UN VILLANO LLEGÓ A LAS CIUDAD : El Coronavirus

Érase una vez un virus muy pequeñito que traía de cabeza a todos los papitos y las mamitas del
mundo. Nadie podía verlo, pero todos hablaban de él.

Nació en un país muy muy lejano llamado China. Y poquito a poco recorrió el mundo entero a
través de las manos de las personas.

Cuando llegó a Perú, nuestro país, cerraron todos los colegios y lugares de diversión y
hablaban de él en la televisión todo el tiempo.

Al posarse en las personas, estas se ponían muy malitas: Tenían fiebre, tos y, a veces, les
costaba respirar.

Los adultos, cansados de enfermar por el virus, se pusieron a investigar y descubrieron que el
agua y el jabón eran sus peores enemigos.

Todo el mundo tenía que estar atento cuando se lavaba las manos. Además de usar agua y
jabón…tenían que cantar su canción favorita mientras lo hacían:

Lavarse las manos es de lo mejor

con agüita y con jabón con agüita y con jabón limpiecito quedo yo

Se van los virus se va el achús se va el coronavirus…virus…virus

Con agüita y con jabón con el antebrazo cuando estornudo

Solo con señas ahora saludo de coronavirus no nos contagiamos

En la asita todos nos cuidamos lavarse las manos es de lo mejor

Con agüita y con jabón con agüita y con jabón

Los niños también ayudaron a terminar con el virus. Recordaban a sus papás que había que
quedarse en casa y que no se podía ir al parque.

Al fin y al cabo en casa tenían sus juguetes y se lo pasaban muy bien.

Poquito a poco descubrieron que si todos colaboraban podían ayudar a los médicos a terminar
con el virus. Fue así que inventaron las vacunas Pfizer, Sinopharm, Astrazeneca y Sputnik que
nos protege del pequeño virus.

Así que muy pronto regresarán los abrazos y todos volveremos a estar juntos otra vez.