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OPOSITANDO PARA INTERECONOMIA.

La sentencia de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal


Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) que anula los acuerdos
adoptados por la Mancomunidad de Municipios de Sierra de Gata en la
sesión extraordinaria de pleno de 3 de noviembre de 2008 del 9 de
octubre de 2009 es la mayor reprimenda que se puede hacer a un
dirigente político y a sus cómplices. Es inusual encontrar en un fallo
judicial tal cúmulo de reproches por las numerosas irregularidades
cometidas.

En ese pleno se expulsó al Ayuntamiento de Moraleja por no abonar una


deuda de 146.819,37 euros correspondiente al servicio de recogida de
basuras, algo reconocido tanto por el deudor como por la demandante.
Pero la Mancomunidad de Sierra de Gata elaboró precipitadamente un
informe carente de rigor en el que solicitaba una indemnización de
1.454.050,59 euros en concepto de daños y perjuicios. tomó posesión
como concejal, ilegalmente una persona que no tenia derecho a ello, no
habiendo convocado legalmente a todos los concejales, sin entrar en
apreciaciones sobre la autenticidad de las firmas y fechas de las
supuestas renuncias, ni en la desaparición de un acta de concejal

La sentencia señala diversos atropellos que, por mucho que se excuse el


PP presidente, Alfonso Beltrán, tenían una elevada intencionalidad
política: 1) El informe Nombre del concejal que tomaría posesión no
figuraba en el orden del día de la sesión plenaria; 2) Fue elaborado
después de convocar la sesión; 3) No fue puesto a disposición del grupo
socialista del Ayuntamiento de Moraleja; 4) No se informó al
ayuntamiento al pleno de la demisión del concejal González Cava, ni de
las supuestas renuncias posteriores ni de las consecuencias que
acarrearía su expulsión; 5) Se incorporó a la decisión del pleno de forma
"sorpresiva" y 6) No fue tratado previamente en la NINGUNA Comisión
Informativa Especial de Hacienda.

Un fallo judicial como éste, en un contexto político decente, levantaría


los cimientos del ente comarcal PARTIDO POPULAR, más afanado en
tapar turbios asuntos que en gestionar con rigor democrático los bienes
de los administrados. La Mancomunidad de Sierra de Gata El gobierno
de la derecha vulneró los derechos fundamentales de información y
participación y una norma esencial para el funcionamiento del pleno,
como es que la documentación a debatir sea conocida con anterioridad
por los asistentes a un pleno. Alfonso Beltrán El PP permitió, con su
actitud, un ataque a las normas elementales de transparencia
informativa y a la propia "racionalidad del funcionamiento del sistema
democrático y el Estado de derecho”. Y lo dice textualmente una
sentencia, pues considera “falsa y engañosa la motivación de la
urgencia extrema para la celebración del Pleno, y con el único objetivo
de hurtar el derecho de asistencia a los concejales” del PSOE.

La Mancomunidad de Sierra de Gata EL PP se saltó a la torera el


Reglamento de Organización, funcionamiento y Régimen Jurídico de las
entidades locales y violó el artículo 14 de sus propios estatutos. Y por si
fuera poco, echó por tierra un derecho constitucional al no poner en
manos de su denunciado la información necesaria para defenderse.

En una sentencia de 12 7 folios, el TSJEx sentencia, “La Alcaldesa


carecía de potestad administrativa para convocar el Pleno de urgencia,
de ahí que deba declararse, no solo disconforme a Derecho, sino
vulnerador del derecho de participación política señalado, en tanto que
los concejales no tenían tiempo para examinar y estudiar los temas
sujetos al orden del día para emitir una opinión fundada sobre los temas
a tratar, no encontrándose tampoco motivada la razón de urgencia en la
toma de posesión del nuevo concejal”. apenas dedica unas líneas a
recordar que el revolcón judicial sufrido por la Mancomunidad de Sierra
de Gata no libera a Moraleja de hacer frente a sus pagos. Sin embargo,
Alfonso Beltrán sólo ha entendido el mensaje que libera su conciencia.
Convencido de que el temido varapalo está motivado por un "defecto de
forma", sostiene que la sentencia le otorga la razón, algo que sólo
podemos entender como un insulto a la inteligencia. Lo dijo un director
de cine francés: "La tontería es infinitamente más fascinante que la
inteligencia. La inteligencia tiene sus limites, la tontería no".

QUE PENA QUE EL PERIODISTA IN-DEPENDIENTE SOLO TENGA TIEMPO DE


LEER LAS SENTENCIAS QUE LE INTERESAN, y se olvide de las
chiquicientas en las que la derecha vulnera los derechos fundamentales.

Pedro C.

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