Está en la página 1de 7

No somos iguales todos los días, las cosas que nos pasan externamente y nuestros procesos

internos nos afectan. Vivimos la vida diferente y no hay nada universal y único para todos

En lo personal vengo cambiando mucho en poco tiempo. Algunas cosas que antes me parecían
muy importantes ahora ya no lo son, otras siguen igual y algunas nuevas aparecieron. En este
combo de cambios algunas veces pierdo el foco (cosa que me cuesta muchísimo mantener) quiero
hacer todo a la vez, Avanzo con objetivos poco a poco y voy dudando entre una y la otra, y esto
realmente no es saludable.

Las exigencias de este mundo que nos impide ir a máxima velocidad y solo hacer, hacer y hacer,
nos hace dejar a un lado nuestros propios cambios y a veces cuando esto sucede nos sentimos mal
por querer cambiar algo que veníamos haciendo, algo que supuestamente nos define,

No bloques tus propios cambios, pon en pausa el mundo (que va a seguir ahí cuando vuelvas) y
escúchate.

¿Te cuesta aceptar tus propios cambios, por qué? ¿Qué es lo mejor que puede pasar?

1-

2-
La Pena es el demonio del corazón, cuando estamos repleto de ellas es difícil abrirnos y hasta nos
cuesta respirar. Cuando negamos la pena nos volvemos insensibles. Pero cuando la pena de
acepta y se expresa encontramos una llave para abrir el corazón. Lloramos nos desahogamos
hablamos desde la verdad y vamos sanando el corazón.

Limpiemos nuestras palabras y revisemos que cosas nos generan pena y qué cosas son muletillas
que hacen que la pena ronde nuestro contexto y este preparada para entrar a nuestra casa (ósea
tú) cuando estes distraído.

¿Cuál es la herida mas grande que tienes en el alma?


¿Cuántas cosas no haces por miedo?

El miedo paraliza, nos frena y no nos deja avanzar. Creemos que el miedo es nuestro mayor
enemigo, ese que nos quiere hacer la vida imposible y que esta acá para embarrarnos la cancha. El
miedo aumenta nuestra conciencia y llena nuestro cuerpo de adrenalina preparándonos para salir
corriendo.

El miedo traslada nuestra atención al momento presente para poder hacerle frente a la amenaza o
lo que sea que te éste dando miedo.

Todos conocemos “la parte mala” del miedo, pero también es un aliado sagrado que tenemos,
aunque no lo creas. El miedo existe como un aliado de la preservación personal porque nos hace
ser conscientes de nuestra importancia y de la necesidad de ocuparnos de nosotros mismos. Es el
amigo que te hace prestar atención a lo que estas haciendo y te da una mano cuando lo necesitas.

Amígate con tus miedos.

¿Crees que tu miedo es mas fuerte que tú por qué? ¿Crees que tu miedo más grande eres tú
mismo?
Meditar es algo muy sencillo y difícil a la vez. Con la meditación podemos tomar conciencia de
quienes somos de verdad.

Como cuando el Computador no anda porque se estanca mucho y lo Tienes que reiniciar, la
meditación es el reseteo de nuestra mente, cuerpo y espíritu.

No tiene requisitos imposibles de conseguir, solo necesitas tomar consciencia de que quieres
meditar y hacerlo. Búscate un lugar tranquilo de la casa, siéntate o acuéstate cómodo cierra los
ojos y empieza a habitar el cuerpo, a observarlo como si fueras espectador de ti mismo.
Concéntrate en tu respiración, si quieres puedes contar los tiempos entre inhalación y exhalación
así te ayuda a conocerte mejor.

¡Y listo! Así de fácil y difícil es meditar. Pero, aunque te cueste o no puedas concentrarte, sigue
haciéndolo. La practica hace al maestro y cuando te quieras dar cuenta vas a conseguir un estado
de relajación increíble que nunca mas vas a dejar de meditar.

¿Cuántas veces meditas por semana? ¿Te gusta meditar? ¿Por qué?
LIBERANDO CREENCIAS LIMITANTES

6 PASOS PARA COMBATIRLA

1- TRATA DE SER MÁS FLEXIBLE


Cuanto más rígidas son nuestras creencias, menos adaptables somos al entorno y a las
circunstancias que nos rodean. Una forma de medir esa rigidez es darnos cuenta del
numero de conflicto que tenemos en nuestra vida y el esfuerzo que nos supone que
relaciones y circunstancias
2- IMAGINA QUE ALCANZAS LO QUE DESEAS, PERO TE CUESTIONAS
Fantasea viéndote a ti mismo y consiguiendo aquello que quieres y recréate en ello.
Siente las sensaciones de bienestar que esto te genera. Disfruta esta sensación
3- INVESTIGA EL ORIGEN DE TU CREENCIA
Cuando hayas detectado una creencia limitante, averigua de donde procede quizás viene
de la infancia, de una experiencia familiar, te lo dijo un amigo…A menudo nuestras
creencias están basadas en cosas que nos dijeron nuestros padres u otras figuras de
referencia para nosotros
4- ESTO CREES ¿ES VERDADERAMENTE ASÍ SIEMPRE?
¿Estas ante una creencia de otra persona o es tuya? ¿Es verdad de acuerdo con quién?
¿Qué autoridad tiene esa persona?
SIEMPRE CUESTIONA AQUELLO QUE SIENTAS QUE TE SABOTEA
5- DESCUBRE TU PARTE POSITIVA
Todo comportamiento encierra una intención positiva, así que pregúntate: ¿De que te
protege esa creencia? ¿Por cuál podrías sustituirla? ¿Con la nueva creencia logras la
intención positiva de la vieja? Conseguirlo es fundamental.
6- DETECTA PARA QUE TE SERVÍA ACTUAR ASÍ
Cuando por fin veas lo poco que te ayudan tus creencias y te des cuenta de lo mucho que
te limitan, irás dejándolas atrás poco a poco y así las sustituirás por las ideas más realistas,
esperanzadoras y positivas
La Terraza necesita al sótano lo lindo necesita lo feo, la luz necesita a la sombra. De vez en cuando
hay que bajar a limpiar la mugre que hay en el sótano. Ese lugar donde metes las cosas que no
quieres que se vean, y lo acomodas, así como venga, haciendo una pila de muebles para que
pueda cerrar la puerta.

Mientras más tiempo tardes en bajar al sótano más cosas se van acumular y cuando vuelvas te vas
encontrar con cosas nuevas que crecieron ahí o con cosas que ni te acordabas que tenías.

Porque en algún momento vas a tener que bajar, no hay otra opción, es inevitable.

¿Te acuerdas de Kevin? De mi pobre angelito, no quería bajar al sótano porque le tenía miedo y al
final tuvo que bajar y le perdió el miedo.

No nos neguemos el estar en la sombra, en sentirnos mal ya sabes a veces Sombra a veces
Terraza, lo importante es enfrentar las sombras y superar tus miedos

¿Qué guardas en tu sótano? ¿De qué manera disfrutas de tu terraza?

También podría gustarte