PRIMEROS PASOS HACIA UNA EDUCACION LAICA EN MExico. Anne Staples EL Courcio pr México ¢Puede haber educacién laica en una sociedad que estuvo, y en gran medi~ da sigue estando, inmersa en una cultura catélica? Y, ;c6mo se define es cultura, que puede constituir un obstéculo al laicismo, y en qué senticio? Al referirse a la educacion de primeras letras, hay que relacionarlo con Ja religién popular y con dos de sus elementos mas importantes: los ritos y las rutinas. En las sociedades tradicionales, con poca movilidad fisica, en tiempos normales un dia se parecia mucho al siguiente. Los cambios, por lo general, eran obligados por circunstancias negativas tales como guerras, enfermedades 0 desastres naturales, en los cuales el instinto d sobrevivencia actuaba para vencer las calamidades, Invocar a toda la corte celestial era el primer paso, pues el tamafio del problema sobrepasaba los recursos individuales y comunitarios. No era el momento de promover las novedades. El pueblo crefa que el minimo cambio en materia religio- sa provocaba eventos en cadena que terminaban en desastres. Nuestras sociedades mexicanas, ya que de ninguna manera podemos hablar de la sociedad mexicana, fueron y han sido adversas a cambios en el culto, en la disciplina eclesiéstica o en cualquier tema relacionado con la religion, por miedo a las consecuencias desconocidas, el qué vendré o el qué diran, Al ser, para algunos, la esencia de la religi6n el cumplimiento exacto de los Titos y de las rutinas, cambiarlos o eliminarlos se convierte en un campo minado, Nada mas recordemos la rebelién que surgié dentro de la Iglesia catélica cuando el Concilio Vaticano 1 eliminé el latin de la misa, Practi camente hubo un cisma. En e] momento en que se considera que seguir los ritos al pie de la letra, o lo que se entiende por la manera correcia de realizar el ritual, es sindnimo de virtud, entramos en el terreno de creen- las a las que se aferra la poblacién, El laicismo ataca esos dos aspectosPrantenos PASOS HACIA UNA EDUCACION LAICA EN MEXICO ma como inherentes a sus creencias que el gobierno consideraba y coneldera inaceptables como parte de Ia ensefianza tanto privada como pa ic, por Ia amenaza que representaba (y representa) a la soberanfa de la nacion y del individuo a la patria. aa feats remplazar la doctrina crstiana porla moral, lo que i era sado por el primer ateo mexicano Ignacio Ramirez, marc6 un paso adelan‘ nel laicismo del pais. Su trabajo de ingreso a la Academia de San Juan de Letran, presentado en 1836, fue tan herético que més de un siglo después se trat6 de obligar a Diego Rivera a borrar el retrato de Ramsrez del Mura “Un paseo dominical en la Alameda’. No sobrevivié el texto de ste discur- 30, pero sabemos que se titulé “No hay Dios. Los seres de la naturaleza se sostienen por sf mismos”, Es milagroso que, en la sociedad de su tempo, s graves en su contra. oo rn vedad del igo xx fue defi Ia moral no come catic sino comociudadana, La moral cultural, las reglas de convivencia pertenecien'es a una agrupacién humana, no tienen por qué ser uniformes para todos fos grupos humanos. Ya no hay rina moral universal. Es tanto como admitir ue el universo es relativo, dependienclo de desde donde lo observa unc, J esto lieva a descubrir que no hay una verdad, sino apenas verdades, que lo mexicano no se define en términos de su catolicismo sino por otras Caracteristicas, Es entender que la religion es un fenémeno cultural y,come tal su forma institucionalizada (pero no su esencia) fue combatida por e gobierno mexicano en distintos momentos y bajo distintas modalidaces a To largo de la segunda mitad del siglo xxx El trasfondo ii i del vn gran atrevimiento, algunos pensadores espafioles, desde mediados prs Jesafiaron a la opinion publica y alos sectores tradcionaistas de la Iglesia y empezaron a proponer una manera més racionalista de ‘entender la vida. Sin descontar el papel desempefiado en toda la activida humana por la Divina Providencia, buscaron explicaciones cientificas, oe probadas experimentalmente, de los fenémenos naturales, Para cad 7 =a habia una causa que era preciso conocer. Las supersticiones del pueblo ge infiltraron el catolicismo, creando unas practicas populares que para muchos jerarcas hacian irreconocible la fe, eran de todo condenables Habia Ld entronizar la raz6n, sacar al pueblo y al clero desu ignorancia, extirpar los males de la sociedad, resolver los problemas del aqui y del ahora. Buscar y Awe Stars divulgar el conocimiento stil, en nombre del bien comin, era su meta. Estos hombres ilustrados, por la luz de la raz6n, no negaban la religi6n, sino que modificaban sus prioridades; aceptaban, junto al interés de cada cristiano por la salvaci6n de su alma, un afén por resolver los problemas de la so- ciedad y por encontrar la felicidad comin. A este movimiento intelectual se le conoce como ilustracién catélica,? en contraposicién a la ilustraci6n a secas -mucho mas independiente de consideraciones religiosas- del norte de Europa o de los paises protestantes. La ilustracion pregonaba la confianza en la raz6n, en la habilidad de los hombres por solucionar las fallas de la sociedad, en su capacidad por conocer el mundo fisico que le rodeaba y promover el progreso. Se hizo a un lado, hasta donde la tradicién lo permitiera, al principio de la autoridad, soltando “al hombre de la incapacidad de servirse de su inte- ligencia sin la gufa de otro”.* El talento personal y el alcance de la propia inteligencia se convirtieron en los instrumentos necesarios y suficientes para comprender los fenomenos de la naturaleza, como para poder afirmar que los cometas no eran de mala suerte, que las enfermedades no eran castigos divinos, que la vacuna protegia de la viruela.’ El conocido libro del padre Juan Benito Gamarra, titulado Academias filsdficas, habla sobre la fisica, la electricidad, la 6ptica y el alma de los brutos."* El enfoque puede considerarse como uno de los cimientos en la construccién de un nuevo edificio llamado laicismo. “El anhelo de fomentar la ensefianza del cono- cimiento stil conllevaba vencer las resistencias al cambio, modificar los planes de estudios superiores, restarle importancia a la metafisica, agilizar el manejo de las matematicas y encontrar maestros, libros y material a la altura del reto”."* No fue solamente el rechazo a las nuevas ideas de alguna parte de la poblacién o del clero, sino la falta de recursos lo que retras6 la introduccién en México de estudios que desembocaran en el laicismo. Esta falta de recursos fue compensada por la divulgacién cada vez mayor de folletos, peri6dicos, libros, relatos de viajeros y actos académicos que daban a conocer las tiltimas novedades en ciencia y tecnologia. México se incorporaba a la comunidad mundial del conocimiento, si no con la ? José Miranda, Humboldt y México, 2 ed. México, Universidad Nacional Autonoma de Ménico, 1995, pp. 11-12, 2527. Immanuel Kant, “;Qué es la lustracion?”, en Filosofia dee historia, traduccion de Bugenio Imaz, Mexico, Fondo de Cultura Econdmica, 1978, p. 25. * Miranda, Humboldt y Métic,p.58. 2 Thi, pp. 39-40. % Staples, Reouento de una batalla. . 9526 Prawexos PASCS HACIA UNA EDUCACION LAICA EN MEXICO alacridad deseada, tampoco con un atraso como el antiguo encierro de tiempos de Felipe I. La palabra impresa estaba més disponible que nunca, fa tal grado que muchos alumnos empezaban a tener sus propios textos en donde estudiar, ademas de los apuntes dictados por el maestro”."* La posibilidad de formar un juicio individual y erftico quedaba al alcance de Jos que tuvieron vocaci6n de intelectuales independientes. Esta actitud de querer conocer las bases cientificas de la existencia biol6gica lev6 a los estudiosos a querer saber més acerca del ambiente que les rodeaba, Se puso de moda contar las cosas y surgié la estadistica ‘como disciplina académica. Se llevaron a cabo series de observaciones astronémicas, se busc mejorar las técnicas metaltirgicas y los medios de transporte, se organizaron expediciones para conocer el mundo natural, ‘como la de Malaspina y la de Humboldt, se juntaron colecciones de mine- rales, de curiosidades, de animales disecados o de artefactos arqueologicos, estableciendo gabinetes de historia natural, El hombre empe76 a fijarse en ‘su entomo fisico y a relacionarlo con otros entornos. Ya no era la dimensiGn metaficica lo que explicaba el mundo natural y el movimiento de los astros. Surgié la geologfa, opuesta a la idea de una creacién inmutable de una semana biblica de duracion, y se especializaron las ciencias, separandolas del rubro general de “filosofia”. El dibujo tomé una importancia desconocida con anterioridad, pues se le consideraba una nueva materia que promovia el desarrollo material, desterraba el ocio y ofrecia un entretenimiento saludable al bello sexo, volviéndose tan estratégico como lo habia sido anteriormente, ppara la salvacién de la sociedad, la misma doctrina cristiana. El término laico se presta a distintas interpretaciones. Dorothy Tanck de Estrada escribié que en 1787 la escuela Patriética de Veracruz “era la primera institucién laica de nivel primario y secundario que preparaba Slumnos para entrar a los estudios mayores de Artes, esto es, al primer nivel universitario” ® Desde luego que se refiere a la direccién de la escue- la, patrocinada por la Sociedad Econémica de Amigos de Veracruz, no al contenido de los estudios. La educaci6n informal desempeiié un papel a la hora de trazar el camino que llegaria a la laicidad. Estos afios vieron la creacién de instituciones alejadas del quehacer religioso. Las sociedades 2 Ibid, p. 96. 1 Daschy Tanck de Estrada, “Siete innovacones yuna flaca sobrela educacén elemental durante la €poca de la independencia”, en Alberto Martinez Boom y José M.L. Bustamante Vismara (comps), Escuela publica y maestro en América Latina, Historias de un acontcimiento Siglas XVIIL-XIX. Buenos Aires, Prometeo Libros, 2014, p. 118. Ane Srarces or econdmicas de amigos del pats y la Sociedad Mexicana de Geografia y Estadistica, de ideales ilustrados, son dos ejemplos. Nacieron asociaciones literarias y musicales, como la Sociedad Filarm6nica, otras para promover la agricultura y andando el siglo la Sociedad Minera, todas ellas dedicadas a contribuir a la educacién laica al promover el conocimiento titil. La Iglesia misma hizo su parte, gracias a algunos (pocos) clérigos comprometicios con tuna educacién que no sacralizaba conocimientos obsoletos superados. ‘Acorde con estas ideas, la corona espafiola establecié en Nueva Espafia cuatro instituciones que llamamos ilustradas, empezando con el Colegio de Cirugta, copiado de los de Barcelona y Sevilla: el Colegio de Minerfa, la ‘Academia de San Carlos y el Jardin Boténico. Son instituciones emanadas de una cultura cat6lica, punto que hay que subrayar, porque no se sus~ trafan del ambiente religioso de su tiempo, pero tampoco son instituciones manejadas por la Iglesia." Existian capellanes entre su planta docente, cuando habia internado, como en el Colegio de Miner‘a, pero ni por las materias que alli se ensefiaban, ni por los reglamentos que normaban sts actividades pueden describirlas como enfocadas hacia cuestiones religio- sas, Ofrecieron carreras cientificas, pero a la vez, no dejaron de impartir instrucci6n religiosa a los alumnos. Hubo avances, pero no sin la oposiciGn, a veces justificada, del clero. El gran ilustrado, José Antonio Alzate se quej6 de la decision de la corona de excluir a los eclesidsticos del plantel de profesores del recién propuesto Colegio de Minerfa. Alzate proporcioné una larga lista de clérigos que hicie- ron importantes contribuciones a las ciencias, en un esfuerzo por mostrarlo ‘mal aconsejado de excluir del plantel docente a los hombres més ilustrados, muchos de los cuales eran clérigos.”” Evidentemente, se consideraba la pre- sencia de los clérigos como obstéculo al conocimiento més reciente de las ciencias geol6gicas. Fue el mismo gobierno que en 1772 prohibié la publica~ cin de los Asuntos varios sobre ciencia y artes, redactados por el padre Alzate. En este aspecto, los estudiosos estaban més avanzados en el camino de la secularizacion que el mismo gobierno de las llamadas reformas borbénicas. No importaba que fueran o no clérigos. Por otro lado, ya pesar del ambiente Staples, Recuento de una batalla... p. 36 45 Joge Antonio Alzate, “Carta de un peruano a un mexicano sobre haberse determinado por los proyectistas del Tribunal de Mineria de Nueva Espafa excluir a los eclesisticos de laenseftanza en el posible colegio. 1784", Memorias y ensayos, México, Universidad Nacional ‘Autonoma de México, 1985, pp. 69-75DUCACION LAICA EN Mixtco 28 PRieRos PASOS HACIA UNA H secularizante, segtin un estudio de Rosalina Rios Ztihiga, el Colegio deSan Juan de Letrén no tuvo su primer rector seglar sino en 1848: a #1 Colegio de Minera dio clases parala lormacion de tecnicos peritos como selos nombraba; fue un proyecto ambicioso, con un plan de estuis le vor ‘afios para jovenes becados de entre 12 y 20; afios de ee an i i y de externos, que vivian e y de espaiioles o indios nobles, y Tosia dein wdneecine sistian a clases. Los internos debian cumplir con los ritos dela vida escola cer agi ole ainal someloy amen de coneiencin al erminat la comunign una vez al mes. El capellin estaba encargado de la disciplina, Slumnos, de escoger el tipo y la cantidad del castigo. Un divertido articulo sdactado por Eduardo Flores Clair titulado “Cero en conducta: los lacayos & | Colegio de Mineria” relata los esfuerzos de las autoridades del Colegio jor imponer una ferea disciplinaa unos alumnos nada timoratos, producto ela dura vida en los reales mineros(y algunos aamente deproceenca a, pero igualmente revoltosos). Nos muestra que la seculariza foe: wanatrad: en la mentalidad de ie Gren y a de volverse tan seculares que la religi6n y los rit zt Fo significaban més que una obligacién impuesta por la sociedad, pero 8 encimiento propio.” aa sociedad temia perder su estructura, basada. en tuna relacon de 1» ‘taba mantener jaladas las rien- erzas entre personas y valores." Se intent a oe ae aestos ere mineros inquietos. i educacon, zal los al on tve ‘es principios de disciplina sanciona ae etree oa sidstica. “) lisciplina fue reforzac la disciplina eclesidstica. “La discip] : TeenscRanea exhaustiva ce ia religion citanay el culo abarcd una “ae de ritos obligatorios que se cumplian en el transcurso del dia”. Pero nada servia: on Se 20“ me te DP uorkar .do: diez lecciones bien aprendidas de w les, "El temor a Dios y el temor al Estado: diez. af rae emer Do ‘edades opines. México, Colegio de México, 2012, pp. 461-480 ® Flores Clair, “Cero en conducta’, p. 636. ® pid, p.637. Axe Starts i Los estudiantes siempre ponfan una serie de pretextos y obstculos Para cumplir con las tareas religiosas. Con frecuencia, los alumnos faltaban alamisa de ocho [de la mafiana]; algunos lo hacian por ideas y conviceiones propias; los ms, simplemente aprovechaban esos momentos para dormir mds tiempo; varios fingian enfermarse con el fin de justificar su ausencia En as ceremonias, algunos padecian aridez espiritual, pues era comén que se la pasaran “platicando”, “jugando” 0 “se sentaban” en el momento diel evangelio. Otros, con tal de manifestar su disgusto o simplemente provocar el desorden, “no se hincaban”, “no se descubrian”, “se levantaban antes de tiempo” y a juicio del capellan “asistian con indevocién”, Rezaban el Tosario con vocecitas tan apagadas y tan aprisa que nada se entendia. “Al entrar ala capilla, algunos no guardaban el debido respeto al templo y a Jos mayores”; entraban “con el mayor descaro” “dando gritos, aplaudiendo, danzando, [y] dicha conducta animaba a la insubordinacién general, que era dificil de controlar?" Los colegiales de Minerfa abrieron la puerta a una realidad palpable: ya no se podia manejar la disciplina de una institucién cientffica como ot fuera un seminario para la formacién del clero, pues pertenecia ya a un mundo seglar. La carrera de minerfa no tenia ningtin contenido “catélico” Cuando mucho, se intent6 educar a los estudiantes en los modales de una sociedad urbana culta, Entre otras instituciones de educacién superior, los institutos iterarios se dedicaron a producir generaciones de abogados, por lo general pero no siempre de tendencias conservadoras, En las escuclas de arte habia de todo, como se ve en el catalogo de la Academia de San Carlos, pues en las exhibiciones ptiblicas anuales se exponian pinturas de temas historicos, patristicos, familiares, costumbristas, naturalistas, ademés de religiosos.” La ilustracion abri¢ la puerta a otra influencia intelectual mucho mas radical que ésta, el liberalismo. Exaltar al individuo iba en contra del con. cepto de una sociedad cooperativista, de subsumir a la persona dentro de una colectividad, como una cofradfa, un gremio, un pueblo, una familia extendida. En la batalla por las lealtades, el nuevo Estado mexicano queria que la persona, no la colectividad, respondiera asus obligaciones, que no hubiera intermediarios mAs que la ley entre el individuo y el Estado. De la mano del 2 Ibid, pp. 638-640. # Lisula Tania Estrada Lopez, “La primera generacion de lunnas dela Escuela Nacional de Bellas Arte (1888-1910), esis doctoral, Instituto de Investigaciones Esttica, Univeredaa Nacional Autonoma de Meco, en prosecePauwenos PASOS HACIA UNA EDUCACION LAICA EN MIICO 30 tiberalismo iba el utilitarismo, que volveria al individuo capaz de contribuir ang cociedad, dejando atrés lo obsoleto, lo que hacia al estudiante perder el tiempo, al mercader sus ganancias, al politico sus metas. Estaba en vias de die ceign una manera de vivir més expedita, mas enfocada a objetivos Soneretos y materiales, més racional. Las horas de meditacion,largos Ma ‘nisas diarias, procesiones, abstinencias, flagelaciones, novenari0s, sacrifi- Thos y penitencias no concordaban con la divulgacion de conocimiento «til Si corel empleo provechoso del tiempo. “El propésito de la escuela en el México independiente se expresa en términos de su utiidad aa sociedad” encanto a actitudes y habilidades. Un gran exponente de este concepto fue Siulchor Ocampo, quien costes la instalacién de un laboratorio de Hsien y aquimica en el recién reabierto Colegio de San Nicolés de Hidalgo, obra suya Jlendo gobernador de Michoacan. Escribi6 tratados de biologia y promovié Tas materias cientificas en la educacin superior para intentar sustituls al wee mo de sacerdotes y abogados con gente preparada para reconstrul ute patria en ruinas después de décadas de revueltas interas, inestabilidad y ae ees far eas eaealora cuya primer peldafo era la ilustracion, seguido Ee Lberalismo y el utiitarismo, se avanzaba a otro que era él ronan, mo (no tan laico, pero si muy enamorado de la naturale‘a) para Megar al positivismo, que tampoco abraz6 con total entusiasmo a Jaicismo, aunque Pore las propuestas de Enrique Rébsamen se encontraba una instrucci6n Iniea, obligatoria y gratuita La prucba de este transigir con él pasado esla dee ge metaffsica que se impartioen la Escuela Nacional Preparatoria ¥ al eeandalo que surgié luego del suicidio de un estudiante, privado, decian, daar melo de la religion por haber sido sometido a una educacién laics a vedad en esa época era la de interesarse pot las noticias de Europa, que fiuian mas facilmente que en tiempos de Ia casa reinant® de los eae i mundo empezaba a ser més global y la Nueva Espatia queria participar en él, Hl siglo x0 lo dese6 tanto que jincorporé constantemente la frase “formar parte del concurso de las naciones en el discurso politico Sivilizadas”, La internacionalizacién de las costumbres, gracias ala influen- ctancesa anterior a su RevoluciOn, provoc6 agrias criticas en la Nueva Espana, prueba segura de su eficacia. Como si fuera profeta, un comisario ® staples, “Vencer la ignorancia..2", p-198. aaa aero nformes de Ocampo como gobemaor de Michoacén’ en Excl Tein renus y dacementos, Mexico, Empresas Editorials, 148, pp. 119-120 re aucatvns oficiales en Béxico, vol. 1. México, Univer- 2 Emnesto Meneses Morales, Tendenci -ativos, 1983, pp. 378-381. sidad Theroamericana, Centro de Estudios Educ Ave Soars 31 de la Inquisicién denuncié “1 cid “las acciones no muy cat ” o dela gene qu copia, avitendo de agin pe crass ius cific despa Apaarae do qa ce conaeaben las bers pubes icin a dejar de lado la preocupacion reli que es ustaent le dfn de nice, H are eee laibertad de 9 as ge fone del siglo x antecediron al td 0) la ausencia de cer fonmaimente( emonias, rituales y fanz gloss en as escuelas Yen otras instituciones pablicas, 2 ia el laicismo se dio desde la Constitu af la Monaraula Espaftola de 1812. Al exigir la ceo ae ae ctv da los derechos obligaiones del Kombre junto con la de la doctrina seest i6 que no. >a un conflicto entre I ci tela pia conv conel Estado moder, cuediaeyeni pod mio tempo buen ceyeney iio, on tatecsnes cies faron y pusieron en manos de los jovenes desde principio: gurne ree y i jovenes desde principios del Gaara, presencia de un pensamiento secular, encaminado Li Be a seculatzacion: iba de la mano de la ilustracién. Era el resultado Is. ar ales tes modernizantes, de querer cambiar la direcci6n de la vid: na pablca al ubicarla ene aqu yen el aos. La palabra sa cot : y cular, angio eh iere a. ‘estar, en cuanto a la dimensién piiblica de la’ vida, gncl siglo, enel tiempo civil, no en un tiempo candnico ni rival. Signi 2 Gesicare un mayor interés a cen, aa hig, a tener noe Srejiclony da eat iA appemmeniey a las consecuencias de combatir a Brsjulcoey deconfun la ignorancia con la inocencia® Ayud6 al proceso peter dl he de que el gobierno mexicano padeci6 omiiee centalzacion, fuera un égimen federal ocentralistaenel poder Hea con pate delet lizacion monarquica, aun bajo el gobierno republicano, permite’ ar rg y financar la nstruccin publica... que la ges a Y os clérgos quedaran fuera de la educacion o que las formas de bir y las practicas se encaminaran més a lo civico” El punta és 2 més % Miranda, Humboldt y Méxi 18. Eugenia Rol *] akin ieee a ye Pelco ee gers epee tia nn ce Pate Bein ans ecg eat an a orca So eePRC PASCS HACIA UNA EDUCACION LAICA EN MEXICO 32 importante es el cambio en el hincapié en formar buenos creyentes y stib- ditos, a Ja formacién de buenos ciudadanos. El estudio de esta transicion constituye el tema de numerosas investigaciones acerca de la educacion publica en el siglo xix mexicano. Elestablecimiento de los institutos literarios y cientificos respet6 la cul- tura catolica, pero al mismo tiempo promovi6 conocimientos sin contenido religioso. El manejo del tiempo (los relojes en los ayuntamientos y en las fabricas), de la sonoridad (los reglamentos para el toque de las campanas) y, sobre todo, las leyes de Reforma, crearon un ambiente en el cual la ensenarza religiosa seguia siendo una obligaci6n, pero ya no estaban restringida a le ortodoxo ni en las materias ni en las lecturas. El éxito de la secularizacion {qued6 mostrado en las muchas denuncias en contra del indiferentismo re ligioso, visto como el gran peligro de! siglo. De allf al laicismo, la negacior de cualquier presencia religiosa en la educacién, no hubo mas que un paso ‘Otro indicio de secularizacién y su acercamiento al laicismo fue lz creacién del Colegio Militar. Establecido en 1823 y sucesivamente ubicado en Tlacotalpan, Perote, la Escuela de Medicina y después el Castillo de Chapultepec, en la Ciudad de México, su misién poco tenia que ver con la Iglesia. Se imponia la disciplina militar mediante el castigo mas comin del ejército: el arresto, La educacién era psicologica: lealtad, patriotismo y honor y técnica: tacticas y estrategias, mas temas de ingenieria como, po: ejemplo, construir y destruir defensas. Para estas materias se requeria al estudio detallado de las matematicas.” El plan de estudios era parecido al de la Academia de San Carlos en cuanto a las muchas matemsticas impartidas como base de las carreras de arquitecto y grabador. Las mateméticas fueron una materia entrafiable para los ilustrados, pues no amenazaban (aparentemente) las creencias religiosas. La creacion de los institutos literarios en varios estados de la repiblica reforz6 una educacién que no podemos llamar laica pero que iba encaminada ala secur arizaci6n, En Guadalajara, Cristina Cardenas ha encontrado que, siguiendo Jos planes de estudios franceses, una parte de la educaci6n secundaria se dedicaba exclusivamente a las matematicas;" asf como que la presencia de (coords), Proyectos de educacion en México. Prspections histé- Vela y Pedro S. Urquijo Torres 1a de México, Escuela Nacional de Estudios ricas, México, Universidad Nacional Autonom ‘Superiores, Unidad Morelia, 2014, p. 267 50 Anne Staples, "El impulso al conocimiento académico, 1823-1846", en La evotuctén de 'a educncin milter en Mico. Mexico, Secretarta de la Defensa Nacional, 1997, pp. 113-114 Cristina Cardenas Castillo, Aventura ydescenturas de la educacn superior en Guadalajara durante! siglo XIX. Mésdco, Universidad de Guadalajara, 1999, p. 204 Anve Stars 33 franosses, mis interesados enla educacén tenicayIteratiaquelos an e Iglesia en tiem: cional, 1997, pp. TANCK DE Esrrapa, Di cacién elemental pblica y maestro en América Latina. Histor XVII-XIX, Alberto Martinez Boom y J 2s, Prometeo Libros, 2014 MLL. Busta (comp), Buenos A‘