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Neuropsicología Aplicada: Adultos

ISSN: 2327-9095 (Impreso) 2327-9109 (En línea) Página principal de la revista:http://www.tandfonline.com/loi/hapn21

Profesión de neuropsicología en América Latina

Juan Carlos Arango-Lasprilla, Lillian Stevens, Alejandra Morlett Paredes,

Alfredo Ardila & Diego Rivera

Para citar este artículo:Juan Carlos Arango-Lasprilla, Lillian Stevens, Alejandra Morlett Paredes,
Alfredo Ardila & Diego Rivera (2017) Profesión de neuropsicología en Latinoamérica,
Neuropsicología aplicada: Adulto, 24:4, 318-330, DOI:10.1080/23279095.2016.1185423

Para enlazar a este artículo:https://doi.org/10.1080/23279095.2016.1185423

Publicado en línea: 09 de junio de 2016.

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NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 2017, VOL. 24,
núm. 4, 318–330 http://dx.doi.org/
10.1080/23279095.2016.1185423

Profesión de neuropsicología en América Latina

Juan Carlos Arango Lasprillaa,b, Lillian StevensC,d,mi, Alejandra Morlett Paredesmi, Alfredo ArdilaFy diego riveragramo

Instituto de Investigación Sanitaria BioCruces, Hospital Universitario de Cruces, Barakaldo, Bizkaia=España;bIKERBASQUE, Fundación Vasca para la Ciencia,
a

Bilbao, España;CCentro Médico de Asuntos de Veteranos Hunter Holmes McGuire, Richmond, VA, EE. UU.;dDepartamento de Medicina Física y Rehabilitación,
Virginia Commonwealth University, Richmond, VA, EE. UU.;miDepartamento de Psicología, Universidad Virginia Commonwealth, Richmond, VA, EE. UU.;FCiencias y
Trastornos de la Comunicación, Universidad Internacional de Florida, Miami, FL, EE. UU.;gramoDepartamento de Psicología y Educación, Universidad de Deusto,
Bilbao, Bizkaia=España

RESUMEN PALABRAS CLAVE

El propósito de este estudio fue analizar las características de las personas que se desempeñan en la profesión de Evaluación; America latina;
neuropsicología en América Latina para conocer su trayectoria, formación profesional, situación laboral actual, neuropsicólogo; práctica;
rehabilitación; capacitación
procedimientos de evaluación y diagnóstico utilizados, técnicas de rehabilitación empleadas, población objetivo,
responsabilidades docentes, y actividades de investigación. Un total de 808 profesionales que trabajan en neuropsicología
de 17 países de América Latina completaron una encuesta en línea entre julio de 2013 y enero de 2014. La mayoría de los
participantes eran mujeres y la edad media fue de 36,76 años (rango 21-74 años). La mayoría de los profesionales que
trabajan en neuropsicología en América Latina tienen formación en psicología, con alguna formación especializada
adicional y práctica clínica supervisada. Más de la mitad trabaja en la práctica privada, universidades, o clínicas privadas y
están bastante satisfechos con su trabajo. Aquellos que se identifican a sí mismos como médicos trabajan principalmente
con personas con problemas de aprendizaje, TDAH, retraso mental, TBI, demencia y accidente cerebrovascular. La
mayoría de los encuestados mencionan que la principal barrera en el uso de instrumentos neuropsicológicos es la falta de
datos normativos para sus países. Las principales barreras percibidas para el campo incluyen: falta de programas de
formación académica, falta de oportunidades de formación clínica, falta de disposición a colaborar entre profesionales y
falta de acceso a instrumentos neuropsicológicos. Existe la necesidad en América Latina de aumentar la regulación,
mejorar los currículos de posgrado, mejorar la capacitación clínica existente, desarrollar programas de certificación
profesional, validar las pruebas neuropsicológicas existentes y crear nuevos instrumentos culturalmente relevantes.

La neuropsicología se define como el estudio de la
organización cerebral de los procesos cognitivos en
condiciones normales y anormales, mientras que la
neuropsicología clínica es una rama aplicada de la ciencia
psicológica que se ocupa de las relaciones cerebro-conducta
(Barth et al.,2003; Boller y Grafman,1988/1997; Federico,1985).
Según Barth et al. (2003), los neuropsicólogos clínicos llevan a
cabo la evaluación, el diagnóstico, el tratamiento o la
rehabilitación de pacientes a lo largo de la vida con afecciones
neurológicas, médicas, del neurodesarrollo y psiquiátricas, así
como otros trastornos cognitivos y del aprendizaje.
A diferencia de la neuropsicología en los Estados Unidos,
donde existen directrices bien establecidas para la educación,
la formación y la práctica (p. ej., véase Barth et al., 2003), la
neuropsicología en el mundo en desarrollo es un campo
relativamente joven que no está bien regulado. Más
específicamente, existe una falta de información sobre quiénes
son los profesionales que trabajan en el campo de la
neuropsicología y exactamente qué tipo de actividades realizan
en los países de América Latina. Inquietudes sobre la práctica
de la neuropsicología con hispanos en Estados Unidos
se ha planteado y documentado (p. ej., Judd et al.,2009;
Llorente,2007; Pontón y Ardila,1999; Puente y Ardila,
2000), y este tema es frecuentemente discutido y
analizado por la Hispanic Neuropsychological Society (
http://hnps.org). Sin embargo, se documenta una
mínima cantidad de profesionales en el campo de la
neuropsicología en América Latina.
La historia del campo de la neuropsicología en América
Latina está bien documentada en varias fuentes (p. ej.,
Ardila,1990;1999; Pontón y Ardila,1999). En resumen, la
neuropsicología latinoamericana comenzó formalmente en
1958 cuando los uruguayos Carlos Mendilaharsu y Selika de
Mendilaharsu crearon el Laboratorio de Disfunciones
Cerebrales, una división dentro del Instituto Neurológico de
Montevideo de Uruguay. El interés por la neuropsicología
en América Latina creció en las décadas de 1960 y 1970,
especialmente en México y Perú (Ardila,1999). En 1961 se
realizó en Uruguay un simposio “Mecanismos Cerebrales y
Aprendizaje” al que asistieron importantes investigadores
europeos y latinoamericanos. El primer programa de
posgrado en psicobiología, con un enfoque en

CONTACTOJuan Carlos Arango-Lasprilla, Ph.D. Plaza de jcalasprilla@gmail.com Instituto de Investigación Sanitaria BioCruces, IKERBASQUE. Fundación Vasca para la Ciencia,
Cruces s/n., Barakaldo, Bizkaia 48903, España.
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neuropsicología, fue creado en la Universidad Autónoma de
México en 1973. También en la década de 1970, los libros
de texto clásicos de neuropsicología de Luria fueron
traducidos al español, lo que marcó un momento crucial
que fortaleció la disciplina en América Latina.
Gran parte del crecimiento de la neuropsicología
latinoamericana tuvo lugar en la década de 1980. En Brasil,
en 1980, el presidente brasileño inauguró una Red de
Hospitales de Rehabilitación conocida como SARAH, que
creó un nuevo modelo de salud pública específico para la
neurorrehabilitación. En 1981, Colombia fue sede del
Congreso Internacional de Neuropsicología (Ardila,1999;
Pontón y Ardila,1999). A esta reunión en español asistieron
más de 700 personas de 14 países y marcó la primera
oportunidad para que los diversos grupos de Argentina,
Brasil, Chile, Colombia, México, Perú y Uruguay tomaran
conciencia del trabajo de los demás e intercambiaran ideas.
Los debates de la conferencia se centraron en la necesidad
de programas formales de formación en neuropsicología, la
creación de una revista neuropsicológica en español y la
necesidad de una mayor colaboración entre países. En
1983, México fue sede de una reunión de la Sociedad
Internacional de Neuropsicología (INS) durante la cual se
propuso la creación de una rama latinoamericana del INS.
Sin embargo, la heterogeneidad económica y científica en
América Latina resultó ser un obstáculo demasiado grande
y esto no se materializó (Ardila,1990). Entre 1983 y 1988 se
crearon sociedades nacionales de neuropsicología en
Argentina, Chile, Colombia, Honduras, México, Nicaragua y
Perú. A principios del siglo XXI, Brasilia fue elegida como
ciudad anfitriona de las conferencias de The International
Brain Injury Association en 2000, The International
Neuropsychological Society en 2001 y The World Federation
for Neurorehabilitation en 2008. En 2004, la red SARAH
organizó el 1er Congreso Internacional de Neurociencia y
Rehabilitación en Brasil.
A nivel de países, la neuropsicología latinoamericana se
ha desarrollado a ritmos diferentes. Aunque se produjeron
avances importantes en la profesionalización de la
neuropsicología en América del Sur, México y algunos
países centroamericanos en la década de 1980, la mayoría
de los países centroamericanos carecían de
profesionalización del campo en ese momento (de la
Cadena et al., 2009). A partir de 2009, varios países habían
desarrollado carreras de educación de posgrado (nivel de
maestría) en neuropsicología, incluida Argentina (Labos,
2009), Chile (Díaz, Delgado, & Maudier,2009), Colombia
(Arango-Lasprilla & Rivera,2015), Costa Rica (de la Cadena
et al.,2009), México (Ostrosky-Solís & Matute Durán,2009), y
Brasil. Sin embargo, varios países no tenían ningún
posgrado formal en neuropsicología, incluyendo Bolivia
(Barba,2009), Cuba (Vega et al.,2009), Uruguay (Dansilio,
2009), Venezuela
NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 319
(Iribarren,2009), El Salvador, Honduras y Panamá (de
la Cadena et al.,2009).
Además de las distintas tasas de desarrollo académico o
pedagógico, la práctica de la neuropsicología difiere entre
países. Por ejemplo, la neuropsicología se ha llevado a cabo
en la práctica privada en algunos países, como Ecuador
(Balarezo & Mancheno, 2009) y Guatemala (de la Cadena et
al.,2009). Sin embargo, otros países, como El Salvador, no
tienen la neuropsicología claramente delimitada como
campo de estudio o práctica a nivel gubernamental (de la
Cadena et al.,2009). Otros países, como Bolivia, no han
recopilado datos sobre sus neuropsicólogos en ejercicio
(Barba,2009) o, como Nicaragua, tienen un número muy
limitado de neuropsicólogos capacitados (de la Cadena et
al.,2009). En cambio, en Brasil, la práctica de la
neuropsicología fue reconocida en 2004 por el Conselho
Federal de Psicologia (CFP; Consejo Federal de Psicología)
como especialidad (Conselho Federal de Psicologia,2016).
Cada año, el CFP organiza exámenes de especialidad y los
programas de formación pueden solicitar la acreditación de
esta organización. En 2011, el Conselho Federal de
Fonoaudiologia (Consejo Federal de Patología del Habla)
también reconoció la neuropsicología como especialidad
(Título de Especialista, sf).
La neuropsicología en América Latina se ha desarrollado
con relativa lentitud por varias razones, incluida la
heterogeneidad de antecedentes culturales y lingüísticos
entre sus países, las diferencias en el desarrollo científico y
económico que influyen en el acceso a los recursos
académicos y profesionales, y los diferentes sistemas
educativos y de salud (Pontón & Ardila,1999). Hoy existen
diferentes programas de formación de posgrado en varios
países como México, Colombia, Argentina, Chile, Ecuador,
Paraguay, Brasil, Costa Rica y Guatemala. Hay sociedades
profesionales de neuropsicología en muchos países. Hay
varias revistas especializadas en español que incluyen:
Neuropsicología, Neuropsiquiatría y Neurociencias (http://
www.asoclatneuropsicologia.com/revista-1.html),
Neuropsicología Latinoamericana(http://
www.neuropsicolatina.org/),Revista Argentina de
Neuropsicología (http://www.revneuropsi.com.ar/), y el
Revista Chilena de Neuropsicología(http://
www.neurociencia. cl/), y también existen dos sociedades
internacionales de habla hispana: la Asociación
Latinoamericana de Neuropsicología (ALAN) y la Sociedad
Latinoamericana de Neuropsicología (SLAN).
Durante los últimos años, varias encuestas han rastreado múltiples
aspectos de la práctica neuropsicológica, incluidas las características
sociodemográficas de los profesionales, las actividades profesionales, la
educación y la capacitación, los rangos de honorarios y salarios, y las
creencias y comportamientos éticos (p. ej.,
320 JC ARANGO-LASPRILLA ET AL.
Elbulok-Charcape, Rabin, Spadaccini y Barr,2014; Rabin,
Barr y Burton,2005; Rabin, Borgos y Saykin, 2008; Sharland
y Gfeller,2007; Shultz, Pedersen, Roper y Rey-Casserly,2014;
Sweet, Nelson y Moberg,2006). Estas encuestas, sin
embargo, incluyen información principalmente de
profesionales en los EE. UU., con muy poca información
sobre el estado de la neuropsicología como profesión en
otros países y sin datos de encuestas sobre la profesión en
América Latina. Hay una falta de datos de varios países que
describan a quienes se consideran neuropsicólogos en
América Latina, en qué entornos trabajan o qué prácticas y
pautas éticas existen. Por lo tanto, el propósito de este
estudio fue analizar las características de la profesión de
neuropsicología en América Latina, incluidos los
antecedentes de formación profesional, la situación laboral
actual, los procedimientos de evaluación y diagnóstico
utilizados, las técnicas de rehabilitación empleadas, la
población objetivo, las responsabilidades docentes y las
actividades de investigación. .
Método
Participantes
Los participantes eran psicólogos autoidentificados u otros
profesionales de la salud que trabajaban en el campo de la
neuropsicología en América Latina y que completaron la
encuesta. Los datos de los participantes se incluyeron para
los análisis si: (a) informaron tener al menos una
licenciatura; (b) se consideraban neuropsicólogos y/o
realizaban al menos algunas de las actividades relacionadas
con la neuropsicología (es decir, evaluación, diagnóstico,
tratamiento, docencia o investigación) durante el último
año; y (c) completó las preguntas sociodemográficas, que
estaban al comienzo de la encuesta, y (d) informó que
actualmente vive en América Latina.
Un total de 1.046 personas iniciaron la encuesta. De
estos, 88 informaron no tener título de licenciatura (criterio
de exclusión 1), 93 informaron no considerarse
neuropsicólogos o no realizar al menos algunas de las
actividades relacionadas con el área (criterio de exclusión
2), y 57 de los individuos no no completar las preguntas
demográficas (criterio de exclusión 3). Las 808 personas
que continuaron en la encuesta informaron vivir en
América Latina (criterio de exclusión 4). Así, la muestra final
para el análisis fue de 808 individuos que cumplieron con
todos los criterios de inclusión.
La muestra final consistió principalmente en
participantes de Colombia (norte¼316; 39,1%), Brasil (norte
¼184; 22.8%), y México (norte¼173; 21,4%), con el 16,5% de
la muestra (norte¼135) de otros países latinoamericanos,
incluidos Argentina, Bolivia, Chile, Cuba, República
Dominicana, Ecuador, Guatemala, Honduras,
Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, Uruguay y
Venezuela. La mayoría de los participantes eran mujeres
(71,9 %) y la edad media fue de 36,76 años (rango 21-74
años). El promedio de años de experiencia en
neuropsicología de los participantes fue de 6,8 (rango
0-40) y la mayor parte de su trabajo neuropsicológico
tuvo lugar en la práctica privada (22,8%) o en un colegio
o universidad (18,9%).
Medidas
Un grupo de investigadores en el campo de la neuropsicología
de la Universidad de Deusto, en España, desarrolló la encuesta
utilizada en este estudio utilizando el siguiente procedimiento.
En primer lugar, se realizó una revisión exhaustiva de la
literatura a través de la cual se identificaron siete áreas de
interés: (a) formación profesional, (b) situación laboral actual,
(c) evaluación y diagnóstico, (d) rehabilitación, (e) docencia, ( f)
investigación, y (g) ética. Se generaron preguntas para abordar
cada una de estas áreas, así como información demográfica.
Posteriormente, se envió la encuesta a un grupo de expertos
en neuropsicología de cada país latinoamericano que se iba a
encuestar para asegurar que las preguntas se adaptaran al
contexto cultural y lingüístico de cada país.
Una vez incorporados los comentarios de los expertos, la
encuesta final quedó compuesta por 67 preguntas que se
ingresaron en una plataforma de encuestas en línea (
www.surveymonkey.com). Cinco neuropsicólogos
completaron la encuesta para garantizar la precisión, la
validez y el funcionamiento adecuado y la captura de datos
de la encuesta en línea antes de su distribución.
Las preguntas fueron desarrolladas en español. Para
países donde se habla portugués, Chapman y Carter (1979)
se utilizó la metodología para traducir la encuesta al
portugués. Los investigadores bilingües tradujeron los
ítems, retrotradujeron al español y cualquier discrepancia
se resolvió mutuamente. Para el presente estudio se
excluyó del análisis el apartado de ética, ya que dichos
resultados se encuentran en otro artículo (Panyavin,
Goldberg-Looney, Rivera, Perrin, & Arango-Lasprilla, 2015).
Procedimiento
Una vez que el comité de ética de la Universidad de Deusto
aprobó el estudio, el reclutamiento se realizó mediante el
envío de un correo electrónico invitando a participar a
profesionales de neuropsicología que fueran miembros de
organizaciones profesionales de neuropsicología en
América Latina, específicamente Argentina, Brasil y México.
Las asociaciones de Brasil y México publicaron el enlace a la
encuesta en sus redes sociales. El correo electrónico fue
 NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 321

también distribuido por la organización nacional de psicología Tabla 1. Formación profesional de neuropsicólogos en latín
profesional en Colombia. Es importante señalar que estos America.
cuatro países latinoamericanos tienen la historia de Frecuencia Porcentaje
Formación recibida durante los estudios de posgrado (norte¼808)
neuropsicología más desarrollada de la región. Se contactó a
Sí 603 74.6
los presidentes actuales de ALAN y SLAN y se les pidió que No 205 25.4
Valoración de la formación recibida (norte¼804)
distribuyeran el correo electrónico a sus miembros. El correo
Excelente 153 19.0
electrónico contenía los detalles del estudio, el hipervínculo a la Muy bueno 337 41,9
encuesta en línea y una solicitud de asistencia para reclutar Bueno 208 25,9
Justa 63 7.8
profesionales de neuropsicología adicionales como Pobre 24 3.0
participantes (muestreo de bola de nieve). La recolección de No se recibió capacitación 19 2.4
Supervisión clínica recibida durante el entrenamiento (norte¼801)
datos ocurrió del 1 de julio de 2013 al 1 de enero de 2014. Las Excelente 150 18.7
secciones de la encuesta relacionadas con evaluación y Muy bueno 254 31.7
Bueno 222 27.7
diagnóstico, rehabilitación, docencia e investigación solo
Justa 85 10.6
fueron completadas por los encuestados si informaron haber Pobre 35 4.4
realizado ese tipo de actividad en el año anterior. No se recibió supervisión 55 6.9
Calificaciones de neuropsicología (norte¼808)
Haber obtenido certificación oficial No 302 37.4
haber obtenido certificación oficial; 207 25.6
análisis estadístico ninguno existe
No haber obtenido la certificación oficial; 173 21.4
existe certificación
La base de datos se descargó del servidor Survey Monkey y No haber obtenido la certificación oficial; 126 15.6
los análisis se realizaron con SPSS 22.0 (IBM Corp., Armonk, desconozco si existe alguno
Titulación requerida para ejercer como neuropsicólogo clínico (norte¼775)
NY). Se reportaron frecuencias y medias para cada
Título de Psicología necesario 516 66.6
pregunta y/o respuesta. El denominador utilizado para No se necesita título de psicología 259 33.4
calcular los porcentajes se adaptó al número de personas Barreras para el desarrollo de la neuropsicología en América Latina
(norte¼808)a
que respondieron a una pregunta en particular. Debido a Falta de programas de formación académica 379 46,9
que no todas las personas pueden avalar haber trabajado Falta de oportunidades de formación clínica 367 45.4
Falta de disposición para colaborar 290 35,9
en evaluación y diagnóstico, rehabilitación, docencia y/o entre profesionales
investigación en el año anterior, en algunos casos el La falta de acceso a la neuropsicología 283 35,0
instrumentos
denominador estuvo determinado por el número que avala Falta de líderes profesionales en el 250 30,9
la actividad. campo Falta de acceso a literatura/ 91 11.3
bibliotecas No hay barreras 67 8.3
Falta de acceso a tecnología/ 30 3.7
computadoras Falta de acceso a internet 10 1.2
Resultados
aMúltiplesopciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%.
Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼808.
Entrenamiento profesional

tabla 1resume las respuestas de los participantes relacionadas

con temas de formación profesional. Brevemente, la mayoría
(74,6%) de los participantes informó haber recibido formación
en neuropsicología durante sus estudios de posgrado
(programas de especialización, maestría o doctorado de un
año). Esta formación y la calidad de la supervisión clínica que
recibieron fue calificada de “muy buena” por un 41,9% y un
31,7% respectivamente. Es interesante notar que, de los 804
participantes que respondieron la pregunta, 19 (2,4%)
profesionales que se consideraban neuropsicólogos
informaron no haber recibido capacitación de ningún tipo. En
cuanto a sus calificaciones, el 37,4% informó tener una
certificación oficial para actuar como neuropsicólogo. La
mayoría (77. 7%) respaldaron la creencia de que los
profesionales que ejercen como neuropsicólogos clínicos
deben tener un título (en cualquier nivel) en Psicología. Las 3
barreras más frecuentemente identificadas para el desarrollo
de la neuropsicología en América Latina fueron la falta de
formación académica
(46,9%), falta de oportunidades de formación clínica
(45,4%) y falta de voluntad de colaboración entre
profesionales (35,9%). Por favor miratabla 1para
barreras adicionales.
Situación laboral actual
De acuerdo con los 727 encuestados que respondieron
estas preguntas de los 808 que cumplieron con los criterios
de inclusión, el tiempo promedio que dedicaron a trabajar
en el área de neuropsicología fue de 6,8 años, con 707
participantes que informaron trabajar un promedio de 24,1
horas por semana. El ingreso mensual promedio informado
fue de USD $1.479,08 Finalmente, en cuanto a la
satisfacción con su salario, la cual se midió en una escala
del 1 al 10 siendo 1 “Muy insatisfecho” y 10 “Muy
satisfecho”), quienes respondieron la pregunta (norte¼686)
reportó un promedio de 5.1; y en relacion
322 JC ARANGO-LASPRILLA ET AL.

Tabla 2. Situación laboral actual de los neuropsicólogos en América Latina Tabla 3.Tipo de batería de evaluación e instrumentos utilizados por los
America. neuropsicólogos en América Latina.
Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje
Estado de Empleo (norte¼763) Tipo de batería utilizada (norte¼572)a
Tiempo completo 329 43.1 Baterías personalizadas/flexibles 275 48.1
Tiempo parcial 334 43.8 Baterías flexibles 211 36,9
Desempleados 91 11.9 Baterías estandarizadas 86 15.0
Jubilado 9 1.2 20 instrumentos más utilizados (norte¼654)b
Ámbito de la práctica de la neuropsicología (norte¼735) Prueba de Stroop (Stroop Neuropsychological 436 67.0
Practica privada 184 25,0 Prueba de pantalla)
Universidad 153 20.8 Prueba de dibujo de reloj MMSE (Mini-Examen 340 52.0
Clínica privada 121 16.5 del estado mental) 334 51.0
sistema hospitalario 107 14.6 Token TMT A&B (Prueba de creación de senderos 321 49.0
Sistema escolar 46 6.3 A&B) (Prueba de token) 314 48.0
Centro de rehabilitación con fines de lucro 37 5.0 ROCFT (Figura compleja de Rey-Osterrieth 310 47.0
Facultad de medicina 35 4.7 Tarea)
Centro de rehabilitación sin fines de lucro 27 3.7 RAVLT (Rey Auditory Verbal Learning Test) 266 41.0
Otro 25 3.4 ENI (Evaluación Neuropsicológica Infantil) 264 40,0
BNT (Boston Naming test) 250 38.0
NEUROPSI (Evaluación Neuropsicológica 246 38.0
Breve en Español)
a su trabajo como neuropsicólogo 691 participantes Bender (Bender Visual Motor Gestalt Test) 235 36,0
reportaron una satisfacción promedio de 8.0. Barcelona (Test de Barcelona) 216 33.0
CVLT (California Verbal Learning Test) 192 29,0
Como se resume enTabla 2, la mayoría de los participantes SDMT (Symbol Digit Modalities Test) 186 28,0
estaban empleados a tiempo completo (43,1 %) o a tiempo parcial NEUROPSI AyM (Neuropsi Atencion & 144 22.0
Memoria)
(43,8 %). Los 3 principales entornos laborales principales Prueba D2 (Prueba de resistencia a la concentración) 143 22.0
respaldados con mayor frecuencia fueron la práctica privada (25,0 CPT (Tarea de rendimiento continuo) BDAE 141 22.0
(Diagnóstico de afasia de Boston) 121 19.0
%), la universidad (20,8 %) y la clínica privada (16,5 %).
Examen)
TAVEC (Test de Aprendizaje Verbal España 103 16.0
Complutense)
Evaluación CERAD (Consorcio para Establecer un Registro 100 15.0
para la enfermedad de Alzheimer)

Un total de 654 de 735 (88,9%) participantes informaron aSolo 654 de 735 participantes respaldaron la realización de pruebas neuropsicológicas.

haber realizado evaluaciones neuropsicológicas durante el
último año. De estos, el 85,2% (norte¼557) realizó
evaluaciones neuropsicológicas a un promedio de 14,3
pacientes por mes, tomando en promedio 8,4 horas para
evaluar, calificar, interpretar los resultados y redactar el
informe.
Como se resume enTabla 3, el 48,1% utilizó baterías
personalizadas/flexibles para realizar estas
evaluaciones. De una lista de 60 instrumentos
neuropsicológicos de uso común para la evaluación y el
diagnóstico neuropsicológico, Tabla 3presenta los 20
que se reportaron como más utilizados, siendo la
mayoría la prueba de Stroop (66,7 %), el MMSE (52,0 %) y
el Clock Drawing Test (51,1 %).
Más de la mitad de los encuestados (52,5 %) informaron
que utilizan datos normativos de sus propios países para
calificar las pruebas neuropsicológicas. Más de la mitad
(66,5%) informó obtener instrumentos neuropsicológicos
comprándolos a la editorial (66,5%), mientras que el 34,7%
informó hacer fotocopias o reproducir los instrumentos, y
el 34,7% informó haberlos tomado prestados de colegas.
Los problemas con los instrumentos neuropsicológicos más
comúnmente identificados incluyeron la falta de datos
normativos en su país (61,8%,norte¼404) y que las medidas
no se adaptan a su cultura (56,4%). Por favor miraTabla 4
para obtener información más detallada.
evaluaciones en el último año.bmúltiples opciones de respuesta disponibles,
las respuestas no suman 100%. Los porcentajes se calculan sobre el total
norte¼654.
Cuando se preguntó a los encuestados sobre las poblaciones de
pacientes con las que trabajaban, el 35,0 % informó sobre personas
con TDAH, el 33,0 % informó sobre personas con problemas de
aprendizaje y el 26,0 % informó sobre personas con retraso mental.
Las personas con afecciones neurológicas como lesión cerebral
traumática, demencia y accidente cerebrovascular también se
encontraban entre las poblaciones de pacientes evaluadas con
mayor frecuencia.Tabla 5presenta la lista completa de poblaciones
de pacientes y los dominios neuropsicológicos evaluados. Todos los
dominios se evalúan con frecuencias relativamente similares
respaldadas por 82,0% a 88,0% de los encuestados. Además, la
mayoría de los encuestados complementan su evaluación y
diagnóstico neuropsicológico con fuentes adicionales de
información. Estos incluyen antecedentes médicos/psiquiátricos
(79,1%;norte¼517), características de la demanda ambiental (77,7%;
norte¼508), historia del desarrollo (76%;norte¼497), entrevista a
pareja (73,7%;norte¼482), evaluación del comportamiento (73,1%;
norte¼478), medidas de estado de ánimo y afecto (72,2%;norte¼
472) registros escolares (71,1%;norte¼465), datos de pruebas
neuropsicológicas (69,6%;norte¼455), valoraciones funcionales
(69,0%;norte¼451), examen del estado mental (69,0%;norte¼451),
datos de pruebas neuropsicológicas previas
 NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 323

Tabla 4.Procedimientos de puntuación utilizados, método de obtención Tabla 5.Grupos de pacientes evaluados y frecuencia de
de instrumentos y problemas con los instrumentos identificados por evaluación de varios dominios cognitivos por neuropsicólogos
neuropsicólogos en América Latina. en América Latina.
Frecuencia Porcentaje Frecuencia Porcentaje
Procedimientos de puntuación utilizados (norte¼654)a Grupos de pacientes evaluados (norte¼654)a
Uso de datos normativos del propio país Uso de 424 52.5 TDAH 232 35,0
datos normativos de otro país Procedimientos 340 42.1 Dificultades de aprendizaje 214 33.0
personalizados a través de la práctica clínica Uso 196 24.3 Retraso mental 169 26,0
de puntajes brutos sin grupo normativo 59 7.3 Demencia 159 24.0
comparación Accidente cerebrovascular/vascular 135 21.0
Otro 32 4.0 Depresión 129 20.0
Método de obtención de instrumentos neuropsicológicosa Trastorno generalizado del desarrollo 122 19.0
Compra a la editorial Realización de 435 66.5 Lesión cerebral traumática 116 18.0
fotocopias o reproducción 230 35.2 Trastornos convulsivos 91 14.0
instrumentos trastorno de ansiedad 89 14.0
Préstamo de colegas Descarga de 227 34.7 trastorno del movimiento 58 9.0
Internet Préstamo de bibliotecas o 182 27,8 tumor del SNC 53 8.0
laboratorios Solicitud del autor 161 24.6 Trastornos bipolares 52 8.0
68 10.4 Abuso de sustancias 51 8.0
Otro 24 3.7 Desorden de personalidad 51 8.0
Principales problemas con los instrumentos neuropsicológicosa Esquizofrenia 50 8.0
Carecen de datos normativos para mi 404 62.0 Esclerosis múltiple 36 6.0
país No adaptados a mi cultura 369 56,0 Dolor 23 4.0
Demasiado costoso / caro 323 49.0 Tóxico/metabólico 22 3.0
Dirigido a personas con altos niveles de 163 25,0 Otro 15 2.0
educación SIDA 11 2.0
A menudo no son aplicables porque mi 152 23.0 Dominios cognitivos evaluados (norte¼670)b
los pacientes no pueden leer o Atención 573 88.0
No traducido a mi idioma 126 19.0 Funciones ejecutivas 572 87.0
No tienen buenas propiedades psicométricas 101 15.0 Idioma 571 87.0
Tardan mucho en administrarse 88 13.0 Habilidades visoespaciales 568 87.0
No hay problemas con los instrumentos. 52 8.0 memoria no verbal 568 87.0
que uso memoria verbal 565 86,0
Demasiado complicado de administrar y/o puntuar 35 5.0 Inteligencia 563 86,0
Otros 18 3.0 Construcción 557 85.0
aMúltiplesopciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%.
Habilidades motoras 557 85.0
Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼654.
percepción auditiva 555 85.0
Logro 554 85.0
percepción táctil 539 82.0
aMúltiples opciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%.
(68,3%;norte¼446), fuente de referencia (55,4%;norte¼362), actas
Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼654.bmúltiples opciones de
de trabajo (53,7%;norte¼351), apoyo social actual (50,5%; norte¼ respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%. Los porcentajes se calculan
330), test de personalidad (28,9%;norte¼189), y otros (3,8%;norte¼ sobre el totalnorte¼670.

25).
Los tres principales motivos de consulta fueron la
determinación del diagnóstico (76,8%;norte¼502), Tabla 6. Fuentes de referencia de pacientes que acuden a neuropsicología
servicios.
rehabilitación y tratamiento (48,3%;norte¼316), y planificación
Frecuencia Porcentaje
educativa (30,0%;norte¼196).Tabla 6enumera todas las fuentes
Fuentes de referencia (norte¼654)a
de referencia recibidas por los neuropsicólogos, de las cuales Neurología 439 67.0
las más frecuentemente avaladas fueron neurología (67,0%), Psicología 411 63.0
Sistema escolar 353 54.0
psicología (63,0%) y el sistema escolar (54,0%). Psiquiatría 328 50.0
Pediatría 218 33.0
Autorreferencia 214 33.0
Rehabilitación (enfermera de rehabilitación, 211 32,0
Rehabilitación consejero u otra rehabilitación.)
Neurocirugía 209 32,0
Geriatría 172 26,0
Un total de 670 de los 808 participantes que cumplen con los
Amigos 159 24.0
criterios de inclusión (83,0%) respondieron las preguntas sobre Familia (medicina general) 131 20.0
haber trabajado en rehabilitación neuropsicológica durante el Medicina interna 69 11.0
Compañía de seguros 67 10.0
último año, con un 61,0% (norte¼409) de estos respondiendo Psiquiatría sesenta y cinco 10.0
afirmativamente. Dentro de este subgrupo, se brindaron Ley de establecimientos de 62 9.0
alcohol/drogas (abogado) 47 7.0
servicios a, en promedio, 12,6 pacientes por mes, con un Medicina Ocupacional 41 6.0
promedio de 11,6 horas por semana dedicadas a la terapia. Cardiología 24 4.0
Otro 22 3.0
Tabla 7proporciona detalles sobre los grupos de diagnóstico y Ortopedía 10 2.0
las áreas de tratamiento neuropsicológico. La mayoría de los aMúltiplesopciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%.
encuestados informaron Los porcentajes se calculan sobre el total n¼654.
324 JC ARANGO-LASPRILLA ET AL.

Tabla 7.Grupos de diagnóstico para el tratamiento de rehabilitación Tabla 8.Tipos de tratamiento brindado y herramientas tecnológicas
neuropsicológica y áreas en las que los neuropsicólogos de América utilizadas en rehabilitación por neuropsicólogos en América Latina.
Latina realizan el tratamiento de rehabilitación neuropsicológica. Frecuencia Porcentaje
Frecuencia Porcentaje Tipos de tratamiento proporcionado (norte¼374)a

Grupos de diagnóstico (norte¼409)a terapia individual 293 78.3

TDAH 237 58.0 Terapia mixta (individual y grupal) 64 17.1
Dificultades de aprendizaje 237 58.0 Terapia grupal 17 4.5
Lesión cerebral traumática 173 42.0 Herramientas tecnológicas utilizadas en rehabilitación (n¼409)b

Demencia 159 39.0 Computadoras personales 313 76.5

Accidente cerebrovascular/vascular 152 37.0 iPads o tabletas 157 38.4
Retraso mental 142 35,0 Teléfonos móviles o teléfonos inteligentes 79 19.3
Trastorno generalizado del desarrollo 125 31.0 Neurofeedback 32 7.8
Trastornos de ansiedad 73 18.0 Realidad virtual 24 5.9
Depresión 67 16.0 Neuromodulación (TMS, tDCS) 11 2.7
Trastornos convulsivos 67 16.0 Otros 30 7.3
Trastornos del movimiento 47 11.0 aMúltiples opciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%.
Esclerosis múltiple 38 9.0 Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼374 (los que brindaron
Esquizofrenia 36 9.0 información específica sobre el tratamiento que realizan).bmúltiples
Abuso de sustancias 35 9.0 opciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%. Los
Trastornos bipolares 33 8.0 porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼409.
tumor del SNC 32 8.0
Desorden de personalidad 30 7.0
Dolor 15 4.0
Otro 13 3.0 (promedio de 8.2, usando una escala de 1 a 10, donde 1 es
SIDA 13 3.0 “nada satisfecho” y 10 “totalmente satisfecho”). Como se vio
Tóxico/metabólico 7 2.0 enTabla 9, la mayoría (53,8%) informó ejercer la docencia
Áreas de tratamiento de rehabilitación neuropsicológica (norte¼409)a
Atención/ Concentración 354 87.0 en instituciones privadas, y la mayoría de los encuestados
Memoria 326 80.0 informó impartir y dirigir tesis o disertaciones con temas de
Funcionamiento ejecutivo 325 79.0
Comunicación/ Habla y lenguaje Habilidades de 247 60.0 neuropsicología a nivel de pregrado (70,8% y 53,7%,
percepción visual y de construcción Ajuste 221 54.0 respectivamente).
emocional/ conductual y bienestar Autonomía e 216 53.0
independencia 197 48.0
Funcionamiento familiar 192 47.0
Conciencia de discapacidad/enfermedad 127 31.0
Investigar
Habilidades motoras/fuerza 117 29,0
volviendo al trabajo 95 23.0
Problemas de ajuste sexual 39 10.0 Un total de 643 de los 808 participantes que cumplen con los
aMúltiplesopciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman 100%. criterios de inclusión (79,6 %) respondieron a las preguntas
Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼409. sobre haber realizado investigaciones en el área de la
neuropsicología en el último año, con un 61,7 % (norte¼397) de
brindando servicios de rehabilitación a personas con TDAH y/o estos respondiendo afirmativamente. La gran mayoría de los
problemas de aprendizaje (cada uno respaldado por el 58,0 % encuestados informó que sus instituciones tenían un comité de
de los encuestados) y las 3 áreas de funcionamiento evaluadas ética (81,0%;norte¼306). De los 383 encuestados que
con mayor frecuencia fueron la atención y la concentración respondieron estas preguntas, el 80,9% (norte¼310)
(87,0 %), la memoria (80,0 %) y el funcionamiento ejecutivo informaron que siempre buscaban la aprobación del comité de
( 79,0%). ética antes de comenzar un nuevo proyecto de investigación.
Como se vio enTabla 8, la gran mayoría de los encuestados
(78,0%) informó brindar terapia individual y usar computadoras Tabla 9.La docencia de los neuropsicólogos en América Latina.
personales (76,5%) como una herramienta tecnológica utilizada Frecuencia Porcentaje
durante la rehabilitación.Tabla 8 proporciona la lista completa Institución donde se da la enseñanza (norte¼298)a

de terapias respaldadas y herramientas tecnológicas utilizadas Institución privada 155 53.8

Institucion publica 95 33.0
por los encuestados. Ambas cosas 38 13.2
Nivel en el que se produce la enseñanzaa
De licenciatura 211 70.8
Especialización (programas de 1 año) 106 35.6
Enseñando Maestría 66 22.1
Doctoral 29 9.7
Un total de 648 de los 808 participantes que cumplen con los Nivel en el que se supervisaron tesis o disertacionesa
criterios de inclusión (80,2%) respondieron a las preguntas De licenciatura 160 53.7
Especialización (programas de 1 año) 63 21.1
sobre haber realizado actividades docentes relacionadas con la Maestría 63 21.1
neuropsicología durante el último año, con un 46,0% (norte¼ Doctoral 30 10.1
298) de estos respondiendo afirmativamente. De estos, 295 aNota: múltiples opciones de respuesta disponibles, las respuestas no suman
100%. Los porcentajes se calculan sobre el totalnorte¼298 (los que
participantes reportaron alta satisfacción con su rol como declararon haberse dedicado a la docencia relacionada con la
profesores en el área de neuropsicología. neuropsicología en el último año).

Casi todos (95,8%;norte¼366) informó haber obtenido el
consentimiento informado de sus participantes.
del 96,5% (norte¼383) de los participantes que informaron
sobre su formación en investigación, la mayoría informó haber
recibido formación en investigación en neuropsicología
durante su formación o formación clínica (79,6%;norte¼305),
nunca recibiendo subvenciones para investigación (60,8%;norte
¼230), y contar con recursos y material insuficientes para
realizar investigación neuropsicológica (59,9%;norte¼226).
En cuanto al uso de software estadístico y análisis
estadístico, algo más de la mitad (55,5%;norte¼202) reportó
un nivel medio de dominio de Excel y un poco menos de la
mitad (47.6%;norte¼169) informó un nivel medio de
competencia en SPSS. La mayoría informó no tener
conocimientos de análisis en SAS (78,8%;norte¼204) o R
(80,3%;norte¼200). La mayoría de los encuestados (52,8%;
norte¼198 de los 375 participantes que respondieron esta
pregunta) informaron realizar su propio análisis estadístico
al realizar la investigación.
Discusión
Hasta donde sabemos, este es el primer estudio que reporta
información sobre las características y la práctica de los
profesionales de la neuropsicología en los países de América
Latina. Se pueden extraer varias conclusiones de la encuesta
actual. En primer lugar, los antecedentes profesionales en
general, el tipo de pacientes, los instrumentos de prueba, los
entornos y las fuentes de referencia no son tan diferentes en
América Latina de otras regiones del mundo. Con mayor
frecuencia, la mayoría de los neuropsicólogos tienen
experiencia en psicología, con alguna capacitación
especializada adicional y práctica clínica supervisada, y trabajan
en consultorios privados, entornos universitarios o clínicas
privadas. Estas características son similares a las de los
neuropsicólogos en los Estados Unidos y Canadá (Rabin et al.,
2005). En particular, las mujeres representan alrededor de dos
tercios de los neuropsicólogos profesionales en América Latina,
mientras que las mujeres están subrepresentadas en los
Estados Unidos y Canadá (Rabin et al.,2005). Es importante
destacar que los neuropsicólogos en América Latina
encuentran sus actividades profesionales en general bastante
satisfactorias y reportan no estar ni satisfechos ni insatisfechos
con sus salarios.
Entrenamiento profesional
Hoy en día, el único título necesario para ejercer la
neuropsicología en la mayoría de los países de América
Latina es una licenciatura en una materia específica de 5
años (Arango-Lasprilla & Rivera,2015; Fonseca-Aguilar et al.,
2015). Sin embargo, la mayoría de los neuropsicólogos en
ejercicio han estudiado psicología durante cinco años y
NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 325
completó una tesis de pregrado y una práctica
supervisada. La formación no es necesariamente
específica de la subespecialidad de la
neuropsicología y, sin embargo, estas personas
pueden participar en actividades relacionadas con
el campo de la neuropsicología después de
graduarse. Por lo tanto, un gran desafío que
requiere atención inmediata en la neuropsicología
latinoamericana es la necesidad de establecer
algún tipo de certificación. Tres de cada cuatro
profesionales que trabajan en neuropsicología
tienen títulos de posgrado en neuropsicología (p.
ej., especialista de 1 año, maestría de uno o 2 años
o doctorado de 3 a 5 años). Sin embargo, no todos
los países latinoamericanos ofrecen programas de
formación de posgrado, y aproximadamente el
25% de la muestra no cuenta con un posgrado.
Debido a la enorme diversidad que se encuentra en la
cantidad de profesionales que trabajan, la disponibilidad de
prácticas, la existencia de programas académicos y el
desarrollo general de la neuropsicología como profesión, es
probable que las certificaciones en los países
latinoamericanos deban ser específicas para cada país. Por
ejemplo, los neuropsicólogos de un país determinado
deberían trabajar junto con las asociaciones psicológicas
nacionales de su país para crear normas que tengan en
cuenta el estado actual del desarrollo profesional. Este
enfoque tendrá éxito si todas las partes interesadas
involucradas se unen y trabajan hacia el mismo objetivo.
Algunos líderes en el campo han propuesto crear una junta
de neuropsicología en América Latina; actualmente ALAN
es el único programa/asociación en América Latina que
desarrolla un programa de certificación para
neuropsicólogos,
Los problemas actuales que debe enfrentar el
campo de la neuropsicología en América Latina no
son exclusivos de esta profesión. En este campo y en
muchos otros, la colaboración entre profesionales
puede ser difícil. Uno de cada tres encuestados
identificó el problema de la falta de colaboración
como uno de los principales obstáculos para el
desarrollo profesional y científico. Recientemente,
con el avance de las tecnologías de la comunicación,
como el acceso a Internet y el correo electrónico, las
redes sociales como Facebook y las redes
profesionales como LinkedIn, los neuropsicólogos
dentro del mismo país y en diferentes países pueden
colaborar más fácilmente que antes. Como resultado,
numerosas reuniones internacionales, revistas en
línea, estudios multicéntricos,2015; Fonseca-Aguilar
et al.,2015). Además, las organizaciones gremiales
podrían trabajar juntas para avanzar en el desarrollo
de
326 JC ARANGO-LASPRILLA ET AL.
el campo. Por ejemplo, si las dos principales asociaciones
neuropsicológicas latinoamericanas, ALAN y SLAN, se
unieran, esta unión podría aumentar las oportunidades
para la colaboración profesional internacional y tener el
potencial de avanzar más rápidamente en la práctica de la
neuropsicología en la región.
Situación laboral actual
Aunque los participantes reportaron un promedio de seis años
de trabajo en el área, menos de la mitad reportaron trabajar a
tiempo completo. Una posible explicación puede ser el hecho
de que el papel del neuropsicólogo no es conocido por muchas
personas, profesionales de otras disciplinas e instituciones en
América Latina, por lo tanto, pocos sitios ofrecen puestos de
tiempo completo para neuropsicólogos. Además, muchos
hospitales o centros de rehabilitación no contratan
neuropsicólogos a tiempo completo y los pocos que lo hacen
tienden a pagar salarios mínimos (Colegio Colombiano de
Psicólogos, 2009; Elfernán, Soto, Coble y Ramos,2009; Salas,
2014). Por tanto, muchos profesionales tienen que compaginar
su vida laboral como neuropsicólogos con un segundo trabajo
o con su práctica privada (Arango-Lasprilla & Rivera,2015). En
este estudio, los participantes dedican un promedio de 24
horas a la semana a actividades neuropsicológicas y trabajan
en la práctica privada, enseñando en la universidad o en
clínicas privadas.
Evaluación
De acuerdo con los resultados de las preguntas sobre los tipos
de poblaciones con las que se trabajó para la evaluación y el
diagnóstico (p. ej., problemas de aprendizaje, TDAH y retraso
mental), parece que muchas personas que trabajan en el área
de la neuropsicología comúnmente evalúan a los niños. A pesar
de los estudios desarrollados durante las últimas dos décadas
para validar y estandarizar pruebas neuropsicológicas en varios
países de América Latina (Arango-Lasprilla et al.,2015), la
cantidad limitada actual de instrumentos de evaluación
desarrollados directamente en América Latina representa un
obstáculo importante para la práctica profesional de la
neuropsicología. Actualmente existen algunos estudios
normativos con instrumentos neuropsicológicos “clásicos” [p.
ej., Boston Diagnostic Aphasia Examination, Rey-Osterrieth
Complex Figure, Token Test, (Ardila & Rosselli,1994; Pineda et
al.,2000; Rosselli y Ardila,1991)]; y con frecuencia estos estudios
se publican en revistas locales con difusión limitada entre
países. Además, las condiciones socioculturales en los
diferentes países de América Latina no son las mismas; por lo
tanto, la aplicabilidad de estos instrumentos es cuestionable y
plantea preocupaciones. Por ejemplo,
Las normas argentinas no son aplicables a las personas físicas en
Guatemala.
La falta de herramientas de evaluación desarrolladas
específicamente para América Latina o para características
sociodemográficas específicas de cada país podría ser una de
las razones por las que cuatro de cada 10 neuropsicólogos en
ejercicio informan calificar los instrumentos con normas de
otros países o, en muchos casos, utilizan pruebas que no son
culturalmente adecuadas. adaptadas o mal traducidas (Arango-
Lasprilla & Rivera,2015; Fonseca-Aguilar et al.,2015). Esta
práctica puede generar errores en el diagnóstico y dificultades
en el diseño, implementación y determinación de la efectividad
de los programas de tratamiento. Sin embargo, recientemente
este problema ha comenzado a resolverse gradualmente con la
creación de nuevos instrumentos desarrollados
específicamente para la población latinoamericana (por
ejemplo, ENI, Neuropsi) y la implementación de estudios
multicéntricos de estandarización y validación de las
principales pruebas neuropsicológicas utilizadas en América
Latina ( Arango-Lasprilla & Rivera, 2015; Guàrdia-Olmo, Pero-
Cebollero, Rivera, & Arango-Lasprilla,2015).
A pesar de los avances antes mencionados, queda
mucho por hacer, ya que la gran mayoría de las pruebas
que se utilizan con niños en la práctica clínica no cuentan
con normas para la población latinoamericana (Arango-
Lasprilla & Rivera,2015, Arango-Lasprilla et al.,2015a,2015b,
2015c,2015d; Olabarrieta-Landa et al.,2015a,2015b; Rivera
et al.,2015a,2015b,2015c,2015d). Por lo tanto, es necesaria
la implementación de estudios multicéntricos para la
validación y estandarización de los instrumentos utilizados
con niños. Los futuros estudios neuropsicológicos de niños
en América Latina deberían incluir medidas de esfuerzo e
indicadores de validez incorporados (ver Kirkwood,2015).
Por último, la mayor parte de la formación de posgrado
disponible en programas de especialización, maestría o
doctorado de un año en América Latina está enfocada en
neuropsicología de adultos. Se deben desarrollar
programas especializados en neuropsicología infantil para
capacitar adecuadamente a las numerosas personas que
evalúan y diagnostican niños dentro del campo de la
neuropsicología.
Rehabilitación
Solo la mitad de los que trabajan en el campo de la neuropsicología
informan estar involucrados en actividades relacionadas con la
rehabilitación. Esto refleja el hecho de que si bien el área de la
neuropsicología en América Latina es todavía muy nueva, la
rehabilitación es un campo aún más joven. Los primeros libros en
español sobre rehabilitación se publicaron en 1996 (Ostrosky et al.,
2014) y 2006 (Arango-Lasprilla,2006). Además, desde1990al 2010,
muchos programas de maestría en América Latina no incluían
cursos específicamente relacionados con

rehabilitación. Sin embargo, en los últimos cinco años, se
está prestando cada vez más atención a esta área. Por
ejemplo, se han publicado más libros en español (Delgado
& Weidman,2012; Guerrero-Bote & Moya-Anegón,2012), se
han comenzado a establecer centros y clínicas dedicadas
únicamente a la rehabilitación de personas con daño
cerebral en países como Cuba, Perú, Uruguay, Paraguay,
Colombia, México, Argentina, Brasil, Puerto Rico, entre
otros, y nuevas ofertas de cursos, Se han desarrollado
conferencias y programas de maestría que se enfocan
exclusivamente en estos temas (Arango-Lasprilla & Rivera,
2015).
A pesar del aumento de centros, programas y profesionales
dedicados a la rehabilitación neuropsicológica en América
Latina, es importante señalar que la mayor parte de los
avances en este campo se han dado en el área de
rehabilitación de adultos con daño cerebral. Ha habido muy
pocos avances en la rehabilitación neuropsicológica de los
niños (Arango-Lasprilla & Rivera,2015). Esto es sorprendente y
una necesidad importante identificada a partir de los
resultados de esta encuesta porque más de la mitad de los
encuestados que trabajan en el campo de la rehabilitación
neuropsicológica informan que trabajan con niños para tratar
el TDAH y los problemas de aprendizaje.
Esto es especialmente importante porque la gran
mayoría de los pacientes en rehabilitación en América
Latina son niños. Por lo tanto, en el futuro, los materiales
de referencia (como libros de texto, manuales, etc.) deben
traducirse al español, debe haber más apoyo y capacitación
para estos profesionales, deben desarrollarse y difundirse
programas de rehabilitación infantil en español, maestrías
especializadas y se deben crear programas de doctorado
en esta área y se deben establecer centros que ofrezcan
servicios de rehabilitación dirigidos a los niños para
satisfacer las necesidades de la región.
Enseñando
Casi 300 participantes en el estudio informaron haber
impartido cursos de neuropsicología, pero en su mayoría para
universidades privadas. Los resultados de este estudio indican
que la mayor parte de las actividades docentes se concentran
en los cursos de pregrado. Pocos encuestados enseñan a nivel
de doctorado. En la actualidad, existen muy pocos programas
de doctorado en neuropsicología en América Latina. Es posible
especializarse en neuropsicología dentro de un programa de
doctorado en psicología y completar una tesis doctoral dentro
del Ph.D. de psicología. (Sala,2014). Por lo tanto, tal como lo
indicaron los encuestados, se deben habilitar más cursos de
posgrado (académicos y clínicos) que ayuden a formar a los
futuros profesionales.
Sin embargo, hay un problema más importante: quién está
calificado para impartir cursos de neuropsicología o supervisar
NEUROPSICOLOGÍA APLICADA: ADULTOS 327
estudiantes de neuropsicología a nivel de posgrado? Este problema
destaca la necesidad de regulaciones para establecer un certificado
oficial de neuropsicología en América Latina (que puede ser
específico de un país) y la necesidad de tener algún tipo de
estándares mínimos para los planes de estudios de los programas
que estén estandarizados en toda América Latina porque los
profesionales a menudo estudian en el extranjero para obtener la
formación que falta en su país de origen. Los profesionales que
cumplan con estos requisitos deben ser los únicos profesionales
certificados para enseñar o supervisar dentro del campo. Este
enfoque es una forma de garantizar que los nuevos profesionales
estén debidamente capacitados y tengan los conocimientos,
habilidades y recursos para desempeñar adecuadamente la
profesión elegida.
Investigar
El progreso científico y profesional de la neuropsicología
depende en gran medida de la investigación que se pueda
desarrollar y llevar a cabo. Como se encontró en la encuesta,
un número importante de profesionales de la neuropsicología
realizan alguna investigación clínica, pero su impacto en la
literatura internacional aún es limitado debido a la falta de
publicaciones internacionales (Ardila,2014a). Sin embargo,
varios programas internacionales de investigación en
colaboración están aumentando progresivamente, aunque
lentamente, el desarrollo de publicaciones internacionales.
Varias razones podrían explicar el bajo ritmo de publicaciones
de investigación en América Latina. Primero, aunque casi el 80% de
los encuestados reportaron recibir formación en investigación en
sus programas de formación, es posible que muchos profesionales
carezcan de una formación adecuada en redacción científica y
divulgación de resultados, específicamente en el área de la
neuropsicología (Ardila,2014b). En segundo lugar, como se discutió
anteriormente, hay una falta de programas de formación en
investigación doctoral en esta región (Salas, 2014). En tercer lugar,
según lo informado por poco más del 60% de la muestra, los
investigadores de América Latina la falta de recursos necesarios
para realizar investigaciones, como laboratorios, acceso a pruebas
psicométricas, equipo de oficina, software de computadora, acceso
a revistas, etc. ( Salas,2014). En cuarto lugar, los profesionales
pueden carecer del dominio del idioma inglés necesario para leer y
escribir en el campo de la ciencia. Para ayudar a comenzar a
abordar este problema, investigadores reconocidos
internacionalmente en el campo podrían brindar cursos, en línea o
presenciales, en español o a través de intérpretes que enseñen
diseño y metodología de estudios, análisis de datos, cómo escribir
un manuscrito que se publique en revistas de alto impacto, y cómo
postularse a premios o convocatorias internacionales de
subvenciones.
Las conclusiones extraídas de este estudio deben interpretarse con
las siguientes advertencias. En primer lugar, la encuesta se administró
mediante una plataforma de Internet en la que se evidenció
328 JC ARANGO-LASPRILLA ET AL.
se encuentra un sesgo intrínseco; sólo están representados en la muestra aquellos
profesionales con acceso a Internet y disposición a contestar la encuesta. Además,
es imposible identificar quién recibió la notificación por correo electrónico pero optó
por no responder la encuesta, lo que afecta la generalización de los resultados. En
segundo lugar, debido al diverso desarrollo de la neuropsicología en países
latinoamericanos específicos y la falta de datos disponibles en la mayoría de estos
países con respecto a los temas de estudio en esta encuesta, es muy difícil evaluar la
representatividad de la presente muestra. Además, una limitación común a la
investigación de encuestas es que algunos encuestados no respondieron todas las
preguntas de la encuesta y los abandonos pueden sesgar los resultados
presentados. Tercero, las preguntas incluidas en la encuesta son limitadas y muchas
áreas no fueron exploradas, como tipo de informes utilizados en neuropsicología,
participación en equipos profesionales, interacciones multidisciplinares, etc.
Finalmente, como en cualquier encuesta, los análisis se basaron en respuestas de
autoinforme y, aunque se excluyeron del análisis las respuestas irrazonables y/o
contradictorias, es imposible saber si las respuestas proporcionadas son ciertas. Sin
embargo, a pesar de estas limitaciones, los resultados de la presente encuesta
brindan una mejor comprensión del estado actual de la neuropsicología como
profesión en América Latina. es imposible saber si las respuestas proporcionadas
son verdaderas. Sin embargo, a pesar de estas limitaciones, los resultados de la
presente encuesta brindan una mejor comprensión del estado actual de la
neuropsicología como profesión en América Latina. es imposible saber si las
respuestas proporcionadas son verdaderas. Sin embargo, a pesar de estas
limitaciones, los resultados de la presente encuesta brindan una mejor comprensión
del estado actual de la neuropsicología como profesión en América Latina.
Conclusiones
Esta es la primera encuesta que hace un balance de la formación
que reciben los neuropsicólogos en América Latina, así como las
diversas facetas clínicas, pedagógicas e investigativas de su trabajo.
Los hallazgos de esta encuesta también identifican áreas que el
campo de la neuropsicología aún debe abordar. Por ejemplo, en
América Latina existe la necesidad de aumentar las regulaciones
profesionales, mejorar los planes de estudios de posgrado, mejorar
la formación clínica existente, desarrollar programas de
certificación profesional, validar las pruebas neuropsicológicas
existentes y crear nuevos instrumentos culturalmente relevantes.
Referencias
Arango-Lasprilla, JC (2006).Rehabilitación Neuropsicológica
[Rehabilitación neuropsicológica]. México DF, México:
Manual Moderno.
Arango-Lasprilla, JC, Olabarrieta-Landa, L., Rivera, D.,
Olivera Plaza, SL, De los Reyes Aragón, CJ, Calderón
Chagualá, JA, … & Quijano, MC (2015). Situación actual
de la neuropsicología en Colombia. En Arango-
Lasprilla, JC, & Rivera, D. (Eds.),Neuropsicología en
Colombia: Datos normativos, estado actual y desafíos
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