Esto seria como el mundo al revés donde los malos se convierten en buenos, porque los científicos de Estados Unidos de la Universidad de Standford logran convertir las células cancerígenas en glóbulos blancos que son los que defienden el cuerpo de las enfermedades. Sin buscarlo, tratando de mantener las células cancerosas vivas para seguir estudiándolas les agregaron diferentes nutrientes y consiguieron que los glóbulos blancos se hicieran fuertes y se comieran a las células cancerosas. Esto permite que este coctel de proteínas se pueda convertir en una posible manera de tratar esta enfermedad, algo muy importante para los humanos. Los científicos buscan ahora un fármaco que haga lo que paso en el laboratorio y que ayude a los pacientes a mejorar. Aunque no es nuevo porque se basa en estudios anteriores de Thomas Graf, del Centro de Regulación Genómica de Barcelona, pero dejaron de experimentar por temas de costos y esto lo continuarán en Stanford; ellos creen que están en el camino adecuado, púes creen que este actúa como un perro que detecta las células cancerosas y es más fácil así ser atacadas por los glóbulos blancos. Algunos científicos del Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas, en Madrid, piensan que se debe seguir investigando y que es muy pronto para decir que es una solución a la enfermedad, pero en Stanford siguen muy positivos de que solo hace falta el fármaco y probar en humanos. Desde mi punto de vista, debemos ser positivos en que lo que encantararon sea una posible solución a esta enfermedad tan terrible.