c o n j u n t o d i s t i n t o d e l c o n t e n i d o d e a
generalmente un valor económico o patrimonial”1.
← Hay muchas definiciones que nos entregan diversos autores; por
e s o e s p r e f e r i b l e e s t a b l e c e r l o s d i v e r s o
patrimonio. De esta manera podrán ustedes comprender más fácilme
estructura y concepto.
←
← 2 . C a r a c t e r e s d e l p a tr i m oH
n iaog. o p r e s e n t e q u e l o s c a r a c t e r e s q u e
paso a indicar son aquellos aceptados por la teoría clásica en esta materia. Esa
teoría fue creada por los tratadistas franceses Charles Aubry y Charles Rau y
recibe también el nombre de “teoría subjetiva” en contraposición a una teoría
moderna conocida como “teoría objetiva”.
1 º . -E s u n a t r i b u t o d e l a p e r s oDnea dl iodnadde. r e s u l t a q u e s o l o l a
personas, sean naturales o jurídicas, pueden tener patrimonio. Recuerden que
un no nacido puede adquirir bienes, pero, como aun no e
derechos los adquiere sujetos al evento de na
eventuales y dependen de una condición suspensiva. Por la misma razón e
que quien no es persona es considerada incapaz de t oda herencia o l ega
según lo dispone el artículo 963 del Código Civil.2
2º.- Toda persona tiene patrimonio. Ya quedó dicho. Por ser un atributo de
la personalidad, nadie puede carecer de patrimonio. No hay que olvidar que
el patrimonio es distinto a lo que pueda existir en su interior, en forma que,
vacío, sin derechos ni obligaciones, de todas maneras está en condiciones de
recibir tales derechos o hacerse cargo de obligaciones.
Lo dicho no solo es doctrina. Nuestro Código no
individuo quede sin patrimonio, esto es, sin posibilidad de adquirir bienes en
el futuro. Sobre ello, infórmense del texto de los artículos 1811 y 2056. L
misma idea brota, y a propósito de la donación, en el artículo 1407.
1
Concepto o definición propuesta por Humberto Pinto Rogers en página 4 de su obra “Curso Practico de
Derecho Civil, tomo III, Editorial Andrés Bello, Escuela de Derecho de Santiago, Universidad de Chile, 1972.
2
En adelante cada vez que se mencione un artículo ha de entenderse que es del Código Civil chileno, a menos
que se exprese otra cosa.
3
4º.E - l p a t r i m o n i o e s u n a aY ba s te rxapcl ci iq óu né . q u e c a r e c e
corporeidad. No tiene consistencia física y, por lo mismo, es un ser ideal. No
es una ficción solamente, porque, aunque idealmente, existe; su existencia e,
no obstante, sin apariencia material. Sin embargo, del he
abstracción resulta una característica de la may
universalidad jurídica.
De ser universalidad jurídica se desprende que es distinto a los bien
que la componen. Para la mejor comprensión, hagan cuenta que se trata de un
envase o saco invisible, dentro del cual hay diversas cosas. Este enva
distinto a las cosas que existen en su interior. Lo dicho tiene importancia para
resolver un asunto de mucha importancia práctica, porque, como lo explicaré
a continuación, el patrimonio heredado puede venders
general. Entonces, para efectos de la tradición que ha de seguir a la v
¿qué reglas se siguen si en el patrimonio hay inmuebles? La solución se halla
en lo que acabo de explicar. Toda vez que el patrimonio es distin
bienes que se encuentran en su interior, resulta que en el caso p
dicho patrimonio no es inmueble y por consiguiente su tradició
suerte de los bienes muebles.
← Oportunamente, y cuando estudiemos la tradición, v
sobre este tema.
← 5º.- El patrimonio es intransferible. En otras palabras, el patrimonio es
i nal i enabl e. Ya c it a mos l os a rt í cul os 1407, 1811 y 2056 que dan cuent a
esto. Nótese que una persona pueda desprenderse de bienes de su propiedad,
de todos sus bienes si así lo quiere, pero enumerándolos en un inventario. Lo
que está fuera del inventario no se entiende transferido simplemente porque
ello implicaría enajenar el patrimonio.
← No hay que olvidar que el patrimonio, además, es un atributo de la
personalidad, de manera que no es posible concebir una pers
cualidad. Pero si la persona fallece desaparece el carác
entonces sí que es posible transferir el patrimonio.
5
←
← 3. Composición del patrimonio. El patrimonio comprende un activo y un
pasivo, esto es, no solo derechos y bienes, sino también deudas y obligaciones.
P ero, e n uno y otr o cas o, el pat r i moni o no c onti e ne t odo l o que una per
puede llegar a tener o soportar Solo tienen carácter patrimonial los derechos y
las obligaciones apreciables en dinero. Lo que no es apreciable en dinero queda
fuera del patrimonio. De ahí entonces que están fuera del patrimonio y toman
el nombre de extrapatrimoniales. Tampoco encontraremos en el
patrimonio los derechos y las obligaciones que tienen carácter público, como el
derecho a elegir en elecciones ciudadanas, el derecho a la vida, el derecho
h o n o r , e t c . P e r o s i b i e n e s t o s d e r e c h
indemnización que podría sobrevenir en caso de ser lesionados, sí constituye un
derecho patrimonial.
← Se puede mencionar como extrapatrimoniales también la mayoría de
los derechos que nacen del derecho de familia. La obligación de fidelidad que
impone el artículo 131, así como aquellos deberes que nacen de los artículos
133 y 136 son extrapatrimoniales, pero, tal como en el caso anterior, si po
cualquier motivo hubiere lugar a una indemnización nacida de la infracción
de esos deberes, esa indemnización forma parte del patrimonio. Se dice que
algunos derechos de potestad que una persona tiene sobre otra no ingresan al
patri moni o. Un ej empl o es el derecho a la patri a potestad de que tratan
artículo 250 y siguientes, Otro es la calidad de guardador que puede adquirir
una persona.
← Hay otros derechos más que irán apareciendo en el curso de
nuestro estudio, pero los ejemplos que he entregado permiten apreciar que son
los derechos y obligaciones de carácter monetario, pecuniario, los que forman
el patrimonio.
← De lo dicho también resulta que en definitiva el patrimonio está
formado por dos conceptos: a.- derechos, los que
personales; b.- Obligaciones o débitos que el patrimonio d
pagar. Los derechos reales se estudiarán en este curso; las obligaciones y su
contrapartida, los créditos, serán estudiados a continuación.
←
7
PARTE SEGUNDA.
LOS BIENES.
5 . C o s a s , b i e n e s y d e rT e ca hl ocso. m o s e a n u n c i ó , a h o r a e n t r a m o s
estudiar los bienes. Conectando este tema con lo que vimos en la p
pa r t e , r e i t er e m os qu e no s i nt r od uc i m os al i nt er i or de l pa t r i m o ni o y al l
detenemos en el rubro bienes. O, como debe decirse, en los derechos reales
que se tienen sobre una cosa. Digo “reales” para diferenciarlos de los que el
Código llama “derechos personales”.
En efecto, hay derechos que tenemos sobre una cosa, sin impo
situación de persona alguna. Es el caso del dominio, porque yo soy dueño de
este automóvil, sin que importe que lo esté usando mi amigo Felipe en calidad
de comodatario. En otras palabras, hay una relación directa entre el dueño y
el automóvil; esa relación es un derecho real que se llama dominio. Por eso el
primer inciso del artículo 577 entrega esta definición: “Derecho real es el que
tenemos sobre una cosa sin respecto a determinada persona”.
En tanto, los derechos que pueden reclamarse d
solamente son derechos personales, también llamados créditos. El que tien
derecho a reclamar se llama acreedor; el que debe cumplir toma el nombre de
deudor u obligado. Este último debe cumplir ( pagar) porque se puso en ta
situación por su propio consentimiento, como el que pide prestado, o bien por
disposición de la ley, como el que comete un delito y debe indemnizar, o el
que debe alimentos a su hijo. Estas son las ideas que contiene el artículo 578.
En esta parte del estudio nos avocaremos al estudio de los
reales, según ya lo advertimos. Y es justamente por eso que el ramo también
toma el título “Los derechos reales”, como se lee en varios textos sob
materia. Y esto se halla más de acuerdo con la realidad, porque ya se advirtió
que los bienes no tienen cabida en el patrimonio, sino que son derechos los
que se cobijan en su interior.
Con todo, el Código se preocupa primeramente de clasificar los bienes
propiamente tal y hace bien porque, después de todo, lo que importa
objeto sobre el cual recae el derecho, esto es, un bien.
11
7 . - L a s c o s a s c o r p o r a l e s . B i e n e s m u e
Importancia de la clasificación. Ya se dijo que los bienes corporales pueden
ser percibidos por los sentidos y tienen un ser real. Así los describe el artículo
565.
El artículo 566 prescribe que las cosas corporales se dividen en muebles
e inmuebles.
12
Muebles por naturaleza.Los inmuebles por naturaleza, que son los que
cor res ponden a l a def i ni ci ón, a s u vez se div
inanimados. Son semovientes aquellos que se mueven por sí mismos, como
los animales en general y son inanimados los que para moverse requieren de
una fuerza externas, como un automóvil. Esta sub clasificación
importancia, porque ambos tipos se rigen por las mismas reglas.”.
La clasificación que antecede está expuesta en el artículo 567.
Muebles por anticipación. La norma del recién citado artículo 567 obliga
a precisar lo que es un bien mueble por anticipación. Fíjense ustedes que un
árbol es un bien inmueble porque adhiere permanentemente a un inmueble
conforme lo dispone el artículo 569. Entonces, ese árbol debería ceñirse a las
reglas de los inmuebles, como, por ejemplo, venderse con la solemnidad de la
escritura pública, porque así lo ordena el artículo 1801 inciso 2º, y la tradición
debería inscribirse en el Conservador de Bienes Raíces y, en general, cumplir
las formalidades establecidas respecto de los incapaces y en relación con los
inmuebles de su propiedad. Pero la ley, consciente de la exageración que ello
implicaría, para estos efectos, a pesar de ser inmueble, considera mueble
tal árbol. Es claro el artículo 571 cuando señala que las cosas accesorias a un
inmueble se reputan muebles aun antes de su separación para los efectos de
constituir un derecho recaído en dichas cosas en favor de una persona distinta
del dueño. Esta es la norma legal que permite constituir un derecho de prenda
(caución únicamente aplicable a los muebles) sobre los árboles de un predio,
o vender en calidad de muebles los árboles de un fundo. Permite también que
un agricultor venda el trigo de su cosecha, aun antes de cosecharlo.
Agrego que guarda armonía con lo recién explicado el p
inciso 3º del artículo 1801 en cuanto exime de la solemnidad de e
pública la venta de las cosas que hemos llamado “muebles por anticipación”.
Advierto que hay consenso que la enumeración que resulta del artículo
571 no es taxativa.
En fin, no está de sobra advertir que lo dicho se refiere a la v
enajenación de los productos de un inmueble y a las cosas accesorias a ellos,
pero si la venta o enajenación recae en el inmueble mismo, dichos accesorios
se entienden comprendidos en virtud del viejo principio: lo accesorio sigue la
suer t e de l o pr i nci pal . Una m ues t ra de el l o se enc uent ra e n el i nci so 2º
artículo 1816.
15
9 . C o n c e p t o y d e n o m i n a c i o n e s , c l a s i f i cQaucei dó ón . e x p l i c a d o q u e e l
artículo 568 entrega un concepto de inmueble: “Inmuebles o fincas o bienes
raíces son las cosas que no pueden trasportarse de un lugar a otro”. Nosotros
agregamos: “sin detrimento”. Agrega la norma en calidad de ejemplo
tierras y minas, y las cosas que adhieren permanentemente a un inmuebl
como los edificios y los árboles.
No siempre el Código usa la expresión “inmueble”, como resu
propio artículo 568. En su inciso 2º advierte que: Las casas y heredades
llaman predios o fundos. En otras disposiciones usa la expresión “bien raíz”,
como en el inciso 2º del artículo 410, o en los artículos 1857 y 2435. En otros
artículos usa la expresión “finca”, como resulta, por ejemplo de los artículos
570, 922, 1728 y 2428.
16
A su vez, los inmuebles admiten una triple división: a.- inmuebles por su
naturaleza; b.- inmueble por adherencia, c.- inmuebles por destinación-
a . - I n m u e b l e s p o r s u n a t u r Sa ol enz aa .q u e l l o s q u e p o r s u e s e n c i a e s t á n
inmóviles. Corresponden exactamente a la definición del artículo 568.
b.- Inmuebles por adhereL n coisa .d e f i n e e l i n c i s o 1 º d e l a r t í c u l o 5 6 8 :
“….las que adhieren permanentemente a ellas, co
árboles”-
Se requieren dos requisitos para que un bien pueda ser
inmueble por adherencia: que esté adherida a un inmueble y que esta adhesión
sea permanente. El artículo 569 es buena muestra de ello: “Las plantas so
inmuebles mientras adhieran al suelo por sus raíces, a menos que est
macetas y cajones que puedan transportarse de un lugar a otro”.
Es importante comprender que, por lo que se ha explicado, las manzanas
mientras cuelgan del árbol son inmuebles. El artículo 571 les p
muebles para el único objeto de constituir un derecho a otra persona que e
dueño.
En cuant o a la per manencia, la exigencia consist e en que el edi ficio
cosa no adhiera en forma transitoria. Por eso, los camarines portátiles que se
llevan a la playa y las carpas del circo, no son inmuebles. Esto, aun cuando
recuerdo que en una oportunidad la Corte Suprema declaró que las cas
provisorias que se adhieren al suelo, son inmuebles. Así es o puede ser,
efecto, en el derecho francés, donde no se exige el requisito de permanencia.
La enumeración del artículo 568 no es taxativa, de manera que pueden
agregarse muchas otras, como las líneas del ferrocarril, los puentes, dique
etc.
Tampoco se exige que sea el dueño el que ha constituido un inmueble
por adherencia. Basta que cumpla las dos exigencias ya anotadas.
manera, si el arrendatario de un predio construye un edificio en él, ese edificio
pasará a ser un inmueble por adherencia.
c.- Inmuebles por destinación. Los define el inciso 1º del artículo 570: “Se
reputan inmuebles, aunque por su naturaleza no lo sean, las cosas que están
permanentemente destinadas al uso, cultivo y beneficio de un inmueble, sin
embargo de que puedan separarse sin detrimento”,
17
3
Peñailillo, Daniel. “Los Bienes”, Editorial Jurídica de Chile, Santiago, año 2009, página 49.
21
E . - B i e n e s f u n g i b l e s y n o f u n gUi bn lae cs .o s a e s f u n g i b l e c u a n d o , e n
concepto de las partes, puede ser reemplazada por otra. También val
definición: dos o más cosas son fungibles cuando tienen el m
liberatorio. La cosa no es fungible cuando no admite reemplazo, como ocurre
con un cuadro de un pintor famoso.
La voluntad de las partes es importante en esta clasificació
ellas pueden convenir en otorgar fungibilidad a una cosa que naturalmente no
lo es. La lectura del artículo 1505 muestra una buena demostración de lo que
se acaba de decir.
Es fácil confundir esta clasificación con aquella que di
consumibles y no consumibles. De hecho, el artí
d i s t i n c i ó n e n t r e c o n s u m i b l
equivocadamente, advierte que se trata de fungibles y no fungibles. Lo q
pasa es que las cosas consumibles son casi siempre también fungibles y
ahí puede originarse la confusión. Confusión injusta, porque no siemp
consumible es fungible, o viceversa. Un vino de una marca que ya no existe,
guardado cuidadosamente durante años, es consumible, pero no es fungible.
De lo que hemos explicado ustedes pueden advertir que está equivocado
el artículo 575 cuando en su inciso 3º dice que las “especies monetarias e
cuanto perecen para el que las emplea como tales, son cosas fungibles”. La
referencia al que las emplea como tales demuest
monetarias son consumibles.4
P a r a u n a c o r r e c t a d i s t i n c i ó n e n t r e c o n s u m
diversos autores ponen énfasis en que la calidad de consumible es propia de la
naturaleza de una cosa; en tanto que es la voluntad de la
determina el carácter de fungible de una cosa.
F . -B i e n e s s i n g u l a r e s y u n i Bv ei er ns ae sl e ss i. n g u l a r e s s o n l o s q
conforman una unidad, tales como el caballo “Relámpago” o el auto
Peugeot, modelo 2014, inscripción CLCC -23.
Las universalidades, o bienes universales, merecen especial
porque su comprensión se hace necesaria para el estudio de diversas materias
del Derecho Civil. Ustedes ya lo habrán observado cuando estu
patrimonio, típico ejemplo de una universalidad.
4
Alessandri defiende la redacción que Bello dio a la disposición: pág.17 de su texto “De los bienes”, ya
citado.
22
b.- Existe relación estrecha entre el activo y el pasivo, de manera tal que
el activo existe para responder del pasivo presente o futuro.
c.- Dentro de una universalidad jurídica funciona el p
subrogación real. Esto ya lo explicamos a raíz del estudio del patrimonio y les
recuerdo que, para mi opinión, es la caracterís
universalidad jurídica o de derecho. En la práctica se traduce en que bien que
sale de la universalidad de derecho es remplazado por otro bien que ingresa.
Generalmente el bien que sale es reemplazado – subrogado – por el precio
que se pagó por él.
Nuestro Código no reglamenta en forma orgánica ni una ni otra especie
de universalidad. Pero, no obstante, el patrimonio
disposiciones que de una u otra forma se refieren a las característ
hemos señalado, disposiciones de las que dimos
patrimonio en cuanto es universalidad jurídica o de der
primer ejemplo, el artículo 951 Otro ejemplo hay en el
También el artículo 1317 contiene una clara alusión
jurídica. Otro tanto sucede en los artículos 2304 y 2306, etc.
G . -B i e n e s p r i v a d o s y b i eSnoe ns pn rai cv i aodnoas l ea sq. u
susceptibles de dominio privado. El inciso 1º del artículo 589 nos dice q
bienes nacionales son aquellos cuyo dominio pertenece a la nación toda. Este
mismo artículo distingue entre los nacionales a bienes naci
público, también llamados bienes públicos, y bienes del Esta
fiscales.
Son bienes nacionales, también llamados bienes nacionales de uso público,
o simplemente “bienes públicos”, aquellos cuyo uso pert
Nación. Los ejemplos que muestra el inciso 2º del artículo 589 no constituyen
enumeración taxativa, pero dan clara idea del con
puentes, y caminos, el mar adyacente y sus playas.
Se pueden mencionar como caracteres de estos bienes los que siguen.
a.- Su uso pertenece a todos los habitantes de la Nación;
b . - S e e n c u e n t r a n f u e r a d e l c o m e r c i o , l o
particulares no pueden apropiarse de ellos, ni comercia
posesión;
24
c . . - S i n e m b a r g o d e l o d i c h o , l a a u
Municipalidad- puede otorgar la concesión del uso de una pa
bienes. Esta granjería se otorga en consideración a que e
servirá la atención de un fin que interesa al público. Tal es el caso
kioscos que venden periódicos, ubicados en las calles de una ciudad.
La naturaleza jurídica de una concesión es cos
oportunidad veremos que hay una fuerte tendencia a considerarla uno más de
los derechos reales.
Los bienes nacionales de uso público están fuera del comercio y de ahí
que el artículo 1105 dispone que no vale el legado de cosa incapaz d
apropiada, a la vez que la compraventa que tenga como objeto uno de ellos es
nula por objeto ilícito conforme al artículo 1810. En lo que se refier
prescripción, el artículo 2498 impide ganar por prescripción los bienes que no
están en el comercio.
Con todo, aun cuando están fuera del comercio, estos bienes pueden ser
usados por la generalidad de los habitantes, como se desprende de su propia
d e f i n i c i ó n . S u u s o e s t á g e n e r a l m e n t e r e g
correspondiente y siempre, claro está, debe ceñirse a objetos lícitos. Incluso
el artículo 602 se pone en el caso que la autoridad permita a un particular la
construcción de un edificio en un bien nacional de uso público, advirtiend
que si tal ocurriere, el particular no adquiere el dominio del suelo. El inciso 2º
agrega: “Abandonadas las obras, o terminado el tiempo
concedió el permiso, se restituyen ellas y el suelo por el ministerio de la ley
al uso y goce privativo del Estado o al uso y goce general de los habitantes,
según prescriba la autoridad soberana”.
No hay inconvenientes para que un bien nacional de uso públi
desafectado de tal calidad y, mediante una ley, se transforme
privado.
Conviene precisar que los bienes nacionales de uso público comprenden
los siguientes conceptos:
a.- Mar territ ori al. Corr esponde a las prim eras 12 mi ll as náut icas (u
milla náutica equivale a 1852 metros) desde las respectivas líneas de base (la
línea de base normal es la línea de bajamar a lo largo de la costa) Constituye
una prolongación del territorio continental o insular.
25
a.- Se rigen por las normas del derecho privado, pero, no obsta
Derecho Público reglamenta algunos aspectos,
enajenación.
b.-Su estudio es más propio del Derecho Administrativo que del Derecho
Civil común;
c.- Como consecuencia de estar sometidos al derecho privado, pueden ser
objeto de negocios y los particulares pueden ganarlos por prescripción, según
se desprende del artículo 2497.
d.- Los bienes fiscales pueden ser muebles e inmuebles, de acuerdo a las
reglas generales aplicables a esta clasificación.
e.- Generalmente estos bienes están destinados a un servicio de ca
público, tal como edificios o construcciones para oficinas públicas, o escuelas
u otros semejantes.
f.- Su administración y conservación está a cargo del Ministerio de Bienes
Nacionales.
g.- El Estado puede adquirir estos bienes por herencia dejada o asigna
por particulares, conforme al artículo 995; o por captura bél
artículo 640; o por algunas islas que se formen y de acuerdo a lo establecido
en el artículo 656.
h.- Merece un comentario el artículo 590: “Son bienes del Estado todas las
tierras que, estando situadas dentro de los límites territoriales, carecen de otro
du eñ o” . M á s a de l an t e a ho nd a r em os en e l v er d ad e r o s en t i do d e e s t a n or
pero, mientras tanto adelantemos que ella constituye
dominio, pero no de posesión. Ello permite que los particulares puedan alegar
y probar posesión y, mediante ello, alegar prescripción adquisitiva en su favor
y en contra del Estado.
1 1 . B i e n e s i n c Lo or sp oa rr at íl ce us .l o s 5 7 6 y 5 8 3 , a d
denominación del párrafo 2 del Título II, llaman “incorporales” a los bienes
que veremos a continuación. El artículo 576 n
incorporales son derechos reales y personales.
27
1 2 . D e r e c h o E rl e da el .r e c h o r e a l e s t á d e f i n i d o e n e l a
“Derecho real es el que tenemos sobre una cosa sin respecto a determinad
persona”. Esta definición contiene los elementos que trad
reiteran en l as legislaciones de otros paí ses y en l os li bros de estudio d
materia.
De acuerdo con lo dicho, en los derechos reales hay una relación directa,
sin intermediario, entre el sujeto y la cosa de
inconvenientes para que el sujeto activo esté constituido por varias personas,
como sucede en la comunidad. Suele decirse que en el derecho real la cosa
est á som et i da t ot al m ent e a l a vol unt ad de un i ndivi duo. De est a m ane ra
dueño – si ponemos al dominio como ejemplo de derecho
libremente hacer uso de la cosa, enajenarla, darla en arriendo e
destruirla.
El derecho real consta solamente de dos elementos: una persona, que es
el el em ent o act i vo, t i t ul ar del der echo re al , y l a cosa sobr e l a cual r eca
d e r e c h o . P r e c i s a m e n t e p o r e s o e s q u e s e
“real"·. Una característica del derecho real,
distintiva, es que posee derecho de persecución. Esto quiere
dueño del derecho real puede perseguir la cosa de manos de quien la tenga. El
propietario puede perseguir la cosa para obtener la posesión de ella, según lo
dice el artículo 889. A su vez, el artículo 891 e
reivindicarse todos los derechos reales, salvo el derecho real de herencia. Este
último tiene una acción especial llamada acción de petición de herencia.
28
13. ¿Cuáles son los derechos reales? Nuestro Código ha establecido los
derechos reales en una enumeración que fue taxativa en un principio. Es
porque el legislador estima que estas normas son de orden público. En otras
palabras, los particulares no pueden crear nuevos derechos reales. Solo la ley
puede crear derechos reales.
El inciso 2º del artículo 577 declara que son derechos reale
d o m i n i o , e l d e h e r e n c i a , l o s d e u s u f r u c t o ,
servidumbres activas, el de prenda y el de hipoteca”.
Pero la enumeración transcrita hoy no es taxativa.
provenientes, uno del Código, y otros de otras normas legales. Se menciona,
por ejemplo, el artículo 579 que confiere carácter real al derecho de censo en
cuanto se persiga la finca acensuada, derecho descrito en el artículo 2279. El
artículo 6º del Código de Aguas dispone el carácter re
aprovechamiento de aguas. Ahora último, la ley Nº 20.930 d
derecho real de protección forestal 5
. Aquéllos no considerados en el Código
Civil se estudian en la disciplina que corresponda.
Hay otros derechos de carácter administrativo cuyo c
discute. Tal es el caso de las concesiones que la autorida
particulares y recaídas en bienes nacionales de uso público
5
Art. 2º de la ley Nº 20.930: “ El derecho de conservación es un derecho real que consiste en
la facultad de conservar el patrimonio ambiental de un predio o de ciertos atributos o
funciones de éste. Este derecho se constituye en forma libre y voluntaria por el propietario
del predio en beneficio de una persona natural o jurídica determinada.
La facultad de conservar se ejercerá de conformidad a las normas establecidas en esta ley
y en el contrato constitutivo.
29
Del concepto o definición que nos entrega el artículo 578 se extraen los
elementos que configuran el derecho personal. Uno es el acreedor, esto es, el
que tiene derecho a exigir; el segundo es el deudor, es decir, el que tiene que
cumplir (cumplir es pagar); el tercero es el objeto debido. Fíjense ustedes que
en este caso no hay una relación directa entre acreedor y cosa debida, sino que
hay un intermediario al cual se le exige el cumplimiento.
No está de más advertir que el derecho personal es igual a crédito según
el artículo 578, pero en doctrina no siempre son la misma cosa. Hay derechos
personales que escapan al patrimonio, como los personalísimos, en tanto que
crédito es la justa idea del derecho que tiene uno llamado acreedor para exigir
a otro, llamado deudor, el cumplimiento de una obligación. “Obligación” es
el vínculo jurídico que compele a uno a dar, hacer o no
beneficio de otro. También conviene que ustedes tengan claro que, cu
existe una obligación, a un lado se halla el acreedor y al otro lado el deudor.
Por eso se dice que la obligación es un lazo, un vínculo, una cadena, que une
al acreedor, exigiendo, y al deudor, cumpliendo, esto es, pagando. Ya lo dije:
cumplir una obligación, cualquiera que sea su naturaleza, es pagar. El artículo
1568 así lo dice.
1 6 . L a s a c c i .o nDees l o s a r t í c u l o s 5 7 7 y 5 7 8 r e s u l t a q u e l a s a c
también forman parte de las cosas incorporales. Tanto en una como en la otra
disposición se advierte que de los derechos rea
personales nacen acciones. Unas son acciones reales; las otras son personales.
La acción no es sino un aspecto del derecho, dice Alessandri (página 18
de las ya citadas versiones taquigráficas de sus clases). Se la define como “el
derecho puesto en movimiento o el “derecho deducido en juicio”, Más claro
resulta decir que “es el medio que la ley franquea para obtener el respeto de
un derecho”. Es el instrumento que otorga las ley para ejercer un derecho”
Sin acción, un derecho queda como una cosa inocua, sin aplicación práctica.
El dominio es un derecho y la ley otorga la acción reivi
protegerlo. La acción de petición de herencia protege al d
herencia. Las acciones posesorias protegen la
advirtiendo que la posesión no es un derecho. La acción de
testamento protege los derechos de los legitimarios, confo
1216. También el prestamista tiene acción para ped
prestado.
Las acciones se dividen en reales y personales. Reale
pueden ejercerse sin respecto a determinada persona. Su carácter es absoluto
por lo mismo. Las acciones personales solo pueden
persona que contrajo la obligación y por eso tiene carácter relativo.
6
Tratado Práctico de Derecho Civil Francés, Planiol y Ripert, Cultural S.A., La Habana,
1932, Tomo 3, Los bienes Página 46 y “Tratado Elemental de Derecho Civil, Los bienes”,
Marcel Planiol, Editora José Cajica, Puebla, Mexico, 1945, páginas 82 y siguientes.
33
1 7 . - C a l i f i c a c i ó n d e l o s h e c h o s Yqau es a sbee m
d eo bs eqnu. e l o s
derechos personales son aquéllos que solo pueden exigirse a ciertas personas,
las que por un hecho suyo o por disposición de la ley, han con
obligaciones correlativas. Sabemos también que estos derechos serán muebles
o inmuebles según tengan por objeto una cosa mueble o una cosa inmueble.
Pero existen derechos personales que no recaen ni en una ni en otra especie de
cosa. Son aquéllos que tienen como objeto un hecho. Un ejemplo es el tenor
que se obligó a cantar en un festival, o en una abstención, como el qu
obliga a no levantar un muro que obstruya la vista que tiene el acreedor. ¿Es
mueble o inmueble el derecho personal que recae en un hech
abstención?.
34
19. Las acciones. ¿Muebles o inmuebles? Casos que plantea don Luis
C l a r o S o l aIrg.u a l q u e r e s p e c t o d e l o s d e r e c h o s , e l a u t o r e s t u d i a y
sobre algunas acciones cuyo carácter mueble o inmueb
dudoso.
Recuerden que las acciones se reputan muebles o inmuebles según lo sea
la cosa en que han de ejercerse o que se deba.
Ahora bien, si la acción es personal debe distinguirse si
obtener una cosa o si se trata de la ejecución o abstención de un hecho. Si la
acción personal persigue el cumplimiento de una obligación de dar una cosa,
la acción será mueble o inmueble, según sea la naturaleza de la cosa debida.
Si el crédito es de una cosa mueble, como el dinero, la acción es mueble El
artículo 580 concluye: “...la acción del que ha prestado dinero, para que se le
pague, es mueble”. Pero si la acción tiene como fin el cumplimiento de
hecho o de una abstención, la acción será mueble, pa
recordarse que el artículo 581 reputa muebles a los hechos que se deben.
36
Pero si la acción es real, será mueble o inmueble según tenga por objeto
un mueble o un inmueble.
Veamos algunas situaciones más bien proble
tratadista Claro Solar.
1.- La obligación cuyo cumplimiento se demand
inmueble y muebles. Por ejemplo, una casa habitación y el ajuar de la misma,
ajuar no comprendido en inmueble por destinación. Estima Claro Solar que la
acción será inmueble para los efectos del inmueble y mueble con respecto a
los muebles. Pero habíamos dicho que la dist
inmuebles tiene señera importancia para los efectos de fijar la competencia de
los tribunales. Pues bien, es oportuno recordar que el artículo 137 del Código
Orgánico de Tribunales dispone en su primer inciso: “Si una misma acció
tuviere por objeto reclamar cosas muebles e inmuebles, será juez competente
el del lugar en que estuvieren situados los inmuebles”.
2 . - C a s o e n q u e l a o b l i g a c i ó n e s a l t e r
alternativas están descritas en el artículo 1499: el deudor debe varias cosas
pero pagando una de ell as se exonera del pago de las otras. Sostiene Cl
Solar que si la elección corresponde al acreedor y ha elegido un inmueble, la
acci ón s erá i nmue bl e. Pero s i l a el ecci ón cor r esponde a l deudor, l a a cc
será mueble o inmueble según la naturaleza de la que haya elegida el deudor.
3.- Nicanor vendió un inmueble. El comprador n
estipulado en el tempo convenido. Nicanor demanda pidiendo la resolución de
la compraventa por falta de pago del precio. Esa acción. ¿
inmueble? Es inmueble toda vez que la resolución implica la restitución del
inmueble vendido El propio Claro Solar advierte que no
acuerdo con tal conclusión. Otros, como el tratadista belga Laurent, estiman
que l a r esol uci ón s e f unda en el no pago del pr eci o, cos a m uebl e, y que
comprador moroso puede enervar o atajar la acción resolutoria paga
precio. Esta circunstancia daría carácter mueble a la acción.
4.- La acción de rescisión por lesión enorme es siempre inmueble. Desde
luego, la rescisión por causa de lesión enorme solo procede en la vent
bienes raíces. Además, su objeto es recuperar dicho bien. Con todo, el propio
autor comenta que la Corte de Casación francesa ha fallado que la finalidad
de la acción rescisoria por lesión tiene como objetivo que se complete el justo
precio y, por consiguiente, es mueble.
37
2 0 . I d e a s g e n e r aL
l eas .p r o p i e d a d o d o m i n i o , c o m o r e s u l t a d e l a r t í c u
582, tiene una historia tan larga como la humanidad. Su concepción, origen y
f a c u l t a d e s q u e o t o r g a h a n v a r i a d o a t r a v é
generalmente al compás de los cambios políticos. R e s e r v a d
ciudadanos en la primera época de Roma, con el paso del ti
alteraciones en cuanto a la extensión de su poderío. Para unos es propio de la
naturaleza humana; para otros es el culpable y origen de todos los males de la
humanidad.
De esta larga historia nos interesa dejar en claro
contemporánea conduce a respetar y garantizar el derecho de propiedad, pero
siempre poniéndolo en segundo lugar, dejando el prime
colectividad.
2 1 . C o n c e p tEol. i n c i s o 1 º d e l a r t í c u l o 5 8 2 d i c e : “ E l d o m i n i o ( q u
llama también propiedad ) es el derecho real en una cosa corporal para gozar
y disponer de ella absolutamente, no siendo contra la ley o contra el derecho
ajeno”.
Noten ustedes que de la definición salta a l
“arbitrariamente”, lo que demuestra el origen decimo
redactado, aun cuando en su última parte recuerda algún inter
indicar como límites la ley y el derecho ajeno. Poco más adelante verem
que otros rubros de nuestro ordenamiento jurí
arbitrariedad que la definición otorga como facultad del dominio.
De la definición hay que destacar la calidad de derecho r
otorga a la propiedad, cosa que ya sabíamos. Otra desta
dominio lo restringe solamente a las cosas corporales, aun cuando el artículo
583 observa que sobre las cosas incorporales también hay “una especie” de
propiedad. “Así, el usufructuario tiene la propi
usufructo”, termina diciendo el citado artículo.
2 4 . E l d e r e c h o d e p r o p i e d a d N yu e ls at r Ca o Ln es yt
Fundamental en forma extensa dedica parte de sus no
situaciones y a acotar soluciones que garanticen a los particulares su derecho
de propiedad. No tengo para qué decir que cualquiera ley que se d
p u e d e c o n t r a d e c i r o v u l n e r a r l o s d i v e r s
Constitución. A ellos deben conformarse todas las normas que se dicten, sen
leyes, decretos o reglamentos.
Del texto del profesor Daniel Peñailillo ( edición de 2006 - ”Los bienes.
La propiedad y otros derechos reales” ) extraigo algunos rubros que, sobre la
propiedad, regla nuestra Constitución.
a.- En su artículo 19 Nº 23 establece un primer principio: libertad para
adquirir toda clase de bienes. De donde se desprende qu
principio, está permitido adquirir el dominio sobre las cosas corporales como
las incorporales.
b.- La Constitución establece una serie de disposiciones destinadas a la
protección del derecho de propiedad. Por ejemplo, dispone que los modos de
adquirir el dominio solo pueden ser establecidos por la ley y que, ade
solo una ley puede imponer restricciones, obligacione
derecho de dominio ya adquirido. El Nº 26 del artículo 19 advierte que
dichas limitaciones no pueden afectar la esencia de la propiedad, refiriéndose
sin duda a todos los derechos que otorga el dominio.
c. Otorga el Recurso de Protección, de tramitación rá
destinado a poner remedio a cualquier acto q
perturbación o amenaza en el legítimo ejercicio de los derechos y garantí
establecidos en los casos que se indican, dentro de los cuales
dominio. Este recurso es muy usado por los abogados y la simple revisión de
los ingresos en las Cortes de Apelaciones prueba lo dicho.
41
2 6 . F a c u l t a d e s q u e o t o r g a E es l c dl áo smi ic na i ol a. d i s t i n c i ó n
proviene del Derecho Romano: “usus”, o facul
“fructus”, o facultad para gozar y disfrutarla; y “abusus”, o fa
consumir la cosa. Para la doctrinan clásica en esta materia
siendo amplios poderes que el propietario tiene sobre una cos
poderes o facultades materiales, porque también debemos distinguir otras que
llamaremos jurídicas. Las jurídicas dicen relación con la facultad
tiene el propietario para desprenderse del derecho que tiene sobre la cosa. La
renuncia, el abandono y la disposición forman parte de estas facultades.
a.- Facultades materiales que el dominio otorga al propietario de la cosa.
La facultad de uso. Consiste en que el propietario puede servirse de la
cosa para el objeto para el cual existe la cosa. Para diferenciarlo del derecho
a gozar o disponer, el uso debe limitarse a su servicio propio, sin que haya
apropiación de sus productos, porque aquello implicaría el jus fruendi, y sin
44
b . -F a c u l t a d e s j u r í d i c a s q u e o t o r g a D
e le sd toamc ai n li ao .f a c u l t a d d e
disposición. En cierta medida, todas las demás están comprendidas en ella.
Cuando estudiamos el patrimonio hicimos un
entendíamos por disposición de un bien. En esta materia hay dos teorías. Una
de carácter restringido, según la cual disponer es enajenar una cosa. Es decir,
hacerla ajena. Soy dueño de un predio y lo enajeno cuando lo traspaso a otra
persona. Ese “traspaso” puede ser consecuencia de una venta, o del aporte que
hice a una sociedad, o una dación en pago. En general, se dice que por acto
entre vi vos. Pero también una cosa puede transferir se por causa de mue
como ocurre en las herencias y legados y entonces se habla de “transmisión”.
Ya lo saben ustedes: transferir es enajenar por un acto entre vivos; transmitir
es el traslado del patrimonio o de un bien desde el patrimonio del difunto, que
se llama causante, al heredero o al legatario, según sea el caso.
Pues bien, en un sentido restringido la enajenación es sacar un bien de un
patrimonio para colocarlo en un patrimonio distinto. No está de más que les
recuerde que el año pasado, al estudiar el artículo 1464 dijimos que en esta
norma la expresión “enajenación” está tomada en un se
amplio, porque comprende también la constitución de otros derechos real
sobre una cosa.
Ese sentido amplio es el que uniforma las disposiciones del Código.
Ahora bien, para poder enajenar una cosa el propietario necesita ten
facultad de disposición. Dicho en otras palabras, la facultad de disposición es
aquella que permite que al dueño enajenar la cosa, o gravarla con un derecho
real7.
7
Aun cuando de los arts. 393 y 1754 pareciera desprenderse que es distinto enajenar un bien que gravarlo con
hipoteca o prenda.
46
8
Rev. de Dº y J.: tomo 13, sec. 2ª, página 429.
48
28. Otra restricción al dominio. El abuso del derecho. Esta es una teoría
que merece un comentario, aun cuando sea breve.
Los profesores y tratadistas usan esta denominación para califi
usos excesivos y perjudi ci ales de un der echo, en ci rcunst ancias de no e
éstos prohibidos por la ley.
Como advierte Claro Solar 10
, “La expresión abuso del derecho importa
en sí misma un contrasentido, porque abuso y derecho son términos que s
contradicen: el derecho cesa donde principio el abuso.
Trata del caso de una persona que, siendo dueña de un predio, por ejemplo,
sin obtener ningún provecho de ello ejecuta un acto que causa per
otro. “Estoy en mi propiedad”, dice ese señor. Y, por consiguiente, prosigue,
tengo derecho a levantar una muralla. Sé que esa muralla no me
beneficio alguno, pero ¿por qué tengo que dar explicaciones si estoy dentro de
mi dominio? Ese propietario, no obstante, causa perjuicio al vecino porque
impide que éste tenga vista al mar.
El criterio individualista, clásico, de otros tiempos, no encuent
reprochable en el obrar del propietario del ejemplo. Sostiene que el ejercicio
de un derecho es lícito, aunque causa perjuicio a otras personas. Per
tendencia, que mira más el aspecto social, sostiene que el ejerci
derecho no puede serlo en forma tan arbitraria como para que cause daño a
otros. Ello importa lo que la teoría llama “abuso del derecho”, lo que merece
una sanción.
Esta última opinión ha sido consagrada por numerosos cuerpos legales
extranjeros, por lo cual podemos sentar su ace
Comparado moderno y aun más, con la excepci
individualistas de la Revolución Francesa, en gran parte de la historia de
institución. A lo dicho hay que agregar al tra
profundizó el tema y le dio la organización y alcanc
códigos posteriores.
9
Rev. de Dº y J.: tomo 68, sec. 2ª, pág. 71.
10
Explicaciones de Derecho Civil Chileno, tomo VI, Nº 299. Imprenta Cervantes, Santigo, 1939.
49
3 0 . L a c o l i s i ó n d e d e r e c h o s n o c o n s t i t
Hay oportunidades en que el uso de un derecho perjudica otro derecho y este
último también está reconocido y protegido por la ley. La sirena con que los
bomberos llaman a sus colegas en caso de siniestro es un
aplaudido además por el servicio social que se presta. Pero
sonido impide el sueño y desvela al laborioso trabajador que debe estar a las 7
de l as mañana en su trabajo. Ahí hay caso de col isión de derechos, porq
50
3 1 . S a n c i ó n c u a n d o s e a b u s a d e uSni ds e r ce ac uh soa. u n d a ñ o
mediante el abuso de un derecho, la víctima puede recurrir a la disposició
general del artículo 2314, esto es, cobrar perjuicios causados. E
porque aun cuando la norma citada se refiere a delitos y cuasidelitos, lo cierto
es que el espíritu general de la legislación conduce a la reparación mediante la
correspondiente indemnización. Reafirma esta idea el artículo 2329 en cuanto
expresa la idea de “Por regla general todo daño que pueda imputarse a malicia
o negligencia de otra persona, debe ser reparado por ésta”.
La copropiedad.
En forma que podemos decir que la copropiedad tiene lugar cuando dos
o más personas tienen derechos de la misma naturaleza en una misma cosa.
Resulta entonces que Renato y Benito son copropietario
Raulí”, lo que significa que ambos son dueños. Pero, cuidado con esto, ambos
derechos deben ser de la misma especie, es decir, dominio en el ejem
Esto por la misma razón que expuse cuando hablé de la comunidad. O sea, no
hay copropiedad si uno tiene el derecho real de dom
usufructuario. Los derechos recaen en la misma cosa, pero ambos derech
son distintos.
Los términos copropiedad y condominio son sinónimos.
Entendido así estos conceptos, resulta que comunidad es el género, en tanto
que copropiedad es la especie, toda vez que es una comunidad recaída en el
derecho real de dominio.
Indivisiónresulta ser una cosa que se tiene en comunidad y respecto de
la cual no se ha practicado la partición o división. De ahí viene la expresión
indiviso que viene a significar lo mismo. Por eso se dice que tal o cual cosa
pertenece indivisa a varias personas.
3 3 . N a t u r a l e z a d e l a c o m Su en itdr a tda. d e m o s t r a r d o s t e o r í a s q u
explican qué es y cómo se conforma la comunidad, dentro de la cual, como ya
se dijo, se encuentra la copropiedad. Los tratadistas estudian dos opiniones a
este respecto. Una es la doctrina romana; la otra, la doctrina germánica.
La doctrina romanaexplica que cada comunero no es dueño de la cosa
común. Solo es dueño de una cuota que es abstracta. Es abstracta porque no
recae ni en el objeto común ni en parte alguna de ese objeto.
Pero, como dije, es dueño de la cuota y en tal calidad, puede hacer lo que
quiera con su cuota. Esto es, puede vender su cuota, donarla, hipotecarla y, en
general hacer con ell a lo que cual quier propietario puede hacer sobre a
del que es dueño. Vean, como ejemplo, los artículos 2320 y 2417.
De lo dicho resulta que la cosa común no tiene dueño exclusivo y por
consiguiente nadie puede disponer de ella sin el consentimiento unánime de
los comuneros. Si alguno de los comuneros pretende algún acto, sea jurídico o
material, que afecte a la cosa común, cualquiera de los otros comuneros puede
vetar tal decisión, lo que implica que es difícil, por no decir impos
administración y manejo de lo que se tiene en comunidad. Es precisamente
por ello que el Código no mira de buena manera la
52
33. L a c o m u n i d a d e n e l C ó d i g o C i v i l . A d m i n i s t r a c i ó n y g o c e d e
bienes comunes. Ya se dijo que nuestro Código trata a la comunidad como un
cuasicontrato, cuyas disposiciones constan en el párrafo 3 del Título XX
del Libro IV, comprendiendo los artículos 2304 al 2313. Se dijo también que
esta materia se estudiará a propósito de las fuentes de las obligaciones. Pero,
mientras tanto adelantemos algunos conceptos.
Desde luego, en cuanto a la administración, y de acuerdo a la tendencia
romana, ninguno de los comuneros – copartícipes
administración y es precisamente éste uno de los defectos que m
legislador ha dar a la comunidad una vida efímera. Recuerden que el artículo
1317 otorga a cada copropietario el derecho a pedir la partición en cualquier
momento, sin que pueda alegar que la acción o derecho está prescrito. Ha
algunas excepciones, una de las cuales se halla en el mismo precepto citado,
pero ello no evita que la regla general sea la facultad permanente de pedir la
división de la cosa común.
También adelanto que en la práctica los varios comuneros otorgan poder
o mandato de administración a uno de ellos o a un tercero y así obvi
inconveniente y vacío producido en el manejo de la comunidad.
Cuando los comuneros han reglamentado la situación de la
como, por ejemplo, otorgando mandato a uno de ellos o a un extraño, se habla
de comunidad activa. Es en la comunidad pasiva, es decir cuando no existe
mandato alguno, donde se presentan problemas a los que paso a referirme.
El derecho a vS e teo .t r a t a d e l a a d m i n i s t r a c i ó n d e u n a c o m u n
c u a n d o n o h a y r e g l a m e n t a c
El principal parece ser averiguar quién puede actuar por la comunidad en una
situación así. En tal caso cada comunero puede realizar actos mater
jurídicos que comprometan la cosa común. Puede, por ejemplo, echar abajo
el viejo galpón o dar en arrendamiento uno de los potreros del fundo. Pero los
demás comuneros, o cualquier de ellos, goza del un derecho que conoce como
“derecho a veto” o “jus prohibendi”. Este derecho impide la ejecución
acto que otro de los comuneros pretende. Fíjense que el derecho a veto puede
54
ser ejercido tan solo por uno de los copropietarios y no se necesita que lo pida
una mayoría.
El derecho a veto es una muestra más de la influencia romana en est
m at er ia , porque e n el fondo, ni l a m ayor í a de l os com uneros puede dec
mientras exista un comunero que, en defensa de su cuota, se oponga.
Lo recién explicado resulta de la aplicación del artículo 2305 en cuanto
dispone que el derecho de cada comunero sobre la cosa común es el mismo
que los socios tienen sobre el haber de la sociedad. Pues bien, el derecho de
los socios sobre el haber social se describe en el artículo 2081 otorgando en su
Nº 2º el derecho que tiene cada uno a servirse para su uso personal d
cosas de la comunidad. El inciso 1º otorga facultades de adminis
todos los socios, o comuneros, como diremos nosotros. Allí mismo se otorga
el derecho a veto y se señala la oportunidad para ejercerlo: mie
pendiente la ejecución del acto vetado o no haya producido efectos.
El mandato tácito. El artículo 2081 contiene otro rubro que es necesario
co no c er a l m e no s d e s u ex i s t en c i a , po r a ho r a . C ua nd o l a s o ci e da d no t
administrador, la ley presume que cada socio ha dado al otro socio poder de
administración. Es lo que se conoce como ”mandato tácito
permite que uno de los socios contrate o ejecute actos materiales, sin perjuicio
del derecho a veto que tiene cualquiera de los otros. Pues bien, toda vez que
el derecho de cada comunero en la cosa común ha resultado guiarse por las
normas de la sociedad en esta materia, se sostiene que cada comunero también
goza del mandato tácito que consagra el citado artíc
discutible y hay opiniones que así lo aceptan y otras que lo re
rechazo proviene de texto del artículo 2307, el que dis
comunero contrae deudas a favor de la comunidad, ese com
obligado y no la comunidad. Como se ve, dicha norm
existencia del mandato tácito, porque si existiere tal m
comuneros quedarían obligados.
voluntad del titular, como cuando una persona enajena un bien a dos o más
p e r s o n a s . D e l a l e y , c o m o e n l a c o p r o p i e d a
servidumbres o la medianería.
Otra clasificación considera la duración de la comunidad. En tal caso son
temporales o perpetuas.
Las temporales son la regla general. Para decidirlo así basta recordar el
artículo 1317. Pero mediante un pacto pueden durar cierto
resulta del pacto de indivisión de que trata el propio artícul
comunidades perpetuas están establecidas en la ley. La ley las establece
atención a su naturaleza. Sirven de ejemplo la copropiedad inmobiliaria y la
medianería.
También resulta otra clasificación si se atiende a su funcio
En tal caso se distinguen las activas y las pasivas. En las primeras hay una
comunidad de bienes que funciona en una determinada actividad económica
como, por ejemplo, una sucesión hereditaria que sigu
negocios del difunto. Las segundas constituyen un conjunto de bienes que en
algún momento serán divididos entre los comuneros. De estas comunidades
pasivas se preocupa preferentemente el cuasicontrato de comunidad
Código reglamenta en los artículos 2304 al 2313.
3 8 . L a c o p r o p i e d a d i nEms o ebsi tl ai a ur ni a . f o r m a e s p e c
comunidad que, como recae en el derecho de dominio, toma el nombre d
copropiedad. Corresponde al régimen bastante común q
existencia de los departamentos de altura y ahora, después de la ley 19.537,
incluso de viviendas de una sola planta edificadas en un suelo común.
La ley 19.537 establece normas sobre “copropiedad in
Como dice su artículo 1º su objeto es regular un régimen especial en virtud
del cual se establecen inmuebles divididos en unidades sobre las cuales hay
un dominio exclusivo, manteniendo bienes comunes entre ellos.
tratar de viviendas, locales comerciales, oficinas bodegas, estacionamientos,
y otros.
El artículo 2º define condominio como “constru
acogidos al régimen de copropiedad inmobiliaria regulado por l
ley.” Define también qué se entiende por bienes de dominio
gastos comunes, etc.
El artículo 3º declara que cada copropietario es dueño exclusivo de s
unidad y comunero en los bienes comunes. El derecho en los bienes comunes
se det erm inará por el Reglament o interno. Y el art ícul o 13 aclara que c
comunero puede servirse de los bienes comunes en la forma que señ
Reglamento y, en su falta, de acuerdo a la naturaleza de los bie
entorpecer el derecho de los demás.
En cuanto a la administración, ésta corresponde a los cop
r e u n i d o s e n a s a m b l e a . O t r o ó r g a n o a d m i n
58
641 trata de las presas hechas por piratas, bandidos e insurgentes. La lectura
del artículo 642 completa el destino de estas presas.
La última categoría de ocupación corresponde a las especies al parecer
perdidas y especies náufragas. Estas cosas no pertenecen a las res nullius, de
manera que no pueden ser objeto de ocupación, al menos al prin
artículo 629 dispone que quien encuentre una cosa al parecer perdida deberá
ponerla a disposición de su dueño. Si no aparece el dueño, la cosa
entregarse a la respectiva Municipalidad, la que deberá dar cuenta del hecho
en un periódico de la comuna o de la capital de la comuna o de la capital de la
región si en la comuna no hubiere diario. Se repetirán los avisos en la forma y
circunstancias que la disposición indica. Si no apareciere el dueño se venderá
el objeto en pública subasta y el producto se dividirá por partes iguale entre
quien encontró la especie y la Municipalidad. Subastada la especie, se mirará
como irrevocablemente perdida para el dueño, según el artícu
artículos 631 al 634 completan la reglamentación. Debe considerarse que la
Ley de Rentas Municipales contiene reglas sobre este tema.
Las especies náufragas provienen del naufragio de algún buque en las
costas de la República o cuando el mar arroje a la costa los fragmentos de un
buque o efectos que le pertenecieron. Esta situación se trata en los artículos
635 al 638. En forma sucinta explico que no está facultado para apropiarse de
estas especies quien las encuentra y, al cont
providencias para “restituirlas quien de derecho corresponda”. Si después de
publicaciones practicadas por la autoridad no apareci
procederá como en el caso de las especies al parecer perdidas
4 3 . D i v e r s a s c l a s e sA cd ce e sa i cócne sdi eó nf .r u t o s y a
propiamente tal.
Estas dos clases de accesión se desprenden del propio artículo 643. La
accesión es de frutos cuando se adquiere lo que la cosa principal produce; y
es accesión propiamente tal, cuando se adquiere lo que se junta a una cosa.
La accesión de frutos. Llamada también “accesión discreta”, permite que
el dueño de una cosa se haga dueño de lo que la cosa produce,
dispone el artículo 644.
Los artículos 644 al 648 tratan de esta materi
accesión. De dichas disposiciones hay conceptos que el estudiante
obligación de conocer su exacto significado. Empecemos por las expresiones
“frutos” y “productos”.
El articulo 643 en la parte final dice que “Los productos de las cosas son
frutos naturales o civiles”. El legislador ha confundido dos cosas dis
Producto es el género, y fruto es la especie.
Producto es todo lo que se obtiene de una cosa o sale de
minerales de una mina, los frutos de los árboles. Fruto es lo que
periódicamente una cosa, según su destino nat
disminución sensible de sus substancia, como por ejemplo los frutos o flores
de los árboles, las maderas de los bosques, etc.
68
se deba, desde que no haya plazo pendiente para su pago, salvo que
intervenga decreto judicial en contrario.”
Sin embargo, hay tres casos en que no puede exigirse la tradición. Dos de
ellos aparecen mencionados en el artículo citado. El primero es cuando el
título es condicional; el segundo, cuando hay plazo pendiente; el tercero
cuando interviene un decreto judicial impidiendo la tradición.
Cuando el título es condicional. La condición suspensiva suspende la
existencia de una obligación y como la tradición es cumplir una obligación
resulta lógico lo dicho. Pero si la condición expresada en el título es
resolutoria, la tradición se hace exigible desde la celebración del contrato que
sirve de título. Ha de recordarse que la condición resolutoria no impide ni el
nacimiento ni la exigibilidad de una obligación. Claro está que la condición
resolutoria en el título, cumplido el evento del que depende, afectará la vida
de la tradición. El título es antecedente de la tradición y ésta queda sujeta a la
misma condición resolutoria del título.
Hay otra cuestión que mueve a investigar. Pedro vende a Juan un
inmueble. En virtud del contrato Pedro queda obligado a hacer la tradición
del inmueble a Juan. No hace la tradición. ¿Podría Juan acogerse a la norma
del artículo 1489, esto es a la condición resolutoria tácita, y pedir la
resolución del contrato o el cumplimiento forzado de la obligación de hacer la
tradición, más indemnización de perjuicio en ambos casos?.
La duda al problema anteriormente expuesto es originada por la
redacción del artículo 680: “La tradición puede transferir el dominio bajo
condición suspensiva o resolutoria “con tal que se exprese”. Las comillas son
para destacar esta exigencia. Expresar es lo contrario de “tácita” y la
condición resolutoria es tácita. Es por ello que algunos autores estiman que en
el ejemplo propuesto Juan no podría ejercer la acción emanada del artículo
1489.
En el texto del señor Vodanovic ( número 599) se dice que la
unanimidad de la jurisprudencia acepta la aplicación de la condición
resolutoria tácita en un caso como el del ejemplo.
En el estudio de la compraventa hay otra situación a discutir.
Imagínese, como ejemplo, que Venancio vende a Conrado un inmueble. Pero,
desconfiado el hombre, exige estipular en el título que la tradición no
transferirá el dominio del inmueble mientras no se le complete por el
comprador el pago del precio. Su exigencia, que fue aceptada, se sustenta en
77
el inciso 2º del artículo 680. Dice este artículo: “La tradición puede transferir
el dominio bajo condición suspensiva o resolutoria, con tal que se exprese”.
Su inciso 2º: “Verificada la entrega por el vendedor se transfiere el dominio
de la cosa vendida, aunque no se haya pagado el precio,
a menos que el vendedor se haya reservado el dominio hasta el pago,
o hasta el cumplimiento de una condición.” No hay para qué insistir en que la
parte en cursiva es propia de estos apuntes y no del Código.
Como se ve, el artículo 680 resulta que, aun hecha la tradición, el
dominio no se ha transferido al vendedor en virtud de haberse pactado así y
conforme al citado artículo 680. Pero resulta que en el título de la
compraventa existe una norma que dice lo contrario. Es el artículo 1874 que
dice: “La cláusula de no transferirse el dominio sino en virtud de la paga del
precio no producirá otro efecto que el de la demanda alternativa enunciada
en el artículo precedente………..”. El artículo precedente es una reiteración
de la condición resolutoria tácita, pero en relación a la compraventa.
En suma, volviendo a nuestro ejemplo, la cláusula que exigió don .s
aceptó el comprador ,es válida según el artículo 680 inciso 2º, pero según el
artículo 1874 no produce efectos. ¿Cómo se resuelve esta contradicción?
La solución se encuentra recurriendo al principio de la especialidad, y
así lo ha hecho la jurisprudencia. Esto es, cuando la cláusula de no transferir
dominio mientras no se paga el pecio se ha pactado en cualquier contrato que
no sea la compraventa, es válida conforme al artículo 680. Pero dicha cláusula
pactada en la compraventa no impide la transferencia del dominio y solo
produce el efecto que indica el artículo 1874.
4 8 . R e q u i s i t o s d e l a t r a d i c i ó n . E s t
Son cuatro: A . ) C o n c u r r e n c i a
Consentimiento del tradente y del adquirente; C.) Existencia
translaticio de dominio; y D.) Entrega de la cosa.
A.) El primer requisito: concurrencia de dos personas. Ya se dijo que la
tradición es una convención y por ello es que requiere la concurrencia de dos
personas. El inciso 1º del artículo 671 dice que “Se llama tradente la persona
que por la tradición transfiere el dominio de la cosa entregada por él o a su
nombre”. Y adquirente, según el mismo artículo, “es la persona que po
tradición adquiere el dominio de la cosa recibida por él o a su nombre”. Suele
llamarse “tradens” al tradente y “accipiens” al adquirente.
78
Es necesario aclarar que, en realidad, más que dos personas, la ley debió
decir dos partes, situación que por lo demás no desconoce el inciso
artículo 671 cuando acepta la concurrencia plural de parte del tradente y de
parte del adquirente.
5 2 . L a t r a d i c i ó n , l a r e p r e s e n
A propósito de la tradición hecha por un representante del tradente el artículo
671 contiene una norma que amerita explicación. A propósito del estudio del
patrimonio se explicó que todo acreedor tiene el derecho de
ejecución de su crédito sobre todos los bienes raíces o muebles del deudo
exceptuándose solamente los inembargables. Así se lee y dispone el artículo
2465. A su turno, el artículo 2469 explica como se hace efectivo este derecho
del acreedor, llamado comúnmente “derecho de prenda general del acreedor
sobre los bienes del deudor”. Pues bien, el artículo 2469 dispone q
acreedores “podrán exigir que se vendan los bi
concurrencia de sus créditos, incluso los intereses y los costos de la cobranza,
para que con el producto se les satisfaga íntegramente si fueren suficientes los
bienes y, en caso de no serlo, a prorrata, cuando no haya causas especia
para preferir ciertos créditos…..”
La venta de los bienes del deudor se efectúa mediante un
subasta. Esta subasta, que es ordenada por el juez, es una compraventa en la
que el deudor es el vendedor y quien se adjudica la propiedad en el remate es
el comprador. Es compraventa porque ello resulta de la na
subasta y porque numerosos artículos así lo dan a entender. Por ejemplo, el
artículo 1851 y en relación a la evicción asimila las ventas fo
83
Para precisar si hubo error o fue algo aceptado voluntariamente por las
partes ( como dación en pago, por ejemplo), debe recurrirse a los términos del
título.
La sanción no escapa a aquélla estudiada en las reglas generales. Par
al gunos hay nulidad absol ut a de l a tradición; para otros hay inexist enci
par a l os m enos hay nul i dad re l at i va en at enci ón a l a e xpres i ón “as i mi s m
que usa el artículo siguiente.
El error en la persona a quien se hace la tradición. Hay consenso en que la
t radi c ión e s un act o i nt ui t o per sonae y, por cons i gui ent e, conf orm e c on
artículos 1455 y 1682, la sanción será la nulidad relativa de la tradición. Pero
también es factible aceptar la nulidad absoluta si se tiene en cuenta que quien
por equivocación recibe la cosa carece de título para ello. Otra razó
estimar que hay nulidad absoluta se halla en que entre el tradente y el falso
adquirente falta el acuerdo de voluntades, esto es, no hay consentimiento.
Debe tenerse presente que el error en el puro nombre del adquirente no
invalida la tradición, según lo dispone el artículo 676 inciso final.
E l e r r o r e n e l t íEt lu leor.r o r e n e l t í t u l o v i c i a l a t r a d i c i ó n , p o
tradición es la consecuencia de una causa anterior y esa causa es precisamente
el título. Dicho de otra manera, la tradición necesita un título previo
título no hay tradición.
El error en el título puede ser de doble naturaleza. En la primera una de las
partes ha entendido que el título es translaticio de dominio
entendido que el título es de mera entrega, como en el comodato
cuando uno la entrega en comodato y la otra entiende donación.
El otro error en el título ocurre cuando ambas partes han entendido que el
título e translaticio de dominio, pero de diferente naturaleza, com
entiende que se trata de compraventa y la otra entiende donación. En ambos
casos el título es nulo tal como lo preceptúa el artículo 677: “El error en e
título invalida la tradición, sea cuando una sola de las partes supone un título
translaticio de dominio, como cuando por una parte se tiene el án
entregar a título de comodato, y por otra se tiene el ánimo de recibir a título
de donación, o sea cuando por las dos partes se suponen títulos translaticios
de dominio, pero diferentes, como si por una parte se supone mutuo, y p
otra donación”.
Si cualquiera de los tipos de error que se han descrito es causado por u
representante, la tradición es nula en los términos en que rige esta sa
86
caso de la venta de cosa ajena, que es válida conforme al artículo 1815, pero
que no transfiere dominio y no por ello deja de ser un título translaticio
dominio.
El título translaticio coloca a una de las partes en situación
dueño y por eso resulta apto para servir de antecede
tradición.
Ya se han citado algunos títulos translaticios de dominio y,
recordemos la compraventa, la donación, el mutuo (porque el mutuario está
facultado para disponer de la cosa y para ello debe ser dueño de la cosa dada
en mutuo. Ver artículos 2197 y 2198), la permuta, el aporte a una sociedad y
la dación en pago. En general, es título translaticio todo aquel contrato cuyo
objeto sea transferir dominio.
El título debe ser justo. Esto significa que el título debe ser válido, no debe
tener vicios que lo invaliden. Esto concuerda con la teoría general en materia
de nulidades, porque es sabido que un acto jurídico, título
declarado nulo deja de producir efectos y entre
antecedente necesario a la tradición.
El artículo 679- se preocupa de la exigencia de solemnidades: “Si la ley
exige solemnidades especiales para la enajenación, no se transfiere el dominio
sin ellas”. Recuérdese que la falta de cumplimiento de las solemnidades trae
como consecuencia la inexistencia de un acto o, al
absoluta. De esta manera, si se efectúa la compraventa de un bien
forma puramente verbal, el contrato no existe porque el artículo 1801 inciso
2º exige escritura pública y en tal situación la tradición carecería de título. Lo
mismo puede decirse de una donación en que se ha omitido la solemnidad de
insinuación que exige el artículo 1401.
El título debe ser válido respecto a la persona a qu
Esta exigencia apunta a que el título, además de ser válido por sí mismo, debe
serlo respecto de las personas para quien existe el título. Un ejemplo ayuda a
la mejor comprensión. Un título de compraventa es en sí un título válido y,
como se trata de la compraventa de un bien raíz, consta en escritura pública.
Pero resulta no ser válido respecto a las personas que actúan, porque tanto el
vendedor como la compradora son cónyuges y , siendo así, el t
siendo translaticio de dominio, resulta nulo y no es idóneo para
antecedente a la tradición. Tal resulta del artículo 1796.
88
5 7 . T r a d i c i ó n d e l o s d
inmuebles. La tradición del dominio y de los demás derechos reales recaídos
en un inmueble se efectúa por medio de la inscripción
respectivo registro del Conservador de Bienes Raíces. El título es el contrato
que origina la transferencia del dominio o del derecho real de que se trata. Si
la tradición se refiere al dominio el título se inscribe el Registro de Propiedad
que lleva el Conservador de Bienes Raíces correspondiente al lugar donde se
encuentra el inmueble y si éste se halla en dos o más lugares, a inscripciones
practicará en todos ellos.
La inscripción reemplaza a la entrega material y es una form
hacerla.
Lo expuesto se resume en el primer inciso del artículo 686: “Se efectúa la
tradición de los bienes raíces por la inscripción del título en el Registro del
Conservador”. Pero, como se advirtió, de la misma manera s
tradición de los otros derechos reales recaídos en inmuebles. El inciso 2º del
artículo 686 dispone: “De la misma manera se efectuará la tradición de
92
60. Tradición de cuota. Con apoyo en el artículo 580 que estima muebles
o inmuebles a los derechos según la naturaleza de la cosa en que recaigan, se
estima que si la cuota recae en un mueble la tradición se hará en alguna de las
formas que señala para la tradición de esos bienes el artículo 684; pero si la
cuota recae en un inmueble, la tradición de esa cuota debe
mediante la inscripción en el Conservador de Bines Raíces.
6 1 . T r a d i c i ó n d e l o s v e h í ca u lc oo sn smt io tt uo cr i i óz na
dominio, la transferencia y gravámenes recaídos en automóv
vehículos motorizados terrestres están sujetos la inscripción en un Registro
que lleva el Servicio de registro Civil e Identificación. Allí se inscr
transferencia, embargos, prohibiciones y otras medidas cautelares. Pero dicha
inscripción no significa tradición. Al contrario, los artículos 33 y siguientes de
la Ley Nº 18.290 someten a estos vehículos a la legislación común
bienes muebles. Eso sí, la inscripción constituye una presunción de dominio,
presunción legal que admite prueba en contrario.
1.- En primer lugar se resolvió que el título es nulo por haberse otorgado
con infracción a las leyes relativas a la organización de los bien
leyes que son de orden público.
2.- En una segunda oportunidad la sanción de nulidad absolut
extensiva incluso a la enajenación proveniente de una
ejecutivo, doctrina que después se enmendó al advertirse que en este caso no
son los herederos los que disponen del inmueble.
3 . - E n u n a t e r c e r a p o s i c i ó n l a C o r t e S
inscripciones se exigen para “disponer” de un inmueble. Disponer es enajenar
y con el título no se enajena. Solo se enajena con el modo de adquirir. P
co ns i gu i e nt e , de cl ar ó vá l i do e l t í t ul o ( s e t r at ab a de un a co m p r a ve nt a) ,
nula la tradición, esto es, la inscripción que se había practicado. (El profesor
Peñailillo advierte que de todas maneras el título es nulo por aplicación de
artículo 1810).
4.- Una cuarta interpretación – al parecer hasta ahora vigente – estima
que la sanción se encuentra en el artículo 696. Es decir, el título y la tradición
son válidos, pero la tradición (inscripción) no transfiere la posesión efectiva
mientras no se practiquen las referidas inscripciones. Sobr
puede consultarse la sentencia de la Corte Suprema que se publica en Revista
de Derecho y Jurisprudencia tomo 56, sección 1ª, página 75.
Se ha criticado esta interpretación, porque el artículo 696 se refiere a las
inscripciones que transfieren posesión, esto es, a la inscripción-tradición.
las del artículo 699 no son tradición, sino que se exigen para man
historia de la propiedad raíz.
Otra crítica a esta interpretación es que según ella la tradición es válida
y, aun cuando no transfiere el dominio, sin embargo habilita pa
según lo hemos visto a raíz del artículo 683 Y quien posee puede ganar por
prescripción, lo que se opone al artículo 688 que di
en manera alguna de un inmueble”.
Se propone otra sanción: la tradición sin cumplir los requisitos constituiría
un vicio establecido en calidad de heredero de la persona, lo que permite la
aplicación del artículo 1682, o sea, nulidad relativa.
de una especie o cuerpo cierto adquiere por el modo sucesión por causa d
muerte y no por tradición.
Reputándosele dueño de la cosa legada – artículos 688, 722 e inciso 2º del
artículo 700, desde la delación de la herencia el legatario adquiere un derecho
o crédito para exigir a los herederos que le entreguen la cosa legada, porque
estos son los encargados de cumplir las disposiciones de
acuerdo al artículo 1360. Incluso, puesto que es dueño, pued
acción reivindicatoria contra los herederos.
P e r o s i a l l e g a t a r i o s e l e h a a s i g n a d o u n
determinado, el modo de adquirir es la tradición. Este es el caso: el difunto
dispone en su testamento dejar a su sobrino René un caballo de los muchos
que tiene en sus pesebres. Por cierto que, ignorando cuál caballo le entregarán
los herederos, el sobrino René solo se hará dueño del caballo que és
entreguen. De los varios caballos que contempla la herencia, los herederos le
harán entrega de uno que ellos elegirán cumpliendo la regla que da el artículo
1509. Entregado el caballo, el heredero de género habrá adqui
modo tradición que los herederos le han hecho.
Antes de la entrega – tradición – este legatario no es dueño sino de un
crédito contra los herederos. Es obvio que puede vender, o
gener al , di cho cr édi t o para lo c ual se s uj et ar á a l as norm as de l os ar t í c
1901 al 1910. Como se trata de muebles los herederos no necesitan practicar
las inscripciones ordenadas en el artículo 688 y tampoco rige dicha exigencia
para el legatario de género que enajena su crédito.
L e g a d o d e u n b i e n r a í z . S e e x i g e n l a s i n s
6 8 8. S e h a d i s c u r r i d o s o b r e l a b a s e d e q u e e l l e g a d o r e c a e e n u n o
bienes muebles. Veamos ahora la situación que se produce cuando el legado
es de un inmueble, como si el testador deja a su sobrino Raúl el fundo “Las
Rosas”.
Como en el caso anterior, el legatario se hace dueño por el mo
adquirir sucesión por causa de muerte. Siendo dueño, exigirá a los herederos
la entrega el legado y, como los herederos para cumplir deberán disponer del
inmueble, tendrán que cumplir con las inscripciones que exige
688. Practicada la segunda inscripción los herederos de consuno entregarán
el inmueble. De esta manera el legatario tendrá un bien raíz con sus debidas
inscripciones. El título será la escritura pública de entrega de l
tradición será la inscripción de ese título.
102
las partes”. Termina el inciso 3º: “Del mismo modo se enmendarán y suplirán
las designaciones defectuosas o insuficientes de los títulos”.
Los artículos 83, 85 y 86 disponen reglas relativas a las firmas de las partes
o de sus apoderados, a l a obli gaci ón de otor gar copias, de la obl igación
devolver el título y a la custodia de la inscripción y responsabilidad que pesa
sobre el Conservador.
M á s s o b r e l a n e g a t i v a d e i n s cLr ai bri er g. l a g e n e r a l c o n s i s t e e n q u e e l
Conservador debe inscribir el título que se le presenta y debe h
demora. Esta obligación se desprende de los artículos 12, 13, 14, 25 y 7
Recuérdese que el artículo 13 impone la obligación
inscripción”, y que el artículo 70 dispone que, admi
C o n s e r v a d o r “ h a r á s i n r e t
excepcionalmente puede negar la inscripción, según los artículos 13 y 14 del
Reglamento.
De la observación que se hace de las causales que pueden justificar l
negativa del Conservador destaca el primer ejemplo que nos muestra el citado
artículo 13 en cuanto a que el Conservador debe negarse a inscribir una que
l e g a l m e n t e s e a i n a d m i s i b l e . P o r l o s e j e m
Reglamento, parece que esta causal se refiere a defectos de forma y no a los
de fondo que pudieren afectar al contrato que se trata de inscribir.
Pero uno de los ejemplos hace dudar de esta interpretación; “si es visible en
el título algún vicio que lo anulen absolutamente”. Daniel Peñailillo pie
que la palabra “título” está usada en el sentido material y que por lo mismo
este ejemplo sigue la línea de los demás ejemplos. Hay fallos que resuelven
que el ejemplo se refiere a defectos substanciales- de fondo- y no solamente
del título material. De acuerdo a estos fallos el Conservador podría negar una
inscripción si aparece en el contrato un vicio de nulidad absoluta. Pero esos
fallos han exigido: a.- Que el vicio produzca nulidad absoluta
aparezca visible en el título, tal como lo dice el ejemplo.
Sobre lo recién explicado pueden leerse los fallos publicados a
Revista de Derecho y Jurisprudencia, tomo 60, sección 2ª, página 36 y tomo
71, sección 1ª, página 171.
El interesado, y perjudicado con la negativa, puede reclamar conforme al
artículo 18 y siguientes del Reglamento. El artículo 18
recurrirse al juez del respectivo departamento (hoy hay comunas o agrupación
de comunas) quien resolverá sin más trámite, pero
110
Reitero que este último acápite merece una serie de observaciones que
más adelante, y a propósito de la prueba de la posesión en materia de acciones
posesorias, se expondrán.
Observación importante: La inscripción no acredita dominio. La única
forma de probar el dominio es acreditando la prescripción, sin perjuicio que la
posesión es presunción de dominio conforme lo prescribe el inc
artículo 700. Esta presunción es simplemente legal.
7 2 . S e c o n t i e n e n s o l a m e n t e a l g
Concepto. Este modo de adquirir ocupa todo el Libro III del Código Civil. Si
se l e com para con l os pocos ar tí c ulos que com pr enden el t r at am i ent o d
tradición, se advertirá la importancia que tiene y el por qué se ha reservado su
estudio a un curso final de la carrera. Esto queda dicho para justificar que en
esta ocasión solamente entregaré algunos conceptos elementales que permitan
la debida comprensión de materias ya estudiadas y de otras que vienen más
adelante.
El Código no define este modo de adquirir, pero puede ensa
siguiente concepto: “Es un modo d adquirir que consiste en la transmisión del
patrimonio o de una parte de él, o de bienes singularizados, de una persona
fallecidas a otro que le sobrevive”.
El artículo 951 dispone que se sucede a una persona a título universal o a
título singular. Cuando se sucede a una persona en todos sus derechos, bienes
y obligaciones transmisibles, o en una cuota de ellos, se dice que el título es
universal. Cuando se sucede en uno o más cuerpos ci
singular. Si se sucede al causante en una o más especies indeterminadas de un
114
Q u i n t o m o d o d e a d q u i r i r : L A P R E S C R I P C I
prescripción.
7 3 . D e f i n i c i ó n y
j u s t i f i . c Ea lc i Có ón d i g o d e f i n e y t r a t a c o n j u n t a m
prescripción. Una tiene como finalidad la adquisición del
adquisitiva o usucapión; la otra tiene como objeto que extinguir las acciones:
es la extintiva o liberatoria.
Las define en el artículo 2492: “La prescripción es un modo de adquirir las
cosas ajenas, o de extinguir las acciones y derechos ajeno
poseído las cosas o no haberse ejercido dichas acciones y derechos duran
cierto lapso de tiempo, y concurriendo los demás requisitos legales”.
La definición es conjunta porque así es en el Código francés; porque ambas
tienen elementos comunes, como el transcurso del tiempo; y porque amb
estabilizan derechos. En la primera, la posesión transformándola en dominio;
y en la otra liberando al deudor.
Algunos autores sostienen que ambas prescripciones son la misma cosa.
Es cuestión del punto de vista con que se le mire. Así, cuando se gana por la
adquisitiva el dominio de un bien, al mismo tiempo se extinguen las acciones
que el antiguo dueño pudiere tener sobre ese bien.
Es cosa aceptada que don Andrés Bello las trata al final, como forma d
coronar todo el Código con una institución q
estabilidad en los derechos y en la propiedad. Esto, porque llama la atención
que la prescripción adquisitiva no se hubiere tratado a continua
tradición, puesto que ambas son modos de adquirir, y que la extintiva no se
hubiere ubicado junto a las demás formas de extinguir la
después del artículo 1567, disposición que por lo demás la consigna
número 10º. (No está de sobra advertir, sin embargo que la
extintiva no extingue las obligaciones: solo extingue la acción para su cobro.)
116
p r e s c r i p c i ó n d e l a p e n a
penal.
S o b r e l a s e g u n d a r e g l a : L a p r e s c r i p
La prescripción tiene un interés social, según se explicó. Y también se sabe
que son renunciables los derechos siempre que miren solamente e
individual del renunciante conforme lo permite el artículo 12. De ahí que la
prescripción sea irrenunciable mientras esté corriendo el plazo, porque sería
una cláusula común en todo contrato. Pero cuando el plazo se ha cumplid
pasa a ser de interés solo del prescribiente y
renunciarse. De manera que esta situación puede resumirse diciendo que
la prescripción es irrenunciable, salvo que haya transcur
prescripción, caso en que se puede renunciar. Escuetamente el inciso 1º de
a r t í c u l o 2 4 9 4 d i c e : “ L a p r e s c r i p c i ó n p u e d e
tácitamente, pero sólo después de cumplida.”
De la disposición recién citada resulta que la renuncia de la prescripción
puede ser expresa o tácita. La expresa consta en una declaración explíci
La tácita ocurre cuando el que puede alegarla ejecuta un hecho o acto
implique reconocer el derecho del dueño o del acreedor. Así, por ejemplo, el
que, cumplido el plazo de prescripción y en condiciones de alegar dominio,
y teniendo en cuenta que la prescripción hay que alegarla y que mientras no
se alegue no hay prescripción, paga la renta de arriendo al dueño, o el que
paga intereses de la deuda.
S e d i s c u t e l a n a t u r a l e z a j u r í d i c a d e l a
enajenación, porque el derecho ganado por prescripción sale del patrimonio
del prescribiente en virtud de la renuncia. Para otros – y como la prescripción
hay que alegarla – el derecho no ha ingresado aun
prescribiente y, teniendo presente que no se puede enajenar algo de lo que no
se es dueño, entienden que la renuncia es un acto simplemente abdica
Leer el art. 2495 que parece dar la razón a la primera opinión, toda vez que
exige que la renuncia se hecha por quien….” puede enajenar”.
En cuanto a los representantes. Se dice que el representante legal puede
renunciar si la prescripción recae en muebles; pero no puede re
recae en inmuebles, a menos que cumpla las formalidades que la ley exige en
protección del representado.
Tercera regla: La prescripción corre en contra o a
persona. Tal como lo dice la última regla del artículo 2497, Esta norma puso
118
LA POSESIÓN.
7 8 . D e f i n i c i ó n y e l eLma e pn ot so es s. i ó n s u e l e e s t u d i a r s e d e s
puntos de vista. Uno, como un presupuesto y requisito de la prescripc
otro, como una institución autónoma. De esta última forma la ense
profesor Victorio Pescio, como puede leerse en sus Manuales. Y no deja de
tener razón, porque en realidad la posesión es la manifestación física, o se
material, del dominio. Este último es un derecho real, abstracto como lo son
muchas de las instituciones del derecho, pero la posesión c
realidad y esa realidad es la que permite que el titular del domini
cosa, se aproveche de sus frutos y pueda disponer de ella.
121
8 2 . D o m i n i o , p o s e s i ó nE yn tn eu ne es nt rcoi ad. e r e c h o e x i s t e
instituciones que pueden llevar a confusión al estudiante: propiedad, posesión
y tenencia. Veamos.
El dominio está definido en el artículo 582 como “el derecho real en una
cosa corporal, para gozar y disponer de ella arbitrariamente, no siendo contra
la ley o contra derecho ajeno” De ahí que el dominio sea un relación jurídica
entre el dueño o propietario y la cosa, y es por esta relación
reconoce que el propietario puede usar, gozar y disponer de la cosa. Hay una
relación total entre el titular del dominio y la cosa objeto de la propiedad.
La posesión también otorga al poseedor las facultades de usar, gozar y
disponer de la cosa, pero ello ocurre porque es normal que exista ju
dominio. Es como decir que la posesión se aprovecha del
ejercer estas facultades. Pero puede ocurrir que se sea po
dueño, como quien se apodera de una cosa y se porta como poseedor
poseedor tiene las mismas facultades y lo es por ser considerado propietario
en virtud de la presunción del inciso 2º del artículo 700.
La tenencia o mera tenencia, representa una situación de hecho que no
tiene alcances jurídicos. Como dice el inciso 2º del artículo 7
tenencia “se aplica generalmente a todo el que tiene una cosa reconociendo
dominio ajeno”. El arrendatario y el comodatario son meros tenedores.
Una vez más, y para la mejor comprensión. Lo normal es que el dominio
y la posesión estén juntos, situación que reconoce la presunción del artículo
700.
Puede existir dominio sin posesión, situación anormal. Como el dominio
echa de menos a “su” posesión, recurre a la acción reivind
recuperarla.
Puede existir posesión sin dominio, situación a
posesión requiere a su “compañero” dominio, recur
adquisitiva para tenerlo.
Es esta última condición la que nos permite estudiar,
posesión como requisito de la prescripción adquisitiva.
83. Cosas que pueden poseerse. Pueden ser objeto de posesión tanto las
cosas corporales como las incorporales. El artículo 700 sin duda se refiere a
las cosas corporales y el artículo 715 abarca la po
125
8 6 . D e f i n i c i ó n d e l a p o
Conforme al artículo 702 debemos entender por posesión regular aquélla que
proviene de justo título y ha sido adquirida de buena fe, habiéndose, además,
efectuado la tradición si el título es translaticio de dominio.
De la propia definición resulta que la posesión regular exige la presencia
de tres elementos:
1.- Justo título;
2.- Buena fe;
3.- Tradición si el título es translaticio de dominio..
Adelanto materia pidiendo que observen que la buena fe debe existir al m
omento de adquirir la posesión, sin importar que después se pierda la buena
fe; y también que no siempre se exige la presencia de tradición, puesto que la
ley la limita al caso en que el título sea translaticio de dominio.
Pasamos a estudiar cada requisito.
88. Sobre los títulos constitutivos de posesión. Son aquéllos que facultan
para adquirir la posesión. Ya se sabe que son tales la ocupación, la accesión y
la prescripción.
Lo normal es que la ocupación y la accesión sean constitutivos tanto de
la posesión como del dominio. Salvo el caso excepcional de exi
situación en la cual se justificará la posesión, pero no se adquirirá el dominio.
Suele citarse el caso de ocupación de un animal que, creyéndosele b
era, sin embargo, doméstico.
La prescripción merece un comentario. El artículo 2492 declara que es
u n m o d o d e a d q u i r i r e l d o m i n i o d e l a s c o s a sh aajbeenral sa sp op ro s e í d o
durante cierto lapso de tiempo. Siendo así, resulta que la pres
puede ser antecedente justificativo de la posesión, sino, más bien, resultado de
la posesión que le precedió.
12
Ver letra a) de nuestro número 39.
128
9 2 L. a s u c e s i ó n p o r c a u s a d e
posesión. Resumo algunas de las ideas expresadas por el profesor Peñailillo
en s u c i t a do t ex t o y , ad em á s , l a s c on t e ni da s e n e l t o m o I V d el M a nu a l
profesor Pescio.
130
93. Requisitos que debe reunir el título justo. El Código no indica que
caracteres debe ostentar un título para ser justo. Pero de la lect
títulos injustos, puede deducirse que el justo título debe ser:
a.- auténtico;
b.- real;
c.- válido.
A.- El título debe ser auténtico.Es auténtico el otorgado realmente por
la persona que se pretende o a quien se atribuye, según el Nº 1º del artículo
704. Es por ello que este artículo califica de injusto al título falsificado, esto
es “no otorgado realmente por la persona que se
133
comprende este tipo de títulos el Nº 2º del artículo 704: “El conferido por una
persona en calidad de mandatario o representante legal de otra sin serlo”.
Tanto el Nº 1º como el N º 2º del artículo 704 contemplan ca
suplantación de personas y el título resultante además de ser injusto puede dar
motivo a una sanción penal.
H a y q u e t e n e r p r e s e n t e q u e a m b a s s i t u a c i o
mandatario fingido, a alguien que sostiene ser apoderado de otro s
realmente. Insisto en ello, porque en una oportunidad se alegó falsedad del
t í t u l o po r q ue u na p e r s on a s os t uv o s er m a n da t a r i o d e ot r o y e s e ot r o no
dueño de la cosa transferida. El tribunal negó la demanda sosteniendo que el
artículo 704 solo se refiere al título en que se ostenta la calidad de mandatario
s i n s e r l o , n o a b a r c a n d o o t r a s s i t u a c
Jurisprudencia, tomo 27, sección 1ª, página 336.).
En otra sentencia no se aceptó que el título era injusto en circunstancias
que el mandatario se había excedido en sus facultades, insistiendo el fallo que
la causal que tipifica el título injusto es la de pretender ser mandatar
serlo y no la de exceder éste en sus facultades. (Revist
Jurisprudencia, tomo 89, sección 2ª, página 143.)
B.-) El título debe ser real.Esto es, que el título verdaderamente exista y
que corresponda al derecho con que se pretende justificar la posesión. No es
real el título de compra de un objeto si se exhibe un título que da cuenta de un
comodato, este último, como se sabe, es título de tenencia.
Respecto a esta exigencia, el Nº 4º del artículo trata de
meramente putativos.
El primero de los títulos putativos trata del heredero
realidad heredero; el segundo trata del legatario cuyo legado ha sido revocado
por un acto testamentario posterior, circunstancia que el legatario ignora. En
ambos casos el título es la sucesión por causa de muerte, pero el tí
meramente aparente porque la asignación en realidad no se ha deferido ni al
heredero ni al legatario. Creen ser asignatarios, pero en realidad no lo son. No
obstante el inciso final del artículo 704 otorga a uno y a otro la posibilidad de
contar con un justo título y así poder acceder a la poses
mencionado inciso reza: “Sin embargo, al heredero putati
decreto judicial o resolución administrativa se haya otorga
efectiva, servirá de justo título el decreto o resolución; como
134
1 0 2 . E x p l i c a c i ó n s o b r e -e l Bc ao snacde op teon. e l t e x t o d e l s e
Vodanovic (Nº 715) explico que una persona puede encontrarse en cuatro
situaciones diferentes : a. Puede ser dueño y poseedor, que es lo normal; b.-
Puede ser poseedor sin ser dueño, caso en que se habla de juspossesioni; c.-
Puede ser dueño sin poseer; y, d.- Puede ser mero tenedor.
C o n c e p t oD. e l a r t í c u l o 7 1 4 : “ S e l l a m a m e r a t e n e n c i a l a q u e s e e j e
sobre una cosa no como dueño, sino en lugar o a nomb
Nosotros agregamos que el mero tenedor tiene el puro corpus, pero falta
animus en él.
Lo más normal es que el mero tenedor reconozca dominio ajeno, como
el secuestre o el depositario.
Dentro de nuestro derecho, posesión y mera tenencia se excluyen. O se es
lo uno o se es lo otro. Solo la posesión conduce a la prescripción. El me
tenedor no puede prescribir.
Mera tenencia a virtud de un derecho real y mera tenencia en virtud de
un derecho personal . El mero tenedor puede encontrarse en dos situaciones
jurídicas distintas: a.- Puede tener la tenencia de la cosa en virtud de un título
141
de mera tenencia; b.- Puede tener la cosa como mero tenedor pero en virtud
de un título personal, título que lo relaciona con el dueño de la cosa.
Por ejemplo, es mero tenedor el usufructuario o el que tiene la cosa en
virtud del uso o habitación. En estos casos se tiene la cosa en virtud de
derecho real: el usufructo y el uso o habitación.
Pero el comodatario, el depositario y el arrendatario, tie
tenencia de la cosa de que se trata en virtud de un título personal, esto es, en
virtud de un vínculo que lo liga con el dueño.
La diferencia e importancia de la distinción se encuentra en que cuando
se es tenedor por un derecho real, el mero tenedor es mero tenedor de la cosa,
pero en cambio es poseedor del derecho real. Así, el usufructuario es me
tenedor de la casa, pero es propietario de su derecho real de usufructo. Por eso
el artículo 891 permite reivindicar la cosa objeto del usufructo.
En cambio, si la mera tenencia depende un vínculo personal e
tenedor no tiene derecho alguno sobre la cosa.
Características de la mera tenencia. a.- Es absoluta, porque se es mero
tenedor tanto respecto del propietario como del resto de la gente; b.- Carece
de acción posesoria, aun cuando excepcionalmente el artículo 928 le otorga la
acción de restablecimiento, acción que, más que proteger la tenencia, cui
que nadie se haga justicia por sí misma. Cuida la paz social, en resumen. c.-
Es perpetua, lo que quiere decir que el mero tenedor seguirá siéndolo y sus
sucesores serán mero tenedores. Si el causante era arrendatario, su su
s e g u i r á s i é n d o l o y n o s e t r a n s f o r m a r á e
transformarse en posesión. Por eso se dice que es inmutable y perpetua, lo que
confirma el artículo 716: “El simple lapso de tiempo no
tenencia en posesión……….” Sin embargo hay casos de excepción. Veamos
los tres casos que comúnmente se citan.
1ª La excepción que indica el artículo 716 se halla en el artículo 2510 regla
3 ª . E s t a e x c e p c i ó n s e e s t u d i a r á c u a n d o r e i n
prescripción, pero mientras tanto resumo la norma diciendo que un título de
mera tenencia no da lugar a la prescripción adquisitiva. Así, por ejemplo, no
s e pu e de g an a r p or pr e s c r i p ci ón e l do m i ni o de u na c a s a qu e s e t i e ne c o
arrendatario. Pero el mismo artículo 2510 permite ganar por prescripción a
mero tenedor que justifique que quien pretende ser dueño no pueda pr
que en los últimos diez años se haya reconocido su dominio por el que alega
142
1 0 7 . O r d e n d e e x p o s i c i ó n d e eS set am omsat tr ea r ái a p. r i m e r o l
concerniente a los bienes muebles; a continuaci
inmuebles no inscritos; y, en fin, la de los inmuebles inscritos.
1 0 8 . A d q u i s i c i ó n d e l a p o s e
El artículo 723 solo exige que exista voluntad (animus) y aprensión material
(corpus). De manera que, conforme lo señala el inciso
excluidos de adquirir la posesión los dementes y los infa
artículo 26: que no ha cumplido 7 años) Pero pueden adquirir posesi
muebles los disipadores sujetos a interdicción, los menores mayores de siete
años, menores adultos sujetos a patria potestad, y en general todo incapaz que
no sea los señalados.
Pero el mismo artículo 723 advierte que los incapaces de administrar no
pueden administrar las cosas cuya posesión han adquirido.
A d q u i s i c i ó n a n o m b r e d e oLtar op. o s e s i ó n p u e d e a d q u i r i r s e ( t o m a r s e
dice el artículo) personalmente o por medio de mandatario y representan
Así se lee en el artículo 720.-
Pregunta: ¿ Desde qué momento se adquiere la posesión cuando ésta lo
es por medio de mandatario? Veamos las posibiidades que siguen.
145
1 0 9 . C o n s e r v a c i ó n d e l a p o s e
Los artículos 725 y 727 sientan este principio: basta que el poseedor conserve
el animus para que conserve la posesión. No importa que haya perdid
corpus. Por eso, aunque se transfiera la mera tenencia o a cualquier título que
no sea translaticio de dominio, seguirá siendo poseedo
artículo 725. Y el poseedor sigue siéndolo aun cuando ignore accidentalmente
el actual paradero de la cosa conforme al artículo 727.
Pothier sostuvo que el ánimo de señor y dueño se conserva, a menos que
se demuestre lo contrario. Por eso el que empieza la posesión con ánimo de
señor y dueño, se considera que conserva ese ánimo, regla que el
recoge en el inciso 1º del artículo 719. Por eso, aun cuando el poseedor caiga
en demencia, sigue siendo poseedor hasta que se
contrario.
se apodera de ella con ánimo de hacerla suya”. Advierte el artículo 726 que
hay excepciones. El merito de este artículo equivale a decir que se pierde la
posesión cuando otro entra a poseer.
Otro caso de pérdida de la posesión por pérdida del corpus es cuando se
arrojan objetos al mar con la intención de aligerar la nave ante la inminencia
de un naufragio.
Cabe mencionar las especies al parecer perdidas, según el artículo
Otro ejemplo es el de la heredad que permanece inundada, confor
dispuesto en el artículo 2502, Nº 1º.
La pérdida de la posesión por pérdida del animus solo re
ejemplo: el caso del constitutum possesorium. (El fulano vende e
pero sigue conservándolo, ahora como arrendatario, situación que p
artículo 684 Nº 6.).
1 1 1 . A d q u i s i c i ó n de l a po s e s i ó n d e l o s b i e ne s i n m u e b l e s n o i ns c r i
El Código se ocupa de la adquisición de inmuebles distinguiendo entre los no
inscrito de los inscritos. Esto, porque Andrés Bello creyó que con el tiempo
estarían inscritos todos los inmuebles. Entonces, la
inscritos parece de carácter transitoria, pero en la práctica no resul
resulta que hay todavía muchos inmuebles no inscritos.
Esto explica por qué hay normas destinadas a los inscritos y otras para
los no inscritos. En este caso, los artículos 726 y 729 están dedicados a los no
inscritos y el artículo 728 contiene normas sobre los inscritos.
La situación de los inmuebles no inscritos está en el art. 726 y en el 729,
como se dijo, y de esas normas se desprende que la posesión de
adquiere de forma muy parecida a la adquisición de los muebles.
Estos artículos distinguen: a.- si para adquirir la posesión se invoca un
título constitutivo de dominio o, b.-, cuando se invoca un título translaticio de
dominio.
1 1 9 .A d q u i s i c i ó n d e l a p o s e s i ó n d e u n i n m u e b l e i n s c r i t o c
invoca un título no translaticio.Si el título es constitutivo de dominio debe
descartarse la ocupación, porque el artículo 590 dispone que todo inmuebl
qu e c ar e z ca de o t r o d ue ño , pe r t en ec e a l E s t a do . Y c om o l a o cu pa c i ó n s
puede recaer en cosas sin dueño, conforme al artículo
mediante la ocupación no pueden adquirirse bienes raíces.
En lo que se refiere a la accesión no es necesaria la inscripción, porque
la accesión operó como modo de adquirir y a la vez como título que justifica
la adquisición. Cuesta imaginar la adquisición de un inmueble por accesión,
salvo en los casos de cambio de cauce del río o de formación de una nueva
isla. En estos casos la inscripción existente cubre los aumentos que recibe.
En cuanto a la prescripción, ésta actúa como modo de adquirir y, puesto
que solo se puede adquirir por un modo, queda desterrada la necesidad
158
n i n g ú n a c t o d e u s u r p a c i ó n t i e n e
inscrito .
13
Según el artículo 728 hay tres formas de cancelar la inscripción: a.) Por
voluntad de las partes; b.) Por una nueva inscripción en que
inscrito ( o sea, el titular de la inscripción) transfiera su derecho a otro; c.) Por
decreto judicial.
Veamos cada caso.
a.) Cancelación por voluntad de las partes. El artículo 728 se refiere a
la resciliación, esto es, una nueva convención en que las partes de
acuerdo dejan sin efecto un negocio. Ejemplo: Leocadio vende su propiedad
inscrita a Felipe. Se cancela la inscripción que
Posteriormente, arrepentidos el uno y el otro, celebran un nue
( resciliación o mutuo acuerdo) en que dejan sin efec
anterior. Entonces, se cancela la nueva inscripción, - la que favorecía a Felipe
-, y se deja subsistente la antigua ( que favorecía a Leocadio)
practica una nueva inscripción en favor de Leocadio. Esto último parece más
lógico porque mantiene la secuencia de las inscripciones y
estudio de los títulos.
Esta resciliación debe constar en escritura pública única forma que
Conservador inscriba.
La cancelación debe hacerse “materialmente” en el Registro, es decir, el
Conservador debe subinscribir la inscripción que favorecía a Felipe dejando
constancia que dicha inscripción ha sido cancelada en virtud de convención o
resciliación que consta en escritura pública de tal fecha y ante tal notario.
b.) Cancelación por una nueva inscripción en que el poseedor inscrito
transfiere su derecho a otra persona.Ejemplo: el titular de la inscripción es
Mateo. Mateo vende la propiedad inscrita a René. Es o
inscribirá a su nombre y, por lo mismo, se cancelará la i
f a v o r e c í a a M a t e o . E n l a i n s c r i p c i ó n d e M a
Conservador dejará en el margen constancia de estar transferida la propiedad
y citará los datos que permitan ubicar la nueva inscripción que fav
René. Y en esta última, la de René, se señalan los datos nece
ubicar la anterior inscripción, es decir, la de Mateo. Todo ello, como dije, es
13
Sin embargo, debe recordarse lo explicado respecto a las llamadas “inscripciones de papel”. En forma que
debe entenderse que la inscripción que realmente protege es aquella que da cuenta de una verdadera posesión
material, con animus y también corpujs.
160
para que pueda seguirse ordenadamente el estudio de los títulos para lo cual,
además, en cada inscripción se indican los datos sobre la notaría y la fecha de
la escritura pública que sirvió de título a la respectiva inscripc
ordena el artículo 92 del Reglamento del Registro Conservatorio: “poner una
nota de simple referencia”. Y, además, las exigencias descritas resultan de lo
ordenado por el artículo 692.
página 241; tomo 41, sección 1ª, página 275; y tomo 46, sección 1ª, página
311.
Hay que concluir que, aceptada la segunda opinión, la inscripción anterior
se cancela virtualmente cundo se practica la segunda inscripción.
Ya habrán advertido los estudiantes lo relativo que resultó decir en
oportunidad que la inscripción era garantía de la posesión.
A p l i c a c i ó n r e s tLr ai c st i vt ua a. c i ó n q u e r e s u e l v e e l a r t í c u l
excepcional y por eso su aplicación es restrictiva. Esto es, se aplica solo
caso que el artículo 730 menciona y no a otros, por semejantes que sean.
1 2 2c .) C a n c e l a c i ó n d e l a i n s c r i p c i
La tercera forma que el artículo 728 concede como motivo de cancelación de
la inscripción es “el decreto judicial”. Dos observaciones caben al respecto.
La primera es anotar que la resolución judicial que ordene la cancelación
de la inscripción ha de ser una sentencia judicial, senten
ejecutoriada.
La segunda consiste en apreciar que no es suficiente cualquie
para ordenar la cancelación de la inscripción. Desde luego, debe ser un juicio
contradictorio en que el demandado es el poseedor inscrito. El juicio idóneo
para ello es el de reivindicación, como resulta de una sentencia que se publica
en Revista de Derecho y Jurisprudencia, tomo 10, sección 1ª, página 152. En
el tomo 29, sección 1ª, página 273 se lee: “Declarada la nulidad del título que
t e n í a p o r o b j e t o a d q u i r i r l a s p r o p i e d a d e s
cancelación de las inscripciones respectivas.”
A d e m á s d e l j u i c i o d e r e i v i n d i c a c i ó n p u e d
inscripción como resultado de juicios de nulidad o de resolución.
1 2 7 . E f e c t o s q u e p r o d u c e l a i n t e r r u p c i ó n
A r t í c u l o 2 5 0 2 ENl º i 1n ºc. i s o f i n a l d e l a r t í c u l o 2 5 0 2 l o s i
interrupción natural de la pri mera especi e no produce otro efect o que e
descontarse su duración………..”. De este artículo resulta que no se produce
el efecto propio de hacer perder todo el tiempo transcurrido. Solo se pierde el
tiempo de interrupción y cesando ésta, continúa corriendo la misma posesión
interrumpida, no otra nueva.
50. Los plazos además son continuos, o sea se cuentan los domingos y demás
feriados.
En 1969 la ley 16.952 suprimió la distinción entre presente y ausentes.
Antes los ausentes computaban un día por cada dos días.
1º. Los menores; los dementes; los sordos o sordomudos que no pueden
darse a entender claram ente; y todos l os que estén bajo pot est ad patern
bajo tutela o curaduría. No interesa saber si los dementes y l
sordomudos que no pueden darse a entender claramente están declarados en
interdicción. De cualquier manera opera la suspensión en su favor.
2º. La mujer casada en sociedad conyugal mientras dure ésta. La mujer
es plenamente capaz aun cuando esté casada en
conyugal. Pero sucede que el marido administra, además de lo bienes de
sociedad conyugal, los propios de la mujer y ya sabemos de la desconfianza
q u e l a l e y t i e n e r e s p e c t o a l a d i l i g e n c i a
representantes.
Este número trata de la mujer casada en régimen de sociedad conyugal,
en forma que no haysuspensiónen favor de la mujer casada con régimen de
separación de bienes, ni respecto de aquellos que ella administra, como en los
casos de los artículos 150, 166 y 167.
3º. La herencia yacente, conforme al Nº 3º del artículo 2509. El artículo
1240 describe lo que es la herencia yacente, pero podemos resumir q
trata de la herencia no aceptada y a la cual se le designa un curador. Dicho
curador tiene dentro de sus facultades la de interrumpir las prescripciones que
pudieren estar corriendo en contra de algunos bienes de la herenc
como se ve, una vez más el legislador no confía en la dilig
cuidadores.
No está de sobra hacer ver una situación que alguno
artículo 2509 otorga el trato “persona
de ” a la herencia yacente. Ello no es
más que una desafortunada expresión, porque la herenci
persona jurídica y menos natural.
1 4 1 . S o b r e e l l a p s o d e 1 0 aC ñ o sr r. e t a n t o p a r a m u e b l e s c o m o p a r a
i n m u e b l e s . E l p l a z o n o d e b e s e r i n t e r r up m
o rpqiudeo l a s r e g l a s t a n t o d e l a
interrupción natural como interrupción civil son aplicables a ambos tipos de
prescripción adquisitiva.
1 4 4 . L a m e r a t e n e n c i a y l a
Se ha explicado que la mera tenencia no se cambia en posesión por el sol
transcurso del tiempo o por la sola voluntad del mero tenedor. Ahora bien, el
artículo 716 señala que la mera tenencia no se transf
p o r e l s i m p l e l a p s o d e dtei jeamn pd oo , a b i e r t a l a p o s i b i l i d a d d e q
mudanza puede ocurrir por otras razones. Y el propio artículo 916 se encarga
de advertir una excepción: la del artículo 251
precisamente la que estamos estudiando. Precisamente este artículo indica una
circunstancia que permite que la tenencia se
circunstancia aparece del propio artículo 2510
cumplidos los cuales el mero tenedor se convertirá e
consi guient e, en condi ci ones de poder prescri bi r extraordinari ament e. E
son las exigencias:
1º. Que el que se pretende dueño no pueda probar que en los últimos diez
años se haya reconocido expresa o tácitamente su dominio por el que alega la
prescripción;
2º Que el que alega la prescripción pruebe haber poseído sin viol
clandestinidad ni interrupción por el mismo espacio de tiempo.
Si se cumplen las dos condiciones aparece claro que quien empezó como
m e r o t e n ed or ha t e ni d o s i n e m ba r g o l a c os a co m o s e ño r y d ue ñ o, e s t o
como poseedor. Esto hace concluir que la mera tenencia se transfo
posesión no por el transcurso del tiempo, sino por la negligencia de quien era
dueño.
No hay para qué decir que la norma que se comenta rompe todo el sistema
que el Código ha establecido en materia de posesión, aun cuando se funde en
algo que pueda tener algo de sentido común. Juan da en arriendo un tractor a
Feliciano. Feliciano es mero tenedor. Si embargo durante diez años Feliciano
177
14
Crítica a la excepción que contempla la regla 3ª del artículo 2510 se halla en Víctor Vial del Río, “La
tradición y la prescripció como Modos de Adquirir el Dominio en el Códgo Civil Chileno”. Ediciones
Universidad Católica de Chile, Tercera edición. 2009.
178
A r g u m e n t o s da e s le g u n d a o p i n i ó n . L a n u e v a i n s c r i p c i ó n p u e d e e
t o t a l m en t e d e s l i g a da d e l a a n t e r i o r y s e r v i r á p ar a pr e s c r i b i r en c on t r a
anterior posesión inscrita. En el ejemplo propuesto, practicada
inscripción a favor de Nicanor, Nicanor empieza a prescribir contra Ceferino.
Razones.
1.- Si se exigiere que la segunda inscripción emanara o se relacionara con
la primera, se estaría ante una situación ya prevista en el artículo 728.
2.- El artículo 2505 no exige dicha relación con la primera inscripción.
3º L a fr as e“ni em pezar á a cor r er s i no desde i nscr
la i pcinó del se gundo
indica que no cabe la agregación de posesiones. Y no cabe precisamente por
no estar ligada a la posesión anterior.
La jurisprudencia parece haberse uniformada en torno a esta se
opinión.
Segunda controversia que origina el artículo 2505. El artículo 2505, en
cuanto asegura que contra título inscrito no cabe prescripción, ¿se aplica a
l a p r e s c r i p c i ó n o r d i n a r
O, en otras palabras, cuando el artículo 2505 dispone que contra título inscrito
no tendrá lugar la prescripción adquisitiva de bienes raíces, ¿se está refiriendo
a ambos tipos de prescripción o solo a la ordinaria?
Una opinión: El artículo 2505 solo rige para la prescripción adquisitiv
ordinaria. Defendida por el tratadista don Ruperto Bahamonde estima que el
artículo 2505 es aplicable a la prescripción ordinaria solamente. Es decir, se
puede pr esc ri bi r ext raor di nar i am ent e cont r a un t í tul o i ns cr it o s i n ot ro t
inscrito. Lo que significa que si alguien se apodera materia
i n m u e b l e y l o p do us re ae n tdei e z a ñ o s s i n v i o l e n c i a n i c l a n d e s t i n i d
interrupción, lo gana por prescripción extraordinaria.
Su autor esgrime las razones que siguen.
1º El usurpador, lo llamo así para individual
irregular, puesto que el artículo 2510, que rige la prescripción extraordinaria,
no exige título alguno.
2º. La posesión irregular conduce a la prescripción extraordinaria.
3º. Que el hecho de faltar la inscripción a favor del llamado usurpador no
altera lo dicho. En efecto, la inscripción es tradición y para obtener posesión
irregular no es necesaria la tradición conforme resulta del artículo 708.
4º. La doctrina que se explica está de acuerdo con el Me
precede al Código, según el cual todos losderechos deben consolidarse a los
180
treinta años, o diez años según queda ahora este termino después de sucesivas
modificaciones relativas a los plazos.
5º La aceptación de esta doctrina lleva consigo pro
trabaja materialmente la propiedad por sobre quien goza de una inscripción de
papel, desprovista de lo que realmente es la posesión: corpus y animus.
En R eper t ori o ( pági na 225) s e ci t a una s en
expresa: “El artículo 2505 solo se aplica a la prescripción ordinaria; mediante
la extraordinaria se puede prescribir sin inscripción contra título inscrito. La
sentencia es de la Corte de Apelaciones de Santiago y se lee en la Revista de
Derecho y Jurisprudencia tomo 26, sección 2ª, página 1.
A pesar del fallo recién citado esta opinión n
aceptación en nuestros tribunales, aun cuando el decreto ley 2695, a que s
hará referencia más adelante, se funda en semejantes conceptos.
Segunda opinD i óenf.e n d i d a p o r A r t u r o A l e s s a n d r i , C l e m e n t e F a
Alfredo Barros Errázuriz, entre otros, sostiene que la norma del artículo 2505
e s a p l i c a b l e t a n t o a l a p r e s c r i p c i ó n a d q u i s
extraordinaria. Es decir, ni siquiera extraordinariamente se puede presc
contra título inscrito. Se indican las razones que siguen.
Razones:
1.- El artículo 2505 no distingue.
2.- El artículo 2505 está antes que el 2506. Toda vez que el artículo 2506
es el que divide la prescripción entre ordinaria y ex
deducirse que la norma del artículo 2505 se dirig
prescripción.
3. Una razónhistórica. En los proyectos esta disposición estaba colocada
dentro de las normas aplicables a la prescripción ordinaria
cambió de ubicación.
4.- Otra razón de historia. El artículo 2505 fue tomado del código prusiano
y del proyecto de código español de García Goyena. En ambo
inscripción aun para prescribir extraordinariamente.
5.- El argumento en cuanto esta interpretación favorece
inscrito por sobre el que tiene la posesión material es un argumento contra la
ley, pero no contra la interpretación de la ley.
Es ésta la interpretación más generalizada en la jurisprudencia. Por eso
l a C o r t e d e V a l p a r a í s o f a“C
l l óo nqt ur ae t í t u l o i n s c r i t o n o c a b e a l e g a r
excepción de prescripción ordinaria o extraordinaria que no se funda en otra
181
i n s c r i p c”:i ó R
nevista de Derecho y Jurisprudencia, tomo 14, se
p á g i n a 4 3“C 3 .o n t r a l a i n s c r i p c i ó n n o t i e n e l u g a r n i a u n l a p
e x t r a o r d, i ns aa lr vi ao q u e h a tyí at uol tor oi n”,s cs rei nt to e n c i ó l a C o r
Suprema en varias oportunidades, como, por ejemplo se lee en la
recién citada, tomo 5, sección 1ª, página 217.
1 5 1 . L a i n s c r i p c i ó n e n e l C o ns e r v a d o r d e B i e n e s R a í c e s e s r e q u i s
prueba y garantía de la posesión. Afirmación pen
merece una reflexión. Cuando se estudiaron las funciones de la inscripción
se dijo provisoriamente que una de ellas era servir de requisito
garantía de la posesión,. Entonces se prometió volver sobre esto. Estudiada la
prescripción ha llegado al momento de sintetizar algo al respecto
1ª ¿Es requisito para adquirir la posesión? Es exacta esta afirmación solo
en cuanto se refiere a la adquisición mediante un título translaticio de
dominio. Pero la norma y exigencia del artículo 724 resulta inexacta si el
modo de adquirir es la sucesión por causa de muerte, atendido al mérito de los
184
1 5 5 . L a s l i m i t a c i o n e s q u e p u e d eE ls ud formi ri n ei lo d
comprende las más amplias facultades. Recuérde
naturalmente perpetuo y también que sus facultades son las más amplias que
puede concebirse en un derecho real. Estas últimas se resumen diciendo que
189
156. EL FIDEICOMISO.
157. I d e a s g e. nD eo rna lJ ee sr ó n i m o d e j a e n t e s t a m e n t
“El Copihue” a don Policarpo, pero don Policarpo tendrá que entregarlo a don
Andrés cuando este último se reciba de abogado. He ahí un fideicomiso.
En el ejemplo propuesto don Jerónimo toma el nombre de constituyente;
don Policarpo el de propietario fiduciario; y don Andrés el de fideicomisario.
La titulación de Andrés constituye la condición que podrá fin al derecho de
Policarpo. Constituyente, propietario fiduciario y constituyente son l
personajes que participan en esta figura llamada fideicomiso.
Como concepto podemos decir que fideicomiso es la constitución de la
propiedad fiduciaria; y propiedad fiduciaria es la que está sujeta al gravamen
190
de pasar a otra persona por el hecho de verificarse una condición. Tal expresa
el artículo 733.
El fideicomiso no es un derecho real y su aplicación está en decadencia,
como advierte el profesor Pescio, pero es común encontrarla formando parte
de otras instit uciones jur ídi cas, pref erent ement e en m at eria de asignaci
testamentarias. Incluso el numerado 8) del artículo 86 de la Ley General de
Bancos contempla la facultad de administrar los bienes
fideicomiso.
Restitución es la translación de la
propiedad a la persona en cuyo favor
se ha constituido el fideicomiso en favor de la persona. Lo recién dicho consta
en el artículo 733.
Constituyente es la persona que crea o instituye p
fideicomiso. El mismo constituyente puede ser fiduciario al mismo tiempo y
de ahí que el artículo 748 dispone que cuando “no se designa expresamente el
fiduciario, o cuando falte por cualquiera causa el
e s t a n d o t o d a v í a p e n d i e n t e l a c o n d i c i ó n , g o
propiedad el mismo constituyente, o sus herederos.”
d . )D e r e c h o d e a c r e c e r c u a n d o f a l t a e l f i d u c i a r
Se pueden presentar las siguientes situaciones.
1.- Falta el fiduciario antes que se le defiera el derecho. Como suced
cuando el fiduciario fallece antes que el testa
c o n s t i t u y e n t e h a d e s i g n a
propietario fiduciario.
Si no hay substituto o si éste falta al momento de deferirse el derecho, el
constituyente o sus herederos serán propietarios fiduciarios con
dispuesto en el artículo 748.
Si son varios los fiduciarios y falta uno de ellos, los otros gozarán de
derecho de acrecer, esto es, la parte del ausente se reparte entre los dem
E s t o , s i e m p r e q u e e l c o n s t i t u y e n t e n o h acyuao tf aiaj acdaod a u n o d e l o s
fiduciarios o substitutos en su caso. En términos muy generales, acrecer es
juntar, aumentar lo propio con lo que corresponde a otro. Este derecho s
reglamenta en los artículos 1147 al 1155 y a propósito de las asignacione
testamentarias.
2.- El fiduciario falta después de habérsele deferido el derecho y antes de
cumplirse la condición. Como si el testador deja una parcela a Misael, pero
bajo la condición de pasarla a Rosamel cuando éste se reciba de abo
Misael recibe la casa y es propietario fiduciario. Antes que Rosamel se reciba
de abogado muere Misael. ¿Qué pasa con la parcela? La pregunta la contesta
el artículo 751 al disponer que la propiedad fiduciaria se transmite por causa
de muerte. De manera que la tal parcela pasa a los herederos de Misael, pero
siempre sujeta a la condición de restitución cumplida que sea la cond
establecida.
pero se espera que exista. Ahora bien, en todo fideicomiso hay una condición
i m p u e s t a p o r e l a r t í c u l o “E
7 3l 8f:i d e i c o m i s o s u p o n e s i e m p r e l a c o n d i c i ó n
expresa o tácita de existir el fideicomisario o su substituto a la época de
restitución”. O sea, al cumplirse la condición. Se verá oportunamente que la
condición debe cumplirse en el plazo de cinco años c
delación de la propiedad fiduciaria, conforme al artículo 739.
Por supuesto, si el fideicomisario no existe al cumplirse el p
cinco años o no existe al cumplirse la condición, la propiedad se consolida en
el fiduciario.
1 6 7 . L o s s u b s St io tnu tp oe sr .s o n a s d e s i g n a d a s e x p r e s a m
constituyente para reemplazar al fideicomisario en caso de fallecer éste antes
de cumplirse la condición. El substituto adquiere solo en
fideicomisario fallezca o falte antes de cumplirse la condición. Ya se sabe que
una vez cumplida la condición y fallecido el fideico
h e r e d e r o s d e é s t e e n l a p r
expectativa del substituto.
1 7 0 . P l a z o p a r a e l c u m p l i m i e n t o d e El as co ob nv d
i oi cqi óu n
e .e l
propietario fiduciario no puede pasar toda su vida esperando que acaezca el
hecho que pondrá fin a su propiedad.
E l a r t í c u l o 7 3 9 e s “T t aobdl ae cceo nq du ie c i ó n d e q u e d e
restitución de un fideicomiso, y que tarde más de cinco años en cumplirse, se
tendrá por fallida, a menos que la muerte del fiduciario sea el evento de que
dependa la restitución. Estos cinco años se contarán desde la delación de l
propiedad fiduciaria”. ((Sobre la expresión “delación” ver el artículo 965).
Los artículos 962 y 1087 también fijan plazos para el cumplim
condiciones, pero en 10 años el primero y 30 años el segundo.
Por razones de carácter ético el plazo de cinc
excepción que el evento consista en la muerte del fiduciario.
196
El artículo 739 contiene una regla que tiende a ser de aplicación gene
puesto que el Código no contempla un plazo aplicable a toda
Disputa el carácter de aplicación general la norma del inciso 3º del artícul
962, la que fija en diez años el plazo de espera para que
condición de existir un asignatario hereditario. Pero parece preferible aceptar
los cinco años, toda vez que ese plazo está señalado en
institución jurídica que, como se ha visto, gira en torno a las condiciones.
De manera que si la condición tarda más de cinco años en cumplirse, y
siempre que no consista en la muerte del fiduciario, se tiene por fallida y la
propiedad se consolida en el fiduciario.
En l a r evi s ta de Der echo y Jur i spr udenci a s e publ i can s ent enci as q
declaran que el plazo de cinco años que establece el artíc
ap l i ca c i ó ge
n ne r a l : t om o 15 , s ec c i ón 1 ª , p ág i n a 60 1 y t o m o 5 0, s e cc i ón 1
página 491.
1 . T- i e n e d e r e c h o a e n t a b l a r a c c i ó
expresamente lo señala el artículo 893.
2.- Puede enajenar entre vivos y transmitir por causa
propiedad fiduciaria. Pero en todo caso con el cargo de mantenerla indivisa, y
sujeta al gravamen de restitución bajo las mismas condiciones de antes. Así
lo autoriza el artículo 751.
Pero el mismo artículo 751 señala los casos de excep
propiedad fiduciaria no es susceptible de enajenación o transmisión. Prescribe
el citado inciso 2º: “No será, sin embargo, enajenable entre vivos, cuando el
constituyente haya prohibido la enajenación, ni transmisible por testamento o
abintestato, cuando el día prefijado parta la restitución es el de la muerte del
fiduciario, y en este segundo caso si el fiduciario la enajena en vi
siempre su muerte la que determine el día de la restitución”.
Está claro que la propiedad fiduciaria no puede transmitirse si se ha fijado
para la restitución el día de la muerte del fiduciario. Esto, porque, muerto el
fiduciario, la propiedad pasa al fideicomisario y por consiguiente nada podrá
el fiduciario transmitir.
3º.- El fiduciario puede gravar la propiedad. Pero el artículo
protección del fideicomisario, exige autorizac
conocimiento de causa y con audiencia de las personas que señala el artículo
761, entre las cuales se halla el propio fideicomisario.
Del artículo 757 resulta que si se ha gravado la propiedad sin cumpl
con dichas exigencias, el gravamen resultará inoponible al fideicomisario.
4º. Derecho a los frutos. Tal resulta por ser propietario y además porque el
usufructuario es dueño de los frutos conforme a los artículos
artículos a los que se remite el artículo 764. Lo
percepción; los civiles, día a día.
5º. Facultades de administración. El artículo 758 otorga al fid
libre administración de las especies comprendidas en el fideicomiso e incluso
podrá mudar su forma, pero conservando su integridad y valor.
Obligaciones del propietario fiduciario.
1.- No está obligado a rendir caución de conservación y restitución salvo
que el juez lo ordene como providencia conservatoria
fideicomisario o las personas designadas en el artículo 761 lo exijan.
Ahora bien, el artículo 755 no lo dispensa de la obligación de la facción de
inventario, por lo que se cree que debe proceder a su facción.
199
177. EL USUFRUCTO.
17 9. C on ce p t o d e us u f ruDe
ct ol . a r t í cu l o 7 64 : “E s un d er e c ho r e a l qu e
consiste en la facultad de gozar de una cosa con cargo de conservar su forma
y sustancia y de restituirla a su dueño, si la cosa no es fungible, o con cargo
de devolver igual cantidad y calidad del mismo género o de pagar su valor, si
la cosa es fungible”.
Ustedes pueden advertir que el mismo nombre
concepto, porque “usu” evoca la facultad de usar y “fructo” la relativa a los
frutos.
1 8 1 . F o r m a s d e c o n s t i t u i r e Sl ouns ut rf er su:c ta o. -. ) p o r l e y ; b ) p
voluntad del dueño de la cosa; c.) por prescripción. Véase el artículo 766 y
entiéndase que los números 2º y 3º de dicho artículo corresponden a lo que
denomino “voluntad del dueño de la cosa”.
Constitución por ley.Son los llamados “usufructos legales”. El artículo
252 contempla el derecho de usufructo del padre que tiene la patria potestad
sobre los bienes del hijo. Véase la parte final de este artículo que recoge l
antigua denominación de “usufructo”, reemplazado ahora por el de “derecho
legal de goce”. (Reemplazo justificado, porque en la realidad el derecho que
consagra el artículo 252 no es un usufructo en el sentido técnico del instituto.
Tal como el que mencionaremos a continuación, tiene dependencia co
determinado estado civil y por consiguiente no pueden
carece de derecho de persecución y son inembargables en el sentido que los
acreedores no pueden en esta clase de usufructo subr
aprovecharse de los frutos, facultad que tienen en el usufructo ordinario.)
El otro usufructo de origen legal es el que tiene
administrador de la sociedad conyugal sobre los bienes propios de la mujer,
según el artículo 1749 y Nº 2º del artículo 1725.
203
P o r v o l u n t a d d e l d u e ñ o d e El al pc roos pai. e t a r i o t i e n e l a f a c u l t a d
disponer y por consiguiente puede desprenderse de las dos fac
dominio que pasan al usufructuario.
La constitución puede ser mediante un contrato oneroso o mediante una
donación. Es frecuente que su constitución sea por medio de un testamento,
es decir, por causa de muerte.
E n am bo s c a s os l a co ns t i t uc i ó n pu ed e r e ve s t i r d os f o r m a s . E n un a
propietario cede los derechos a los frutos y uso a un tercero. En esta situación
el nudo propietario es el constituyente, o lo s
constitución lo ha sido por testamento. En la otra se designa un usufructuario
y a una tercera persona como nudo propietario. La primera forma se llama
constitución por “creación con retención”; la segundo “creación directa”.
El usufructo puede adquirirse por prescripción.Conforme lo disponen los
artículos 766 y 2498 el usufructo puede adquirirse por el modo prescripción.
Tal ocurrirá cuando se constituye el usufructo sobre una cosa ajena. En tales
co nd i c i o ne s es ev i d e nt e qu e el s u pu e s t o us u f r u ct ua r i o n o l o e s e n r e a l i
porque si el constituyente no era dueño, evidentemente no podía ce
facultades propias del usufructo. Se trata, en suma, de
putativo que no ha adquirido el usufructo por transfere
adquirirlo por el modo prescripción “de la misma manera que el dominio
como reza el artículo 2512.
1 8 2 . L i m i t a c i o n e s e n l a c o n s t i t u c Ai ón no t do e l a us s qu uf er u
siguen.
a.) No se puede constituir un usufructo sujeto a plazo o condición que
suspenda su ejercicio. Si así ocurriere, no tendrá valor alguno, conforme al
ar tí c ulo 768 i nc is o 1º. E l i nci so 2º cont em pl
prohi bi ci ón: “C on t odo, si el us ufr uct o se const i t uyer e por te st am ent o,
condición se hubiere cumplido, o el plazo hubie
fallecimiento del testador, valdrá el usufructo”.
La prohibición anotada tiene como objeto evitar usufructos suces
simulados mediante un plazo o condición en su ejercicio.
b.) El usufructo debe constituirse por tiempo determinado o por toda la
vida del usufructuario. Si no se fija tiempo o condición que determ
duración se entenderá constituido por toda la vida del us
204
184. Efectos del usufructo, esto es, derechos y obligaciones que genera.
Primero, derechos del usufructuario. Lo derechos del usufructuario pueden
condensarse en dos; derecho de usar la cosa y derecho de aprovechar los
frutos de la cosa.
1 8 7 . O t r o d e r e c h o d e l u s u f r u c t u a r i o
El usufructuario tiene en general la facultad de dispon
usufructo, esto es, puede donarlo, enajenarlo o arrendarlo. Todo esto siempre
que no se le haya prohibido, porque en tal caso, y si cont raviene, perder
usufructo en los términos del artículo 793 inciso final.
El artículo 793, que consagra la facultad de disposición, previ
embargo que “Cedido el usufructo a un tercero, el cedente permanece siempre
directamente responsable al propietario”
Del artículo 794 se desprende que la muerte del usufruc
término al usufructo, sin importar para tales efectos el f
tercero arrendatario o adquirente del usufructo. Fallecido el usufructuario, y
si el usufructo está en manos de un tercero, el nudo propietario pr
como lo indica el inciso 2º del artículo 794. Su inciso 1º precisa que en tales
circunstancias, los contratos celebrados por el tercero se resolverán al término
del usufructo.
208
Por eso algún autor ( Alfredo Barros Errázuriz) opina que más que ceder
el usufructo y puesto que sigue siendo responsable y con calidad de ponerle
término a su fallecimiento, el usufructuario en ver
usufructo.
Ya dije que a la muerte del usufructuario, o al cumplirse la
establecida, termina el usufructo y e arrendatario
usufructuario había cedido el usufructo, deberá restituir la cosa cualquiera sea
el plazo de que gozaba. Pero el inciso 2º del artículo 794 preceptúa que en tal
caso el propietario concederá al propietario el tiempo que necesite
próxima percepción de frutos y “por ese tiempo quedará
usufructuario en el contrato”.
En fin, el artículo 792 inciso final concede otro derecho al usufructuario.
Sucede que el propietario había dado en arriendo la cosa a un ter
usufructuario debe respetar el arrendamiento, pero tiene derecho a percibir las
rentas de arrendamiento desde que principie el usufructo.
6. Debe restituir al nudo propietario la cosa objeto del usufructo una vez
terminado el usufructo.
1 9 6 . G e n e r a l i d a d e s y d e f i n. iLc ai ós ns e r v i d u m b r e s l i m i t a n e l d o m i n i o
que se ejerce sobre un predio por una parte, pero por la otra aume
derecho de propiedad de otro predio. Las servidumbres son carga
imponen a un predio en beneficio de otro predio y su denominación tiene su
origen en el derecho antiguo por analogía con la esclavitud de las personas.
Justamente, para erradicar cualquiera semejanza, las legislaciones se refieren
214
a ella como “servidumbre predial”, dejando en claro que quien debe soportar
una carga es un predio y no un ser humano. Nuestro Código usa la expresión
“servidumbre predial” en su artículo 820.
El citado artículo 820 las define: “Servidumbre predial, o s
servidumbre, es un gravamen impuesto sobre un predio en utilidad de
predio de distinto dueño”.
2 0 0 . F o r m a d e e j e r c e r e l d e r e c h o q u e o t
El profesor Peñailillo ( página 489 de su texto citado, edición
cuenta que para determinar la extensión de los derechos y obligaciones que
emanan de una servidumbre hay que atenerse a la fuente que le dio origen
esto es, a la convención o contrato si es voluntar
servidumbre es natural o legal. Agrega que las varias
Código que reglan esta materia están inspiradas en el comportamiento que el
derecho romano exigía en situaciones semejantes, es deci
predio dominante debe ejercer sus derechos procurando causar el menor daño
al predio sirviente. A su vez, el dueño del predio sirviente debe corresponder
permitiendo y dando facilidades para que la servidumbre preste la u
para la cual fue constituida. Tales son los principios que i
artículos 827, 828, 829 y 830.
2 0 2 . S e r v i d u m b r e s l e g aCl oe ns .f o r m e a l a r t í c u l o 8 3 1 s o n l a s i m p u e s t a s
por la ley. El artículo 839 las clasifica en relativas al uso público y l
utilidad de los particulares. Este mismo artículo prescribe que las relativas al
uso público recaen en el uso de las riberas en cuanto fuere necesario para la
navegación y las demás determinadas por los reglament
respectivas.
a.- Servidumbres de utilidad pública. El propio artículo 839 señala que esta
servidumbre se refiere al uso de las riberas “en cuanto nece
navegación o flote, que se regirá por el Código de Aguas”. En el
i n c i s o a d v i e r t e q u e h a y o t r a s s e r v i d u m b r e s
reglamentos u ordenanzas respectivas.
b. - S e r v i d u m b r e s d e u t i l i d a d pErli vaar tdíac.u l o 8 4 1 d i s p o n e q u e “ L a s
servidumbres legales de la segunda especie son asimismo determinadas po
las ordenanzas de policía rural. Aquí se trata espe
demarcación, cerramiento, tránsito, medianería, acueducto y v
“policía rural” es una reminiscencia de una época en que estas servidumbres
tenían aplicación casi exclusiva en zonas campestres, pero hoy el crecimiento
urbano les ha otorgado una norme importancia en la vida ciudadana. Tanto
así que muchas de estas servidumbres han encontrado reglam
leyes especiales. Les menciono, como ejemplos, el Código de Agu
218
2 0 3S . e r v i d u m b r e d e d e m a r c a c i ó n . S u
corresponde a una servidumbre. La demarcación es el acto de fijación de
la l ínea de separaci ón entre dos predi os coli ndantes de dist intos dueños
artículo 842 faculta al dueño de un predio para exigir a los respectivos dueños
que concurran a dicha actuación, “haciéndose la demarcación a
comunes”.
Es discutible que la demarcación constituya una servidumbre,
sus caracteres no se adaptan a los que hemos visto. Pero como el Código la
trata como servidumbre, nos vemos obligados a reconocerle esa naturalez
Con todo, veamos algunas condiciones que presenta la demarcación y que son
ajenas a una servidumbre.
a.- No existe predio sirviente ni predio dominante;
b.- La relación se configura entre el dueño de uno y otro predio;
c.,- No hay alteración ni desmembramiento de alguno de los predios; aun
configurada la llamada servidumbre, cada predio mantiene su integridad,
La demarcación más bien debe considerarse como una f
otorga el dominio, inherente a él. Esto último ha permitido negar la petición
de prescripción de la acción de demarcación, porque se ha sos
mientras exista dominio, existe el derecho a demarcar. ( Revista d Derecho y
Jurisprudencia, tomo 86, sección 2ª, página 21).
En cuanto a la naturaleza jurídica de la demarcación pueden ustedes leer
la sentencia de la Corte Suprema que se publica en Revista de Der
Jurisprudencia, tomo 52, sección 1ª, página 36.
Desde el punto de vista pasivo la demarcación constituye un gravamen
originado por una de las tantas obligaciones que nacen de la vecindad.
La demarcación empieza fijándose la línea divisoria entre los p
vecinos. Continúa implantando hitos o señales físicas que indiquen el curso
de la línea divisoria.
Esta especie de servidumbre es muy útil en nuestro país considerando que
las inscripciones en el Conservador de Bienes Raíces no exigen plan
219
i n s c r i p c i ó n d e d o m i n i o d e c a d a p r e d i o , p e
adquirentes tomen conocimiento de los límites respectivos. Así lo aconseja, y
con toda razón, el profesor Peñailillo.
Sin perjuicio, no habiendo acuerdo, el colindante
acudir a los tribunales intentando la acción de demarcación.
Incluso, si no hay acuerdo entre los vecinos, ambos pueden recurrir a
tribunal para que sea éste quien fije los deslindes.
Una vez fijada la línea divisoria, el juez ordenará que h
señales físicas marquen la línea de deslinde de las propiedades colindantes en
disputa, según la forma y sanciones que indican los artículos 842 y 843.
El sujeto activo en la demarcación. El artículo 842 otorga la acción al
dueño de un predio. Conforme con la presunción del inciso 2º del artícu
700 basta con probar que se es poseedor. También se acepta que el dueño del
derecho real de usufructo intente la acción. Pero debe rec
resuelto respecto al usufructuario no empece al nudo propietario, tanto por la
norma del inciso 2º del artículo 3º, como para evitar una colusión en
colindante y el usufructuario, colusión que perjudique al nudo pro
Por eso, si los deslindes que se fijaron con el usufructuario no satisfacen
propietario, terminado el usufructo, este último podrá intentar nuevamente la
acción.
S o b r e l a a c c i ó n d e d e m a rac.a- cEi ós ni.m p r e s c r i p t i b l e , c o m o y a s
anticipó. Como en realidad es una facultad del dominio, la acción p
mientras subsista el dominio. b.- No se extingue por e
sentencia que se dicte es declarativa, porque constata una situación y no crea
una nueva. d.- Desde el punto de vista procesal, la acción se tramita en juicio
sumario, según el artículo 680 Nº 2º del Código respectivo.
2 0 4 . S e r v i d u m b r e d e c e r r a mLi oe n
s taor.t í c u l o s 8 4 4 y 8 4 6 o t o r g a n a l
dueño de un predio el derecho a cerrarlo y de obligar al vecino a contribuir en
el levantamiento de las cercas. El derecho del dueño para pedir el cerramiento
es imprescriptible.
El cerramiento es una consecuencia de la demarcación,
existiendo certeza en los límites podrán levantarse las murallas o vallas que
impliquen el cierro.
El artículo 845 se pone en el caso que el dueño proceda a levantar una
pared o cerca en su propio terreno, caso en el cual el vecino no podrá servirse
221
de esa pared o cerco. A no ser que haya adquirido el derecho por título o por
prescripción de 5 años. “contados como para la adquisición del dominio”
Pero el artículo 846 inciso final dispone que si el vecino contribuyó, sea
de acuerdo entre ambos, o por orden del juez, la cerca divisori
carácter de medianera.
N a t u r a l e z aT i je un re í dt io cd ao . s l o s e l e m e n t o
servidumbre: un predio que obtiene el beneficio y o
gravamen. El primero, dominante; el segundo, sirviente.
C a r a c t e r í s t i1ªc .a-sE. s u n a s e r v i d u m b r e p o s i t i v a , p o r q u e e l d u e
predio sirviente debe dejar hacer al dueño del predio dominante.
2ª.- Es discontinua, porque su ejercicio requiere un hecho
hombre. Por eso no podrá nunca adquirirse por prescripción según el artículo
882. Por ser discontinua el mismo artículo ordena que debe constituirse por
medio de un título.
3ª.-Puede ser aparente o inaparente. Recordar el artículo 824 en cuanto
considera aparente a la que está continuamente a la vista, e inaparente a la que
no se conoce por una señal exterior.
Requisitos para su establecimiento.
1.- Que el predio que pretende la servidumbre de tránsito esté totalmente
desprovisto de comunicación con el camino público. La falta de comunicación
debe ser absoluta y no es suficiente decir que se desea u
cómodo. Hay variadas sentencias acerca de este requisito, va
citadas en Repertorio citado, páginas 295, 296 y 297.
2.- Que la comunicación con el camino público sea indispensable para el
beneficio y cultivo del predio.
3- Que previamente se indemnice al dueño del predio sirviente. Sobre
último requisito El artículo 848 dispone que si las partes no están de acuerdo,
se reglará por medio de peritos tanto el monto de la indemnización como el
ejercicio e la servidumbre.
S e r v i d u m b r e d e p l eE nl o a dr te ír ce uc l ho o .8 5 0 n o r e q u i e
explicación: “Si se vende o permuta alguna parte de un
adjudicado a cualquiera de los que lo poseían proindiviso, y en consecuencia
esta parte viene a quedar separada del camino, se entenderá con
favor de ella una servidumbre de tránsito, sin indemnización alguna”.
Petición de exoneración. Puede ocurrir que una servidumbre constituida no
llegue a ser indispensable para la explotación del predio. El
autoriza al dueño del predio sirviente para pedir que se le e
servidumbre,”restituyendo lo que, al establecerse ésta, se le hubiere paga
por el valor del terreno”.
P r o h i b i c i oPnoe rs .s u p r o p i a n a t u r a l e z a l a s p r o h i b i c i o n e s c
impedir la existencia de balcones, miradores, ventanas o azoteas q
vista a las habitaciones, patios o corrales de un edificio. El mismo artículo 878
establece la forma y distancia en que se permitirá la exist
miradores.
2 1 5 . I d e a s g e n eLr aa laecsc. i ó n r e i v i n d i c a t o r i a , o a c c i ó n d e
protege la propiedad, no en sí misma, sino en cuanto se le ha privado de la
posesión. El dominio y la posesión normalmente deben estar unidos. Quie
tiene dominio tiene derecho a ser poseedor. Es el “jus possidendi” o derecho a
poseer. Por eso, quien priva al dominio de la posesión lo despoja d
importante de sus atributos y por consiguiente arremete y lesiona en lo más
íntimo al derecho de propiedad. La acción reivindicatoria tiene como objetivo
recuperar la posesión perdida para que sea reintegrada al dominio que le e
propio.
Se ha dicho en su oportunidad que una de las ventajas que t
posesión es la facultad de entablar acciones encaminadas a prote
recuperarla. Son las llamadas “acciones posesorias”, cuya finalidad, además,
es evitar que quien ha sido privado de la posesión tienda a hacerse justicia por
sí mismo.
Estas son las acciones que empezamos a estudiar.
2 1 7D. e f i n i c i ó n . R aEz l ó na r dt íe c us el or . 8 8 “L 9 al a d e
reivindicación o acción de dominio es la que tiene el dueño de u
singular de que no está en posesión para que el pos
condenado a restituirla”.
La definición es clara en cuanto la acción no tiene como objetivo recuperar
el dominio. Al contrario, de la definición resulta, y así se insistirá más tarde,
que uno de los requisitos de la acción es ser dueño. Pero a ese dominio le falta
la posesión y bien se comprenderá que el dominio sin posesión se convierte en
un derecho vacío, sin sentido. El dominio tiene derecho a la posesión
230
15
“Jus possesioni” es la posesión autónoma, separada del dominio, como ocurre en el caso del artículo 683.
231
89 1 an t i ci pa qu e el d er ec ho r e a l de h e r en ci a t i e ne u na a c ci ón p r op i a : l
petición de herencia que se reglamenta en los artículos 1264 y siguientes.
Un ejemplo de la acción dirigida a proteger un derecho real d
dominio: una vieja sentencia trata de un habitador, esto es, del
derecho real de habitación ( artículo 811 inciso 2º) que ejerc
reivindicatoria para obtener la entrega una alcoba o cuarto comprendido en su
derecho: Gaceta de los Tribunales de 1903, tomo I, Nº 1
Repertorio, página 346 de su tomo III.
c.- Se puede reivindi car una cuot a determi nada proi ndiviso de una co
singular. Debe tratarse de una cuota determinada, como Nicanor que tiene la
p r o p i e d a d d e l a t e r c e r a p a r t e d e “E
l flu ns aduoc e l l o r”.óPnu e s b i e n , s i s u s
otros dos comuneros enajenan todo el fundo, Nicanor podrá ejercer la acción
reivindicatoria para que el comprador le restituya la posesión de la
parte que le corresponde.
Siguiendo el ejemplo, Nicanor gana el juicio y obtiene la reivindicación de
su cuota. ¿Qué efecto se produce? Hay que aceptar que la restitución física de
la cuota es imposible. No se ve como el comprador va a sacar la tercera parte
del fundo y se la va a entregar al reivindicador. Una sentencia de la Corte de
Concepción ( Revista de Derecho y Jurisprudencia, tomo 8
página 1669 resuelve que en la demanda el reivindicante deberá pedir que se
declare que es coposeedor con el demandado y por consiguiente éste
permitirle el uso y goce de la cosa a prorrata de su cuota.
Determinación del bien objeto de la reivindicación. Es necesario insistir en
que la exigencia de la singularidad conlleva a la determinación del bien que se
pretende reivindicar. Hay numerosas sentencias que así lo exigen, las más de
las vece para rechazar una acción reivindicatoria en que no se ha tendido el
cu i d a do d e f i j ar e xa ct am e nt e l a s i ng ul ar i da d de l bi e n ob j e t o d el j ui c i o
ej empl o, por tal circunstancia se invali dó de ofi cio una sent encia según
1992-2005 de la Corte Suprema y se rechazó una demanda, según consta en
rol 3618- 2003 de la Corte de Apelaciones de Santiago.
m a t e r i a l d e l p r e d i o . L a a c c i ó n f u e d i
posesión material por más de 30 años.
c.- Si el dominio del reivindicante radica en un modo or
adquirir, bastará que se prueben los hechos que lo cons
manera, deberán probarse los hechos que originaron
accesión, según el caso. Y, por cierto, como lo hemos visto, la existencia de la
prescripci ón adqui sit iva, puesto que es un t í
originario.
d.- El Estado no necesita probar el dominio atento a la norma del artículo
590. Pero necesita probar que los terrenos carecen de otro dueño,
co ns i de r a ci ón a l t e x t o de l a p r es u nc i ón d e do m i ni o q ue l e f a vo r e ce . ( C
Suprema, Revista de Derecho, tomo 66, sección 1ª, página 90)
e.- La carga de la prueba corresponde al demandante. Toda ve
calidad de dueño es un requisito para entablar la acción, y de conformidad con
la regla del artículo 1698, se llega a dicha conclusión. Au
evidente la Corte de Apelaciones de Coyhaique hubo de pronunciarse sobre
ello, según rol 159.-2007 de ese tribunal.
A propósito de la necesidad de ser dueño, en un juicio incoado en una
ciudad de la región un señor “A” demandó de reivindicación a “B”. Sostuvo
en su demanda que la inscripción que favorecía a “B” había sido obtenida por
un titulo ganado con malas artes. Obvio que “A” perdió el juicio, porque no
era dueño del inmueble en cuestión y, como ustedes saben, el ejercicio de la
acción reivindicatoria exige ser dueño, esto es, tener el dominio sin posesión.
“ A ” d e b i ó d e m a n d a r d e n u l i d a d d e l c o n
“B”.Declarado nulo ese contrato, “A” es reconocido como dueño
e n t o n c e s e s t a r á e n c o n d i c i o n e
Oportunamente veremos que la acción de nulidad del tít
reivindicatoria deben entablarse conjuntamente.
v e r d a d e r o d u e ñ o , n i c o n t r a e l q
derecho”.
Los requisitos para poder entablar la acción publiciana s
quien la intente pruebe haber estado en posesión regular de la cosa y, b.- Que
la acción se intente contra un poseedor que tenga un derecho más débil, sea
porque su posesión no procede del verdadero dueño, ni contra quie
igual derecho, o sea porque el actual poseedor tiene mejor derecho.
En resumen, el poseedor regular puede intentar la acción reivindicatoria
en c o nt r a de q ui e n t e ng a un d er ec ho m ás dé b i l y e n t a l s i t u a ci ón l a ac c
reivindicatoria es conocida como acción publiciana.
La acción que comento presenta un problema. Con
c u á n d o e l p o “h s ea el dl ao br a s e n e l c a s o d e p o d e
prescripción”.
Primera opinión. El poseedor regular podrá intentar la acción publi
cuando se ha cumplido el plazo de prescripción, pero no
sentenciajudicialque así lo declare. Recuerden que para que la prescripción
opere y produzca efectos debe ser alegada, esto es, declarada. S
profesor Alessandri que si quien está poseyendo y, antes de cumplirse el plazo
de prescripción, es desposeído, hay interrupción de la poses
perder todo el tiempo anterior de posesión. Siendo así, el poseedor ha dejado
de ser poseedor y por consiguiente la acción reivindicatori
publiciana le es negada.
En resumen, Alessandri sostiene que para ejercer esta acción el poseedor
debe haber cumplido el plazo legal y faltar solamente la
declare la prescripción.
Segunda opinión. El profesor Somarriva sostiene que esta institución fue
tomada del derecho romano y allí se la daba al poseedor aun
hubiere cumplido el plazo de prescripción. Esgrime otra razón: el artículo 894
expresa“en el caso de poder “ganar” por prescripción ”, en vez decir“ en el
caso de poder “alegar” la prescripción”.
Una clara exposición sobre la procedencia de la acción reivindicatoria en
su modo publiciana y del concepto“mejor de derecho
”, puede el estudiante
encontrar en la sentencia de la Corte Suprema que se publica en Revista de
Derecho y Jurisprudencia, tomo 47, sección 1ª, página 169.
235
artículos 896 y 897 establecen algunas medidas que tienen a que la demanda
se dirija con precisión en contra del poseedor.
El artículo 896 obliga al mero tenedor a declarar el nombre y residencia
de la personan a cuyo nombre la tiene. El artículo 897 obliga a pa
perjuicios causados a quien de mala fe se da por poseedor de la cosa que se
reivindica. Estos perjuicios consistirán en los gas
siguiendo un juicio que le resultó inútil.
b.-) La acción reivindicatoria también puede dirigirse en contra de quien
poseía de buena fe y dejó de poseer, siempre que por la enajenación se haya
h e c h o i m p o s i db il fe í coli al p e r s e c u c i ó n d e l a c o s a . E n t a l s i t u
poseedor que enajenó la cosa queda obligado a restituir al verdadero dueño el
precio que recibió por ella. Pero, si el poseedor enajena la cosa de mala fe
con ánimo de eludir los efectos de la acción reivindicatoria, deberá restitui
tanto el precio como, además, pagar los perjuicios causados.
Como se observa, cuando el poseedor ha enajenado la cosa, el objeto de
la acción reivindicatoria cambia. Ya no es la cosa misma, sino obtener el pago
del precio y, si cabe, la indemnización de perjuicios.
Una vez que el demandante recibe el precio de parte de quien dejó de
poseer por haber enajenado la cosa, queda confirmada la enajenación hecha
al actual poseedor, quien queda como dueño de ella.
Lo recién explicado aparece dispuesto en el artículo 898.
c.- Conforme al artículo 900 la acción reivindicatoria tamb
dirigirse contra el que poseía de mala fe y por hecho o culpa suya ha dejado
de poseer. Si así fuere se intentará la acción reivindicatoria en su contra como
si actualmente estuviere poseyendo. También en tal caso cambia el objeto de
la acción, porque el demandante no persigue la restitución de la cosa toda vez
que el demandado ya no la tiene, sino que persigue su valor y el monto d
todas prestaciones a que queda obligado el poseedor de mala fe.
Pero no hay inconvenientes para que el reivindicador prefiera recuperar
la cosa misma y entonces deberá dirigir la acción contra el actual poseed
para efectos de recuperarla, pudiendo cobrar al poseedor de mala fe que dejó
de poseer todas las prestaciones que debe en razón de fr
deterioros y expensas.
Estos mismos derechos y acciones proceden contra el poseedor de buena
fe que durante el juicio, y por su culpa, se ha puesto en la imposibilidad de
238
e . A
) c c i ó n r e i v i n d i c a t o r i a c o n t r a l
El artículo 899 dice: “La acción de dominio no se dirige contra un heredero
sino por la parte que posea en la cosa; pero las prestaciones a qu
obligado el poseedor por razón de los frutos o de los deterioros que le sean
i m p u t a b l e s , p a s a n a l o s h e r e d e r o s d e é s t e
hereditarias”.
De esta norma hay que precisar que los herederos del poseedor suceden
a su causante en todos sus derechos y obligaciones transmisibles
1097). Entonces, tendrán que restituir aquello que el causante poseía y que se
v i o o b l i g a d o a e n t r e g a r . L a o b l
aspectos: restituir la posesión y pagar los diferentes rubros que señala la ley.
Los herederos quedan, ent onces, obl igado a restit ui r l a cosa. Es esta
o b l i g a c i ó n i n d i v i s i b l
“Si la deuda es de una especie o cuerpo cierto, aquel de los codeudores que lo
posee es obligado a entregarlo”. Por consiguiente, la acción reivindicatoria se
dirigirá contra el que posea la cosa, y si son varios los que la poseen
acción se dirigirá contra esos varios, pero señalando la cuota que a cada
exige.
Pero en cuanto a las prestaciones monetarias en raz
deterioros, cada heredero responderá a prorrata de su cuota hered
artículo 899 en esta parte está de acuerdo a lo prescrito en el artículo 1354.
2 3 Id4 e. a s g e n e r a l e s .
posesorias. Las acciones posesorias han sido establecidas en el Código como
una forma de proteger en forma expedita la posesión. Además para evita
que se use la fuerza como manera de recuperar la posesión. En efecto, desde
el derecho romano y a través de toda la legislación universal se reconoce que
las acciones posesorias están dirigidas a mantener una situación de hecho y
para ello, puesto que la sociedad exige conservar el orden, pone
jurídicas para sustituir la voluntad, a veces violenta, de los particulares. Si
esta sustitución se entregaría una justicia directa a los particulares y con ello
se retrogradaría a la justicia de los pueblos primitivos.
En resumen, las acciones posesorias encuentran su razón de ser en la paz
social. Es por ello que el artículo 551 del Código de Procedimiento Civil hace
girar los elementos de la querella de amparo en torno de la posesión tranquila
y de la turbación o molestia de ella. También en nuestro Código
prueba evidente de lo dicho cuando el artículo 922 au
a c c i o n e s p o s e s o r i a s
16
16
Sobre los fundamentos de las acciones posesorias: Corte Suprema, Rev. 62, página 459 y tomo 64, sec. 1ª,
página 109.
243
Desde el punto de vista del derecho procesal los juicios posesorios por su
naturaleza son sumarios. La tramitación de estos juicios se regla por el Título
IV del Libro III del citado cuerpo legal. En su artículo 545 hace sinónimos los
términos “interdictos” y “juicios posesorios”. Se llaman interdictos porque en
su origen resolvían – y resuelven – una situación en forma interina. Se verá
que la sentencia en estos juicios deja a salvo el derecho de ejercer acciones
ordinarias: no producen cosa juzgada substancial. P
“interdicto” viene del latín “interdicere”, que significa prohibir, porque todas
estas acciones prohíben algo.
2 3 6 R. e q u i s i t o s y s i t u a c i o n e s c o m u n e s a l a s a
En realidad nos vamos a referir a dos acciones posesorias: la de amparo y la
de restitución. La de despojo violento tiene caracteres prop
oportunidad señalaré.
Seguiremos el orden que propone don Alfredo Barros Errázuriz ( página
195 de su citado texto)-
P r i m e r r e q u i s i tToi:t u l a r e s d e l a a c c i ó n p o s e s¿oQr ui ai é. n e s t i t u l a r d e
estas acciones? O, ¿ a quién competen estas acciones?
245
C u a r tLo a. a c c i ó n p o s e s o r i a d e b e i n t e r p o n e r s e e n
Que es lo mismo que decir que la acción no debe haber prescrito.
Conforme al artículo 920 el plazo de posesión exigido para interponer la
acción posesoria es de un año. Luego, el plazo de prescripción es de un año,
porque, pasado el año, el otro, o sea el que entró en la posesió
pre te nde re cl am ar, t e ndrá a s u vez un año de poses i ón y, por cons i gui e
derecho a interponer la respectiva acción posesoria.
En el caso de la querella de amparo el plazo de un año se cuenta desde
que se ha producido la molestia o embarazo en la posesión.
En todo caso, si la posesión del usurpador es violenta o clandestina, el
plazo de un año se contará desde que haya cesado la violencia o desaparecido
la clandestinidad, conforme al artículo 920. Debe recordarse que cesada la
clandestinidad la posesión pasa a ser considerada útil. Lo mismo pa
menos, sucede cuando ha cesado la violencia.
El plazo de prescripción de estas acciones no se suspende a favor de l
incapaces ni a favor de las personas enumeradas en el artículo 2509. Est
porque el artículo 920 es de carácter especial y prima por sobre las
generales. Además, la misma conclusión se extrae del artículo 2524.
E f e c t o s d e l a s e n t e n c
Dijimos que la sentencia dictada en los juicios posesorios produce efecto de
cosa juzgada formal, esto es, deja a las partes el derecho a entablar una nueva
acción ordinaria. Como dice el artículo 563 del Código de Proc
Civil: “…….. queda siempre a salvo a los que resulten
ejercicio de la acción ordinaria que corresponda….” Pero e
s e n t e n c i a d i c t a d a e n j u i c i o d e r e s t a b l e c i
“restablecidas las cosas, y asegurado el resarcimient
intentarse por una u otra parte las acciones posesorias que corres
como reza el inciso 2º del artículo 928. Esto es, la sentencia no
juzgada ni siquiera en relación con las otras acciones posesorias. Acudiendo
al citado artículo la Corte de Apelaciones de Santiago rechazó la excepción
de cosa juzgada opuesta por el demandado en un juicio posesorio de amparo,
s eg ún s e l e e e n s en t e nc i a de R e vi s t a d e D er e c ho y J u r i s p r ud en c i a , t o m
sección 2ª, página 33.
.
2 4 .5 P a r a l e l o e n t r e l a s a c c i o n e s d e a m p a r o , d e
restablecimiento.
a. En las de amparo y restitución hay que probar posesión;
restablecimiento solo hay que probar la mera tenencia.
b.- En las dos primeras el titular requiere ser un poseedor út
restablecimiento puede ser interpuesta por un poseedor vicioso.
c.- En cuanto a la prescripción, la de amparo y
prescriben en un año; en seis meses la de restablecimiento. Esto es conforme
a los artículos 920 y 928.
d.- En las querellas de amparo y en las de restitución se puede volv
plantear el asunto discutido en un juicio ordinario según el artículo 563 de
Código de Procedimiento Civil; en la de restablecimiento cabe
posibilidad de entablar una querella de restitución o de amparo, conforme lo
dispone el artículo 564 del recién citado Código.
2 4 8 . P r e s c r i p c i ó n d e l a
El artículo 950 dispone que el derecho al daño sufrido prescribe en un año
Las acciones destinadas a precaver un daño no prescriben “mien
justo motivo de temerlo”.
Las dirigidas contra una obra nueva prescriben en un año, como se ha
dicho. Pero si pasa el año y no se ejerce la querella, los d
querellados serán amparados en el juicio posesorio y
querellante podrá solamente perseguir su derecho por la vía ord
agrega el inciso final del artículo 950: “Pero ni aun esta acción tendrá lugar,
cuando, según las reglas dadas para las servidumbres,
derecho”.
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