- Impuesto a las ganancias de las empresas: se propone regresar de forma
gradual al espíritu de la reforma tributaria del 2017, unificando la tasa del impuesto a las ganancias en el 25%, con independencia de la magnitud de las ganancias. Dicha tasa regirá a partir del año 2025. Hasta ese año, habrá una reducción gradual. Para las ganancias no reinvertidas habrá una sobrealícuota del 13%;
- Impuesto sobre los débitos y créditos (“impuesto al cheque”): si bien
dicho impuesto debe eliminarse, hasta que ello ocurra se propone que todas sociedades, empresas o personas (o personas físicas) registradas como responsables inscriptos puedan tomarlo a cuenta de pago del impuesto a las ganancias de tercera categoría (hoy en día solo pueden hacer uso de este beneficio las PyMES que se encuentren registradas como tales en un registro del Ministerio de Producción);
- Servicios públicos: se propone que las facturas de servicios públicos sólo
contengan los cargos por el consumo realizado por el usuario, prohibiéndose cargar impuestos y tasas en dichas facturas (con excepción del IVA e ingresos brutos sobre los consumos);
- Derechos de exportación (“retenciones”): se propone una baja gradual de
las alícuotas hasta llegar al 10% en el caso de la soja (que ya a partir del 2023 baja al 30%) y al 0% en el caso del resto de los productos que pagan retenciones (excepto para las actividades hidrocarburíferas y mineras);
- Impuesto al trabajo: se propone reducir la carga impositiva al trabajo,
especialmente para los trabajadores de menores ingresos que son quienes más sufren la informalidad laboral. Esto se implementará a través de un Mínimo No Imponible (MNI) para el pago de contribuciones patronales. El MNI irá subiendo gradualmente hasta alcanzar el equivalente al Salario Mínimo Vital y Móvil. De esta manera, las contribuciones se pagarán sólo por el monto de los salarios que excedan ese MNI;
- Representantes gremiales en las empresas: se propone aumentar la
cantidad mínima de trabajadores para tener representantes gremiales en las empresas (pasa de 10 a 20 trabajadores);
- “Doble indemnización”: se propone eliminar la indemnización agravada por
despidos laborales; - Provincias y CABA: se propone invitar a las provincias y a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires a reducir las alícuotas del impuesto sobre los ingresos brutos y del impuesto a los sellos, en el sentido expresado en el Consenso Fiscal del año 2017.
- Baja de Ingresos Brutos: en aquellas provincias productoras de alimentos
donde tenemos representación legislativa propondremos en las Legislaturas locales la baja a cero del impuesto a los ingresos brutos a las actividades de ganadería, agricultura, caza, pesca e industria productora de alimentos, atendiendo a cuestiones de coyunturales que hacen necesario adoptar medidas concretas en el tiempo oportuno, con el objetivo de lograr efectos sobre los precios que pagan los consumidores en alimentos y bebidas, pero también para mejorar las estructuras tributarias provinciales en el sentido acordado en 2017 entre el Gobierno nacional y los gobernadores.