Es una extraordinaria historia de amor, con una impecable tensión
narrativa, Juan Villoro despliega una trama hecha de coincidencias, separaciones, misteriosas oportunidades de reencuentro, esta acción ocurre en una calle circular, trazada sobre la pista donde una vez corrieron caballos de carreras.
Trata de una historia de amor entre dos personas enamoradas el
uno del otro que son esposos y luego se vuelven ex esposos por azares del destino que separan sus caminos Nuria lo quería con misteriosa aquiescencia, como si lo amara a pesar de algo; pasaron 10 años, pero en cambio Juan Jesús odiaba ser aceptado por el departamento de la Condesa ya que por el tiempo que había pasado eran una pareja sin hijos ni un solo proyecto de colonización en tierras vírgenes.
Pero lo interesante es que esta historia nos narra una impresionante
historia de amor con unan gran trama y sobre todo las situaciones y sucesos que pasan una pareja ellos son Juan Jesús un pintor frustrado y Nuria una mujer de valores que, movidos por una fuerza inconsciente, crean una realidad alterna en donde su amor pueda tener una segunda oportunidad. Este mundo en el que su amor convive nuevamente y sus sentimientos son más intensos que la realidad, está hecho por medio de llamadas telefónicas entre los enamorados. Juan Jesús colocó la tarjeta y marcó el número
de Nuria. (al principio del párrafo está ubicado)
Nuria lo quería con misteriosa aquiescencia
como si lo amara a pesar de algo.
Diez años, demasiados para una pareja sin hijos
ni un proyecto de colonización. En 7 años no supo nada de ella.
Nuria desapareció, engullida por una zona
ingrávida.
Escucho su voz en la contestadora, el tono fresco
y optimista con que la conoció, aunque en el
fondo solo conocemos optimistas. Cuándo se separaron, Nuria desapareció de su órbita. Se fue a Nueva York como abducida por extraterrestres. Se divorciaron sin aspavientos.
Nuria abría una puerta y permitía que el la viera