Desafío interno

Un desafío es la actualización tecnológica. Hoy en día, casi puede guardar la

gestión de su organización en su bolsillo. El sistema informático le permite
comprender lo que está sucediendo en la empresa a través de su dispositivo
móvil. Las telecomunicaciones permiten el contacto directo con personas a
miles de kilómetros de distancia, generando negocios y abriendo oportunidades
sin necesidad de viajar.

Sin embargo, estas mismas ventajas se convierten en desafíos o peligros,

resultando en una reducción de la productividad, abuso del teletrabajo,
dificultades o incluso fallas en la adopción de nuevas tecnologías por el uso de
las redes sociales durante la jornada laboral.

Desafío externo
En áreas clave del comercio mundial, las distorsiones del mercado siguen
siendo graves. Por ejemplo, a pesar del Acuerdo sobre Agricultura de la OMC,
los productos agrícolas generalmente enfrentan mayores barreras comerciales
que los productos industriales. En promedio, los aranceles aplicados a los
productos agrícolas son tres veces más elevados que los aplicados a los
productos industriales. También es más probable que los productos agrícolas
se enfrenten a medidas no arancelarias. Estos incluyen cuotas (cuyo uso está
prohibido para otros productos) y regulaciones que, aunque apuntan a objetivos
legítimos de política pública, a veces restringen el comercio más allá de lo
necesario para lograr ese objetivo. El apoyo a los productores agrícolas sigue
siendo elevado, y más de dos tercios se proporciona a través de medidas que
distorsionan gravemente la producción y el comercio