UNIVERSIDAD NORORIENTAL PRIVADA

“GRAN MARISCAL DE AYACUCHO”

FACULTAD DE DERECHO

DIRECCIÓN DE ESCUELA - SEDE BARCELONA

SOCIOLOGIA JURÍDICA

EL LINCHAMIENTO DE DELINCUENTES EN

LAS COMUNIDADES Y SU ENFOQUE SOCIO-JURIDICO

PROFESOR: AUTORES:

JOSÉ ÁVILA OMAÑA LIZMAR CI V-15200444

PIÑERO BARBARA CI V-26256254

SECCION 1 – 3ER SEMESTRE

BARCELONA -JUNIO -2017

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 ÍNDICE

Pág.

Introducción 3

Planteamiento del Caso 4

Visión Jurídica 5

Actualidad de las Instituciones 9

Soluciones Socio Jurídicas 10

Anexos 12

Conclusión 16

Bibliografía 17

ii

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 INTRODUCCION.
El Estado venezolano ha demostrado una gran incompetencia en todo
lo referente a seguridad ciudadana, no hay prevención al delito, el poder
judicial es un desastre y el caos que se vive en nuestras cárceles no se
puede ocultar con un dedo, las medidas implementadas han sido un total
fracaso y esto lleva a situaciones como el caso que hoy nos ocupa, los
linchamientos, los cuales se están presentando con mayor frecuencia y en
lugares donde anteriormente era inimaginable que ocurriesen .

Los linchamientos encajan en este contexto, aparecen como una

forma de "justicia popular" que cuenta con la aprobación, abierta o tácita, de
extensas capas de la población venezolana; lo cual lejos de mejorar la
situación de violencia lo que hace es acrecentarla, puesto que dicha actitud
no contribuye en nada a pacificar o lograr una mejor sociedad, por el
contrario, elevan las condiciones de violencia delincuencial.

Tales circunstancias expresan una terrible indiferencia y crueldad,

erosionando la civilidad y violando la institucionalidad. Una aceptación de
que se tiene derecho a ejercer la violencia, es una simple demostración de
primitivismo, no existe razón alguna para justificar que un individuo le quite
la vida a otro por las razones que fueren.

Aunado a ello, tomar la justicia por sus propios medios, es

definitivamente un delito para quienes los cometen, estas conductas
antijurídicas se encuentran tipificadas en nuestro Código Penal como
homicidio o lesiones y dependiendo de la modalidad que se emplee,
deberán ser sancionados. Los linchamientos tienen responsables, pero
erradicarlos es algo que reclama políticas económicas, jurídicas y educativas
amplias.

3
 Linchamiento de delincuentes en las comunidades

Planteamiento del Caso:

Una de las manifestaciones de violencia que presenta un alarmante

auge en nuestro país es la figura de linchamiento y éste no es más que, un
acto colectivo y anónimo, que sigue a la conmoción social producida por un
crimen, o cualquier otra conducta de delincuencia, mediante el cual se
pretende castigar a una persona que, se presume, ha infringido una norma,
la cual puede ser social no escrita o legal formal y en ocasiones, puede
causar la muerte del sospechoso.

Las razones que llevan a una persona o grupo de ellas a cometer un

linchamiento, varían dependiendo de la perspectiva o el criterio con que se
evalúe la situación, en la mayoría de los casos, los individuos se sienten
desamparados, en razón de que, a pesar de haber denunciado el hecho, los
órganos competentes no dan respuesta a los distintos problemas que les
aquejan, están cansados de que uno o varios delincuentes cometan en
repetidas oportunidades actos en contra de su persona o de un familiar y
dicho sujeto siga impune a sus actos.

La causa más destacada, por la cual ocurre la situación antes

mencionada, apunta a la crisis de autoridad, que además evidencia una
erosión de los fundamentos del Estado, primero en la desobediencia a la
persona en la que recae la autoridad y símbolos, para pasar a cuestionar
después sus instituciones y las leyes que lo soportan. En otras palabras
cuando se hace referencia a crisis de autoridad y crisis del Estado de
derecho, es necesario dejar claro que son grados diferentes de un mismo
fenómeno; en una basta con restituir los fundamentos de la legitimidad; en la
otra es necesaria una reforma profunda de las bases institucionales y

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constitucionales, pero en ambas la violencia es el símbolo del deterioro que
se vive.

Los linchamientos se habían presentado generalmente cuando los

delitos eran fundamentalmente ruines, como casos de violaciones o
asesinatos infantiles, porque generan reacciones muy fuertes en las
comunidades cuando no se les da respuesta por parte de las autoridades.
Pero recientemente vemos que ha tomado un rumbo diferente, responde a
otro patrón: las comunidades están organizándose, como se puede
evidenciar, (ver anexo 1), colocan diferentes avisos, advertencias o
amenazas para el caso en que logren capturar algún delincuente;
evidenciando que su nivel de tolerancia ha bajado; ahora no solo se trata de
crímenes muy cuestionados, sino que ya los delitos comunes pueden
fácilmente originar la muerte del victimario.

Por lo antes expuesto, se debe tener especial cuidado respecto a los

valores y comportamientos que se transmiten a nuestro entorno, ya que los
individuos suelen aprender conductas específicas que pueden ir en
detrimento de toda una sociedad, este tipo de conductas no deben ser vistas
como algo normal; por el contrario este flagelo debe ser rechazado
totalmente, por cuanto representa un claro síntoma de anomalía social,
constituyendo un retroceso a las etapas más primitivas de la humanidad, en
definitiva no es un patrón apropiado que deba implantarse en las nuevas
generaciones.

Visión Jurídica:

A través de los años el Derecho romano modelo una serie de

instituciones y figuras jurídicas que hoy día constituyen la base de nuestro
ordenamiento constitucional, público, civil, procesal, probatorio, penal y
comercial. En otras palabras el derecho romano ha sido un pedestal sobre el

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cual reposa la formación jurídica de todo abogado; y es que en toda sociedad
se hace necesaria la aplicación de reglas de conducta, dictada por un poder
legítimo para regular la conducta humana.

Particularmente el tema del linchamiento será enfocado desde el

punto de vista penal, a pesar de no ser la única rama del derecho que
interviene, nos parece interesante evaluarlo desde esta perspectiva.

El Derecho Penal según lo define Arteaga Sánchez “En sentido

objetivo es la porción del ordenamiento jurídico, se presenta como el
conjunto de normas jurídicas mediante las cuales el Estado prohíbe
determinados comportamientos humanos (acciones u omisiones),
sirviéndose de la amenaza de la pena”. Dicho de otra forma el derecho penal
se refiere a una cantidad de preceptos cuya transgresión el Estado ha
querido sancionar, con una medida denominada pena.

Ahora bien, la justificación del Estado, como la personificación jurídica

de la sociedad, está en la ineludible obligación de defender al conjunto de
ciudadanos que representa del ataque nocivo del hecho punible, es por ello
que la acción defensiva se manifiesta mediante la sanción de reglas de
carácter advertidos, previsivos y punitivo, que orienta el papel y la relación
del Estado con el individuo que solo puede ser aceptada por quienes
consideran al Estado como fuente única de derechos, que reconoce que el
individuo posee derechos penales individuales, tales derechos no son de
carácter privado sino de derecho público.

En las sociedades primitivas los hombres se hacían justicia por sí

mismos. Nada había que limitase la ira del agraviado, las represalias que se
imponían eran ilimitadas y no guardaban proporción con el daño
causado. Tiempo después hubo un progreso aparece en escena la llamada
ley del talión con la célebre fórmula del “Ojo por ojo y diente por diente”.

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 Pese a lo bárbara que hoy nos puede parecer, ella representó un gran
avance en comparación con la venganza ilimitada anterior, porque estableció
al menos, una proporcionalidad entre el daño inferido y la represalia de la
víctima. De alguna manera, representó una limitación en el ejercicio de la
venganza. Más tarde la ley de talión cae en desuso, principalmente por la
obsolescencia, se volvió inaplicable en muchos casos, como por ejemplo no
poder privar a un ladrón de bienes que no posee. La organización social la
dejó atrás, y es cuando se crearon nuevos sistemas para impartir justicia, en
lo sucesivo nadie pudo hacerla por sí mismo, de ser necesario debía acudir
al juez a que la haga. Y es así como se superó progresivamente una
práctica que condujo la vindicta y la represalia a los peores extremos.

Para analizar con un enfoque penal, el tema del linchamiento de

delincuentes en las comunidades, es necesario cotejar lo que establece
nuestro código penal al respecto.

Mediante una entrevista realizada al Doctor Luis Palmares,

especialista en Derecho Penal (ver anexo 2), se evidencia que la palabra
“linchamiento” no está expresamente contemplada en la ley, las policías lo
catalogan como averiguación por muerte o lesiones, sin discriminar si en el
proceso hubo lo que comúnmente se conoce como linchamiento.

En su lugar puede aplicarse los siguientes artículos:

270 C.P. Donde se regulan los atinentes de prohibición de hacer justicia por
sus propias manos y expresa: “el que, con objeto sólo de ejercer un
pretendido derecho, se haga justicia por sí mismo, haciendo uso de la
violencia sobre las cosas, cuando podría haber ocurrió a la autoridad”…

424 C.P. Se refiere al homicidio intencional en grado de complicidad

correspectiva y versa así: “cuando la perpetración de la muerte o las lesiones

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han tomado parte varías personas y no pudiere descubrirse quien las causó,
se castigará a todos con las penas respectivamente correspondientes al
delito cometido, disminuidas de una tercera parte a la mitad.”

425 C.P. Dispone las sanciones referidas a la riña colectiva y

tipifica…“cuando en una refriega entre varias personas resulte algún muerto
o con una lesión personal todos los que agredieron al herido serán
castigados con las penas correspondientes al delito cometido”…

Además el código penal establece la coautoría que aparece reflejada

en el Art. 83 “Cuando varias personas concurran a la ejecución de un hecho
punible, cada uno de los perpetradores (autores) y de los cooperadores
inmediatos queda sujeto a la pena correspondiente al hecho perpetrado. En
la misma pena incurre el que ha determinado a otro a cometer el hecho”.
(Éste es el autor intelectual, a quien también se le llama instigador)”.

También es necesario tener en cuenta que el Código Orgánico

Procesal Penal establece en el artículo 234, referido a las aprehensiones en
flagrancia, que cualquier particular podrá detener a un sospechoso y
entregarlo a la autoridad más cercana, que es la responsable de ponerlo a
disposición del Ministerio Público. El instrumento jurídico estipula también
que el Estado protegerá a quien colabore con la aprehensión del imputado.
El problema surge cuando se recurre a la agresión. Ya no es una
colaboración, sino un intento de homicidio.

Por último y aunque no obedece al enfoque que se está planteando es

necesario saber que CRBV, consagra un articulado que puntualiza los
derechos fundamentales de la persona, donde estos derechos pasaron a
formar parte de manera estrechamente relacionada con los 
principios fundamentales de nuestro sistema democrático, al incorporar
el respeto irrestricto de los derechos humanos, como Principios

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fundamentales, de nuestra constitución de 1999, donde Venezuela se
constituye en un Estado democrático y social de derecho y de justicia que
propugna como valores superiores de su ordenamiento jurídico y de su
actuación, la vida, la libertad, la justicia, la igualdad, la solidaridad,
la democracia, la responsabilidad social y en general, la preeminencia de los
derechos humanos, la ética y el pluralismo político.

Según el criminólogo y docente de la Universidad de Los Andes

(Mérida) Freddy Crespo, quien dirigió un trabajo de investigación social de
campo afirma que, "los linchamientos no son percibidos como homicidios
sino como justicia por retaliación". Según el investigador, los policías que
actúan para impedir los linchamientos son mal vistos por las comunidades, y
son señalados de que "protegen" a los delincuentes. Crespo dice, además,
que los linchamientos se inscriben dentro de una tendencia que revela la
involución de la sociedad venezolana hacia "micro estados primitivos".

Actualidad de las Instituciones:

Existe un fuerte debilitamiento del sistema de justicia Venezolano, el

cual ha ido perdiendo credibilidad e independencia, agudizándose en los
últimos años; al punto de que la colectividad no confié en los procesos
judiciales, las pocas cifras publicadas son alarmantes (ver anexo 3),
provocando esta situación respuestas descontroladas como es el caso de
los linchamientos en los que la población en masa decide tomar la justicia
por sus propias manos y actuar en forma violenta y despiadada

Los actos violentos quiebran el lazo social y la ley, y lo trágico de todo

esto, es que en nuestro país no pareciera existir intenciones de sanar esa
herida. Para erradicar la violencia, y la práctica de linchar, se requieren de
intervenciones políticas y culturales, con marcos jurídicos eficaces, pasando

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por una redistribución de la riqueza que disminuya lo más posible la relación
entre injusticia social y violencia criminal.
La violencia socio-política y cultural en el país, puede erradicarse con
cambios en las prácticas autoritarias y violentas presentes desde lo micro
hasta lo macro, desde la familia hasta las distintas instancias de poder. A
nuestro entender es una intervención que debe incluir al sistema de justicia
su institucionalización, independencia y transparencia. Mientras sigamos con
un sistema de justicia politizado, con visos de corrupción e impunidad la
espiral de violencia se expande, y con ello la inseguridad ciudadana.

Soluciones Socio Jurídicas:

Los linchamientos afectan radicalmente derechos humanos

fundamentales como el derecho a no ser privado arbitrariamente de la vida,
los derechos a la integridad y a la libertad personal, y las garantías judiciales;
también involucran tratos crueles, inhumanos y degradantes, incompatibles
con la dignidad humana. La norma que prohíbe esta clase de trato es de
carácter universal e imperativa; hoy en día ninguna cultura puede reivindicar
para sí como prerrogativa, bajo ninguna justificación, el recurso a un trato
inhumano y degradante, jurídicamente reprobable y éticamente repudiable, el
linchamiento significa una ruptura del valor intrínseco de la vida y a la
integridad personal de la víctima, degrada moralmente al victimario y
trasciende incluso a la comunidad, pues sustituye los lazos de unidad y
solidaridad que permiten la convivencia social, por el temor, el odio, la
desconfianza y la violencia.
Por ello las acciones de instauración de un clima de paz en la
convivencia social deben atravesar todos los escenarios de la vida social,
económica y política del país así como las políticas sociales que se

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desarrollan desde las distintas instancias gubernamentales, sector privado y
sociedad civil, algunas de estas pueden ser:
Establecer políticas públicas y programas dirigidos al establecimiento
de una cultura de paz, fomentando la educación artística y musical en los
centros educativos, formación de coros y bandas escolares y municipales,
establecimiento de escuelas de danza, teatro y música en los distintos
municipios, comunidades rurales y urbano-marginales.

Es preciso reducir los costos y la pérdida de tiempo para las partes,

proporcionar foros accesibles, facilitar la solución rápida de conflictos
dañinos para la comunidad, para las vidas de las familias, aumentar la
satisfacción del público con el sistema judicial, promover soluciones
adecuadas a las necesidades de las partes y aumentar la tasa de
cumplimiento voluntario. Enseñar al público a probar procesos más eficaces
que la violencia o el litigio para resolver sus diferencias y restituir la influencia
de los valores vecinales y locales y la cohesión de las comunidades.
Además, resulta indispensable ofrecer a los sectores de bajos ingresos,
particularmente aquellos que carecen de acceso a la justicia del Estado, no
solamente métodos flexibles para resolver conflictos, sino procedimientos
que excluyan la arbitrariedad y autoritarismo así como promover el desarrollo
de actitudes y valores sociales democráticos positivos, tales como la
iniciativa, la participación, la potenciación y la solidaridad.

Sin embargo, todo lo antes mencionado es una simple exposición de

motivos, pareciera que el gobierno no tienes las más mínimas intenciones de
asumir acciones que permitan mejorar nuestro sistema de justicia.

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ANEXOS

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 Anexo 1

Avisos colocados por las comunidades organizadas, notificando a los

delincuentes que si incurren en delitos, serán castigados por éstos.

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 Anexo 2

Entrevista realizada al Dr. Luis Palmares, quien además de Docente

Universitario es Abogado especialista en materia Penal, con una amplia
trayectoria tanto a nivel público como privado, en el ejercicio de su profesión
durante varios años trabajo como fiscal del Ministerio Público.

Lista de Preguntas.

1.- ¿Cómo describiría usted jurídicamente un linchamiento, es ésta una

conducta punible?

2.- ¿En nuestra legislación existe alguna norma del Derecho positivo que
regule este flagelo?

3.- ¿Existe alguna ley especial que permita sancionar esta conducta?

4.- ¿Ha tenido usted dentro de su amplia experiencia, la oportunidad de llevar

algún caso de linchamiento?

5.- ¿Cuáles son las instituciones jurídicas que intervienen en estos casos?

6.- En su opinión, ¿Estas instituciones son efectivas y eficaces?

7.- ¿Se podría ajustar la norma para sancionar estos delitos?

8.- A su criterio ¿Que causas condicionan este tipo de conducta por parte de
la sociedad?

9.- Una vez ocurrido este acto, ¿Cuál es el proceso a seguir, desde el punto
de vista procesal?

10.- Nos llama poderosamente la atención el hecho de que se haya prohibido

la publicación de los linchamientos en los medios de comunicación, ¿Cuáles
considera usted son las razones que tiene el Gobierno, para tomar esta
medida?

11.- ¿Considera usted que ésta forma de enfrentar el conflicto, por parte de la
sociedad contribuye, o por el contrario agrava la violencia?

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Anexo 3

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 CONCLUSIONES
Día a día la delincuencia azota a los venezolanos despojándolos de
sus vidas y pertenencias materiales, ante las acciones inefectivas del
gobierno venezolano, quien se niega a implementar medidas eficaces para
atacar esta crisis de inseguridad; esta y otras circunstancias son las razones
por las cuales el ciudadano común ha decidido tomar la justicia en sus
propias manos, revelando con ello por una parte el grado de frustración de
éstos y por la otra, la incapacidad que tiene el Estado para castigar estos
delitos.

Todo lo antes expuesto, ha creado el caldo de cultivo perfecto para la

proliferación de linchamientos en las comunidades, por ello es necesario que
el Estado tome los correctivos pertinentes, dando celeridad y ecuanimidad a
nuestro sistema de justicia. Y con ello disminuir al mínimo estas ejecuciones
públicas, que representan el nivel más bajo y deprimente de una sociedad;
por otra parte cabe señalar que urge una depuración de los cuerpos
policiales y sus actividades criminalísticas con la intención de detener o
reducir a su mínima expresión toda violación a los derechos fundamentales
de los ciudadanos, y que este proceso le otorgue confianza que debería
tener éstos en la instituciones.

Es de vital importancia no fomentar estas conductas violentas,

evitando así la instauración de dicha cultura en nuestra sociedad, este es un
proceso que tarde o temprano acabará, se hace imperativo rescatar los
valores morales que sirvan de ejemplo a las nuevas generaciones,
erradicando la violencia de la sociedad.

“Mucho es lo monstruoso, pero nada es más monstruoso que el ser

humano”.

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 Sófocles.

BIBLIOGRAFÍAS

Referencias documentales:

Garay, J. (2013) La Constitución Bolivariana 1999. Gaceta oficial n° 5453 del

24 de marzo de 2000. Corporación AGR, S.C.

Código Penal Venezolano, Gaceta oficial 5768 del 13 de abril del 2005

Referencias digitales:
Runrunes, Linchamientos en Venezuela por Carlos Nieto Palma
Documento en línea disponible en:
http://runrun.es/opinion/256548/linchamientos-en-venezuela-por-carlos-nieto-
palma.html

Proceso.com.mx, Linchamiento y lazo social

Documento en línea disponible en:
http://www.proceso.com.mx/420242/linchamiento-y-lazo-so

Bbc mundo, "La gente demanda castigo": el inquietante aumento de los

Linchamientos en América Latina.
Documento en línea disponible en:
http://www.bbc.com/mundo/noticias-america-latina-36496161

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