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Principios Básicos del Diseño Experimental

Algunos principios básicos del diseño experimental tienen que ver con la formulación
del problema bajo investigación, la escogencia del diseño experimental, la ejecución del
experimento, el análisis de los datos y la interpretación de los resultados. Estos
principios se discutirán en forma general, dejando los detalles específicos referentes a
los diseños experimentales para sesiones posteriores.

Cuando se describieron los pasos de un experimento se enfatizó el aspecto estadístico


en particular. En la figura 1 se observa el "triángulo estadístico" formado por la
selección del diseño experimental, la formulación del modelo estadístico y el análisis de
los datos. Para garantizar el análisis estadístico y para incrementar su sensibilidad, se
debe tener en cuenta tres principios básicos en cualquier experimento: la replicación, la
aleatorización y el bloqueo o control local.

La replicación
Por esta se entiende que cada tratamiento (o alguno de los tratamientos) debe ser
aplicado a varias unidades experimentales. La replicación sirve para:

1. Proveer un estimado del error experimental, tal estimación se convierte en la


unidad básica para determinar si las diferencias observadas en los datos son
estadísticamente significativas
2. Incrementar la precisión por medio de la reducción de errores estándar.
3. Calcular una estimación más precisa del efecto de un factor en el experimento si
se usa la media muestral ( ) como una estimación de dicho efecto.

La Aleatorización
Consiste en que tanto la asignación del material experimental como el orden en que se
realizan las pruebas individuales o ensayos se determinan aleatoriamente y sirve para:

1. Garantizar la validez de la estimación del error experimental.


2. Garantizar la independencia de los errores o que las observaciones sean
variables aleatorias independientes. Esto es necesario para obtener pruebas de
significancia válidas y estimados de intervalos.
3. Eliminar el sesgo de tal manera que no se desfavorezca o discrimine a los
tratamientos y permite cancelar los efectos de factores extraños que pudieran
estar presentes.

Existen varias formas prácticas para la asignación aleatoria de los tratamientos a las
unidades experimentales; una es la numeración de los tratamientos, que luego a
manera de sorteo se extraen de una urna de fichas rotuladas con dicha numeración; el
orden en que aparecen los números corresponde al orden de asignación de los
tratamientos. También existen tablas que contienen números aleatorios y programas de
computadora que los generan. El proceso de asignar aleatoriamente las unidades
experimentales y los tratamientos se puede hacer de la siguiente manera:

Marque la unidades experimentales . Luego marque unos papelitos con los


números Coloque los papelitos en una bolsa . Seleccione un papelito y
márquelo por el reverso de donde esta marcado con el número , deje este papelito
fuera de la bolsa . Proceda nuevamente a seleccionar otro papelito y márquelo ahora
con el número . Continúe este proceso hasta que queden marcados todos los
papelitos como . Ahora si el papelito y
por consiguiente la unidad experimental esta asociada con la marca se aplica el
tratamiento a esta unidad experimental.

También se puede hacer el anterior proceso usando la tabla de números aleatorios.


Como ejemplo suponga que . Usted puede marcar las UE con
números de dos dígitos . Luego asocie los números y con la
UE 1 y ubicándose en cualquier lugar de la tabla se empieza a recorrerla en cualquier
sentido para localizar los números anteriores

El bloqueo o control local


En el cual la idea básica es particionar el conjunto total de las UE en subconjuntos
(bloques) que sean lo más homogéneo posible, eliminando de esta forma los efectos de
factores extraños que contribuyen a la variación sistemática de las diferencias entre las
unidades experimentales. Existen varias razones para bloquear en un diseño
experimental:

1. Puede incrementarse la precisión de un experimen

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