Escuela de Artes Visuales Martin A.

Malharro - 2019

Campo de la Práctica I
Trabajo Práctico N°1

Curso: 1° B - Profesorado en Artes Visuales

Docentes: Caironi, Graciela; Cambre, Patricia

Alumnas: Canti, Carla; D´Achille, Luana; Salvini, Ornella.

Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro - 2019

1- Expliquen con sus palabras qué es lo que consideramos una experiencia

social teniendo en cuenta:
● · ​Las diferencias entre los tipos de experiencias que plantean los
pensadores mencionados en el texto y cómo esto se vinculas con la
idea de experiencia educativa.
● las ideas del texto de Ciudad educadora en relacion a las culturas, la
ciudad (como museo, como objeto pedagógico, como entorno
educativo), las manifestaciones culturales (y entre ellas, el arte y las
diferentes formas de concebirlo))

Consideramos experiencia social a una vivencia espontánea que tenemos (no

hacemos), a través de la cual adquirimos conocimientos nuevos. La experiencia
puede ser programada o no pero lo que vaya a suceder en ella y lo que
aprenderemos de esta vivencia no será planeado, será subjetivo, individual y
diferente en cada una que tengamos. Gracias a ésta conoceremos y aprenderemos
los distintos contextos sociales que nos rodean, además de que no solo vamos a
adquirir saberes, sino también se tratará de vivir y formarse con la experiencia,
crecer con lo que nos brindará y generar contenidos para después transmitirlos, por
lo tanto, la experiencia será una experiencia educadora. Podemos ayudarnos con
diferentes herramientas para hacer más rica la vivencia, como por ejemplo la
comunicación, la observación, etc.
La ciudad nos brinda a cada instante experiencias sociales y educativas generadas
para la construcción del sujeto ciudadano. Las experiencias son subjetivas y
diferentes para todos los que las viven, por lo que la ciudad será interpretada por
cada uno de nosotros formándose así un espacio de múltiples interpretaciones.
En ella encontramos espacios, como los museos, que constituyen un reservorio de
elementos culturales, históricos e identitarios que los convierten en espacios de gran
valor pedagógico.
Estos nos exhiben muestras en donde el todo es objetivo pero el recorrido y el
armado de ella no, tiene una intencionalidad con el fin de transformar a cada
persona que la visite. Cada sujeto tendrá una experiencia distinta ante la muestra y
una interpretación única.
Pero ya no concebimos al ​museo solamente como un espacio particular sino que
podemos repensar su concepto. La misma ciudad es un elemento de lectura
interpretativa, que hace referencia constantemente a las distintas manifestaciones
culturales y expone a los diversos sectores sociales. La convergencia de estas
representaciones forman el sentido general de la ciudad. Siempre está inmersa en
un sistema cultural que se expone de forma constante, y su proyección se genera
desde la interpretación del mismo hombre, por ejemplo, las calles. La valoración de
estas puede darse por el uso funcional ( nomenclatura vial dada por un orden

1 
Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro - 2019

numérico) o bien pueden ser mencionadas con nombres que hagan referencia a un
reconocimiento histórico (próceres, fechas, lugares, etc )

Retomando esta necesidad de revisar el uso didáctico de la ciudad, aparece el

concepto ciudad como ​objeto pedagógico​. Lo que no significa que esté ligada a
ser un objeto de conocimiento escolar sino que eso mismo puede ser parte de la
construcción de dicho concepto. Para esto se piensan proyectos que incluyan
diferentes formas de concebirla y aspectos para tener en cuenta a la hora de
estudiarla. Lo primero es tomarla como un espacio contextual de la vida de los
sujetos (niños), como es múltiple, ofrece gran cantidad de estímulos y muchas
variables de análisis, así como diversas formas de abordarla y vivirla, donde se
pueden generar recortes de los aspectos o elementos que se interesa enfocar o
estudiar. Una estrategia es abordar a lo largo del año un mismo elementos, aspecto
o lugar desde diferentes perspectivas o con distintos propósitos, lo cual ayuda a la
construcción de un conocimiento más rico y complejo.

Como mencionamos, la ciudad es considerada un ​entorno educativo. ​Cada uno de

los elementos que la constituyen es elemento documental de las manifestaciones
culturales. Existen lecturas que toman la misma como un documento constante y
nos lleva a plantearnos futuros aspectos a estudiar. La podemos abordar desde su
cotidianidad, desde una vista “natural” (relacionada con las distribuciones espaciales
y el desarrollo social) y desde un punto estrictamente social.

La ciudad es un espacio pluricultural que posee diferentes lenguajes y

manifestaciones (las cuales los sujetos pueden leerlas e interpretarlas). Lo que
llamamos “creatividad”, es decir, la capacidad de tomar diferentes elementos y con
ellos modificar el contexto, es un reflejo de las formas de interpretar el mundo que
tienen los distintos sujetos que conforman la ciudad, lo que genera que ésta sea
pluricultural como mencionamos al principio, y además sea un espacio de creación y
comunicación constante de los ciudadanos, ya que en las manifestaciones
culturales de la ciudad que crean una conexión y un lenguaje social SIEMPRE
intervienen al menos dos sujetos (un creador y un consumidor).

La ​manifestación artística es creada por un sujeto que plantea su interpretación,

atravesando a otros (consumidores) que de ella realizarán su propia visión del
mundo y a su vez esto genera un espacio pluricultural y una comunicación social
constante, por lo que el hecho creativo y de consumo van de la mano, entonces, el
arte es concebido como una forma de co-participación social. Esta interconexión se
dará si el consumidor cuenta con herramientas sociales para que tenga lugar la
interrelación de las interpretaciones.

2 
Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro - 2019

Otro eje importantes es poder tener acceso a esos bienes culturales y que se
promueva el movimiento de diversidad cultural, esto quiere decir que todos puedan
acceder y apropiarse de los bienes (hecho que refuerza la identidad de las
sociedad) y no que solo un sector social pueda hacerlo, ya que la interpretación
quedaría habilitada y limitada a un grupo específico.

La ciudad, incluso desde el sistema educativo, nos permite vivir experiencias

mostrándonos diferentes áreas artísticas de las cuales se manifiestan en distintas
producciones, que generan diversas interpretaciones, relaciones interculturales y
espacios de relación sociocultural, que si bien no garantiza la apropiación de los
bienes culturales, nos dará acceso a ellos.

Cualquier manifestación artística no nos habla sólo de un trabajo y aprendizajes de

arte, nos permite conocer más sobre el contexto histórico-social que se manifiesta
en la ciudad, que devolverá a los sujetos y estos realizaran sus interpretaciones​.

2) Reflexionar sobre la inclusión de las categorías presentes en cada dimensión y

vincular las definiciones con las preguntas orientadas a cada dimensión.

Para poder ingresar a un espacio, es necesario conocerlo. Esto permite entender, a grandes
rasgos, cómo se relacionan los sujetos dentro y fuera de este. Conocer un lugar con sus
costumbres, su organización, sus tecnologías, sus relaciones y demás, da un indicio de qué
manera proceder ante la tarea a realizar.
En la docencia resulta fundamental tener conocimientos de las características sociales y
culturales del espacio donde se desenvolverá como profesional, para generar un mejor
vínculo y conexión con quienes serán sus alumnos.
A este acercamiento se lo conoce como aproximación sociocultural y existen ciertas
herramientas para desarrollarla.

Una de ellas es realizar preguntas específicas que puedan ser respondidas por los mismos
miembros del espacio o quienes interactúan con el. Estas pueden organizarse de acuerdo a
tres dimensiones: cultural, comunicacional y educativa. En cada una se plantea lo que se
quiere saber o conocer y se ordenan mediante categorías. A su vez esta se complementa
con otras herramientas o recursos para lograr un fin específico.

Dentro de la dimensión cultural, encontramos la categoría i​dentidades​. La identidad es

aquel conjunto de rasgos y características que distinguen a una persona o un lugar y que lo
vuelven distinto del resto, es fundamental para conocer el espacio y para ello realizamos
preguntas sobre cómo es, qué lo caracteriza, qué historia cuentan de este, entre otras. En
esta categoría se ubica también la consideración del espacio del cual se abordan tres
aspectos, el espacio diseñado, el espacio recorrido y el espacio representado.
También es interesante conocer las ​prácticas o quehaceres que se desarrollan
cotidianamente en el espacio, no es lo mismo enfrentarnos a un establecimiento educativo

3 
Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro - 2019

que tiene un comedor que a uno que no, ya que cada uno tendrá distintas formas de
organizarse. Las ideologías, se abarcan en la categoría “​representaciones​” y con sus
respectivas preguntas podremos conocer qué piensa la comunidad acerca de la educación,
la escuela, el país, sus gobernantes, etc; lo cual está ligado con las relaciones de poder​,
donde sabremos quienes tienen mayor peso en la toma de decisiones, la forma de
convencimiento, entre otras. El poder implica una relación de fuerzas pero no
necesariamente es violento, este no se posee, pero se ejerce a través de la enseñanza y
regímenes de “verdad”.

Por otro lado tenemos la dimensión comunicacional donde averiguamos aspectos de la

comunicación entre los individuos,. Por ejemplo, en la categoría interacciones, encontramos
cuestiones relacionadas a la dimensión experiencial de la comunicación y la interacción de
los individuos en un espacio físico, a diferencia de “medios y tecnologías” donde se
estudian aquellas que no requieren de medios físicos o una comunicación directa.
Hablamos de medios y tecnologías con un doble sentido, por un lado, la indagación sobre
cuáles se utilizan, el por qué y cómo; y por otro, cómo estos repercuten en el ámbito cultural
del espacio y de los sujetos.
En el “sentido del espacio” u “organización” se establece una relación con el entendimiento
de la comunicación como práctica de producción de sentidos y significaciones. y en
“lenguajes” averiguamos de qué modo se lleva a cabo la comunicación, ya que este siempre
es una mediación del orden de la cultura.
Por último mencionamos a la dimensión educativa, la cual posee tres categorías.
La primera, saberes, hace referencia a la forma no convencional de adquirir conocimientos
en un espacio, ya que el saber no se encuentra producido y distribuido sólo en las
instituciones específicamente vinculadas a él.
La segunda es espacios. Hoy en la sociedad emergen diversos y múltiples espacios
potencialmente formativos y esta categoría se encarga de indagar sobre estos.
En tercer lugar, la categoría relaciones de educación, investiga los tipos de relaciones entre
educadores y educandos, tanto las dialógicas, las pragmatistas, las narrativas, las
espontaneistas, las adoctrinadoras, las basistas, entre otras.

Ejes sobre los espacios no formales

En principio cuando hablamos de espacios no formales, nos referimos, por ejemplo, a los
planes de alfabetización que se dan fuera de la institución escolar, como también pueden
ser los cursos de capacitación laboral, entre otros. Estos espacios tratan de resolver
situaciones que el sistema formal de educación no consigue solucionar o que quedan por
fuera del mismo.
En cuanto a su relación con lo educativo, haciendo referencia al texto de “herramientas para
la aproximación sociocultural”, es preciso tener en claro que los saberes y su producción no
están centrados únicamente en las instituciones educativas del sistema formal, sino que se
pueden encontrar en muchos aspectos de la sociedad como pueden ser los medios masivos
de comunicación, talleres o cursos de diferentes disciplinas, organizaciones, etc. Ya que a
medida que la sociedad va cambiando, también cambian y se generan nuevos saberes y
lugares de donde provienen.

4 
Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro - 2019

Los saberes que se pueden adquirir de estos espacios muchas veces van por fuera de las
materias específicas de un diseño curricular, estos aprendizajes tienen más relación con lo
cotidiano, con valores, ideas, prácticas.
Estos espacios son de suma importancia, por un lado porque abarcan enseñanzas que es
difícil adquirir en espacios escolares formales y que son una herramienta para la vida
cotidiana. Por ejemplo, como ya mencionamos, lo valores, saber cómo manejarse en
diferentes situaciones como puede ser un trabajo, entre muchas cosas. Y por otra parte
porque permite integrar a esas partes de la sociedad que por diferentes circunstancias
quedan marginadas, en este caso como los planes de alfabetización o talleres de
capacitación (como por ejemplo de refrigeración, de recepción, etc.) a partir de estos
espacios esas personas tienen una nueva oportunidad para tener una mejor calidad de vida.

Los espacios no formales, como dice el texto “el sentido de la experiencia social” son los
que dan la posibilidad de la transformación cultural y social desde un lugar más abarcativo
que solo con las instituciones escolares.

A partir de todo lo anterior, en la clase elaboren en cada grupo algunos criterios o

ideas generales que orienten sus miradas en las salidas de campo

En esta etapa de la carrera las salidas de campo consistirán en recorrer espacios

educativos, con el fin de observar e investigar la diversidad cultural que existe en la ciudad
como hablamos anteriormente, viviremos diferentes experiencias que luego cada uno
realizara sus propias interpretaciones. Para esto nos ayudaremos con herramientas como la
observación, el registro, etc.
Orientaremos nuestra mirada principalmente hacia el eje cultural, observando las
características de los espacios y la forma en la que los individuos se relacionan con este.
Consideramos que conocer acerca de la identidad de una comunidad nos acercará de una
forma distinta, nos dará las pautas parciales de cómo manejarnos en el espacio y permitirá
establecer vínculos más fácilmente con quienes lo concurren, lo que enriquecerá la
experiencia.

5