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Para lograr comprender la construcción del estado-nación debemos de remontarnos a

una etapa anterior y analizar los sucesos. Chirix menciona acerca de la colonización y del
posterior proceso de emancipación llevado a cabo para los pueblos originarios como lo es el
Maya, en donde la invasión europea significó la casi extinción de los pueblos originarios.
Posteriormente, la Independencia se entenderá como un proceso emancipatorio blanco
esencialmente, ya que no permitió la inclusión de los pueblos originarios ya sea en derechos o
beneficios, a pesar de que el discurso que se manejaba para las masas era el de libertad. Las
rígidas estructuras sociales que segregaron y separaron jerárquicamente a la población se
mantuvieron de manera tácita y es en estas eventualidades donde la actual concepción del
estado-nación recaerá.
El colonialismo se valió del uso del conocimiento y contó la historia desde su versión
por medio de una narración occidental de lo acontecido ajustada a los intereses coloniales.
Siglos después, de concluido este proceso, surgieron nuevas narrativas desde el punto de vista
de los sometidos en donde evidentemente la visión fue totalmente distinta a la version narrada
de los hechos, los europeos no trajeron civilización al supuesto “salvajismo” o “barbarie” de
los pueblos originarios, no trajeron paz ni desarrollo, sino sometimiento, explotación, saqueo,
tortura y denigración hacia estos pueblos. Todo ello por medio de una justificación basada en
la raza, la cual fue incluso asimilada en este proceso de sometimiento, así pues este trauma
tendrá repercusiones en el futuro para la conformación del estado-nación
Posteriormente a la colonización, la independencia bajo la mirada del oprimido fue
concebida como un proceso que le daría la libertad por igual a los habitantes de una futura
nación. La independencia de distintos países de latinoamérica estuvo a cargo de los criollos,
ello trajo cambios sustanciales para las clases gobernantes y cercanas a estas, inclusive para
las clases medias y comerciantes, mas no para grupos humanos como los pueblos originarios,
afrodescendientes y demás. Además, Chirix menciona que las familias y posteriores
generaciones de españoles mantuvieron el poder político y económico que tenían durante la
colonia. No existió un cambio verdadero ni significativo en estas estructuras sociales mucho
menos una reivindicación para el oprimido, esto es en la actualidad un problema para la
búsqueda de una idea de identidad y pluralidad cultural y genera una problemática con
respecto a la gobernabilidad y al reconocimiento.
Por otro lado, Lucila Choque, explica el papel que desenvolvieron los indígenas
desde la Colonia, y cómo desde la subalternidad se les forzó a aceptar la división de trabajo,
impuesta por los invasores y en favor de ellos. Esto resulta determinante porque relata los
escenarios posteriores en los que, pese a que exista una corriente intelectual con miras al
cambio, los y las indígenas resultan explotados bajo un régimen racista y colonial.
La individualidad impuesta desde la Colonia difiere gravemente de la realidad de los
indígenas, quienes asumian la colectividad y lo comunitario en su organización como un eje
principal en su rutina y en la mayoría de ejes de su vida. De hecho, se puede identificar hasta
la actualidad que muchas de estas costumbres persisten en las prácticas de ciudades andinas
asi como amazónicas. Esto contrasta con el individualismo que se ha ido incorporando por el
mercado en los últimos siglos y en la organización del estado-nación.
Por otra parte, resalta también el proceso de independencia y cuál es el papel que
asumen los indígenas en la formación de estado-nación, en donde la idea de una nación nace
de un grupo de criollos quienes no tenían verdadera voluntad de incluir a indígenas al país, ni
de reconocerlos como ciudadanos de la nación en construcción donde esté colaboró. La
brecha persiste y se sostiene del racismo y colonialismo instaurado desde la invasión al
Tahuantinsuyo y la idea de estado-nación aún parece ajena para algunos compatriotas
olvidados y alejados de la capital.

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