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Prefacio
Introducción: Contrae la nariz
Capítulo 1: Los orígenes de la brujería
Capítulo 2: Brujería carismática
Capítulo 3: Expulsando demonios
Capítulo 4: Rompiendo las cadenas
Capítulo 6: Decenas de miles
Capítulo 7: Características de la brujería carismática
Capítulo 8: Respeta la Unción
Capítulo 9: Bajo lo que estás sentado
Capítulo 10: Saúl y una bruja
Capítulo 11: Renovar tu fuerza
Capítulo 12: Llevar la Palabra a la Acción
Capítulo 13: El paso
PREFACIO
CONTRAE LA NARIZ
La semilla crece
Entonces he aquí, ella comió la fruta. ¡Y fue bueno!
¿Cuántos de ustedes se sintieron de esa manera cuando solían
recibir un mordisco de pecado? Te gustó la forma en que sabía. Ese
asunto, el hurto, la pequeña mentira piadosa. Se sentía bien y
pensabas que podías hacerlo de nuevo. Nadie necesitaba decirte
qué hacer. Eso es, por supuesto, hasta que te diste cuenta de
cuáles eran las consecuencias. Echemos un vistazo a lo que sucede
en los versículos 14-24:
Así que el Señor Dios le dijo a la serpiente: "Porque has hecho esto,
eres maldecido más que todo el ganado, y más que toda bestia del
campo; en tu vientre irás, y comerás polvo todos los días de tu vida.
Y pondré enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y su
simiente; Él te herirá la cabeza, y tú herirás Su talón."
Y a la mujer, le dijo: "Multiplicaré grandemente tu dolor al concebirlo;
en el dolor, darás a luz hijos; tu deseo será para tu esposo, y él
gobernará sobre ti".
Luego a Adán, le dijo: "Porque has prestado atención a la voz de tu
esposa, y al árbol del cual te mandé, diciendo: 'No comerás de él',
maldito es la tierra por tu causa; en el trabajo, comerás de ella todos
los días de tu vida. Tanto espinas como cardos te traerá. Y comerás
la hierba del campo. En el sudor de tu cara comerás pan, hasta que
regreses al suelo. Porque de ella fuiste sacado; porque polvo eres, y
al polvo, volverás'.
Y Adán llamó a su esposa Eva, porque ella era la madre de todos
los vivos. Y también para Adán y su esposa, el Señor hizo túnicas
de ropa y las vistió.
Entonces el Señor Dios dijo: "He aquí, el hombre se ha vuelto como
uno de nosotros, para conocer el bien y el mal. Y ahora, para que no
saque su mano y también tome del árbol de la vida, y coma, y viva
para siempre" - Por lo tanto, el Señor Dios lo envió fuera del Jardín
del Edén para labrar la tierra de la que fue sacado. Así que expulsó
al hombre; y colocó querubines en llamas al este del Jardín del
Edén, y una espada en llamas que giró en todos los sentidos, para
proteger el árbol de la vida". (NKJV)
Quiero que te des cuenta de esto acerca de la semilla del engaño:
hay un elemento de verdad en ello. En el versículo 22 del capítulo 3,
Dios dice: "He aquí, el hombre ha llegado a ser como uno de
nosotros".
Satanás sedujo a Eva para que pecara diciéndole que Dios no
quería que los humanos supieran las cosas que Él sabía. Esto era
cierto, pero era para su protección, no para su daño. Él no quería
que experimentaran el dolor que el pecado traería. Él quería que
fueran eternamente felices.
Cualquiera que haya sido engañado por el mal sabe que esto es
cierto. Había un grado de verdad en la tentación que los atrajo.
Así que tal vez estabas tentado a tener una aventura, y realmente
estabas en un matrimonio difícil. O tal vez robaste algo, y el dueño
de la tienda realmente estaba cobrando demasiado. O hiciste algo
para dañar la carrera de otra persona, y esa persona realmente lo
hizo venir.
El mal funciona al hacernos enfocarnos en nuestros deseos.
Estamos enojados, lujuriosos o estresados. Sentir una emoción
legítima puede ser la semilla del pecado que cometemos si no
tenemos cuidado. Es solo después de que lo hacemos que el
engañador nos deja ver las consecuencias.
¡Y mira lo que le pasó a mi Adán y Eva!
La mujer fue maldecida a tener gran dolor al concebirla (Génesis
3:16). Eva iba a tener dolores de parto, náuseas matutinas y
depresión posparto.
Señoras, ¿se imaginan experimentar un embarazo sin ningún dolor?
Acabas de descubrir que estás teniendo un bebé, y todo es
primavera y helado. Esa semilla dentro de ti nace de una manera
natural y sin esfuerzo.
Es debido a la maldición del pecado que tener un bebé es una
lucha, un parto. Los niños son una bendición del Señor, y la mayoría
de las mamás que conozco dicen que el dolor valió la pena. Pero
Dios creó un mundo donde todo sucedió con facilidad.
Luego mira al hombre. Tampoco hay más vida despreocupada para
él. El suelo iba a traer espinas y cardos para él (Génesis 3:18). Si
quería fruta deliciosa, iba a tener que trabajar para ello. Durante la
mayor parte de su vida, la única forma en que comerá es a través
del sudor de su frente.
Entonces el Señor cerró el Jardín y puso un ángel frente a él con
una espada en llamas. Adán y Eva tuvieron que encontrar otro lugar
para vivir, donde siempre había conflictos, siempre trabajo. Pero
mira lo que Dios hizo.
BRUJERÍA CARISMÁTICA
EXPULSANDO DEMONIOS
"Pero Pablo escogió a Silas y partió, siendo encomendado por los
hermanos a la gracia de Dios. Y pasó por Siria y Cilicia,
fortaleciendo las iglesias" (Hechos 15:41-42).
Un espíritu de adivinación
Ahora sucedió, mientras íbamos a la oración, que cierta esclava
poseída con un espíritu de adivinación nos conoció, quien trajo a
sus amos muchas ganancias por adivinación. Este espíritu siguió a
Pablo y a nosotros y clamó, diciendo: "Estos hombres son siervos
del Dios Altísimo, que nos proclaman el camino de la salvación". Y
esto lo hizo durante muchos días.
Pero Pablo, muy molesto, se volvió y le dijo al espíritu: "Te mando
en el nombre de Jesucristo que salgas de ella". Y salió esa misma
hora. Pero cuando sus amos vieron que su esperanza de ganancias
se había ido, se apoderaron de Pablo y Silas y los llevaron al
mercado a las autoridades.
Y los llevaron a los magistrados y dijeron: "Estos hombres, siendo
judíos, perturban enormemente a nuestra ciudad, y enseñan
costumbres que no son legales para nosotros, siendo romanos,
recibir y observar". Entonces la multitud se levantó junta contra
ellos, y los magistrados les arrancaron la ropa y ordenaron que los
golpearan con varas. Y cuando les habían puesto muchas rayas, los
arrojaron a la cárcel, ordenando al carcelero que los mantuviera
seguros. Habiendo recibido tal cargo, los puso en la prisión interior y
les sujetó los pies en existencias. (Hechos 16:16-24)
La esclava en esta historia estaba poseída por un espíritu de
adivinación. La adivinación es una pitón, un constrictor. Puede
asfixiarte la vida. Utiliza malas prácticas como una forma de obtener
información. A menudo tiene que ver con lo oculto y la adivinación.
En Jeremías 14:14, leemos:
Y el Señor me dijo: "Los profetas profetizan en Mi nombre. No los he
enviado, no les he mandado, ni les he hablado; te profetizan una
visión falsa, una adivinación, una cosa sin valor y un engaño del
corazón" (NKJV).
Dios no quiere que busquemos sabiduría en estos espíritus, porque
no son de Él.
La damisela en Hechos estaba siendo utilizada como adivina, e iba
a entregar el dinero que ganaba a sus amos. Su identidad fue
robada, y el espíritu demoníaco estaba a su alrededor, la hija de
esta madre. Estaba tomando su paz, su propósito y su destino. Su
amo la estaba manipulando.
De repente, hubo un disturbio en la ciudad. Día tras día, esta chica
comenzó a proclamar: "¡Estos hombres son siervos del Dios
Altísimo!" (Hechos 16:17).
Lo que la niña estaba diciendo era cierto. Eran siervos de Dios, que
proclamaban el camino de la salvación. Pero nunca necesitas al
Diablo para promover tu ministerio. Si sientes la necesidad de que
algún mal valide tu llamado, regresa y compruébate en el altar. Tal
vez Dios no te está llamando a ese ministerio en particular en
absoluto.
Pablo tenía un espíritu perspicaz, y comenzó a sentirse molesto o
muy molesto (versículo 18). Los espíritus demoníacos harán que la
atmósfera sea pesada y te encontrarás deprimido. Es importante
nunca anular tu discernimiento, que es más que solo intuición. Te
permite saber cuándo un espíritu no es del Señor.
Debemos ser "sabios como serpientes, pero inofensivos como
palomas" (Mateo 10:16). El hecho de que seamos amables y
compasivos no significa que no podamos llamar al Diablo cuando lo
veamos.
Pablo estaba profundamente preocupado por este espíritu de
maldad. Se cansó de eso, y se lo ordenó a la niña (Hechos 16:18).
La niña entró en razón y su semblante cambió. De repente, esa
mirada hundida la dejó. Comenzó a verse y sentirse como una joven
sana.
Pablo tenía la unción y la autoridad para quebrantar ese espíritu
demoníaco. Él fue capaz de romper a esa joven fuera de la
esclavitud.
Pablo, quien escribió gran parte del Nuevo Testamento, una vez
persiguió a la iglesia, y ahora está siendo usado poderosamente por
Dios. Le hizo saber al Diablo que no estaba poseído por el pasado,
sino poseído por el futuro. Los milagros ocurren todos los días.
Un mentor espiritual
TD Jakes es el pastor de The Potter's House en Dallas y uno de los
predicadores más conocidos del país. Una vez dijo: "Nunca estaría
donde estoy sin el hermano Graham, mi mentor espiritual".
Dios puede ayudarte a conquistar a tus demonios y usarte de
maneras que nunca soñaste posibles. Y a veces, él usa cristianos
fuertes para guiarnos a nuestro destino.
Cuando estás buscando un mentor espiritual, tienes que encontrar a
alguien a quien quieras ser. Fellas, ¿hay alguien en tu iglesia que
sea un esposo fuerte y un padre piadoso? Señoras, ¿ven a una
mamá por ahí que cría niños cristianos felices y todavía tiene tiempo
para dar a los pobres?
También tendrás que considerar cómo vas a aprender cosas de esa
persona. ¿Te vas a reunir para tomar un café una vez a la semana?
¿La videoconferencia hará el truco? ¿Tiene esta persona el tiempo y
la fuerza emocional para ser tu mentor?
Tu mentor puede ser alguien que orará por ti y te ofrecerá una
visión. Pueden escucharte y brindarte consejos honestos y piadosos
que pueden ayudarte en tu viaje. Hay momentos en nuestras vidas
en los que podemos sentirnos abrumados por nuestras
responsabilidades. Un mentor que es un poco mayor puede darte
sabiduría y asegurarte que todo estará bien.
A veces, simplemente necesitas a alguien que escuche tus triunfos y
experiencias. Pueden regocijarse contigo, empatizar y ayudarte en
tu camino. El mentor adecuado para ti será humilde y enseñable.
Incluso si han triunfado a través de mucho en su viaje cristiano,
mantienen su humildad como un bendito hijo de Dios.
Ora para que Dios te muestre un mentor en tu iglesia o comunidad
cristiana. Comienza a pensar en las posibilidades y llévalas al Señor
en oración. Invita a esa persona a desayunar y pregúntale si será tu
mentor.
Para muchas personas, guiar a alguien más a lo largo de su viaje
espiritual es una experiencia de la que también pueden beneficiarse.
Si esa persona es un jubilado o un nido vacío, puede agradecer la
oportunidad de llenar su tiempo ayudando a la próxima generación.
Otros, sin embargo, pueden no tener tiempo en este momento.
Tome eso como una señal clara y pase a otro individuo.
Dios quiere hacer cosas maravillosas a través de ti. Asegúrate de
tener comunión con aquellos que pueden ayudarte a desarrollar un
ministerio poderoso y de largo alcance para Cristo.
Saúl el Desobediente
La Biblia nos da algunas advertencias acerca de las cosas que
podrían suceder si no obedecemos la palabra de Dios. Hay
momentos en que los líderes demuestran arrogancia, asumiendo
que están por encima de todos los demás. Creen que han llegado.
Todos están por debajo de ellos, y sus propios talentos son para
agradecer por su éxito. Este es un lugar peligroso para estar y la
semilla misma de la brujería. Echemos un vistazo a lo que le
sucedió a Saúl, quien fue ungido por Dios para ser el Rey de Israel
por su profeta Samuel. Sin embargo, Saúl dio por sentada su
unción, y fue su perdición.
Ahora la Palabra del Señor vino a Samuel, diciendo: "Lamento
mucho haber establecido a Saúl como rey, porque él se ha alejado
de seguirme, y no ha cumplido Mis mandamientos". Y afligió a
Samuel, y clamó al Señor toda la noche. Así que cuando Samuel se
levantó temprano en la mañana para encontrarse con Saúl, se le
dijo a Samuel, diciendo: "Saulo fue al Carmelo, y de hecho,
estableció un monumento para sí mismo, y ha seguido dando
vueltas, pasado y ha ido a Gilgal". Entonces Samuel fue a Saúl, y
Saulo le dijo: "¡Bienaventurado eres tú del Señor! He cumplido el
mandamiento del Señor".
Pero Samuel dijo: "¿Qué es entonces este balido de ovejas en mis
oídos, y el bajón de bueyes que escucho?"
Y Saúl dijo: "Los he traído de los amalecitas; porque el pueblo
perdonó lo mejor de las ovejas y los bueyes, para sacrificar al Señor
tu Dios; y el resto lo hemos destruido por completo".
Entonces Samuel le dijo a Saúl: "¡Cállate! Y te diré lo que el Señor
me dijo anoche".
Y él le dijo: "Habla".
Entonces Samuel le dijo: "Cuando eras pequeño a tus propios ojos,
¿no eras jefe de las tribus de Israel? ¿Y no te ungió el Señor Rey
sobre Israel? Ahora el Señor te envió a una misión, y dijo: 'Ve, y
destruye por completo a los pecadores, a los amalecitas, y lucha
contra ellos hasta que sean consumidos'. ¿Por qué entonces no
obedeciste la voz del Señor? ¿Por qué te abalanzaste sobre el botín
y hiciste el mal a los ojos del Señor?"
Y Saulo le dijo a Samuel: "Pero he obedecido la voz del Señor, y he
ido a la misión en la que el Señor me envió, y he traído de vuelta a
Agog, rey de Amalec; He destruido por completo a los amalecitas.
Pero el pueblo tomó del saqueo, ovejas y bueyes, la mejor de las
cosas que deberían haber sido completamente destruidas, para
sacrificar al Señor tu Dios en Gilgal".
Entonces Samuel dijo: "¿Tiene el Señor tan grande deleite en las
ofrendas y sacrificios quemados, como en obedecer la voz del
Señor? He aquí, obedecer es mejor que sacrificar, y prestar atención
que la grasa de los carneros. Porque la rebelión es como el pecado
de la brujería, y la terquedad es como la iniquidad y la idolatría.
Debido a que has rechazado la palabra del Señor, él también te ha
rechazado de ser rey".
Entonces Saúl le dijo a Samuel: "He pecado, porque he transgredido
el mandamiento del Señor y tus palabras, porque temía a mi pueblo
y obedecía su voz. Ahora, por lo tanto, por favor perdona mi pecado,
y regresa conmigo, para que pueda adorar al Señor".
Pero Samuel le dijo a Saúl: "No volveré contigo, porque has
rechazado la palabra del Señor, y el Señor te ha rechazado de ser
rey sobre Israel". (1 Samuel 15:10-26)
Podemos ver algunas cosas aquí. En primer lugar, Samuel
desarrolló arrogancia porque olvidó que el Señor lo había ungido
para ser rey cuando era "pequeño a sus propios ojos" (versículo 17).
Esto sucede a veces con profetas y líderes. Comienzan a creer que
están haciendo curaciones, milagros y maravillas a través de su
propia fuerza. Ahora que Saúl tenía la corona, asumió que era
intocable. No creía que necesitara a nadie más. Cuando esto
sucede, comienzan a desobedecer la palabra del Señor. Y esta
rebelión es "como el pecado de la brujería" (versículo 23).
Samuel le había dado a Saúl instrucciones muy específicas. Debía
destruyen por completo todo lo que tienen, y no los perdonen. Pero
mata tanto al hombre como a la mujer, al bebé y al niño lactante, al
buey y a las ovejas, al camello y al burro. (1 Samuel 15:3b)
Sin embargo, Saúl desobedeció y permitió que su pueblo guardara
lo mejor de las cosas que deberían haber sido completamente
destruidas (versículo 21). Esto es lo que les sucede a los líderes de
Dios cuando están más preocupados por lo que la gente piensa que
por lo que Dios piensa. Y es una semilla de rebelión que Dios no
pasará por alto.
David y Goliat
Saúl sabía lo que le había costado su rebelión. Y nada lo llenó de
más celos que Dios ungiendo a un nuevo rey para que tomara su
lugar. Podemos ver en la historia de Saúl y David cómo la semilla de
la envidia puede conducir a la brujería carismática.
En primer lugar, es importante ver cómo, a diferencia de Saúl, David
obedeció al Señor a toda costa antes de convertirse en rey. Nada es
mejor ejemplo de esto que la historia de Goliat.
Ahora los filisteos reunieron a sus ejércitos para luchar... y Saúl y los
hombres de Israel se reunieron, y acamparon en el valle de Elah, y
se prepararon en campo de batalla contra los filisteos. Los filisteos
estaban en una montaña a un lado, e Israel estaba en una montaña
al otro lado, con un valle entre ellos.
Y un campeón salió del campamento de los filisteos, llamado Goliat,
de Gat, cuya altura era de seis codos y un tramo. Tenía un casco de
bronce en la cabeza, y estaba armado con una capa de correo, y el
peso de la capa era de cinco mil shekels de bronce. Y tenía una
armadura de bronce en las piernas y una jabalina de bronce entre
los hombros. Ahora el bastón de su lanza era como la viga de un
tejedor, y su punta de lanza de hierro pesaba seiscientos siclos; un
portador del escudo fue delante de él. Entonces se puso de pie y
clamó a los ejércitos de Israel, y les dijo: "¿Por qué habéis salido a
alinearos para la batalla? ¿No soy yo un filisteo, y ustedes los
siervos de Saúl? Escojan a un hombre para ustedes mismos, y
dejen que baje a mí. Si él es capaz de pelear conmigo y matarme,
entonces seremos tus siervos. Pero si prevalezco contra él,
entonces seréis nuestros siervos y nos serviréis". Y el filisteo dijo:
"Desafío a los ejércitos de Israel este día; dame un hombre, para
que podamos luchar juntos". Cuando Saúl y todo Israel escucharon
las palabras del filisteo, se sintieron consternados y muy asustados.
(1 Samuel 17:1-11)
Es importante vigilar lo que Goliat estaba diciendo. Era arrogante y
demasiado confiado. Su figura se elevaba sobre la de todos los
demás. La armadura de Goliat era impresionante, y su escudo era
tan pesado que tuvo que hacer que alguien más lo llevara por él.
Goliat no se sintió intimidado por Saúl. Ofreció a todo su ejército
como siervos si alguien del ejército israelita podía derrotarlo, pero
estaba seguro de que el pueblo de Dios se convertiría en sus
siervos. Y Saúl estaba aterrorizado.
Pero alguien con mucha menos experiencia y habilidad no estaba
asustado en absoluto.
Ahora David era el hijo de esa efratita de Belén de Judá, cuyo
nombre era Isaí, y que tenía ocho hijos. Y el hombre era viejo,
avanzado en años, en los días de Saúl. Los tres hijos mayores de
Isaí habían ido a seguir a Saúl a la batalla. Los nombres de sus tres
hijos que fueron a la batalla fueron Eliab el primogénito, junto a él
Abinadab, y el tercer Shammah. David era el más joven. Y los tres
mayores siguieron a Saúl. Pero David ocasionalmente iba y
regresaba de Saulo para alimentar a las ovejas de su padre en
Belén.
Y el filisteo se acercó y se presentó cuarenta días, mañana y tarde.
Entonces Isaí le dijo a su hijo David: "Toma ahora para tus
hermanos una efá de este grano seco, y corre hacia tus hermanos
en el campamento. Y lleva estos diez quesos al capitán de sus diez
mil, y mira cómo les va a tus hermanos y trae noticias de ellos".
Ahora Saúl y ellos y todos los hombres de Israel estaban en el Valle
de Elah, luchando con los filisteos.
Así que David se levantó temprano en la mañana, dejó a las ovejas
con un guardián, y tomó las cosas y fue como Jesse le había
ordenado. Y llegó al campamento cuando el ejército salía a la lucha
y gritaba por la batalla... Entonces, mientras hablaba con ellos,
estaba el campeón, el filisteo de Gat, Goliat por su nombre, que
venía de los ejércitos de los filisteos; y habló según las mismas
palabras... Y todos los hombres de Israel, cuando vieron al hombre,
huyeron de él y tuvieron un miedo terrible. Así que los hombres de
Israel dijeron: "¿Has visto a este hombre que ha venido?
Seguramente ha venido a desafiar a Israel, y será que el hombre
que lo mate, el rey enriquecerá con grandes riquezas, le dará a su
hija y le dará a la casa de su padre una exención de impuestos en
Israel".
Entonces David habló al hombre que estaba a su lado, diciendo:
"¿Qué se hará por el hombre que mata a este filisteo y le quita el
reproche a Israel? Porque ¿quién es este filisteo incircunciso, para
que desafíe a los ejércitos del Dios viviente?" (1 Samuel 17:12-26)
Entonces, David estaba de cabeza con un poco de grano y queso
para sus hermanos. Era demasiado joven para luchar en la batalla,
pero estaba sorprendido de lo que estaba pasando.
Vio a este gigante por ahí, pavoneándose y buscando problemas, y
dijo: ¿Quién es él? ¿Por qué cree que tiene derecho a desafiar al
Dios viviente? (versículo 26).
¡Hay tal contraste aquí con la desobediencia de Saúl! David no tenía
miedo de los hombres, ni siquiera de un gigante que probablemente
podría haberlo pisoteado en un segundo. Y no le importaba que
todos los hombres mayores se acobardaran de miedo. Todo lo que
estaba pensando era: "¡Cómo se atreve este hombre gigante de
metal a no escuchar a Dios!"
Saúl sintió la presión de su pueblo y cedió. David vio la presión de
sus hermanos, el ejército, el rey y un gigante. Sin embargo, continuó
reconociendo que Dios estaba por encima de todo.
¿Cómo es eso para una actitud cuando tienes cosas intimidantes en
tu vida? ¿Qué tal cuando tienes una unción y estás lidiando con la
pobreza, la enfermedad o el miedo?
Puedes mirar a tu gigante y decir: "No hay manera. Solo soy un
pequeño pastor de ovejas. No hay nada que pueda hacer, y ese tipo
me va a matar".
O bien, puedes mirarlo a los ojos y decirle: "Disculpe, pero ¿quién
es usted? Yo represento a Dios, y tienes mucho nervio desafiando a
Su pueblo".
Y mira lo que pasó después.
Entonces David le dijo a Saúl: "Que el corazón de nadie falle por
causa de él; tu siervo irá y luchará con este filisteo".
Y Saúl le dijo a David: "No eres capaz de ir contra este filisteo para
pelear con él; porque tú eres un joven, y él un hombre de guerra
desde su juventud".
Pero David le dijo a Saúl: "Tu siervo solía guardar las ovejas de su
padre, y cuando un león o un oso vino y sacó una oveja del rebaño,
salí tras ella y la golpeé, y liberé al hombre de su boca; y cuando se
levantó contra mí, lo atrapé por su barba, y lo golpeé y lo maté. Tu
siervo ha matado tanto al león como al oso, y este filisteo
incircunciso será como uno de ellos, viendo que ha desafiado a los
ejércitos del Dios viviente". Además, David dijo: "El Señor, que me
libró de la pata del león y de la pata del oso, me librará de la mano
de este filisteo".
Y Saúl le dijo a David: "¡Ve, y el Señor esté contigo!"
Así que Saúl vistió a David con su armadura, y se puso un casco de
bronce en la cabeza; también lo vistió con un abrigo de correo.
David se abrochó y trató de caminar, porque no los había probado.
Y David le dijo a Saúl: "No puedo caminar con estos, porque no los
he probado". Así que David se los quitó.
Luego tomó su bastón en la mano; y escogió para sí cinco piedras
lisas del arroyo, y las puso en una bolsa de pastor, en una bolsa que
tenía, y su cabestrillo estaba en su mano. Y se acercó al filisteo. Así
que el filisteo vino, y comenzó a acercarse a David, y el hombre que
llevaba el escudo fue delante de él. Y cuando el filisteo miró a su
alrededor y vio a David, lo descontuvo; porque era sólo un joven,
rojizo y guapo. Entonces el filisteo le dijo a David: "¿Soy un perro,
que vengas a mí con palos?" Y el filisteo maldijo a David por sus
dioses. Y el filisteo le dijo a David: "¡Venid a mí, y daré vuestra carne
a las aves del aire y a las bestias del campo!" (1 Reyes 17:32-44)
Ni Saúl ni Goliat pensaron que David tenía lo que se necesitaba
para matar a un gigante. Pero David sabía que podía hacer
cualquier cosa a través de Dios. El pastor pudo convencer a Saúl de
que lo dejara intentarlo, porque había matado leones y osos con sus
propias manos, y porque el rey israelita no tenía mejor opción.
Pero Goliat fue insultado. ¡No podía creer que el ejército israelita
tuviera el valor de enviar a un joven estudiante de último año de
secundaria a luchar contra un hombre de guerra experimentado e
intimidante! Se preparó para convertir Goliat en guiso de pájaros.
Pero, como David había señalado, tenía mucho nervio desafiando al
Dios viviente.
Entonces David le dijo al filisteo: "Vienes a mí con una espada, con
una lanza y con una jabalina. Pero vengo a vosotros en el nombre
del Señor de los ejércitos, el Dios de los ejércitos de Israel, a quien
habéis desafiado. Este día el Señor te entregará en mi mano, y te
golpearé y te quitaré la cabeza. Y este día daré los cadáveres del
campamento de los filisteos a las aves del aire y a las bestias
salvajes de la tierra, para que toda la tierra sepa que hay un Dios en
Israel. Entonces toda esta asamblea sabrá que el Señor no salva
con espada y lanza; porque la batalla es del Señor, y Él te dará en
nuestras manos".
Así fue, cuando el filisteo se levantó y se acercó para encontrarse
con David, que David se apresuró y corrió hacia el ejército para
encontrarse con el filisteo. Entonces David metió la mano en su
bolso y sacó una piedra; y lo colgó y golpeó al filisteo en su frente,
de modo que la piedra se hundió en su frente, y cayó sobre su rostro
a la tierra. Así que David prevaleció sobre el filisteo con una honda y
una piedra, y golpeó al filisteo y lo mató. Pero no había espada en la
mano de David. Por lo tanto, David corrió y se paró sobre el filisteo,
tomó su espada y la sacó de su vaina y lo mató, y le cortó la cabeza
con ella.
Y cuando los filisteos vieron que su campeón estaba muerto,
huyeron. (1 Samuel 17:45-51)
¡Esto es un milagro! Dios entregó al campeón filisteo al joven pastor
adolescente. ¡Todo lo que necesitaba era fe en Dios!
El Padre Celestial de David aseguró la victoria para toda la nación
israelita por medio de su alma joven y confiada. Saúl lo acogió, y
David se comportó sabiamente. El rey le dio autoridad sobre todos
los hombres de guerra (1 Samuel 18:5).
Pero no pasó mucho tiempo antes de que la semilla de la envidia
comenzara a crecer en Saúl. Exploremos lo que sucedió una vez
que Saúl se dio cuenta de que Dios era más feliz con el joven David
que con el rey de Israel.
CAPÍTULO 6
DECENAS DE MILES
Un ascenso a la cima
Ahora, cuando terminó de hablar con Saúl, el alma de Jonatán
estaba unida al alma de David, y Jonatán lo amaba como a su
propia alma. Saúl lo llevó ese día y ya no lo dejó ir a casa de su
padre. Entonces Jonatán y David hicieron un pacto porque él lo
amaba como a su propia alma. Y Jonatán se quitó la túnica que
llevaba encima y se la dio a David, con su armadura, incluso a su
espada, su arco y su cinturón.
Así que David salió dondequiera que Saúl lo envió, y se comportó
sabiamente. Y Saúl lo puso sobre los hombres de guerra, y fue
aceptado a los ojos de todo el pueblo y también a los ojos de los
siervos de Saúl. Ahora sucedió cuando regresaban a casa, cuando
David regresaba de la matanza de los filisteos, que las mujeres
habían salido de todas las ciudades de Israel, cantando y bailando,
para encontrarse con Saúl, con panderetas, con alegría y con
instrumentos musicales. Así que las mujeres cantaron mientras
bailaban, y dijeron:
"Saúl ha matado a sus miles,
Y David sus decenas de miles".
Entonces Saúl estaba muy enojado, y el dicho lo disgustó. Y él dijo:
"Ellos han atribuido a David diez mil, y a mí, sólo me han atribuido
miles. Ahora, ¿qué más puede tener sino el reino?" Así que Saúl
miró a David desde ese día en adelante. (1 Samuel 18:1-9, NVI.)
¡Echa un vistazo a lo bien que lo está haciendo David al comienzo
de este pasaje! No dejó que ese gigante lo intimidara; sabía que
Dios era más grande y más poderoso. ¡Cómo se atreve alguien, no
importa cuán alto sea, a desafiar a los ejércitos del Dios viviente!
Y Dios lo recompensó por su coraje. El mismo rey de Israel lo
acogió y no lo dejó ir a casa con su padre Isaí.
El hijo de Saúl, Jonatán, llegó a estar unido "al alma" de David
(versículo 1). Le dio su túnica y armadura, e incluso su espada
(versículo 4).
¿Alguna vez has tenido un amigo que estaba tan cerca que su alma
estaba entrelazada con la tuya? Esto significa que harías cualquier
cosa por ellos, porque los amas tanto como te amas a ti mismo.
Walkin' exitosamente como cristiano requiere compañerismo. Es
posible que no tengas un Jonathan en tu vida, pero puedes tener un
Ruby, un Mike, un padre o un líder de estudio bíblico. ¿Conoces a
alguien que ore por tus necesidades, incluso cuando no se lo pides?
¿Hay alguna persona con la que puedas contar sin importar en qué
tipo de pepinillo te hayas metido?
Cuando te conviertes en cristiano, Dios pone a Jonathans en tu vida,
pero necesitas ser capaz de reconocerlos. No se puede confiar en
todos los líderes y amigos de la iglesia. Un espíritu de
discernimiento te permite probar si estás tratando con un aliado o un
enemigo.
También es importante ver que David "se comportó sabiamente"
(versículo 5). No estaba bebiendo y carrusel y recibiendo garrapatas
a los generales del ejército. David estaba usando su cerebro. Sabía
cuándo decir algo y cuándo callar. Sabía cuándo era el momento de
luchar y cuándo dejar que el enemigo se hiciera a sí mismo. David
no dejó que sus sentimientos obtuvieran lo mejor de él, pero se
comportó con sabiduría y se armó en la fuerza del Señor.
Saúl reconoció la unción en David, y los siervos de su casa también
lo hicieron. David era muy respetado y venerado.
Bailar y cantar
Pero luego las damas de la ciudad salieron a la plaza, como lo
hacen después de una victoria en la batalla. Eran dancin' y
cantando'; tocaban instrumentos. Pero a Saúl no le gustaba lo que
decían.
¿Alguna vez has sido tratado a bailar y cantar después de una
importante victoria en Jesús? Tal vez no había gente del pueblo
cantando tus alabanzas, pero es posible que hayas obtenido una
buena calificación en un examen o que alguien en la iglesia
reconozca tu don. Tal vez se le pidió que dirigiera la adoración o
llevó a alguien a Cristo. Puede ser tentador dejarlo ir a tu cabeza.
La canción decía que David estaba matando a decenas de miles,
pero a Saúl, sólo a miles. Para Saúl, el mensaje era claro: la victoria
de David era más grande, y él importaba más que Saúl. ¿Qué
podría ser lo siguiente sino que el reino iría a David?
Ahora, mira lo que pasó. Saúl "miró" a David desde ese día en
adelante (versículo 9).
¿Alguna vez tienes la sensación de que alguien te está mirando?
Ese es un espíritu de brujería carismática.
Cuando alguien está celoso, te observará como un halcón,
buscando signos de debilidad y esperando que te equivoques. Están
amenazados por tu unción, por lo que están buscando una razón
para derribarte, para decir que son mejores que tú. Saúl estaba
preocupado por este joven en edad universitaria que había
encontrado el favor del pueblo y del Señor, este pastor que había
derribado a Goliat. La Biblia continúa diciendo:
Sucedió al día siguiente que un espíritu angustiante de Dios vino
sobre Saúl, y él profetizó dentro de la casa. Así que David tocaba
música con la mano, como en otras ocasiones; pero había una lanza
en la mano de Saúl. Y Saúl lanzó la lanza, porque dijo: "¡Pondré a
David en la pared!" Pero David escapó de su presencia dos veces.
Ahora Bien, Saulo tenía miedo de David, porque el Señor estaba
con él, pero se había apartado de Saúl. Por lo tanto, Saúl lo apartó
de su presencia y lo convirtió en su capitán más de mil; y salió y
entró delante de la gente. Y David se comportó sabiamente en todos
sus caminos; y el Señor estaba con él. Por lo tanto, cuando Saúl vio
que se comportaba muy sabiamente, le tuvo miedo. Pero todo Israel
y Judá amaban a David, porque él salió y entró delante de ellos". (1
Samuel 18:10-16)
Así que Dios envió un espíritu angustiante que estaba molestando al
rey Saúl. Y David, como lo había hecho en el pasado, tocó música
para que el rey calmara su alma. ¿Y qué hizo el rey?
El versículo 10 dice: "Pero había una lanza en la mano de Saúl".
¿Alguna vez has notado una lanza en la mano de aquellos que se
supone que te están asesorando? De repente, comienzan a señalar
lo que estás haciendo mal, diciendo que no estás realmente ungido
y que necesitas ser disciplinado. En lugar de animarte, comienzan a
hacerte sentir incapaz de hacer un buen trabajo. Dicen: "Todo lo que
obtuve fueron mil, y él obtuvo decenas de miles". Deciden que eres
una amenaza para ser destruido.
¿Por qué Saúl estaba tan celoso? Dios había dejado a Saúl y ahora
estaba con David. ¿Y por qué fue eso?
La respuesta simple es que David era obediente, y Saúl no lo era.
Como vimos en el último capítulo, Saúl falló en la misión que Dios le
dio al no destruir todos los restos de los amalecitas. Sin embargo,
David obedeció matando a Goliat, incluso cuando nadie más pensó
que podría tener éxito.
La envidia de Saúl proviene de un espíritu de arrogancia, de
egocentrismo. Nuestro trabajo es simplemente hacer lo que Dios
nos ha dicho que hagamos, sin importar lo que pensemos de la
asignación.
En el pasado, el rey Saúl fue ungido a pesar de su pequeñez a los
ojos del Señor. Vea cómo fue elegido.
Ahora bien, el Señor le había dicho a Samuel al oído el día antes de
que Saúl viniera, diciendo: "Mañana por esta época, te enviaré a un
hombre de la tierra de Benjamín, y lo ungirás comandante sobre mi
pueblo Israel, para que salve a mi pueblo de la mano de los filisteos;
porque he mirado a Mi pueblo porque su clamor ha venido a Mí."
Así que cuando Samuel vio a Saúl, el Señor le dijo: "Ahí está, el
hombre del que te hablé. Éste reinará sobre Mi pueblo."
Entonces Saúl se acercó a Samuel en la puerta y dijo: "Por favor,
dime, ¿dónde está la casa del vidente?"
Samuel respondió a Saúl y dijo: "Yo soy el vidente. Sube delante de
mí al lugar alto, porque hoy comerás conmigo; y mañana te dejaré ir
y te diré todo lo que hay en tu corazón. Pero en cuanto a tus burros
que se perdieron hace tres días, no te preocupes por ellos, porque
han sido encontrados. ¿Y sobre quién está todo el deseo de Israel?
¿No está en ti y en toda la casa de tu padre?"
Y Saúl le respondió: "¿No soy yo un benjaminita, de la más pequeña
de las tribus de Israel, y mi familia la menor de todas las familias de
las tribus de Benjamín? ¿Por qué entonces me hablas así?"
... Entonces Samuel tomó un frasco de aceite y lo vertió sobre su
cabeza y lo besó y dijo: "¿No es porque el Señor te ha ungido
comandante sobre Su herencia?" (1 Samuel 9:17-21, 10:1)
Saulo había olvidado su unción, cómo Dios lo había elegido de entre
los más pequeños de las tribus de Israel. Y él era de la menos
importante de todas las familias de esa tribu. No era la propia fuerza
de Saúl lo que lo había llamado.
Pero se olvidó de todo. Saúl desobedeció a Dios, quien lo había
sacado de la nada y lo había llevado al liderazgo. Comenzó a
pensar: "Oye, mírame", con esa actitud pomposa, como si no
pudiera hacer nada malo. Y no podía soportar que Dios estuviera
ahora con otra persona.
¿Sabes lo que Saúl debería haber hecho como padre espiritual?
Debería haber pasado esa batuta y decir: "Sal y haz cosas aún más
grandes de las que he hecho".
Así es como Jesús dirigió Su ministerio (Juan 14:12). Él quería que
Sus discípulos salieran y hicieran milagros aún más impresionantes.
Un verdadero líder espiritual no se dejará intimidar por lo que haces
por el Señor. Confían en su propia unción y saben que han corrido
una buena carrera de fe.
Vemos que esto sucede en iglesias competitivas todo el tiempo. La
gente dice: "¿Cómo es que él tiene más cosas que yo, más me
gusta en Facebook que yo?" Se supone que estamos derribando
fortalezas, derrotando a los poderes de la oscuridad. Sin embargo,
estamos siendo distraídos y devorados por los celos el uno por el
otro.
Escucha, lo que Sea que Dios te llame a hacer, hazlo al Señor. Es
posible que te haya convertido en una ama de casa, un conductor
de camión o un maestro. Puedes usar tu don para alcanzar a las
personas profundamente para Jesús.
No vayas a mirar a tu alrededor y decir cosas como: "Tracy, no
quiero ser un cocinero de línea. Este tipo tiene un ministerio de seis
mil personas".
Moisés tenía un ministerio de ocho personas, y cambió la
composición del mundo.
Una vez que comiences a compararte, serás miserable. No sabes
todo sobre la vida de otra persona. Mira a Dios y agradece tu
ministerio. Hazlo con todo tu corazón y al Señor. Él verá eso, y Él te
recompensará.
CAPÍTULO 7
CARACTERÍSTICAS DE LA BRUJERÍA
CARISMÁTICA
Intimidación
La intimidación ocurre cuando alguien más trata de hacernos
tímidos o temerosos. Las personas que tratan de intimidarnos
quieren que nos acobardemos en la derrota, pensando que ellos son
mejores y que nosotros somos inferiores.
Puedes reconocer un espíritu envidioso cuando alguien necesita
intimidarte. Estos predicadores pueden usar su púlpito como un
látigo hasta que todos estén de acuerdo con ellos. Su aprobación es
casi imposible de obtener. Te sientas debajo de ellos y sientes
temor, creyendo que nunca podrías ser digno del amor de Dios. Es
posible que estos predicadores ni siquiera tengan una unción, y
usan sus plataformas para asustar a las personas para que se
lealtadn.
Los líderes de la iglesia pueden tratar de intimidarte diciéndole que
está mal visitar otras iglesias o ir a avivamientos. ¿Por qué? No
deben preocuparse cuando alguien en su congregación quiera ir a
otro lugar para una visita. Si tienen miedo de perderte, es porque no
te están alimentando bien. No te están cuidando, amándote y
nutriéndote.
La intimidación también puede provenir de aquellos en nuestras
familias o círculos de pares. A menudo puede sentirse asustado a
su alrededor. Tienes miedo de hacer contacto visual o darte cuenta
de que estás hablando con voz suave. O puede ponerse inquieto y
tratar de terminar la conversación lo más rápido posible.
Alguien que está tratando de intimidarte intentará usar cualquier
información que tenga sobre ti en tu contra. Pueden ser muy
amables contigo a veces, pero comienzas a tener la sensación de
que están buscando suciedad. Te harán saber de maneras sutiles u
obvias que si los molestas, intentarán destruirte contando tus feos
secretos.
Las personas intimidantes mienten con facilidad y levantan la voz a
menudo para que otras personas se asusten y hagan lo que dicen.
Los esposos celosos pueden usar esta táctica con sus esposas. Los
líderes espirituales envidiosos pueden volverse más fuertes, por lo
que sentirás que debes obedecer todo lo que dicen o enfrentar su
ira.
Alguien que es intimidante usará el humor y el sarcasmo para
menospreciarte. Contarán un pequeño chiste "inofensivo" frente a
otros a su costa. O intentarán hacerte ver y sentirte mal señalando
debilidades en tu apariencia, como tus zapatos rasgados. De
repente te sientes poco atractivo, descuidado o tonto.
Una persona intimidante puede recordarle sus fracasos pasados
cuando está comenzando a tener éxito. Dicen cosas como: "Oh,
recuerdo cuando dijiste esto, y fue tan estúpido".
Pueden estar tratando deliberadamente de hacerte sentir que no
tiene sentido seguir corriendo hacia tu sueño.
Intimidar a las personas a menudo puede parecer inofensivo y hacer
un gran trabajo al ocultar su deseo de poder y control. Una vez que
veas a través de ellos, perderán su control sobre ti.
Manipulación
El comportamiento manipulador ocurre cuando alguien trata de
influir en su comportamiento para lograr un cierto resultado. Muchos
padres han pasado por esto con sus hijos. Tu angelito puede darte
grandes ojos de perro cachorro cuando quieren que les compres
algo o tratar de distraerte cuando se meten en problemas.
Este es el comportamiento esperado para los más pequeños. Sin
embargo, los adultos manipuladores pueden convertirse en una
carga real en tu vida, especialmente si tienes una tendencia a
creerles.
Alguien que es manipulador fingirá estar preocupado por usted para
obtener información que pueda usar en su contra. Pueden tratar de
averiguar qué es importante para usted para que puedan usar sus
preferencias para convencerlo de que haga lo que quieren.
Cuando estás tratando con una persona manipuladora, se siente
como si estuvieras de acuerdo con su plan por culpa u obligación.
Tienes miedo de ir en contra de ellos, por lo que te encuentras
haciendo cosas que preferirías no hacer para mantenerlos felices.
Tal vez, por ejemplo, alguien quiere que trabajes en el ministerio de
niños en tu iglesia. En el fondo, sabes que no es tu vocación, y
prefieres estar tocando música. Sin embargo, te encuentras
cumpliendo semana tras semana, porque te hicieron sentir que los
niños en la guardería no tendrían a nadie que los vigilara si no fuera
por ti.
Los manipuladores también pueden usar iluminación de gas, que es
cuando te hacen pensar que tu propia comprensión de una situación
es incorrecta. Cuando estás cerca de ellos, siempre estás dudando
de ti mismo. Siempre puedes sentir que estás equivocado, incluso
cuando estás siendo perfectamente lógico. Pueden decir cosas
como: "¡Estás loco!" o, "¿Qué podrías estar pensando?"
Una persona manipuladora siempre pondrá excusas para su propio
comportamiento, pero sea rápido para culparlo cuando algo salga
mal. Es posible que siempre te sientas avergonzado, avergonzado o
inferior cuando estás cerca de ellos.
La manipulación es común en las familias y puede ser una fuente
regular de vergüenza para algunos niños. Estos niños pueden
encontrarse creciendo con un sentido muy bajo de autoestima,
siempre tratando de probarse a sí mismos ante el mundo.
La iglesia no debe ser un lugar que refuerce este tipo de mensaje.
Sin embargo, las personas manipuladoras a menudo se sienten
atraídas por el liderazgo de la iglesia.
Si la manipulación es obvia, los miembros de la iglesia y otros
líderes no deben tener miedo de llamar a la gente tóxica. Deben
hacerles saber exactamente lo que hicieron mal y cómo deberían
estar cambiando. Si un líder manipulador demuestra
arrepentimiento, es hora de perdonar y seguir adelante.
Es fundamental que otros establezcan límites apropiados con
personas manipuladoras. Tendrás que reconocer sus tácticas y
decidir que no serás coaccionado para hacer cosas que te hagan
sentir incómodo.
Sin embargo, a veces, confrontar a una persona manipuladora
puede ser contraproducente. Esto es especialmente cierto cuando
son astutos y pueden esconderse detrás de excusas. Negarán las
cosas que hicieron y te culparán por la forma en que todo resultó.
En estos casos, mantener la distancia puede ser el mejor curso de
acción. Si el liderazgo de su congregación es manipulador,
encuentre una nueva iglesia y guarde sus razones para sí mismo.
Si su manipulador está en su familia, manténgase educado y
respetuoso. Evite pasar demasiado tiempo con esta persona o darle
mucha información sobre sus miedos, esperanzas o sueños. Estos
deben reservarse solo para personas en las que confíe.
Dios no nos rescató del pecado para que pudiéramos ser
controlados por personas manipuladoras. Si está sintiendo este
espíritu en su hogar o iglesia, un buen consejero cristiano puede
ayudarlo a erradicar el problema y encontrar soluciones viables. Si
continúa, puedes pasar a una comunidad cristiana que te ama por lo
que eres.
Dominación
La dominación ocurre cuando alguien trata de gobernarte o ejercer
un espíritu de superioridad sobre ti. Insistirán en salirse con la suya,
incluso cuando se trata de decisiones personales, como lo que usas.
Se negarán a retroceder, incluso cuando hayas dejado claro que no
estás de acuerdo con ellos.
Alguien que está tratando de dominarte puede criticarte
constantemente, exagerando incluso pequeños errores como una
palabra que usaste mal. O pueden señalar cada vez que sus jeans
están desactualizados o su cabello no es perfecto.
Dominar a las personas puede interrumpirte mucho, por lo que no
puedes disfrutar de una conversación edificante. O pueden hablar
con usted o amenazarlo frente a sus amigos y familiares.
Las personas dominantes en el liderazgo de la iglesia pueden fingir
estar hablando en nombre de toda una congregación cuando te
hablan de tus "pecados" o "debilidades". Sienten que tienen derecho
a juzgar sus motivos, pero piensan que nadie debería
responsabilizarlos de nada.
Cuando alguien intenta dominarte, saltará por tu garganta por tener
una opinión diferente. Es posible que tengas miedo de decir algo
con lo que pueden no estar de acuerdo porque inmediatamente
enfrentarás su ira.
Una persona dominante siempre puede tratar de corregirte o de
superarte. Es posible que sepas que cada vez que menciones algo
emocionante que hiciste, intentarán que sus experiencias suenen
más divertidas. O pueden estar siempre tratando de invalidar tu
historia señalando cosas que hiciste mal.
Las personas pueden tratar de dominarte porque se sienten
inadecuadas, o porque están tratando de distraerse de sus propios
pecados y problemas. Recuerda eso y evita quedar atrapado en su
mundo respondiendo con ira o falta de respeto. En muchos casos, la
mejor respuesta es simplemente alejarse.
Puedes lidiar con una personalidad dominante a través de una
confrontación privada. Hable sobre comportamientos específicos,
como interrupciones o invalidaciones de las ideas de otras
personas. Dale a la persona la oportunidad de reconocer que estaba
tratando de lastimar o dominar a las personas.
Es importante no tomar el comportamiento dominante de otra
persona personalmente. Pueden haber sido abandonados o dejados
en una situación traumática fuera de control en el pasado que los
dejó con un deseo real de ponerse en el asiento del conductor de la
vida de todos los demás.
Por supuesto, si alguien en el liderazgo no quiere cambiar, te vas a
encontrar asfixiado en esa situación. Te sentirás como una pequeña
semilla en el suelo que no puede salir por encima de la tierra.
Permítete plantarte en el suelo de una iglesia donde la gente te
respeta y valora tu aporte. Quieres saber que puedes decir lo que
tienes en mente sin temor a ser menospreciado.
Eres un hijo de Dios, y Él quiere traer milagros a tu vida. Ponte en
una congregación donde puedas irradiar con el fuego santo de Dios
sin que nadie se interponga en tu camino.
CAPÍTULO 8
RESPETA LA UNCIÓN
Manteniendo la humildad
Para algunos de nosotros, permanecer humildes es un desafío. Tal
vez Dios te ha dotado de una manera maravillosa, y estás tentado a
pensar que eres mejor que otras personas. Puede ser una persona
de negocios increíble, un músico maravilloso o un cerebro
tecnológico de clase mundial.
Pero, como vemos en la historia de Saúl, tendrás que ser modesto
si quieres seguir viendo la bendición de Dios en tu vida. Puede ser
bastante devastador saber que Dios una vez te favoreció y ahora se
ha alejado porque pensaste que sabías mejor que el Todopoderoso.
Sabemos que Dios resiste a los orgullosos, pero da gracia a los
humildes (Santiago 4:6).
Una manera fantástica de mantenerse humilde es seguir sirviendo a
los menos afortunados. Por ejemplo, puede pasar tiempo
alimentando a los hambrientos o construyendo hogares para los
pobres. Recuerde que si bien es posible que haya logrado algunas
cosas, tuvo mucha ayuda de aquellos que creyeron en usted y
trabajaron para proporcionar cosas como educación, ropa de abrigo
y transporte.
La gratitud es una manera maravillosa de evitar que te hagas una
idea demasiado grande de ti mismo. Es posible que haya tenido
padres que lo guiaron hacia la toma de buenas decisiones. O tal vez
tuviste el aliento de aquellos que notaron tus dones incluso cuando
estabas tambaleándote. Agradecer a Dios por aquellos que se
tomaron el tiempo para invertir en ti evitará que pienses que eres la
única persona responsable de tu éxito.
Si bien todos nosotros tenemos talentos, es importante reconocer la
unción y las habilidades especiales que Dios ha dado a los demás.
Es posible que no tengamos ningún don en ciertas áreas, y
necesitamos que otros cierren la brecha para nosotros.
Por ejemplo, puedes ser un maestro maravilloso, pero no tienes
ninguna habilidad cuando se trata de cosas mecánicas. Sin un
automóvil que funcione, electricidad y plomería, no tendrías dónde
enseñar y no tendrías forma de llegar allí. Pasa algún tiempo
hablando con aquellos que saben mucho sobre el tipo de cosas que
te desconciertan.
También puedes aprender nuevas habilidades y recordarte a ti
mismo lo que es no saber nada sobre algo. ¿Alguna vez has querido
aprender otro idioma, bailar claqué o practicar ajedrez? Lo
maravilloso de probar algo nuevo es que nos lleva de vuelta a un
lugar donde nos sentimos como niños simples, cometiendo errores y
chapoteando hasta que aprendemos a nadar. A medida que
envejecemos, estas experiencias humanas pueden ser refrescantes
y evitar que nos sintamos demasiado orgullosos.
Otra forma en que puedes mantenerte humilde es llevando a Dios a
cada decisión. Si no bendice alguna situación en tu vida, lo más
probable es que no tenga éxito. Recuerda que "Hay muchos planes
en el corazón de un hombre. Sin embargo, el consejo del Señor, que
permanecerá" (Proverbios 19:21).
Cuando eres humilde, revisas la palabra de Dios o te reúnes con Él
en oración cuando estás en una encrucijada. Es importante que Él
siga siendo el Rey de tu vida. Recuerdas que Él es la razón por la
que estás respirando, y Él puede ayudarte a estar de pie de nuevo.
Las personas humildes tienen un espíritu enseñable y saben que
pueden aprender algo de cualquiera. Incluso tus enemigos pueden
enseñarte algo si te mantienes en la fe. Si no crees que la crítica o
corrección de alguien provenga de un buen lugar, puedes tomar sus
comentarios con un grano de sal. Pero todo esto nos hará más
fuertes a largo plazo si continuamos en gracia.
La humildad no es una virtud muy popular o "cool" en el mundo
actual de autos rápidos y casas llamativas. No significa que pienses
en ti mismo como un don nadie o ignores tu unción. En cambio,
puedes tener una visión honesta de tus talentos y faltas y apoyarte
en Dios para tu fortaleza. Él te hizo con un propósito perfecto, y
puedes alcanzar tu destino con Él de tu lado.
CAPÍTULO 9
Brujería desterrada
La Palabra de Dios era clara en cuanto a que cualquier cosa
relacionada con la adivinación o el ocultismo es malvada y no se
debe jugar con ella. De hecho, Saúl mismo había exiliado a brujas y
hechiceros de la tierra (1 Samuel 28:3).
Pasajes como Deuteronomio 8:9-14 nos permiten saber cómo se
sentía Dios acerca de la brujería y el ocultismo.
"Cuando vengas a la tierra que el Señor tu Dios te está dando, no
aprenderás a seguir las abominaciones de esas naciones. No se
encontrará entre vosotros a nadie que haga pasar a su hijo o hija
por el fuego, ni a quien practique la brujería, ni a un adivino, ni a
quien interprete presagios, ni a un hechicero, ni a uno que conjure
hechizos, ni a un médium, ni a un espírita, ni a uno que llame a los
muertos. Porque todas estas cosas son una abominación para el
Señor, y debido a estas abominaciones, el Señor tu Dios las expulsa
de delante de ti. Serás intachable ante el Señor tu Dios. Por estas
naciones que desposeerías escucharon a los adivinos y adivinos;
pero en cuanto a ti, el Señor tu Dios no ha designado tal para ti".
(NKJV)
El diccionario define una abominación como "una cosa que causa
disgusto u odio". Dios llamó a sus ojos a cualquier cosa que tuviera
que ver con la brujería o las abominaciones de adivinación.
Simplemente no puede soportarlos.
Varias veces en este pasaje, Dios le hace saber a Su pueblo cuán
profundamente odia cosas como la brujería, los adivinos y los
médiums. Estas son personas que dicen ver el futuro, personas que
hacen contacto con el mundo espiritual malvado. Los presagios son
señales de lo que está por venir. El pasaje incluso menciona cómo
la brujería puede llevar a cosas como el sacrificio de niños (versículo
10). Esto es a lo que puede llegar el mal una vez que comenzamos
a darle un punto de apoyo en nuestras vidas.
Es obvio aquí que Dios no tiene una visión ligera de la brujería y el
mal. Él no le dice a Su pueblo que está bien que visiten a las brujas
a veces, u ocasionalmente consulten sus horóscopos. Necesitamos
mantenernos alejados de cosas como tablas de Ouija o sesiones de
espiritismo. A veces, parecen lo suficientemente inofensivos y solo
queremos ver de qué se tratan.
Pero Dios no presenta una visión del mal que sea traviesa pero linda
y bien intencionada, como la brujería de Samantha en Bewitched.
Son las arenas movedizas las que pueden atraerte y llevarte a tomar
decisiones locas.
Dios detesta la brujería y las prácticas ocultas en todas sus formas.
Al pueblo de Dios no se le permitía escuchar o consultar tales
cosas. Y tenemos que mantenernos lo más lejos posible de ellos.
Dios le dice a su pueblo en Levítico 19:31 que "no preste atención a
los médiums y espíritus familiares; no los busques, para ser
profanado por ellos. Yo soy el Señor tu Dios" (NKJV).
Una vez que una persona consulta con aquellos que son malos, el
Señor dice que serán contaminados por ellos. Cuando tienes una
pregunta acerca de cómo puedes ser salvado de una situación,
debes invocar a Dios y esperarlo. Desafortunadamente, el rey Saúl
más tarde nos mostró lo que sucede cuando estamos impacientes.
La Bruja de Endor
Ahora Samuel había muerto, y todo Israel se lamentó por él y lo
enterró en Ramah, en su propia ciudad. Y Saúl había sacado de la
tierra a los médiums y a los espíritas.
Entonces los filisteos se reunieron, y vinieron y acamparon en
Shunem. Así que Saúl reunió a todo Israel, y acamparon en Gilboa.
Cuando Saúl vio al ejército de los filisteos, tuvo miedo y su corazón
tembló mucho. Y cuando Saulo preguntó al Señor, el Señor no le
respondió, ni por sueños ni por Urim ni por los profetas.
Entonces Saúl dijo a sus siervos: "Encuéntrame una mujer que sea
médium, para que pueda ir a ella y preguntarle".
Y sus sirvientes le dijeron: "De hecho, hay una mujer que es
médium en En Dor". (1 Samuel 28:3-7)
Lo que es importante ver en este pasaje es que Saúl estaba en un
lugar de desesperación. Sabía que Dios había prohibido a su pueblo
contactar a brujas y espíritus; él mismo los había prohibido de Israel.
Pero se enfrentaba a una batalla increíblemente aterradora, y quería
consejos sobrenaturales.
Saúl estaba atenazado por el miedo y temblaba mucho (versículo 5).
Se había olvidado de la unción de Dios en Su vida; había
desobedecido a Su Padre celestial, quien lo sacó de la tribu de
Benjamín, y de la nada, al reino.
Cuando Dios nos llama, necesitamos reconocer nuestra medida. Se
supone que no debo pensar que Tracy es tan grande; Necesito
saber quién soy en Dios. Una vez que empiezas a pensar', "Soy el
mejor; esto es por mí, y nadie es mejor que yo, por mis dones", eres
askin' para un montón de problemas. Dios dejó a Saúl y fue a
alguien que todavía le temía. El Señor no estaba respondiendo a
Saúl, y el rey estaba a punto de dirigir a todo un ejército de hombres
a una batalla crucial.
Así que Saúl se disfrazó y se puso otras ropas, y se fue; y dos
hombres fueron con él; y llegaron a la mujer por la noche. Y él dijo:
"Por favor, lleva a cabo una sesión de espiritismo para mí, y trae
para mí el que te nombraré".
Entonces la mujer le dijo: "Mira, sabes lo que Saúl ha hecho, cómo
ha separado a los médiums y a los espíritas de la tierra. ¿Por qué
entonces pones una trampa para mi vida, para hacerme morir?"
Y Saulo le juró por el Señor, diciendo: "Como el Señor vive, ningún
castigo vendrá sobre ti por esto".
Entonces la mujer dijo: "¿A quién criaré para ti?"
Y él dijo: "Trae a Samuel por mí".
Cuando la mujer vio a Samuel, gritó en voz alta. Y la mujer le habló
a Saúl, diciendo: "¿Por qué me has engañado? ¡Porque tú eres
Saúl!"
Y el rey le dijo: "No tengas miedo. ¿Qué viste?"
Y la mujer dijo: "Vi un espíritu ascendiendo de la tierra".
Entonces él le dijo: "¿Cuál es su forma?"
Y ella dijo: "Se acerca un anciano y está cubierto de un manto". Y
Saúl percibió que era Samuel, y se agachó con la cara en el suelo y
se inclinó.
Ahora Samuel le dijo a Saúl: "¿Por qué me has perturbado al
criarme?"
Y Saúl respondió: "Estoy profundamente angustiado, porque los
filisteos hacen la guerra contra mí, y Dios se ha apartado de mí y ya
no me responde, ni por profetas ni por sueños. Por lo tanto, te he
llamado, para que me reveles lo que debo hacer".
Y Samuel respondió: "Entonces, ¿por qué me preguntas, viendo
como el Señor se ha apartado de ti y se ha convertido en tu
enemigo? Y el Señor ha hecho por sí mismo como habló por mí.
Porque el Señor ha arrancado el reino de tu mano y se lo ha dado a
tu prójimo, David. Debido a que no obedeciste la voz del Señor ni
ejecutaste Su feroz ira sobre Amalec, por lo tanto, el Señor te ha
hecho esto este día. Además, el Señor también entregará a Israel
contigo en la mano de los filisteos. Y mañana tú y tus hijos estarán
conmigo. El Señor también entregará al ejército de Israel en la mano
de los filisteos".
Inmediatamente Saúl cayó de cuerpo entero en el suelo y se asustó
terriblemente debido a las palabras de Samuel. Y no había fuerza en
él, porque no había comido nada en todo el día ni en toda la noche.
(1 Samuel 3:7-20)
Saúl estaba angustiado por los filisteos y se volvió increíblemente
impaciente. ¿Alguna vez te has vuelto tan ansioso por tu milagro
que has hecho cosas que sabías que Dios no quería que hicieras?
Tal vez tuviste la tentación de casarte con esa persona incrédula o
tomar un trabajo en el que sabías que tendrías que participar en lyin'
o cheatin'. A veces, la desesperación nos llevará a un lugar donde
estamos tentados a hacer cosas que una vez encontramos
impensables.
Saulo estaba hambriento y cansado, y el Señor lo había dejado y
ahora estaba con el hombre del que el rey estaba locamente celoso.
Sin embargo, en el fondo, Saúl sabía que la verdadera razón era por
su desobediencia. Y anhelaba desesperadamente que las cosas
fueran diferentes.
La bruja supo quién era Saúl tan pronto como vio a Samuel. Aquí
delante de ella estaba el mismo hombre que tenía la autoridad para
castigarla con la muerte si se enteraba de sus prácticas. Y Samuel
predijo la muerte de Saúl allí mismo. Vemos lo que sucede al día
siguiente tres capítulos después.
Ahora los filisteos lucharon contra Israel; y los hombres de Israel
huyeron de antes que los filisteos, y cayeron muertos en el monte
Gilboa. Entonces los filisteos siguieron duramente contra Saúl y sus
hijos. Y los filisteos mataron a Jonatán, Abinadab y Malchishua, los
hijos de Saúl. La batalla se volvió feroz contra Saúl. Los arqueros lo
golpearon, y fue gravemente herido por los arqueros.
Entonces Saúl le dijo a su portador de armadura: "Saca tu espada, y
empujame con ella, no sea que los hombres incircuncisos vengan y
me empujen y abusen de mí".
Pero su portador de armadura no lo haría, porque tenía mucho
miedo. Por lo tanto, Saúl tomó una espada y cayó sobre ella. Y
cuando su portador de armadura vio que Saúl estaba muerto,
también cayó sobre su espada y murió con él. Así que Saúl, sus tres
hijos, su portador de armadura y todos sus hombres murieron juntos
ese mismo día". (1 Samuel 31:1-6)
Irónicamente, fue la visita de Saúl con una bruja, que hizo porque le
preocupaba morir, lo que selló el destino de su muerte. Y más
irónica aún es la verdad de que Saúl fue destruido por hombres que
lo perseguían ardientemente, tal como él había perseguido
apasionadamente a David antes.
Cuando comienzas a orar para que alguien falle, estás liberando
maldiciones sobre tu propia vida. Dios te ha dado una asignación.
No es para derribar el ministerio de otro hombre, sino para edificarse
unos a otros.
Dios quiere usarte, y de hecho lo hará. Pero él no quiere que seas
médiums consultores o adivinos o adivinos. Él no puede trabajar
contigo si estás enrollando bolas de maldición para lanzarlas a otra
persona. Tu púlpito no está allí para que puedas derribar la obra
ordenada por Dios de otra persona. Tu hermano no es tu enemigo.
El Señor quiere derribar fortalezas, borrar la deuda, construir
ministerios en todo el mundo. Él quiere hacer milagros durante sus
días en la tierra. Pero no puedes estar recurriendo a presagios u
horóscopos o espíritus de culto. Cuando estás en una encrucijada,
¿dónde debes buscar respuestas? La mayoría de nosotros
conocemos la verdad en nuestros corazones.
Tiempos de desesperación
Todos nos hemos sentido desesperados en un momento u otro. Tal
vez estabas enfrentando una enfermedad, una crisis financiera o
una situación abusiva. Puede ser tentador buscar ayuda en lugares
donde no deberíamos. Pero Dios no nos deja luchando sin ningún
lugar a donde acudir.
Un lugar donde la Biblia nos dice que busquemos respuestas
cuando tenemos miedo o miedo es el uno al otro. Los cristianos
pueden levantar a otros creyentes cuando están en un lugar
peligroso de desesperación.
1 Tesalonicenses 5:11-15 nos dice:
Por lo tanto, consuélense unos a otros y se edifican unos a otros, tal
como lo están haciendo. Y los instamos, hermanos, a reconocer a
aquellos que trabajan entre ustedes, y que están sobre ustedes en
el Señor y los amonestan, y a estimarlos muy altamente en amor por
el bien de su trabajo. Estén en paz entre ustedes.
Ahora los exhortamos, hermanos, a advertir a los rebeldes, consolar
a los pusilánimes, defender a los débiles, ser pacientes con todos.
Procurad que nadie haga malo por mal a nadie, sino que siempre
persigamos lo que es bueno tanto para vosotros mismos como para
todos. (NKJV)
Vemos aquí que los cristianos pueden consolarse unos a otros y
defender a los débiles. Cuando otros vienen a nosotros con sus
problemas, debemos tener cuidado de no condenarlos como lo
hicieron los amigos de Job (Job 4-9). En cambio, podemos
consolarlos y darles buenos consejos, indicándoles la dirección del
Señor.
Cuando alguien viene a nosotros en un lugar desesperado,
debemos tener cuidado de no juzgarlo. Podemos escuchar con
atención, empatizar con su dolor y tratar de ofrecer soluciones
bíblicas. No quieres decirle a alguien que haga algo pecaminoso,
incluso si es lo que quiere escuchar. Pero podemos afirmar su valor
como hijos del Dios Viviente y ayudarlos a ver lo que su Padre
Celestial quiere que hagan.
Si te sientes desesperado, tendrás que elegir a alguien piadoso para
buscar consuelo. Debe saber que el individuo es sensible y
cariñoso, pero está dispuesto a hablar con sinceridad de su
situación. Lo último que necesitas es alguien que esté celoso y que
busque derribarte. Tratarán de usar la situación para hacerte sentir
aún más desesperado y listo para rendirte.
En cambio, querrás un amigo de confianza, que sea honesto y te
señale hacia el futuro. Pueden animarte recordándote todos los
dones maravillosos que tienes y las cosas que ya has hecho por
Dios. Recuerda que no estás poseído por el pasado, estás poseído
por el futuro. Dios todavía tiene un plan maravilloso para tu vida
cuando vuelvas a seguirlo.
La historia de David y Saúl también nos muestra cómo la respuesta
de David al dolor fue diferente a la de su enemigo. En lugar de
alejarse de Dios en tiempos de problemas como lo hizo Saúl, David
se volvió a Él.
En el Salmo 121: 1-8, el pastor clama por su Padre:
Levanto mis ojos hacia las colinas–
¿De dónde viene mi ayuda?
Mi ayuda viene del Señor,
Que hizo el Cielo y la tierra.
Él no permitirá que tu pie sea movido;
El que te mantiene no dormirá.
He aquí, el que mantiene a Israel no dormirá ni dormirá.
El Señor es tu guardián;
El Señor es la sombra a tu diestra,
El sol no te golpeará de día,
Ni la luna de noche.
El Señor os preservará de todo mal;
Él preservará tu alma.
El Señor preservará tu salida y tu entrada
A partir de este momento, e incluso para siempre". (NKJV)
David sabe que Dios es su verdadero ayudante. El Señor no es
alguien con un espíritu humano falible, sino Aquel que hizo todos los
cielos y la tierra. Él nunca dormirá, y Él puede protegerte de todo
mal. Él velará por ti cuando salgas y entres.
La próxima vez que te sientas tentado a buscar respuestas a través
de una persona pecadora, o en un reino espiritual oscuro, recuerda
que Dios es mucho más fuerte y está por encima de todas estas
cosas. Clama a Él pidiendo ayuda y consuelo. Cuando confías y le
obedeces, Él no permitirá que tu pie se mueva.
Ora con todo tu corazón cuando te sientas desesperado. Dios es
capaz, y Él puede hacer milagros.
También puedes buscar respuestas en la Palabra de Dios. Si lo está
leyendo todos los días, puede encontrar ideas que hablen
directamente de su situación.
Leer el Buen Libro antes de irte a la cama podría no ser la mejor
idea si tienes una tendencia a perder el enfoque. En su lugar, elija
un momento después de hacer ejercicio o beber su café, para que
esté entusiasmado con la Palabra y listo para escuchar lo que Dios
tiene que decir.
La Palabra de Dios también puede venir a ti a través de los
maestros. Lea libros de autores cristianos respetados o vea
sermones y enseñanzas en línea. Otros pueden ministrar a su
espíritu y hacerle saber lo que Dios quiere decir acerca de sus
problemas físicos, su dinero o su situación familiar. Asegúrate de
que todos los consejos que tomes estén en línea con la Palabra de
Dios.
Por supuesto, los tiempos desesperados también requieren que, a
diferencia de Saúl, esperemos en el Señor las respuestas. Y esperar
no significa que nos sentemos en nuestras habitaciones y giremos
nuestros pulgares. En su lugar, sal y disfruta de la naturaleza o
ayuda a los demás. Toma pasos de fe incluso cuando tus
sentimientos te digan que tengas miedo. Cuando Dios esté listo para
responderte, estarás listo para escucharlo.
Una vez que Dios hable de liberación en tu situación, estarás tan
contento de que nunca te hayas vuelto al mal cuando estabas
preocupado. Dios puede traer sanidad y un hermoso ministerio a tu
vida.
Sepan que "El Señor dará fortaleza a su pueblo; el Señor bendecirá
a su pueblo con paz" (Salmo 29:11).
Dios quiere hacer cosas en tu vida que nunca soñaste posibles.
Necesitas aguantar allí y creer en Su asombrosa bondad.
Un llamado especial
Tal vez no eres el tipo de persona que es tentada por la brujería de
la vieja escuela. Tal vez veas psíquicos anunciándose en la
televisión y cambies de canal de inmediato. O tal vez no tienes
interés en escuchar a un adivino decirte lo que va a suceder en el
futuro.
Sin embargo, a menudo eres tentado por las "brujas" de tu pasado,
por voces que te dicen que Dios ha terminado contigo y que eres
inferior. Eres demasiado bajo, demasiado quebrantado o demasiado
pecaminoso para ser de alguna utilidad para el Todopoderoso.
La Biblia nos dice esto en el Salmo 139:13-14:
"Porque me formaste en mis partes internas;
Me cubriste en el vientre de mi madre.
Te alabaré, porque estoy hecho con temor y maravilla;
Maravillosas son tus obras,
Y mi alma lo sabe muy bien. (NKJV)
Dios ha tenido un plan especial para ti desde que fuiste formado en
el vientre de tu madre. Él te estaba reuniendo con miedo y
maravillosamente. Eres una obra maestra hecha a Su imagen, y Él
no se va a olvidar de ti.
También sabemos que "El que ha comenzado una buena obra en
vosotros la completará hasta el día de Jesucristo" (Filipenses 1:6).
No importa cuánto pienses que te has equivocado, Dios comenzó
una buena obra en tu vida, y Él la va a terminar.
¿Te has equivocado o has ido a un cristiano celoso en busca de
consejo? ¿Te llevó por un camino de dolor y autoderrota? ¿Te
encantaría otra oportunidad de hacer que los planes de Dios se
cumplan?
La gran noticia es que a veces lo que creemos que es el Plan B para
nuestras vidas fue realmente el plan de Dios todo el tiempo. Él
puede usar tus percances, defectos e incluso pecados para traerte
de vuelta a un lugar de perdón.
No son los cristianos perfectos los que Dios usa para construir Su
Reino. Él está buscando personas como tú, que saben lo que es
luchar y pueden tener compasión por los perdidos. Él ha tenido un
plan para tu vida desde antes de que supieras lo que era un plan.
¿Quiere Dios que sirvas en un ministerio, siembres una semilla
financiera o adoptes un niño? ¿Está esperando para ayudarte a
escribir un libro o servir a los pobres?
Tu vida puede ser un ejemplo brillante para los demás, incluso si
crees que es demasiado tarde. Entusiasma a saber cómo él puede
convertir tu futuro en un ministerio lleno de esperanza y luz.
CAPÍTULO 11
RENOVANDO TU FUERZA
Poder en la Cruz
No hay nada más fuerte que la sangre de Jesús. Es mayor que la
brujería, el vudú y la enfermedad. ¿A quién le vas a creer? Dios
tiene autoridad, y tú tienes que creerla.
¿Qué sucede cuando oras en el nombre de Jesús y no pasa nada?
¿Cuál es el ingrediente que falta?
Santiago 1:6-8 nos dice:
Pero pidamos con fe, sin dudar, porque el que duda es como la ola
del mar y arrojado por el viento. Porque no supongamos que ese
hombre recibirá nada del Señor; es un hombre de doble mente,
inestable en todo lo que hace. (NKJV)
Dios dice que somos de doble mente cuando dudamos, siempre
arrojados de un lado a otro por este problema o esa preocupación.
No podemos pedirle a Dios algo mientras no estemos seguros de si
Él está allí. Él no nos ayudará si no creemos que Él puede. Tienes
que poner toda tu fe en Dios, creyendo fervientemente que Él puede
ayudarte. No dejes espacio para el miedo. Antes de pedirle algo a
Dios, asegúrate de confiar en Él.
Eche un vistazo a lo que el profeta Isaías escribió acerca de Jesús.
Vivió unos 700 años antes de que Jesús naciera, pero sabía que
este Salvador venía a salvar al mundo.
¿Quién ha creído nuestro informe?
¿Y a quién se le ha revelado el brazo del Señor?
Porque Él crecerá delante de Él como una tierna planta,
Y como una raíz de tierra seca.
No tiene forma ni comedia;
Y cuando lo veamos,
No hay belleza que debamos desearle.
Es despreciado y rechazado por los hombres,
Un hombre de penas y familiarizado con el dolor.
Y escondimos, por así decirlo, nuestros rostros de Él;
Él era despreciado, y no lo estimamos.
Ciertamente Él ha nacido nuestras penas y ha llevado nuestras
penas;
Sin embargo, lo estimamos afectado.
Herido por Dios, y afligido.
Pero Él fue herido por nuestras transgresiones,
Fue magullado por nuestras iniquidades;
El castigo por nuestra paz fue sobre Él,
Y por Sus rayas, somos sanados.
Todos los que nos gustan las ovejas se han extraviado;
Nos hemos vuelto, cada uno, a su propio camino;
Y el Señor ha puesto sobre Él la iniquidad de todos nosotros.
Fue oprimido y afligido,
Sin embargo, él no abrió su boca;
Fue llevado como un cordero al matadero;
Y como una oveja ante sus esquiladores está en silencio,
Así que no abrió Su boca.
Fue sacado de la cárcel y del juicio;
¿Y quién declarará a Su generación?
Porque fue separado de la tierra de los vivos;
Por las transgresiones de Mi pueblo, Él fue golpeado.
E hicieron su tumba con los impíos:
Pero con los ricos a su muerte,
Porque Él no había hecho violencia,
Tampoco había ningún engaño en su boca.
Sin embargo, al Señor le agradó herirlo;
Él lo ha puesto en pena.
Cuando haces de Su alma una ofrenda por el pecado,
Él verá Su simiente, Él prolongará Sus días,
Y el placer del Señor prosperará en Su mano.
Él verá el trabajo de Su alma, y estará satisfecho.
Por Su conocimiento, mi siervo justo justificará a muchos,
Porque Él llevará sus iniquidades.
Por lo tanto, lo acataré una porción con el grande,
Y dividirá el botín con el fuerte,
Porque Él derramó Su alma hasta la muerte,
Y fue contado con los transgresores,
Y Él cargó con el pecado de muchos,
E intercedió por los transgresores. (Isaías 53, 1-12)
El profeta predijo cosas que tendrían sentido después de la
crucifixión de Jesús cientos de años después. Vio a un Salvador que
no tenía "ninguna belleza que debamos desearle", y uno que era
"despreciado y rechazado por los hombres" (versículos 2 y 3). Él
sería "herido por Dios" y "herido por nuestras transgresiones"
(versículos 4 y 5).
En el Nuevo Testamento, Jesús se sometió a una ejecución tortuosa
en una cruz. Fue burlado y azotado y hecho sufrir (Marcos 15:21-
41).
Sin embargo, Isaías nos está diciendo que son nuestros pecados
por los que Él estaba sufriendo. Fue herido por nuestras
transgresiones y magullado por nuestras iniquidades. El castigo
injusto fue lo que finalmente nos trajo paz (Isaías 53:5). Su sacrificio
justificó a muchos (Isaías 53:12).
Todo en la Biblia se centra en la cruz y la serenidad de Dios. Debido
a Su sacrificio, podemos descansar en el vértice de Su presencia.
Puedes dejar ese valle de tristeza y tristeza que se ha envuelto a tu
alrededor como una manta negra. No tienes que vivir otro día en la
derrota. Jesús ya ha pagado el precio por tus pecados, y puedes
seguir confiando en Él.
La cruz anula la brujería. Jesús bajó a la tierra, derribó a Lucifer de
su trono de papel, tomó las llaves de la muerte y nos dio autoridad y
dominio. Podemos poner nuestro pie en el cuello de Satanás,
porque somos hijos del Dios Altísimo. Hemos sido comprados con la
sangre de Jesús.
Sin embargo, ¿cómo puedes asegurarte de que la Palabra esté
funcionando en tu vida? Necesitamos recordar algunas lecciones
importantes.
CAPÍTULO 12
EL PASO