Historiografía puede entenderse básicamente en dos sentidos. En el más común hoy, la
historiografía (la escritura de la historia) equivale a un conjunto de obras de historia, es decir, de textos sobre el pasado humano, surgidos en un tiempo y lugar determinados, que han sido elaborados con un enfoque metodológico y/o ético-político más o menos coherente. Así podemos hablar, por ejemplo, de historiografía medieval, renacentista o de principios del siglo XX; de historiografía francesa o mexicana; de historiografía sobre los Estados o de historiografía urbana; de historiografía marxista, liberal o positivista; de historiografía internacionalista o nacionalista, etc.