Ensayo académico de la página 24 a la 27 del código ingenios

Nombre: Felipe Poveda

El código ingenios, es un conjunto de leyes que derogó a la antigua ley de propiedad

intelectual que regía desde y que busca unificar todas las áreas que traten de derechos de

propiedad intelectual y de esta forma se pueda generar cambios en la matriz productiva del

conocimiento, especialmente en los campos de la innovación, creación, regulaciones de

propiedad intelectual, impulso a nuevas tecnologías, control sobre el biopatrimonio de los

pueblos, etc. Este tratado, busca que las personas innovadoras tengan el apoyo en sus

procesos de investigación. Como es bien sabido, el arte es una de las ramas del conocimiento

que se ha visto respaldada por este código. El arte en el Ecuador siempre ha sido

menospreciado, sin embargo, es una de las ramas que más aporta en el desarrollo cultural del

país. Existen artículos en este código que respalda especialmente a los derechos de autor y

no solamente musicales, sino, también de cualquier rama del arte y en este ensayo se analizará

cada artículo que favorezca al sector de la industria musical en el país de la página 24 a la

27, que son donde más se trata acerca de música.

Los artículos que más se pueden destacar son los de 102 que menciona que una

persona puede adquirir sus derechos de autor solo con el hecho de la creación de una obra y

eso se los otorga sin consideración a algunos factores como: género, mérito, finalidad, destino

o modo de expresión de la obra. Sin embargo, este artículo plantea que una obra debe tener

distintas formas de expresión para que sea sujeta a protección, esto puede ser un poco

perjudicial para quienes realizan sus obras de alguna forma minimalista sin tomar en cuenta

otros tipos de expresiones. El siguiente artículo, el 103, menciona algo curioso, dice que las

obras pasarían a dominio público, lo cual es algo contraproducente para algunos artistas ya
que le estado pasaría a ser dueño de sus obras. El artículo 104 habla de las obras que están

sujetas a protección y en el punto 4 se menciona a las composiciones musicales con o sin

letra, es decir, en este punto ya se sabe que las obras musicales están respaldadas por este

código. Otro artículo importante es el 105 que habla de la protección a obras derivadas, esto

es muy importante pues muchos músicos sustentan sus carreras realizando arreglos, no solo

composiciones propias, pero, todas estas obras derivadas deben contar con la autorización

del titular de los derechos sobre la obra originaria. Otro artículo importante es el 106, que

habla de obras derivadas de manifestaciones culturales, lo que más llama la tención es que

este artículo busca proteger a las expresiones culturales en contra de su explotación ilícita.

En la sección 3 se trata de quienes son los titulares de los derechos de autor y en el artículo

108 se menciona que solamente las personas naturales pueden ser autores. Esto protege a los

autores de no compartir los derechos de sus obras con instituciones que podrían usar de forma

negativa la obra como para propagandas políticas y otros aspectos en los cuales los autores

no puedan estar de acuerdo. Otro artículo que cabe mencionar es el 110 que habla de

presunción de autoría o titularidad, este artículo es muy importante pues hay muchos casos

en los que las obras son realizadas por varias personas, pero, solo una se queda con todos los

derechos, pero si otro nombre consta en la creación, este tendrá el derecho a reclamar lo que

le corresponde en cuanto a derechos de la obra. Los artículos 112 y 113 hablan de cuando se

realizan obras colectivamente y de como estas pueden ser explotadas y de la repartición de

cada parte de las obras.

El artículo 115, es uno de los más relevantes pues este dice que las personas que creen

alguna obra bajo relación de dependencia y por encargo son dueñas de los derechos de estas,

esto ayuda bastante a la industria pues quienes tienen los derechos de explotación de la obra
y quienes ganarían las regalías serían los creadores, por supuesto, todo esto si es que no hay

algún acuerdo previo. Otro punto importante aquí, es que, aunque haya dicho acuerdo, el

autor va a tener el derecho irrenunciable de remuneración equitativa de su obra. Los artículos

114 y 116 parecen un poco injustos, pues si alguien crea una obra en algún centro educativo

o si una persona trabaja como servidor público, los derechos pasarían a ser de las instituciones

y no del autor. Para finalizar, los artículos 118 y 120, hablan de los derechos que tienen los

autores de cómo usar su obra, son puntos muy importantes pues como se mencionó antes,

algunas obras pueden ser usadas en actividades donde el autor no es parte o peor aún, donde

el autor no esté de acuerdo.

Para concluir, sin duda este código, ha ayudado en gran medida al desarrollo creativo

del país, especialmente de la música, pues los compositores, músicos, creadores, saben que

ahora tienen leyes que regulan y apoyan todo el trabajo que están haciendo. Sin embargo,

hay puntos que no son muy favorables, pues este código busca nacionalizar los derechos de

propiedad intelectual en el Ecuador, es decir que si alguien es autor de un libro, canción, o

cualquier manifestación artística sujeta a derechos de autor, en un futuro este pasará a ser a

ser del Estado y el autor podrá recibir las regalías por dichas obras siempre y cuando el nuevo

titular de los derechos, el Estado, se los permita, es por eso que varios músicos ecuatorianos

piensan que este código serviría solo en conveniencia del Estado y muchas obras

posiblemente sean desechadas por no coincidir con la ideología del mismo. Estos son puntos

que habría que analizarlos, pues, este código no es del todo bueno ni del todo malo como

algunos lo pintan.