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Para iniciar con mi análisis sobre lo que se menciona me gustaría empezar con una frase

propia: “Una sociedad en donde existen leyes sociales, pero al mismo tiempo existen

personas que no las respetan y abogados o fiscales que no actúan conforme a la ley,

jamás estará libre de la violencia, la injusticia y la corrupción.”

Como menciona (Anzola Nieves, 2012), la corresponsabilidad debería ser uno de los

principios fundamentales en la vida de cada persona, de cada miembro racional que

conforme una sociedad y que además debería estar plasmada dentro de la constitución

de una nación en donde el estado tiene funciones y responsabilidades específicas,

mientras que las personas tienen derechos y obligaciones que cumplir.

En otras palabras, como podemos exigir justicia, exigir libertad y verdad si desde la casa

muchas veces se enseña y se practica el engaño, la superioridad y como vulgarmente

decimos la viveza. A esto se refiere el texto cuando menciona que todos y cada uno

debemos ser corresponsables de los actos que practicamos y que exigimos.

(Chavez & Mujica, 2014) mencionan en su trabajo que actualmente la sociedad

moderna sufre y se caracteriza de una carencia de racionalidad impulsada por la

desintegración social y el deteriorado objetivo de lograr juntos el bien común, en

definitiva nosotros debemos ser los encargados de mejorar, de enseñar a nuestros hijos,

a retroalimentar a cada miembro de nuestra comunidad sobre la importancia buscar un

objetivo común siendo necesario para ello contar con el apoyo y la voluntad de todos

los miembros y sobre todo incentivando a que el resto de personas actúen con respeto,

con verdad y con sabiduría sin esperar que solamente las leyes o los entes encargados de

regularlas nos soluciones todos nuestros problemas.

Bibliografía
Anzola Nieves, A. (2012). La corresponsabilidad como principio constitucioal en

Venezuela. Scielo, 3-29.


Chavez, J., & Mujica, F. (2014). Orden social y orden jurídico: la observación de Niklas

Luhmann sobre el derecho. Scielo, 7-38.

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