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Álvaro Iglesias

Fecha: mayo 17, 2018

La formación teológica y su importancia

“La letra mata más el espíritu vivifica 1 Cor.3:6 RV60”, es

quizás uno de los textos bíblicos que más acuña la iglesia

evangélica para excusarse en no estudiar y formarse

responsablemente. Aunque es evidente que se han tenido

avances significativos en esta materia entre los que se puede

mencionar, por ejemplo: el auge de la oferta educativa a nivel

teológico en distintos países de habla hispana a nivel

universitario, además, estas universidades han ido ganando

terreno en calidad y prestigio. En parte se debe a que en los

últimos cuarenta o cincuenta años ha habido más sensibilidad en

la necesidad de formarse teológicamente. Se observa un gran

número de ministros interesados en dotarse de herramientas

para una correcta interpretación bíblica, además de que

organizaciones y denominaciones se han comprometido en

impulsar iniciativas de formación en Biblia, institutos bíblicos,

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programas de formación en iglesias como seminarios,

conversatorios y programas de discipulado. De esta

manera logrando mostrar una iglesia con mayor

preparación en los contextos eclesiales y sociales. Es por

esto que la formación teológica sigue siendo una

necesidad preponderante en el contexto eclesial y por

supuesto en su contexto inmediato y es vital continuar en

la concientización de sus beneficios. Este texto pretende

mostrar algunos problemas que persisten pese a los

avances, también se mirará lo importante que es seguir

avanzando en estos procesos de formación teológica y

como esa formación repercute en los contextos

inmediatos, dando relevancia a que una buena teología

nos lleva a impactar considerablemente los contextos en

los que está inmersa la iglesia.

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Es notorio que se ha progresado en la formación

teológica, no obstante, se evidencian algunos problemas

de consideración aún. el siguiente ejemplo ilustra esa

realidad, el ejemplo dice que en una reciente encuesta a

hispanos sobre el dogma trinitario1, dicha encuesta

buscaba saber si había una clara comprensión de esta

doctrina central, en ella participaron cerca de doce mil

personas, los resultados son poco alentadores y dicientes.

Solo el 9,57% contesto bien y solo el 4% reconoce tener

mala comprensión del dogma trinitario, que paradójico.

Esto evidencia falencias significativas en un grado no

menor y peor aún cuando no se reconoce por parte de

algunos que no hay compresión de dogmas esenciales.

Además, También es una realidad cruda el analfabetismo

bíblico todavía, que provoca una mala utilización de la

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José Espinosa, Encuesta: cristianos hispanohablantes, faltos de formación teológica, protestante
digital.com,URLhttp://protestantedigital.com/magacin/40689/Encuesta_muestra_la_escasez_de_formacion
_teologica_en_el_cristianismo_hispanohablante_actual,último acceso 11 de marzo 2018.
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Biblia en su exegesis, además, la desidia persistente entre

un gran numero de creyentes por la lectura y el estudio

serio de asuntos importantes de la fe mediante la vaga

idea que el “espíritu” nos guía. De esta manera cobra

sentido darle mayor valor y significado a la importancia

que tiene formarse teológicamente y las herramientas

que puede aportarle a la iglesia, sin obviar también la

necesidad de no detenerse en estos propósitos que tanto bien le

hacen a la iglesia.

Si se entiende o se dimensiona esta importancia y de las

herramientas que puede proporcionar dicha formación para la

buena argumentación de la fe, el poder del evangelio

seguramente tendrá mayor relevancia e impacto. No solo en el

contexto eclesial sino en el contexto social que circunda a la

iglesia. Una iglesia que valora la formación teológica tendrá una

alta capacidad de meditar y hacer reflexiones acerca de las

realidades que la rodean y hará una aplicación de esa teología de

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manera pertinente permeando e influyendo considerablemente

el contexto. Tal conciencia generará un alto impacto dentro de la

comunidad eclesial, en su vida practica y por supuesto en la

relación con el prójimo. Es que el asunto de id y haced discípulos

no se debe trivializar, es enorme la responsabilidad y misión que

le atañe a la iglesia y eso se hace mostrando una fe a través de

argumentos contundentes que se complementan con una vida de

rectitud. La formación teológica nos da herramientas para dar a conocer el

evangelio y su indiscutible poder, y es ese poder quedará evidenciado obviamente partiendo

desde la casa, en la relación con los vecinos y finalmente floreciendo en la iglesia.

Entonces, logrando sensibilizar a la iglesia de la formación teológica y como esta

repercutiría significativamente en los contextos, sin dudas, se estará logrando de manera

notable evidenciar el poder trasformador del evangelio que tanto bien le pueden causar a la

sociedad.

Sí se dimensiona entonces, como la formación teológica permearía el contexto

eclesial, primeramente, de esta manera, la iglesia estará en capacidad de aplicar una

teología de manera pertinente a las duras realidades que acompañan el contexto en este caso

en el barrio o comunidad. Una teología contextual y de alto impacto dará a conocer la

iglesia como una iglesia pensante y obviamente como una alternativa de confianza que da

respuestas a las necesidades urgentes de este tiempo. Se marcaría un camino de esperanza,

que ofrece soluciones concretas a situaciones concretas, conocer a cabalidad la palabra le

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permitirá a la iglesia proclamar un evangelio coherente y de alto impacto en las

comunidades. De esta manera es que cobra vida la teología, en la praxis. Una iglesia

involucrada en ser agente de trasformación, que, de respuestas inmediatas a las realidades

del contexto, seguramente cambiará el rumbo de muchas vidas y por supuesto sus

realidades.

Si no se es conscientes y no percibimos el papel que juega la formación teológica en

la misión de iglesia pensante y propositiva, que agudiza sus sentidos desde adentro hacia

afuera, se seguirá observando la iglesia como los típicos religiosos con la “versículitis”

imperante, en vez de una teología más sistemática y argumental. Bien lo decía C.S Lewis

“esto no querrá que no tengas ideas de Dios, sino que tendrás muchas equivocadas”

entonces, es solo dar el paso, reconocer que hace falta y que se necesita dotar de un

conocimiento más preciso en asuntos esenciales de nuestra fe, de esta manera, conjugando

teología con vida se logrará penetrar los contextos de manera revolucionaria, mostrando a

Cristo y su gracia.
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Bibliografía

Espinosa, José. Encuesta: cristianos hispanohablantes, faltos de formación teológica,

protestantedigital.com.URLhttp://protestantedigital.com/magacin/40689/

Encuesta_muestra_la_escasez_de_formacion_teologica_en_el_cristianismo_hispan

ohablante_actual,último acceso 11 de mayo 2019.