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Monumento a los Caídos de la Generación del 28.

Las luchas, los levantamientos, las insurgencias o rebeliones siempre


comienzan como un constructo social basado en las identidades e intereses de
a quienes les atañe dicha controversia. El Monumento a los Caídos resulta ser
de las obras más emblemáticas de la Universidad Central de Venezuela, el
trasfondo que se agolpa tras dicha piedra esculpida es más controvertido de lo
que se creería. Un elemento identitario de libertad que se transformó en
avasallantes protestas pacíficas, intereses compartidos que se hicieron uno
solo, eso es dicho constructo social, todo ello enfocado en la capacidad
transformadora que tiene el individuo de impactar. Toda identidad que acaece
sobre los actores, inmersos e impregnados de ella la sociedad civil venezolana,
toda noción e idea de libertad que se hacía cada vez más grande dentro del
pecho de los estudiantes venezolanos.

Éstos hechos sólo existen una vez que se les otorga un significado, ¿será
entonces esa libertad, no como un libertinaje, sino como la idílica percepción
de vivir pacíficamente basándonos en ese interés común proyectado desde la
subjetividad de sus deseos de transformar de una u otra forma la sociedad que
cayó bajo la gruesa manta negra de la dictadura un elemento identitario? Todo
ello con base en una estructura predominante de hostigamiento hacia la
ideología que permeaba dentro del círculo del poder Ejecutivo de Venezuela.
Se sobreentiende que dicha ideología predominando pudiese ser tan coercitiva
como penetrable y hacerse un hueco dentro de las ideas de cada individuo,
¿qué podría ser más grande, entonces, que la capacidad de poder manipular
desde dentro a quienes ya se sentían identificados con dichas doctrinas
ideológicas que al final acabaron por perforar el pulmón de la sociedad civil?
Es caer y darse cuenta de que, a partir de dicha identidad general se puede
contrarrestar un controvertido problema cuando la identidad pasa a ser el
constructo social de toda una sociedad. El poder de las ideas siempre
sobrepasara el poder material.

La historia tras dicho Monumento es prueba de que a partir de prácticas


sociales, trabajando en aumentar la confianza para alcanzar objetivos
planteados en una cabeza y que esta mine en las demás.

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