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Angenot, Marc. (2010). El discurso social. Buenos Aires: Siglo XXI, p. 21.
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Barrera López,Trinidad.(2001). La versatilidad de la prosa de Machado de Assis. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes.
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Las comillas son Barrera López,Trinidad.(2001). La versatilidad de la prosa de Machado de Assis.
Sabrina Ríos
El texto sobre el cual abordamos la relación con el discurso social ofrece innumerables puertas
de acceso que pueden ser interesantes. Seleccionamos una que parece multiplicarse y de esta manera ser
entrada a muchos lugares, sin embargo , por esa misma razón se vuelve muy atrayente Memorias
póstumas de Blas Cubas puede ser presentada a partir de la definición del crítico Roberto Schwarz4,
como una novela realista con soluciones literarias no realistas. Será fundamental leer con detenimiento
y atención esas soluciones que encuentra el autor brasileño para resolver algunos problemas de los
novelistas de su país de las últimas décadas del siglo XIX.
Es preciso señalar que, en las diferentes sociedades, es posible organizar un corpus con textos
de diversas épocas que tienen algunos componentes en común, elementos de los cuales se pueden
inferir un intento de construcción de la identidad de un grupo o de un país. Esto es, textos que
construyen un relato de identidad, o de aspectos de esa identidad; textos que establecen y transmiten
un pacto social.
Por este motivo, el discurso social es el acceso imprescindible para que el código lingüístico
establezca enunciados de aprobación para ser interpretados.
Ahora bien, queremos dar cuenta de cómo el texto da una versión de la historia, construyendo una
imagen de ella, ofreciendo un orden diferente de lectura y de escritura de la literatura en Brasil del siglo
XIX.
Como sabemos ,el problema de la técnica es central en todo debate estético y en este sentido,
recordemos que los procedimientos de escritura son siempre vehículos de ideología, que no son
neutrales.
Teniendo en cuenta esto , podemos afirmar que los elementos del texto como los usos de
desestructuración en el relato y en los personajes, la relación establecida entre el narrador y el
narratario, la utilización de un discurso multívoco y ambiguo en constante hacerse y rehacerse
implica que todo es producción.
La novela señala su propio estilo literario: Sthendal, Sterne, Xavier de Maistre; también
aparecen las Sagradas Escrituras. Estas citas se ven reforzadas por la presencia de otras en todo el texto;
Dante, Shakespeare, Voltaire, Homero, Cicerón, Aristóteles y Séneca. Se establece así el dialogismo
literario que resulta más interesante en la escritura y la lectura. Todas ellas ,pero sobre todo las del
comienzo, tejen una red en la cual la novela se ubica estableciendo relaciones de significación. Muchas
veces estas relaciones son irónicas, mordaces. Sobre todo, porque las hace el personaje que recogió “ de
todas las cosas la fraseología, la cáscara y la ornamentación”( cap.24, p.43). Angenot (2010) plantea
que:
…el estudio del discurso social hace percibir también la producción social de la individualidad, la
especialización, la competencia, el talento y la originalidad; se trata de la producción social de las así
llamadas opinión "personal" y creación "individual". Lo que invocamos aquí es la inversión del punto de
vista clásico de los procedimientos histórico dialécticos: no son los escritores o los publicistas quienes hacen
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Schwarz, Roberto. Un mestre en la periferia do capitalismo. Machado de Assis, Sao Paulo, Duas Cidades.1990.
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Sabrina Ríos
discursos, sino que son los discursos los que los hacen a ellos, hasta en su identidad, que resulta de su papel
en la escena discursiva (p. 82).
Discurso autobiográfico.
La novela presenta la forma de la autobiografía, una clase de discurso con una tradición extensa y rica;la
identidad de un sujeto, en el sentido moderno del término, es dialógica, o sea, se recibe de otro, se construye en
relaciones. Por lo tanto,el “yo” se vuelve frontera con respecto a otros, señala la diferencia y la alteridad5.
El uso de la primera persona en los verbos y en los pronombres( típico de las autobiografías), es el
primer elemento que establece esa frontera con los otros. Además, la presentación de Brás es ya un desafío a la
diferencia. No solo es un muerto que resuelve escribir, sino también aparece como un narrador extraño,
impertinente, que no tiene consideraciones con sus lectores, que siempre juega con la alusión y la elipsis y que
nunca es igual a sí mismo. Resaltemos que en la obra se señala fuertemente el comienzo y la intención es marcar
lo existente: «Al gusano que primero ha roído las frías carnes de mi cadáver dedico con nostálgico recuerdo
estas Memorias póstumas»6.
En una autobiografía tenemos una ficción individual que construye al sujeto. Al narrar su historia, al
contar cualquier suceso, el sujeto protagonista y narrador hace una corrección ideológica de esa crónica. Cada
persona, cada discurso, ordena los fragmentos como puede y como quiere, para crear una serie ordenada con
ellos. Un relato de identidad incluye exclusivamente, es decir, hay cosas que se colocan afuera. Entonces, lo que
tenemos es una voz que nombra, que denomina- Brás como sujeto de la enunciación- que desarrolla un relato
con dominio de la temporalidad, para atrás y para adelante, no es un tiempo lineal. Desde el punto de vista de
César Aira (2001) quien nos permite comprender ese vínculo tan intrincado que existe entre la literatura y la
vida cuando, sostiene que la función del escritor es dejar un testimonio de su vida:
Cada escritor elabora su propia combinación, su nicho en un punto intermedio, y esa elaboración
constituye su mito personal. La figura propia que recorta cada escritor es la fórmula que ha inventado para
organizar el complejo de percepciones y afectos y mediante esta organización volverlo experiencia con la cual
escribir (p. 33).
Blas Cubas al contar su vida, al describir situaciones, establece desigualdades y las valoriza por medio
de un sistema de creencias. En la medida en que el narrador se manifiesta, es su mirada la que constituye la
representación del poder. Siempre es el poder, las relaciones de fuerza, lo que define(crea) las diferencias y, por
lo tanto, las identidades. Quien habla en la novela tiene poder por dos razones: como sujeto de la enunciación
está muerto y, por el otro , nadie podrá juzgarlo o castigarlo; él se encuentra más allá de los límites de los
hombres. Y, en segundo lugar, Brás como sujeto del enunciado pertenece a la clase alta de la sociedad brasileña.
Confesión y crónica
El discurso lo construimos como una crónica, de una clase , de una época determinada y como una
confesión. Estos tipos de discursos se edifican en función de los sistemas de creencias, en función de un pacto
con la sociedad. Son dos sistemas narrativos que, a su vez, hacen un pacto entre sí,quedan ligados porque son
centrales en nuestra cultura.Sistemas que funcionan en determinados dominios de saber que se forman a partir
de relaciones de fuerza y de relaciones políticas en la sociedad. Así, crónica y confesión aparecen en los aparatos
jurídicos, periodísticos, médicos, religiosos, entre otros; vale decir, en los discursos centrales de la línea de la
cultura dominante. A través de los sistemas de creencias se construyen territorios en los que se mueven espacios
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La definición de la noción de sujeto está sometida a conceptos históricos. La constitución del sujeto en el Renacimiento, el
sujeto burgués, está afirmado sobre una categoría de verdad. Ser resulta igual a pensar. Por el contrario, en el siglo XX,
aparece el sujeto definido por identidades diferentes y contradictorias. A partir de formulaciones como las del psicoanálisis,
el concepto de sujeto se relaciona ( etimológicamente) con la noción de “ sujetado”. Sujeto por los otros , por las
circunstancias. Por eso, se puede afirmar que la identidad del sujeto es dialógica , se recibe de un otro, se construye en
relaciones.
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Las bastardillas son de Joaquín Machado de Assis (1998).
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Sabrina Ríos
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Las comillas son de Angenot (2010).
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Los Estudios y la crítica literaria en la encrucijada valorativa , en Revista de Crítica Cultural n° 15.1997.pp 32-38.
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Sabrina Ríos
BIBLIOGRAFÍA.
ANGENOT, M. (1988), La retórica del discurso social, en: Langue Française “Rhetorique et littérature”,
septiembre nº 79, Larousse, pp. 24-36. [Traducción y Revisión Técnica: Prof. Elsa María Salas, 2003. Para
Circulación Interna Cátedra de Análisis y Crítica II, Escuela de Letras, Facultad de Humanidades y Artes,
UNR].
ANGENOT, M. (2010), “El discurso social. Los límites de lo pensable y lo decible”. Buenos Aires: Siglo XXI
editores.
BARRERA LÓPEZ,TRINIDAD. La versatilidad de la prosa de Machado de Assis. Biblioteca Virtual Miguel de
Cervantes. Disponible en: WWW.CERVANTESVIRTUAL.COM.
https://www.cervantesvirtual.com/obra-visor/la-versatilidad-de-la-prosa-de-machado-de-assis/html/213f93ba-a0f
f-11e1-b1fb-00163ebf5e63_2.html
LUDMER, J. (1987), “Desgrabación de las clases de Teoría Literaria II”, Facultad de Filosofía y Letras de la
Universidad Nacional de Buenos Aires, 31 de marzo y 7 de abril.
MACHADO DE ASSIS, Joaquín. M.(1998), “Memoria póstumas de Blas Cubas”. Argentina, Editores de
América Latina.
SCHWARZ , Roberto. Un mestre en la periferia do capitalismo. Machado de Assis, Sao Paulo, Duas
Cidades.1990.