Cometario por la estudiante: Jhaline Hinestroza

Cédula: 5-705-357

A leer y conocer la historia de Helen primero me sorprendió ver como un

ser humano nace sano y luego Dios permite situaciones en nuestras
vidas para glorificar su santo y poderoso Nombre. Jeremías 18:6 “¿No
podré yo hacer de vosotros como este alfarero, oh casa de Israel? Dice
Jehová. He aquí, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel.

Así como el alfarero le da forma a una vasija de barro y luego se le daña

y vuelve a construir otra, así mismo Dios permitió toda esa situación en la
vida de Helen ya que la historia de ella nos cuenta que no nació ciega ni
sorda, sino como una niña perfectamente normal. Pero que diecinueve
meses después contrajo una enfermedad que los doctores describieron
como una congestión aguda del estómago y el cerebro. Dejando como
resultados sordera, ceguera e incapaz de hablar.

Helen se convirtió en una tremenda fuerza de voluntad, en una oradora

y autora mundialmente famosa. Estableció la lucha por los
sensorialmente discapacitados del mundo como la meta de su vida. 

Helen y Anne Sullivan viajaron a más de 39 países, e hicieron varios

viajes a Japón, llegando a ser favorecidas por la gente japonesa.

Hoy día dejó un legado a toda la humanidad de perseverancia y

voluntad.

Ellas desarrollaron una linda y larga amistad por 49 años…tremendo.

Finalmente ante toda dificultad, adversidad o situaciones adversas, Dios

en su palabra nos dice en Josué 1:9 “Mira que te mando que te esfuerces
y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará
contigo en donde quieras que vayas.”