Un número creciente de reportes de casos de mielitis aguda transversa se ha presentado asociada a
pacientes con COVID-19. Una revisión sistemática evaluó veinte casos reportados de 14 países diferentes, encontrando que los síntomas de mielitis se presentaban con una media de 10.3 días desde el inicio de los síntomas respiratorios de la enfermedad. En los casos en los que se realizó PCR de líquido cefalorraquídeo, los resultados fueron negativos. Al analizar el líquido cefalorraquídeo se encontraron células inflamatorias en el 77.8% de los casos evaluados. Después de un seguimiento de varias semanas, el 90% de los individuos se habían recuperado parcial o totalmente(REF). Por otro lado un paciente de 32 años acudió a la sala de emergencias con un historial de fiebre elevada y síntomas similares a los de la gripe, acompañados de una súbita pérdida de la fuerza muscular en miembros inferiores y al orinar. Los resultados de laboratorio mostraron una cuenta blanca normal, elevación del Dimero D y la proteína C reactiva. La prueba PCR para COVID-19 fue positiva. Al realizar una MRI se reveló una hiperintensidad difusa que abarcaba predominantemente la materia gris de la médula cervical, dorsal y lumbar. También se presentó una moderada inflamación de la médula cervical (REF). Otro paciente de 60 años que fue inicialmente hospitalizado por COVID-19 pero sin síntomas neurológicos fue dado de alta, y 3 días después desarrolló debilidad progresiva de los miembros inferiores, e incapacidad para orinar. Al examen clínico se reveló hipoestesia por debajo de th9 y una parálisis espástica moderada con signo de Babinski positivo bilateralmente. El MRI medular reveló una hiperintensidad en T2 del cordón torácico sugestiva de mielitis aguda. Se ha asumido que la etiología está intrínsecamente relacionada a una respuesta inmunológica aberrante. Otros estudios han sugerido una infección directa del sistema nervioso central por el virus (REF)