Angustia y trauma
Osvatpo DELGADO
1. Introduccion
Rte trabajo se enmarca en el punto II del curso. dictado en 2004
en la Facultad de Psicologia (UBA) por Eric Laurent: “Los tiempos
de la angustia”, que lleva como titulo “Retorno a la angustia an-
terior a 1926”.
El tema preciso que voy a desarrollar es la-diferencia entre
‘Angustia sefial y angustia traumatica”, sus fundamentos y con-
secuencias. *
ara poder desarrollar los fundamentos, se hace necesario ubi-
car previamente los antecedentes y anticipaciones en la obra de
Freud, sin dejar de mencionar el modo en que se presentan al fi-
nal de su obra.
El propésito que da origen a esta monografia, es establecer el
fundamento metapsicoldgico freudiano del denominado “ataque
de pénico”, a partir de conceptualizar el estatuto de la angustia.
Esta denominacién, que agrupa elementos puramente descrip-
tivos en el DSM IV, retine dos términos: “urgencia” y “trauma”.
Por lo tanto, el objetivo que este trabajo persigue es ordenar
conceptualmente el lugar de la angustia en la obra de Freud para
ywenyuanad VION3DWN VT
(Osvabo Di.GADo es psicoanalista en Buenos Aires, AME de la Escuela de la
Orientacién Lacaniana (EOL) y de la Asociacién Mundial de Psicoanlisis
(AMP). Profesor Adjunto Regular de Catedra I de Psicoandlisis; Freud, \
Faculta de Psicologfa (UBA) « mail: osvdel@ciudad.com.ar 53] Osvatoo Deteavo
estatuto, ante esta generalizacion fenoménica en el
emociones”, tal como lo desarroll6 Eric Laure
2. Urgencia y trauma
“Ungencia
= re ae La reunién de estos términos recortan
seria ie problematica clinica especifica. Es decir que la dim
“ plier gimbd sido muy abordada y la cuestién de os
citanbien, dese muchas perspectivas pero el crue I ntrsec
inos no ha sido sulici
enige un esfuerzo conceptual muy po ncaiasae cea
ingencia” es un término que proviene d i
; proviene del cédi, i
flee fata un disposi asistencia la urgencie- como it
modo de lo que vamos a lamar “la legada de los pacientes i
no en que leganciertos pacientes ala consulta. i
ae Freud ha descripto la urgencia, por ejemplo en el fz
re em del llamado “Hombre de las ratas” y més accent
amen en un escrito muy temprano en Freud que se lama "Ob-
Servacn de un caso severo de hemianestesia en un vardn hist
eae n que hace del modo de Presentacién de ese sujeto,
es un deta en donde l dice que se trataba de un hombre que
futsa de dolores de roillay en la planta del pie, sensaciones en
garganta como si tuviera la lengua atada, musica en lo
convaiones Teves y ataques de vértigo. nas
woe Pese a que Freud destaca esto aqui, y en otros
nents a ele a certs pass en ets hires
: Ivo un estatuto conceptual en la ob:
na nif elevado a la categoria de problematica cl oa .
Ss ee en que el psicoanilisis fue extendiendo selec
n cuanto a terapéutica, avanzando sobre terrenos nue-
is puro. En la medida‘en que el
indo hacia otros terrenos, por veo la
ica con psicbticos, las problematicas que
ico de
linica con nifios, la
{tajo aparejada la fundacién del Ambulatorio Psicoanal
et 2 i
na, etc, fue avanzando en la dimensién de la terapéutica y so-
bre terrenos nuevos. Se fue encontrando con problems -
roblemas absoluta-
Entonces estas probleméticas nuevas fueron haciendo que lo:
coanalistas tuvieran que ponerse a dar cuenta conceptualmen-
'y ademés poder asegurar la eficacia de su accién a partir de las
legorias de la operacién analitica en campos totalmente inédi-
5, en la medida en que cada vez. més fue insertdndose en los de-
inados espacios de la llamada Salud Mental.
“Por otra parte, siendo que “trauma” también proviene del dis-
9 médico, sin embargo es un término que recorta toda la obra
Freud. Encontramos “trauma” en el inicio, en relaci i
ia sexual prematura traumatica”. Lo vamos a hal
‘como externo a la estructura. Lo vamos a encontrar en el giro
tral de la obra de Freud en 1920, en el texto “Mas alla del prin-
cipio del placer”, como interno a la estructura.
“En Freud se va a producir un movimiento que es la primera
jento, como un
rental en la causacién del sujeto mismo. Podriamos decir
qup en términos freudianos, ya desde el inicio de su obra, el trau-
‘ma aun teniendo el estatuto de un episodio externo, tiene la cate-
goria de estar en la causacién del sujeto. La causa misma del su-
jeto va.a estar dada por el trauma: En los primeros textos de Freud
nos encontramos con que esté el episodio traumatico, la llamada
“experiencia sexual prematura traumética”. Va a aparecer un
tiempo llamado por Freud de latencia, y posteriormente va a pre-
sentarse un representante psiquico que entra en conexién asocia-
tiva con la marca que dejé el episodio traumatico, y ese represen-
tante psfquico actda retroactivamente. Ahf aparece el concepto de
“retroacci6n” en Freud. Ese segundo representante psiquico que
‘entra en conexién con la marca que habia dejado el episodio hace
que se genere lo que Freud va a llamar el trauma como perdido,
‘como inasimilable, irrecuperable, de lo que qued6 una marca. Esa
‘marca primera que es primera en un sentido, en otro sentido es
segunda porque es el segundo representante que entrando en co~
nexién lo transforma al otro en primero.
El movimiento que hace Freud es el siguiente: el trauma en la
primer época esté como episodio, como experiencia sexual pre-
matura traumdtica. Tenemos el episodio, pero el episodio en sf
mismo no produce ningiin efecto. No tiene eficacia. Es recién pa-
sado un perfodo que Freud denomina de latencia -y Freud ahi es-
td trabajando con esas categorias en ese momento- después de la 7”
vayzivana9 viIDNaDu0 V7legada de la pubertad, va a aparecer un representante 0,
que va aentrar en conexién asociativa con la marca ola huella que
lej6 el episodio traumatico. Este segundo tiempo en retroacciin
Sobre el primero va a transformar al episodio en trauma, es a pose
teriori.
A su vez, va a producir displacer recién en ese momento. El
displacer respecto al trauma va a aparecer en el segundo mom
toy va a producir a este momento retroactiva
To, porque recién en el segundo,
mente como prime-
transforma a esta huella en p:
Primer antecedente del concepto de inconsci
Freud? Pero queda un resto inasimilable,
Tenemos un segundo momento, un
(dos), que por retroaccién vuelve
is €5 ese sujeto di
trauma estd en una relacién directa con la causaciGn misma clel
Sujeto. Tiene un valor causal. A partir de que entran en conexiGn
estos dos representantes psiquicos donde el segundo torna prime.
rp al primero, vamos a tener tn sujeto representado por ese gru-
Fo psiuico separado, Pero queda un resto inasimilable por la ca.
dena de representantes psiquicos,
Cuando Freud construye el concepto de fantasia, se le desva-
Tece en la teoria la importancia central del concepto de trauma,
Ta medida en que el trauma va a queda
acontecido. En la medida en que Freud va a decir “mis histéricas
me engafian”, aunque en ese engafto hay una verdad, la fantasia
viene a ocupar el lugar causal que tentfa el trauma en el primer
memento. Pero aun en esa época, la fantasfa como realidad psf.
quica, vela la practica pulsional, nombrada como autoerotica,
Es el tiempo intermedio entre el trauma de la primera época y
l trauma de 1920, porqueccuando Freud ubica al trauma en 192)
con Ia introducci6n del concepto de pulsién de muerte, el trauma
78 ya no va a ser un aconteci
‘imiento exterior a la estructura sino in-
en
ado al episodio, a lo
| Osvatoo Detcavo.
a la estructura misma, Se mantiene el concepto de trauma.
concepto de trauma ya no va a referiraningin episod
y tecimiento sino directamente a la exigencia pul ional, a
ssion de muerte-Lo que va a venir a ocupar el lugar lla
en inasimilable y como aquello que pone as vez a taba-
a todo el aparato, a toda la trama, es el trauma como intern
aoe eareuision de muerte, 1920, “Ms ald del principio
terminable e interminable,” y
(on libre es el término fun-
. Un fragmento de agresic s ae
le e interminable", para
ester ‘is, mas alld del
complgjo de castracién, Fragmento de agresion Hore es a irrup-
Sion pfsional, Jo que queda como no ligado por pees
psiquico. Irrupcién, més alld del estatuto de la verda
juica. -
eaters apna ann “ou” nent
timo texto psicopatologico de Freud que es “Moisés y eee
notefsta,” en el capitulo “La analogia”, donde a tee
aauellos lugares donde hay una cicatrz en el yo, rreductible,q
y ién traumatica.~
sostiene en los lugares de fijacion ti
e Pasemos ahora al otro término: "Ungencia” eine fe
+ La urgencia reine la presencia de un padecimi ene
sin trama, con la cuestin del tiempo. cabs esate
“argencia” compuesta por dos elementos. .
sco dei dec conju yuo de ls elementos un p>
decimiento sin velo, sin trama; y el otro elemento de oe i i z
la cuestién del tiempo, la dimensién del apremio y al
oe presenta descriptivamente como desborde, eee
como desesperacién o también como un mutismo
también tener el cardcter de una impul doef
besa que implica tanto para si mismo como para cee ae =
lk dlimensién de un acontecimiento que tiene el cars
a ys
abrupto para el equilibrio psiquico del sujet
+E] trauma, a la altura del texto freudiano
\do en el uil-
| z vovenvwanao viowaoun v7
fs alld del principiodel principio del placer”
placer”. Irrupcién pulsional o i
mica-;Qué es lo que F ie aieemn ae
mien Out gag ‘reud nos dice en es
dal Sst, en vez, en la angustia traumética,
a is duce la inundacin econémica como vemergencia pul
no gad Freud, implica la cafda de la escena ac
frmpetn pon En terminos de Fre die qu Piavietan,
P Ta prot tiestir 2
Fenn meat
? Justamente ante la irruy :
: ipcién de lo pul
; pulsional
a Gus a famesa bea protectors atest? Esa cade
a aebreventantes psiquicos misma, Es la que le permite ‘
Ko alr la pulsin y mantener el equilibrio del principio de pla-
wa ae ate modo mantener In dimensin homeosttica del me
Eicse stasis paraddjica, ya que incluye a tensiGn deseante
ren i intemovextemo -tensén deseante— el modo en q
ia el problema del trauma como interno a la estruces,
ra. Va a ubicar tn int
: terno-extern
tiempo lo més intimo, 10. Un exterior que es al mismo
El origen del concey
pto de ext
tlorexiemo, trauma ala altura de “Mle ats ee nae he
sos habituales del ‘sujeto,
* La irrupcién pulsional de} escen:
in Pulsional deja al sujeto sin fquic
ausencia de escenapaiquica lo que eine teomeny ne
a. Osea
"mpre y cuando los dos mecanismos fund
sees para a formacin de un suefio, que son condensasiony
Serle cp, Postmen undo yun es
amiento y condensaci
22 Semper y condensacién,
gates Pulsin al deseo y mantienen el equi del prin =
“we Fo del places, cuando fracasan, hay fracaso de la func det
a de la escena psiquica, suetio de angustia, despertar.
SVALDO DeLcavo
del placer’, es abordado i
econ xactamente en os capo IV dl texte ng a
i6n econé-
que ena angustia sea session In epresntatin
en la media en que
3. La caida de “la otra escena” y la angustia_
concepto de “desamparo”, en cuan-
fala ausencia de significacién, como efecto de la cafda de la
ra escena”’.
La “barrera de proteccién antiestimulo” revela su punto de fa-
indicando lo pulsional no-ligado.
En el “Proyecto de psicologia para neurdlogo:
ja la “experiencia de satisfaccién” (el deseo), realiza el
0” de lo que dejé como resto “Ia experiencia de dolor” (el
10). Este es el antecedente de la diferencia deseo-pulsion.
El deseo inconsciente buseé resto diurno en su cara
sturbadora (pulsional), en el trabajo del suefio. Su fracaso pro-
‘el despertar. A su vez (continuando con el trabajo del suenio
10 paradigma de lo que estoy desarrollando), el suefio como
Jacién, como realidad psfquica, anuda el sentido de los repre-
sentaptes psiquicos, la puesta en imagenes (figurabilidad) y el
quanti pulsional (Io hipernitido en todo suefio). ”
El fracaso del trabajo del suefio conmueve ese anudamiento y
Ja dimension de tiempo légico que le es propia. Especificamente:
‘el tiempo para comprender”, que marca la dimensién de elabo-
racién pulsional.
= La cafda de la escena psiquica, implica la puesta en suspension
‘del tiempo para comprender”, dejando al sujeto en la posicién
de: “yo no pienso, soy”, propio del pasaje al acto, para arrancarle
a la angustia su certeza.*
«La operacién ani
te “yo no soy, pienso” reanuda el
to puede representarse.