Matrícula: 152475
Grupo: EE41
vulnerables
Un aprendizaje y educación adecuados son necesarios para todos los ámbitos, por
ejemplo, para alcanzar y nivelar desigualdades entre el bienestar social y económico;
propiciar el desenvolvimiento social de las personas; tener mejores oportunidades de
empleo; elevar las condiciones culturales de la población; ampliar las oportunidades de
los jóvenes y adultos, y muy importante, para el impulso de la ciencia, la tecnología y la
innovación.
Los sistemas educativos están regidos por las políticas establecidas internacional y
nacionalmente, con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas, mediante la
propuesta de una educación inclusiva y equitativa, sin embargo, diversos organismos
mundiales reconocen que la educación en países en desarrollo presenta múltiples
desafíos para lograr dichos objetivos, puesto que se requiere de mayor constancia,
evaluación de los sistemas educativos nacionales, implementación de nuevas políticas,
etc., priorizando el desarrollo integral de los individuos.
1. Políticas educativas
Cabe mencionar que todas las políticas públicas son cambiantes, sin embargo, para
percibir los cambios realizados en las condiciones de vida de las personas, debe
mantener algún sentido de continuidad con el paso del tiempo; las políticas se constituyen
por una parte rígida (valores y principios), y una parte flexible (programas y actividades
administrativas específicas para cumplir con los principios), por lo que se deben adaptar a
los diferentes contextos socioculturales (Instituto Nacional para la Evaluación de la
Educación [INEE], 2016).
En este sentido, es preciso definir también a las políticas educativas, que son aquellas
actividades, estrategias, programas, que tienen como objetivo impulsar la educación,
tomando en cuenta la productividad, las potencialidades de cada persona, sus valores,
con el mismo objetivo de mejorar su calidad de vida; dichas acciones, claramente, se
encuentran dentro del marco educativo de cada país, y se establecen a corto, mediano
y/o largo plazo (Moreno, 2010; IEU, 2021), en el caso de México, las políticas educativas
se encuentran establecidas en el Plan Nacional de Desarrollo, elaborado cada 6 años por
el Ejecutivo Federal (IEU, 2021).
En el mundo existen gran cantidad de organismos que se conforman por distintos países
que tienen problemáticas y objetivos en común, esto les permite comparar procesos,
evaluaciones, resultados, para fungir como un apoyo para el establecimiento de las
mejores políticas, en este caso específico, de las políticas educativas.
Por otro lado, la OCDE (Ischinger, 2010) hace referencia a que la evaluación y los
incentivos para los docentes son de suma importancia, ya que con esto se logra
consolidar la motivación para que los maestros y las maestras de todos los niveles
cumplan con ciertos estándares dentro de las aulas, además la evaluación del aprendizaje
en los alumnos debe dar una visión más amplia acerca de los procesos educativos que se
están llevando a cabo, sin embargo, se debe tener en cuenta el contexto socioeconómico
de las comunidades, pues no es lo mismo evaluar a un alumno de escuela rural a uno de
escuela urbana.
Otro de los puntos que menciona la OCDE (Ischinger, 2010), en cuanto a evaluación de
docentes, es que esta debe ser justa y objetiva, donde se le reconozca a todos los
maestros y maestras por su desempeño y contribución a los resultados educativos de los
alumnos, además se menciona el mejoramiento del reclutamiento, sin embargo, pueden
existir casos de corrupción interna dentro del sistema, como la compra-venta de plazas
laborales que impiden la búsqueda de nuevos talentos que realmente aporten y que
tengan como objetivo mejorar la calidad de vida de los alumnos mediante la educación.
Con base en lo anterior y comparando los datos del Centro de Investigación Económica y
Presupuestaria (CIEP, A. C., 2021), dichas políticas educativas a la fecha no se cumplen,
pues los recursos financieros destinados al Programa para el Desarrollo Profesional
Docente fueron recortados en un 48.8%.
Según el INEE (2018), los desafíos que presenta México en materia de educación
comparándolo con los demás países de América Latina, son que es una nación muy
poblada, con grandes porcentajes de niños y jóvenes, lo que imposibilita una total
cobertura, ocupando el segundo lugar, después de Brasil; la mayor concentración de
población es en zonas rurales, así como la existencia de comunidades indígenas, quienes
no tienen una oferta educativa de calidad; los niveles de pobreza son altos, contrastante
con que es uno de los países latinoamericanos con los más altos niveles de ingreso per
cápita; en toda Latinoamérica existen desigualdades educativas en materia de acceso,
permanencia y aprendizaje, y se piensa que los esfuerzos por mantener mejorar el ritmo
de estos avances es cada vez más lento, incluso puede detenerse.
Un punto que resaltar es precisamente que México se encuentra entre los 8 países más
ricos de Latinoamérica, pero al mismo tiempo está dentro de los 8 países con mayor
porcentaje de población en situación de pobreza, lo que evidentemente obstaculiza el
cumplimiento del derecho universal a una educación de calidad, puesto que no es posible
disminuir las desigualdades que ya existen en la población del país (INEE, 2018).
Conclusión
Existen fuertes contradicciones dentro del sistema educativo que de alguna manera
atentan contra los derechos humanos de las personas de grupos vulnerables, debido a
que no se toman en cuenta las características socioculturales y económicas de estas
poblaciones.
No es un secreto que los recursos económicos siempre han sido un obstáculo para
favorecer y satisfacer las necesidades específicas de las instituciones educativas del país,
se requiere de capacitación docente, incentivos monetarios y no monetarios,
mejoramiento del reclutamiento de docentes con vocación, mejoramiento de
infraestructura educativa, abastecimiento de materiales didácticos que satisfagan las
necesidades de la diversidad de alumnos, evaluación de enseñanza – aprendizaje de los
maestros y alumnos, entre otras cosas, y para cada uno de estos aspectos se requieren
recursos económicos en grandes cantidades.
Si bien es cierto que el Gobierno actual justifica el recorte de recursos para favorecer
otros programas como lo es el de becas, estas acciones no son suficientes para tener
mayor cobertura y mejor calidad de la educación.
Se ha enfatizado que una educación inclusiva es el camino para generar una sociedad
inclusiva, no sólo hablando de las personas pertenecientes a la diversidad funcional, sino
también de todas aquellas minorías lingüísticas, étnicas, así como la igualdad entre
géneros y oportunidades para todas las clases sociales, empero, las políticas educativas
internacionales deben ser adaptadas al contexto de cada país miembro de las grandes
organizaciones encaminadas al respeto y valoración de los derechos humanos, es
importante valorar y revisar la estructura que está inmersa en las cuestiones políticas, en
este caso, de México, reorganizando las estrategias que fortalezcan el sistema educativo
y que al mismo tiempo se regulen, tomando como marco de referencia los procesos y
políticas educativas exitosas de otros países, respetando las características nacionales
propias, y priorizando la continuidad de la evaluación de las estrategias, actividades,
reformas, acciones, para poder tener una línea base que garantice su cumplimiento y
efectividad.
Referencias