sus fatigas terminarán en
el fuego.»

59 Palabra que envió el profeta Jeremías a Seraías


hijo de Nerías hijo de Maasías, cuando iba con
Sedequías, rey de Judá, a Babilonia, en el cuar-
to año de su reinado. Seraías dirigía la marcha. 
134
Jeremías 51:54-64

Dios destruirá a Babilonia, según Su paga y Su debida retribu-


ción. En el cuarto año del reinado de Sedequías (rey de Judá),
Jeremías le entrega a Seraías el libro con todo el mal que Dios
decretó sobre Babilonia. Cuando acabe de leerlo, debe echarlo
en medio del Éufrates y proclamar la destrucción de Babilonia.

59 En el año cuarto del gobierno de Sedequías, rey de


Judá, el profeta Jeremías dio un encargo a Seraías, hijo
de Nerías y nieto de Maaseías. Seraías acompañaba al
rey Sedequías en su viaje a Babilonia, como encargado
de arreglar el hospedaje del rey. 

60  Escribió, pues, Jeremías en un libro todo el


mal que había de venir sobre Babilonia, todas
las palabras que están escritas contra Babilonia.
60 Jeremías había escrito en un libro su mensaje acer-
ca de todas las calamidades que habrían de venir sobre
Babilonia, es decir, todo lo escrito acerca de ella, 

61  Y dijo Jeremías a Seraías: «Cuando llegues a


Babilonia, procura con diligencia leer todas es-
tas cosas.
61 y le dijo a Seraías: «Cuando llegues a Babilonia, ten
cuidado de leer todo este mensaje. 

62 Dirás: “Jehová, tú has dicho de este lugar que


lo vas a destruir hasta no quedar en él nadie que
lo habite, ni hombre ni animal, y que para siem-
pre ha de ser asolado.” 
62 Luego dirás: “Señor, tú has dicho que destruirás este
lugar, de manera que nadie vuelva a vivir aquí, ni hom-
bres ni animales, porque lo vas a convertir en un desierto
para siempre.” 

63  Y cuando acabes de leer este libro, le atarás


una piedra y lo echarás en medio del Éufrates, 
63 Y luego que termines de leer este libro, átale una pie-
dra y échalo al río Éufrates, 

64  y dirás: “Así se hundirá Babilonia, y no se le-


vantará del mal que yo traigo sobre ella. ¡Caerán
rendidos!”» Hasta aquí son las palabras de
Jeremías.
64 y di: “Así se hundirá Babilonia, y no se volverá a le-
vantar del desastre que el Señor le va a enviar.”» Aquí
terminan las palabras de Jeremías.

135
Ayuda a su meditación

Dios de retribuciones (51:54-58)


Dios, Rey y Jehová de los ejércitos, lleva adelante el juicio a las naciones con Su
soberanía. Sentencia final es declarada contra Babilonia: su voz de jactancia y de
soberbia se transformará en gemido de dolor, cuando sea hollada por sus ad-
versarios. Sus enemigos se acercan a Babilonia con un sonido como de muchas
aguas. La descripción de los sonidos que se producirán en la caída de dicha ciu-
dad señala lo repentina que será su destrucción. Los soldados serán apresados;
sus arcos, quebrados; el muro ancho e invencible de la ciudad será destruido por
el fuego. Babilonia será derribada eternamente por el Dios de retribuciones. No
hay reino ni rey que pueda vencer a nuestro Dios, el Rey de reyes, sino que se
someten a Su dominio.
¿Cómo será la retribución de Dios a Babilonia? ¿Qué pasa si en lugar de reco-
nocer la soberanía y el dominio de Dios, hago lo que bien me parece?

La escatología de Babilonia (51:59-64)


El juicio de Dios hacia las naciones ciertamente se cumple. Jeremías escribe el
mal que ha de venir sobre Babilonia y manda a Seraías, funcionario del rey, a
leerlo todo a los cautivos de Judá. Dios juzgará de tal manera a Babilonia que no
quedará en ella morador, ni hombre ni animal, pues quedará asolada para siem-
pre. Después de leer el libro, Seraías debe atarlo a una piedra y echarlo al río Éu-
frates, como señal del juicio que caerá sobre Babilonia, pues nunca más podrá
volver a levantarse y se hundirá eternamente. Apocalipsis dice: “con el mismo
ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada” (Ap.
18:21). Las naciones serán juzgadas por Dios; pero nosotros, heredaremos el
reino de Dios y reinaremos junto a Cristo eternamente.
¿Por qué Jeremías habrá mandado a Seraías a echar el libro al río Éufrates?
¿Cuál es la enseñanza que recibimos de la eterna destrucción de Babilonia?

Dios mío, ayúdame a no poner los ojos en las riquezas ni en el poder de


este mundo, porque no quisiera caer en la corrupción ni en el pecado
Una Carta que se comete con tanta frecuencia. Recordaré mi identidad celestial,
a Dios para no inclinar mi corazón en lo que aparenta ser bueno y gratificante.
Ciertamente vendrá el juicio, y ese día daremos cuenta de nuestras
obras.
136
Ensayo para meditar Jeremías 51:54-64

El desenlace de
la falta de fe

L
os documentales sobre animales muestran cómo los depreda-
dores como el león o el leopardo cazan para alimentarse. No
es para nada divertido ver cómo su débil presa va perdiendo
la vida poco a poco hasta morir. No obstante, podemos aprender
que los animales tienen una regla estricta: cazar solo cuando tienen
hambre. Una vez que están llenos, dejan lo que queda para que se
alimenten los demás. Es así como se conserva el orden del ecosiste-
ma. Pero no sucede lo mismo con el ser humano. Este no es un ser
que vive solo para alimentarse, sino que vive para satisfacer otras
ambiciones. De hecho, caza para llenar otras necesidades y no com-
parte con los demás, aunque esté lleno. Prefiere que se eche a per-
der, en vez de ser generoso. Semejante ambición y maldad desesta-
biliza el equilibrio de la naturaleza y la sociedad. Este desequilibrio
es lo que hace que el hombre viva luchando constantemente. La raíz
de esta necedad que nos lleva a vivir dominados por la ambición y
por Satanás es la falta de fe.
El hombre es un ser que puede vivir solo si confía en Dios, sin
embargo, busca sobrevivir a través de la mentira y la injusticia. Una
vida así recibirá sin excepción el juicio del Creador. Recordemos
que quienes rechazan la Palabra de Dios destruyendo al mundo,
matando al prójimo y autodestruyéndose por la codicia, serán juz-
gados al final.

Cuando la vida comienza a tambalearse, Kim Dong-ho

Aplicación Personal

137
JUE

29 Tragedia por la
desobediencia
Jeremías 52:1-11

La Biblia en un año: 1 Era Sedequías de edad de veintiún años cuan-


2 R. 10/ 2 Ti. 1/ Os.2/
Sal. 119:97-120
do comenzó a reinar, y reinó once años en
Jerusalén. Su madre se llamaba Hamutal, hija de
Jeremías de Libna.
1   Sedequías tenía veintiún años cuando comenzó a
reinar, y reinó en Jerusalén once años. Su madre se lla-
maba Hamutal, hija de Jeremías, y era de Libná.

2  E hizo lo malo ante los ojos de Jehová, con-


forme a todo lo que hizo Joacim. 
2  Pero sus hechos fueron malos a los ojos del Señor,
igual que los de Joaquim. 

3  Y a causa de la ira de Jehová contra Jerusalén


y Judá, llegó a echarlos de su presencia. Y
Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia.
3 Por eso el Señor se enojó con Jerusalén y con Judá, y
los echó de su presencia. Después Sedequías se rebeló
contra el rey de Babilonia.

4  Aconteció, pues, a los nueve años de su rei-


nado, en el mes décimo, a los diez días del mes,
que vino Nabucodonosor, rey de Babilonia, él y
todo su ejército, contra Jerusalén, y acamparon
contra ella. Por todas partes levantaron terraple-
nes para atacarla. 
4 El día diez del mes décimo del año noveno del reinado
de Sedequías, el rey Nabucodonosor marchó con todo
su ejército contra Jerusalén, y la sitió. Acampó frente a
ella, y a su alrededor construyó rampas para atacarla.

5  Y
permaneció sitiada la ciudad hasta el undé-
cimo año del rey Sedequías. 
5 La ciudad estuvo sitiada hasta el año once del reinado
de Sedequías. 

6  En el mes cuarto, a los nueve días del mes,


cuando el hambre en la ciudad era ya tan grave
que no había pan para el pueblo, 
6  El día nueve del mes cuarto de ese año aumentó el
hambre en la ciudad, y la gente no tenía ya nada que
comer. 
138
Jeremías 52:1-11

Sedequías (rey de Judá) hizo lo malo ante los ojos de Jehová,


así que Él echó a Judá de Su presencia. A los nueve años de su
reinado, Babilonia pone sitio a Jerusalén y, en el undécimo año
de su reinado, cae la ciudad. El rey de Babilonia mata a los hijos
de Sedequías en presencia de su padre, y después de sacarle
los ojos de Sedequías, lo lleva cautivo a Babilonia.

7 se abrió una brecha en el muro de la ciudad, y


todos los hombres de guerra huyeron. Salieron
de noche de la ciudad por el camino de la puerta
entre los dos muros que había cerca del jardín del
rey, y se fueron por el camino del Arabá mien-
tras los caldeos mantenían su cerco a la ciudad.
7  Entonces hicieron un boquete en las murallas de la
ciudad, y aunque los caldeos la tenían sitiada, el rey y to-
dos los soldados huyeron de la ciudad durante la noche.
Salieron por la puerta situada entre las dos murallas, por
el camino de los jardines reales, y tomaron el camino del
valle del Jordán. 

8  Pero el ejército de los caldeos persiguió al


rey hasta la llanura de Jericó. Allí dieron alcan-
ce a Sedequías, a quien todo su ejército había
abandonado. 
8  Pero los soldados caldeos persiguieron al rey
Sedequías, y lo alcanzaron en la llanura de Jericó. Todo
su ejército lo abandonó y se dispersó. 

9  Entonces apresaron al rey y lo llevaron ante


el rey de Babilonia, a Ribla, en tierra de Hamat,
donde pronunció sentencia contra él. 
9  Los caldeos capturaron al rey y lo llevaron ante el
rey de Babilonia, que estaba en Riblá, en el territorio
de Hamat. Allí Nabucodonosor dictó sentencia contra
Sedequías, 

10  Ydegolló el rey de Babilonia a los hijos de


Sedequías ante sus ojos; y también degolló en
Ribla a todos los jefes de Judá. 
10 y en presencia de éste mandó degollar a sus hijos y
a todos los nobles de Judá. 

11 A Sedequías, el rey de Babilonia le sacó los


ojos, lo ató con grillos y lo hizo llevar a Babilonia,
donde lo encarceló hasta el día de su muerte.
11 En cuanto a Sedequías, mandó que le sacaran los
ojos y que lo encadenaran para llevarlo a Babilonia, en
donde estuvo preso hasta que murió.

139
Ayuda a su meditación

La rebeldía de Sedequías (52:1-3)


Terrible es el fin de los que se apartan de Dios y cometen iniquidades. Sedequías
fue nombrado rey de Judá por Nabucodonosor, rey de Babilonia. La destruc-
ción de Jerusalén está estrechamente relacionada a la maldad de Sedequías. En
un momento de gran crisis, no obedeció a la Palabra de Dios y buscó aliarse
con Egipto, para ganar el favor de sus funcionarios. Así puso en riesgo a su
país y adelantó el juicio de Dios. Además, cometió idolatría en los lugares altos
e incumplió su promesa de dejar libre a los siervos hebreos. Habiendo oído
de Jeremías la Palabra de Dios, Sedequías escogió el camino de la perdición.
Debido a su ignorancia espiritual y su desobediencia, Judá es castigado. Cuanto
más grande sea la crisis, recordemos que solo la Palabra de Dios nos brinda
salvación y vida.
¿Cuál es el error que Sedequías no pudo enmendar? ¿Cómo debo esforzarme
para mostrar verdadero liderazgo en mi familia, trabajo y comunidad?

El trágico fin de Sedequías (52:4-11)


El precio de la obediencia es la bendición; pero el de la desobediencia, maldi-
ción. Después de la traición de Sedequías (rey de Judá), el ejército de Babilo-
nia pone sitio a Jerusalén por dieciocho meses, causando una gran hambruna.
Después de esto, el rey y sus hombres de guerra abren una brecha en el muro
de la ciudad, para poder huir. Sin embargo, son capturados en los llanos y son
llevados ante Nabucodonosor. Sedequías presencia la muerte de sus hijos, pier-
de sus ojos y es llevado a Babilonia atado con grilletes. Así se cumple la Palabra
de Dios anunciada por Jeremías (32:3-5). El fin de aquel que no obedece a
la Palabra es trágico. Obedezcamos a la Palabra de Dios, quien nos da paz y
protección.
¿Por qué fue trágico el fin del rey Sedequías? ¿Qué puedo hacer cuando Dios
me dé una nueva oportunidad, una nueva manera de hacer las cosas?

Amado Espíritu Santo, nunca permitas que padezca de ceguera espiri-


Una Carta
tual que no me permita entender Tus advertencias, así como le sucedió
a Dios al rey Sedequías. El día que vuelvas, deseo salir a Tu encuentro con
sumo gozo. Espíritu Santo, ayúdame a recordar cada Palabra que
medito y a obedecerle.
140
Ensayo para meditar Jeremías 52:1-11

La disciplina
también es amor

U
n día, un profesor de educación física de secundaria me tomó
de la mano y comenzó a llorar, diciendo: “Pastor, no quiero
ir al colegio. Sería tan fácil si no fuese cristiano, si no temiese
a Dios, porque simplemente haría lo que yo quisiera o los podría
castigar. ¡Como aprenden todo en las academias particulares, no
prestan atención en la escuela!”. Como los alumnos lo ignoraban, le
era muy difícil alentarlos y darles nuevas oportunidades si llegaban
a fracasar. La verdad es que quien espera, quien es paciente, siempre
agoniza.
Nosotros nos quejamos diciendo: “Dios, ¿por qué no vienes pron-
to? ¿Realmente vives?”. No obstante, debemos recordar que para
Él los miles de millones de años que esperó fueron insoportables. Si
nos presentáramos ante Su amor paciente, lo más probable es que
dejáramos de sentirnos frustrados ante la disciplina. Pero como no
lo hacemos, cada vez que nos enfrentamos al dolor, al sufrimien-
to, la disciplina y la congoja protestamos: ‘Señor, me abandonaste,
porque hice algo mal’ o ‘¿cómo puedes hacerme esto con todo lo
que te he orado y servido?’. Por lo tanto, debemos recordar sin falta
el paciente amor del Señor, quien diariamente nos repite: ‘Hoy te
espero de nuevo. No me he olvidado de ti, solo te estoy esperando’.
También debemos estar seguros de que el dolor y la disciplina son
el amor del Señor alentándonos a ser mejores.

Aquel que triunfa, Daniel Kim

Aplicación Personal

141
VIE

30 El Templo sin la
gloria de Dios
Jeremías 52:12-23

La Biblia en un año: 12  En el mes quinto, a los diez días del mes,
2 R. 11-12/ 2 Ti. 2/ Os. 3-4/
Sal. 119:121-144
que era el año diecinueve del reinado de
Nabucodonosor, rey de Babilonia, vino a
Jerusalén Nabuzaradán, capitán de la guardia,
que solía permanecer cerca del rey de Babilonia. 

13  Él
quemó la casa de Jehová, la casa del rey y
todas las casas de Jerusalén. Destruyó a fuego
todo edificio grande. 

14 Todo el ejército de los caldeos que venía con


el capitán de la guardia destruyó los muros en
todo el contorno de Jerusalén. 

15  Ehizo deportar Nabuzaradán, capitán de la


guardia, a los pobres del pueblo, a toda la otra
gente del pueblo que había quedado en la ciu-
dad, a los desertores que se habían pasado al
rey de Babilonia y a todo el resto de la multi-
tud del pueblo. 

16 Pero Nabuzaradán, capitán de la guardia, dejó


de los pobres del país para que fueran viñado-
res y labradores.

17 Los caldeos quebraron las columnas de bron-


ce que estaban en la casa de Jehová, las basas y el
mar de bronce que estaba en la casa de Jehová, y
llevaron todo el bronce a Babilonia. 
142
Jeremías 52:12-23

Nabuzaradán, capitán de la guardia de Babilonia, destruye con


fuego el Templo, el palacio, todas las casas de Jerusalén y los
muros que rodean la ciudad. Solo algunos pobres del pueblo se
quedan para servir como viñadores y labradores; el resto es lle-
vado cautivo a Babilonia. Los caldeos saquean muchos utensilios
de oro, plata y bronce del Templo.

18 Sellevaron también los calderos, las palas, las


despabiladeras, los tazones, las cucharas y to-
dos los utensilios de bronce usados en el culto, 

19  los incensarios, tazones, copas, ollas, cande-


labros, escudillas y tazas; tanto lo de oro como
lo de plata, se lo llevó el capitán de la guardia. 

20  En cuanto a las dos columnas, el mar y los


doce bueyes de bronce que estaban debajo de
las basas que había hecho el rey Salomón en la
casa de Jehová, el peso de todo este bronce re-
sultó incalculable. 

21 Respecto a las columnas, la altura de cada una


de ellas era de dieciocho codos, y un cordón de
doce codos la rodeaba. Su espesor era de cuatro
dedos, y eran huecas. 

22  El capitel de bronce que había sobre la co-


lumna era de cinco codos de altura; y tenía el
capitel a su alrededor una red y granadas, todo
de bronce. Y lo mismo era lo que tenía la segun-
da columna con sus granadas. 

23 Había noventa y seis granadas en cada hilera; * Por falta de espacio se ha omitido
en total eran cien alrededor de la red. la versión “Dios Habla Hoy”

143
Ayuda a su meditación

Jerusalén es consumido por el fuego (52:12-16)


La desobediencia se lleva consigo todas las bendiciones. Ni el Templo ni el pac-
to davídico pudieron garantizar la paz y la seguridad de un pueblo desobediente.
Bajo la dirección de Nabuzaradán, capitán de la guardia de Babilonia, incendian
el Templo, el palacio y todas las casas de Jerusalén. Sus muros son destruidos,
y sus moradores son expulsados de la Tierra Prometida y llevados cautivos a la
tierra de los caldeos. Solo los más pobres quedan en la ciudad para cuidar las
viñas y los campos. No obstante, la ciudad de Jerusalén queda completamente
destruida. Olvidados son el gozo y la gloria que alguna vez vieron, pues ahora
es lugar de tristeza y vergüenza, debido a la desobediencia y la maldad que co-
metieron. Cuando el pueblo de Dios deja de obedecer a Su Creador, pierde el
privilegio de disfrutar de Sus bendiciones.
¿Qué hizo Nabuzaradán capitán de la guardia de Babilonia? ¿Por qué pasamos
por tribulación y angustia en la vida?

Los utensilios del Templo saqueados (52:17-23)


Es una tragedia que el mundo se burle de la iglesia y de los creyentes. El ejército
de Babilonia entra al Templo y saquea las cosas santísimas, porque los israelitas
adoraron cosas abominables dentro de él (Ez. cap. 8). El pueblo de Israel creía
ciegamente que el templo de Dios no podría ser destruido. Pero Dios existe
dentro y fuera del templo; además, Él no mora en templos contaminados. David
había invertido lágrimas, oración y dedicación para la construcción del Templo;
Salomón hizo dos columnas de bronce (Jaquín y Boaz), el mar (lavacro) y sus
bases. Todos estos mobiliarios y utensilios, que eran utilizados para adorar a
Dios, quedan en manos de los gentiles. Ciertamente seremos avergonzados, si
desobedecemos a la Palabra de Dios.
¿Por qué los utensilios del Templo de Jerusalén quedan en manos de los cal-
deos? ¿Cuál es la esencia de la fe que debo conservar para no ser avergonzado
por el mundo?

Señor, confieso que mi conversión es un fruto de la oración de los padres


Una Carta
de fe que se han postrado ante Ti en momentos de opresión religiosa.
a Dios Ayúdame a tomar la cruz y a procurar restaurar la adoración en mi
comunidad de fe. Deseo ayudar a mi iglesia a recuperar su santidad y
fidelidad a Ti.
144
Ensayo para meditar Jeremías 52:12-23

Buscar lo eterno

T
odo es efímero y nada es eterno. Por eso, en esta realidad fugaz,
la gente busca sin cesar un evento tras otro. Un ejemplo claro
de esto es la avalancha de actualizaciones mediáticas. Gracias a
ellas, nos reímos mirando un vídeo gracioso y luego buscamos otro,
porque la risa desaparece en cuanto se acaba la imagen. Y, aunque
sigamos mirando publicación tras publicación para llenar nuestras
desoladas vidas, lo único que queda al final es el vacío. Lo único que
nos deja el intento de retener lo pasajero es el agotamiento.
Lo mismo sucedía con Israel. Cuando obedecía a Dios, gozaba de
la bendición de Su compañía; pero rápidamente perdía ese disfrute,
a causa del pecado y la desobediencia. Y al repetirse esta situación,
comenzaba a inquietarse. Por eso, se preocupaban tanto por tener
el Templo ante sus ojos, pues era lo único que los calmaba. Y lo
mismo sucede en nuestras vidas. Creer que Dios entrará en nues-
tros corazones hoy porque le dedicamos quince minutos al tiempo
devocional, porque fuimos al culto matutino o porque finalizamos
el discipulado es completamente vano, ya que la única manera de
encontrarnos con Él es buscando Su presencia en todas las áreas de
nuestra vida y en la cotidianidad. El encuentro con Dios no se da
según las condiciones, los métodos o los programas. Así que con-
céntrese en anhelar la presencia de Dios en la Palabra de ahora, en
la manera de ahora, en el trabajo de ahora, y viva caminando cada
día junto al Único eterno, en este mundo compulsivo que busca
retener lo efímero.

Mi vida no acaba aquí, Seo Chang-hee

Aplicación Personal

145
SÁB

31 Señal de la
restauración
Jeremías 52:24-34

La Biblia en un año: 24  Tomó también el capitán de la guardia a


2 R. 13/ 2 Ti. 3/ Os.5-6/
Sal.119:145-176
Seraías, el principal sacerdote, a Sofonías, el se-
gundo sacerdote, y a tres guardas del atrio. 
24 El comandante de la guardia apresó también a
Seraías, sumo sacerdote, a Sofonías, sacerdote que le
seguía en dignidad, y a los tres guardianes del umbral
del templo. 

25 Y de la ciudad tomó a un oficial que era capi-


tán de los hombres de guerra, a siete hombres de
los consejeros íntimos del rey, que estaban en la
ciudad, y al principal secretario de la milicia, que
pasaba revista al pueblo del país, para la guerra,
y a sesenta hombres del pueblo que se hallaron
dentro de la ciudad. 
25 De la gente de la ciudad apresó al oficial que manda-
ba las tropas, a siete hombres del servicio personal del
rey que se encontraron en la ciudad, al funcionario mi-
litar que reclutaba hombres para el ejército y a sesenta
ciudadanos notables que estaban en la ciudad. 

26  Los tomó, pues, Nabuzaradán, capitán de la


guardia, y los llevó al rey de Babilonia, en Ribla. 
26-27 Nebuzaradán llevó a todos estos ante el rey
de Babilonia, que estaba en Riblá, en el territo-
rio de Hamat. Allí el rey de Babilonia mandó que
los mataran. Así pues, el pueblo de Judá fue des-
terrado de su país.
27 El rey de Babilonia los hirió y los mató en Ribla, en
tierra de Hamat. Así fue deportada Judá de su tierra.

28 Éste fue el pueblo que Nabucodonosor llevó


cautivo: En el año séptimo, a tres mil veintitrés
hombres de Judá. 
28 El número de personas desterradas por
Nabucodonosor fue el siguiente: el año séptimo de su
reinado desterró a tres mil veintitrés personas de Judá;

29  En el año dieciocho de Nabucodonosor, lle-


vó él cautivas de Jerusalén a ochocientas treinta
y dos personas. 
146
Jeremías 52:24-34

El capitán de la guardia de Babilonia toma a Seraías, el principal


sacerdote, y a varios hombres más, quienes más tarde mueren
por orden del rey de Babilonia. Miles de hombres de Judá son
llevados cautivos en varias instancias. En el año treinta y siete
del cautiverio de Joaquín (rey de Judá), Evil-merodac (rey de
Babilonia) alza su cabeza y lo saca de la cárcel.

29 el año dieciocho desterró a ochocientas treinta y dos


de Jerusalén; 

30  El año veintitrés de Nabucodonosor,


Nabuzaradán, capitán de la guardia, llevó cauti-
vos a setecientos cuarenta y cinco hombres de
Judá. El total, pues, de las personas fue de cua-
tro mil seiscientas.
30 el año veintitrés, Nebuzaradán desterró a setecientas
cuarenta y cinco de Judá, lo que dio un total de cuatro
mil seiscientas personas desterradas.

31  Sucedió que en el año treinta y siete del


cautiverio de Joaquín, rey de Judá, en el mes
duodécimo, a los veinticinco días del mes, Evil-
merodac, rey de Babilonia, en el año primero de
su reinado, levantó la cabeza de Joaquín, rey de
Judá, y lo sacó de la cárcel.
31 El día veinticinco del mes doce del año treinta y siete
del destierro del rey Joaquín de Judá, comenzó a reinar
en Babilonia el rey Evil-merodac, el cual se mostró bon-
dadoso con Joaquín y lo sacó de la cárcel, 

32 Habló con él amigablemente, e hizo poner su


trono por encima de los tronos de los reyes que
estaban con él en Babilonia. 
32 lo trató bien y le dio preferencia sobre los otros reyes
que estaban con él en Babilonia. 

33 Le hizo mudar también los vestidos de prisio-


nero, y ya siempre comió pan en la mesa del rey,
todos los días de su vida. 
33 De esta manera, Joaquín pudo quitarse la ropa que
usaba en la prisión y comer con el rey por el resto de
su vida. 

34  Cada día, durante todos los días de su vida y


hasta el día de su muerte, recibió una ración de
parte del rey de Babilonia.
34 Además, durante toda su vida, hasta que murió,
Joaquín recibió una pensión diaria de parte del rey de
Babilonia.

147
Ayuda a su meditación

Pueblo en cautiverio (52:24-27)


La desobediencia a las advertencias de Dios trae como consecuencia un juicio
sin misericordia. Todas las advertencias anunciadas tantas veces por Jeremías,
incluso con lágrimas y a costa del gran odio del pueblo, se cumplen a cabalidad
en el tiempo de Dios. Nabuzaradán, capitán de la guardia de Babilonia, destruye
la ciudad de Jerusalén y lleva al sumo sacerdote, a los sacerdotes y a otros del
pueblo a Ribla, el campamento de Nabucodonosor. El rey de Babilonia manda
a ejecutar a todos los cautivos traídos de Jerusalén. La muerte de los sacerdotes
y la dispersión del pueblo significa la pérdida de privilegios del pueblo escogido.
Todo esto ocurre como consecuencia de haber desobedecido las advertencias
de Dios anunciadas por Jeremías. Los privilegios que Dios permite son solo
para los que le obedecen.
¿Qué ocurrió con los moradores de Jerusalén que fueron capturados por Nabu-
zaradán? ¿Cómo se relaciona la obediencia con los privilegios que recibimos
de Dios?

La restauración del rey Joaquín (52:28-34)


Después del castigo de Dios, viene la restauración. Al tercer mes de haber asu-
mido el trono, Joaquín (rey de Judá) es llevado cautivo a Babilonia. Después
de treinta y siete años de aflicción en la cárcel, recupera su libertad, cuando
el hijo de Nabucodonosor, Evil-merodac, le sucede en el trono. El nuevo rey
de Babilonia honra a Joaquín más que a todos los demás reyes. Gracias a este
favor inesperado, Joaquín pudo mudar los vestidos de prisionero y comer de la
mesa del rey de Babilonia. La noticia de la restauración de Joaquín infunde la
esperanza a todo Israel de que algún día serían restaurados por la gracia de Dios.
El pensamiento de Dios para con Su pueblo no es de calamidad, sino de paz.
Habrá restauración para todos los que anhelan a Dios como su única esperanza.
¿Qué favor concede Evil-merodac de Babilonia a Joaquín? ¿Cuál es la espe-
ranza que debo recordar durante los largos años de aflicción y prueba?

Padre, creo que Tus planes y pensamientos hacia mí no son de ca-


lamidad ni de destrucción, sino de restauración y salvación. Aunque
Una Carta
a Dios
castigas los pecados, sabemos que es para restaurarnos y utilizarnos.
Sabiendo esto, soportaré la aflicción con paciencia y con esperanza;
Tus misericordias se renuevan cada día.
148
Aprendiendo con el devocional
* Esta semana les presentamos Oración y devocional, una herramienta que profundiza en la oración,
para que puedan aprender diferentes maneras de hacer el devocional.

La Palabra que me da hoy:  Jeremías 52:31-34

Mi meditación

Ya llevaban 37 años como esclavos en Babilonia, como castigo de la ira de Dios
por la desobediencia y la maldad de Jeconías, el rey de Judá. Aun así, cuando
ya no quedaba más esperanza, Dios vuelve a levantarlo, permite que coma en
la mesa del rey y provee cada día para lo que necesitan. Últimamente estoy
deprimido por la inestabilidad económica y el futuro incierto. Y me invade la
impotencia, cuando siento que solo me estoy preocupando por llegar a fin de
mes sin cumplir ningún propósito. En medio de esta situación, los vv. 31-34
de este pasaje llegan a mi corazón como una promesa de Dios, quien me dará
la gracia de la restauración.

Mi meditación

D ios, perdóname por ser necio y confesar solo de palabra, cuando en realidad
soy incapaz de confiar en Ti. Reconozco mi debilidad para concentrarme por
completo en la oración, a pesar de que afirmo que es lo único que puedo hacer
y que necesito. La verdad es que siempre estoy esperando solucionar las cosas
con mi propia fuerza. Te pido que me ayudes.

Oración de desafío y esperanza

D ios aseguró varias veces que el pueblo de Judá, que se encontraba prisionero
en Babilonia, regresaría a su tierra y que Jerusalén sería restaurada. Y, luego
de 37 años de prisión, cumple con Su promesa liberando a Jeconías. De esta
manera, Dios, quien le quitó el vestido de pecador a Jeconías y lo revistió de
justicia, también me reviste a mí con la justicia, a través de Jesucristo. Dios, ¡Tú
que me sacas de mi pozo! Espero lleno de fe a que me liberes de la oscuridad,
para que pueda volver a gozar de la alegría.

Oración de gratitud

D ios, gracias por permitirme un nuevo día y por levantarme cuando estaba
caído. Ayúdame a compartir la gracia de la restauración y el gozo que experi-
menté al orar aferrándome a la Palabra. Guíame para que pueda vivir una vida
que te glorifica.

149
Estudio bíblico semanal

01
Jeremías 40:1-6
El siervo fiel que
obedece a su deber

|  Un hombre de Dios busca cumplir con su deber, en vez de per-


Enfoque 
seguir su propio beneficio y comodidad.

Abriendo los Abran sus corazones compartiendo brevemente cómo les fue a lo lar-
corazones go de la semana, el tiempo devocional, temas de oración, entre otros.

Leyendo la Jeremías 40:1-6.


Palabra
Entendiendo el contexto: Jeremías es el profeta que obró en la épo-
ca más sombría de Judá, del año 627 a. C. al 586 a. C., desde antes
de su destrucción hasta el colapso de Babilonia. Su vida estuvo llena
de tristezas y soledad; rodeada de una serie de penas y aflicciones.
A pesar del desprecio, las burlas y un dolor inmenso, Jeremías anun-
cia a Judá el mensaje del juicio de Dios, que era como la promesa de
una condena y la manifestación de Su ira, producto del pecado del
pueblo. Dios utiliza como instrumento a los enemigos de Su pueblo
para juzgarlos. Así, aunque Babilonia era la nueva potencia mundial y
parecía lo suficientemente fuerte como para destruir a Judá y Jerusa-
lén, en realidad fue solo una herramienta que utilizó Dios, el Soberano.

1• Compartiendo la Palabra:
Observando y meditando:
1. ¿En dónde liberan a Jeremías, mientras se lo llevaban preso?
2. Según Nabuzaradán, capitán de la guardia, ¿a qué se debe la des-
trucción de Judá? (vv. 1-3)

Aplicando y compartiendo:
1. Compartan si alguna vez alguien los alertó sobre la advertencia de
Dios o les hizo comprender su motivo de aflicción.

150
2• Observando y meditando:
1. ¿Qué le propone Nabuzaradán a Jeremías y qué decisión toma?
(vv. 4-6)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Qué deber les encomendó Dios y qué deben hacer para poder
realizarlo?

Ordenando Jeremías obró hacia el final de Judá, en el peor momento de su his-


las ideas: toria. Sin embargo, cumplió con su deber, aun cuando miles perdían
la vida a manos de sus enemigos y presenció cómo incendiaban Je-
rusalén. Además, rechazó la tentadora oferta del capitán babilonio y
regresó a difundir la Palabra a su pueblo. Una vida como la de Je-
remías, quien siguió el camino del llamado en vez de buscar la co-
modidad, es hermosa. Dios nos asigna una misión para cada día, y
debemos recordar que, mientras el mundo cambia constantemente,
la Palabra de Dios es la única que es eterna y no cambia jamás. Por
lo tanto, el fiel debe ser un siervo leal que predica la Palabra desde el
lugar donde Él lo llamó.

Orando con la Dios, haz que grabemos en nuestro corazón el trágico resultado de la
Palabra: desobediencia y ayúdanos a hacer que los no creyentes se alejen del
pecado, antes de que reciban Tu condena. Guíanos para que poda-
mos ser personas de fe, que eligen el camino del llamado por encima
del beneficio y la comodidad propia.

Orando 1. La brecha educacional de nuestros hijos se relaciona con la brecha


juntos: salarial de los padres. Oremos para que podamos hallar la solución,
para poner fin a esta diferencia educativa creada por los ingresos.
2. Las Sociedades Bíblicas Unidas inició un proyecto para traducir la
Biblia a más de 1.200 idiomas para el año 2038. Oremos para que
se desarrolle exitosamente con el poder del Espíritu Santo.

Versículo para “Se fue entonces Jeremías a Gedalías hijo de Ahicam, a Mizpa, y habitó con
memorizar: él en medio del pueblo que había quedado en la tierra” (Jeremías 40:6).

** Finalicen la reunión con alabanza y oración.


151
Estudio bíblico semanal

02
Jeremías 43:1-13
El soberano de todas
las naciones

|  Si confiamos en la fuerza y la riqueza del mundo, en vez de


Enfoque 
Dios, nos espera una gran catástrofe.

Abriendo los Abran sus corazones compartiendo brevemente cómo les fue a lo lar-
corazones go de la semana, el tiempo devocional, temas de oración, entre otros.

Leyendo la Jeremías 43:1-13.


Palabra
Entendiendo el contexto: Dios utiliza a Babilonia como un instrumen-
to para destruir a las naciones. Antes de la destrucción de Jerusalén,
Jeremías les anuncia a los líderes y al pueblo de Judá que la voluntad
de Dios es que se rindan ante Babilonia. También les ordena perma-
necer en Judá luego de la ruina, sin ir a Egipto. Sin embargo, ni los lí-
deres ni el pueblo hacen caso a su advertencia e intentan huir allí tras
el asesinato de Gedalías, el gobernador nombrado por el rey babilo-
nio. A pesar de esto, los israelitas continúan huyendo hacia el estable
y abundante Egipto, llevando a Jeremías con ellos.

1• Compartiendo la Palabra:
Observando y meditando:
1. ¿Cómo reaccionan Azarías y Johanán, tras escuchar la Palabra de
Dios anunciada por Jeremías? (vv. 1-7)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Alguna vez confiaron en otra cosa, además de Dios, al enfrentar-
se a un problema que no podían resolver por sí solos? ¿Por qué?

152
2• Observando y meditando:
1. ¿Qué mensaje le da Dios a Johanán y al pueblo de Judá, cuando
llegan a Tafnes, Egipto, por medio de Jeremías? (vv. 8/-13)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Qué debemos hacer cuando la aflicción parece más grande que
Dios?
2. ¿Cuál es el secreto para gozar de la paz genuina en medio de la
aflicción?

Ordenando Si bien Jeremías transmite sin falta la voluntad de Dios al pueblo de


las ideas: Judá, estos desobedecen. Escuchar la Palabra de Dios y no obede-
cer es una muestra de soberbia. Los israelitas se dirigen a Tafnes, la
región egipcia, creyendo que esta será su refugio y no Dios. No obs-
tante, la ira de Dios sigue a quienes no lo obedecen. Egipto estaba
condenado a la destrucción por atacar a Su pueblo y adorar dioses.
No debemos olvidar que el mundo y todo el poder se encuentran bajo
la soberanía de Dios. Solo podemos obedecer, cuando dejamos de
lado la soberbia y confiamos en el Soberano absoluto. Y la mejor deci-
sión es obedecerlo, aunque no comprendamos Su voluntad por com-
pleto.

Orando con la Dios, ayúdanos a confiar solo en Ti, el Soberano de la vida, cuando es-
Palabra: temos perdidos y no sepamos hacia dónde ir. Guíanos para que con-
fiemos por completo en Ti, que todo lo controlas, escuchando Tu voz
y dejando de lado nuestra opinión.

Orando 1. Hay unos siete millones y medio de diásporas coreanas alrede-


juntos: dor del mundo. Oremos para que permanezcan unidos y puedan
cumplir con su rol de ser mensajeros de la bendición siendo bue-
nos prójimos.
2. Desde hace tiempo las jóvenes y niñas de la tribu Kachin de Bir-
mania son engañadas por traficantes y vendidas a China. Oremos
para que se acaben todos los crímenes en contra de las mujeres.

“... Yo enviaré y tomaré a Nabucodonosor, rey de Babilonia, mi siervo, y pon-


Versículo para
dré su trono sobre estas piedras que he escondido, y él extenderá su pabe-
memorizar:
llón sobre ellas” (Jeremías 43:10).
** Finalicen la reunión con alabanza y oración.
153
Estudio bíblico semanal

03
Jeremías 47:1-7
La Palabra que se
consuma sin falta

|  Todas las naciones deben obedecer la Palabra de Dios, el


Enfoque 
Soberano, y obrar acorde a ella.

Abriendo los Abran sus corazones compartiendo brevemente cómo les fue a lo lar-
corazones go de la semana, el tiempo devocional, temas de oración, entre otros.

Leyendo la Jeremías 47:1-7.


Palabra
Entendiendo el contexto: Jeremías 46-51 incluye profecías sobre va-
rios países que rodean Judá. El capítulo 47 es una profecía sobre los
filisteos, cuyo significado en su idioma original es “extranjero”, “pe-
regrino” o “tierra de inmigrantes”. Era un pueblo marítimo de Grecia
que migró de la isla de Creta, en el Mediterráneo, a la costa suroeste
de Palestina para ocupar tierra fértil. Esta región era un punto de co-
nexión estratégica que lo unía con Egipto al sur, Asiria y Babilonia al
norte. Así, el pasaje de hoy predice que los filisteos, que fueron ene-
migos del pueblo de Dios durante años, serían castigados con la fuer-
za del norte.

1• Compartiendo la Palabra:
Observando y meditando:
1. ¿Cuándo habló Dios sobre los filisteos?
2. ¿Qué significa “Suben las aguas del norte (…)”? (vv. 1-3)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Cuál es la razón por la que Dios juzga a las naciones?
2. ¿Cómo deben ser nuestras vidas bajo la soberanía absoluta de
Dios?

154
2• Observando y meditando:
1. ¿Qué castigo recibirán los filisteos en particular?
2. ¿Qué podemos descubrir a partir de la frase ‘Jehová te ha envia-
do’? (vv. 4-7)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Cómo cambiarían nuestras actitudes, si reconocemos que la aflic-
ción que atravesamos ahora es porque Dios la permitió?

Ordenando Dios es el soberano de todas las naciones. Aunque parezca que Filis-
las ideas: tea será destruida por Babilonia, la nueva potencia, Dios es el juez y
Su juicio para las naciones sigue Su regla de gobierno, trascendiendo
todo lo político y moral. Dios destruye a quienes rechazan esta regla y
establece un nuevo orden. De este modo, aunque ahora parezca que
es el hombre quien escribe la historia del mundo, al final se revelará
que se consumó por completo la voluntad de Dios. Su plan no fraca-
sa ni se cancela, y el fiel que recibe Su perfecta soberanía, solo sien-
te gratitud y humildad.

Orando con la Señor, dejamos delante de Ti nuestro ego y los valores mundanos, y
Palabra: nos presentamos ante Ti confiando en que proteges nuestras insignifi-
cantes vidas. Guíanos con la perfecta y completa providencia de Dios.

Orando 1. YouTube es un medio utilizado por miles de internautas alrededor


juntos: del mundo. Oremos para que desarrollen y distribuyan activamen-
te contenido cristiano de alta calidad que difunda la cultura del rei-
no de Dios.
2. En Afganistán, más de cinco millones de niños sufren a causa de
la guerra, un sistema de salud deficiente y la desnutrición. Oremos
para que la situación allí mejore pronto.

Versículo para “Pero ¿cómo reposarás, si Jehová te ha enviado contra Ascalón y contra la
memorizar: costa del mar? Allí te ha destinado” (Jeremías 47:7).

** Finalicen la reunión con alabanza y oración.


155
Estudio bíblico semanal

04
Jeremías 50:1-10
El día y momento de
la restauración
  La verdadera restauración sucede cuando abandonamos todo
Enfoque 
| aquello en lo que confiábamos, aparte de Dios, y nos volvemos
a Él.
Abriendo los Abran sus corazones compartiendo brevemente cómo les fue a lo lar-
corazones go de la semana, el tiempo devocional, temas de oración, entre otros.

Leyendo la Jeremías 50:1-10.


Palabra
Entendiendo el contexto: Jeremías 46-49 predice el juicio que les es-
pera a las naciones que rodean a Judá, como Egipto, Filistea, Edóm,
Moab, Amón, Damasco (Siria), Gezer, Hazor, y Elam. Todas serán des-
truidas en manos de Babilonia, que se volverá más soberbia que nun-
ca al convertirse en el país más poderoso del Antiguo Oriente Próximo,
al conquistar a Judá y las demás regiones. Los babilonios se burlan
del pueblo de Dios confiando en su propia fuerza (Habacuc 1:11),
pero en Jeremías 50-51 se predice su juicio. Allí Dios afirma que será
destruida por una potencia del norte (Persia) más fuerte que ella; y que
Judá del norte e Israel será restaurado y volverán a ser uno.

1• Compartiendo la Palabra:
Observando y meditando:
1. ¿Qué le ordena anunciar Dios a Jeremías sin ocultarlo? (vv. 1-3)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Hay algo a lo que le hayan dedicado más interés, tiempo y dine-
ro recientemente?
2. ¿Tiene un valor y significado real?

156
2• Observando y meditando:
1. Según Jeremías, ¿cuándo será restaurada Israel, aunque se haya
alejado de Dios?
2. ¿Cómo será la relación de Israel con Dios el día de la restauración?
(vv. 4-5)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Se perdieron algo relacionado a la fe por estar ocupados con el
día a día?
2. ¿A qué les gustaría darle mayor prioridad a partir de hoy?

Ordenando Los babilonios se llenan de soberbia creyéndose Dios, sin saber que
las ideas: están siendo utilizados por Él como un instrumento. No obstante, toda
nación o persona soberbia será juzgada. Por eso, Dios anuncia que
levantará un país del norte, para destruir a Babilonia. Ese día será el
día de juicio para ellos, y el momento para la restauración de Israel. El
tiempo que Israel estuvo preso en Babilonia, fue un período de disci-
plina en el que comprendió que Dios es el soberano del universo. La
prueba y aflicción que atraviesa el fiel se convierte en una oportuni-
dad para conocer a Dios más profundamente. De este modo, gozare-
mos de la verdadera alegría, si nos arrepentimos, nos volvemos a Dios
y permanecemos unidos a Él, renovando nuestra relación del pacto.

Orando con la Dios del amor y la justicia, ayúdanos a enfocarnos en Tu Palabra que
Palabra: es eterna y no se desvanecerá. Haz que nuestro corazón y pensamien-
to siempre estén llenos de la Palabra de la vida, y que nuestros pies
sigan el camino de la verdad.

Orando 1. La baja tasa de natalidad y el envejecimiento en Corea aumenta


juntos: cada vez más. Oremos para que puedan solucionar los cambios
sociales radicales con ideas creativas y una visión bíblica.
2. En China arrestaron a un grupo de fieles que estaban rindiendo cul-
to en línea. Oremos por la rápida transformación de este país que
continúa impidiendo la evangelización.

“En aquellos días y en aquel tiempo, dice Jehová, vendrán los hijos de Israel,
Versículo para
ellos y los hijos de Judá juntamente. Irán andando y llorando, y buscarán a
memorizar:
Jehová, su Dios” (Jeremías 50:4).
** Finalicen la reunión con alabanza y oración.
157
Estudio bíblico semanal

05
Jeremías 52:1-11
El patético final de la
desobediencia

|  Si dejamos pasar la oportunidad de arrepentirnos por ser des-


Enfoque 
obedientes, perderemos también la oportunidad de la salvación.

Abriendo los Abran sus corazones compartiendo brevemente cómo les fue a lo lar-
corazones go de la semana, el tiempo devocional, temas de oración, entre otros.

Leyendo la Jeremías 52:1-11.


Palabra
Entendiendo el contexto: Jerusalén cae en manos de su enemigo y
Judá queda destruida al ser invadida por Babilonia, la cual se lleva
como prisioneras a tres generaciones, incluyendo la del rey Joacim,
Jeconías y Sedequías. Este fue el último rey de Judá, quien fue coro-
nado a los 21 años (en medio de una complicada época diplomática)
y gobernó durante 11 años. Egipto usó a Sedequías para impedir que
Babilonia se volviera más poderosa, y Sedequías confió en Egipto en
vez de servir al nuevo rey babilonio. Entonces, Nabucodonosor, rey
de Babilonia, asentó su base en Ribla (Libna), ordenó a su ejército ro-
dear Jerusalén y la conquistó en 18 meses.

1• Compartiendo la Palabra:
Observando y meditando:
1. ¿Qué sucede como consecuencia, cuando Sedequías, el rey necio
a los ojos de Dios, traiciona al rey babilonio? (vv. 2-5)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Alguna vez desobedecieron, a pesar de que sabían cuál era la vo-
luntad de Dios?
2. ¿Cuál es la causa principal que impide que obedezcan por com-
pleto?

158
2• Observando y meditando:
1. ¿Qué le sucedió a Sedequías por desafiar a Dios? (vv. 10-11)

Aplicando y compartiendo:
1. ¿Cómo debemos esforzarnos cuando no sea fácil obedecer la Pa-
labra de Dios inmediatamente?
2. ¿Cuál es la Palabra de Dios que debemos recordar cuando eso su-
ceda?

Ordenando La Palabra de Dios se consuma sin falta. Por eso, tal como lo había
las ideas: predicho Jeremías, Judá es arrasada como resultado de la desobe-
diencia del rey y del pueblo. A pesar de que Dios les enseña el cami-
no de la vida una y otra vez, Sedequías y el pueblo eligen el camino de
la destrucción y la muerte. O sea que la obediencia es lo que separa
la vida de la muerte. Si obedecemos, recibimos la vida eterna; pero si
desobedecemos, obtenemos un gran sufrimiento y dolor. No es para
nada fácil obedecer, porque solo vemos delante nuestro el placer tem-
poral y la falsa paz. Sin embargo, si continuamos obedeciendo hasta
en lo más pequeño, usando la Palabra de Dios como una brújula, es-
taremos siguiendo Su camino sin que nos demos cuenta.

Orando con la Dios, Tú nos advertiste que la obediencia es mejor que el sacrificio, y
Palabra: ahora comprendemos claramente que el destino final de la desobe-
diencia es la aflicción y el dolor. Ayúdanos a vivir una vida que obede-
ce Tu Palabra hasta en lo más pequeño, confiando en Ti.

Orando 1. Oremos por la restauración de la iglesia actual, recordando los prin-


juntos: cipios que buscaban los reformistas (Sola scriptura, sola fide, sola
gratia, solus Christus, soli Deo gloria).
2. Oremos para que Guatemala pueda hallar el camino para librarse
de la pobreza en la que vive más del 60 % de la población a cau-
sa de las extensas guerras civiles (véase “Pioneros de la misión”).

Versículo para “Y a causa de la ira de Jehová contra Jerusalén y Judá, llegó a echarlos de su
memorizar: presencia. Y Sedequías se rebeló contra el rey de Babilonia” (Jeremías 52:3).

** Finalicen la reunión con alabanza y oración.


159
Testimonio

El devocional
y el compañerismo
Emma Corrales de Aguilar - Ministerio Tiempo con Dios (Duranno) - Lima- Perú.

E n el mes de enero del presente


año cumplí ocho años de estar
sirviendo en este precioso ministerio
de la Palabra de Dios, Duranno La-
tino. Y hace casi cinco años, mi es-
poso se incorporó a la familia TcD
Perú.
Una de las cosas que más me
tocó el corazón, desde hace un
buen tiempo, es que en la oficina se
decidió que teníamos que sacar un espacio para compartir nuestro Tiempo con
Dios. Gracias a este hábito, pudimos retroalimentarnos mutuamente. Hay una tre-
menda bendición en el compartir, ya que vimos en el grupo un mutuo fortalecimiento,
al comunicar lo que Dios nos había hablado y poner delante de la reunión nuestras
peticiones de oración; despertó el interés de orar unos por otros, fomentó el compa-
ñerismo, respeto y amor que todos debemos tener.
Este año 2020, es un año especial para todos, no solo para mi país, sino para el
mundo entero. Hemos tenido que aislarnos para cuidar nuestra salud y la de nues-
tro prójimo. Durante los primeros meses de esta pandemia no hemos podido reunir-
nos ni en nuestros trabajos, ni como creyentes en nuestros locales de reunión. Sin
embargo, en ese deseo de comunicarnos y de compartir las maravillas de Dios, he-
mos echado mano de la tecnología y hemos aprendido a enseñar, a orar y a com-
partir por medio de ella.
Quiero dejarles en este breve testimonio un versículo con el que Dios toco mi co-
razón y que me lo dio en mi TcD del mes de noviembre del 2019, cuando estába-
mos meditando en el libro de Apocalipsis. Era un tiempo difícil para mí y mi esposo;
necesitábamos una palabra de parte de Dios y el Señor nos la dio en Apocalipsis
3:8: “Yo conozco tus obras. Por eso, he puesto delante de ti, una puerta abierta, la
cual nadie puede cerrar, pues aunque tienes poca fuerza, has guardado mi Pala-
bra y no has negado mi nombre”. Esta es una Palabra de esperanza, la tomé en ese
momento y la seguiré tomando durante todo este año y aún más, porque Dios es un
Dios de gracia y misericordia, y tiene una puerta abierta para mí, para mi esposo,
para el ministerio Duranno y para todo aquel que cree en Él.

Si desea compartir a los demás lectores la gracia que recibió, no dude en enviarnos su valioso
testimonio a: [testimonios@durannolatino.org]

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